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Regeneración N 192 [4 Epoca Año IV -13 Junio 1914-Mexico] - Eladio Murgia Mandujano

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ftntcred as Second-Cliiss Malter, 
Si-pt. 12, l'JUI, at Lúa AIIRCICH, Cal. Los Angeles, Cal., Sábado 1 3 de Junio de 1914. Numero 192. 
r 
's. L \ 
REGENERACIÓN 
La Intervención Americana 
, si lus primeros ponían obstáculo abastezca de ellas para que logre su 
Ayudando a Carranza y a Villa. 
Uus enemigos de la libertad del pue-
blo mexicano aseguraban al principio al descmbnrco de amina y municiones objeto, 
de la crisis entre México y los lista- para los carrancUtas. 
dos Unidos, que en menos de una se-
mana habrían tomado la ciudad <le 
.México la* fuerzas de los listados 
Unidos, 
lían pasado cerca de dos meses, y 
las fuerzas americanas estacionadas 
cu Vcracruz no han avanzado más de 
tres millas hacia el interior del país, 
lo *.jue pruebo lo que tantas veces he-
mos dicho: que los listados Unidos 
Otro telegrama, 
Procedente de la población del Niá-
nica, por un subteniente del vigésimo-chullos llevados a cabo cu hoteles la Intervención y Ja*, conferencias de Aprended de lo» noble* proletario* 
quinto de iutatería del Ejército de los aristocráticos, (Adelante, rebeldes! país. Zapata dice qne ¿I no tiene lisas del sur de México. Ellos no esperan 
Kstadoa Unidos, de guarnición en di- T . „ *\f¡mi.m nntMma de ninguna clane con Carranza y Ví- a que se encumbre un nuevo tirano 
'•- *" **' - - ' - " ' ' " - - ' • — - »M urnmai noticia!. | ] j t después de condenar la revuelta para que les mítííruc el hambre. Va-
bcffi.ii los te egramas publicados en , | c c f ,0s picaros como criminal, pues lerosos y altivos, no piden; toman. 
dio puerto. El motivo del asesinato 
fué ' que Guerro protestó contra un i luviAiviut' ui! ut puuiiiviun uei ¿"N itl- ' " * • * l ' " - ««<"*« |jiutvoiu vuiuiit un . " ----c i tt—i —- «,«• csuit jiicíiru» cuiiw cnmiimi. jmen icrusus y »iuvu>i uv yiuv». WUMII . 
defiriéndose a la ayuda que Wilson gara, el mismo periódico americano atropello que se quería cometer en su "} P r e i l S ! l americana el 11 de este mes, n o t ¡ c n e o t r o 0bjcto que perpetuar el Ante la compañera y los níuo» que publica un telegrama de la misma fe-
ha que en parte dice: "Si los ca-
presta a sus sirvientes Carranza y Vi 
lia, "The Los Angeles Times" publi-
un telegrama de Washington de ñoneros de Huerta se atreven a in 
fecha 7 del corriente, que dice en la lerceptar barcos que lleven cargamen-
parte relativa: "Hay en Washington tos de armas y municiones para los 
opinión unánime acerca de la in- constitucionalistas, se dice aquí que 
,, i - , tención del Gobierno de los Estados los barcos de guerra americanos in-
no estaban preparados para una gue- Unidos, y esa ¡mención es que este tervendrán." 
rra con AI «tico: que los Estados puerto—Tam pico—sirva a los consti-
Unidos quisieron pulsar el estado de tticionalistas para obtener sus elemen- los lacayos'de los capitalista ameríca 
animo de los mexicanos a quienes t o s ( l e ffUerra.» « S e sabe—sigue di- nos? 
creían estar en su mayor parte en sim- c ¡ c n d o e l telegrama—que este gobier-
patta con Carranza y \ illa, y por lo n o — c | de Wilson—ha sido informado Siguen las matanzas de mexicanos. 
mismo, en simpatía con la invasión q u e villa carece de municiones para Narciso Guerrero, americana, ya que la invasión era so- •• - . . . * ' . . 
contra. Naturalmente, el asesino no c l a e s e o fe Wilson es poner a Villa fiistt*m¡i de explotación capitalista ba- piden pan, no esperan que un Carran-
ha sido molestado y cl mexicano ha ° a V^ r r a n 1
z a a* frente de un gobierno j 0 c\ nombre de constitucionalismo, z a o u n Villa suban a la Presidencia y 
quedado bien muerto. ¡Esa es la ci- provisional que resulte de un acuerdo exclama como un verdadero revolu- les dé lo que necesitan, «¡no que, vale-
vilización que nos llevan los soldados » " a l tenido por los comisionados de donarlo: "Me llaman el bandido Za- rosos y altivos, con el fusil en la n u -
cid capitalismo americano! I i a z ?*} , a población del Niágara, W . l - p a t a . Zapata el bandido continuaré no, entre el estruendo del combate y 
Las conferencias de paz. s o n d ' c c ?nc es preciso que Villa en- SHJn(jo a la faz de todos loa poderes al resplandor del incendio, arrancan 
En dos semanas no han alcanzado * " * , , " « , ? i d c ^Xu°rl í ! J m a * e del mundo, hasta que el pueblo obten- a la burguesía orgullosa la vida y la 
cargo de Ministro .de la Guerra, o el g a justicia, hasta que el peón sea el riqueza. 
^ y ^ ™ ° i c J ^ a A . ! i l ? Í S ™ a n ¡ ? - " tt_ . . , Ellos no esperan a que un caudillo 
Estas palabras del valeroso Zapata. s e encarame para que les dé de comer: 
>tl 1<i ílítTtiíJ c n r m h n r - i i n Á n A/* « » a i - t í - í — i ^ i : _ - „ i - - . . A'.r**,no . I . . - • _ • . . . , . . _ 1 A > 
¿Quién puede dudar ningún progreso las famosas negocia- S ^ f i r ' 
Carranza V Villa son ciones rio nnz. lín n mi Moa v Í M U M . , í , , ,-, , , 
de la República, pues mientras mas se chelas han menudeado, como que pa-
ra eso sudan los pobres pueblos. Co-
mo a pesar de todo lo que se arregle 
por esos señorones y matando bur-
un mexicano, fué gueses y autoridades. De esta lucha 
ayude a los constitucionalistas, tanto s o n l a dignaTorVoboraciónde' su ícYi- ¡ñtl\te¿i£ TMgMsT'icltnyTfllZi 
mejor sera para los Estados Unido.. , „ d d e v e r dadero revolucionario ¡Que Í S f de poípíedad, echan a f í o los 
Dignidad de Emiliano Zapata. diferencia entre el servilismo de Villa cercados y ponen la fecunda mano so-
amencana va uue la invasión era so- •• - , . , . - , , t , ' = - - - Emiliano Zapata, el honrado y fir-
 v, Carranza y la dignidad del noble lu- bre la tierra libre. Pedir, es de cobar-
idtada p¿r todos los actos poíSicos S° n , ' n . u a . r s u « " í - ™ s o b r f l a c"'d»<1 m u c r t ° » balazos, como un perro, en es de la que depende el futuro del m e defensor de los desheredados, acá-
 c n a d o r suriano! des; tomar, es obra de hombres. De 
de esos dos bandidos etí ?us reíacío- d ° M e N " ' c ° - y q U e e s p r c c l s o " u c s e l a s c a l l e s d e Veracruz, el 7 de este pueblo mexicano y no de los chan- ba de hacer público su desagrado por RICARDO I 
nes con Wilson. 
Wilson vio que el pueblo mexicano 
público su desagrado por RICARDO FLORES MAGON. 
se disponía a resistir la invasión, y 
entonces recurrió a la estratagema de 
las conferencias de paz para no verse 
forzado a continuar desde luego una 
guerra para la cual no estaba prepa-
rado, y asi fué como, según declara-
ción del Embajador del Brasil, los 
representantes en Washington de Ar-
gentina, Brasil y Chile fueron invita-
dos por el mismo Wilson a represen-
tar la comedia de la mediación para 
ganar tiempo durante el armisticio y 
poder preparar mejor la invasión, o, 
si era posible llegar a una solución 
pacífica del conflicto que él mismo 
había precipitado, retirar sus fuerzas 
de Vcracruz de una manera plausible. 
Otra estratagema. 
Viendo Wilson que a pesar de su 
amistad con Carranza y con Villa, el 
pueblo mexicano no apetecía la inva-
sión, sacó de los cabellos la cuestión 
agraria, mostrándose de la noche a la 
mañana partidario de la repartición 
de tierras a los proletarios, pensando 
que de esa manera podría hacer sim-
pática la invasión al pueblo mexicano, 
y, por lo mismo, no tropezaría con 
grande oposición. Afortunadamente, 
los mexicanos ya no tenemos confian-
za en la institución llamada gobierno, 
ya esté éste representado por mexica-
nos o extranjeros. Tras dura expe-
riencia de cuatrocientos años, los me-
xicanos, al menos una buena parte si 
no todos, liemos venido a compren-
der que gobierno es tiranía, cualquie-
ra que sea su forma y que. por lo 
mismo, no debemos esperar nada bue-
no de ningún gobierno, propio o ex-
traño, siendo por lo tanto un deber el 
combatirlo hasta su exterminio 
Los dos bandidos. 
Que Carranza y Villa no son otra 
cosa que míseros sirvientes del capi-
talismo americano, ha sido demostra-
do por REGENERACIÓN con he-
chos abundantes y que no dejan lu-
gar a duda. Hemosvisto a ambos 
ambiciosos estrechando la mano de 
Wilson, para que éste los ayudara n 
derribar a Huerta; los hemos visto en 
encerronas con agentes diplomáticos 
de Wilson, comprometer el porvenir 
del pueblo mexicanc con alianzas con 
el enemigo; hemos visto pasar por las 
flanees* de las autoridades, americana? 
inmensos contnJi£rritff de a mías, con-
signadas a loaffkrrOTaisftis; hemos 
oído declarar1 a Xarranza y a Villa, 
sin que sus rostros enrojecieranv^de 
vergüenza, porque Carecen de ella, que 
la invasión americana no era un acto 
hostil al pueblo mexicano, sino a 
Huerta, como si no fueran mexicanos 
los que iban a ser asesinados por los 
soldados americanos; los hemos visto 
recibir^ de los capitalistas de los Esta-
do Unidos no solamente armas y mu-
niciones, sino que también, comba-
tientes, como lo demuestra el gran nú-
mero de muertos americanos y de he-
ridos y prisioneros del mismo origen 
en los combates de Torreón y sus al-
rededores. 
, Una prueba más, 
Pero como si todo eso no fuera 
bastante, hay un hecho recientísimo 
que prueba que Carranza, Villa y 
Wilson están de acuerdo en la obra 
de amarrar de pies y manos al pueblo 
mexicano, para que los capitalistas de 
todas nacionalidades, y principalmente 
yanquis, puedan explotarlo a su an-
tojo. El vapor cubano, Antilla, esta-
ba para HegaT a Tampico con un car-
gamento de armas y municiones para 
los carrancistas, el lunes 8 de este 
mes. 
Zaragoza y Bravo que impidieran el 
desembarco, y Wilson, por su parte, 
ordenó que los barcos mexicanos fue-
ran atacados por los barcos ameríca-
Lo Despachan con su Música a Otra Parte 
Comprendiendo Wilson que la Intervención es absolutamente antipática al pueblo mexicano, tuvo la ocurrencia de halagarlo cantándole una c ancioncilla que va poco más o menos 
sigue: "Pueblo querido, te amo con toda mi alma y estoy decidido a darte la tierra que quieres; pero sé bueno, respeta a mis changuitos que sa ben bailar al son que les toco Dennite 
Huerta 'ordenó'a ' Tos cañoneros q u e m i s s^da™*08 lleguen a la ciudad de México y pondré el Bol, la luna y las estrellas a tu disposición." ' *^ 
El pueblo indignado aporrea a los changos y levantando la Bandera Roja de Tierra y Libertad, incendia los palacios de los parásitos burgués es, pone en libertad a los oresos 
incendiando los presidios, quema los títulos de propiedad declarando que todo debe pertenecer a todos y pone los cimientos del nuevo orden social en que ño hay más amos, gobernantes 
ni embaucadores religiosos. 
rodillas se puede llegar a la muerte, 
no a la vida. ¡ Pongámonos de píe! 
Pongámonos de píe, y con la pala 
que ahora sirve para amontonar el oro 
a nuestros patrones, abramos su crá-
neo en dos, y con la hoz que troncha 
débiles espigas, cortemos las cabezas 
de burgueses y tiranos. Y sobre los 
escombros de un sistema maldito, cla-
vemos nuestra bandera, la bandera de 
los pobres, al grito formidable de 
¡Tierra y Libertad! 
Ya no elevemos a nadie; ¡subamos 
todos! Ya no colguemos medallas ni 
cruces del pecho de nuestros jefes: sí 
ellos quieren tener adornos,, adorné-
moslos a puñaladas. Quienquiera que 
esté una pulgada arriba de nosotros, 
es un tirano: ¡derribémosle! Ha so-
nado la hora de la justicia, y al anti-
guo grito terror de los burgueses, ¡la 
bolsa o la vida! substituyámoslo por 
este: ¡la bolsa y la vida! Porque sí 
dejamos con vída a un solo burgués, 
él sabrá arreglárselas de modo de po-
nernos tarde o temprano otra vez el 
pié en el pescuezo. 
A poner en práctica ideales de su-
prema justicia, los ideales del Partido 
Liberal Mexicano, un grupo de traba-
jadores emprendió la marcha un día 
del mes de Septiembre del año pasado, 
en territorio del Estado de Texas. 
Esos hombres llevaban una gran mi-
sión. Corrompido por la ambición de 
los jefes el movimiento revoluciona-
rio del Norte, iban bien abastecidos 
de ideas generosas, a inyectar nueva 
savia al espíritu de rebeldía que en 
esa región degenera rápidamente en 
espíritu de disciplina y de subordina-
ción hacia los jefes. Esos hombres 
iban a establecer un lazo de unión en-
tre los elementos revolucionarios del 
Sur y del centro de México, y los ele-
mentos que se han conservado puros 
en el Norte. Bien sabéis la suerte 
que corrieron esos trabajadores: dos 
de ellos, Juan Rincón y Silvestre Lo-
. mas cayeron muertos a los disparos 
de los esbirros del Estado de Texas, 
antes de llegar a México, y el resto, 
Rangel, Alzalde, Císneros y once más, 
^ se..encuentran presos en aquel Estado,. 
sentenciador- unos a .larcas p»»»«- De-
nitenciarias, otro de ellos a pasar su 
vida en el presidio, mientras sobre 
Rangel, Alzalde, Cisneros y otros va 
a caer la pena de muerte. Todos es-
tos trabajadores honrados son ino-
centes del delito que se les imputa. 
Sucedió que una noche, en su pere-
grinación hacia México, resultó muer-
to un sheriff texano llamado Candela-
rio Ortiz, y se descarga la culpabili-
dad de esa muerte sobre los catorce 
revolucionarios. ¿Quién presenció el 
hecho? ¡Nadie! Nuestros compañe-
ros se encontraban a gran distancia 
de donde se encontró el cadáver del 
esbirro. Sin embargo, sobre ellos se 
trata de echar la responsabilidad de 
la muerte de un perro del Capital, por 
la sencilla razón de que nuestros her-
manos presos en Texas son pobres y 
son rebeldes. Basta con que^ ellos 
sean miembros de la clase trabajadora 
y que hayan tenido la intención de 
cruzar la frontera para luchar por los 
intereses de su clase, para que el ca-
pitalismo americano se les eche enci-, 
ma tratando de vengar en ellos la pér-
dida de sus negocios en México. Si 
nuestros compañeros fueran carran-
cistas o villistas, si ellos hubieran te-
nido la intención de ir a México a po-
ner en la Silla Presidencia a Villa o a 
Carranza, para que éstos dieran nego-
cios a los americanos, nada se les ha-
bría hecho, y antes bien, las mismas 
autoridades americanas los habrían 
protegido; pero como son hombres 
dignos que quieren ver completamen-
te libre al trabajador mexicano^ la 
burguesía americana descarga sus iras 
sobre ellos y pide la pena de muerte 
La Intervención y Los Presos 
de Texas 
El miedo y la codicia fueron las de México por el camino de Veracruz, lógico, natural de este hecho: la satis- 5 P ™ ° . ™ a . S r í S L ? ! ^ ™ , i . ' ™ P " Í S : social y político que les permite ha- J_I im^uu j >•> i.uun.ia IUCIUH »!> >*\¿ W>,AJI.U MUÍ C» touunu uc vcracruz, losnco natural ce pstf» h#>chn- la catíc- ~. —.
 _* * - j • ~ 
cerse ricos y poderosos a costa del manos temblorosas que llevaron a no es otra cosa que un juego militar alción de todas fas necesidades hu- c ! o s 1 u e fs% s u í i ? , e ^ ° J í ?"" S " 
sufrimiento de los trabajadores: pero México la bandera de las barras y las que tiene por objeto entretener por manas sin depender dé^ad ie o u k lü- .c '°-s p o r l a R c v o l u c , 6 n d e l o s P r o l e -
no es eso lo que ocurre en México, estrellas; el miedo que los opresores ese lado las fuerzas mexicanas que se grarlas. taños. 
Ante los ojos espantados de la bur- y los explotadores de todo el mundo oponen a la invasión, mientras Ca- El homhri» .« » h » ™ , j . j m ™ . „ * . En cambio los asesinos de Rincón 
guesía internacional y de los gobier- tienen de que sus respectivos rebaños rranza y Villa pueden avanzar sin , : b „ " " " „ £ "?„ „™'J?
rd3?eI?™e"í' v d ? Lomas están Kbíís La m?sn£ 
nos, se desarrolla en aquel hermoso imiten al trabajador mexicano y ha- gran tropiezo hícia el corazón del h „ , e ' c " a " d S :
n o " « « " J «lqmtar sus y de Lomas es.an libres, w misma 
país uno de ios dramas más emocio- gan ondear en todos los pa ís« la Sais. Santa Ana murió, pero, r e S t t'toca un t e i ^ J ° ^ ' ¿ ' « S V t T d T C I d ^Compañeros colma di 
DISCURSO pronunoiado e„ cl miiin «icbr.do bandera no lia aparecido en aquellas nantes y sublimes de la historia de Bandera Roja de Tierra y Libertad; carnó en dos bandidos: Carranza y S L Í S * . ! " p • ° d e , p a n ' y e5iU "" L L . T J . y S S . . ? i T i t l r . 
S p i r' S ^ S ' Í S V ' U ? ^ ! - ^ ' ^ Playas como el símbolo luminoso de los pueblos. AHÍ se disputa, arma al el miedo de que posesionado de la' Villa. Estos soTlos hombres aSein^ %«¡* ' ¿ " ¡ d T ' r e S r f S S I S t . Z í « a"e ^ m n S S n S^ vida de dos" 
BO al * MW» o» oí Y. p. s. i-, bdi (S.i« de ] a civilización y de la cultura, sino co- brazo, el derecho que todo ser huma- tierra el traba ador mexicano, y libre v tan al capitalismo americano a in- ™?~?- 1 * ° ™
, , d o , resueltamente, sin nes que arrancaron la viaa o e M 
,» UB„ ae , .vo„. * * „ . , . . , . m o e l t r a D O J T O c o n o u e d c r ¡ m e n n o t i e n e d e v i v i r : « a l I L e l ( r a D a i a d o r „ o r _ „ B l o U h c se n i e g u e n al- vadir México; es?o°s son lo's \ & L S S t a l V ' Z Z ^ T ^ S s l Z n íarios ?o qu^es" '» ¡55JF&&ÍZ mo el trapo negro con que el crimen no tiene de vivir; allí, el trabajador por ese solo hecho, se niegue a 
Camaradas: se tapa la cara para vaciar los bolsi- hace pedazos los títulos de propiedad quitar sus brazos para enriqui 
Que resuene esta vez mi palabra Nos de la víctima, esa bandera es la de los ricos, y mostrando las manos rásitos. No fueron a México 1„- - . , . .„ „ s B.ov.» a t o . . u « . . * u í e r e s 
como una condenación a los podero- careta de los grandes bandidos de la al mundo que contempla asombrado zas americanas en nombre de la civi- de los mexicanos, para sentarse a de- ^ 
sos de la tierra; que se levante airada industria, del comercio y de las finan- lo que la tradición y la ley llaman lización y de la humanidad; esas fuer- vorar el cadáver, * s ' í 
y sin miedo pa'ra anunciar a los ver- zas de todos los países que tienen in- sacrilegio, lanza este grito heroico; zas fueron a asesinar mexicanos en sin el consentimiento de Villa y de ítr ' 
dugos de los pueblos que hay una vo- teres en que el trabajador mexicano ¡no más títulos sancionados por la provecho de los bandidos del dinero Carranza, el capitalismo americano no ' ( j t , j 
luntad más grande que la de los tira- sea el esclavo de los aventureros de ley; de hoy en adelante, para vivir y y del principio de autoridad. Esas 8 e h a b r l l l itretiio a ¡ n T a d ¡ r d t e r r ¡ . WJ !sea su forma republicano o mo- — - p f i ¿ 0 p I . o d u ( : ( , n ; los humanos, 
nos, que hay una fuerza más poderosa todo el mundo; esa bandera es puñal gozar de la riqueza, no habrá mas fuerzas han sido empujadas por el ca- t 0 , ¡ 0 m e x i C nno, y esta lección, como r A
r q u , J 2 ' " ° K p r i e ? í a í - , a . i d e l menos inteligentes que k s abejas 
que el puño del déspota, y que esa vo- V es látigo, es cadena y es horca; no títulos de propiedad que los callos de pitahsmo, para matar a los trabaja- t a n t a s o t r a 8 deberla servir a los tra- L „ ° A J A J Í S M
1 ,E1 J » » " n i o «en« , i a n muerte a los trabajadores que 
luntad y esa fuerza residen en nos- brilla como una insignia de redención las manos I dores que no quieren más. amos, que bajadores para no confiar a nadie la P í r „ . m i S ¿ í J S u 5 • l n t e r e S M d e iO S todo lo producen, para que los b i r -
""""•" ' " ' f f ¿ c í 7 . ' « •? 1 y5!^ . d J?»»"«»^ 
modp: tomando resueltamente, sin nes que 
que es la justicia burguesa. 
_ . .jador puede morir como un 
perro; pero no toquéis a un esbirro. 
Esto no se conseguirá encumbrando A<!ui » / O T , d e « u l " r * ' í ' ' t S Í ' l Í ! ' » ™ 
nadie a la Presidencia de la Repu- v a * e n»i&- l o ? q u ! h ^ V í J , ? ¿ £
U Í 
oues el Gobierno cualauiera n a d a nacen. Las abejas dan muerte a 
«Tu?fo r r aa^ í eDub l i c .n a o a l nó- * » * a »8 a »°» d « ]» « ' ™ ™ a 5"« « " 
otros, en los de abajo, entre los des- y de progreso, sino que flota al aire L burguesía internacional y los Bo- <»>>eren ser libres, que ya no supl : . j i - - ™:-™— -. .- „«,. =„- rnmn un suriano mecida pn la nochi» . . . . . _,'. ° mií> un niHcn mas. v mil. ri>Rti*1tn ... no piden más, y que resueltos, al- , r a a | o s proletarios, sordos a la voz 
tivos y viriles arrancan del pecho del de la razón, ciegos a la luz de 1» ex-
do un solo caso en que un gobierno ff¡."**{• 
haya puesto la mano sobre los bienes ™• * , ' , ; 
de los ricos para entregarlos a los ¡J°* ? ' " 
soldados, que son los i&nga-
colmena social, puedan vivir 
preciados por los mismos que nos ex- como un sudario mecido en la noche b i e r n o s t o d o s t e m e n u e ,„ c h i s p a „„,. qu. 
plotan, entre los que con nuestras ma- por cl soplo de la Muerte. a r d < ¡ e n Méx¡COi s e a e ( principio del '!
v 
nos y nuestra inteligencia fabricamos For'que ¿en virtud de qué noble im- formidable incendio 
los edificios y con nuestro sudor y pujso llegó ese trapo a las playas de p r a „ 0 hará del mundo una sola llama, "'.Vi™-'" •™"™ "' """•"
 u l : "" """ dlviduos la misión de darles su liber- ír"¿r"_ü,~ " ,VÜV"«™ X'riZiSZ™ Esa es la justicia burguesa! esa es 
nuestra sangre cultivamos los campos, México? iQué brisa amable lo arras- q u e reducirá a cenizas el sistema cap!- mildei. t«d y hacer su felicidad, las cadenas f,L. ,,,„ S / i , < ™ 
tendemos la vía férrea, horadamos los tro hacia aquellas tierras? j Que ga- tnlistn, cuando el trabajador deje caer Tal es el motivo de la Intervención, de la esclavitud seguirán siendo el i\„in„i!r ¡„;.i,„ í . l Ü X Í M í otate, "«to» tenemos que destruir písele a 
túneles, arrancamos del seno de a llarda idea representa encima de una i„ herramienta que sólo le sirve para y en esa negra página de política ¡n- premio a su buena fe y a su conflania. „ „ J„" „ . ! „ " . „ :,, £it,,nriXn Acor- «l»1*" '« P"« y «¡«'í» 1 u i e n «»y««-
tierra los '«tétales útiles, y que, cuando cuidad cogida por sorpresa? El míe- enriquecer al patrón y enarbole cl tcrnnclonnl, como Ta serpiente que se Los proletarios que siguen a Carrania 2Í1 "2! S S B W O « S i ™ T o e fca- M.vlr.nn. «i « « » . . . .ol.mr,. 
la desesperación llena nuestros pe- do y la codicia: esto es lo que hay en pc„d'on rojo de Tierra y Libertad, desliza sin ruido entre la yerba para y a Villa no los siguen ciertamente „ a n „ d o „ d . u í h&>?ieAoi?snldadM H. 5SSSS?.'l i ,^ iStoV™nt.™5í: 
olios, con las mismas manos que crea- el fondo de este saínete que puede ^rque cl ejemplo es contagioso: el morder cl talón de BU victimar se por darse el gusto de cambiar de 5",nglSSÍÍ fhoMron m1». « ™ í ¡omoí mMIolS £ t a & . " 2 ™ 
mos la. riqueza levantamos la barrica- terminar en tragedia. El miedo que hambriento de los Estados Unidos, el arrastran dos reptiles a quienes hay amos, ni por permitirse el lltfo de ™ S ^ SAlSEto? fas voms'SSe veSñlo, ion £„'»» eíaítoí ll Se! 
da y disparamos el fusil. todos los opresores y todos los ex- D„ria fr„„cés, el esclavo ruso, el sier- que aplastar a tiempo! Villa y C«- cambiar de yugo, sino que en su sen- « . . « ™ P ™ ¡ S 2 £ i '"•'
 Vp.™mia tr!ri. g . . V íní.tíl nT.nu.-rni.rS 
La necesidad del momento es a ver- plotadores de la humanidad sienten v 0 inglés, el desheredado de todos los ?ran«a, dos engendros de Judas. El cllle» creen todavía que alguien puede SeSSloi di iSeUtto «íordáS? del 1« mano, dî 1¿ lu'.tíeS^ «n?tíl?.ta a 
dad y cl valor. Hay que decir la ver- ante el despertar inequívoco de las países pueden tomar lección de su her- plan fraguado en la sombra, es sencl- darles la, libertad y el bienestar, Y . 0 U! donde l i metralla vV. fbSlerS nu«7,o.^h.Jrni!,^ níÜnS « T>». 
dad cueste lo que cueste: si las fuer- masas esclavas que forcejean por rom- TOano 0 | trabajador mexicano, y cm- filslmo: con la ayuda de lia fuenai cuando, oídlo bien, proletarios, la 11- deTCobfernó^die™í?on ? los enérS! Síf ^ímltíSÍÍ nM.
PlI mLn Jrf ™¿ 
zas americanas han clavado en un eos- per sus cadenas. Si la. Revolución prendiendo por su cuenta la obra de americanas Villa y Carransa podrán bertad no es un bien que se regala, ™ taBSmto ¿ í í ^ e « £ n ^ eK *?o» i S S . ÍS ?í. ioWe. ínriloi H 
tado de México la bandera de las ba- Mexicana fuera un movimiento que s
p
u ubertad y de su bienestar, aplique llegar a la ciudad de México, sentarseslnouna conquista de los oprimidos f" r » í?a riew laí SeSaf une lis c í S d í d T l . horca OintribuMmos 
rras y las estrellas, no ha sido para tuviera por objeto el quitar a un Pre- , , , dlnaimta al poder político' en el poder y entregar atado de pies alcanzada por ellos mismos, y la 11- JJgJ * ' ^ ^ « S ' t i C T r " < i u e , M ' " r
r d , ' n
d ' '* "Pío".' „ l? í s d?! í^e! 
S . ? ^ ? » ^ - ^ bínScTha íffiT,oa,rave?d°U
ngos0^ ^ T ¿ y a. poder del dinero, únL medio , « . y manos .1 trabajador mexicano a la bertad, en.ended.o bien, nc, existe « , * & « T S S S de «periend. ¡ S ^ ^ & S Z X á t i i f t 
sido clavada en Veracniz como un pu- que tal movimiento no les perjudica- le queda al pobre para deshacerse de explotación capitalista, La amenaza puede existir lado a lado de la mise- p , r a „„ confiar a nadie la obra de opinión a su favor. 
nal en el pecho de la Justicia; esa ría, pues quedaría intacto cl sistema sus verdugos. de las fuerzas americanas a la ciudad ría, sino que es un producto directo, vuestra Ubertad sy vuestro bienestar. Basta ya de crímenes cometidos en 
4.*$*.>&¿S2k¿k'!¿, S.V*14fflÜÍKi»* ifC¡ , 
http://bcffi.ii
http://nT.nu.-rni.rS
REGENERACIÓN 3 
personas de nnestt», *»«»• l * s «<>>¡- 9«e»aa propiedades", pues por peque-
: « j . Antonio Rodrigues «o han sido ñas que fueran no dejnrian de ser 
esparcidas todavía por el viento; en propiedades? 
las llanuras texanas se orea la sangre Suponiendo, sin conceder, que esa 
d . los mexicanos asesinados por Tos subdivisión pudiera ser hecha por un 
snlvaies de piel blanca, Que se levan- gobierno, como estarla basado tn el 
.« nuestro braso para impedir el nuevo derecho de propiedad, tarde o tem-
"* *" .. . . . . i » 1» Dnn,K«A ««Anntvn IA n r n n n wJvAMft n miAflnr In Har rn er 
Algunas Palabras Sobre . 
el Comunismo Libertario 
l*a fórmula comunista más corrlcn-
erimen que en ,1a sombra prepara la prano volvería a quedar la tierra en t „ A c a d ¡ l cmi 4 | 1 8US „cccsida- o menos raros no es mucho mas i>* 
burguesía americana contra Rangel y poder de unos cuantos, y las eternas a „ ^ ^ a c o g l < | a c o n c x | > i o a ¡ o n e J Hgroso, y así se puede pasar sin 
companeros. convulsiones volverían a.manifestar- d<. r i s ¡ l i a r a<¡ l o q M e tan violen- reglamentación la adquisición. Esta 
Mexicanos: si tenéis sangre en las se. Esto, sin hacer mención de los t a n u . „ t c trastorna esta concepción la objeción se formula generalmente cu 
(crias, unios para salvar a nuestros que nacieran después de que el repor- „ „ U d a d a c t u a l M n y pO C O S ' ,je l o a „„ sentido muy vasto, sin definir a 
pues perfectamente poner en el tnon. «cada. ,f-«c«o es fácil o p e r a r que con la wtabni «tupía , liidta.ndo lo* 
ton. Por lo demás, si alguna nirn t-Mii «.ndíclón se resuelva am Otmu» «ueflo. de un porvenir lejano. Sí» 
ocasión se hubiera que recurrir nc- wierMMoi que la .ocicdad «iMialísia f nliargo, .un los utopista» coman-
cesarinmcnlc al racloiiniiilenlo, no se- "o, quiere escuchar nunca. Todo tra- »«««•;'"» <l«« '« i tenido razón, y «I 
tía cicrtanicnle tan mal acogido que •"'Jo deuc acabar por hacerte airactt- 1'orvcwr está llamado a favorecerle» 
se quisiera renunciar u él v o Vot t o u a suene de iratitíortnado- con ventaja. No hace mucho que la 
lín ™,,n in „ i„„ ,,i,,.,„ ' i . „..,„ ,./,„ "es consecutivas, y ese día lo» obre- ulopla de la liberación de lo» ctclíi-
La rivalidad de los productos máB „„„,",„"1,, ,„ " ", <""•'» '}' arle, aun rot ¡rin Vo|Untar¡ainculf a barrer las
 v«» te ha realizado. Afirmar el de-
niA»oft ruma „n p« n „whn miis i,,.- cuantío »t iicgHBt, a icparurias ue mo- y.«,]ititt como a cualquier olra cosa, lí» rechu a satisfacer toda» la» necetída-
hormauos presos en Texas. Al sal- to hubiera sido hecho, quienes se en- s c b , d<¡ e ) t o „ t l m i m d c s l l qll(S «bjeios podría aplicarse. Y, sin 
varios, no salvaréis a Rangel, a Ai- contrarían tan desheredados como los ¿ l l M n d oponerla alguna objeción en embargo, importa mucho, para res-
aalde, a Cisncros y demás trabajado- que actualmente luchan por conqtus- c s * , s e n l M ' 0 N o n a y i s i n e m b a r g o , ponder a ella, saber a qué clase de 
res: os salvaréis vosotros nitsmos, t a r t a tierra. 1 . i r a r a fo r mal izar otra medida de objetos sc referiría la competencia, 
porque vuestra acción servirá para Penetrados de estas verdades, los Incomprensibilidad tan absoluta Evidentemente seria menester com-
que se os respete, i Quién dc vosotros miembros del Partido Liberal Mexi- , , marcha de la humanidad hacia prender entre estos objetos los ob-
^ a )... :w.An »» ,,ltrnm ,n este oais cano nos esforzamos por hacer enten- "^ » « * , * . . . , _ ' . ; . ? ¡, . . . . . * . . . . 
por 
rabies. lis probable que algunos in-
dividuos quisieran tener para sí cierto 
numero; pero tal aberración sería más 
rara dc lo que puede decirse, pues to-
do el mundo apreciará que una obra 
para reemplazar las galerías de nues-
tros muscos, lúgubres como cata-
cumbas, o nuestros salones bullicio-
chillones como las ferias, liu 
MMV ov «* . * „ , • - - - . q »»-«-•- —- -, - -.- - , o e la m u r e n a ue la n i w u i m u u u nac ía i " vuuwi v u u v eauua u u i E i u , ,ua uu- . , , • • ,, 
no ha recibido un ultraje en este país cano nos esforzamos por hacer enten- v e r d a de ro fin; la satisfacción de to- jetos dc lujo, ciertos comestibles más
 , l c a r t . e d c b e permanecer en un medio 
por el solo hecho dc ser mexicano? der a los proletarios que ignoran necesidades y de todas las as- o menos caros, las obras de arte, etc., apropiado, y esos medios, sc crearían 
fauién de vosotros no ha oído relatar nuestros ideales de reconstrucción so- ¡ r a d o l w s A u n q „ / a e han encontra- etc. 
los crímenes que a diario se cometen «al que la solución del problema del ¡j resistencias en la evolución En cuanto a les objetos de lujo, ha-
ca personas de nuestra raza? í N o s a - hambre no esta en la subdiyis oii de sociedades, se las ha olvidado bria que analizar lo que les hace ac-
en nuestros días. Los que nen tualincnle estimables, hs preciso J,U!' - . . , , , , , 
harán bien acordándose de ello, descartar de anuí todo lo referente al l ; i actualidad, los cuadros los acapa-
nfort, porque la idea de la como- r ; i " seres presuntuosos, jiue los creen 
lad no entraña en sí la de la rare- necesarios, indispensables, para la 
de los productos o la dificultad de afirmación de su rango, o por mama-
** - • lieos. La primera especie desapare-
cerá de la sociedad futura, y los úl-
timos serán cada vez más raros a 
medida que sc llegue a una compren-
sión más sana del arte desembaraza 
otra parte, es cierto que mien-
tras haya en la sociedad necesidade; 
se os ha dicíio nunumou» ««. " • " " " >»«.«««, ™ « • « ' " " . ^ ' ^ Z ' ' ^ " " " ^ ^ «o satisfechas—sobre todo esas ne-
abajo: aqui no se sirve » mexicanos? h,, y pac ías a esas e t«nas convit - ¡ d a í l e s i a o s i b ] e s a t i s f a c e r procurárselos. Es perfectamente rea-
¿No sabéis que los presidios de los „ o n e S ]0s míen bros del Par do Lt- i l i m e d i a l a n ; e i ] t e _ _ f ¿ n . b e i l ó n i e g i t i . | Í J E a W e p a r t t t o d o s . El lujo es otra 
Estados Unidos están llenos de mexi- beral Mexicano tienen la oport»n™d. p e r m a n e c e r a S l . s p c n dida sobrl la cosa. En nuestras sociedades, divi-
canos? ¿Y habéis contado, siquiera, q u e c 0 „ 1 0
 v e ^ a ^ c « V i r Í Í Í w í 3 « cabeía de los que impiden su satis- didas en castas, tan numerosas como 
el número de mexicanos que han su- aprovechan, de propagar sus ideales f a c c i ó n N o c s
l
p 0 s i b l e soñar con la variadas, hay un gran cuidado en cada 
bido a la horca en este país o han pe- p o r medio de la palabra y de a ac- | a f r a l e n i i d a d m i c l 1 t r a s e s t o s una de esas categorías de hombres, 
recido auemados por brutales multi- ción, teniéndose como resultado el J í " ^ £ " * ¿ l \ " " 
u d e s ^ f g e ^ t e blanca? que varias regiones de Jo qi .ese llama ^ ¡ ^ ^ ^^ ^ ^ t o ü a í 
Si sabéis todo eso, ayudad a salvar República Mexicana estén en poder b > ^ ^ s o , u d o n e s d e l a c l i e s t i ó„ so 
Esta considera- en no confundirse y en no dejarse 
absolutamente todas confundir con una clase inferior y, 
a vuestros hermanos de raza presos de poblaciones comunistas que saben a» „rórroKas inútiles 
a vuesirob C o | l t r i b u y a m o s t o d o s Con a la vez labrar la tierra y pelear en ^
l tomo prorrogas muuies. 
nuestro cerebro a su defensa. Ejemplos^ el Yaqm, la 
en Texas, 
nuestro dinero y 
para evitar semejantes confusiones, 
Desde hay numerosos signos exteriores 
.... _. .rabajo, son seres de poca . _ _, 
oluntad que siguen el medio en que «dad Media, los enfermo» no tenían 
se encuentran. En un medio de gen- "íngún derecho al cuidado, y no hace 
tt-s ociosas se dejan llevar por la ocio- jnuclio que sc ponía cu blanca a los 
sidad, y en un medio de gentes acti- '^cos y sc Íes trataba peor que a los 
vua sc hacen activos. Existe, pues, un preso». 
cu can zumiento causado por el medio. Ueiitro dc algunos siglos se cstu-
Algunos pocos individuos que en c=- <jiara con sorprendente dolor el caos 
las condiciones serían refractarios al de nuestra sociedad actual. -Vuestros 
trabajo, serian entonces los enfermos "ietoa apenas si podrán concebir esta 
sobre los que las medidas cocrcítii-as acumulación inverosímil de íniquída-
110 ejercen ningún efecto; en todo ca- des, _ de ilogísinos monstruosos en 
so, su número no sería suficiente para «u-dío de los cuales nos revolvemos. 
justificar la introducción en la socie- -hntonecs, los que se ríen, por mucho 
dad futura de un rango parasitario en- (l«e llegue a descubrirse en la hísto-
cargado de vebir ;i todo el mundo que r ' a de los tiempos, los que ríen serán 
concurra a la obra social. Ese es apreciados tan duramente como Ca-
lino de los riesgos contra los cuales ton, cuando aconsejaba dejar morir 
el comunismo asegura a la sociedad, de hambre a los enfermos en lugar de 
como ya se ha dicho más arriba. Sin cuidarlos. 
, , , - , . . . . , . embargo, para preveiír todas las hí- Los comunistas, por lo demás, son 
lo del letichismo que frecuentemente n ü t e s i S f s e p u c d e igualmente conside- tranquilos. Han asistido, confiados, 
le acomp-uia, y ,, medida que un ma- ,..„. ,.( eventualidad en que una frac- a muchos ensayos de comunismo eií 
yor numero de individuos pueda to- c ¡ o n n m y i m p o r t a n l e d c , a ] (0blacíón «uestra sociedad armal, sin que nín-
m.ir pane en un goce. rehusase cooperar en la obra común. S"na de esa calamidades previstas ha-
Vtenc ahora el último reproche di- j ; s t c caso no duraría mucho tiempo; >'a caído sobre la humanidad. Fácil 
Vivarlos, agitemos en su favor, decía- región del centro del Estado de P a -
rémonos en huelga por un día como rango, yaparte denlos_ Estados^de_Mo-
eí punto dé vístanle la producción y distintivos, que constituyen el lujo. El rígido al principio, "A todos según cuarenta y ocho horas bastarían para es indicar ya en el caos actual algíí-
' -* - ' : x":~ *" ln " f : : A" A" " "a sus necesidades,* que favorece el pa- hacer una demostración que barriese "os embriones de la concepción co-el consumo, el comunismo se impone, lujo es, pues, la afirmación de una sus necusumues, que nivorece ci pa- hacer una demostración que barriese "us embriones de la concepción co-
sí se quiere llegar a una fraternidad diferencia de rango de las demás ca- rasitísmo. Es preciso comenzar por todas las resistencias, v no habría ne- munista que se han implantado per-
iv.» — . - ; - . . -,,-. . r ¡ t Michoa- «eneral. tegorías humanas. Así, el aristócrata declarar que nadie llegará jamás a cesidad de una medida'coercitiva. Se- fectamente. Ya no se paga como an-
una demostración de protesta contra reíos - ) i e ^ c o , - . J í P / "
 J o ' ' - ; l e p „ e M a Desde el punto de vista práctico, es correrá sus caballos, y el banquero depender de una sociedad en que el- ría una experiencia y una enseñanza, tes, el portazgo sobre los puentes o 
la persecución de aquellos m a r i i r e s ' y c a n l J \ ^ i i « ¿í,h¡tn«*M h-in to- igualmente la única solución admisi- tendrá su automóvil para distinguirse parasitismo sea formidable como en Bastaría con que durante cuarenta y por pasar por ciertas vías; la calle y 
sí ni protestas, m defensas legales va- y ©tros en que ' °
s , n a ¡ ; ^ n t S % | ' " ¡Z_ ble. Es preciso considerar el comu- del zurupeto, que tendrá un coche de la sociedad actual. Y es bueno obser- ocho lloras todos los grupos cesasen la carretera son absolutamente libres 
len; si ni la agitación y la mielga pro- maao posesión ac:u; «<-n-, uc »«" nismo como uu seguro mutuo, no con- alquiler para elevarse por encima de var que nunca esta objeción lia sido de producir, y pronto las masas se a la comunicación. La enseñanza prí-
ducen el efecto deseado de pon-r * sas «e ios ainuuniu» y vic u » t r a ^ c e s e y J a g trabacuentas de la otra categoría, que menosprecia, y con formulada por gentes que no fuesen iluminarían por la ineludible necesi- inaria y secundaria y la misma ense-
los catorce pasioneros en a D S ? " " * ' a* traDaJ°- « i n f f t n m w con producción, sino también contra los la cual no quiere ser confundido. El parasitarias y pusiesen en obra sus dad de la solidaridad, y aprontarían ñanza superior, se dan actualmente 
bertad, entonces, insurreccionémonos ^0. no nay que ^ " ™
T " " j ! ! L r J Í 0 accidentes, la vejez y todo lo que en gerente llevará sombrero de seda y diez dedos. Échese la cuenta dc los su concurso adquirido en adelante. gratuitas en un gran número de paí-
levantémonos en armas y a laj "y"1* «par tos a e w n ™ * • ^ H."^ " m í m l a actualidad coloca a los hombres en guantes, para señalar el abismo que parásitos que contiene París en la No parece oportuno, ni es posible scs. Los museos, las bibliotecas, los 
ticia respondamos con la M r n « " ¡ * * t o a ? RaVÍ " , n " ' ° r £ nht ín í r este re-
 u n estado de inferioridad social, los le separa del viajante. La mujer del aristocracia nobiliaria y burguesa con dar desde el presente la imagen de la parques, son de común disposición, 
la dinamita. Conteniónos. i¡>t»"« no íntuviauai, / J ^ ^ ^ J 1 p ^ , , l n T tm unos enfrente" de los otros. Este es empleadillo empeñará sus muebles pa- sus servidores, en el ejercito, el clero, sociedad futura. Semejante sociedad En un gran número de localidades el 
millones! 
¡Viva Tierra y Libertad! 
RICARDO FLORES MAGON. 
soltado, los_n"^m l* r o^ ^1Jp
a
te
tli,u:han ün'gigantcsco seguro, cuya cotización ra "distinguirse* por sus_ trajes deMa la policía, la magistratura, las adm¡- no ha de "decretarse; será el resultado agua potable es cratuÍta.'"_Sín eníbar-
oerai Mexicano no n < . tnrin d irfihüin At* ffirln iinri sin itn psnosa del nhrero cine vive en el mis- nistraciones nolíticas v nrivadas. los Ac hu ,M'irnnetnnriac v *!*> l-ic <>/.1OHÍ. en. inmás so ha w¡<trt eiii-n-,̂ OKMC» en grupos netamente libertarios orga-
Adelante. pais, propagan en campos y puublos 
, ,- los principios salvadores contenidos 
E1 capitalismo internacional esta e n ( | M a n ¡ r i c s t o ¿c 23 de Septiembre 
jugando otro de sus triunfos en las ( , e ] g ] 1 p r ¡ n c ¡ , , ¡ o s que abogan por la 
conferencias de Niágara Falls, pre- ¿ ( . ^pa r^ i i n p a r ! , siempre de la Au-
tendiendo cortar asi de un solo golpe t o r i ( l a ( 1 c l Capital y el Clero, 
el vuelo del águila proletaria en el y BQ ] ) ¡>ra a ) l j ia ¡„ t ensa propagan-
espacio mexicano. da dc l o s miembros del Partido Ltbe-
Ya la soldadesca de amarillo acó- r a ) ¡ , [ e x ¡ c a n 0 , pues muchos de ellos, 
gotó Veracruz, dejando marcadas sus a t u | a c c s e inteligentes, sientan plaza 
huellas asesinas en las paredes y mué- d e J^J^,,, m \¡¡s filas dc carrancis-
bles de los hogares mexicanos y Ha- ( a s h v l l , r l ¡ s t , l s p a r a educar a los pro-
ciendo bajar a la tumba jóvenes y l e t a r i o s inconscientes, y los efectos 
niños indefensos no culpables de otro^ ^ p r o l , a g a n ( i R todos los sabemos: 
crimen que el hallarse en sus casas g o n l a g deserciones en masa, rebebo-
a l i ado dc sus familias. . . -• ' ' 
Ya la traición de los Constltuciona-
listas abrió el camino a la barbarie 
del Norte para la repetición de sus 
actos salvajes de Cuba, China y Fi-
iPYa"los pueblos de Stld-América se 
suicidaron al entregarse en brazos del 
Yankee, ansioso de repetir en Buenos 
Aires, Rio Janeiro y Valparaíso la 
carnicería de Veracruz. 
Y el proletariado universal, con 
honrosas cscepciones, en tímidas pro-
testas, apenas si deja oír su voz. 1.a 
J . . . trabajadora mexi-ana que«'> 
= , » , , „ , , , , , , nnerianos o , , , , es totío el trabaio de cada uno, sin un esposa del obrero que vive en el mis- nistraciones políticas y privadas, los de ia , _ „ 
en grupos.¡™ l¡"""'"- ¿ s i n o u e | 5 . organismo administrativo parasitariomo barrio, y jugará a la gran seiiora bancos, cl comercio, la burguesía, y sc viiladcs que se empleen en ella, 
¡¡áreidos individualmente por todo el actualmente la descripción de su 
L.f. - . ." . ." . . . . . . . „ „ m „ „ i „ „,„.hln« | | T I . » | > x _ l l a "
e n l ( lc s c r ' d e SU organizado 
nes de compañías enteras de las mi-
licias dc los partidos puramente poli-
ticos y el robustecimiento consiqmen-
tc de la fuerzas de los combatientes 
de la Bandera Roja. 
Nosotros creemos que mejor que 
conformarnos con reformas ilusorias, 
debemos llevar esta lucha hasta el 
fin: la emancipación económica, po-
lítica y social del proletariado. 
RICARDO FLORES MAGON. 
ALPalo. 
Los politicastros Juan Sarabia, Fer-
nando Iglesias- Calderón y un idiota 
llamado Roque Gómez, conspiran pa-
ra que se transformen en revueltas 
. .-• — r , - ^ « ^ i L V n u e políticas personalistas el movimiento 
hace suponer que e lmi smo ^ideai^ue ^ ^ 1 ] e r m a n o ¿ A r r i e t a e n Durango, 
¿Continuará su lucha contra el sis-
, ¿ ' ¿Se rendirá? ¿Se dejara em-
baucar por la llamada reforma agrá-
rin? El porvenir lo dirá. Pero todo 
ha cuiado a las peonadas en armas 
desde el principio de esta grandiosa 
revolución, seguirá imperando y cuai-
que se inspira en los principios del 
Manifiesto de 23 de Septiembre de 
1911, asi como los jnovimientos _de revuiuwv», - v S - * - í y i i , a s i c o m o iu¡. IHUVUIUCHIUB « v 
quicr tratado que arreglen los mag Herrera en Chihuahua y Pa-
nales del capitalismo m j » ™ * » " ^ rral, que van dirigidos contra el per-
pié de la soberbia catarata, « o a t a r a h ¿ , £ , a b l i r g u e s í a i y e í m ovi-•• . i i«««« ni mucho sonalismo y la burguesía, y • 
al proletariado mexicano, m mueno m i e n t o d e ^ l o s h e r m a n o 8 Qnevedo y 
menos sera respetado por este. revolucionarios de la región de 
La lucha por pan, t i e r r a y j J a ^ ^ G r a n ( l e S ( d o n d e € S 0 S h l c h a d o -
continuara en^ territorio mexicano y ^ ^ ^ R ^ Q ^ e x p r o p i a c i ó l l p B r a 
cualquier gob«r«? .W* " J°S0„"f;_ el bienestar de todos los habitantes en la ciudad de Mexicej, sea el consti v i s i t a n 
tucionalista, bajo el amparo « j a s g Fernando Iglesias 
circunstancias y de las colecti- go, jamás se ha visto surgir abuso 
Dar alguno en estas experiencias empren-
su ma- didas. Hace algunos años hemos es-
ser, de su organización, es t;ido cerca dc dar un paso más. La 
forzosamente exponer puntos de vis- idea del pan gratuito, de Barrucand, 
ta personales sin valor alguno; sería ha estado a punto de aceptarse, por 
también creer que la concepción del que encontró en el público una aco-
oniuni'smo no es perfectible. Enton- gida más favorable de lo que pudo es-
ees habría que esperar, por lo contra- perarsc desde luego. Esta idea no 
río, que la humanidad se detuviese en se ha perdido; aparecerá en el mo-
sii nnircha de avance. El lejano ful- mentó oportuno, y con ella pasare-
fíor que concebimos por encima del mos a otras cuestiones que esperan 
horizonte, no debía ser cl faro de la aún solución, a menos que la revolu-
escala próxima que nos prometemos, ción social avance en este momento y 
y desde que vemos otro mas apartado exponga el gran problema con toda 
y prometido, nos es preciso hinchar su amplitud. 
las velas, sin ocuparnos del que he- Los contentadores del ideal social 
iros esperado y del camino ya reco- no pueden detener la marcha de avan-
rrído. • Xo hay lugar para exponer un ce de la humanidad; lo más que pue-
sisicina de organización; a lo más se den hacer es enarenar la rápida pen-
puede responder a las objeciones lie- diente por donde va dirigida; el fre-
chas. con la aplicación dc los princi-
pios, indicando una o varias solucio-
nes posibles. 
Cuando se habla de una sociedad 
futura, se sale al paso con frecuencia 
no está gastado, y pronto quedará la 
calle libre. El descenso se transfor-
ma en avalancha. Ella arrastra las 
iniquidades de este mundo. 
A. DE MALANDER. 
£1 movimiento mexicano por Tierra y Libertad tendrá que extenderse por todo el mundo, pues la causa 
del desheredado es la misma en todas las naciones de la tierra. El pueblo insurreccionado se apoderará de las 
grandes fábricas de armas y al grito de l |Tierra y Libertad! asaltará la ultima trichera de la sociedad capitalista, 
en la que clavará la hermosa Bandera Roja. Los soldados de todos los gobiernos han disparado el último car-
tucho en defensa del Capital, de la. Autoridad y del Clero, y al ver que las fábricas proveedoras de medios de 
¡¡.ui, w«j» — *"",'1~j"vi-»torial Juan Sarabia, i-emanoo iglesias destrucción han quedado en poder del pueblo, quiebran sus armas y se lanzan unos sobre los otros para darse 
barras y las estrellas,_ o el ° 1 " ^ , Calderón y Roque Gómez, son unos un abrazo de hermanos y unir sus fuerzas a las de los proletarios triunfadores. Los czares, los presidentes, los 
de la soldadesca mexicana, t e n . " . ^ , embaucadores, cazadores de puestos reyes, tratan en vano de arengar a sus tropas para que sigan sosteniéndolos. Uno de los mismos que fueron sus 
frente a las masas en armas, avioas p u o i j c o s como lo han demostrado esbirros, les marca el alto y les grita: ¡atrás, tiranos! ¡La Revolución ha triunfado! 
tomar posesión completa dc la rique- ^ ^ ^ M a d e r o s u b i ó a l p o d e r E n 
za social. , , 
La lucha seguirá adelante. 
ANTONIO DE P. ARAUJO. 
No 
aquella época, esos bichos fueron los p r o n t ó a tragarse la mayor parte de paar imponerse a la 
más ardientes defensores de la paz, y i a s r e s e r v a s acumuladas por la pre- ba abajo de la esc; 
a su actividad se debieron las traicio- v ¡ 8 ¡ o n í *• • 
nes de Salazar, Alanís y otros mente- E l gran reproche dirigido a la fór-
catos que se decían defensores de la m u j a » A c a ( l a c u a ] s e g ú n S u s n ecesi-
causa del proletariado, y sin embargo, dades" es que, no estando reglamen-
se vendieron a 1a burguesía y a la 
Autoridad. 
No admitáis, revolucionarios; 
portera. De arri-quedará uno asombrado. Sí se esti-
La Revolución Expro-
piadora en México 
. Es indud&bte quw Jfltéxico,—apesar do. ¿Y qué han/ganado esos-pueblos._ 
de los anarquizantes, mal que les pe- en el problema de la verdadera líber-' 
;se a l a s plumas a sueldo, y a toda la tad? ¡Nadal y de ello está conven-
jauría de hidrófobos y prófugos de cído hasta la saciedad el pueblo dé-
las filas anarquistas,—arde en inmen- los Aztecas; y dc ello están convenci-
sa revolución expropiadora, que no se dos todos los pueblos, 
apagará con el triunfo de Pancho Vi- Ño es preciso, para entender la 
Ha, ni dc Carranza, como no se apagó Idea anarquista ser un científico; no 
con el triunfo de Madero sobre Por- es preciso ser médico, jurisconsulto, 
firío Díaz y de Huerta sobre Madero: profesor o catedrático; el más igno-
podrá a lo más, sufrir débil retraso rantc analfebcta la entiende; así, que 
la Revolución Social en ese pais, con decir que en México no existe la 
la subida al poder t!e un nuevo tirano cuestión social en el campo de batalla, 
que, como los demás, protegerá el es un aberración porque por su mise-
derecho de propiedadindividual, pe- ria es por lo que el pueblo proclama 
ro en seguida los trabajadores nueva- ] a comunidad libre, desconociendo tó-
mente empuñan las armas y conven- do derecho de propiedad individual o 
cídos una vez más y desengañados, se colectiva, desobedeciendo las leyes y 
unen a las partidas de la Bandera las religiones. 
Roja que hoy luchan por Tierra * L o n i a s U b e r a l q u e e n e l o r d e n p o „ 
Libertad para todos los habitantes de , í t i c o s e n a o d i d o d a r a e s e p u e b l o , 
.México, hombres y mujeres. f u é , a „ Constitución de los Esta-
No comprendemos, ni comprende- d o s U n i ( | o s Mexicanos, dictada por 
escala social se ve es- ma que quizá una décima de la pobla- remos nunca, por qué, hombres que ?, L T , „ £ liberal m,?T*.sfin en 
•a a f i r m a r fiíi ímiah lnd c o n suf re v t ra tala n n r im t rabni r . c* l l ™ , ™ ™ ™ . , ; C , L „ „ „ „ | ,^K-1„_ el h o m b r e m a s l ibe ra l q u e CXlStlO e n te cuidado, para afirmar su igualdad ción sufre y trabaja por un trabajo se llaman anarquistas y, que habien^ 
con una cierta categoría de gentes y verdaderamente útil, ¿cómo puede do estado estudiando el actual movi-
su superioridad sobre otras catego- hablarse de parasitismo cuando se miento revolucionario en el mismo 
. . t _ rías. • El lujo, esos signos distintivos contemplan todas esas legiones de se- campo de operaciones en México y 
tado el consumo, no podrá menos de sobre todo, crean las clases y, si en res humanos que jamás concurren a desde allí escribían diciendo que la 
. producirse el abuso. Este, según los la actualidad hay menos distintivos, la producción que consumen, sin em- revolución era estrictamente social, 
n , n " adversarios del comunismo, resultará debemos de felicitarnos de ello en es- bargo, en proporciones desmesuradas? hoy se empeñan en negar el carácter 
México, el indio Benito Juárez y que 
no abolía el derecho de propiedad pri-
vada, por lo que resultó una nulidad 
para el sufrido pueblo trabajador de 
México. 
El Manifiesto del 23 de Septiembre 
de 1911 dado a publicidad por la Jun-
ta Organizadora del Partido Liberal 
itismo. todos los signos distintivos de la du- dos y desocupados de lo más bajo dc eminentemente religioso" y gobíernis- ^ " ^ ^ ^ " f t h í r n í ^ r l a l ? 1 0 , ! - ? ^ " 
e, parece quesa, podrá seguramente apostarse la escala social, sin mirar hacia lo alto ta, dice y llama bandidos y ladrones a f; " t - * • - " í l M ' , . u c V 
:„íi.wl„,-, *...- x„ t „ ___„__ :__* _ i..„i.__ ,._...._ ..~. ,i„ i - ,.....:„.i„.i .i i - •__ _ . . :„ ._ . . i - . . . k - u . . ...__ _ _ ,__ _- O l e m o s , 
Queremos 
Reformas. 
nnenoseen distinta psicología, y que guna proposición que os hagan esos ,ici acaparamiento, de la rivalidad por ta ocasión. En efecto; cl día en que Cuando se lanza al comunismo este expropiado!- de dicho" movimiento. 
ü ? n « u razonamientos parten de reptiles. Si llegan a visitar vuestros | o s objetos de consumo más o menos la portera pueda tomar del montón reproche, se piensa en los vagabun- cuando periódicos como "El Pais," p *cvt enteramente divergentes, campamentos, coleadlos en seguicia r a r o s y d e | estimulo al parasitismo. *~'~° *"- -
! .»:..*:-.: .i~ i- ^.. .1— .. -i— .1-.. .1- 1 A. I...:- .1 . —: .- __.?_._-. 
S,r.»T ,li-,metralmente opuestas son sus para ir acabando con esa raza de yl- P o r o c o q u e s c reflexione, 
« n v i S e s Tconómicas. ooliticas, boras. Ni las balas de los carrancis- • F • •• 
filosóficas, sociales 
tisticas, lleguen, 
de acuerdo en 
Mema tan co: 
movimiento 
xíco-
Los dos hombres son El México de hoy no es el México 
nuestro colega "Tierra y 
de Barcelona. 
hombre, traza en la lucha política, í 
cial y económica de ese país, nuevos 
icontrar s.empre pastan- cansado como esta, desengañado y J ™ f « ™ ; ' ^vand 'o T puebíom a
t apo-
1-—' - . - •—— - . — - . - - „ . , „ .1 » - ' •"•- • " - K J » " . . - » . — -• --• ..«.» v,ut l c . . . c l . . „ t . t ™ » s hambrientos y embrute- convencido de que las luchas políticas „ . ¡ . „ " . : K ™ . « % m T v X . 
giones mencionadas, ' e n e d l i s t ó e l ¿^ E s t a m , s m a circunstancia ex- Es menester también llevar la dis- cidos para prestar sus fuerzas a los no emancipan a los pueblos porque sesionarse ac 10 que es suyo y oiré 
LOS d o s h o m o r e S SOn: n u u r . , " » —••«. « '. ' V . — . f J 5"**-" a t «^uui.11. vis «un u m i w u MCIHI uc v iv i r nict!, tuuiuu»i i icMic, iu j u , nú u c u c su rp i e i i uc í 
Wiíson Presidente de los Estados cuales no están bien preparados toaos anormal de su producto, porque todos que será relativamente bastante fácil bria mas bien que admirarse de que de hace una veintena de años; porque 
Unidos' v Ariel un colaborador de los proletarios, y de ahí el peligro. i o s productos se encuentran siempre de realizar. Por esa parte no hay se pueden encontrar siempre bastan- cansado como está, desengañado 
miéstro colega "Tierra y Libertad, Asi, pues, revolucionarios_dej las re- a i a j ¡ b r e disposición de todo el mun- nada que temer. tes esclavos hambricnti
 - • 
1 Barcelona. s w v a ...... —, -— - u v . *~ai.i uuaum «.ii\.u>iaL(ini.iu w ^ iiiciiesrer ramoien llevar ia uis- cnios para presiar sus lueizas a ios 
Ambos opinan que, subdividiendo mecate para cuando se presenten esos c ] u y e e n absoluto la ¡dea de monopo- elisión al nivel de la cuestión del es- trabajos que se exige de ellos. El 
lrtB latifundios en pequeñas P R O P I E - tipos ante vosotros. lio en un espíritu de lucro. ¿Quién tómago, ya que ahí ponen con más trabajo actual, en la mayor parte de impongan el derecho de la fuerza *de 
L°» latitum""» — Í „ 2 „ . . : J . . „„ , ,„ i„s D e R o ( l u e Gómez no_podemos de- COmprará al acaparador, después • • " • ' • 
n s n t f s Dará ser repartidas entre los _ . - - - . - r — ,.—. 
¡;.„¡w.« se aseguraría la paz en Me- cir que es inteligente. Ese es un po- q u e c a d a u n o t e n g a s 0 p a r t e ? 
p e o n e a , « B o r ,j , „ „ - r t folfn Ar> .HP^IHQ V Ae n o n - ~...í i_ £ 
de frecuencia sus argumentos los que no sus ramos, contribuye a degradar y a una clase sobre otra, es decir: divi 
. . . ,— „ , - ^— _-..„ „— .„. .0 . . — , ¿Con tienen confianza en la repartición co- embrutecer al hombre. En cuanto a diendo a la sociedad en explotados y 
- denco: pero falto de ideales y de non- qU¿ i e c o m p r a r á , ya que el dinero munista de las riquezas. Según és- las condiciones higiénicas y de segil- explotadores, haciendo de la verda-
Tliee Ariel en un artículo titulado radez, cambia de chaqueta tres o habría de desaparecer en una socie- tos, debe temerse en esta forma so- ridad en que se cumple, habría que dera í t tea una corrupción que la con-
r-"1. .. ? . _ _ . . " mía x n o r p r i n t f r l c t u t r n irPCPC ni Pllli. Ú l t i m a m e n t e tUC rl-nl enmniunf i i ) • C*nt% al f,--ili^ in? riinl n..« __n^!n¡tnn tnr lns n nk_^ , l n n : _ „,,.nt<!c<i,..n ..n»n t^^tni. AQ n h o r - VlCrtfi Otl Sni ioi l l l V Cfl CiOtnorr i 
__ ... _ que es suyo y > 
^„t.^ v • i, .~ ciéndole su verdadera libertad: la li-
S S L ^ . ' S ' S S S J Í ^ S ^ L ^ b««?d del.hombre sin trabas que lo 
humillen, sin religiones que lo embru-
tezcan, sin gobierno que le tiranice y 
sin burguesía que le explote. 
Dice Ariel en un articulo muwu" íauez, unmuio u^ *-':,**"'— ". . ¿ "auna ae aesaparecer en una socie- ios, aeoe temerse en esta lorma so- ritlaa en que se cumple, naD 
"Ul indio mexicano," que aparecieren cuatro veces al ano. Últimamente tue a a a semejante? ¿Con el trabajo? cial que se precipiten todos sobre decir muellísimo para tratar d 
, ' ! ' _ „ a e "Tierra y Libertad co- huertista después de haber sido miem- i g u e ¡nut¡i s e r ¡ a e s o | g) mismo acá- ciertos alimentos escogidos. Todo el dar la cuestión. En las clase 
. L . ^ ñ d i i - n t e al 20 del pasado Mayo: bro del Partido Liberal Mexicano. parador no tendría tampoco sino to- mundo querría trufas, champagne, sociedad actual, el obrero nc 
r respoi iu i i ; i i« - " I n l o n n n oAl n a l n *./*« t n d n e el lo*. «*.,,- A~i « . n n . A « n n « n n « n » . . - n . D « ....« . . _ w I :_..! . . :i .... , - . . 1 . . . : . . .. i„ :—:.i 
Xadie podrá negar esta que es una 
verdad, solo lo negarán los que tienen 
ínterin, no Al palo con todos ellos. 
R. F. M. 
ases de la .Las revoluciones políticas y reli- X T ^ ' ^ T ^ t r T t t ' X ° -
..... . _ no puede giosas han muerto, han fr.isacado, "* J x l " ^ " ,''í "'!,' S^víndido» /mulos 
mar del montón para procurarse ese etc. Esas apreciaciones son pueriles amar sn trabajo, y la ociosidad y la porque revoluciones politicas y reli- p : i '¡"J ' ' Hiimuu. . i i i im 
talón de cambio, para tener la repre- y, aunque no sc ha hecho la expenen- pereza sc explican, habiendo también glosas las hizo Guillermo Tcl, llevan- \ u ' c | a n , e c „ ,„ 0 i ) r a de expropia-
•Y ouede asegurarse que ínterin m 
se reoartan las tierras, desaparecien- „ « — - . * . — ' . — --,--- ^, „....M— .™ „- ,.^..^.. ,-....... 
AL I«= tütifnndios. subdivididas en pe; O O O O O O O O O O O O O O O O O sentación de lo que quisiera vender, cia, la cosa se desmiente todos los derecho para extrañarse que no sean do sus huestes de esclavos para . ; :v, v " " ' " " " ' " t ir; ' ' ' r«ifl 
ouYñas propiedades, México .sera o O Los cambios, los trusts serían efecti- días millones de veces. En Succia, más generales. Es verdad que se pro- instaurar el reinado <lc los Saboya; C"S"- "' lc„'>¡?„'"cx•';" ,0;.*1"„ dj,?lrtnd 
quenas propieu» .a, ___t _, M Í > Ac a a n n e k a n t i r , n n n n a a a „ . . : . I K I „ .. :u _ v „ . „ . . . ., .1 . . . . ' " ,,.... .1, raii.,¡vfl» ,,„„, , „ ™ i „ . | „ „ . . „„ll . i„„. „ „ i u . , . , 'u, deros hombres que tienen dignidad 
quenas p rop ic iaba , - ; - - - r - ta A - A 
íiempre, como hasta aquí, el país ele 9 
las eternas convulsiones. o 
Nosotros no opinamos ni como © 
Artel ni como WHson precisamente a 
porque somos antiautoritanos, esto g 
es, anarquistas. Esa repartición de o 
tierras tendría que ser hecha por un o 
íohierno lesionando el llamado dc- o cobierno lesionando — . . . 
?echo de propiedad de los neos, y to -
dos los anarquistas sabemos que mn-
aún gobierno se atrevería a. hacer tal 
losa, pues faltaría al principal com-
nromiso que tiene, y que es, el dc ve-
far por los intereses dc la clase capi-
' " p o t l o demás, todos los »nnrquistas 
. . . „ „ ; « convencidos de que el d e « -
OOOOOOOOOOOOOO 
O O 
O GRAN BAILE O 
O O 
OOOOOOOOOOOOOO 
organizado por la 
MAY DAY F E ü E R A T I O N , 
para las 8 de la noche del 
Sábado 13 de Junio, 
en cl 
BURBANK HALL, 
(calle Main, 542, al sur), 
a beneficio de la defensa de 
vamente imposibles, y no.se concibe sc acostumbra, antes dc cada comida, pone una cantidad dc paliativos para revoluciones políticas y religiosas las 
que un ser de sano entendimiento pti- tomar un aperitivo frió, que se com- hacer soportable el trabajo. Pero no efectuó Napoleón para instaurar su '!° sf 
diese soñar en acumular objetos de pone de una centena de platos dife- hay que hacerse ilusiones; los parla- despotismo sobre el pueblo; revolu- ' ' " ' ttl 
los que no podría en modo alguno ob- rentes, desde los más raros y más ca- mentos 110 votarán jamás sino una clones politicas y religiosas las hizo 
tener ninguna ventaja. Acaparar se- ros, hasta los más comunes. En los parte ínfima, cl explotador se las com- Catón «c Utica; revoluciones poliu-
ria, en estas condiciones, un género restatirants, este aperitivo constitu- pondrá siempre para no aplicar sino cas y religiosas las hizo Pedro Ar-
de cleptomanía en general poco peli- ye una especie de suplemento grattli- el mínimum dc lo que se haya votado, lmés y Tomás dc Torqucmada, parn 
groso para la sociedad. Sin embargo, to prclímínnr a la comida Nadie ja- En la práctica no queda nada. Por imponer cl poderío del vaticano in-
se podría concebir que, con cl fin dc más ha podido comprobar que se lií- cicmplo, en las famosns reglamenta- <|lusitorial sobre el Luternnismo pn-
tener bajo la mano un cierto número cíese dc él un consumo mas grande ciones del trabajo que ce han visto gano; revoluciones politicas y religío-
dc conciudadanos, un pequeño grupo, en.tal o cual entremés, porque fuese aplicadas en Alemania. Es preciso sas las hizo Lutcro en Ginebra y luc-
que 
porque antes que ven-
der sus plumas las rompen. 
¡Seguid, seguid, que la historia 
atenta siempre dará la razón a los 
que de su parte esté! ¡Seguid vues-
tra obra de redención! 
ANOEL MARÍA DIEPPA. 
Nueva York, N. Y, 
se. llegase a apoderar de una cantidad más raro. La cuestión 'de la rareza haber vivido cu los talleres alemanes go en Alemania para implantar el 
la más pequeña influencia en pnra saber lo que queda en la iirácti- "derecho" de la burguesía sobre los 
estamos convencidos.de que c. 
" : , Ao orooiedad individual es la 0 
'ti 
rt 
1 
¡lase en paz "el pais »» •••- v - i n [ . . 
convulsiones" si se perpetua el infa 
C h ° l í e la™«cU¡vltud « » J 5 m i í ' * ^ m
l ñ 2 ¡ A s i s , t i d ' camaradoal 
tica y 
dores presos en Texas. 
Ayudad 
CIENCIA MEDIOS. BIVOHJOIONMUi. 
. . . . . ., , .._ „ . . . Mnnaal <to FWotprHptn y Formularlo de TCTS-
Entre ese país y los denlas, en residuos pútridos de la plutocracia: ¡ ¡ ¡ ¡ S , » * ¡ ¡ . b S S " i a j K i S
r,'SSK..'„"&. 
en ln HnMnrt flo_Jo|tss_ la» .fnfwnwitadM y r* 
o« A loo proletarios U adqv 
- , , . , . - . -- „ , -- , ..v ^^... .mnortante obra dp la que wt »i..~ _. 
Y es porque para las vituallas, ro pueda determinar él mismo en que rrancesa, siendo su continuación Ro- compniíero noctor Lueinno soto, r^t» obra ea-
•* ̂ i i F _ 1. i...- .._ . i ! .•_..- - .1 .1. . _ . . ' Í I _._ . f. _ .1. . * 1 .1 i_ _t. - 11- aniin ol Ttmilld ili> pnmliHtlP )*• #nfprmpdaa«s aln 
tal de un producto mas o menos raro, no tiene 
, „ „*. ... -- Q"c realmente por eso le luciese dne- tales circunstancias. El consumo se ca. - , . . . . . ... , 
O Rangel. CUne, d i n e r o s , Alralde O ño de dictar condiciones. Por tmn Imce atendiendo a la consideración que nd sc ha hecho nada, la diferen- revoluciones políticas y religiosas las ,.„ 1(, ,„ ,„ ,1V ,„„„„ ,..„ r „ m ^ v m w m t »» 
O y demás compañeros trabaja- g parte, se puede admitir que la p*oduc- del gusto de cada uno, a lo que es cia es casi nula. Todo eso no podrá lian hecho Camilo Desmoulins, to- curación SIN MHpiarfAS «i OPBRACIOSM. 
A~..m ™«Bne «... TV*n«. O ción no tardarla mucho tiempo en aficionado de una manera más origi- cambiar sino cl día en que cada obre- man a sangre y fucíro la Bastilla ,,/e8ST?mB™nto otra de u quo w S t *í 
restablecer un estado dc cosns más nal. Y es porque para las vituallas, ro pueda determinar él mismo en que Kranccsa, siendo su continuación Ro- conipnuero noctor Luciano soto, r^ta obra ea-
normal, y, por otra, una toma dc po- como para los obietos de lujo, su ra- condiciones debe verificar su traba- despierra y, luego, el populadlo 11c- ¡ T ^ c o ' o l ^ 
sesión semejante serla siempre muy reía y su precio es lo que les hace jo. Ese día, la tarca del albafiil será vando a la guillotina cl 93 a Luis XVT in oi>ra. oí hombro y ia mujer «.no«n mojw «u 
1. i_ t. 1 . . . , . t r a c t ivn como la del artista. Poro y a las mujeres dc la familia rea!; orfranjRmo. y, «a_rita *nonentran «pitcadow» 
S 8 v s o c « A l d e l p r ^ ^ ¿Cómo 6 aTaTv'ar a los presos c'on el . . 
r.ii(.¡Í.rnmos creer entonces q«e que- o corto precio de vuestra boletos O precaria, pues la fuerza no estaría pa- que se busquen; pero los gustos del tan atractiva como i« ue, ¡iruaui, rero y a ms nuyvre» uc m i¡tiu.n¡i ! « » . ¿'ASoíii««"3n 'i« n',»¿e™ d '̂«ir>»«>' «íñ"~*¿£*iáiá 
Snse en paz "el pa»» d e ,Í I S e. tc. rnr
a9 ° d e «nt»« Ial X r í l d e f e n V e r í °
s P«vilegios injusta- individuo por cl contrario, sc despa- no basta con hacer soportable cl tra- revoluciones politicas y religiosas, cu *{ermmmuL 7 K > í « o í w í f l j 1M 
"SSSS£S ^ ^ . ^ ± OAVMISIO^.2^. 
mente adquiridos a expensas de la ñaman sobre todos los objetos por bajo; es preciso que lleguea ser agrá- fin .las hizo Jorge Washington y Lin- imticna. 
masa. El acaparamiento débese, pues, encima de esta consideración, t o s dable; y en tanto que eso no ac al- coln proclamando el derecho del míe- i-1*0» ™-* 0TlM Hnnnnw loa müMoa al Oootor Luciano Solo, m e d e r e c h o d e i a p r o p r e u * » , • " w í f S T S i M « . A M A A # I A i *. »-..,--........—.™ - ^ w . , t . . . M ) c n w u r a u e e s t a cous iuc rnc iu i i . i«ux UHUIC, y yu L I IUV i\uv e w »u «w «»- v u m |H -vifliu.iiniu vi « « « • « • «v« i»»-- Hnsanse loa neflUloa al Oooi 
dual al subdividir las tierras "en pe- O O O O O O O O O O O O O O O O O «esechar a priori como un absurdo, objetos raros y de hijo se pueden, canee, existirá la pereza y será justi- blo política y religiosamente hablan- Aiwrtntio isss, tiahaim. cuba. 
http://no.se
http://convencidos.de
REGENERACIÓN 
¡JUSTICIA! 
El gobernante, el burgués y el clé-
rigo sesteaban aquella tarde a la som-
bra de un fresno que lucia vigoroso 
en el cañón d«- la sierra. 
El burgués, visiblemente agitado, 
estrujaba entre sus intima regorüetas 
un euadernito rojo y decía emre sus-
piro y suspiro: 
—'lodo ln he perdido; mi?, campo-;, 
mis ganados mis molinos, mis fábri-
cas, todo se encuentra en poder de 
los desarrapados. 
El gobernante, temblando de rabia, 
decía; 
—Esto es el acabóse; ya nadie res-
peta la Autoridad. 
El clérigo elevaba los ojos al cielo 
y decía compungido: 
—Maldecida Razón; ella ha matado 
la fe. 
Los tres personajes pensaban, pen-
saban, pensaban. La noche anterior 
habían hecho irrupción cu el pueble-
cilio unos cincuenta revolucionarios 
a quienes los proletarios del lugar ha-
bían recibido con los brazos abiertos. 
y mientras buscaban al gobernante. 
al burgués y al clérigo para exigirles 
estrecha cuenta de sus actos, éstos 
huyeron al cañón en busca de refugio. 
—Nuestro imperio sobre tas masas 
ha terminado, dijeron a una voz el 
'gobernante y el burgués. 
* El clérigo sonrió y dijo con tono 
convencido: 
—No os amilanéis. Cierto es que 
la fe pierde trereno; pero yo os ase-
guro que, por medio de la Religión, 
podemos recuperar todo lo perdido. 
Por lo pronto, parece que las ideas 
contenidas en ese maldito cuaderno 
han triunfado en el pucblecillo, y 
triunfarán ciertamente si permanece-
mos inactivos. Xo niego que esas mal-
ditas ideas gozan de simpatías entre 
la plebe; pero otros las rechazan, so-
bremodo las que atacan directamente 
a la Religión, y entre estos últimos 
es entre quienes debemos fomentar 
un movimiento cíe reacción. Afortu-
nadamente pudimos escapar los tres, 
que si hubiéramos perecido en las ma-
nos de los revolucionarios, la viejas 
instituciones habrían muerto con nos-
otros. s 
El burgués y el gobernante sintie-
ron como si se les hubiera librado de 
una terrible carga. Los ojos del bur-
gués chispearon, encendidos por la 
codicia. ¿Cómo; con que seria posi-
ble para él volver a disfrutar de la 
posesión de sus campos, de sus ga-
nados, de sus molinos y de sus fábri-
cas? ¿Xo habría sido todo otra cosa 
que una cruel pesadilla? ¿Volvería a 
tener bajo su poder a todos los habi-
tantes de la comarca gracias a los 
buenos oficios de la Religión? Y po-
niéndose en pié sacudió el puño en la 
dirección del pueblecillo, cuyo case-
río blanqueaba alegre a los rayos de 
un sol de Mayo. 
El gobernante, emocionado, dijo 
con convicción: 
—Yo siempre he creído que la Re-
ligión es el más firme apoyo del prin-
cipio de Autoridad. La Religión en-
seña que Dios es el primer jefe, y los 
gobernantes, soino sus lugartenientes 
en la tierra. La Religión condena la 
rebeldía, porque considera.que los go-
gernantes están sobre los pueblos por 
la voluntad de Dios. ¡Viva la Reli-
gión! 
Enardecido por sus propias pala-
bras, el gobernante arrebató de las 
manos del burgués el euadernito rojo, 
lo hizo añicos y arrojó los pedazos en 
dirección del pueblecillo como un re-
to a los nobles proletarios insurrec-
cionados. 
—¡ Perros—gritó—recibid eso con 
mi saliva! 
Los trocitos de papel volaron ale-
gres arrastrados por el viento, como 
mariposillas juguetonas. Era el Ma-
nifiesto de 23 de Septiembre de 1911. * * * 
Las primeras sombras de la noche 
'comenzaban a subir del valle, y a la 
luz crepuscular podia verse ondear 
sobre una casita del pueblecillo una 
Batidera Roja que ostentaba en letras 
blancas esta inscripción: Tierra y 
Libertad. El cobernante, el burgués 
y el clérigo gritaron agitando los pu-
ños hacia el pueblecillo: 
•—¡Nido de víboras: pronto te 
aplastaremos! 
Todavía lucían por occidente los úl-
timos brochazos que dio el sol al des-
pedirse; las ranas preludiaban su 
acostumbrada serenata, libres, felices, 
ignorantes de las miserias que hacen 
sufrir al hombre. En el fresno, una 
pareja de zenzontles se cantaban sus 
libres amores, sin jueces, sin curas, 
sin escribanos. La belleza apacible 
de la hora, invitaba al corazón huma-
Abriéndose Camino 
El Par ido Liberal Mexicano con su poderosa arma, REGENERA CION, se abre paso destruyendo los obstáculos. El sol de la Anarquía br illa a lo lejos como una promesa 
sembrado de obstáculos. El Capit al, la Autoridad, el Clero, todos los prejuicios, todos los fanatismos religios os, todas las preocupaciones se oponen 
" descargar el golpe mortal que hará rodar sin vida a todos los enemigos del bienestar y de la libertad de la 
no a manifestar todas sus ternuras, y b e l l í s i m á ; e í camino es largo, tortuos 
a los sentimientos, a materializarse en -
una obra de arte 
Haciendo estremecer hasta las ro 
cas, un grito formidable bajó rodan- - ^ — • - • • ^ — ^ - ^ — ^ ~ " ^ - ^ - ^ ^ — ^ — ^ ^ ^ _ _ ^™^™»««..^«™« 
d o J ? o r Ia cañada: ¡quién vive! la vida a costa del sufrimiento de los ( , u e comenzó el 20 de Noviembre de esos 
al paso del luchador, pero éste, robus to, enérgico y sin miedo está listo a 
especie humana. 
El gobernante, el burgués y el cié- humildes; ellos habían mantenido a la 
rigo temblaron presintiendo su fin. humanidad en la ignorancia y en la 
La noche había acabado de sacar de 
su baúl todos sus crespones; los zen-
zontles enmudecieron; las ranas ca-
: liaron; una ráfaga de aire agitó sinies-
tramente las ramas del fresno, y en 
. . . _ . . miembros del Partido Liberal combatientes. En la región de Santa y de los iguales 
1910 y que todavía no termina a pesar Mexicano tomaron parte en el mo- Rosalía, Estado de CjiiUuahua^los c i o ^ J 0 ^ ^ 
poder'satisfaccr sus ipe- í , c °.uc c a v ó u n Presidente, Porfirio vimiento revolucionario que convul- hermanos Epitacio y «_ruz i revino, CQ]1 t o d a s s u s fuerzas a j m 0viníiento 
Díaz, y han escalado el poder sucesi- s ¡ o n a actualmente a México, para po-
 c o n m " trabajadores, luchan de acuer- mexicano, siguiendo así al pié de la 
vamente otros tres, Francisco L. de n e r e i l práctica lo que tan sabiamente do con los principios del Partido Li- letra las sabias palabras de Enrique 
miseria, par; 
titos. 
Un rumor de pisadas enérgicas se 
acercaba a ellos. Eran los soldados 
leí pueblo, los soldados de la Revolu-
las tinieblas, pavoroso, volvió a reso- ción Social. Una descarga de fusile' 
nar el grito fatídico: ¡quién vive ría hizo rodar sin vida a los represen-
Los tres personajes recordaron en tantes de la hidra de tres cabezas: 
un segundo todos sus crímenes: ellos Autoridad. Capital, Clero. 
habian trozado todas las delicias de RICARDO FLORES MAGON. 
El Deber del Revolucionario 
Pensemos en el porvenir; pensemos | a tcsta 
en los medios nuevos que se nos ofre Además, los miembros del 
cen, y aprovechémoslos. Partido Liberal Mexicano no nos con-
la Barra, Francisco I. Madero y Vic- aconseja Malatesta* "Nosotrosdebe- beral Mexicano. En el Estado de 
tonano Huerta. l l l o s e s t a r en todos los movimientos San Luis Potosí, y extendiendo su ac-
Naturalmente, como con claro ta- revolucionarios o que puedan condu- tividad hasta el Estado de Zacatecas, 
lento opina Malatesta, no comenzó la cir a una revolución, y trabajar para los rebeldes EnriqueGaitán, Alberto 
Revolución con un preciso programa que los acontecimientos no tomen Núíiez y otros, ponen en práctica los 
comunista anarquista, i-la sido dti- otro rumbo que el que nosotros de- ideales del Partido Liberal Mexicano, 
rante el grandioso movimiento cuan- seamos." 
do los miembros del Partido Liberal ,-.. „ „„i,„,. „„,„„?-,.„.,.,. „•„..„„ 
. . . , , --, Otros muchos companeros, siguen 
Mexicano nos hemos esforzado y nos tomando parte en el movimiento rc-
cstamos esforzando'y seguiremos es- volucionario, convencidos de que "la 
forzándonos por encauzar el moví- m a S n s e volverá anarquista y comu 
miento revolucionario mexicano hacia nista durante la Revolución, después 
el comunismo anárquico, como lo de- del comienzo de la Revolución," como 
muestran los actos de lo^ compañeros opina Malatesta, y los resultados ob-
Malatesta. 
¡Adelante! 
RICARDO FLORES MAGON. 
En los Estados de México, Michoa-
cán, Guanajuato, Guerrero, Jalisco y 
Colima, operan Enrique Ortiz, los 
hermanos Pantoja, Próspero Es-
pinosa y otros, que propagan sin ce-
sar los ideales del Partido Liberal 
Mas, para aprovecharlos, debemos f o r m i i m ° s con esperar a que comen- e T 7 f cámpV'dTIa" a c ^ tenidos hasta el presente hacen abri-
recordar que una revolución no se zara la Revolución Mexicana, sino que prueban la propaganda que con la g a r l a risueña esperanza de ver muy 
produce según la linea precisa tra- la forzamos, la precipitamos, para te- palabra y 
z a d a p o r un filósofo o un poeta La n e r | a oportunidad de encauzarla con miembros del Partido, y como lo 
revolución se produce de cualquier j ^ acción 
modo y se desarrolla cu nn sentido o 
en otro según la fuerza que en ell 
obra. 
Si para hacer la revi 
ramos esperar a que 
con un preciso progra 
o comunista, arriesgaríamos esperar 
en vano. La masa se volverá anar-
quista y comunista durante la revolu-
ción, después del comienzo de la re-
volución, no antes. 
con la palabra haci; 
Muestra de 
Solidaridad 
Grandioso resultó el mitin organi-
Mexicano, teniendo la costumbre esos zado por el Comité de Defensa de los 
compañeros de llevar consigo orado- compañeros presos en Texas, y que 
res que dirigen la palabra al pueblo tuvo verificativo el domingo 31 de 
al tomar alguna población, leen al Mayo en el salón de la Y, P, S. L. 
' " - T 0 '*: ,"" ñrnntn df>rrumhRrqo P n México el sis- l
1,110''10 c! Manifiesto de 23 de Scp- Una multitud ansiosa de oír pata-
cón impresos hacen los P™" t 0 J ™ a P a c ?" ¿ K * f ns l i c n i b r c d c 1 M I> ? c» 8?S" i ( l í l ! 9 inV' «ras sinceras y honradas, llenó el ara-
.t.i Pnrti,in v «nmn ln tema capitalista y .uitqritano. .Las i maquinaria, p | j 0 local, Hombres, mujeres y ni-con miemüros uei raruuu, y «umu iu O D e r a c ¡ •.._ ¿ctüaíe* de los miembros ,"
m " lV, imir ,m u c v r n » , i l "J"1"""»™»» P»o tocaí, iiomores, mujeres y m-
n e l íjriieba J a ^ ^ n g n n d a _ que hacc^RE- ^ " p J r t E " ^ ^ . . n V c m ? . ^ _ t l c . . ^ i í n 8 ^ r ^ i
c . i Í L y . !? a fios o l i e r o n en masa a demostrar 
bUitu» de las i'oinp.'ifu'riih §e vémi ta* 
ijií*f]iOB difiíinívos, 
El calor era iibruimidur; pero sie s<¡ 
noUtbu fatiga en aquello» ro»ifo§ de 
tríibu¡íulorm íntel ¡titule* que espera-
ba» con ansia el couúenztt <fvl aclo. 
El murimilJo de animada» converja-
cienes podía ser oído bania en h t a -
lle; unos hablaban de la Intervención 
Americana en México y de *m posi-
bles resultados en el movimiento inií»-
dííil de la clase trabajadora; otro* se 
referían a la necesidad de ayudar a 
los trabajadores presos en Texas; ios 
más se comunicaban sus impresiones 
sobre los suceses más notables de ac-
tualidad; niñas y compañeras entti- . 
síastas vendían ejemplares dc REGE-
NERACIÓN, folletos y libros anar-
quistas, botoncítos del Partido Libe-
ral Mexicano y listones rojos. 
Víctor Cravello, el siempre entu-
siasta y activo compañero, anunció 
que el acto iba a comenzar. Todos 
callaron; Cravello explicó el motivo 
del mitin y refirió a la audiencia los 
esfuerzos que ha hecho en pro de los 
presos de Texas el Comité óc Defen-
sa y urgió solidaridad y energía para 
que ei Comité pudiera llevar a buen 
término sus trabajos. La audiencia 
aplaudió entusiasta. Hicieron aso de 
la palabra los compañeros Anselmc 
L. l ;igueroa, Enrique Flores Magón 
Luis Villegas Jr,, Teodoro M. Gaitán, 
Tercsita Villalpando y el que escribe 
esta crónica. El auditorio dio inequí-
vocas muestras de estar de acuerdo 
con las ideas manifestadas en el mi-
tin, y de estar dispuesto a hacer todo 
lo posible para salvar a los compañe-
ros presos de las garras de la tiranía 
capitalista, pues no solamente oyó 
gustoso a los oradores, sino que con-
tribuyó generosamente con dinero 
para su defensa. Las siguientes reso-
luciones fueron votadas por unanimi-
dad enmedio del mayor entusiasmo: 
"Los mexicanos y españoles resi-
dentes en Los Angeles, reunidos en 
asamblea hoy 31 de Mayo de 1914, 
liemos adoptado las siguientes reso-
luciones: 
"Consideramos que Rangel, Alzal-
de, Cisneros, Clíne y el resto de los 
catorce trabajadores confinados boy 
en las bastillas de Texas por los su-
cesos de Carrizo Spríngs desarrolla-
dos del 11 al 13 tie beptíembre tle 
1913, son inocentes del crimen que se 
les imputa, o sea, de la muerte del 
Dcputy Slieríff Candelario Ortiz. 
"Consideramos que la persecución 
de que son victimas Rangel y compa-
ñeros, es el resultado del odio que la 
clase capitalista siente por aquellos 
de los miembros de la clase trabaja-
dora, que más actividad y celo mues-
tran en la defensa de los intereses de 
su clase. 
"Consideramos que es un crimen de 
lesa civilización y lesa humanidad el 
que cometió la fuerza armada de Te-
xas, al dar muerte a dos hombres 
honrados, Juan Rincón Jr. y Silvestre 
Lomas, por el delito de ser mexica-
nos, miembros de la ciase trabaja-
dora y hombres conscientes de sus 
derechos. 
"Consideramos que el Estado de 
Texas, y los Estados Unidos también, 
se cubren de lolo al perseguir a hom-
bres inocentes y asesinar a hombres 
honrados, y considerando, igualmente, 
UUe- la .#iwMm«fc¿«-.—»~i.ioníc IierfUa""™"" 
por esos actos de brutalidad dignos 
de épocas atrasadas, 
"Protestamos contra la persecución 
dc que son objeto Rangel y compañe-
ros, cuya libertad inmediata, absoluta 
e incondicional demandamos para sa-
tisfacción de la Justicia, y protesta-
mos, con toda la energía de que so-
mos capaces, contra el asesinato que 
oficiales del Estado de Texas perpe-
traron en las personas dc Juan Rin-
cón Jr. y Silvestre Lomas, pues tanto 
la prisión de los primeros, como el 
asesinato de los últimos, son hechos 
que chocan a la civilización, deshon-
ran la cultura alcanzada por la hu-
manidad y lastiman los sentimientos 
dc todo ser humano normal. 
"Finalmente, resolvemos que copia 
dc esta protesta sea enviada por el 
Secretario del Comité de Defensa de 
Rangel y compañeros, al Gobernador 
del Estado de Texas, Osear B. Col-
quitt, 
"Los Angeles, Cal., Mayo 31 de -
1914. — El Secretario del Comité, 
Víctor Cravello." 
Hombres, mujeres y niños de bue-
na voluntad cantaron los himnos re-
volucionarios "La Marsellesa Anar-
quista," "Eí Hijo del Pueblo" y "Tie-
rra y Libertad." 
No hubo una sola nota discordante 
en este memorable mitin que dejó en 
la mente de los que ocurrieron a él 
una grata sensación de alivio moral, 
al convencerse de que se trabaja con 
ardor por la liberación de los herma-
nos de Texas. 
El sábado 6 de este mes, la estima-
ble compañera Emma Goldman dio 
tina recepción a sus amigos, ^en el 
mismo salón. Hubo discursos"en in-
glés y en español por los compañeros 
Enrique Flores Magón, Fred. H. 
Moore y Emma Gildman. El compa-
ñero Arturo Giovannitti leyó unas 
hermosísimas poesías. Todos habla-
ron en favor de los presos de Texas. 
Hubo concierto, baile, refrescos y ce-
na. Todo lo que se recaudó es para 
la defensa de los compañeros presos 
cu Texas. Emma nos ha ofrecido no 
desperdiciar oportunidad para hablar 
en pro de nuestros hermanos presos.

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