¡Claro! El sistema porta-hepático se define como un conducto que se divide formando varios conductos, hasta que estos conductos se vuelven a unir para desarrollar las mismas funciones del primero. Su objetivo es transportar los macronutrientes absorbidos en el intestino hacia el hígado, donde serán convertidos en productos aprovechables por el resto de los órganos y sistemas. La Circulación Porta Hepático conduce la sangre venosa desde los órganos digestivos y el bazo hacia el hígado, mediante la vena porta-hepática. Las venas mesentérica superior y la vena esplénica se unen para formar la vena porta hepática en la cara posterior del cuello del páncreas. Además, según Netter, hay 3 venas pequeñas que también drenan en la vena porta como la vena gástrica derecha, la izquierda y la vena pancreatoduodenal.
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