Descarga la aplicación para disfrutar aún más
Vista previa del material en texto
Acemoglu: El mundo que nuestros nietos heredarán: la revolución de derechos y más Tendencias: los padres tendrán hijos en sus 40 o 50 años. El ultimo siglo ha sido el siglo de los derechos políticos. La revolución de los derechos se entrelaza con diversas tendencias como el desarrollo de tecnología, sustantivo y desigual crecimiento económico, un deceso general en las guerras, y una explosión en la población que pone nuevas presiones en nuestros recursos y el medio ambiente. El ensayo desarrolla las 10 más importantes tendencias, comenzando por la revolución de derechos. Posteriormente discute como la revolución de derechos ha ayudado a dar forma a las otras nueve tendencias. 1. La revolución de derechos: Para la mayoría de los ciudadanos, la participación democrática en la política se ha vuelto algo natural, una tendencia impresionante cuando se compara con los años 1900-‐1950. Las masas han demostrado tener algo inteligente que decir en la política. Pero las decisiones masivas pueden ser tomadas por personas que no pueden gobernarse a si mismos, personas sin educación: José Ortega y Gasset plantean la alarma de la expansión de la participación política. A pesar de la creencia que las elites son las optimas para llevar las riendas de la política, los derechos políticos para los menos educados y menos privilegiados han dominado, brindando políticas que redistribuyen los ingresos y haciendo servicios ampliamente disponibles, incluso a pesar de la resistencia de las elites. Hace un siglo los derechos políticos, sexuales, femeninos, etc., no existían. El camino a instituciones inclusivas ha sido muy complicado. En los últimos 100 años fuimos testigos del fascismo y el comunismo, e incluso algunas democracias implementaron políticas autoritarias. Militarismo agresivo y conflictos étnicos y nacionales siguen con nosotros: la revolución de derechos permanece incompleta. La mayoría de la población sigue viviendo bajo regímenes autoritarios. Aun así, la revolución de derechos ha penetrado tanto el mundo en que vivimos que incluso los regímenes autoritarios han moderado la represión de sus ciudadanos. La expansión de derechos civiles y políticos es grandiosa pues ha tenido un considerable impacto en la vida de millones, y por que todas las otras tendencias han tenido lugar por su ocurrencia. 2. El barrido de la tecnología La revolución industrial trajo consigo nuevas maquinas y mejoras tecnológicas en textiles, poder del vapor, transporte, metalurgia y comunicaciones. Tenemos acceso a tecnologías imposibles de imaginar para nuestros abuelos. Avances en tecnologías de información, internet, robótica, comunicación, así como nuevas drogas y tecnologías medicas, televisión, radio, etc. 3. Implacable crecimiento Nuestro siglo, junto con el crecimiento tecnológico, ha sido el siglo del crecimiento económico sostenido. El siglo XIX también fue un siglo de crecimiento, pero incomparable con los niveles del siglo siguiente y el actual. Somos 8 veces mas ricos, en promedio, que nuestros abuelos. 4. Crecimiento desigual Igualmente considerable es que el crecimiento económico no ha sido igual entre países. La brecha entre los países mas pobres y los ricos se ha ampliado mayormente. La diferencia entre el percentil 90 mas rico versus el percentil 10, ha pasado de 8 veces a 30 veces. Si se observan diferencias considerando la densidad poblacional, la estadística se matiza. 5. La transformación del salario y el trabajo. Los cambios tecnológicos también han transformado la naturaleza del trabajo. La agricultura decayó en la mayoría de las economías, mientras que la manufactura, también lo ha hecho, siendo reemplazada por el sector de servicios. Trabajos con habilidades manuales y rutinarios, han desaparecido, a consecuencia de la transformación del trabajo en las economías avanzadas. Un proceso complementario ha sido la globalización de la tecnología y producción, montaje, etc. Muchas tareas antes hechas en el país local, se hacen en economías donde el trabajo es más barato, como en China. Un impacto mayor de estas tendencias ha sido distribucional: a medida que la demanda por trabajadores con bajas y medianas habilidades ha disminuido, la distribución de ingresos en USA se ha hecho mas desigual. 6. La revolución de la salud Aunque las riquezas de las naciones se han vuelto desiguales, la foto cambia cuando se trata de la salud de las naciones. Ha habido un gran mejoramiento en la salud a lo largo de los últimos 100 años. Un aumento considerable de la expectativa de vida. Aunque el SIDA y el regreso de la tuberculosis han limitado las mejoras en la salud en África subsahariana, la difusión de las innovaciones en salud han significado que la mayoría de las naciones disfrutan de condiciones de salud no imaginadas a principios del Siglo XX. 7. Tecnología sin bordes Nuevas tecnologías de comunicación y cambios en políticas de intercambio han creado un mundo mas integrado. El intercambio en relación al PIB ya era alto en el Siglo XX, pero actualmente alcanza cerca de un 50% del producto interno bruto total. La posibilidad de externalizar tareas permite alas firmas un arbitraje mucho mas comprensivo de los bajos salarios a lo largo del mundo. A pesar de su impacto en la desigualdad del mundo, este proceso ha permitido un crecimiento mucho mas rápido en economías como China, que sacan partido de su abundante trabajo de bajo costo, sin tener que invertir en las mismas tecnologías y etapas institucionales que las economías avanzadas tuvieron que vivir durante el siglo XIX, y principios del siglo XX. 8. Siglo de guerra, siglo de paz El siglo XX empezó mal y empeoró en un tema muy importante: grandes guerras y la pérdida de millones de vidas inocentes. Los dos conflictos mas mortales se dieron durante la primera mitad del siglo XX. Aunque no totalmente exentos de guerra, los 60 años siguientes han sido los mas pacíficos de la historia humana. Considerando las muertes por cada 100000 habitantes, la proporción actual es prácticamente nula. La violencia dentro de los países, como los homicidios, asesinatos, etc., siguen, sin embargo, otra trayectoria. A pesar de lo anterior, mirado desde una perspectiva global, hay evidencia suficiente para pensar que estamos viendo una tendencia a un mundo menos violento en nuestras vidas actuales. 9. Contra la ilustración en la política Pocos habrían predicho la revolución de derechos, pero aquellos que lo hubiesen hecho, la hubiesen considerado la culminación de la difusión de las ideas universalistas de la ilustración. Sin embargo, estos últimos 100 años, hemos visto fuertes y normalmente violentos movimientos anti ilustración, jugando un rol protagónico en la política. La primera mitad del S. XX, estuvo dominada por el levantamiento de dos movimientos políticos antidemocráticos, el fascismo y el comunismo, mostrando niveles de violencia sin precedentes. Las ultimas cuatro décadas fueron testigo de otro movimiento anti-‐ilustración: el aumento en la prevalencia de la religión en la política. Cristianos fundamentalistas se han convertido en una renovada fuerza en la política estadounidense, durante el ultimo medio siglo, y el judaísmo ultra ortodoxo, juega un rol mas importante en la política de Israel y el Medio Este. Pero el ejemplo más dramático es el resurgimiento del Islam político en el Medio Este, el norte de África y el sur de Asia. Esto ha hecho que muchos avecinen un “choque de las civilizaciones”, visión fortalecida por las palabras de Bush, que declaraba que EEUU estaba luchando contra una “guerra del terror” que emanaba del medio este. 10. Explosión demográfica, recursos y medio ambiente. Hay mas de nosotros en el planeta hoy, que hace 100 años. La población mundial ha aumentado de 1.5 mil millones a 6.9 mil millones en 2010. La mayoría de dichos incrementos han sido en las partes menos prósperas del mundo. El creciente nivel de población y el ingreso per cápita, han aumentado la demanda de recursos del medio ambiente. Muchos eruditos han hecho publica su preocupación por que agotemos la habilidad del planeta de soportarnos. Los precios de los recursos se han ido incrementando sostenidamente, y el impacto ambiental está creciendo por nuestro notable uso de combustibles fósiles y el aumento de dióxido de carbono en la atmosfera. II. Un marco interpretativo: Estas tendencias no existen independientemente unas de otras. Entender como interactúan es un paso clave en cualquier intento por evaluar como continuarán. En el centro de la interpretación está que el cambio tecnológico es la raíz del crecimiento económico – pero que las instituciones políticas dan forma a la naturaleza, ritmo y difusión del cambio tecnológico. En este punto el autor difiere del consenso general de gran parte de las ciencias sociales, que mantienen un enlace causal que va de la tecnología a las instituciones. Globalmente, los países que han crecido mas rápido desde la IIGM, no son mas propensos a volverse mas democráticos que aquellos con bajo crecimiento, por ejemplo. Al contrario, el autor argumentará que el desarrollo institucional, causado por y causando la revolución de derechos, son los principales conductores del cambio tecnológico y económico que hemos experimentado en el ultimo siglo. El progreso tecnológico se expande en instituciones inclusivas: que proveen incentivos y oportunidades para la innovación y la actividad económica a una amplia sección transversal de la sociedad, velando por la propiedad privada de la innovadores, negocios y trabajadores. Instituciones económicas inclusivas están sustentadas por instituciones políticas inclusivas. En contraste directo con instituciones inclusivas, están las extractivas, caracterizadas por derechos de propiedad inseguros, coerción, falta de libertad y extracción de recursos a la mayoría, para beneficio de una pequeña elite, junto con falta de oportunidades y servicios públicos. Estas instituciones económicas son mantenidas gracias a instituciones políticas extractivas, concentrando el poder en las manos de los intereses de unos pocos, sin ninguna oposición o puesta a prueba. El poder político y económico de la elite no es lo único que asegura su persistencia: precisamente por que las instituciones extractivas enriquecen a unos pocos a costa de muchos,esos muchos alguna vez se revelarán. Hemos sido testigos de dicha situación en diferentes etapas de la historia. Es en esta línea en la que la primera tendencia, la revolución de los derechos, debe ser evaluada. Nuestra época es aquella donde el traspaso de instituciones extractivas a inclusivas tomó fuerza y velocidad. Los derechos políticos y civiles se instauran donde las instituciones inclusivas dominan, y ha habido una especie de emancipación de las personas, pasando de normas sociales autoritarias a inclusivas. Si las instituciones son impuestas por un orden jerárquico creado por instituciones extractivas, probablemente no duren mucho, razón por la cual una democracia que no respeta las libertades individuales nunca durará, y no todos los movimientos revolucionarios culminan en instituciones mas inclusivas. Que la segunda tendencia, el barrido de la tecnología, proviene de la revolución de derechos es el centro del marco interpretativo del autor. Las explosiones tecnológicas de las que hemos sido testigos, no habrían sido posibles bajo instituciones extractivas, por falta de incentivos, libertad, oportunidades y el terreno de juego. Además, bajo instituciones inclusivas se entrega la libertad necesaria para tomar riesgos en innovación y emprender negocios. Las cuatro tendencias siguientes –crecimiento sostenido, crecimiento desigual, transformación del trabajo y la revolución de la salud-‐, todas emanan, mas o menos directamente, de estos desarrollos tecnológicos, y otros aspectos clave de la revolución de derechos. El crecimiento económico seguido directamente del cambio tecnológico rompe en nuestra era. Las tendencias quinta y sexta, la transformación del trabajo y la revolución de la salud, también provienen de las mismas fuerzas. El trabajo cambio directamente por las formas de progreso tecnológico del último siglo. La revolución de la salud, también es una de los mas valiosos frutos de la revolución de derechos. El imperativo por mejor salud provino de naciones ricas y grupos internacionales como la OMS. Y gracias a la aceptación de la revolución de derechos, se acepto que las naciones mas ricas debían ayudar a las mas pobres. La séptima tendencia, la difusión de la tecnología sin bordes, es otra consecuencia de la revolución de derechos. Pero aunque las instituciones inclusivas son el motor principal de cambio tecnológico, el crecimiento aun es posible en instituciones extractivas. Todo lo demás constante, aquellos que dirijan las instituciones extractivas desearán que haya el mayor crecimiento posible pues, finalmente, ellos serán los beneficiarios de dicho crecimiento. Pero cuando se necesita de nuevas tecnologías, surge el problema, pues el poder de éstas puede desestabilizar el poder de las elites. 2 escenarios hacen posible crecimiento bajo i. extractivas: cuando la ventaja comparativa esta bien definida en un sector que puede ser controlado por la clase de elite. El segundo escenario es aquel donde los países con i. extractivas hacen un “catch-‐ up” y reciben transferencia de tecnología desde países mas avanzados. Pero el crecimiento bajo los dos escenarios anteriores es limitado. El crecimiento de China a lo largo de las últimas 3 décadas es un ejemplo de crecimiento producido por instituciones extractivas. El aumento de la tecnología sin limites ha significado que el ritmo de crecimiento bajo instituciones extractivas puede ser mas grande hoy que lo que fue en el S. XIX. El crecimiento en Alemania y Rusia a fines del S. XIX, involucraba cambios sociales, estructurales e institucionales, incluida una rápida urbanización. Pero en China simplemente se importaba tecnología para producir bienes al mercado mundial. En contraste, hoy, en lugar de tener que desarrollar una industria entera, un mercado emergente puede simplemente domesticar algunas tareas de la industria, como armado u operaciones. Encontramos aquí una paradoja de los cambios tecnológicos con origen en instituciones inclusivas: quizás fomenten la continuación de instituciones extractivas en el mundo. Las instituciones extractivas no necesitan durar para siempre. Tampoco las inclusivas. Están contantemente amenazadas por grupos que quieren expandir su poder político a expensas del resto. El aumento de la desigualdad en EEUU, puede ser un posible motor de revolución. Hay un grupo que se ha enriquecido y que puede usar su poder económico para ganar mas poder político, para defender, básicamente, su riqueza. En segundo lugar, se ha disminuido la clase media, quienes normalmente han ofrecido apoyo a instituciones inclusivas. Cuando se piensa sobre tecnología sin limites, entonces, debemos ser consientes de sus consecuencias potenciales e inesperadas, tanto en instituciones inclusivas como extractivas. Lo anterior también explica la octava tendencia: el decaimiento de la guerra y la violencia. Esto es consecuencia de la revolución de derechos, por múltiples razones. Primero, estas libertades y derechos están en constante conflicto con guerras y aventuras militares. En segundo lugar, muchas guerras tienen su origen en conflictos domésticos, los cuales son mas propensos a suceder en instituciones extractivas, hoy debilitadas por la revoluciónde derechos. En tercer lugar, la revolución de derechos provee el fundamento filosófico de los cambios en instituciones internacionales, y las normas que han sido protagonistas de una resistencia a la guerra. Pero hay mas: se necesita abandonar estructuras de poder basadas en jerarquías de familias, y comunidades. El autor cree que es esta transformación, la responsable del descenso de las guerras y la violencia. El cambio en la estructura familiar donde la familia y amigos dirigen a los jóvenes es uno de los motivos de la violencia. También es importante destacar, que la transformación del trabajo reduciendo la importancia de la agricultura y otras tareas manuales, ha reducido las estructuras sociales y normas que soportan instituciones extractivas, por la forma rígida de jerarquía en las que estaban estructuradas. ¿Qué explica entonces las guerras del S. XX? El autor responde “no sé”. Pero el marco estructurado aquí da algunas pistas. La revolución de derechos pudo sembrar las semillas de una reacción política fuerte, oponiéndose a las sociedades bajo regímenes extractivos. Esto combinado con conflictos distribucionales intensos, pudo haber creado la oportunidad para que estos movimientos anti-‐ilustración tomaran el mando. La perspectiva se hace mas palpable cuando consideramos que el comunismo, fascismo, etc., provienen del conflicto sobre la distribución de recursos y el ingreso en la sociedad. Finalmente, la décima tendencia – la explosión de la población y el agotamiento del medio ambiente-‐ es otra paradoja del desarrollo mundial de instituciones inclusivas y cambios tecnológicos. Estas innovaciones han permitido crecimiento mucho mas rápido en producción en el mundo. Las mejores condiciones de salud han permitido que aquellos que hubiesen muerto al nacer, ahora sobrevivan y muchas sociedades se han trasladado a una explosión demográfica, lo que no suscita un problema directo para nuestro planeta, mientras los cambios económicos y sociales estén a la altura de la situación, pero junto con el aumento del ingreso per cápita, el aumento de la población ha estado ligado a un incremento masivo en las emisiones de gases fósiles, lo que amenaza la estabilidad de nuestro clima. III. El siglo por delante Estamos armados con una lista de desarrollos que han definido nuestra época, y entender como se entrelazan con la revolución de derechos nos permite discutir: La revolución de derechos expandirá nuestro crecimiento económico? Cuales son las posibles limitaciones de cada uno? Pueden nuestras instituciones chocar con las presiones que el crecimiento generará en nuestros recursos? Estos desarrollos son las cosas que darán forma al planeta en el que nuestros nietos vivirán. 1.-‐ ¿Continuará la revolución de derechos? Podemos ser precavidamente optimistas, que la revolución de derechos continuará expandiéndose, incluso si lo hace lenta e imperfectamente. Nuestra prosperidad actual no es garantía de su mantenimiento y expansión. Hay muchos limitantes a dicha situación. En primer lugar, las instituciones democráticas e inclusivas están bajo ataque en EEUU. Estas amenazas provienen de dos cuartos distintos: la polarización de los EEUU en términos de ingreso, y el ataque directo en las libertades de las minorías emanando de la tan nombrada “guerra del terror”. Adicionalmente, el crecimiento chino, crea la ilusión de una ruta de acceso alternativo y autoritario a los ricos, y el autoritarismo ilustrado puede servir mejor a las personas. Éstas amenazas, están a favor de que la revolución de derechos continúe, aunque a menor ritmo. Y por razones muy diferentes a aquellas desarrolladas en la teoría de la modernización La visión optimista plantea que la revolución de derechos podrá superar estos obstáculos, y se basa en diferentes factores. Primero, las instituciones inclusivas, tienen sustento en si mismas y han superado desafíos comparables anteriormente. En segundo lugar, la difusión de internet y los medios sociales, han añadido otro pilar de soporte para las instituciones inclusivas. En tercer lugar, la revolución de derechos se ha perpetuado pues ha debilitado las comunidades autoritarias y las estructuras familiares, haciendo muy complicado volver a un mundo en el que los derechos de una minoría pueden ser usurpados. En cuarto lugar, la transformación del trabajo también ha transformado las estructuras sociales autoritarias. Finalmente, el crecimiento de China es transitorio, a no ser que cambie sus instituciones políticas a inclusivas, la economía agotara su vapor. Si la revolución de derechos no es reversada, su velocidad disminuirá por que estamos rodeados de instituciones extractivas muy poderosas. Aquellos países con instituciones extractivas, deberán crear instituciones de estado, y luego prevenir que esas instituciones capturen intereses de elites. 2. El futuro de la tecnología Hay poca evidencia que estamos quedándonos sin innovaciones. Cada innovación presenta nuevos desafíos y abre camino a nuevas innovaciones. A pesar de eso, hemos satisfecho tantas necesidades que hay poco espacio para que nuevos productos puedan mejorar nuestras vidas. Otro factor de nuestra tecnología es que somos capaces dedirigir cambios tecnológicos a sectores, productor y factores productivos que pueden beneficiarse de sus bondades. La mayor amenaza a nuestra vitalidad tecnológica no viene de la muerte de nuevas ideas, sino de alejarnos de instituciones inclusivas. 3. ¿Se hará mas lento el crecimiento? El crecimiento económico no es una ley de la naturaleza. Puede hacerse mas lento o detenerse. Pero hay muchas razones para pensar que no estamos cerca del crecimiento potencial. Primero, tenemos la habilidad de producir innovaciones tecnológicas, y segundo, muchas economías en desarrollo pueden hacer el “catch-‐ up” que hizo China. Esto no sugiere que no hay peligros a los que estar atentos. Países desarrollados, tienen problemas fiscales y económicos. También hay un limite de cuánto del crecimiento mundial podrán obtener las naciones en desarrollo, lo que hace a estos países dependientes del crecimiento de las economías saludables, crecimiento que se muestra agotado y a la baja. Nuestros nietos probablemente escriban sobre como el crecimiento en el siglo XXI fue desacelerándose. 4. ¿Qué tan desigual el crecimiento será? Sería utópico pensar que el crecimiento creará convergencia entre los países pobres y ricos, pero hay motivos para pensar que el crecimiento no será tan desigual como fue en el S. XX. Primero, los derechos e instituciones inclusivas continúan expandiéndose. Segundo, la globalización y la producción tecnológica probablemente siga. En tercer lugar, se espera que los países dominados por instituciones extractivas cambien, permitiendo mas efectiva explotación de recursos naturales, atrayendo inversiones extranjeras. 5. La transformación del trabajo continuará El cambio estructural del trabajo continuara en muchas naciones. La tecnología y las maquinas harán mucho mas trabajo y rutina que la gente hoy. El termino de trabajos de mediana habilidad se hará mayor. La transformación de trabajos asociada a cambios tecnológicos ha empeorado la desigualdad en EEUU, y los avances futuros en robótica acentuarán dicha situación. Esto sugiere que el crecimiento de la desigualdad se debe a una desaceleración en la oferta de trabajadores altamente educados, pues los cambios institucionales y políticos han favorecido a los ciudadanos mas ricos. Se espera que los salarios de servicios como salud, preparación de comida, y cuidado personal, aumenten, a pesar de lo anterior, pues la demanda por estos servicios aumentará y por que, mirando las tendencias, los trabajadores invertirán en habilidades útiles relacionadas a dichas ocupaciones, para así aumentar sus ingresos. 6. La revolución de la salud continuará Nuestros nietos serán personas mucho mas sanas que nosotros. La entrega de salud publica será mas lenta que lo que quisiéramos, pero la convergencia global hacia una mejor salud continuará. Algunos prevén que esto traerá un gran y positivo impacto en el crecimiento económico, pero esto no se ha visto reflejado en los últimos 50 años. La revolución de la salud seguirá siendo un motor para mejorar las vidas de millones, pero no por si mismo para mejorar el crecimiento económico. La mayor amenaza se encuentran en el estado de la revolución de derechos, pues la salud no puede entregarse sin las correspondientes instituciones. 7. El futuro de la globalización. Aunque alimentado por cambios tecnológicos en comunicación y transporte, la globalización también ha avanzado debido a las decisiones políticas de las naciones. Una interrupción contemporánea de la globalización, sigue siento posible, aunque menos probable por la gran integración del mundo actual. Es mas posible pensar que la globalización será vista en mas áreas de la vida, por ejemplo los diagnósticos médicos a distancia. Aunque el ritmo de la globalización probablemente disminuya por dos razones. Primero, los bajos salarios en países con abundante trabajo como China, india e indonesia, han empezado a cambiar como resultado de un proceso de globalización explotando esas diferencias. Segundo, si el crecimiento chino se estanca, la división actual del trabajo empezara a vacilar. 8. ¿El siglo de la paz? Hay razones para pensar que el siglo XXI será el siglo de la paz. En el lado positivo, sabemos que las guerras han declinado en los últimos 60 años. A medida que se difunde la revolución de derechos, la esperanza es que habrá menos guerras resultantes de luchas políticas. Nuestra perspectiva para la paz dependerá no solo de las aspiraciones de las instituciones, sino también de sus capacidades: la centralización del poder reducirá varios tipos de violencia y asesinato en Somalia, Congo, Afganistán, etc. 9. ¿De anti-‐ilustración a ilustración? Algunos movimientos anti ilustración son soy simples memorias. Pero la renovación de la religión como fuerza política es una realidad muy clara. ¿Hará esto declinar la tolerancia y reemplazarla con extremismo? No hay respuesta fácil, pero el mejor acercamiento, por ahora, es que el incremento del rol político del Islam es resultado de la intersección de cuatro tendencias. Primero, la reacción de individuales criados en familias tradicionales y comunidades autoritarias a los cambios a su alrededor. Segundo, el Islamha sido usado por sus gobernantes, como instrumento para controlar sus poblaciones y sofocar el descontento. Tercero, los esfuerzos por usar una religión como mecanismo de control social vienen de aquellos que han quedado rezagados por instituciones extractivas en el proceso económico. El cuarto y ultimo factor es un sentimiento difundido en muchos países que el Este ha sido imperialista y ha jugado un papel decisivo en el subdesarrollo de la región. El autor cree que la revolución de derechos probablemente se expanda a esta región del mundo también, por la dinámica política y social que la religión esta teniendo. La gente posee la sensación política que el cambio está llegando a la región, incluso si hay muchas falsas alarmas y conflicto en las próximas décadas. Se espera que muchos de los regímenes de la región sean representativos, reemplazando dictadores y monarquías. Hay dos razones optimistas para pensar que esos nuevos regímenes no serán extractivos: el uso de la religión como control social disminuirá, a consecuencia del derroque de regímenes extractivos. Segundo y mas importante: los movimientos religiosos populares están trayendo nuevos derechos políticos y civiles a una significante fracción de la población. Al enfocarse en el rol de la religión en la política, no se trata que no habrá otras posibles fuerzas anti-‐ilustración. 10. Población, recursos y el medio ambiente en el siglo XXI: Las naciones unidas prevén la población mundial bajo escenarios de alta, baja y media fertilidad, llegando a dos conclusiones importantes. Primero, la población mundial continuará creciendo por un tiempo. Segundo, es posible que durante el próximo siglo alcancemos una meseta. La pregunta vital hace relación con el uso de combustibles fósiles: a menos que introduzcamos impuestos apropiados al carbón y otras regulaciones, el daño que cada uno de nosotros crea en el medio ambiente no es valorado, no tiene precio, y colectivamente continuaremos emitiendo gases fósiles aunque esto dañe irreparablemente nuestro planeta. En el lado de la tecnología, necesitamos avances en energías alternativas, para así encontrar maneras de bajo uso de carbón de producir y entregar energía. La única manera de asegurar que nuestro planeta se mantenga habitable es una transición a energías mas limpias. Aunque el escenario es optimista, hay un peligro mayor: la perspectiva de que la geo-‐ingeniería y avances tecnológicos en tecnologías limpias funcionarán como pretexto para no tomar acción en reducir emisiones de carbón y cambiar a fuentes de energía mas limpias: ¿por qué hacer costosos sacrificios hoy, si la tecnología milagrosamente resolverá nuestros problemas en el futuro? Si pensamos así. Nuestras creencias en el dominio tecnológico generarán mas daño que bien. En el lado político, necesitamos un acuerdo internacional para que la transición a fuentes de energías alternativas tome lugar de una manera concertada, incluso si en el corto plazo esto significa mayores costos. Hay un lado positivo: la revolución de derechos hará que la gente este mas consiente de aquellos que sufren por el cambio climático : podemos ver esto en el mundo desarrollado donde muchas personas empiezan a hacer sacrificios para reducir sus emisiones de carbono. Si esta tendencia sigue, los políticos tendrán que alinear sus propuestas en sintonía. Al final, así como con las otras tendencias que han hecho y harán de nuestro mundo un mejor lugar, nuestra esperanza por un futuro mas saludable debe ser fijada desde la perspectiva del fortalecimiento y continuidad de la revolución de los derechos.
Compartir