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eBooks Trading https://t.me/joinchat/AAAAAFLEaFlLpqK0r4yl4Q Compartir conocimiento es nuestra filosofía LA BOLSA EVIDENTE CICLOS Y RELACIONES DE INTERMERCADO Javier Alfayate Gallardo Reservados todos los derechos. No se permite la reproducción de ninguna parte del presente volumen por medio de método alguno, ya sea fotocopia o mimeográfico ni de ningún otro modo, ni su emisión, transmisión o traducción a cualquier tipo de lengua, ni su registro electrónico ni de cualquier otro tipo, sin la previa autorización escrita del titu- lar de los derechos correspondientes. Esta publicación está diseñada para proporcionar una información concreta y compe- tente de la materia tratada. Se vende bajo el entendimiento de saber que ni el autor ni el editor están obligados a rendir servicios legales, contables o de cualquier otra índo- le profesional. Si se necesita asesoría legal o la asistencia de otro experto, se deberán buscar los servicios de un profesional. Primera edición noviembre 2010 Revisión digital diciembre de 2012 Diseño gráfico: José María Esteban Ilustraciones de la portada y viñetas interiores: J. R. Mora Patrocina: Bolsa.com y Activotrade © Javier Alfayate Gallardo www.javieralfayate.es adam@weinstein.es ISBN: 978-84-614-5023-7 Depósito Legal: M-49230-2010 Este libro está dedicado a las personas que hicieron posible mi primera obra sobre mercados y siguen apoyando y leyendo mis escritos en esta segunda recopilación de ideas. Para todas las personas que quieren aprender y ganar dinero de manera consistente en el mercado y que disfrutan haciendo lo que más les gusta. Javier Alfayate, más conocido como Adam o Águila Roja, es uno de los analistas más reputados y seguidos. Es conocido entre sus suscriptores por haberse adelantado al reciente mercado bajista de finales de 2007 y con anterioridad al mercado alcista desde 2003. Además opera a diario en su blog sobre mercados. Javier Alfayate, Madrid, es editor y autor de blogs de sistemas de trading, ha par- ticipado asiduamente en foros y en algunas entrevistas como en el número 9 de “El mundo bursátil”, “Santa Eugenia, Octubre 2009” y en radios: “radiodefinanzas.com” y “gestionaradio”. Además de ser autor de otras obras de gran éxito como Aleta de tiburón: tácticas de un operador en bolsa (premio finan- cialred selección financiera mejor libro de bolsa 2010) y otros ensayos económicos. Editor del blog www.accionesdebolsa.com y www.weinstein.es, Javier ha des- arrollado la técnica Weinstein y la ha adaptado al entorno bursátil actual proponiendo nuevas y mejores herramientas para su análisis en el mercado de valores español. Estos blogs son definidos por algunos como “la catedral Weinstein española”, siendo su creador un auténtico especialista y experto en este tipo de análisis, llegando al punto de proponer mejoras importantes en su interpretación, desde marcación de objetivos de mano fuerte pasando por impulsos, tiempos y teoría de ciclos. Leyendo La bolsa evidente: ciclos y relaciones de intermercado, verá la bolsa más evidente que nunca y comprobará las misteriosas relaciones que existen entre productos tan distintos como los bonos y las materias primas. Conseguirá, de una vez por todas, adelantarse con cierta seguridad a los movimientos más importantes que están a punto de acontecer. Además, este libro concederá una gran cultura económica con la historia económica relatada desde la perspectiva de las principales crisis desde 1600 y cuáles fueron sus claves. De nuevo Javier Alfayate pone a disposición del públi- co en general una nueva generación de herramientas y armas para defenderse en el mercado y ganar dinero de forma consistente y continuada. Javier Alfayate Gallardo AGRADECIMIENTOS: Me emociono cada vez que recuerdo la ayuda tan inestimable que mis lectores me prestaron, de forma tan desinteresada, durante la fase de composición del libro. Éste va para todas estas personas que se interesaron por mí y por mi proyecto. Juntos continuamos construyendo conocimiento bursátil y financiero para mejorar como per- sonas, como traders e inversores. En primer lugar agradecer la especial ayuda prestada por mis sufridos correcto- res. Teniendo en cuenta que la mayoría de ellos trabajaron altruistamente, son dignas de mención sus sugerencias. Gracias a Satur, Jotabe, Tonimail, JSebas, Miguel Angel, Uxío, Milena, Jordi, Miguel, Francisco, Jose Luis, Aldiri, Jesús, Julio, Txema, Kender, Fermín, Time, Paco3x, Juan, Ulises, Irrureta, Esteban, Gonsi, Cabamancha, Erg, Joserain, Roberto, Cmmateo, Elmarmol, Ecordero, Odul, Frespin, Lcruz, Fermango, Spy, Kratos, Hilario, Iglu, P.Trader, Xavier G., Chema, Alejandro, Francisco José, Rodri y Tautilas. Naturalmente, reconocer la ayuda de mi amigo y maquetador, José María Esteban, mi ilustrador Juan Ramón Mora, mi amigo Jesús Pérez con su prólogo tan generoso hacia mi persona y la aportación especial de Ángel Matute con su conoci- miento expresado en el final del anexo. Gracias por acompañarme en este viaje que de momento no tiene final. Deseo agradecer de manera personal el apoyo ofrecido por mis patrocinadores Bolsa.com y ActivoTrade, a los que les debo mucho. Gracias por confiar en mi visión de los mercados. Gracias Marc Ribes y Jesús Pérez por vuestro interés en mi obra y en las que llegarán. Es digno de mencionar que empresas y personas individuales, que reconocen el carácter emprendedor de esta iniciativa, no duden en sumarse a ella. Gracias a su ayuda este libro ha podido ver la luz antes de lo que estimaba. Por último, mencionar la guía inestimable de mis autores favoritos. Ellos comen- zaron un camino que nosotros seguimos discurriendo y abriendo nuevas sendas que, quien sabe, quizás nos conduzcan a algo maravilloso. También dar las gracias a los gráficos de proveedores como Prorealtime, Stockcharts.com o VisualChart bajo los cuales he fundamentado mis explicaciones. Me siento realmente complacido y gustoso por el resultado de esta obra. Han sido muchos meses de trabajo y otros tanto de correcciones, pero finalmente ha que- dado una buena obra de referencia. Espero que lo disfrute tanto como yo con su escri- tura. Sin más, dar las gracias a los lectores noveles y experimentados por darme una oportunidad y dejar que le cuente unas cuantas cosas sobre los mercados. GRACIAS. ÍNDICE Introducción. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .7 Prólogo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .9 7. El factor psicológico y algunos ejemplos de otras evidencias e indicadores . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .13 8. Los ciclos seculares de Kondratieff y su influencia en las grandes crisis, pánicos bursátiles y bancarios. . . . . . . . . . . . . . . . .37 Anexo. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .157 El libro que está a punto de comenzar a leer no pretende sino crear una cierta base en el análisis de largo plazo sobre los ciclos económicos. No se trata ni de adivi- nar el futuro ni de tener la certeza de que algo ocurrirá en una fecha determinada o como esperamos al 100%. Contar que este libro le hará millonario sería una burla a su confianza e iría contra mi honestidad. El conocimiento que hace doctor a un licenciado es precisamente el resultado de años de investigación. Todos los conceptos son importantes, pero pronto comenzará a diferenciar cuá- les le servirán de largo para ganar dinero y cuáles para argumentar a un amigo su reciente compra de acciones. Las palabras son una cosa, los hechos otra bien diferen- te. Considero esencial conocer lo que este libro le va a aportar, y no porque yo lo haya escrito, sino porque le dará una idea general y global de los elementos que rondan alre- dedor de la bolsa de valores, cuáles son las relaciones más claras entre elementos que intervienen en el factor dinero y cuáles le ayudarán a determinar los giros más impor-tantes del mercado. Si lo que pretende es adivinar el futuro o hacerse rico a la mañana siguiente, opte entonces por comprar libros en cuya portada salga una persona tirando dólares al aire o con títulos como: “Hágase rico invirtiendo”, “Cómo ganar en bolsa al instante” y demás nombres que llaman la atención pero que atentan contra el sentido común. Habiendo dejado claros estos conceptos, debo indicarle que en ningún caso he deseado ni querido escribir un libro académico ni con conceptos difíciles de interpretar. Mi objetivo es hacerle entender cómo intervienen ciertos factores de la economía y cómo se comportan, para que usted le saque el mayor partido. La manera de explicar todos estos conceptos será a través de numerosas ilustraciones, imágenes y gráficos. Entiendo que así puedo dejar fuera de juego tanto al profesional ilustrado que espera encontrar en este libro extensos teoremas y largas formulaciones, como al inversor novel que busca empezar de cero. La clave está en escribir un libro que tenga un nivel adecuado y se explique de manera llana y sencilla. Escribir este tipo de libros es complejo, puesto que la cantidad de datos históri- cos a recopilar es en unas ocasiones muy abundante y en otras incluso inexistentes. He tratado de hacer de la manera más llevadera los capítulos sobre historia económi- ca; aunque pueda hacerse algo pesado, será esencial conocer el pasado para explicar el presente y tener cierta idea del futuro. He empleado numerosos gráficos confeccio- nados por mí, aunque basados en datos reales. Discúlpeme si algunos no los entiende o son difíciles de conseguir. La economía a veces es así, difícil de comprender en cier- tos momentos e inalcanzable en otros. 7 UNA PEQUEÑA INTRODUCCIÓN DEL AUTOR Así pues, quería dar especial relevancia al hecho de que la mayoría de mis con- clusiones están basadas en los gráficos y en mis observaciones empíricas de los mis- mos. Esto puede llamar la atención a personas ilustradas que tienen por dogma ciertas relaciones como: “si la bolsa baja, el oro sube”, o “si los tipos de interés bajan, la bolsa sube”. Mi idea desde el comienzo ha sido llegar a conclusiones prácticas, aunque en ocasiones, choquen con alguna idea teórica preconcebida que teníamos como base. He querido empezar explicando las normas básicas que rigen el intermercado (las relaciones entre diferentes mercados de capitales que acompañan a la bolsa y que compiten por la liquidez circulante en el sistema) para después introducir lo que son los ciclos y, a continuación, hacer un análisis pormenorizado de las crisis desde 1600 hasta la actualidad y comprobar cómo funciona la teoría en la práctica. Al final de cada tema dispondrá de un resumen con los conceptos que creo son fundamentales. Verá cómo la teoría va desarrollándose hasta que todo se funde en una teoría de ciclos y de rela- ciones de intermercado sólidas y con detalles importantes. Para este fin he tenido que interpretar la teoría descrita por numerosos autores americanos y algunos austriacos, rusos y japoneses para llegar a fusionar la teoría de ciclos con el intermercado o lo que yo defino como evidencias y relaciones entre evidencias. Desafortunadamente en ocasiones no vale decir que A se comportará de tal manera si B sube. Es necesario ir más allá y saber en qué ciclo de mercado estamos para llegar a una aproximación más o menos fiable. Este es el alma mater del libro, ir más allá de las reglas y saber cuándo pueden cambiar éstas y exactamente en qué fase de mercado. Espero que disfrute con la lectura tanto como yo con la composición de esta obra y le deseo un feliz viaje. Súbase que empezamos… 8 Probablemente acuda a este libro con la duda razonable de saber si realmente somos capaces de predecir el mercado. Sobre todo si se puede hacer de una manera consistente. Si realmente podemos diseñar esa estrategia con las herramientas que tenemos a nuestro alcance para conseguirlo. Yo si fuera usted reformularía esta cuestión. Porque realmente ganar al mercado no reside en una estrategia, sino en una actitud. Es una actitud que le debe llevar a intentar entender cada vez mejor el entorno, que le debe generar una inagotable volun- tad para no dejar de aprender cada día. Una actitud que le debe llevar a valorar más el hacer bien las cosas que el ganar dinero porque en esa actitud está la clave para des- arrollar y adoptar las buenas prácticas, que le acercarán a poder ganar de una mane- ra consistente. Porque cuando acudimos al mercado con la actitud de ser cada vez mejores, cada vez hacerlo mejor, y crecer cada día como traders, estamos más cerca de llegar a supe- rar de manera consistente al mercado, porque estaremos desarrollando una actitud. “No confíe usted en aquellos que han encontrado ya la verdad; confíe solamen- te en quienes siguen buscándola.” André Kostolany Una actitud que nos permitirá movernos en un entorno cambiante. El entorno de los mercados. Un entorno donde la historia se repite de manera cíclica, pero desde la amplia perspectiva que Javier nos explica en este libro. Sin esa perspectiva más amplia, la realidad en el corto plazo puede llegar a confundirnos. Una historia en cual- quier caso no exenta de Cisnes Negros, de los que habla Nassim Nicholas Taleb, con los debemos saber convivir. Se trata de gestionar esa incertidumbre, no de buscar la fiabilidad. Eso es a lo que debemos de aspirar y no es sencillo. “Hay dos clases de pronosticadores: aquellos que no saben y aquellos que no saben que no saben.” John Kenneth Galbraith. Por ese motivo, cuando uno tiene la actitud correcta para los mercados, no se definirá como Analista Técnico, ni como Analista Fundamental. No dejará de lado cual- quier herramienta que pueda proporcionarle una mejor compresión del entorno. Este libro nos transmite el mensaje de que los extremos no son la solución óptima. Que cada disciplina tiene algo que aportarnos y que se puede hacer compatible el análisis técni- co con el análisis fundamental. Y ese es el viaje que realiza Javier en este libro, que ofrece una diferente pers- pectiva del mundo de la macroeconomía. Una visión desde la perspectiva de un gran especialista del análisis técnico. Una perspectiva que introduce la necesidad por la estadística y la matemática en las grandes discusiones económicas asociadas a los 9 PRÓLOGO mercados. Algo de lo que en muchas ocasiones carece el análisis macro que si bien se centra en estadísticas, busca poco la correlación directa con los mercados. Y esta visión es la que configura la teoría que se desarrolla en la Bolsa Evidente ofreciendo una herramienta que permite al analista técnico encontrar una mayor con- vicción y apoyo en sus decisiones. Otra de las grandes piedras angulares de la actitud que debemos desarrollar. “El mayor problema al que se enfrenta un trader es la confianza en su propio método” Curtis Faith La confianza es una actitud que debemos desarrollar y que no podemos apren- der. La experiencia y la práctica es la que nos permite adquirirla. Una confianza que difícil de conseguir y muy fácil de perder. Cuando usted comenzó a montar en bicicle- ta, tuvo su primera prueba de confianza. Sin ella le hubiera sido imposible conseguir hacerlo. Y este libro le aportará la confianza que aporta el entender el entorno macro- económico. El primer libro de Javier me aportó grandes conceptos a mi forma de operar que he incorporado, pero este libro ha abierto mi perspectiva. Es un libro que me ha hecho entender que es necesario ampliar nuestra perspec- tiva para comprender mejor el entorno en el que nos movemos. Como analista técnico debería pensar que todo está contenido en el gráfico, es una de las premisas de esta disciplina. Y es cierto los gráficos incorporan toda la información. Pero no solo en los gráficos de bolsa, también lo está en los gráficos de tipos de interés, también lo está en los gráficos de los bonos, también lo está en los gráficos de las materias primas. Todos esos gráficos serán nuestro mejor analista fundamental e incluso otros merca-dos donde operar. Le permitirá entender la situación macro desde los gráficos y no desde la infor- mación de medios de comunicación que nos llega. No olvide nunca esta frase: “Cuando todo el mundo sabe algo, no merece la pena saberlo” Stan Weinstein. Porque en este libro tendrá lo mejor del análisis técnico aplicado a la visión macroeconomía. Algo poco habitual en los libros de macro economía. Las siguientes páginas probablemente le hagan tener cada vez más en cuenta un concepto importan- te que son las correlaciones. Nos invita a conocer las correlaciones que existen entre los mercados y los más importantes datos económicos. Unas correlaciones que se resumen en el Flujo del Dinero. Un concepto que nos invitará a pedir que nuestras estrategias estén confirmadas por este concepto. Pero no es nada que no incorporará Dow en su teoría, donde nos explicaba que los movimientos importantes tienen que confirmarse. Que no vale un solo índice para 10 confirmar un movimiento, si no que tendrán que ser varios los que nos permitirán llegar a esa conclusión. El flujo del Dinero nos hace extender esa confirmación a más merca- dos, como son los de los Tipos de Interés, las Divisas, La Deuda Corporativa, las Materias Primas y la política monetaria. Que tiene mucho sentido salir de nuestro grá- fico para entender este entorno. Que tendremos más oportunidades de éxito si a nues- tro valor no solo le pedimos que tenga una excelente estructura técnica, sino que se encuentre en un sector que también la tenga y con un correcto entorno macroeconómi- co (Flujo del Dinero). Que tenemos que abrir nuestra perspectiva. Porque en muchas ocasiones tendremos movimientos perfectamente estructura- dos en el aspecto técnico, pero que no tendrán sentido en el contexto macroeconómi- co, y quizás en esos momentos es donde nuestra gestión de capital tiene que tener especialmente cuidadosa. Y son movimientos que pueden parecernos desde un punto de vista técnico perfectos, aunque desde el punto de vista fundamental, no lo sean. Movimiento que también deberemos aprovechar conociendo dónde estamos y sabien- do que tienen una fecha de caducidad mas cercana. Porque todo volverá en algún momento a tener sentido, aunque pueda tardar tiempo. Como diría Keynes: “El mercado puede permanecer irracional durante más tiempo que el que uno puede permanecer solvente.” La segunda parte del libro nos introduce en la historia de las crisis financieras. Esa lectura que nos permite entender que las crisis no son eventos esporádicos, sino eventos mucho más probables de lo que uno pueda esperar. Es una de las enseñan- zas que nos dejan estos años de turbulencias, donde los modelos de riesgo tradiciona- les han fracasado porque no contemplan esta realidad. Crisis que vacían la piscina de la liquidez y permite descubrir aquellos que estaban nadando sin traje, aquellos que estaban desnudos y que el mercado expulsará en situaciones de este tipo. No todas las crisis son iguales, pero no por ello debemos caer en una de las fra- ses que más problemas ha traído en muchos ámbitos “Esta vez es diferente”. Porque vistas todas con la perspectiva que ofrece el libro, podrá encontrar las similitudes que tiene la crisis actual con las anteriores. Incluso podrá pensar en cual podría ser la siguiente crisis. Todo esto le permitirá entender el entorno sin olvidarse en las peculia- ridades del momento actual, porque en los mercados los detalles son importantes. Son tan importantes que incluso conociendo el posible escenario, sin una buena ejecución de nuestra estrategia no tendremos nada. Por eso en el mundo profesional distinguen entre analistas y traders, porque es difícil encontrar en una sola persona cualidades para ambas tareas Y en este entorno de incertidumbre es donde usted deberá moverse, donde uno solo puede aspirar a tener razón algunas veces. Y eso debe contar con ello, y no con- 11 vertir de cada inversión una cuestión de vida o muerte, porque si no morirá muchas veces. Este libro debería ser la razón para ampliar su perspectiva en los mercados. Su lectura que le ahorrará todo el esfuerzo que Javier ha realizado para escribirlo, y será el punto de partida para seguir profundizando en el tema. Probablemente no encuentre un mejor punto de partida para ampliar su perspectiva del mercado. Y no podía acabar este prologo sin hacer una referencia personal con el autor. No creo que deba restarle más tiempo para comenzar a leer el libro. Los mercados requieren de cada uno la excelencia para poder tener alguna oportunidad de ganar de manera consistente. Este libro nace desde una persona que es un gran profesional de los mercados, y del que no he dejado de aprender desde que coincidimos profesional- mente. Sus resultados le avalan, pero probablemente esto no sea tan importante para el cómo ser cada vez un mejor trader. Y ese tipo de personas suelen tener una gran capacidad de generosidad, como lo tiene Javier en el día a día en su web y con su libro. Porque el mercado, ante todo, es un reto. “It’s not about the money, it’s about the game, the game between people”, Wall Street II. “No es una cuestión de ganar dinero, es una cuestión de competir contra otras personas.” Prólogo escrito por mi amigo Jesús Pérez, CEO de bolsa.com y autor de especu- lación.org, además de ser participante de cursos, charlas y tertulias económicas y de radio. 12 Siempre me río de la gente que dice que nunca han conocido a un analista técnico rico. Me encanta, es una afirmación tan arrogante y carente de sentido. Yo utilicé el análisis fundamental durante 9 años y me hice rico utilizando el análisis técnico. Marty Schwartz No confundas la parte de debajo de la página con un soporte. Nick Glydon CAPÍTULO 7: EL FACTOR PSICOLÓGICO Y ALGUNOS EJEMPLOS DE OTRAS EVIDENCIAS E INDICADORES. LA PSICOLOGÍA DE LA MASA ESTÁ EN EL GRÁFICO Hemos concluido el estudio sobre la Evidencia. Lo que conocemos como factor dinero es muy importante para explicar ciertas anomalías que se generan en la inter- pretación de la economía. ¿Por qué sube la bolsa cuando la economía va de mal en peor?, ¿por qué cuando los datos son inmejorables los mercados tienden a hacer techos? La respuesta a estas preguntas la encontramos en el factor dinero. Sin embar- go, no debemos obviar la psicología de la masa, un factor que se puede medir median- te el análisis técnico tradicional. No me voy a extender demasiado en explicar el factor psicológico, ya que el libro Aleta de Tiburón, tácticas de un operador en bolsa lo explica de manera amplia. Citaré las señales más evidentes de giro en el ambiente de la masa y qué es lo que debemos vigilar para estar preparados. La psicología y el flujo de capital tienen la misma impor- tancia y no es recomendable tomar posiciones cuando devuelven señales enfrentadas. Aún recuerdo, a finales de 2008, cuando hablaba precisamente de esto. Los tipos de interés alcanzaban niveles extraordinariamente bajos, mientras la bolsa ahondaba en sus recortes. El factor dinero era claramente cada vez más positivo mientras la psico- logía de la masa estaba machacada por los continuos mínimos de las cotizaciones. Finalmente, el mercado hizo suelo en marzo de 2009 y una vez la confianza se restau- ró, bastó poco para generar un rebote superior al 70% en la mayoría de los índices. Este rebote fue difícil de aprovechar desde el mínimo de por ejemplo los 6.700 puntos que marcó el Ibex35. Sin embargo, había evidencias que señalaban el camino al contrario que mostraba la bolsa. Para que se haga una idea, el factor psicológico no fue positivo hasta que el Ibex no superó los 8.600 puntos con holgura, hacia finales de abril de 2009, mientras que el factor dinero ya era positivo a finales de 2008. 13 14 Que la psicología de la masa está en el gráfico es una realidad. Basta con mirar algunos gráficos para percatarse de cómo se respetan ciertos niveles, tanto de sopor- te como de resistencias, y cómo curiosamente la media ponderada de 30 semanas (mm30) marca el rumbo de medio plazo de la mayoríade activos. Además, también existen otras divergencias en indicadores que son capaces de determinar un cambio de rumbo en el mercado, tanto en el corto como en el medio plazo. Aparte de los indi- cadores clásicos de tendencia como la mm30, el RSCMansfield, el Koncorde o el Volumen, deberá fijarse bien en las divergencias del MACD, la evolución de los grupos de valores pequeños y medianos frente a la de los grupos de grandes valores o Blue Chips, así como otros indicadores de amplitud como la línea A/D, el McClellan, el Summation, o los nuevos máx/min. INDICADORES DE AMPLITUD DE MERCADO: MCCLELLAN Y SUMMATION ¿Indicadores de amplitud?, ¿qué es eso? Son unas herramientas que miden la intensidad y la amplitud de los mercados alcistas y bajistas. Las lecturas extremas o sus divergencias nos advierten de los posibles cambios en la tendencia. Son indicado- re,s que en vez de basarse en el precio directamente, se basan en la cantidad de accio- nes que cumplen ciertas condiciones. Por tanto son independientes de la habitual mani- pulación de precios. Los más conocidos son: Nº de valores que suben - Nº de valores que bajan (Advancing - Declining Issues): Se obtiene por la diferencia entre el número de valores que suben y bajan en un índice. Es la base de muchos de los indicadores de amplitud de mercado, tales como la Línea de Avance/Descenso, el ratio A/D, Absolute Breadth Index, Breadth Thrust, McClellan Oscillator, McClellan Summation Index. Este indicador se utiliza para medir la fuerza de un día de mercado, aunque lo habitual es la utilización de medias móviles sobre este indicador, tal y como hace el McClellan Oscillator. La línea de avance/descenso (A/D): Es el más utilizado de los indicadores de amplitud de mercado. Se basa en el total acumulado del número de valores que suben menos el número de valores que bajan en un determinado índice. Este indicador mues- tra de forma eficaz la fortaleza de la tendencia vigente. Estudiando la tendencia de este indicador se puede determinar la del mercado de valores. También son muy útiles las divergencias entre un índice y su línea de A/D, que suele anticipar el final de un mercado alcista o bajista, y que tiene lugar cuando la línea A/D no acompaña al índice de referencia en la consecución de un nuevo máximo o mínimo. Nosotros usaremos la comparación entre los índices de los grandes valores (Dow Jones 30 o Ibex 35) frente a los que agrupan a los pequeños (Small Caps, Medium Caps, Russel2000, etc…). Estudiando los índices que agrupan a pocos valores, pero de alta capitalización, frente a los otros índices que agrupan a la mayoría de valores pero de escasa y media- na capitalización nos daremos cuenta del tipo de acciones que suben y, por tanto, podremos determinar su línea de avance/descenso de forma natural. Es recomendable comenzar con esta línea y después desarrollar esta intuición en mercados con proble- mas. Breadth Thrust: Es un indicador desarrollado por Martin Zueing que mide el empuje, el impulso del mercado. Se calcula hallando la media móvil exponencial de 10 días del siguiente ratio: valores que suben / (valores que suben + valores que bajan). No lo emplearemos en nuestro análisis. Un Breadth Thrust (empujón de amplitud) tiene lugar cuando, durante un periodo de 10 días el indicador aumenta de 40% a 61,5%, lo que indica que el mercado ha pasado de una situación de sobreventa a una situación de fuerza, pero que todavía no ha entrado en sobrecompra. Según Zueing, la mayoría de los mercados alcistas comienzan con un “empujón de amplitud” y cuando tiene lugar uno de ellos, la media de duración de las alzas es de 11 meses y la de ganancias del 24,60%. Oscilador de McClellan (McClellan Oscillator): Es un indicador de amplitud de mercado que se calcula mediante el suavizado de la diferencia entre el número de valo- res que avanzan (Advancing Issues) y el número de los que descienden (Declining Issues). Fue desarrollado por Sherman y Marian McClellan y dado a conocer a través de su libro Patterns for Profit. Este indicador parte de la idea de que un mercado alcista sano se caracteriza por un gran número de valores cuyo precio va avanzando sucesivamente, en tanto que un mercado alcista en fase de agotamiento se caracteriza por un escaso número de valo- res con grandes avances en su precio creando la falsa apariencia de que todo va bien. Este tipo de señales suelen marcar el final de un mercado alcista. Se aplica de la misma manera a un mercado bajista. Un índice haciendo nuevos mínimos mientras que un escaso número de valores desciende sería sintomático de que el suelo de mercado está próximo. Para profundizar sobre la interpretación de este indicador, se aconseja la lectura de la parte final del anexo escrito por Ángel Matute. En este capítulo se hará una breve mención sobre la interpretación de este indicador en los dos giros, la baja y al alza, más conocidos por todos: la caída de 2000 y la subida de 2008. Naturalmente que el ascen- so de 2003 también tiene señal según este indicador. 15 GRÁFICO 7-1 Indicador McClellan 1999-2001 En el Gráfico 7-1 de stockcharts.com se muestra una divergencia bajista en del gráfico S&P500 en semanal (línea punteada) con respecto al indicador McClellan (línea negra continua). Realmente había muchos otros indicadores que mostraban peligro, pero recuerde que cuando todo coincide en un mismo sentido, este tipo de señales que parecen complicadas de leer cobran mucho sentido. En el punto 4 del gráfico, la imposibilidad de marcar nuevos máximos del indica- dor acaba desembocando en una tendencia bajista. Es algo común que el indicador McClellan acabe marcando un valor muy bajo tras un recorte profundo de la bolsa (sep- tiembre de 2001). Puede que esto sea el inicio de una hipotética divergencia alcista con el tiempo, siempre que el mínimo siguiente sea creciente. En el Gráfico 7-2 se ve más claramente la divergencia alcista del indicador con respecto al gráfico SP500. Los puntos 1, 2, 3 y 4 siguen una pauta de caída contun- dente y clara. Sin embargo, unos pocos meses después del punto 4 ya se marca una primera divergencia. La clave está en el punto 5. En muchas ocasiones podemos anti- ciparnos y haber comprado en la primera o segunda divergencia tras el punto 4. Pero, como vemos, el final está cerca y en marzo de 2009 no sólo el indicador McClellan mostraba una oportunidad de compra. Si queremos algo sencillo y simple, este es nuestro indicador. Lo bueno de estas herramientas es que no están basadas en pre- cios y si en los avances y retrocesos de todas las acciones donde la manipulación es más complicada de realizar. 16 McClellan Summation Index: Desarrollado por los McClellan, es una versión para el largo plazo del McClellan Oscillator. Su interpretación es similar a la de este indicador, salvo que está mejor adaptado para determinar los cambios de la tendencia de largo plazo o semanal. En este caso, este indicador casa muy bien con nuestra teoría de aná- lisis de mercado. Hay dos métodos de cálculo del McClellan Summation Index de idén- tica apariencia, pero su valor numérico difiere. Este oscilador es una gran herramienta que detecta todos los suelos y techos importantes de mercado. Le recomiendo que con- sulte el final del anexo de este libro. Ángel Matute nos desvelará de manera muy profun- da, todos los pormenores de este indicador. En los ejemplos 7-3 y 7-4 se ha escogido el gráfico del NYSE (línea negra continua) que es el índice que agrupa a las acciones más importantes de EEUU (66,02%), Europa (20,45%), Asia (7,36%), Canadá (4,59%) y otras zonas geográficas. Es una medida más general de la tendencia global de las acciones, aunque como ve, la lectura es similar a la obtenida con el indicador McClellan. En el Gráfico 7-3 puede ver el suelo de 2003 (línea gris) y cómo se interpreta este indicador. Primero el NYSE hace nuevo mínimo, (octubre de 2002) mientras el Summation no lo hace. Después sigue ascendiendo y de nuevo, el mínimo del NYSE no es replicado en el indicador. El final del mercadobajista está cerca. En el Gráfico 7- 4 ocurre lo mismo, pero esta vez con dos mínimos divergentes y no tres. En abril de 2010 tenemos el inicio de una posible divergencia a la baja que debería llevarnos a extremar la precaución. 17 GRÁFICO 7-2 Indicador McClellan 2008-2009 18 GRÁFICO 7-3 Indicador Summation frente al NYSE 2001-2003 GRÁFICO 7-4 Indicador Summation frente al NYSE 2008-2010 19 New Highs-Lows: Muestra la diferencia entre el número de acciones que alcan- zan nuevos máximos de las últimas 52 semanas (1 año) y el número de acciones que alcanzan nuevos mínimos en las últimas 52 semanas (1 año). Cuando muchas accio- nes hacen nuevos máximos de un año se considera que la tendencia alcista es consis- tente y por eso es tan importante vigilar este indicador de nuevos máximos. Las lecturas elevadas indican un mercado sano y con un gran número de accio- nes haciendo nuevos máximos. Las lecturas inferiores a 0 indican que el número de valores que hacen nuevos máximos es inferior al de las que hacen nuevos mínimos y por tanto nos alerta de la posibilidad de que el mercado alcista esté finalizando y del inicio de un mercado bajista. No hace falta que el indicador marque lecturas menores de 0 para dar señal. Basta con que los índices suban mientras que los nuevos máxi- mos alcanzados sean menores a las ocasiones anteriores. Así se forman las divergen- cias en este indicador y pueden dar señales interesantes. En el lado bajista funciona de la misma manera. El indicador da señal una vez los nuevos mínimos no se ven superados por más mínimos, a pesar de nuevas caídas en el índice. Esto se puede apreciar claramente en los Gráficos 7-5 y 7-6, justamente en las vueltas de mercado al alza. La lectura es muy clara en la vuelta al alza, aunque en la vuelta a la baja también funciona. GRÁFICO 7-5 Indicador NYHL frente al NYSE 2000-2003 NYSE % Above 200MA (Valor en porcentaje de las acciones por encima de su media móvil simple de 200 sesiones o días): La media de 200 días o sesiones es una media muy usada por los grandes capitales y fondos de inversión. Debido a que es una media para el largo plazo, en ocasiones no da señales muy fiables en el corto plazo. Sin embargo, es muy importante para los grandes fondos “hedge”. Este indicador devuelve valores entre 0 y 100. Si todas las acciones suben en una tendencia al alza, es muy probable que sus medias de 200 sesiones acaben sien- do superadas. De esta manera, la tendencia en vigor tendría buena fuerza, ya que las subidas son acompañadas por todo el mercado. Lógicamente valores de 100 se darán en rarísimas ocasiones. Lo importante es que la tendencia al alza evolucione con al menos un 70%-80% de acciones cuyo precio supera a la mm200. En el lado bajista, lo ideal es que haya un porcentaje de acciones que tengan su precio por encima de esta media un 10%-20%. Recuerde que los mercados son consistentes cuando un gran número de acciones lo sostienen. Es importante fijarse en el ejemplo del Gráfico 7-7 para percatarse de que la ten- dencia, tanto al alza como a la baja, experimenta vueltas inesperadas antes de conti- nuar con la tendencia en vigor. Para distinguir si estas vueltas son algo más, será importante vigilar el aspecto de este indicador. Si la tendencia es alcista pero una vuel- ta de mercado hizo caer al indicador por debajo de 40, mucho cuidado, es probable que el movimiento de mercado vaya a más y gire la tendencia. 20 GRÁFICO 7-6 Indicador NYHL frente al NYSE 2007-2010 21 En el lado bajista ocurre algo similar. Puede fijarse en 2003 o en 2009. Una vez el indicador cruza 50, hay más acciones con sus precios por encima de la mm200 y esto hace confiar a los grandes fondos en la tendencia, con lo que el dinero llama a más dinero y la bolsa sube. Las tendencias bajistas perduran mientras el indicador siga por debajo de 40. Lecturas entre 40 y 60 suelen indicar un mercado sin tendencia o en fase de giro. También podrán detectarse divergencias entre el indicador y el precio, como la ocurri- da en 2009. A finales de 2007 hay otra clara divergencia cuando el mercado (línea gris que representa el NYSE) alcanzaba nuevos máximos, mientras que eran sólo el 59% de valores los que tenían su precio por encima de su mm200. Hay divergencias que serán muy evidentes y otras que nos harán dudar, pero tampoco se preocupe por eso. Lo importante es comprobar que el mercado asciende con la mayoría de sus componentes y no con unos pocos que ponderan mucho. Esto es lo que podemos ver echando un ojo a los gráficos que contienen a grandes valores frente a aquellos que tienen a los pequeños. Si nos cuesta ver las diferencias en estos avances, recurramos a estas sencillas líneas que son bastante eficaces a la hora de determinar debilidades en la tendencia o señales de giro oportunas. Tampoco trate de buscar los giros para posicionarse en el mercado, sólo vaya recogiendo beneficio una vez observe el peligro acercarse. GRÁFICO 7-7 Indicador NYA200R frente al NYSE 2002-2010 22 Lo primero que cabe preguntarse es sobre la fase de ciclo largo en la que esta- mos. Aunque no he hecho demasiado hincapié en la importancia de este aspecto, lo cierto es que es importante tenerlo en cuenta. En primer lugar hemos visto los ciclos de Kondratieff, para después hacer una medida de ciclos desde el 1900 a través del Gráfico 3-21 del capítulo 3. La conclusión es similar, se observan avances importantes interrumpidos por periodos cíclicos de inflación. Una vez tenemos una ligera idea sobre el escenario actual, debemos estudiar el factor dinero y hacia dónde están fluyendo los capitales. En economía tendremos fases típicas en las que el grifo del crédito sea de tal magnitud que la mayoría de mercados ascenderán, mientras que habrá otras ocasiones en las que no sólo la “presión en las tuberías” o liquidez caerá sino que, además, los flujos de capital pueden ser distribui- dos a ciertos mercados en concreto en detrimento de otros. Finalmente, el factor psicológico será otro factor a tener en cuenta y será de igual importancia que el flujo de capitales. Por lo general, actuará como espejo del factor dinero aunque puede haber ocasiones en las que tengamos lecturas enfrentadas. Durante las grandes tendencias, factor dinero y factor psicológico apuntan en el mismo GRÁFICO 7-8 Gráfico resumen de la Evidencia y conceptos 23 LA HOJA DE CONTROL DE EVIDENCIAS EN ECONOMÍA Y BOLSA sentido. Sin embargo, cuando algo está cerca de cambiar se podrán observar ciertas señales de peligro, tanto en el factor dinero como en la psicología, que nos deben poner alerta. Determinar correctamente el estado global de la psicología, la liquidez y el ciclo histórico hará que las posibilidades de acertar la tendencia de los índices sean muy ele- vadas. Lógicamente, esto hará que nos fijemos en sectores en concreto y que finalmen- te, lleguemos a tomar posiciones en acciones específicas. No obstante, conviene recor- dar que hay más activos como el oro, las commodities o materias primas y/o los bonos que ofrecen buenas oportunidades de inversión siguiendo la Evidencia en bolsa. A través de la tabla mostrada podrá clasificar el aspecto de los mercados de manera sencilla. Como puede observar, en la parte superior de la “hoja de control de evidencias” tiene tres cuadrados para rellenar. Tendrá un hueco para marcar la esta- ción actual de Kondratieff (primavera, verano, otoño e invierno), la situación del factor dinero y la del factor psicológico en su conjunto (positivo, negativo o neutral). Le reco- miendo que consulte el final del capítulo 2 donde están definidas las características de cada estación. Aunque no es estrictamente necesario, le ayudará a entender los movi- mientos y las posibles excepciones en el comportamiento de ciertas relaciones entre productos o evidencias. En la hoja mostrada tiene diferenciados los principales componentes tanto del factor dinero como del factor psicológico. Serán cinco componentes en cada uno y que sumarán puntos o restarán. En el factor dinero tiene los siguientescampos para relle- nar: Tipos de Interés: Será positivo cuando estén en niveles bajos y estables, es decir, cuando la política de crédito fácil se está aplicando. Será negativo cuando estos tipos de interés asciendan tanto que lleguen a estar en niveles cercanos a la rentabili- dad del bono a 10 años enfriando demasiado la economía y haciendo que el factor dinero pase a negativo. La idea de comparar con el bono es para tener una “vara de medir” y saber lo que es demasiado alto y excesivamente bajo. Bonos: Será positivo cuando su precio ascienda siempre que no haya riesgos deflacionarios en el horizonte o no estemos inmersos en un invierno de Kondratieff. Aunque no sepa de ciclos, por lo general y como norma, un precio del bono al alza es bueno para el factor dinero, ya que acaba canalizando los flujos de capitales a la bolsa, aunque usted esto ya lo debe saber. Será negativo cuando su precio caiga de manera abrupta o su rentabilidad ascienda rápidamente. La mayoría de mercados bajistas o cracks en bolsa se han producido por una repentina caída en esta Evidencia. Inflación: Es casi lo mismo que decir precios de las materias primas. Recuerde que una inflación muy elevada o negativa genera mercados laterales, bajistas, o inclu- so muy bajistas. Controlar este indicador es fundamental. La inflación tiene un marca- do carácter cíclico que debe estudiar. Seguramente lo verá muy claro cuando nos meta- mos de lleno a analizar las principales crisis desde 1600. Será positiva cuando la infla- ción no caiga del 0% ni supere el 6% anualizada. Divisa: Tendrá consecuencias positivas cuando la divisa líder se fortalezca o al menos se mantenga estable. La divisa líder es el dólar y en él tendremos que fijarnos especialmente. Tenga en cuenta el fenómeno del “Carry Trade” explicado en el capítu- lo 3 y cómo puede llegar a afectar a la bolsa. Será negativo cuando el dólar haya expe- rimentado una caída superior al 30-40% durante algunos años. Precio-Dividendo: La bolsa podrá ser una ganga cuando el ratio se sitúe entre 10 y 15; será barato cuando esté entre 15 y 20; lo consideraremos neutral cuando esté entre 20 y 25 y comenzará a ser caro cuando pase de los 25 y muy caro cuando su ratio pase de los 35 en adelante. Ya conoce los detalles de este ratio y no haré mucho 24 hincapié. Recuerde que depende mucho de los dividendos y del precio del índice, pero por lo general una relación barata ha conducido con paciencia a fenomenales merca- dos al alza e igualmente a la inversa. Habrá algunos de estos indicadores que sean imposibles de obtener en fechas anteriores a 1870-1900, especialmente el ratio precio-dividendo, los tipos de interés o la divisa, por lo que se analizará como podamos, pero siempre buscando una explica- ción en los flujos de capitales, que es donde está el quid. En cuanto al aspecto psico- lógico, será prácticamente imposible obtener datos anteriores a 1920 ya que en primer lugar, ni siquiera existía el análisis técnico como lo conocemos hoy, y en segundo lugar, no hay datos informatizados ni asequibles para confeccionar una media de 30 sema- nas, MACD, Summation etc. Verá cómo, por lo general, las grandes crisis vienen pre- cedidas de grandes expansiones de crédito y subidas en bolsa de la industria de moda. No somos tan diferentes a aquellos inversores de hace 200 años. El factor psicológico vendrá marcado por las siguientes evidencias: MM30: Es la media ponderada de 30 semanas explicada extensamente en mi pri- mer libro Aleta de tiburón: tácticas de un operador en bolsa. Su interpretación es sen- cilla, será positiva cuando su pendiente sea alcista, será neutral cuando su pendiente sea cero y será negativa cuando su pendiente marque caída o sea negativa. Es una medida sencilla de la fase actual de mercado y marca muy bien las tendencias de medio plazo. Div MACD: En este apartado se deberá marcar si el MACD semanal ha realiza- do alguna divergencia bajista o alcista que ponga en peligro la tendencia actual de la bolsa. Estas señales suelen dar avisos premonitorios y están basados en la forma de ascender o descender del mercado. Si es poco convincente y con debilidades y dien- tes de sierra, entonces el MACD suele marcar divergencias rápidamente. Div Small & BlueChip: Si observa que el mercado sube sólo con las acciones de mayor capitalización mientras el resto no lo hace, marque un “Sí a la baja” en esta casilla. Por lo general, esta señal suele estar acompañada de las otras dos evidencias de la psicología que siguen. Puede darse cuenta de diferentes maneras, pero un mer- cado que asciende de manera repentina con unos pocos valores es signo de algo muy malo. Al igual sucede a la inversa. Si se percata que son pocos los valores que caen, y cada vez son menos pero el mercado hace nuevos mínimos, puede ser que las caí- das estén cerca de finalizar. Summation y NYA200R: Si este indicador no marca divergencia se debe escri- bir que “Acompaña a la tendencia”. Puede ser que alguno de estos indicadores marque señal, pero si no es confirmada por los otros, entonces probablemente sea una señal falsa. La idea es usar elementos que lean la información y si la conclusión es la misma 25 en varios de ellos, entonces actuar. Si marca divergencia, debe marcar “No acompaña a la tendencia”. OTROS INDICADORES A TENER EN CUENTA: CONFIANZA DE LOS CONSUMIDORES, ECRI, CONSUMER METRICS INSTITUTE GROWTH (CMIG), BALTIC DRY INDEX (BDI) E ÍNDICE DE DESEMPLEO Antes de pasar a la historia de las grandes crisis y pánicos desde 1600, vamos a hacer una aproximación a otros indicadores que no son ni de factor dinero ni de factor psicológico. Son relaciones interesantes que nos cuentan cómo discurre la economía y sobre su salud. En algunos casos, veremos cómo no nos dan casi margen para actuar, como en el caso de la confianza de los consumidores de la Universidad de Michigan. En otras ocasiones el ECRI y el CMIG (Consumer Metrics Institute Growth) nos darán ciertas señales clave y adelantadas, mientras que el Baltic Dry Index (BDI) nos infor- mará sobre la marcha del comercio y de sus implicaciones con el precio del petróleo y la economía. Si el BDI influye sobre el precio del petróleo, es lógico pensar que afec- tará a los precios en general y éstos sobre las políticas monetarias y por tanto a todo el sistema global. Recuerde, todo está relacionado. La encuesta de los consumidores de la Universidad de Michigan parte de la premisa de que los gastos del consumidor dependen de dos factores: el poder y la dis- posición a comprar. El poder de compra lo definen los ingresos y los activos de los con- sumidores, la disposición a comprar está condicionada por las perspectivas futuras de trabajo e ingresos de los consumidores. Así, cuando los consumidores se sienten opti- mistas incrementarán sus gastos y cuando éstos se muestren pesimistas sus gastos decrecerán y su ahorro tenderá a incrementarse. La Universidad de Michigan elabora una estadística sobre 500 consumidores que son entrevistados por teléfono y a quienes se les pregunta sobre finanzas personales, condiciones económicas y de compra. Cada mes repiten la encuesta estadística al 40% de los encuestados del mes anterior, y el restante 60% son nuevos. El fin de esta encuesta es destacar que las perspectivas de consumo influyen directamente sobre la demanda y con ello sobre la producción y el empleo. El índice se construye con base a las respuestas de cinco preguntas: dos asociadas a cómo ha cambiado recientemen- te la situación financiera del hogar y cómo se espera cambie a lo largo del año, dos pre- guntas referentes a la situación económica del país a corto y largo plazo, y una última pregunta sobre las condiciones de compra de bienes no perecederos. En conclusión, el índice de confianza del consumidor de Michigan mide las expectativas sobre el entor- no económico que tienen los hogares, el cual impacta sobre sus decisiones de compra y de ahorro. 26 27 Este índice suele estar muy expuesto a las condiciones reales de la economía y tiene un efecto retroalimentadoen el que malas perspectivas generan desconfianza, caída de consumo, subida del desempleo y nuevamente peores perspectivas. Si estu- dia el Gráfico 7-9, se dará cuenta de cómo este indicador puede adelantarse en unos pocos meses a los periodos recesivos, pero en otras ocasiones no se anticipará. No parece un indicador decisivo, pero suele mover los mercados en el corto plazo o intra- día. El índice ECRI en realidad es el “ECRI's Weekly Leading Index” o WLI y está concebido para predecir los principales ciclos económicos en EEUU. Durante diez años ha tenido una correlación del 69% con respecto al crecimiento del PIB estadouniden- se, siendo su poder predictivo sobre la economía de aproximadamente 6 meses. Así, cuando este indicador pierde el nivel de -10 es bastante probable que la economía entre en recesión antes de 6 meses. En el Gráfico 7-10 puede observar los periodos recesivos (fondo gris) con los cre- cimientos de PIB en barras gris oscuro y una línea negra que representa el índice líder del ECRI o WLI. Fíjese cómo cuando este indicador pierde niveles de cero para acer- carse al -10 se genera una recesión. Así fue en 1970, 1973, 1979, 1982, 1991, 2001 y 2008. Hubo tres lecturas cercanas a -5 que no acabaron en recesión que fueron 1987, 1998 y 2003. A comienzos de 2010 el índice marcaba de nuevo recesión, lo que debe- ría advertirnos del peligro inminente para la bolsa. GRÁFICO 7-9 Confianza del consumidor de la U.MICHIGAN 1977-2010 28 El índice líder del ECRI es uno de los que están consiguiendo repercusión y fama por la certeza y premura con la que predice las recesiones. Debe quedar claro que estos indicadores son apoyos a la teoría de ciclos seculares pero en ningún caso serán sustitutivos del análisis del factor dinero y psicológico, aunque tendrán algo que ver por su medición sobre la confianza y marcha de la economía. El índice de crecimiento CMIG será otro de los indicadores a tener en cuenta para anticiparnos al PIB de EEUU. Podrá obtener una actualización semanal en la pági- na de dshort.com, como otros índices e indicadores de interés. Este índice se puede expresar mediante una media de 91 días, lo que representa un cuatrimestre. Este índi- ce nos da una lectura casi en tiempo real del comportamiento del consumidor sobre una extensa variedad de productos, desde automóviles pasando por contratación de viajes, productos electrónicos etc. Teniendo en cuenta que dos tercios de la economía de EEUU dependen del consumo directo, este indicador tendrá capacidades predicti- vas claras. A continuación podrá examinar cómo se compone la media de 91 días sobre estos datos y cómo se trabaja a partir de ahí. GRÁFICO 7-10 Índice líder del ECRI o WLI desde 1965 29 El índice CMIG no es un indicador muy longevo pero ha demostrado ser uno de los mejores a la hora de detectar los últimos cambios del PIB norteamericano. El Gráfico.7-11 muestra cómo se compone la media de 91 sesiones desde los datos obte- nidos directamente del comportamiento del consumidor. El Gráfico 7-12 le mostrará este indicador con la última recesión de 2008 puesta con fondo gris para que pueda leer el gráfico correctamente. Por último, el Gráfico 7-13 le mostrará cómo funciona el CMIG a la hora de predecir el movimiento de la bolsa visto por el S&P500. Si estudia al detalle el CMIG, verá cómo en el Gráfico 7-12 hay varias ocasiones en las que pierde el nivel cero sin implicar una recesión (pérdida de PIB en dos trimes- tres consecutivos). Si se da cuenta, estuvo muy cerca de producirse. En otras ocasio- nes, como en el 2008, no es hasta que esta recesión está avanzada cuando el CMIG cae. Sin embargo, a la hora de predecir la salida de la recesión fue un indicador certe- ro, poniéndose por encima del nivel cero a comienzos de 2009. Ya conoce las otras evi- dencias y señales que se dieron entre enero y marzo de 2009. Si suma verá cómo en ocasiones las señales son coincidentes y claras. En agosto de 2010, de nuevo mues- tra señales preocupantes de una doble recesión, algo que sólo ha ocurrido una vez desde la Gran Depresión, a comienzos de los 80 en EEUU. GRÁFICO 7-11 Índice CMIG en su versión no depurada 30 GRÁFICO 7-12 Media de 91 sesiones del índice CMIG con PIB USA GRÁFICO 7-13 Media del índice CMIG vs S&P500 desde 2005 a 2011 31 El Gráfico 7-14 le muestra el gráfico con todos estos indicadores económicos mostrados en una misma plantilla. De esta manera puede ver que igualmente la bolsa suele adelantarse tanto a las recesiones como a las recuperaciones de la economía y por este motivo es doblemente complicado encontrar un indicador que se adelante tanto al PIB como a la bolsa. Sería como encontrar el indicador adelantado del índice adelantado. Lo realmente interesante del CMIG son las divergencias que pueden surgir en el gráfico. Si se fija, el nuevo mínimo de comienzos de 2009 se producía con un CMIG claramente en crecimiento, mientras que en agosto de 2010 los nuevos máximos de la bolsa no son acompañados por un CMIG positivo. Esto nos da una lectura de la fiabili- dad del movimiento del mercado y de si nos encontramos cerca de un giro. El índice seco del Báltico (BDI, en inglés) que mide la evolución del precio del transporte por mar de las materias primas más importantes (mineral de hierro, trigo, algodón...) y se considera uno de los mejores barómetros económicos. Su oscilación varía con la actividad global (depende del crédito, de la demanda de materias primas y de la preparación de la producción) y no tiene carácter especulativo. El Gráfico 7-15 extraído de stockcharts.com le muestra su evolución. GRÁFICO 7-14 Media del índice CMIG versus SP500 y PIB USA 32 El gráfico muestra algunos aspectos técnicos como divergencias del MACD aun- que es un índice altamente volátil. Como es lógico, su precio dependerá de las mate- rias primas a transportar y de la demanda de transporte y comercio mundial. Cuando el ciclo económico es bajista, el comercio tiende a resentirse y, por tanto, los precios de flete. La oferta de barcos influye también en este índice de precios. Fíjese en cómo el precio del BDI pasa de 11.600 puntos a 663, una caída cerca- na al 95%. Se citan varias causas en tal descalabro: desde la puesta en circulación de una buena cantidad de barcos nuevos hasta la caída real del comercio mundial y del petróleo. Naturalmente, confluirían todas ellas y sumarían sus efectos. El Gráfico 7-16 y 7-17 le enseña la relación del BDI con las materias primas y con el petróleo en parti- cular. Ciertamente, parece que el BDI va a su aire, mientras que las materias primas ascienden, sin embargo se nota cierto adelanto del BDI con respecto a las materias pri- mas. No sabemos muy bien si la caída del precio de las materias primas hace caer el precio de los fletes o es realmente la caída del comercio el principal causante de la caída de precios en las materias primas y en los fletes. Para resolver este enigma, insisto en que la mejor manera es estudiar los gráficos y tratar de extraer nuestras pro- pias conclusiones. GRÁFICO 7-15 Índice Seco del Báltico o Dry Baltic Index: BDI 33 GRÁFICO 7-16 Índice BDI y petróleo desde 2004 hasta 2010 GRÁFICO 7-17 Índice BDI, Petróleo y CRB desde 2004 hasta 2010 34 Lo que a mí me interesa es que usted extraiga sus propias conclusiones, aunque luego yo le cuente las mías, y además haga un estudio para determinar el motivo de estos comportamientos. La línea gris punteada es el petróleo mientras que la puntea- da es el índice CRB (TR/J) y la línea negra continua es el BDI. La caída de la materia prima en 2008, además de por otras causas, vino determinada por un derrumbe claro y rápido del comercio internacional motivada por la crisis que se estaba desatando en la mayor parte de economías en el mundo. Si este índice no se recupera, es muy pro- bable que no sólo nos esté mostrando una débil recuperación en el comercio interna- cional y, por tanto, en la actividad exportadora de muchas naciones, sino que además, podría indicar que seguirán estancadas en una lenta recuperacióncon alguna otra nueva contracción. En el Gráfico 7-18 puede ver cómo el nuevo mínimo de comienzos de 2009 en la bolsa no es seguido por un nuevo mínimo del BDI, lo que indicaba que la caída podía estar tocando fondo. Por último le quiero enseñar el índice de desempleo, un indicador atrasado, pero que sirve para confirmar las vueltas al alza del mercado en el medio plazo. El gráfico está extraído de dshort.com y se incluye el S&P500 (línea negra) y en la parte inferior, la tasa de desempleo en %. Las zonas sombreadas representan las recesiones en EEUU. Como vemos a través de un estudio del gráfico, cada pico en la tasa de desem- pleo supone una ratificación de las alzas en bolsa. La tasa de desempleo se moverá siempre inversamente al precio de la bolsa. GRÁFICO 7-18 Índice BDI e índice S&P500 desde 2004 hasta 2010 35 Existen estudios que relacionan la inflación con la creación de empleo y por tanto con la solidez de las subidas en bolsa. En cualquier caso, este indicador debe conside- rarse atrasado pero de alto valor confirmativo en las nuevas tendencias al alza. GRÁFICO 7-19 Índice de desempleo contra S&P500 desde 1948 hasta 2010 36 RESUMEN DEL CAPÍTULO - Será interesante que trabaje con una plantilla donde mida objetivamente el fac- tor dinero y el factor psicológico. Pondere cada aspecto de manera que cuando la mayoría de evidencias señalen a un sentido tome las decisiones correctas. - Los indicadores de amplitud podrán ayudarle a determinar los giros más impor- tantes de mercado, ya que la mayoría de éstos vienen precedidos de divergen- cias en los indicadores de amplitud con respecto a la bolsa. Podrían ser, senci- llamente, el factor clave para ajustar el “timing” (momento de la compra o venta) en su operativa. Es decir, si sabe que la tendencia global de los mercados corre peligro porque ambos factores (dinero y psicología) comienzan a dar señales de peligro, seguramente el McClellan Summation Index o el indicador de nuevos máximos/nuevos mínimos determinarán el punto exacto del giro esperado. - Además, existen otros indicadores económicos que, aunque menos fiables que el resto de indicadores y evidencias, ayudan a confirmar el ciclo económico anti- cipado por la bolsa. Para entender a sus compañeros traders o inversores, es necesario que sepa al menos de su existencia. CAPÍTULO 8: LOS CICLOS SECULARES DE KONDRATIEFF Y SU INFLUENCIA EN LAS GRANDES CRISIS, PÁNICOS BURSÁTILES Y BANCARIOS. Las bolsas de valores no son un juego que pague algo por nada, o mucho por poco. Es un juego que recompensa a los que estudian las condiciones que provocan los movimientos en las bolsas. Aquellos que ganan dinero con la especulación, no lo consiguen por casualidad. Ganan porque antes de lanzarse en cada opera- ción han hecho todo lo posible por eliminar el riesgo. R.W. McNeel No creo que los sistemas de trading sean tan vulnerables como para dejar de funcionar cuando se hacen públicos. Si tu sistema es bueno, funcionará de todas formas. Estoy seguro de que se podrí- an publicar las reglas del sistema en un periódico y nadie las seguiría. La clave está en la disciplina y la consistencia. Richard Dennis LAS GRANDES CRISIS EN BOLSA Y SU CABIDA EN LOS CICLOS Vamos a estudiar en profundidad las principales crisis financieras y especialmen- te las bursátiles desde la declaración de independencia de los EEUU en 1783 y la redacción de su primera constitución en 1787. Obtener datos de cotizaciones de índi- ces, rentabilidad de bonos, índices de precios al consumo etc… es prácticamente una tarea imposible, pero curiosamente los datos de EEUU son más fáciles de encontrar y están menos dispersos. Investigando se pueden obtener datos de muy diferentes mer- cados pero coincidirán casi en su mayoría a medida que la globalización se ha ido pro- fundizando más en la historia económica. Aunque la globalización como la conocemos no se iniciará a partir de 1870 con las primeras crisis financieras a nivel global, es inte- resante tomar de inicio este mercado americano y estudiar sus ciclos y relaciones entre productos o evidencias. Usaremos el modelo de ciclos de Kondratieff para explicar las diferentes fases, aunque apreciará cómo realmente no es necesario conocer muchos detalles de su teo- ría para darnos cuenta de la existencia de ciclos en los precios que ocasionan los gran- des avances y cracks o crisis financieras y bursátiles. Veremos cómo los picos y los 37 38 suelos en los precios marcan las tendencias, y esto influirá en la moderna política de tipos de interés de los bancos centrales. Además, verá cómo la rentabilidad de los bonos oscila en función de la situación política y económica y cómo está todo interre- lacionado a pesar de separarnos tantas décadas. El Gráfico 8-1 le muestra un gráfico global del precio de las materias primas desde 1730 hasta 2006. Fíjese cómo el gráfico no supera nunca la zona de los 150 hasta la última década de los 70. La economía siempre se ha movido en patrones de crecimiento moderado con precios controlados férreamente. Hasta los 70, no hay infla- ción real, ¿se ha fijado? Esto es importante a la hora de entender el gráfico del S&P. Aunque parezca que en las últimas décadas hemos tenido un crecimiento impresionan- te, puede que no sea tan increíble como pueda estimar en un principio. Tampoco voy a negar que los avances y el crecimiento fueron enormes. El progreso ha sido intenso pero, por una vez en la historia económica, se ha hecho con tasas de inflación eleva- das, lo que resta crecimiento real a esta situación idílica de prosperidad. Es lo que yo denomino la paradoja del crecimiento (probablemente tenga otro nombre técnico). Muchos lectores mirarán los avances previos a 1900 y tendrán la sen- sación de que la bolsa apenas avanza porque su gráfico experimenta pocos avances, sin embargo, no se percatan de que estos avances son realizados sin apenas inflación, es decir que los precios en 1770 podían ser similares a los de 1933. En páginas pos- GRÁFICO 8-1 Precios de las Materias Primas de 1730 a 2006 teriores volveremos a este punto, pero tenga en cuenta que si un índice bursátil pasa de 100 a 500 con una moneda que pasa de valer 1,00 a 0,50, quiere decir que el cre- cimiento real ha sido de 2,5 veces y no 5 como puede parecer. Esto lo quiero explicar antes de mostrarle el gráfico de largo plazo para que no subestime las alzas y retroce- sos anteriores a 1900. Es cierto que es difícil imaginar la deflación en nuestros días, con un banco cen- tral que está pendiente de que esto no suceda, sin embargo, cíclicamente se ha produ- cido y la humanidad ha sobrevivido, aunque bien es cierto que con tensiones y guerras cada pocos años. Por otra parte, la inflación excesiva si no se controla puede traer con- sigo efectos perniciosos para la economía como puede ser la aparición de burbujas más frecuentemente, exuberancias irracionales, shocks bancarios, devaluaciones con- tinuas o crisis monetarias y un aumento desorbitado de la deuda de los países como EEUU y otros con elevadas tasas de crecimiento pero basados en modelos de infla- ción. La siguiente parte del capítulo se dividirá en las cuatro etapas de Kondratieff desde 1787 hasta el final del cuarto ciclo estimado entre 2015 y 2020. Se explicarán las principales crisis y el papel histórico de las evidencias bajo estos contextos. Esto será la puesta en práctica de todo lo estudiado sobre Evidencia. Pero antes de zambu- llirnos en estos “mega” ciclos, veremos algunas otras manías y burbujas acontecidas antes de los estudios de Kondratieff. En su ensayo de investigación, En esta ocasión es diferente: Visión panorámica de 800 años de locuras financieras, Carmen M. Reinhart y Kenneth S. Rogoff, docu- mentan todas las crisis que han existido en sesenta países desde hace aproximada- mente ocho siglos, comenzando por la ocurrida en Austria en 1282, mucho antes de que naciera el capitalismo y luego la de Eduardo III de Inglaterra en 1340, quien al no pagar la deuda a banqueros italianos (tras una invasión fallidaa Francia que dio inicio a la Guerra de los Cien Años), causó la quiebra de los florentinos y una severa rece- sión en Italia. Carlos V y Felipe II, reyes españoles del siglo XVI tampoco pagaron sus obligaciones contraídas, falsificaron monedas y causaron crisis generalizadas en toda Europa, una especie de estanflación (inflación acompañada de estancamiento econó- mico). Según Kindleberger y Aliber en su libro sobre manías y pánicos, las diez mayo- res burbujas de la historia fueron: 1. La burbuja holandesa de los bulbos de tulipán de 1636. 2. La Compañía de los Mares del Sur en 1720. 3. La burbuja de la Compañía del Mississippi de 1720. 4. La burbuja especulativa en activos y acciones de 1927–1929. 5. La crisis de deuda de México y otras naciones en desarrollo durante los 70. 39 6. La burbuja inmobiliaria y de acciones de Japón durante 1985–1989. 7. La especulación desmedida en bienes inmuebles y en acciones de los países nórdicos como Finlandia, Noruega y Suecia de 1985–1989. 8. La burbuja inmobiliaria y de acciones asiáticas de Tailandia, Malasia, Indonesia y otros países y regiones del sudeste asiático durante 1992–1997. 9. El aumento increíble de la inversión extranjera en México de 1990–1993 10. La burbuja sin precedentes sobre todo tipo de acciones y activos financieros estadounidenses de 1995–2000. Nosotros trataremos todas ellas; además de algunas otras crisis y recesiones adi- cionales para determinar el papel en los precios bursátiles del factor dinero o de la liqui- dez. La Evidencia podrá alertarnos de situaciones de burbuja cuyas consecuencias son, en la mayoría de los casos, calamitosas para aquellos que invierten sus ahorros en bolsa al final de estas épocas. CRISIS PREVIAS AL PRIMER CICLO DE KONDRATIEFF La crisis del valor y fineza de las monedas o Kipper- und Wipperzeit consistió en una crisis de confianza y de valor en las propias monedas, sin que interviniera nin- gún elemento de crédito, solamente en el dinero en metálico. Príncipes, abades, obispos e incluso el emperador comenzaron a reducir el peso y ponderación del metal de las monedas sin modificar el valor de las mismas o mezclar el cobre con metal precioso. La expresión de que la mala moneda retira de circulación a la buena moneda corresponde a Thomas Greshman, quien fue Ministro de Finanzas de la reina Isabel I de Inglaterra. Las casas de monedas se especializaban en acuñar monedas falsas. Así se preparaban para la Guerra de los Treinta Años, que estalló en 1618. La degradación metálica y de fineza se limitó en un principio, a su propio territo- rio pero rápidamente surgiría la picaresca. Algunos descubrieron que era más rentable pagar con “moneda mala” y distribuirla a través de las fronteras en principados vecinos para cambiarlas por monedas buenas. Cuando los condados o países vecinos se daban cuenta del engaño recurrían a las mismas tácticas contra el reino o país falsifi- cador y así construir su tesoro de guerra monetaria (recuerda en cierta medida a la gue- rra de divisas de 2010). Finalmente, más y más casas de moneda se establecieron para falsificar más monedas, de tal forma que esta degradación acelerada concluyó en una hiperinflación, llegando al punto de que las monedas prácticamente no tenían valor y los niños juga- ban con ellas en la calle. Empezando a pequeña escala, a comienzos del 1600, la degradación lentamente se aceleró después de 1618 y se extendió sobre Alemania y Austria. Sin la menor preocupación, los reinos y países estaban reduciendo el valor de 40 las monedas contribuyendo a un exceso de liquidez que hizo que las tuberías del modelo de las evidencias estallaran por completo al tener un vehículo de pago sin nin- gún valor. La economía se detiene en seco y la confianza cae en picado. La guerra pos- terior fue el desencadenante de todo esto, y aunque no había una bolsa de valores organizada para fijar y medir las consecuencias de esta expansión mayúscula de la liquidez y de la caída del valor de las monedas, ya nos damos cuenta de sus conse- cuencias si no se controla adecuadamente. La fiebre de los tulipanes de 1637, o tulipomanía, fue un periodo en la Edad de Oro neerlandesa durante el cual los precios del contrato para los bulbos del tulipán, introducidos recientemente en Europa desde oriente, llegaron a experimentar niveles extraordinariamente altos para pasado poco tiempo, derrumbarse. En el pico de la manía de los tulipanes de febrero de 1637, algunos bulbos de tulipán se vendieron a más de 10 veces el salario anual de un artesano experto, una auténtica exageración para aquella época. En algunas historias se habla de cambios de un único bulbo por mansiones, o por extensiones de terreno superiores a 10 hectáreas. Se considera la primera burbuja especulativa registrada aunque algunos investigadores señalan a la crisis de las monedas de 1619-1622 como anterior a la de los tulipanes. La investigación sobre la tulipomanía es difícil debido a la escasez de datos de la década de 1630. Gran parte proviene de fuentes parciales y anti-especulativas. Algunas otras flores como el Jacinto, también tenían altos precios durante la introduc- ción de la flor, que luego se redujo drásticamente una vez su oferta aumentaba y deja- ba de ser un producto exclusivo y de lujo, mientras su producción dejaba de ser un mis- terio. La flor del tulipán fue introducida en Europa a mediados del siglo XVI proceden- te del Imperio Otomano, y se hizo muy popular en las Provincias Unidas (hoy Países Bajos). Su cultivo en las Provincias Unidas empezó a aumentar en torno a 1593, des- pués de que el botánico flamenco Charles de l'Écluse plantó en la universidad donde ejercía, su colección de tulipanes, bulbos que le envió desde Turquía el emperador Fernando I, emperador del Sacro Imperio. La flor rápidamente se convirtió en un codiciado objeto de lujo y un símbolo de estatus social. Las variedades se clasificaron por grupos, los tulipanes de color rojo, amarillo o blanco eran conocidos como Couleren, pero fue el de multicolores Rosen (rojo o rosa sobre fondo blanco), Violetten (morado o lila sobre fondo blanco) y, en menor medida, la Bizarden (rojo, marrón o púrpura sobre fondo amarillo), los que fue- ron más populares y demandados. Los comerciantes firmaron contratos ante notario para comprar tulipanes al final de la temporada (los actuales contratos de futuros). Así, muchas de las técnicas de las finanzas modernas se desarrollaron en este país. Finalmente se creó un mercado para los bulbos de tulipán, y los compradores se 41 42 GRÁFICO 8-2 Índice de precios del bulbo de tulipán de 1636 a 1637 endeudaban con prestamistas para poder comprar y después revender los bulbos a un precio mayor. Todo iría bien mientras el precio de los bulbos siguiera ascendiendo. La venta al descubierto de contratos de futuros sobre bulbos fue prohibida por un edicto en 1610. Como las flores crecieron en popularidad, los cultivadores profesionales recibían precios más elevados por los bulbos de colores y formas más exóticas posibles. En 1634, en parte como resultado de la demanda de los franceses, los especuladores empezaron a entrar en el mercado. El precio del contrato de bulbos raros seguía aumentando a lo largo de 1636. En noviembre, el precio del contrato de los bulbos de variedades comunes también comenzó a aumentar. Todo llegaría a su fin en febrero de 1637, cuando los precios de los contratos de bulbos de tulipanes se derrumbaron de repente, y el comercio de tulipanes cayó a su nivel anterior a la burbuja. Las burbujas se suelen iniciar por un exceso de liquidez o de crédito fácil, acompañado de caídas en las rentabilidades de otros productos tradicionales, como los bonos o certificados. Luego, una vez la moda o manía se ha instaurado, es difícil de parar pues siempre hay prestamistas dispuestos a arriesgarse. Earl Thompson creó un índice de precios del bulbo del tulipán. En el Gráfico 8-2 no existen datos de precios entre el 9 de febrero y 1 de mayo, por lo tanto la forma de Tulip price index from 1636-1637.Recogidos por Earl A. Thompson in Thompson, Earl (2007), "The tulipmania: Fact or artifact? 43 la disminución se desconoce. El precio de los bulbos de tulipán se derrumbó brusca- mente en febrero de 1637, de repente nadie quería comprar. La crisis de la Compañía de los Mares del sur de 1720. La “South Sea Company” era una compañía británica que cotizaba en América del Sur durante el siglo XVIII. Fundada en 1711, la compañía obtuvo un monopolio para el comercio en el sur de las colonias americanas de España como parte de un tratado durante la Guerra de Sucesión española. En cambio, la empresa asumió la deuda nacional de Inglaterra en la que había incurrido durante la guerra. La especulación en acciones de la compañía llevó a una gran burbuja económica conocida como la Burbuja de los Mares del Sur en 1720, que causó la ruina económica de muchos incautos, entre otros Lord Isaac Newton, que aunque no se arruinó, perdió 20.000 libras, una fortuna para la época (aproximadamente 3 millones de libras actuales). A pesar del estallido de la burbuja, la compañía se reestructuró y siguió funcionando durante más de un siglo. La empresa, fundada en 1711 por el tesorero Robert Harley, obtuvo los derechos exclusivos del comercio español de América del Sur. Se aplica el término "Mares del Sur" sólo a América del Sur y las aguas circundantes, no a cualquier otro océano. Los derechos se establecen tras la conclusión de la Guerra de Sucesión española, que no terminó hasta 1713. La Compañía de los Mares del Sur era una empresa comercial, aunque su acti- vidad principal era, de hecho, la financiación de la deuda pública de Inglaterra, ya que asumió ésta de forma completa. El gobierno y la compañía convencieron a los titulares de alrededor de 10 millones de libras de deuda pública a corto plazo para cambiarla por una nueva emisión de acciones de la empresa. A cambio, el gobierno concedió a la compañía una renta perpetua de 576.534 libras al año contenida en los libros de la compañía, o un préstamo perpetuo de 10 millones de libras con un interés del 6%. Esto garantizaba a los propietarios de capital nuevo un flujo constante de ingresos para esta nueva empresa. El gobierno pensó que estaba en una situación siempre ganadora, ya que iba a financiar el pago de intereses mediante la colocación de un arancel a los pro- ductos traídos de América del Sur. ¿Comprende la situación? Lo que abonaba perpe- tuamente por un lado lo obtendría mediante los rendimientos del comercio a través de aranceles, un negocio redondo demasiado bueno para ser cierto. El Tratado de Utrecht de 1713, concedió a la compañía el derecho de enviar un buque mercante al año, el Navío de Permiso (aunque esto fue en la práctica, acompa- ñado por dos "ofertas"), así como el Asiento de negros, el contrato de suministro de las colonias españolas con los esclavos. En 1717 la compañía adquirió otros 2 millones de libras en deuda pública inglesa. El titular de la deuda pública podría obtener acciones de la compañía a cambio de rescindir anualidades o letras. En 1719 la compañía propuso un esquema por el cual se compraba más de la mitad de la deuda nacional de Gran Bretaña (cerca de 31 millones de libras), de nuevo con nuevas acciones, y la promesa de que el gobierno pagaría un interés inferior al 5% hasta 1727 y un 4% por año desde esa fecha. El objetivo de esta conversión fue simi- lar al de la anterior: permitiría la conversión de los altos intereses de la deuda, y ade- más serían fácilmente negociables a través de acciones de la Compañía del Mar del Sur. Todas las partes ganaban. En resumen, la deuda pública total en 1719 (antes de la compra por parte de la compañía) fue de 50 millones de libras repartidas así: 18,3 millones estaba en manos de tres grandes corporaciones, 3,4 millones pertenecientes al Banco de Inglaterra, 3,2 millones perteneciente a la Compañía de las Indias Orientales británica y finalmente 11,7 millones por la Compañía del Mar del Sur. La proporción de los titulares de rentas vitalicias que podría tener la tentación de convertir sus valores de renta fija a un precio muy alto por nuevas acciones fue muy grande. La Compañía de los Mares del Sur podría fijar el precio de conversión, pero no podía marcar el precio de mercado de las propias acciones. La empresa transmitía a sus accionistas los rumores más extravagantes del valor de su comercio potencial con el Nuevo Mundo, que fue seguido por una ola de especulación desenfrenada. El precio de la acción había aumentado desde que se propuso el esquema: a partir de 128 libras en enero de 1720, a 175 libras en febrero, 330 libras en marzo y, tras la aceptación del régimen de pagos, hasta 550 libras a finales de mayo. Lo que apoyaba este ascenso del precio de la acción era un fondo de crédito de 70 millones de libras, disponible para la expansión comercial. En junio de 1720, se aprobó una ley en el Parlamento con el fin de controlar las burbujas. Se conoció comúnmente como la Ley "Bubble". Asimismo, se autorizó la cre- ación e incorporación de la Royal Exchange Assurance y la Corporación de Garantía de Londres. La aprobación de la Ley añadió un impulso a la South Sea Company. Sus acciones alcanzaron el valor de 890 libras a principios de junio. Este pico alentó a la gente a vender. Los directores de la compañía ordenaron a sus agentes comprar, así se apuntaló el precio en 750 libras. El precio llegó finalmente a la increíble cifra de 1.000 libras a principios de agosto, y el nivel de ventas fue tal que el precio comenzó a caer. La burbuja había explotado. Comenzaron a surgir rumores sobre la mala marcha de la compañía y sobre el desconocimiento del público en general de su negocio. Sus acciones cayeron a 100 libras por acción antes de que finalizara el año, provocando quiebras entre los que habían comprado a crédito o se apalancaron en exceso. Como resultado, muchos de los accionistas no podían responder de sus créditos para la com- pra de acciones a no ser que las vendieran. El declive coincidió con la caída de la Compañía del Mississippi de John Law en Francia. 44 45 Los problemas de la compañía ahora se extendían a los bancos ya que no podí- an cobrar los préstamos realizados a la población, y miles de personas se arruinaron (incluyendo muchos miembros de la aristocracia y el compositor Handel). Con los inver- sores indignados, el Parlamento comenzó una investigación en diciembre. En su infor- me de 1721, se reveló un fraude generalizado entre los directores de la empresa y el Gobierno. El Primer Lord del Tesoro Robert Walpole se vio obligado a introducir una serie de medidas para restablecer la confianza pública. Las haciendas de los directo- res de la compañía fueron confiscadas y las acciones de la Compañía del Mar del Sur fueron repartidas entre el Banco de Inglaterra y la “East India Company”. GRÁFICO 8-3 The South Sea Company de 1719 a 1723 46 La Carta de los Mares del Sur (de 1711) proporcionaba a la Compañía acceso exclusivo a todos los territorios de América Central y del Sur. Sin embargo, las zonas en cuestión eran colonias españolas, y Gran Bretaña estaba en guerra con España. Incluso una vez que se firmo el tratado de paz entre ambas partes, la Compañía de los Mares del Sur fue autorizada a enviar un solo barco por año a las colonias americanas de España. Tenía el derecho a transportar esclavos, aunque la trata de esclavos no era en absoluto rentable. Además el comercio de la Compañía se vio afectado por conti- nuas disputas entre Gran Bretaña y España. La Compañía no realizó viajes comerciales a América del Sur hasta 1717 e hizo poco beneficio real con ello. Por otra parte, cuando los lazos entre España y Gran Bretaña se deterioraron en 1718, las perspectivas a corto plazo de la empresa eran muy malas. No obstante, la empresa siguió manteniendo que su futuro a más largo plazo sería muy rentable. El principal negocio de compraventa de la compañía era el transporte forzado de personas compradas en África occidental y vendidas como escla- vos en las Américas.
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