Alrededor de nosotros el restaurante se callaba, ya casi desierto. Habíamos hablado mucho, y largamente, pero ahora la conversación, que se había v...
Alrededor de nosotros el restaurante se callaba, ya casi desierto. Habíamos hablado mucho, y largamente, pero ahora la conversación, que se había venido enfriando, yacía inerte entre nosotros. Intenté reanimarla con un recuerdo que de repente me surgió, con respecto a él. Erguí la cabeza y lo miré sonriendo, doblemente calmo, quieto. Fue esto: me dijeron que en sus tiempos ud. fue anarquista.
Compartir