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UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO 
 
 
FACULTAD DE QUÍMICA 
 
DESARROLLO DE UNA METODOLOGÍA GENERAL DE MANEJO Y 
ALMACENAMIENTO DE PIEZAS ARQUEOLÓGICAS PARA SU 
ANÁLISIS CROMATOGRÁFICO. APLICACIÓN AL ESTUDIO DE 
RESINAS TRITERPÉNICAS. 
 
TESIS 
 
QUE PARA OBTENER EL TÍTULO DE 
QUÍMICA 
 
 
PRESENTA 
BRENDA ALFONSINA VÁZQUEZ MOLOTLA 
 
 CDMX AÑO 2017 
 
 
 
UNAM – Dirección General de Bibliotecas 
Tesis Digitales 
Restricciones de uso 
 
DERECHOS RESERVADOS © 
PROHIBIDA SU REPRODUCCIÓN TOTAL O PARCIAL 
 
Todo el material contenido en esta tesis esta protegido por la Ley Federal 
del Derecho de Autor (LFDA) de los Estados Unidos Mexicanos (México). 
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objeto de protección de los derechos de autor, será exclusivamente para 
fines educativos e informativos y deberá citar la fuente donde la obtuvo 
mencionando el autor o autores. Cualquier uso distinto como el lucro, 
reproducción, edición o modificación, será perseguido y sancionado por el 
respectivo titular de los Derechos de Autor. 
 
 
 
 
JURADO ASIGNADO: 
 
PRESIDENTE: Profesor: Lauro Bucio Galindo 
VOCAL: Profesor: Emely Baché Ortega 
SECRETARIO: Profesor: Paola Lucero Gómez 
1er. SUPLENTE: Profesor: Aldo Arellano Hernández 
2° SUPLENTE: Profesor: Elizabeth Reyes López 
 
SITIO DONDE SE DESARROLLÓ EL TEMA: 
LABORATORIO DE QUÍMICA ANALÍTICA APLICADA AL PATRIMONIO, INSTITUTO DE 
QUÍMICA. 
LABORATORIO NACIONAL DE CIENCIAS PARA LA INVESTIGACIÓN Y CONSERVACIÓN 
DEL PATRIMONIO CULTURAL (LANCIC). 
 
 
 
___________________________ 
DRA. PAOLA LUCERO GÓMEZ 
ASESOR DEL TEMA 
 
 
 
__________________________ 
BRENDA ALFONSINA VÁZQUEZ MOLOTLA 
SUSTENTA 
 
AGRADECIMIENTOS 
 
Al Programa UNAM-DGAPA-PAPIIT (Proyecto IA203417), por la beca de titulación 
otorgada, así como al Laboratorio Nacional de Ciencias para la Investigación y 
Conservación del Patrimonio Cultural (LANCIC), bajo el auspicio de CONACYT 
(Proyectos LN 232619, LN 260779, LN 27161 y LN279740). 
 
 
Avant propos 
 
Presentaciones en póster 
Vázquez, A. & Lucero, P. (2016) A GC-MS preliminar study of the 
botanical origin of commercial resins “copals” from Mexico. Simposio 
anual del Instituto de Química. 
Vázquez, A., Zetina, S. & Lucero, P. (2016) Caracterización de muestras 
de pintura contemporánea por Py-GC-MS. Aplicación al estudio de una 
obra de Rafael Coronel. Laboratorio Nacional de Ciencias para la 
Investigación y Conservación del Patrimonio Cultural. Reunión anual. 
 
Ponencias 
Lucero, P., Piña, C., Vázquez, A., & Nieto, S. (24 de octubre de 2016). 
Análisis Químico de residuos arqueológicos de cacao: Desarrollo de una 
metodología de manejo, pretratamiento y análisis de muestras usando 
HPLC-QTOF. Reunión Temática sobre Residuos Químicos en Objetos y 
Contextos Patrimoniales. Mérida, Yucatán. 
Lucero, P., Piña, C., Vázquez, A., & Domínguez, M. (6 de septiembre de 
2017). Estudio GC-MS de los residuos orgánicos extraídos de un 
incensario Maya en Champotón. RED de Ciencias Aplicadas a la 
Investigación y Conservación del Patrimonio Cultural. Tercera Reunión 
General. Ciudad de México. 
 
Artículo aceptado (Anexo 3) 
Lucero-Gómez P., Piña-Torres, C., Nieto, S., Vázquez, A., Bucio, L., 
Belio, I., Vega, R., Mathe, C., Vieillescazes C., Analytical strategy based 
on Fourier transformed infrared spectroscopy, principal component 
analysis and linear discriminant analysis to suggest the botanical origin 
of resins from Bursera. Application to archaeological Aztec Samples. 
Journal of Cultural Heritage. 
 
 
Contenido 
 
ABREVIATURAS I 
LISTA DE FIGURAS II 
LISTA DE TABLAS VI 
1. INTRODUCCIÓN 1 
2. ANTECEDENTES 4 
2.1 Resinas 5 
2.1.1 ¿Qué es una resina? 5 
2.1.2 Botánica y distribución geográfica en México 5 
2.1.3 Química y biomarcadores 9 
2.1.4 Triterpenos 11 
2.1.5 Actividad biológica de los triterpenos 12 
2.1.6 Trabajos previos en composición química de copales mexicanos 13 
2.1.7 Características físicas y obtención de copales 14 
2.1.8 Usos históricos y contemporáneos del copal en México 15 
2.2 Selección de Resinas para el estudio 22 
2.2.1 Resinas de origen botánico certificado 22 
2.2.2 Resinas de sitios arqueológicos 24 
2.2.3 Resinas de origen comercial 25 
2.2.4 Piezas arqueológicas y su lugar de procedencia 27 
2.3 Cromatografía de gases acoplada a espectrometría de masas (CGEM) 33 
 
2.3.1 ¿Qué es la cromatografía de gases acoplada a espectrometría de 
masas? 33 
2.3.2 Derivatización 39 
2.3.3 La CGEM y la conservación del patrimonio 40 
3. JUSTIFICACIÓN 42 
4. OBJETIVOS 45 
4.1 Objetivo general 46 
4.2 Objetivos Particulares 47 
5. MATERIALES Y METODOLOGÍA EXPERIMENTAL 48 
5.1 Método de colecta, manejo y almacenamiento de resinas modernas 49 
5.2 Método de colecta, manejo y almacenamiento de resinas arqueológicas 50 
5.3 Descripción de Muestras 52 
5.3.1 Resinas de origen certificado 52 
5.3.2 Resinas provenientes de sitios arqueológicos 53 
5.3.3 Resinas comerciales 54 
5.3.4 Piezas Arqueológicas 63 
5.4 Equipo, Reactivos y Materiales 65 
5.5 Estrategia analítica 66 
5.6 Procedimiento de pretratamiento de Muestra 67 
5.7 Análisis Cromatográfico 67 
6. DISCUSIÓN DE RESULTADOS 70 
6.1 Resinas certificadas 73 
6.1.1 B. bipinnata 73 
6.1.2 B. stenophylla 74 
 
6.1.3 B. simaruba 75 
6.2 Resinas de sitios arqueológicos 76 
6.2.1 Resinas de Tulum 76 
6.2.2 Resinas de Edzná 79 
6.2.3 Resinas de El Meco 81 
6.3 Resinas comerciales 85 
6.3.1 Grupo 1 85 
6.3.2 Grupo 2 93 
6.3.3 Grupo 3 98 
6.4 Estudio de Piezas Arqueológicas 101 
6.4.1 Colección Frissell: Bulto ceremonial (265-15) 101 
6.4.2 Muestra M1 del Templo Mayor 102 
7. CONCLUSIONES 103 
8. BIBLIOGRAFÍA 109 
9. ANEXOS 115 
9.1 ANEXO 1. Formatos de piezas arqueológicas 116 
9.2 ANEXO 2. Estándares 118 
9.3 ANEXO 3. Artículo Aceptado 120 
 
I 
 
ABREVIATURAS 
 
CGEM Cromatografía de gases acoplada a espectrometría de masas 
d.C. Después de Cristo 
uma Unidad de masa atómica 
IE Ionización por Impacto Electrónico 
EM Espectrometría de masas 
m/z Relación masa/carga 
TMS Trimetilsilados 
Py Piridina 
HMDS Hexametildisilano 
TMSCl Tetrametilclorosilano 
mL mililitros 
mm milimetros 
m micrómetros 
mg miligramos 
°C Grados centígrados 
L microlitros 
eV Electrón-volt 
min minutos 
 
 
II 
 
LISTA DE FIGURAS 
 
Figura 1. Arriba árbol de Bursera bipinnata y abajo de Bursera sp. del sitio de 
Edzná, Campeche. 7 
Figura 2. Mapa de la diversidad conocida de Bursera registrado por Estados de 
la República Mexicana (Rzedowski, 2005). 8 
Figura 3. Esqueletos de los principales triterpenos identificados en resinas de 
Bursera. 11 
Figura 4. Fotografías de diversos copales mexicanos: a) blanco, b) rojo, c) 
mirra, d) lágrima, e) piedra, f) amarillo. 14 
Figura 5. Máscara de Malinaltepec (Clásico temprano, 200-650 d.C.). Museo 
Nacional de Antropología e Historia. 16 
Figura 6. Mural representando una guerra; Bonampak, Chiapas. 17 
Figura 7. Mural de "La Creación" (1922) de Diego Rivera, ubicado en el 
Antiguo Colegio de San Ildefonso, Ciudad de México (CDMX). 18 
Figura 8. a) Representación de Quetzalcóatl portando un bulto ceremonial con 
copal. b) Imagen de un bulto ceremonial con copal de la Matrícula de 
tributos (1522-1530). 19 
Figura 9. Fotografía de mujer con copal durante "alumbrada" en San Andrés 
Mixquic, Día de Muertos. Autor: Jordi Cueto-Felgueroso Arocha. 21 
Figura 10. Ofrenda 102 del Templo Mayor. Entre los objetos encontrados 
estaban dos figurillas de copal (Gallardo, 2011). 23 
Figura 11. Sitios arqueológicos de: a) Tulum (QR), b) Edzná (Camp), c) El 
Meco (QR). 24 
Figura 12. Venta de copal en el Mercado de Sonora, CDMX. 26 
Figura 13. Mapa de la República Mexicana indicando todos los estados de 
donde provienen las muestras de resinas comerciales. 26 
Figura 14. Vitrinade la colección en el Museo Frissell de Arte Zapoteco. 
Fotografía de John Paddock. 27 
Figura 15. Zona arqueológica de Mitla, Oaxaca. 28 
Figura 16. Maqueta Tenochtitlán, Museo Nacional de Antropología e Historia.
 29 
Figura 17. Maqueta de etapas constructivas del Templo Mayor. Museo del 
Templo Mayor. 30 
 
III 
 
Figura 18. Monolito de Tlatecuhtli (Diosa de la Tierra; dimensiones 
aproximadas 4m x 3.5m). Descubierta en 2006. 32 
Figura 19. Diagrama de bloques de un cromatógrafo de gases típico. 
Principios de Análisis Instrumental. (Skoog, Holler, & Crouch, 2008). 34 
Figura 20. Ejemplo de fragmentaciones para IE negativo y positivo de una 
molécula neutra (Dettmer & Engewald, 2014). 35 
Figura 21. Esquemas de un cuadrupolo en un EM. a)Arreglo de electrodos, 
b)Arreglo dentro de EM (March & Todd, 2005). 36 
Figura 22. Espectro de masas por IE para 3-clorbifenilo. Nos deja observar 
características específicas de moléculas que permiten facilitar su 
identificación (Dettmer & Engewald, 2014). 37 
Figura 23. Derivatización. 39 
Figura 24. Fotografía de Bulto Ceremonial, Colección del Museo Frissell de 
Arte Zapoteco en Mitla, Oaxaca. 63 
Figura 25. Fotografía de M1 de la Ofrenda 140. 64 
Figura 26. Cromatogramas completos de una muestra de copal del mercado 
de Sonora. a) Gradiente 1. b) Gradiente 2. La duración del tiempo de 
análisis es diferente en ambos casos. El primer gradiente permite detectar 
compuestos con punto de ebullición menor al de los triterpenos, el segundo 
gradiente mejora la resolución de compuestos en zona triterpénica. 69 
Figura 27. Cromatograma parcial de B. bipinnata. Asignación de compuestos: 
BS1, BS2, BS3 y BS4 son marcadores moleculares específicos para la 
especie; (I) 3-epi--amirina, (II) 3-epi--amirina, (III) 3-epi-lupeol, (IV) -
amirona, (VII) -amirina, (VIII) lupenona y (IX) lupeol. 73 
Figura 28. Cromatograma parcial de B. stenophylla. Asignación de 
compuestos: BS1, BS2, BS3 y BS4 son marcadores moleculares específicos 
para la especie. (I) 3-epi--amirina, (II) 3-epi--amirina, (III) 3-epi-lupeol, 
(VII) -amirina, (VIII) lupenona y (IX) lupeol. 74 
Figura 29. Cromatograma parcial de B. simaruba. Asignación de compuestos: 
GS1, GS2, S1 y S3 son marcadores característicos para la especie, (I) 3-
epi--amirina, (II) 3-epi--amirina, (III) 3-epi-lupeol, (IV) -amirona, (V) 
-amirina, (VI) -amirona, (VII) -amirina, (VIII) lupenona y (IX) lupeol.
 75 
Figura 30. Cromatogramas parciales para muestras de Tulum: a) TULB1, b) 
TULB2, c) TULB3. Asignación de compuestos: (I) 3-epi--amirina, (II) 3-
epi--amirina, (III) 3-epi-lupeol, (IV) -amirona, (VII) -amirina y (VIII) 
lupenona. BS1 y BS3 son marcadores para especies B. bipinnata y B. 
stenophylla. 77 
 
IV 
 
Figura 31. Cromatograma parcial para TULB4. Asignación de compuestos: (I) 
3-epi--amirina, (II) 3-epi--amirina, (III) 3-epi-lupeol, (IV) -amirona, 
(VII) -amirina y (VIII) lupenona 78 
Figura 32. Cromatogramas parciales para Edzna: a) EDZNA1, b) EDZNA2. 
Asignación de compuestos: (I) 3-epi--amirina, (II) 3-epi--amirina, (III) 
3-epi-lupeol, (IV) -amirona, (VII) -amirina y (IX) lupeol. 80 
Figura 33. Cromatogramas parciales para muestras de El Meco. a) MECO2, b) 
MECO4. Asignación de compuestos: (I) 3-epi--amirina, (II) 3-epi--
amirina, (III) 3-epi-lupeol, (IV) -amirona, (VII) -amirina, (VIII) lupenona 
y (IX) lupeol. S2 y GS2 son marcadores característicos de las especies B. 
simaruba y B. grandifolia. 82 
Figura 34. Cromatogramas parciales para muestras de El Meco. a) MECO1, b) 
MECO3, c) MECO5. Asignación de compuestos: (I) 3-epi--amirina, (II) 3-
epi--amirina, (III) 3-epi-lupeol, (IV) -amirona, (VI) -amirona, (VII) -
amirina, (VIII) lupenona y (IX) lupeol. 83 
Figura 35. Mapa de los estados de la República de donde provienen copales 
del Grupo 1 (Colima, CDMX, Puebla, Oaxaca, Guerrero, Campeche, 
Yucatán, Quintana Roo). 86 
Figura 36. Cromatogramas parciales de Grupo 1: a) copal amarillo (AZCA2), 
b) copal blanco (CHOB1), c) mirra (AZCM1). 88 
Figura 37. Cromatogramas parciales de Grupo 1: a) copal piedra (IZUP1), b) 
copal rojo (SONR1). Asignación de compuestos para figuras 24 y 25: BS1, 
BS2, BS3 y BS4: marcadores moleculares característicos para bipinnata y 
stenophylla; (I) 3-epi--amirina, (II) 3-epi--amirina, (III) 3-epi-lupeol, 
(IV) -amirona, (VI) -amirona, (VII) -amirina, (VIII) lupenona y (IX) 
lupeol (Lucero-Gómez, et al., 2014). 89 
Figura 38. Mapa de los estados de la República de donde provienen copales 
del Grupo 2 (Edo. de México, CDMX, Campeche, Oaxaca). 93 
Figura 39. Cromatograma parcial sobre zona de triterpenos de MIXA3. 
Señales c, d, f: esqueleto de ursano. Señal b: esqueleto de oleanano. 
Señal e: compuesto no identificado. 94 
Figura 40. Cromatogramas parciales: a) MIXA3, b) viena5, c) Gummi 
olibanum (KREMER). 96 
Figura 41. a) Glifo representando copalli dibujado en la Matrícula de Tributos 
(1522-1530). b) Fotografía de copal del Grupo 3, adquirido en el mercado 
de Xilitla, San Luis Potosí. 98 
 
 
V 
 
Figura 42. Cromatogramas de Xilitla. a) Cromatograma completo. b) 
Cromatograma parcial con zoom en zona de triterpenos. Asignación de los 
compuestos: (II) 3-epi--amirina, (III) 3-epi-lupeol, (V) -amirina, (VII) -
amirina, (U) esqueleto de ursano, (O) esqueleto de oleanano y (L) 
esqueleto de lupano 99 
Figura 43. Cromatograma parcial de Bulto Ceremonial (Colección Frissell). 
Asignación de los compuestos: (L): compuestos con esqueleto de lupano. 
(O): compuestos con esqueleto de oleanano. (U): compuestos con 
esqueleto de ursano. (VII): -amirina. 101 
Figura 44. Cromatograma parcial de M1 (Proyecto Templo Mayor). Asignación 
de compuestos: (I) 3-epi--amirina, (II) 3-epi--amirina, (III) 3-epi-
lupeol, (IV) -amirona, (VII) -amirina y (VIII) lupenona. BS1 y BS2 
son marcadores para las especies bipinnata y stenophylla (Lucero-Gómez, 
2014). 102 
Figura 45. Estructura de -amirina. 118 
Figura 46. Espectro de masas para -amirina. 118 
Figura 47. Estructura de lupeol. 119 
Figura 48. Espectro de masas para lupeol. 119 
 
 
 
VI 
 
LISTA DE TABLAS 
 
Tabla 1. Clasificación de terpenos. 9 
Tabla 2. Ventajas y desventajas de la técnica analítica de CGEM. 38 
Tabla 3. Descripción de muestras de resinas certificadas botánicamente. 52 
Tabla 4. Descripción de muestras de zonas arqueológicas. 53 
Tabla 5. Descripción de copales comerciales. (A): Mercado anual, (P): 
Mercado permanente 54 
Tabla 6. Cantidad de muestra utilizada para análisis en CGEM. 66 
Tabla 7. Gradiente 1: Estudio Global. 68 
Tabla 8. Gradiente 2: Zoom en zona de triterpenos. 68 
Tabla 9. Fragmentación de moléculas triterpénicas presentes en diversas 
especies de Bursera. 71 
Tabla 10. Tiempos de retención para moléculas en gradientes desarrollados.
 72 
Tabla 11. Composición molecular triterpénica de copales pertenecientes al 
Grupo 1. BS1, BS2, BS3 Y BS4 son marcadores para la especie B. 
bipinnata y B. stenophylla; (I) 3-epi--amirina, (II) 3-epi--amirina, (III) 
3-epi-lupeol, (IV) -amirona, (V) -amirina, (VI) -amirona, (VII) -
amirina, (VIII) lupenona y (IX) lupeol 91 
Tabla 12. Composición molecular triterpénica de copales pertenecientes a 
Grupo 2. 97 
Tabla 13. Tabla de resinas de sitios arqueológicos, resinas comerciales y 
piezas arqueológicas con su origen botánico. 107 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
1. INTRODUCCIÓN 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
CAPÍTULO 1 INTRODUCCIÓN 
 
2 
 
Desde la prehistoria el hombre ha utilizado diversos materiales naturales 
orgánicos para elaborar objetos funcionales u obras de arte. Las 
excavaciones arqueológicas descubren siempre una amplia variedad de 
materiales y objetos de patrimonio. En estos objetos se observan 
compuestos orgánicos empleados como adhesivos, como residuos 
adheridos a vasijas o como material carbonizado. También de manera 
imperceptibleal ojo humano se pueden encontrar residuos orgánicos 
atrapados en matrices cerámicas. En pinturas, los materiales orgánicos 
se han utilizado como ligantes de pigmentos, ingredientes de barnices o 
como consolidantes. 
El objeto de estudio del presente proyecto lo constituyen las resinas 
triterpénicas naturales. Estas resinas son mezclas liposolubles de 
compuestos terpenoides que pueden ser volátiles o no volátiles; los 
terpenoides de interés para el área del patrimonio cultural son los di- y 
triterpenos, estos últimos son marcadores moleculares caracterizados 
por tener esqueletos estructurales típicos tales como oleananos, ursanos 
y lupanos. 
El estudio de las resinas triterpénicas naturales o “copales” vendidos en 
mercados tradicionales permanentes o anuales ha sido poco abordado 
hasta nuestros días en México, y nada se sabe de las fuentes botánicas 
de los mismos ni de su composición molecular. Esta información es 
fundamental para los conservadores que utilizan estos copales como 
materia prima en intervenciones en obras de arte y piezas 
arqueológicas, y también para conservadores e historiadores de arte, 
pues artistas de la talla de Diego Rivera, David A. Siqueiros y el Dr. Atl 
usaron estos materiales en sus trabajos. Conocer a detalle la 
composición molecular de las obras de arte y de las piezas arqueológicas 
permite a los especialistas crear planes de conservación adecuados e 
individuales para cada objeto. 
CAPÍTULO 1 INTRODUCCIÓN 
 
3 
 
En el presente trabajo se propuso, además, la creación de un repositorio 
de resinas que sirvan como referencia para investigaciones futuras. 
Estos materiales fueron comprados en mercados anuales y en mercados 
permanentes provenientes de 11 estados de la República Mexicana, para 
abarcar tanto como fuera posible la región de Mesoamérica. 
Se propuso también la creación de protocolos adecuados de muestreo, 
manejo y almacenamiento de muestras provenientes de piezas 
arqueológicas y obras de arte que se deseen analizar por cromatografía 
de gases acoplada a masas (CGEM). 
Luego se desarrollaron protocolos de análisis por medio de CGEM, 
incluyendo una estrategia de pretratamiento de muestra que implica el 
uso de agentes derivatizantes cuya función es convertir las moléculas 
triterpénicas en moléculas más volátiles y menos polares para posibilitar 
su análisis de resinas por la técnica mencionada arriba. 
Finalmente, con base en un estudio previo sobre el perfil molecular de 
resinas de Bursera mexicana de tres especies, se discriminó el origen 
botánico de las resinas comerciales arriba mencionadas. 
Una vez desarrollada una metodología eficiente para el análisis de estos 
materiales, se aplicó al estudio de algunas muestras provenientes de 
objetos arqueológicos. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
2. ANTECEDENTES 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
CAPÍTULO 2 ANTECEDENTES 
 
5 
 
2.1 RESINAS 
 
2.1.1 ¿Qué es una resina? 
 
La palabra en español “copal” se deriva del náhuatl copalli, que significa 
resina (Montúfar, 2007). Se ha definido a una resina como una mezcla 
liposoluble de compuestos terpenoides volátiles y no volátiles, así como 
compuestos fenólicos que usualmente son secretados en estructuras 
especializadas internas o externas de una planta, siendo de potencial 
importancia en las interacciones ecológicas que ésta tiene. Durante 
mucho tiempo diversas sustancias, tales como gomas, aceites, ceras 
entre otros, has sido confundidos con resinas. Mientras todas ellas están 
compuestas por polisacáridos, ácidos grasos, etc., una resina se 
compone de una mezcla de aceite esencial, fracción gomosa y una 
fracción di o triterpénica (Langenheim, 2003). 
Los componentes de las resinas se derivan de carbohidratos producidos 
durante la fotosíntesis; estos carbohidratos se simplifican en 
compuestos que son productos de piruvato que se transforman, 
mediante diversas rutas metabólicas, en compuestos fenólicos y 
terpenoides. 
 
2.1.2 Botánica y distribución geográfica en México 
 
La República Mexicana cuenta con una vegetación variada, gracias a los 
distintos climas presentes que favorecen al florecimiento de diversas 
especies a lo largo de toda su extensión territorial. 
CAPÍTULO 2 ANTECEDENTES 
 
6 
 
Se asume que, en el territorio mexicano, gran parte del copal proviene 
de especies de la familia Burseraceae. 
La familia Burseraceae, la cual incluye alrededor de 20 géneros y 600 
especies de plantas alrededor del mundo (De la Cruz-Cañizares, 2005), 
se puede encontrar en las regiones tropicales y templadas de la 
República Mexicana. Esta familia a su vez se puede clasificar en tres 
grandes géneros: Bursereae, Canarieae y Protieae (Langenheim, 2003). 
La expansión geográfica que la familia Burseraceae alcanza es amplia. El 
género Canarieae se localiza principalmente en los continentes de África 
y Asia, mientras que el género Protieae se encuentra en la parte tropical 
de América con algunos ejemplares documentados en Madagascar y en 
Malasia. Para el género Bursera, la extensión va desde el sureste de 
Estados Unidos hasta el territorio peruano, pero la mayor diversidad de 
especies se localiza en la zona del Pacífico de México (Rzedowski, 2005). 
Los Bursera son un miembro prominente y característico de la 
vegetación en México; hay desde arbustos pequeños hasta grandes 
árboles, pero de manera general son árboles de bajo o mediano tamaño, 
con troncos cuya corteza va desde colores como el amarillo, verde, rojo 
o hasta el morado. Las hojas son de colores brillantes y a menudo son 
de tonos diferentes a los del tronco. 
 
 
 
 
 
 
CAPÍTULO 2 ANTECEDENTES 
 
7 
 
 
 
Figura 1. Arriba árbol de Bursera bipinnata y abajo de Bursera sp. del sitio de Edzná, 
Campeche. 
CAPÍTULO 2 ANTECEDENTES 
 
8 
 
En la República Mexicana se tiene registrada la existencia de poco más 
de 80 especies de Bursera (Rzedowski, 2005), sin embargo, se calcula 
que la cifra puede rebasar las 100 especies. Debido a la dificultad que 
han presentado los árboles para su clasificación, la completa 
identificación de especies no ha sido posible. Hay estados, como 
Tlaxcala, en donde no se tiene registro alguno del género Bursera entre 
su flora, mientras hay otros, como Guerrero, que registra una vasta 
diversidad de Burseras, contando con 48 especies presentes en su 
territorio. 
 
 
Figura 2. Mapa de la diversidad conocida de Bursera registrado por Estados de la 
República Mexicana (Rzedowski, 2005). 
 
 
CAPÍTULO 2 ANTECEDENTES 
 
9 
 
2.1.3 Química y biomarcadores 
 
La composición química de una gran variedad de Burseras se encuentra 
dominada por la presencia de mono-, sesqui- y algunos triterpenos, 
todos pertenecientes a una clase de sustancias químicas llamadas 
terpenos; la proporción de los terpenos presentes varía dependiendo de 
la especie. 
Los compuestos terpenoides son biosintetizados a partir del acetato por 
una serie de reacciones para dar la unidad biológica característica de los 
terpenos: el isopreno (Carey, 2006). Aunque los terpenos presentan una 
enorme diversidad estructural y complejidad química, todos presentan 
un origen biosintético común que permite agruparlos en diversas 
categorías mediante el enlace de elementos estructurales de isopreno de 
cinco carbonos (Croteau R., 2000). 
Dependiendo de las unidades de 10 carbonos que tengan es como se 
clasificará al terpeno (Klein, 2012). 
 
Tabla 1. Clasificación de terpenos. 
CLASE No. DE ÁTOMOS DE 
CARBONO 
Monoterpeno 10 
Sesquiterpeno 15 
Diterpeno 20 
Triterpeno 30 
Tetraterpeno 40 
 
 
 
CAPÍTULO 2 ANTECEDENTES 
 
10 
 
Por lo general, la parte más estable de la composición de las resinas 
colectadas a partir de árboles de Bursera es la que está compuesta por 
moléculas con esqueletos triterpénicos, estos compuestos son 
metabolitos secundarios. 
Los metabolitossecundarios son compuestos que no son esenciales para 
la supervivencia de la planta; son utilizados principalmente como 
mecanismos de defensa contra depredadores, parásitos o enfermedades 
(Schulz & Baranska, 2007). La combinación de los mismos suele ser 
única para cada especie, pues su producción está estrictamente 
regulada por los genes del organismo. 
Dentro de un contexto arqueológico, los metabolitos secundarios son 
utilizados como biomarcadores arqueológicos. El concepto de 
biomarcador arqueológico, también conocido como “huella química”, 
consiste en relacionar estructuras de compuestos actuales con 
compuestos y mezclas que se sabe que fueron explotados en el pasado 
(Evershed, 2008). Así los compuestos naturales al depositarse en un 
ambiente determinado sufren cambios que son resultado de la 
diagénesis y maduración, es decir, pierden sus grupos funcionales, 
algunos conservan su esqueleto de carbono, lo que permite establecer 
un producto precursor al momento de ser estudiados. 
Identificar la composición molecular, y por ende la presencia de 
biomarcadores en un objeto de patrimonio es esencial para poder 
determinar qué tipo de sustancia orgánica estaba presente 
originalmente, esto permite entender el proceso de alteración que 
modificó la composición original del material (Colombini & Modugno, 
2009). 
 
CAPÍTULO 2 ANTECEDENTES 
 
11 
 
Una vez que se conocen los biomarcadores presentes en las piezas 
arqueológicas u objetos del patrimonio, es posible relacionarlos con: 
• Su origen botánico. 
• Modificaciones antropogénicas que son modificaciones o 
alteraciones inducidas intencionalmente por el hombre. 
• La degradación natural debida a factores ambientales y al paso del 
tiempo. 
 
 
2.1.4 Triterpenos 
 
Las resinas provenientes de la familia Burseraceae se caracterizan por 
tener triterpenos de esqueletos tetra o pentacíclicos. 
 
 
Figura 3. Esqueletos de los principales triterpenos identificados en resinas de Bursera. 
 
 
 
 
 
CAPÍTULO 2 ANTECEDENTES 
 
12 
 
2.1.5 Actividad biológica de los triterpenos 
 
Las resinas provenientes de la especie Bursera se componen de 
moléculas con esqueletos de tipo lupano, oleanano y ursano (Lucero-
Gómez, 2014). 
Estos compuestos triterpénicos presentan acciones terapéuticas. Los 
compuestos como -amirina, -amirina y 3-epi-lupeol se han encontrado 
en plantas medicinales de los géneros Rhizophora y Betula (Hernández-
Vázquez, et al., 2010). 
El compuesto -amirina tiene acción analgésica, antiinflamatoria, anti-
ulcerogénica, así como actividad antimicrobiana (Singh, 2002). Najaran 
(Nagarajan & Mohan, 2007) aisló -amirina a partir de las raíces de 
Decalepis hamiltonii, y le atribuyó propiedades como un estimulante del 
apetito, purificador de sangre y conservador de alimentos. 
Algunos derivados de -amirina tienen propiedades anti-hiperglucémicas 
y antiartríticas (Lavoie & Stevanovic, 2005). 
A la -amirina, se le atribuye un efecto sedante, antiespasmódico, 
anticolinérgico, antipirético, antiinflamatorio, analgésico y antibacterial 
(Lavoie & Stevanovic, 2005). 
Puapairoj (Puapairoj, 2005) reportó que el 3-epi-lupeol asilado de G. 
eriocarpium presentó un efecto inhibidor del crecimiento contra líneas 
celulares tumorales. Aislado a partir de flores de asteráceas, el 3-epi-
lupeol presentó actividad anti-tubercular (Akihisa, 2005). 
 
 
CAPÍTULO 2 ANTECEDENTES 
 
13 
 
2.1.6 Trabajos previos en composición química de copales 
mexicanos 
 
A pesar de la existencia de investigaciones previas sobre la composición 
química de diversas resinas mexicanas, aún se presenta una gran 
problemática en cuanto a una completa identificación de su origen 
botánico. Esto es debido a la existencia de muchas especies que aún no 
han sido descubiertas o discernidas adecuadamente (Rzedowski, 2005). 
De los estudios sobre los copales algunos se han enfocado en la 
composición química de copales comerciales (De la Cruz Cañizares, 
2005; Hernández-Vázquez, 2010) otros en cambio se han enfocado en 
el estudio de resinas de origen botánico conocido y de su composición 
molecular (Lucero-Gómez, 2014). 
Stacey y Cartwirght (Stacey, Cartwright, & McEwan, 2006) llevaron a 
cabo análisis sobre piezas arqueológicas pertenecientes a la colección de 
arte Mexica y Mixteca del British Museum, en estas piezas se observó 
una mezcla de resinas di- y triterpénicas provenientes de al menos dos 
fuentes botánicas distintas, probablemente una de ellas no era parte del 
material original. 
Existen también estudios que abordan el tema del copal y que buscan 
dar respuestas al análisis de piezas históricas. 
Lucero-Gómez (2012) llevó a cabo estudios sobre el copal proveniente 
de piezas arqueológicas de diversas ofrendas recuperadas en el Templo 
Mayor y su origen botánico. 
Un estudio realizado sobre pequeñas vasijas que contenían pigmentos, 
localizadas en un entierro en Teotihuacán, detectó la presencia de resina 
de Pinaceae mezclada con el pigmento (Doménech-Carbó, 2012). 
CAPÍTULO 2 ANTECEDENTES 
 
14 
 
Finalmente, un estudio químico (Correa-Ascencio, 2014) estableció el 
uso de resinas con compuestos diterpénicos como agentes sellantes en 
cerámica asociada al consumo de pulque (cerámica con resinas de pino). 
 
2.1.7 Características físicas y obtención de copales 
 
La variedad de copales que se obtienen del género Bursera es extensa. 
Por lo general, al momento de recolectar la muestra, la apariencia del 
copal es líquida y traslúcida, después de un tiempo, su color puede 
tornarse amarillo, blanco o de un color ámbar (García-Hernández, 
2000). 
 
Figura 4. Fotografías de diversos copales mexicanos: a) blanco, b) rojo, c) mirra, d) 
lágrima, e) piedra, f) amarillo. 
 
 
CAPÍTULO 2 ANTECEDENTES 
 
15 
 
Existen diversos modos de recolección, lo que influye en la apariencia 
que la resina tiene (Orta-Amaro, 2007). 
La recolección de copal blanco se efectúa sobre el árbol a través de 
pequeñas incisiones realizadas sobre su tronco. El copal piedra se 
acumula en forma de pequeñas bolas sobre el tronco del árbol debido al 
ataque de un insecto llamado Chyptodes dejeani (Montúfar, 2007). 
El copal piedra o teocopal es producido por abejas de ciertas especies 
que mezclan copal con los granos de arena con que edifican sus nidos. 
Para algunos grupos étnicos este tiene una connotación simbólica muy 
importante (Linares E. & Bye R., 2008). 
 
 
2.1.8 Usos históricos y contemporáneos del copal en México 
 
Para las civilizaciones prehispánicas asentadas en la región de 
Mesoamérica, el copal (“sangre” de árbol) era altamente valorado por 
sus diversos usos e importancia en rituales (Victoria-Lona, 2004). 
Esta importancia y usos quedaron registrados tempranamente en la 
obra de Fray Bernardino de Sahagún (1500-1590), en su Historia 
general de las cosas de la Nueva España donde da testimonio del uso 
del copal por los pobladores de la antigua México-Tenochtitilán; además 
del uso frecuente en ceremonias rituales y en formulaciones 
medicinales, también se utilizaba como material de moldeado de 
esculturas que representaban a sus Dioses (Vandenabeele, 2003). 
 
 
CAPÍTULO 2 ANTECEDENTES 
 
16 
 
Otro de los usos que también se le dio en la época prehispánica fue la 
de adhesivo. Estudios previos sugieren que los artesanos lapidarios 
empleaban un pegamento con base de copal para la elaboración de 
obras de mosaico, como es el caso de la Máscara de Malinaltepec 
(Martínez-Cortes, 1970), también se ha sugerido su uso como adhesivo 
para incrustaciones en piezas dentales (Bucio, 2006). 
 
 
Figura 5. Máscara de Malinaltepec (Clásico temprano, 200-650 d.C.). Museo Nacional 
de Antropología e Historia. 
 
Hoy en día en diversas regiones de la República Mexicana en donde 
todavía se practica la medicina tradicional, el uso de copal como 
desinfectante, antiinflamatorio o comoanalgésico es muy común 
(Gigliarelli, 2015). En una región de Oaxaca se preparan infusiones de 
copal de B. fagaroides para el tratamiento de problemas estomacales o 
inflamatorios (Morales-Serna, 2013). 
CAPÍTULO 2 ANTECEDENTES 
 
17 
 
La resina de B. bipinnata se usa para el tratamiento de heridas mientras 
que la de B. stenophylla ha sido utilizada para el tratamiento de fiebre y 
varicela (Case, 2003). Los Nahuas utilizan el copal como antiinflamatorio 
y como tratamiento para malestares como la diarrea (Orta-Amaro, 
2007). El copal de B. microphylla se ha utilizado para tratar dolores de 
cabeza, malestar de garganta y para la curación de heridas (Felger & 
Moser, 1973). 
Por otro lado, un documento anónimo datado de 1548 y que lleva por 
título “Del modo como hacían sus pinturas los indígenas de la zona 
maya y otras noticias”, menciona la elaboración de una sustancia 
adhesiva que, entre otras cosas, estaba compuesta por una resina cuya 
descripción podría ser asociada a un árbol de la región, conocido 
comúnmente como Chac’a (Magaloni, 1996) y se supone que es una 
Bursera. 
 
 
Figura 6. Mural representando una guerra; Bonampak, Chiapas. 
 
 
CAPÍTULO 2 ANTECEDENTES 
 
18 
 
En el plano artístico en México, es muy común encontrar copal en los 
estudios de pintores, el uso que se le da, de manera análoga al que se 
les da a las resinas en el Viejo Mundo, es como aglutinante o barniz en 
obras pictóricas. Se ha reportado que artistas como Gerardo Murillo 
(1873-1964) y Diego Rivera (1886-1957) David A. Siqueiros y el Dr. Atl 
utilizaban copal en sus obras (De la Cruz-Cañizares, 2005). 
“La Creación”, mural de Diego Rivera, es una de las obras donde se ha 
documentado el uso copal como aglutinante (López, 2002). 
 
 
Figura 7. Mural de "La Creación" (1922) de Diego Rivera, ubicado en el Antiguo 
Colegio de San Ildefonso, Ciudad de México (CDMX). 
 
 
 
 
CAPÍTULO 2 ANTECEDENTES 
 
19 
 
En el plano arqueológico el descubrimiento de diversos objetos de copal 
en ofrendas del Templo Mayor desde figurillas antropomorfas, barras y 
cilindros (López-Luján, 1993) hasta la mención por parte de cronistas 
como Sahagún, Durán y Alvarado del uso de incienso de manera 
recurrente por sacerdotes en las ceremonias para honrar a sus Dioses, 
muestra la importancia de este material para los habitantes del México 
prehispánico. 
Por todos los usos anteriormente mencionados, no es de sorprenderse 
que, desde la antigüedad, el copal haya tenido una importancia 
económica y que se solicitara como tributo. Así esta manifestado en la 
Matrícula de tributos, documento que data del periodo inmediatamente 
posterior a la conquista (1522-1530) (INAH, 2017), donde hay un 
registro pictográfico de los tributos que los pueblos debían entregar de 
manera periódica a la gran México-Tenochtitlán (Peterson & Townsed-
Peterson, 1992). 
De acuerdo con este documento, el estado de Guerrero era ya un gran 
productor de copal desde la época prehispánica y periódicamente 
enviaba tributos de este material a la gran Tenochtitlán (López-Luján, 
1993). 
 
Figura 8. a) Representación de Quetzalcóatl portando un bulto ceremonial con copal. 
b) Imagen de un bulto ceremonial con copal de la Matrícula de tributos (1522-1530). 
CAPÍTULO 2 ANTECEDENTES 
 
20 
 
En Mesoamérica se encontraba extendida la creencia de que existía una 
relación cercana entre el maíz, que era el alimento de los hombres y el 
copal, o pom en Maya, que era el alimento para los dioses, nutriéndolos 
simbólicamente en sus ceremonias. 
 
En la actualidad en comunidades de esta misma etnia de la península de 
Yucatán y de Guatemala se utiliza la resina del árbol Protium copal como 
incienso en sus rituales religiosos (Castillo-Acal, 2016). Esta especie, al 
igual que B. bipinnata, B. stenophylla y B. simaruba, pertenecen a la 
familia Burseraceae; estudios previos realizados sobre resinas 
provenientes a esta especie (Stacey, Cartwright, & McEwan, 2006) 
detallaron su composición triterpénica, considerando los antecedentes 
de uso etnográfico es importante no descartar esta especie como posible 
origen botánico de las muestras comerciales o arqueológicas. 
De acuerdo con Case, otra de las especies que también se explota para 
la obtención de copal es el árbol Protium (Case, 2003), árbol que crece 
en bosques tropicales. 
Por otro lado, la fiesta popular mexicana donde se hace notar el uso 
ritual del copal es el “Día de Muertos”, festejo que tiene sus raíces en la 
época prehispánica como lo describió Sahagún: 
 
“También a las imágenes de los muertos les ponían sobre aquellas 
roscas de zacate, y luego amaneciendo ponían esas imágenes en sus 
oratorios, (…) luego les ofrecían comida, tamales y mazamorra, o 
cazuela hecha de gallina o de carne de perro, y luego los incensaban 
echando incienso en una mano de barro cocido (…)”. 
Historia General de las Cosas de la Nueva España. Libro II, Cap. XXXII 
CAPÍTULO 2 ANTECEDENTES 
 
21 
 
 
La celebración que conocemos actualmente tuvo su origen durante la 
Colonia, época en la que se llevó a cabo el mestizaje de las culturas 
permitiendo la mezcla de tradiciones prehispánicas, como el culto a la 
muerte, con las tradiciones religiosas europeas conocidas como “Día de 
Todos los Santos” y “Día de los fieles difuntos” (1 y 2 de noviembre), 
dando pie al nacimiento de una de las celebraciones más emblemáticas 
de la cultura mexicana. 
La misión del copal en el altar de muertos es formar un puente que 
conecte el cielo con la tierra creando así un camino para el difunto, 
además de limpiar el lugar de malos espíritus evitando peligro alguno 
para aquellos que regresan a casa. 
 
 
Figura 9. Fotografía de mujer con copal durante "alumbrada" en San Andrés Mixquic, 
Día de Muertos. Autor: Jordi Cueto-Felgueroso Arocha. 
 
 
CAPÍTULO 2 ANTECEDENTES 
 
22 
 
Por todos los usos que el copal ha tenido y tiene en México y 
Centroamérica mencionados en esta sección, su estudio y 
caracterización reviste de importancia en los ámbitos artístico, 
arqueológico, médico, etnográfico e histórico, en esta región. 
 
 
2.2 SELECCIÓN DE RESINAS PARA EL ESTUDIO 
 
2.2.1 Resinas de origen botánico certificado 
 
Para esta investigación se analizaron muestras de resinas provenientes 
de árboles cuya identificación botánica fue certificada por el Dr. Rito 
Vega, experto en Burseras. La selección de especies estudiadas fue 
orientada por la relevancia histórica de las mismas. 
La selección de B. bipinnata se debió a los resultados obtenidos por la 
investigación realizada por Lucero-Gómez (2014), en ese trabajo restos 
de resinas recuperados en ofrendas del Templo Mayor fueron analizadas 
por CGEM, en ellas se identificaron compuestos triterpénicos, así como 
marcadores específicos para las especies B. bipinnata y B. stenophylla. 
CAPÍTULO 2 ANTECEDENTES 
 
23 
 
 
Figura 10. Ofrenda 102 del Templo Mayor. Entre los objetos encontrados estaban dos 
figurillas de copal (Gallardo, 2011). 
 
Esto pone en contexto la importancia histórica de estas especies y 
muestra la relevancia de las mismas para los antiguos mexicas. 
Debido a que a nivel botánico la distinción entre B. bipinnata y B. 
stenophylla es aún incierta (Rzedowski, 2005) se incluyeron en el 
presente estudio muestras de esta segunda especie para una 
comparación molecular. 
Finalmente se estudió una muestra proveniente de B. simaruba debido a 
que Magaloni asimila esta especie al árbol Chac’a, y también porque se 
supone que esta resina era usada en la ejecución de murales. 
 
 
 
CAPÍTULO 2 ANTECEDENTES 
 
24 
 
2.2.2 Resinas de sitios arqueológicos 
 
Esta investigación incluyó también el estudio de muestras de resinas 
provenientes de árboles de Bursera, que se encontraron en los sitios 
arqueológicos de Edzná en Campeche, Camp. y El Meco y Tulum en 
Quintana Roo. Los tres sitios arqueológicosreferidos fueron ocupados 
por habitantes mayas. 
Edzná es la más antigua de las tres ciudades y fue una poderosa capital 
regional entre los años 400 y 1000 d.C., periodo que correspondería al 
Clásico Tardío Maya. 
El Meco y Tulum por su parte tuvieron su auge en el periodo Posclásico 
(950-1539 d.C.). En el caso de Tulum, sin embargo, la fecha más 
temprana de ocupación documentada remonta al año de 564 d.C. 
 
 
Figura 11. Sitios arqueológicos de: a) Tulum (QR), b) Edzná (Camp), c) El Meco 
(QR). 
CAPÍTULO 2 ANTECEDENTES 
 
25 
 
Cabe destacar que en el sitio El Meco, el guardián del sitio, se refirió a 
los árboles cuya resina se estudió en el presente trabajo como Chac’a, 
estos árboles mostraban cortes de machete en sus troncos, y el mismo 
guardián confirmó su uso por los habitantes locales como un antídoto 
para la irritación de piel producida por la resina del árbol Chechén. 
El análisis de este tipo de resinas reviste entonces de interés etnográfico 
e histórico pues dichos árboles pueden pertenecer a las especies 
explotadas por los habitantes de estas zonas desde la antigüedad. 
 
 
2.2.3 Resinas de origen comercial 
 
Para la obtención de estas muestras se acudió a diversos mercados en 
el centro, sur y sureste de la República Mexicana, concentrándose la 
colecta principalmente en la zona que comprendía el antiguo territorio 
Mesoamericano. 
Los mercados donde se compraron los copales fueron de dos tipos: 
mercados anuales y mercados permanentes. Los mercados anuales son 
aquellos relacionados con festividades religiosas que se establecen entre 
uno y tres días en un lugar determinado y en el que los pequeños 
productores venden directamente sus mercancías; los mercados 
permanentes son mercados establecidos que funcionan durante todo el 
año, y se localizan generalmente en aglomeraciones importantes. 
CAPÍTULO 2 ANTECEDENTES 
 
26 
 
 
Figura 12. Venta de copal en el Mercado de Sonora, CDMX. 
 
Un ejemplo de copales adquiridos en un mercado anual son los copales 
de San Andrés Mixquic; obtenidos durante la celebración de Día de 
Muertos, donde el uso de copal como incienso es común. Los copales 
blancos de Huitzuco, en el estado de Guerrero y El Sidral, en Jolalpan, 
Puebla, fueron adquiridos directamente de los productores copaleros. 
La muestra proveniente de la Farmacia Paris (CDMX) se incluyó en este 
trabajo ya que este lugar provee copal para artistas. 
 
Figura 13. Mapa de la República Mexicana indicando todos los estados de donde 
provienen las muestras de resinas comerciales. 
CAPÍTULO 2 ANTECEDENTES 
 
27 
 
2.2.4 Piezas arqueológicas y su lugar de procedencia 
 
2.2.4.1 Colección del Museo Frissell de Arte Zapoteco 
 
Esta colección, que proviene del Valle de Oaxaca, es una extensa 
muestra del arte Zapoteco y Mixteco de la zona. Fue reunida por Ervin 
Frissell y Howard Leigh, habitantes de la zona de Mitla. A la muerte de 
Frissell, ambas colecciones se fusionaron en una sola quedando al 
resguardo de la Universidad de las Américas (Robles-García, 2016). 
Lamentablemente gran parte de la colección fue producto de saqueos, lo 
que dificulta una apropiada identificación y clasificación de las piezas, 
aunque se especula que la mayoría de ellas proviene del sitio 
arqueológico de Mitla y de sus alrededores. 
 
Figura 14. Vitrina de la colección en el Museo Frissell de Arte Zapoteco. Fotografía de 
John Paddock. 
CAPÍTULO 2 ANTECEDENTES 
 
28 
 
Mitla era llamada así por los Mexicas. La palabra Mitla tiene su origen en 
el náhuatl Mictlán, que significa “Lugar de los muertos”. En zapoteco su 
nombre era Liobaa (Casa de tumbas). 
Con la caída de Monte Albán cerca del año 750 d.C., Mitla se convirtió 
en la ciudad donde se concentró el poder político y religioso de la cultura 
Zapoteca, teniendo su auge entre los años 1000-1521 d.C. Su 
arquitectura se caracteriza por la ornamentación con grecas presentes 
en las fachadas de sus edificios. 
 
 
Figura 15. Zona arqueológica de Mitla, Oaxaca. 
 
 
 
 
 
CAPÍTULO 2 ANTECEDENTES 
 
29 
 
2.2.4.2 Templo Mayor 
 
Según el Códice Boturini conocido como “Tira de la peregrinación” los 
Mexicas (900-1521 d.C.) eran una tribu proveniente de Aztlán que 
peregrinó buscando una señal divina enviada por su Dios Huitzilopochtli 
indicándoles donde fundarían su ciudad. Así llegaron a las orillas del 
Lago de Texcoco y en el año de 1325 fundaron la Gran México-
Tenochtitlán, y el corazón de esta ciudad era el Templo Mayor. Edificado 
en el centro de la ciudad, el Templo Mayor fue el monumento religioso 
más importante de la capital Mexica (Aveni, Calnek, & Hartung, 1988). 
En 1521, a la llegada de los españoles, el Templo Mayor había alcanzado 
una altura de 60m. Los dos templos que se encontraban en la parte 
superior fueron dedicados a sus dos deidades principales: la parte norte 
a Tláloc (Dios de la lluvia) y la parte sur a Huitzilopochtli (Dios de la 
Guerra). 
 
 
Figura 16. Maqueta Tenochtitlán, Museo Nacional de Antropología e Historia. 
CAPÍTULO 2 ANTECEDENTES 
 
30 
 
En 1978, durante las excavaciones realizadas por la compañía de luz, el 
monolito de la Diosa Coyolxhauqui (Diosa Lunar) fue descubierto. La 
importancia del descubrimiento de la Diosa Lunar se debe a que las 
crónicas indicaban que dicho monolito se encontraba a los pies de las 
escaleras del altar a Huitzilopochtli (Lopéz-Austin, 2001). A partir del 
descubrimiento de Coyolxhauqui se creó un programa dedicado a la 
excavación y preservación del sitio arqueológico, Proyecto Templo Mayor 
(Matos-Moctezuma, 2010). 
 
Etapas constructivas del Templo Mayor 
Las excavaciones arqueológicas realizadas hasta ahora en el sitio 
mostraron que la construcción de este centro ceremonial constó de 7 
etapas (Matos-Moctezuma, 1984). Cada etapa del Templo Mayor 
consistió en sobreponer una pirámide nueva sobre la ya existente, entre 
cada etapa había un relleno constructivo en el cual se depositaban 
ofrendas. 
 
Figura 17. Maqueta de etapas constructivas del Templo Mayor. Museo del Templo 
Mayor. 
CAPÍTULO 2 ANTECEDENTES 
 
31 
 
• Primera etapa: fue hecha probablemente con madera, no se tiene 
registro de que se conserven restos de esta etapa dentro de la 
pirámide, que existe en nuestros días. 
• Segunda etapa: (antes de 1428 d.C.) es la etapa visible hoy en 
día. De esta etapa aún se preservan algunas pinturas en el 
adoratorio a Tláloc, el Chac-Mool y dos glifos, uno de ellos 
representando el año 1390 d.C. 
• Tercera etapa: (1431 d.C.) De ella solo se conservan algunas 
escaleras y paredes de su pirámide. 
• Cuarta etapa: con dos periodos constructivos; el primero, cerca de 
1454 d.C., bajo el reinado de Moctezuma I. A esta etapa 
corresponde una plataforma decorada, así como braseros 
dedicados a las deidades principales; debajo de los braseros se 
descubrieron ofrendas en cestos o cajas de piedra. De la segunda 
etapa, presumiblemente realizada bajo el reinado de Axayácatl, se 
recuperó una plataforma decorada con serpientes y un altar con 
ranas. El monolito de Coyolxhauqui corresponde a esta etapa, y se 
recuperaron diversas ofrendas que fueron posicionadas alrededor 
de la Diosa, al igual que otras alineadas con los templos 
principales. 
• Quinta etapa: (1470 d.C.) de ella se recuperaron pocos elementos, 
entre ellos parte del piso ceremonial. 
• Sexta etapa: (1500 d.C.) se recobraron de esta etapa fragmentos 
de la fachada principal ornamentada con esculturas de cabezas de 
serpientes. 
 
CAPÍTULO 2 ANTECEDENTES 
 
32 
 
• Séptima etapa: última etapa de construcción antes de la conquista 
española, de esta etapa se conserva el piso y escaleras que daban 
acceso al Templo Mayor, así como el monolito de Tlaltecuhtli y 
ofrendas asociadas al mismo. 
Con la llegada de los españoles y la posterior conquista del imperio 
Mexica, la mayoría de los monumentos y edificacionesmexicas fueron 
parcial o totalmente destruidos, y sus materiales empleados para la 
construcción de edificios coloniales. 
Una de las piezas arqueológicas estudiada en este trabajo perteneció a 
la Ofrenda 140, relacionada con el monolito de Tlaltecuhtli (Diosa de la 
Tierra). 
La Tlaltecuhtli fue descubierta en el año 2006 por arqueólogos 
integrantes del Programa Arqueología Urbana en el predio que ocupó la 
Casa de las Ajaracas (hoy Museo Archivo de la Fotografía), justo 
enfrente del sitio del Templo Mayor. 
 
Figura 18. Monolito de Tlatecuhtli (Diosa de la Tierra; dimensiones aproximadas 4m x 
3.5m). Descubierta en 2006. 
CAPÍTULO 2 ANTECEDENTES 
 
33 
 
El monolito fue encontrado cerca del lugar donde alguna vez estuvo el 
Cuauhxicalco, lugar donde se inhumaron las cenizas de los tlatoanis 
mexicas. En los códices Borgia y Borbónico se ilustra a la Diosa 
Tlaltecuhtli ingeriendo a la representación del “Sol que está cerca de la 
Tierra”; para los mexicas, el Tlatoani era la representación del Sol en la 
tierra. Existe la hipótesis de que el monolito de Tlaltecuhtli es una lápida 
sepulcral, que en algún momento ingirió el bulto mortuorio de un 
tlatoani (restos mortales de un emperador mexica). Esculpido en una de 
las garras del monolito, la fecha calendárica corresponde al periodo del 
reino del tlatoani Ahuítzol. (Matos-Moctezuma & López-Luján, 2007). 
2.3 CROMATOGRAFÍA DE GASES ACOPLADA A ESPECTROMETRÍA DE 
MASAS (CGEM) 
 
2.3.1 ¿Qué es la cromatografía de gases acoplada a 
espectrometría de masas? 
 
Introducida por A.T. James y A.J.P. Martin en 1952, la cromatografía de 
gases (CG) es una técnica en donde los componentes de una muestra 
vaporizada se separan en una columna como consecuencia de la 
repartición entre una fase gaseosa y una fase estacionaria contenida en 
la columna, para posteriormente ser detectados en el flujo de gas que 
emerge de la columna y que arrastra con ella los compuestos separados 
(Bartle & Myers, 2002). Cabe mencionar que la fase móvil (gas 
acarreador) no interactúa con las moléculas del analito (compuesto que 
se desea analizar), ya que su única función es la de transportar la 
muestra a través de la columna del cromatógrafo (Skoog, Holler, & 
Crouch, 2008). 
CAPÍTULO 2 ANTECEDENTES 
 
34 
 
En la figura 19 se muestra un esquema con las partes de un 
cromatógrafo. Para el presente trabajo, el detector que se utilizó fue un 
espectrómetro de masas de cuadrupolo sencillo. 
 
 
Figura 19. Diagrama de bloques de un cromatógrafo de gases típico. Principios de 
Análisis Instrumental. (Skoog, Holler, & Crouch, 2008). 
 
La técnica de Espectrometría de Masas es una de las metodologías más 
poderosas utilizadas para la identificación, cuantificación y 
caracterización estructural de compuestos que puede abarcar un amplio 
intervalo de moléculas, desde moléculas muy pequeñas hasta moléculas 
con un peso molecular medio en un intervalo de 1.6-800 uma (Agilent 
Technologies, 2004). Esta técnica juega un papel muy importante en la 
investigación de objetos de patrimonio debido a su alta selectividad y 
sensitividad, la posibilidad de analizar mezclas complejas y de 
proporcionar el peso molecular de las moléculas de interés (Colombini & 
Modugno, 2009). 
CAPÍTULO 2 ANTECEDENTES 
 
35 
 
Esta técnica se basa en la producción de iones en fase gaseosa a partir 
de los componentes de una muestra, que se mueven rápidamente en 
presencia de un campo magnético para posteriormente separarse de 
acuerdo con su relación masa/carga (m/z). 
En el estudio del patrimonio cultural, la técnica de ionización utilizada 
por excelencia es el impacto electrónico (IE) (Colombini & Modugno, 
2009). 
En la técnica de ionización por impacto electrónico las moléculas en 
estado gaseoso colisionan con electrones emitidos por un filamento, 
mientras ocurre este proceso, un electrón es removido de la molécula 
neutra formando así un ion cargado, posteriormente estos iones se 
concentran y aceleran para después ser transmitidos a través del campo 
magnético del analizador. La eficacia de la ionización depende del 
potencial de ionización del analito y la energía de impacto de los 
electrones (Dettmer & Engewald, 2014). 
 
Figura 20. Ejemplo de fragmentaciones para IE negativo y positivo de una molécula 
neutra (Dettmer & Engewald, 2014). 
CAPÍTULO 2 ANTECEDENTES 
 
36 
 
Un cuadrupolo simple consiste en un arreglo de cuatro electrodos. El 
acomodo de los electrodos se lleva a cabo acoplando pares de cilindros 
opuestos a manera que se pueda aplicar radio frecuencia y corriente 
entre los pares, creando así el campo que actuará dentro del cuadrupolo 
(March & Todd, 2005). 
 
 
 
Figura 21. Esquemas de un cuadrupolo en un EM. a)Arreglo de electrodos, b)Arreglo 
dentro de EM (March & Todd, 2005). 
 
CAPÍTULO 2 ANTECEDENTES 
 
37 
 
 
Figura 22. Espectro de masas por IE para 3-clorbifenilo. Nos deja observar 
características específicas de moléculas que permiten facilitar su identificación 
(Dettmer & Engewald, 2014). 
 
El espectro de masas resultante representa patrones de fragmentación 
repetibles para una molécula dada. La fragmentación es producto de la 
disociación de una molécula ionizada y derivada de su estructura, 
arreglo espacial, potencial de ionización, así como de la energía interna 
adquirida debido a la colisión con un electrón, esto en función de la 
abundancia relativa de distintos iones de acuerdo con su relación m/z. 
Este espectro proporciona información acerca de la masa molecular, la 
composición elemental, grupos funcionales presentes en la molécula, así 
como de su estructura espacial. Cada molécula presenta un patrón de 
fragmentación único, incluyendo a los isómeros (Stashenko & Martínes, 
2014). 
 
CAPÍTULO 2 ANTECEDENTES 
 
38 
 
Como toda técnica analítica, la CGEM presenta ventajas y desventajas, 
algunas de ellas se enlistan a continuación: 
 
Tabla 2. Ventajas y desventajas de la técnica analítica de CGEM. 
VENTAJAS DESVENTAJAS 
Alta sensibilidad No permite por sí misma el 
análisis de fracciones poliméricas. 
El espectrómetro de masas 
permite una medición precisa de 
la masa molecular 
Es una técnica destructiva. La 
muestra no es recuperable. 
Es reproducible Solo permite el análisis de 
compuestos termoestables y 
volátiles. 
La cantidad de muestra requerida 
para el análisis es mínima. 
Requiere de un pretratamiento de 
muestra antes del análisis 
 
Como medio de apoyo para en la identificación de compuestos a partir 
de espectros de masas existen librerías electrónicas como el caso de la 
conformada por NIST (National Institute of Standars and Technology). 
Esta biblioteca cuenta entre otras cosas con una colección de espectros 
de masas de diversos compuestos, útil para llevar a cabo una primera 
identificación del compuesto de interés. Esta primera identificación 
puede ser corroborada llevando a cabo un análisis detallado del espectro 
de masas de la molécula que se estudia. 
 
 
 
CAPÍTULO 2 ANTECEDENTES 
 
39 
 
2.3.2 Derivatización 
 
La derivatización es un proceso de pretratamiento de muestras, que se 
lleva a cabo sobre una molécula polar, no volátil y/o termolábil, 
transformándola en una molécula adecuada para su análisis a través de 
CGEM (Colombini & Modugno, 2009). 
Una vez derivatizados los compuestos, se vuelven más volátiles, su 
polaridad disminuye, y por lo tanto el fenómeno de absorción de los 
compuestos en la columna, contribuyendo así a una mejor separación de 
los mismos (Hovaneissian, 2006). 
Existen varios métodos de derivatización siendo los más comunes la 
metilación y la sililación. 
Para el caso de materiales resinosos, los reactivos que trimetilsililan 
(TMS) son los de uso más común, debido a que son capaces de 
derivatizar grupos con un protón polar activo (OH, NH y SH) 
convirtiéndolos en éteres o ésteres TMS. 
 
 
Figura23. Derivatización. 
 
 
CAPÍTULO 2 ANTECEDENTES 
 
40 
 
2.3.3 La CGEM y la conservación del patrimonio 
 
Conocer la composición química de un objeto de patrimonio permite 
trabajar en la elaboración de una estrategia adecuada para la 
conservación de la pieza (Colombini & Modugno, 2009). 
 
Como se mencionó anteriormente, el uso de materiales orgánicos es 
muy común en el plano artístico y arqueológico. Sin embrago, uno de 
los retos que se presenta al llevar a cabo el análisis de muestras de 
patrimonio consiste en poder discernir los materiales de origen, ya que 
debido al paso del tiempo su composición pudo ser parcial o 
completamente alterada, cabe recordar que los materiales orgánicos son 
más sujetos a procesos de degradación que los inorgánicos. 
 
La cromatografía de gases acoplada a masas es una de las técnicas 
analíticas más utilizada en el estudio de materiales orgánicos naturales, 
debido a su capacidad para separar los componentes individuales de 
mezclas en matrices complejas, además, esta técnica permite revelar la 
presencia de compuestos específicos que puede ser utilizados como 
marcadores moleculares, información valiosa para llevar a cabo la 
identificación del tipo de material orgánico que originalmente estuvo 
presente en la pieza, para determinar el grado de alteración 
antropomórfica del material así como para evaluar su estado de 
conservación. 
 
 
CAPÍTULO 2 ANTECEDENTES 
 
41 
 
Un ejemplo que demuestra el alcance de esta técnica para el estudio del 
patrimonio es la aplicación de la CGEM a la caracterización de un 
bálsamo utilizado en el proceso de momificación del antiguo Egipto. 
Durante los procesos de momificación egipcios, diversos materiales 
orgánicos eran utilizados tales como resinas naturales, gomas, ceras, 
aceites. Así, un grupo de investigadores italianos desarrolló una 
metodología que les permitió la identificación de compuestos mono, 
sesqui y triterpénicos, además de otros compuestos como ceras y 
aceites (Colombini, 2000). 
 
Otros ejemplos de la aplicación de esta técnica al patrimonio es el 
estudio de banices en obras pictóricas (Colombini, 2000), en 
instrumentos musicales (Echard, 2007) y la identificación de material 
resinoso en obras pintadas con la técnica pintura de vidrio inversa del 
siglo XVI y XVII (Baumer, 2009). 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
3. JUSTIFICACIÓN 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
CAPÍTULO 3 JUSTIFICACIÓN 
 
43 
 
Hoy en día existen pocos estudios sobre la composición y/o el origen 
botánico de las resinas comercializadas en el territorio mexicano. 
Aún en nuestros días, a nivel mundial, la designación de resinas de 
origen natural es inconsistente. En algunos casos materiales de diversos 
orígenes botánicos son designados con un mismo nombre mientras que 
en otros, el mismo material recibe diferentes apelaciones. Además, 
difícilmente se puede relacionar una apelación con un origen botánico. 
En México este problema se constata en los mercados tradicionales de 
diferentes maneras: es posible encontrar copal blanco y copal limón en 
forma de barras de características idénticas, la resina de pino se vende 
bajo designaciones tales como liquidámbar, incienso o copal amarillo 
(Piña Torres, 2017) y se vende “mirra” cuyo origen botánico no 
corresponde al árbol Commiphora myrrha, que crece exclusivamente en 
medio oriente. 
Se suma a la problemática sobre la designación de las resinas el 
problema sobre la identificación botánica precisa de las especies de 
árboles existentes, como ya se mencionó debido a la sistemática 
complicada que presentan y al gran número de especies que no han sido 
descubiertas o discernidas correctamente (Rzedowski, 2005). 
Mediante la caracterización a nivel molecular de la composición de las 
resinas se puede sugerir un origen botánico para las mismas, lo que 
puede permitir clasificarlas adecuadamente. 
Existen trabajos previos que se han ocupado del estudio de resinas 
naturales mexicanas (De la Cruz-Cañizares, 2005; Hernández-Vázquez 
& al., 2010; Lucero-Gómez, 2014). El presente trabajo se propone 
estudiar por medio de CGEM un número importante de resinas naturales 
de tres tipos: B. bipinnata, B. stenophylla y B. simaruba. 
CAPÍTULO 3 JUSTIFICACIÓN 
 
44 
 
Concretamente: 
El de resinas de origen certificado para caracterizar su perfil molecular 
utilizando CGEM y para comparar los resultados obtenidos con 
resultados previos sobre resinas de tres especies de origen conocido 
(Bursera bipinnata, Bursera stenophylla, Bursera simaruba). 
El estudio de resinas comerciales procedentes de diferentes mercados 
permanentes o anuales, para sugerir un origen botánico que pueda 
correlacionar diferentes apelaciones con un mismo origen botánico y 
discernir los orígenes que claramente no corresponden con la apelación 
dada (mirra, liquidámbar). 
También el análisis de resinas procedentes de los siguientes sitios 
arqueológicos: Edzná, Tulum y El Meco. Estas últimas fueron colectadas 
sobre árboles denominados Chac’a y utilizados por grupos de Mayas 
contemporáneos como desinflamatorios y como antídoto para la 
reacción producida por la resina del árbol Chechén. 
Finalmente, el estudio de resinas arqueológicas para obtener un mejor 
entendimiento de los materiales constitutivos de los objetos del 
patrimonio mexicano. Los resultados de este estudio aportarán datos 
valiosos para conservadores, restauradores e historiadores. 
Se espera que estos datos permitan esclarecer a futuro diversos 
aspectos sobre las culturas que utilizaron y utilizan estas resinas de 
diferentes maneras, sobre la fabricación de los objetos que las 
contienen, sobre sus estrategias de administración y explotación de 
recursos naturales, las rutas de comercio e intercambio vigentes y 
algunos aspectos sobre los rituales que llevaban a cabo, permitiendo así 
entender más a profundidad estas culturas. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
4. OBJETIVOS 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
CAPÍTULO 4 OBJETIVOS 
 
46 
 
4.1 OBJETIVO GENERAL 
 
Desarrollar protocolos de manejo y almacenamiento de muestras de 
resinas naturales que permitan su análisis posterior por CGEM para 
caracterizar su perfil molecular, con énfasis en las moléculas 
triterpénicas para establecer correlaciones que permitan identificar su 
origen botánico. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
CAPÍTULO 4 OBJETIVOS 
 
47 
 
4.2 OBJETIVOS PARTICULARES 
1. Crear protocolos adecuados de recolección, almacenamiento y 
manejo de muestras de resinas de piezas arqueológicas y obras de 
arte para su análisis por cromatografía de gases acoplada a masas 
(CGEM). 
2. Colectar resinas comerciales de mercados permanentes y anuales 
del centro, sur y sur oriente de la República Mexicana, abarcando 
tanto como sea posible la zona de Mesoamérica. 
3. Colectar resinas de Bursera de origen certificado para poder 
estudiar su perfil molecular y usarlo como referencia para la 
identificación de las resinas comerciales, arqueológicas y de 
árboles modernos de sitios arqueológicos. 
4. Colectar resinas de árboles de Bursera presentes en sitios 
arqueológicos por su potencial importancia histórica y etnográfica, 
concretamente del árbol denominado Chac’a. 
5. Colectar muestras de resinas procedentes de piezas del patrimonio 
para la identificación de su origen botánico. 
6. Desarrollar un protocolo de pretratamiento de resinas para su 
análisis por CGEM. 
7. Desarrollar y aplicar un protocolo de análisis de resinas por CGEM 
a todas las resinas comerciales, de origen botánico conocido y de 
sitios arqueológicos. 
8. Comparar los perfiles moleculares de las muestras de interés 
obtenidos por CGEM, con los perfiles de resinas de Bursera 
certificados tanto de la base de datos existente en el laboratorio 
como con los recientemente analizados y sugerir un origen 
botánico cuando sea posible.9. Aplicar los protocolos adaptados en el estudio de resinas modernas 
a resinas arqueológicas para sugerir su origen botánico. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
5. MATERIALES Y 
METODOLOGÍA 
EXPERIMENTAL 
 
 
 
 
 
 
 
 
CAPÍTULO 5 MATERIALES Y METODOLOGÍA EXPERIMENTAL 
 
49 
 
5.1 MÉTODO DE COLECTA, MANEJO Y ALMACENAMIENTO DE 
RESINAS MODERNAS 
 
Las resinas de origen botánico certificado se recolectaron directamente 
del árbol productor que fue identificado previamente por el Dr. Rito 
Vega, un botanista experto en Burseras. Para ello se realizó una 
pequeña incisión sobre el tronco del árbol y con ayuda de una navaja de 
acero inoxidable de un solo uso (una navaja para cada árbol) se 
desprendieron los trozos de resina exudados por el tronco y se colocaron 
en frascos de vidrio, que fueron cerrados inmediatamente. 
Para la recolección de resinas provenientes de árboles de sitios 
arqueológicos se siguió el mismo procedimiento que para la recolección 
de resinas certificadas. 
Los copales comerciales se adquirieron en mercados tradicionales 
mexicanos y la cantidad que se obtuvo de los mismos es mayor que la 
que se pudo colectar sobre los árboles de origen conocido. 
En este caso se almacenó una muestra de cada copal comercial en 
frascos de vidrio para limitar el contacto de la misma con el aire y con 
ello los procesos de degradación inherentes al paso del tiempo en las 
muestras, así como para evitar la contaminación de la misma. 
 
 
 
 
 
 
CAPÍTULO 5 MATERIALES Y METODOLOGÍA EXPERIMENTAL 
 
50 
 
5.2 MÉTODO DE COLECTA, MANEJO Y ALMACENAMIENTO DE 
RESINAS ARQUEOLÓGICAS 
 
A lo largo del proceso de muestreo el conservador a cargo de la pieza y 
sus asistentes estuvieron presentes. 
Para el muestreo de piezas arqueológicas se realizó primeramente un 
registro minucioso de la pieza arqueológica, que fue fotografiada. 
Para ello, se utilizaron guantes de látex nuevos y una navaja de acero 
inoxidable esterilizado de un solo uso para cada pieza. 
Las muestras recolectadas se colocaron con ayuda de pinzas de acero 
inoxidable o espátulas en viales de vidrio de 2ml, esterilizados, que se 
cerraron y se etiquetaron con un código y nombre. 
Los viales se conservaron protegidos de la luz, para proteger la muestra 
de los procesos de degradación inducidos por la misma y a temperatura 
ambiente. 
Para el registro de las piezas de patrimonio a analizar, nuestro grupo de 
investigación desarrolló un formato con los datos que permiten 
identificar el origen de la muestra y que establece la finalidad del 
estudio que se llevará a cabo. 
El formato se muestra a continuación. 
Los formatos que se elaboraron para las piezas arqueológicas analizadas 
en el presente trabajo se presentan en el Anexo 1. 
CAPÍTULO 5 MATERIALES Y METODOLOGÍA EXPERIMENTAL 
 
51 
 
Laboratorio 2-5 de Química Aplicada al Arte y el Patrimonio 
Registro de Muestras de Patrimonio Cultural 
Código de la muestra 
 
Objetivo del Muestreo 
Identificación de la propiedad cultural 
Número de Inventario 
Nombre 
Autor/ origen 
Fecha/ periodo 
Museo 
Ciudad, localidad 
Propietario (nombre, 
dirección) 
 
Otros 
Identificación de la Muestra 
Fecha de obtención de 
la muestra 
 
Persona a cargo 
Lugar 
Descripción 
Método de muestreo 
Comentarios 
Investigación y análisis 
 
 
 
CAPÍTULO 5 MATERIALES Y METODOLOGÍA EXPERIMENTAL 
 
52 
 
5.3 DESCRIPCIÓN DE MUESTRAS 
 
5.3.1 Resinas de origen certificado 
 
Como se mencionó anteriormente, estas fueron colectadas con ayuda 
del Dr. Rito Vega, quién certificó su origen botánico. 
A continuación, se presenta las referencias botánicas para cada especie: 
B. bipinnata (DC.) Engl. Descripción en Rzedowski y Calderón de 
Rzedowski (1996b); Rzedowski et al. (2004); con ilustraciones. 
B. simaruba (L.) Sarg. Descripción en Rzedowski y Calderón de 
Rzedowski (1996b); Rzedowski et al. (2004); éste último con 
ilustraciones. 
B. stenophylla Sprague & Riley. Descripción en Johnson (1992), éste 
último con ilustraciones. 
Tabla 3. Descripción de muestras de resinas certificadas botánicamente. 
Número 
de 
muestras 
 
ESPECIE 
 
DESCRPCIÓN 
5 Bursera bipinnata Resina de color blanco, sólido. Aquella 
expuesta a la luz se tornó de color 
amarillento. 
1 Bursera simaruba Apariencia inicial de goma, con 
consistencia líquida 
5 Bursera stenophylla Resina traslúcida, sólida. 
 
CAPÍTULO 5 MATERIALES Y METODOLOGÍA EXPERIMENTAL 
 
53 
 
5.3.2 Resinas provenientes de sitios arqueológicos 
Estas resinas fueron colectadas de árboles presentes en sitios 
arqueológicos Mayas. 
Tabla 4. Descripción de muestras de zonas arqueológicas. 
 
FUENTE 
AÑO 
de 
colecta 
 
DESCRIPCIÓN 
Zona arqueológica 
Edzná, Campeche 
2016 Resina color amarillo 
Zona arqueológica 
Edzná, Campeche 
2016 Apariencia inicial de goma color café. 
Con el paso del tiempo se 
transformó en un líquido color café 
Zona arqueológica El 
Meco, Quintana Roo 
2016 Resina traslúcida, color trozos 
pequeños. Árbol Chac’a 
Zona arqueológica El 
Meco, Quintana Roo 
2016 Resina color amarillo-café, líquido 
Árbol Chac’a 
Zona arqueológica El 
Meco, Quintana Roo 
2016 Resina amarilla 
Árbol Chac’a 
Zona arqueológica El 
Meco, Quintana Roo 
2016 Resina blanca, con pequeños trozos 
de madera adheridos. Árbol Chac’a 
Zona arqueológica El 
Meco, Quintana Roo 
2016 Resina traslúcida, pequeños trozos 
de madera adheridos 
Árbol Chac’a 
Zona arqueológica de 
Tulum, Quintana Roo 
2015 Traslúcida 
Zona arqueológica de 
Tulum, Quintana Roo 
2015 Traslúcida, pequeños trozos de 
madera adheridos a ella 
Zona arqueológica de 
Tulum, Quintana Roo 
2015 Traslúcida 
Zona arqueológica de 
Tulum, Quintana Roo 
2016 Traslúcida 
CAPÍTULO 5 MATERIALES Y METODOLOGÍA EXPERIMENTAL 
 
54 
 
5.3.3 Resinas comerciales 
A continuación, se presenta una tabla con una breve descripción de cada 
muestra comercial estudiada, acompañada de una fotografía, el año de 
su adquisición y la localidad donde se obtuvo la muestra. 
Tabla 5. Descripción de copales comerciales. (A): Mercado anual, (P): Mercado 
permanente 
 CLAVE FUENTE AÑO DESCRIPCIÓN FOTOGRAFÍA 
Copal Amarillo 
1 AZCA2 Azcapotzalco, 
CDMX. (P) 
2009 Amarillo 
transparente. 
 
 
Fotografía no 
disponible. 
2 M6 Texcoco, 
Edo. De 
México. (P) 
2008 Polvo opaco, 
amarillo. 
 
3 M6Q Texcoco, 
Edo. De 
México. (P) 
2008 Polvo opaco, 
amarillo. 
 
Copal Blanco 
4 AZCB1 Azcapotzalco, 
CDMX. (P) 
2008 Blanco opaco. 
 
CAPÍTULO 5 MATERIALES Y METODOLOGÍA EXPERIMENTAL 
 
55 
 
5 AZCB2 Azcapotzalco, 
CDMX. (P) 
2015 Blanco opaco. 
 
6 AZCB3 Azcapotzalco, 
CDMX. (P) 
2016 Blanco opaco. 
 
 
(Adherido a 
madera) 
7 CAMB1 Mercado 
Pedro Sainz 
de Baranda, 
Campeche; 
Camp. (P) 
2016 Blanco opaco. 
 
8 
 
CARB1 Playa del 
Carmen, 
Quintana 
Roo. (P) 
2015 Copal blanco. 
 
9 CHOB1 Cholula, 
Puebla. (A) 
2008 En 2008, copal 
blanco. 
Ahora, 
amarillo. 
 
(2016) 
 
CAPÍTULO 5 MATERIALES Y METODOLOGÍA EXPERIMENTAL 
 
56 
 
10 CHOB2 Cholula, 
Puebla. (A) 
2008 En 2008, copal 
blanco. 
Ahora, amarillo. 
 
(2016) 
11 CHOB3 Cholula, 
Puebla. (A) 
2008 En 2008, copal 
blanco. 
Ahora, amarillo. 
 
(2016) 
12 CHOB4 Cholula, 
Puebla. (A) 
2008 En 2008, copal 
blanco. 
Ahora, amarillo. 
 
(2016) 
13 COLB1 Colima, 
Colima. (P) 
2008 En 2008, copal 
blanco. 
Ahora, amarillo. 
 
(2016) 
14 COYB1 Coyoacán, 
CDMX. (P) 
2015 Copal blanco-
amarillento. 
 
 
CAPÍTULO 5 MATERIALES Y METODOLOGÍA EXPERIMENTAL 
 
57 
 
15 HUIB1 Huitzuco, 
Guerrero. (A) 
2008 En 2008, copal 
blanco 
(transparente). 
Ahora, 
amarillo. 
 
(2016) 
16 IZUB1 Izúcar de 
Matamoros, 
Puebla. (A) 
2008 Blanco. 
 
17 IZUB2 Izúcar de 
Matamoros, 
Puebla. (A) 
2008 En 2008, 
blanco. 
Ahora, 
amarillo. 
 
(2016) 
18 MEXB1 Azcapotzalco, 
CDMX. (P) 
2008 En2008, 
blanco. 
Ahora, 
amarillo. 
 
(2016) 
19 MILB1 Mercado 
Benito 
Juárez, Milpa 
Alta, CDMX. 
(P) 
2016 Blanco, casi 
traslúcido. 
 
 
CAPÍTULO 5 MATERIALES Y METODOLOGÍA EXPERIMENTAL 
 
58 
 
20 PARB1 Farmacia 
Paris, 
CDMX. (P) 
2015 Blanquizco 
 
21 SIDRAL El Sidral, 
Jolalpan, 
Puebla. (A) 
2008 En 2008, 
traslúcido. 
Ahora, 
amarillo. 
 
(2008) 
22 SONB1 Mercado de 
Sonora, 
CDMX. (P) 
2008 En 2008, 
blanco. 
Ahora, 
amarillo. 
 
(2008) 
23 SONB2 Mercado de 
Sonora, 
CDMX. (P) 
2008 En 2008, 
blanco. 
Ahora, 
amarillo. 
 
(2016) 
Copal Piedra 
24 IZUP1 Izúcar de 
Matamoros, 
Puebla. (A) 
2008 Copal con 
apariencia de 
piedra, color 
café. 
 
 
 
CAPÍTULO 5 MATERIALES Y METODOLOGÍA EXPERIMENTAL 
 
59 
 
Copal Rojo 
25 AZCR1 Azcapotzalco, 
CDMX. (P) 
2015 Copal rojo 
 
26 CHOR1 Cholula, 
Puebla. (A) 
2008 Rojizo con café 
 
27 IZUR1 Izúcar de 
Matamoros, 
Puebla. (A) 
2008 Copal rojizo 
 
28 MERR1 Mérida, 
Yucatán. (P) 
2016 Copal rojizo 
 
29 MILR1 Funeraria 
Torres, Milpa 
Alta; CDMX. 
(P) 
2016 Copal rojizo 
 
30 SONR1 Mercado de 
Sonora, 
CDMX. (P) 
2008 Copal rojizo 
 
 
CAPÍTULO 5 MATERIALES Y METODOLOGÍA EXPERIMENTAL 
 
60 
 
 
 
Mirra 
31 AZCM1 Azcapotzalco, 
CDMX. (P) 
2008 Resina amarillo 
opaco adherido 
a madera 
 
32 AZCM2 Azcapotzalco, 
CDMX. (P) 
2016 Resina blanca 
adherida a 
madera 
 
33 CHOM1 Cholula, 
Puebla. (A) 
2008 Resina blanca 
adherida a 
madera. 
 
(2016) 
34 IZUM1 Izúcar de 
Maramoros, 
Puebla. (A) 
2008 Resina amarilla 
adherida a 
madera. 
 
(2016) 
35 MILM1 Mercado 
Benito 
Juárez, Milpa 
Alta, CDMX. 
(P) 
2016 Resina blanca, 
casi traslúcida, 
adherida a 
madera. 
 
CAPÍTULO 5 MATERIALES Y METODOLOGÍA EXPERIMENTAL 
 
61 
 
Copal Lágrima 
36 AZCA1 Azcapotzalco, 
CDMX. (P) 
2009 Resina 
amarilla, 
opaca. 
 
Fotografía no 
disponible. 
37 CAMA1 Campeche, 
Campeche. 
(P) 
2016 Resina 
amarillo opaco 
en trozos 
pequeños. 
 
38 COYA1 Coyoacán, 
CDMX. (P) 
2015 Copal lágrima 
de color 
amarillo. 
 
39 INCIENSO Azcapotzalco, 
CDMX. (P) 
2008 Copal lágrima; 
mezcla de 
amarillo y 
rojo. 
 
40 MILA3 Funeraria 
Torres, Milpa 
Alta; CDMX. 
(P) 
2016 Mezcla de 
copal amarillo, 
amarillo 
opaco, rojo y 
negro. Olor 
dulce. 
41 MILA4 Mercado 
Benito 
Juárez, Milpa 
Alta; CDMX. 
(P) 
2016 Mezcla de 
resina amarilla 
y resina 
amarillo-
opaco. 
 
 
 
CAPÍTULO 5 MATERIALES Y METODOLOGÍA EXPERIMENTAL 
 
62 
 
42 MIXA2 Mixquic, 
CDMX. (A) 
2015 Copal lágrima, 
predomina 
color café 
sobre amarillo. 
 
43 MIXA3 Mixquic, 
CDMX. (A) 
2015 Mezcla de copal 
blanco y café; 
opaco. 
 
44 MIXA4 Mixquic, 
CDMX. (A) 
2015 Amarillo opaco. 
 
45 OAXA1 Oaxaca, 
Oaxaca. (P) 
2008 Copal lágrima, 
amarillo 
 
46 TENA1 Tenango del 
Valle, Edo. 
México (P) 
2017 Copal lágrima 
de color 
amarillo. 
 
Copal envuelto 
47 XILITLA Mercado de 
Xilitla, SLP. 
(P) 
2016 Copal envuelto 
a la manera de 
un tamal en 
hoja de plátano 
color café 
brilloso 
 
CAPÍTULO 5 MATERIALES Y METODOLOGÍA EXPERIMENTAL 
 
63 
 
5.3.4 Piezas Arqueológicas 
 
5.3.4.1 Objeto de la pieza 265-15 de la Colección del 
Museo Frissell: Bulto ceremonial. 
 
La pieza arqueológica analizada para este proyecto fue un bulto 
ceremonial. 
El bulto es un textil de algodón tejido, teñido de azul, en cuyo interior se 
encuentra adherida una resina color café-rojizo. 
 
 
Figura 24. Fotografía de Bulto Ceremonial, Colección del Museo Frissell de Arte 
Zapoteco en Mitla, Oaxaca. 
 
 
CAPÍTULO 5 MATERIALES Y METODOLOGÍA EXPERIMENTAL 
 
64 
 
5.3.4.2 Muestra M1: Proyecto Templo Mayor. 
 
La muestra M1 formó parte del material de moldeado de una figurilla 
encontrada en la Ofrenda 140 del Templo Mayor y relacionada con el 
monolito de Tlaltecutli. 
La muestra de resina de una masa de 2.7 mg tiene un color 
heterogéneo que va del blanco al negro, pasando por amarillo (Figura 
25). Para su análisis por CGEM se muestreó la zona más clara con una 
navaja de acero inoxidable estéril y de un solo uso. 
 
 
Figura 25. Fotografía de M1 de la Ofrenda 140. 
 
 
CAPÍTULO 5 MATERIALES Y METODOLOGÍA EXPERIMENTAL 
 
65 
 
5.4 EQUIPO, REACTIVOS Y MATERIALES 
 
Reactivos 
 
• Piridina(Py), ≥99.0% (Aldrich) 
• Éter di-etílico, ≥99.8% GC (Fluka) 
• Hexametildisilano para derivatización GC (HMDS), ≥99% (Aldrich) 
• Clorotrimetilsilano (TMSCl), ≥99% (Aldrich) 
• Estándar -amirina (Extrasynthèse, Genay-France) 
• Estándar -amirina (Extrasynthèse, Genay-France) 
• Estándar lupeol (Extrasynthèse, Genay-France) 
 
 
Materiales 
 
• Viales con tapa 2mL CG N9 (Tecrom) 
• Filtros 13 mm, membrana de nylon, 0.45 µm 
• Jeringa 3mL 
• Pipetas Pasteur 
• Viales de taparrosca 2mL para CG (Agilent Technologies) 
 
 
 
 
 
CAPÍTULO 5 MATERIALES Y METODOLOGÍA EXPERIMENTAL 
 
66 
 
5.5 ESTRATEGIA ANALÍTICA 
 
La estrategia analítica aplicada para el análisis de las resinas consistió 
en: 
1) La creación de un protocolo de pretratamiento y análisis de resinas 
triterpénicas. 
2) La prueba y ajuste de los protocolos (desarrollo de método) hasta 
obtener resultados óptimos. Para esta etapa se analizaron resinas 
comerciales debido a que se disponía de una cantidad de muestra 
suficiente de las mismas. 
 3) La aplicación de protocolos desarrollados con anterioridad al análisis 
de resinas certificadas, a resinas de sitios arqueológicos y finalmente a 
micro muestras provenientes de piezas arqueológicas. 
Tabla 6. Cantidad de muestra utilizada para análisis en CGEM. 
 
Tipo de resina 
Cantidad de muestra 
utilizada para análisis 
en GCMS (mg) 
B. bipinnata 2 
B. stenophylla 2 
B. simaruba 70 
Resina de árboles de 
sitios arqueológicos 
2-6 
Resina comercial 2-30 
 
Estos análisis demostraron que la cantidad de resina requerida para 
superar el límite de detección en el equipo CGEM es variable de acuerdo 
con su origen botánico y a su tipo. La tabla 5 indica la cantidad de 
material necesario para el análisis de cada una. 
CAPÍTULO 5 MATERIALES Y METODOLOGÍA EXPERIMENTAL 
 
67 
 
5.6 PROCEDIMIENTO DE PRETRATAMIENTO DE MUESTRA 
El pretratamiento de las muestras consistió en una derivatización por 
sililación (Lucero-Gómez, 2014). 
Para ello se disolvió la resina en 0.5mL de Py. Posteriormente se 
adicionaron los agentes derivatizantes, HMDS y TMSCl; la reacción se 
llevó a cabo en un intervalo de 30 a 40 min a 60°C. 
El extracto se filtró, para el análisis cromatográfico se inyectó 1µL de 
muestra. 
5.7 ANÁLISIS CROMATOGRÁFICO 
 
Cromatógrafo de gases acoplado a Espectrómetro de Masas 
Se utilizó un Cromatógrafo de gases modelo 6890N acoplado a un 
Espectrómetro de Masas con cuadrupolo sencillo modelo 5973 ambos de 
Agilent Technologies (Palo Alto, CA, USA). La temperatura del inyector 
fue de 250°C, la temperatura de la línea de transferencia del EM fue de 
310°C, la fuente de iones se mantuvo a 230°C y la temperatura del 
cuadrupolo a 150°C. El EM operó en el modo positivo (70 eV) y el rango 
de masas fue de 50 a 800 m/z. 
Se utilizó una columna capilar de sílice fundida HP-5MS (5% difenil-95% 
dimetilpolisiloxano, 30m x 0.25 mm, 0.25 µm de espesor de la película, 
J&W Scientific/Agilent Technologies, Palo Alto, CA, USA). Se inyectó 1 µL 
de las muestras en modo split 1:5. 
 
 
 
CAPÍTULO 5 MATERIALES Y METODOLOGÍA EXPERIMENTAL 
 
68 
 
Para el análisis de las resinas se desarrollaron dos gradientes, los cuales 
se muestran a continuación: 
Tabla 7. Gradiente 1: Estudio Global. 
Temp. (ºC) Aumento Temp. 
(ºC/min) 
Tiempo de 
espera 
45 - 1 
100 10 0 
250 6 3 
295 3 5 
 
Tabla 8. Gradiente 2: Zoom en zona de triterpenos. 
Temp (ºC) Aumento Temp. 
(ºC/min) 
Tiempo de 
espera 
225 - 2 
270 5 3 
295 7 3 
 
A continuación, se presenta el análisis de una muestra comercial 
utilizando ambos

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