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Universidad Nacional Autónoma de México Facultad de Medicina División de Estudios de Posgrado Secretaria de Salud Instituto Nacional de Cardiología “Ignacio Chávez” CATETERISMO CARDIACO EN PACIENTES PEDIÁTRICOS POSOPERADOS DE DERIVACIÓN CAVOPULMONAR TOTAL: EXPERIENCIA DE 15 AÑOS EN EL INSTITUTO NACIONAL DE CARDIOLOGÍA IGNACIO CHÁVEZ T E S I S P A R A O B T E N E R E L G R A D O D E S U B E S P E C I A L I S T A E N C A R D I O L O G Í A P E D I Á T R I C A P R E S E N T A D R . C A R L O S A L B E R T O B A D A C O R D E R O T U T O R D R A . G A B R I E L A P E R E I R A L Ó P E Z & D R . A L F O N S O B U E N D I A H E R N Á N D E Z C I U D A D D E M É X I C O J U L I O D E 2 0 1 9 UNAM – Dirección General de Bibliotecas Tesis Digitales Restricciones de uso DERECHOS RESERVADOS © PROHIBIDA SU REPRODUCCIÓN TOTAL O PARCIAL Todo el material contenido en esta tesis esta protegido por la Ley Federal del Derecho de Autor (LFDA) de los Estados Unidos Mexicanos (México). El uso de imágenes, fragmentos de videos, y demás material que sea objeto de protección de los derechos de autor, será exclusivamente para fines educativos e informativos y deberá citar la fuente donde la obtuvo mencionando el autor o autores. Cualquier uso distinto como el lucro, reproducción, edición o modificación, será perseguido y sancionado por el respectivo titular de los Derechos de Autor. Dr. Alfonso Buendia Hernández Editor en Jefe de la revista Archivos de Cardiología de México Tutor r~ x:/ ~( ./7 Dra. Gabriela Isabel Pereira López Adscrita al Departamento de Cardiología pediátl;9 / V Tutora JC-tL~ Dr. Juan Eberto Calderó n Colmenero -----_-=---=----=---=--=-_______ _ Jefe del Departamento de Cardiología Pediátrica Dr. Carlos Rafael Sierra Fernández Director de Enseñanza Dr. Carlos Alberto Bada Cordero Medico Residente de Cardiología Pediátrica 3 DEDICATORIA Agradezco al Instituto Nacional de Cardiología por darme la oportunidad de ser parte de esta gran familia. Durante estos dos años he sentido el afecto, apoyo y generosidad por parte de mis maestros, quiene nos comparten, diaramente, sus conocimientos en pro de nuestra formación como médicos cardiólogos pediatras. Especial mención merece el Dr. Alfonso Buendia Hernández y el Dr. Juan E. Calderón Colmenero, por su ardua labor y compromiso que ejercen en el insituto. Gracias a ellos, reconozco que la empatia y la calidez humana son factores impresindibles para alcanzar la excelencia médica. Sincero reconocimiento, respeto y admiración merece la Dra. Gabriela Pereira, cuya exigente docencia nos impulsa a superar los estándares de desempeño nacional. Quisiera hacer extensa mi gratitud hacia la Dra. Joan Celis Jasso, por la asesoría brindada en el rubro estadístico de este trabajo, con quien pude dialogar y vislumbrar los resultados. Asi mismo, quiero dedicar este trabajo a mi esposa Brenda Aguilar y a mi hijo Damian Bada Aguilar. Sin su apoyo y compañía, durante este proceso de formación, nada de esto sería posible. Ustedes me hacen crecer y superarme día con día. Ya por último y no por ello menos importante, a mis padres, quienes me dieron las bases y la disciplina desde niño, para llegar a alcanzar mis metas. 4 ÍNDICE 1 MARCO TEÓRICO .............................................................................. 7 1.1 INTRODUCCIÓN ................................................................................. 7 1.2 CLASIFICACIÓN ................................................................................. 8 1.3 CARDIOPATÍAS UNIVENTRICULARES ...................................................... 9 1.3.1 ATRESIA TRICUSPÍDEA CLÁSICA / AUSENCIA DE CONEXIÓN AV DERECHA ............. 9 1.3.2 ATRESIA PULMONAR CON SEPTUM INTERVENTRICULAR ÍNTEGRO (AP CON SIVI) ... 12 1.3.3 CANAL ATRIOVENTRICULAR DESBALANCEADO ............................................ 14 1.3.4 SÍNDROME DE VENTRÍCULO IZQUIERDO HIPOPLÁSICO (SX VIH) ...................... 15 1.3.5 DOBLE ENTRADA A VENTRÍCULO IZQUIERDO ............................................. 18 1.3.6 DOBLE SALIDA DEL VENTRÍCULO DERECHO (DSVD) .................................... 19 1.3.7 ANOMALÍA DE EBSTEIN SEVERA ............................................................ 20 1.4 HISTORIA NATURAL DE LA ENFERMEDAD DEL CUV .................................. 22 1.5 DIAGNÓSTICO ................................................................................ 22 1.6 TRATAMIENTO ................................................................................ 23 1.7 CIRUGÍA DE FONTAN ........................................................................ 24 1.8 INDICACIONES DE LA CIRUGÍA DE FONTAN ........................................... 26 1.9 REINTERVENCIÓN: CATETERISMO DESPUÉS DE UNA CIRUGÍA DE FONTAN ..... 27 1.10 DERRAME PLEURAL: COMPLICACIÓN DE CIRUGÍA UNIVENTRICULAR ......... 30 1.11 PRONÓSTICO ................................................................................ 31 2 PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA ................................................... 33 3 PREGUNTA DE INVESTIGACIÓN ...................................................... 34 5 4 JUSTIFICACIÓN .............................................................................. 34 5 OBJETIVOS ..................................................................................... 34 5.1 GENERAL ....................................................................................... 34 5.2 OBJETIVOS ESPECÍFICOS ................................................................... 35 6 DISEÑO DEL ESTUDIO .................................................................... 35 7 POBLACIÓN .................................................................................... 35 7.1 POBLACIÓN OBJETIVO ...................................................................... 35 7.2 POBLACIÓN DE ESTUDIO ................................................................... 36 8 CRITERIOS DE SELECCIÓN ............................................................. 36 8.1 INCLUSIÓN .................................................................................... 36 8.2 EXCLUSIÓN .................................................................................... 36 9 MATERIAL Y MÉTODOS ................................................................... 36 9.1 MATERIAL ...................................................................................... 36 9.2 MÉTODOS ...................................................................................... 37 10 VARIABLES DEL ESTUDIO ............................................................. 37 11 ANÁLISIS ESTADÍSTICO ............................................................... 39 12 CONSIDERACIONES ÉTICAS ......................................................... 40 13 CONFLICTO DE INTERESES ........................................................... 40 14 FACTIBILIDAD ............................................................................. 41 6 15 RESULTADOS ................................................................................ 41 16 DISCUSIÓN .................................................................................. 46 17 CONCLUSIÓN ................................................................................ 50 18 REFERENCIAS ............................................................................... 52 7 1 Marco teórico 1.1 Introducción Las cardiopatías congénitas (CC) son las malformaciones mas frecuentes, con una prevalencia a nivel mundial de 4 a 12 casos por cada 1,000 recién nacidos vivos(1). La incidencia de las CC es mucho mayor en los prematuros (56%)y recién nacidos con bajo peso (37%), que en los neonatos a termino (2). Alrededor del 25 – 30% de las cardiopatías congénitas se presentan en el contexto de síndromes malformativos o cromosomopatías, como en el caso de las trisomías 21, 18, 13 o el síndrome de Turner (45X), en donde la incidencia de CC es aún más alta. Las CC constituyen la principal causa de mortalidad por anomalías congénitas en lactantes (aproximadamente más de 30% de las muertes por anomalías congénitas y alrededor del 10% de todas las muertes en ese periodo de la vida) (3). En nuestro país, se desconoce con exactitud la incidencia real de las CC, reportándose de 8 a 14 casos por cada 1,000 recién nacidos vivos (4). El INEGI, en su reporte del 2015, registra que las malformaciones congénitas del sistema circulatorio ocupan el segundo lugar en México en mortalidad infantil en menores de un año (5). La etiología de las CC es variada e involucra factores tanto genéticos como ambientales, entre los que se encuentran (6): - Mutaciones de un gen o pares de genes 8 - Alteraciones cromosómicas estructurales - Enfermedad materna y exposición fetal a teratógenos. 1.2 Clasificación Las CC se clasifican de acuerdo con dos características principales: la presencia o no de cianosis y a la cantidad de flujo pulmonar, ya sea aumentado, normal o disminuido. Un grupo importante de cardiopatías congénitas debido a su complejidad y morbimortalidad, son aquellas que cursan con un corazón funcionalmente univentricular. Fue en el año 2012, en que el International Nomenclature Committee for Pediatric and Congenital Heart Disease propuso una definición genérica, exhaustiva y clínicamente útil para este tipo de cardiopatías: «Un espectro de malformaciones cardiovasculares congénitas en las que la masa ventricular no puede ser dividida de manera que tengamos una bomba ventricular para la circulación sistémica y otra para la circulación pulmonar. Esto podría ser debido a que tal división quirúrgica no sea anatómicamente factible o que no sea aconsejable». Por lo que definimos como corazón univentricular (CUV) a todas aquellas cardiopatías en la cual existe una sola cavidad ventricular funcional, compuesta por sus porciones anatómicas correspondientes de entrada, trabecular y de salida. 9 Las CC con fisiología univentricular representan el 10% del total de las cardiopatías, dentro de las cuales se encuentran: la atresia tricuspídea clásica o también llamada ausencia de conexión atrioventricular (AV) derecha (como la más frecuente), atresia pulmonar con septum interventricular integro, canal atrio ventricular completo desbalanceado, síndrome de corazón hipoplásico izquierdo, doble entrada a ventrículo izquierdo, algunas variantes de la doble salida de ventrículo derecho, y algunas formas de la anomalía de Ebstein (7). 1.3 Cardiopatías univentriculares Las manifestaciones clínicas de las CC varían dependiendo del tipo de cardiopatía, así como de su comportamiento fisiopatológico y hemodinámico. A continuación, se presentan las CC con fisiología univentricular más frecuentes, así como su comportamiento clínico. 1.3.1 Atresia tricuspídea clásica / Ausencia de conexión AV derecha Representa del 0.5 – 3% de todas las CC. Es una malformación congénita caracterizada por la ausencia de conexión atrio-ventricular derecha, con un ventrículo derecho (VD) rudimentario. La aurícula derecha no está conectada con la cámara ventricular subyacente, sino que se comunica con la aurícula izquierda a través de un foramen oval o de una comunicación interauricular (CIA). Además, existe una comunicación interventricular (CIV) y el conducto arterioso esta permeable. En esta entidad, la porción ventricular derecha no tiene tracto de entrada (por lo cual no puede ser considerada un ventrículo, sino una cámara infundibular), que igualmente 10 hace que se entienda como un tipo de corazón univentricular, en este caso de tipo izquierdo. La clasificación más aceptada actualmente es la de Tandon y Edwards, que agrupa más del 95% de los casos y en la que la atresia tricuspídea se divide en tres tipos, desde el punto de vista anatomopatológico. - Tipo I: concordancia ventrículo-arterial (70% de los casos) o Subtipo A: con atresia pulmonar o Subtipo B: con estenosis pulmonar o CIV restrictiva o Subtipo C: sin estenosis pulmonar y aumento del flujo pulmonar - Tipo II: con discordancia ventrículo-arterial (30% de los casos) o Subtipo A: con atresia pulmonar o Subtipo B: con estenosis pulmonar o Subtipo C: sin estenosis pulmonar y aumento del flujo pulmonar - Tipo III: un tipo raro de L-transposición de grandes arterias o Tipo A: con estenosis pulmonar o subpulmonar o Tipo B: con estenosis subaórtica El flujo venoso sistémico debe pasar de la aurícula derecha a la izquierda por la CIA, donde se mezcla con la sangre oxigenada proveniente de las venas pulmonares. Un factor importante que determina el crecimiento de las diferentes estructuras es la cantidad de sangre susceptible de ser oxigenada, la cual, proviene desde el tracto de salida del ventrículo derecho (TSVD), a través de la pulmonar directamente, o desde la aorta, a través del conducto arterioso y de la circulación colateral que 11 exista. Esta cantidad de sangre oxigenada, determinará el grado de saturación del paciente y, por lo tanto, el grado de hipoxia al que está sometido. Comprenderemos que las arterias y los ventrículos tienen una saturación de oxígeno similar, que siempre es baja, razón por la cual, estos pacientes son cianóticos desde el nacimiento, pero el grado de cianosis está influido por la cantidad de flujo sanguíneo pulmonar, el cual va a ser oxigenado. Las manifestaciones clínicas son cianosis desde nacimiento, taquipnea y pobre alimentación. Los estudios de gabinete incluyen: - Radiografía de tórax (Rx): en los pacientes con flujo pulmonar disminuido, la Rx muestra disminución del tamaño del VD y concavidad en el área de la arteria pulmonar. El ventrículo izquierdo (VI) es redondeado. En casos con flujo pulmonar aumentado, los pulmones muestran congestión y crecimiento cardiaco secundario a cortocircuito de izquierda a derecha. - Electrocardiograma (ECG): muestra onda P prominente, eje QRS desviado a la izquierda. - Ecocardiograma: es actualmente el principal método diagnóstico. Los datos aportados por este método son confirmar la ausencia de válvula atrioventricular derecha, así como establecer el tamaño del ventrículo derecho, la relación de las grandes arterias, la función ventricular izquierda y el tamaño de la CIA. La cirugía será ́ siempre paliativa. La reparación definitiva no es posible por las características anatómicas de esta entidad, y por este motivo se habla de una reparación fisiológica. Los cambios fisiológicos durante el crecimiento del niño son 12 tomados en cuenta para definir el tipo de cirugía. Algunos infantes con atresia tricuspídea y vasos en posición anatómica correcta, pueden sobrevivir durante los primeros 6 meses sin corrección quirúrgica paliativa. En los pacientes que sobreviven a la segunda década de la vida sin operarse, la sobrecarga crónica de volumen del VI usualmente produce cardiomiopatía y disminuye la contractilidad de dicho ventrículo (8,9). 1.3.2 Atresia pulmonar con septum interventricular íntegro (AP con SIVI) Constituye el 2.5 – 3% de las todas las CC. La malformación central es la completa obstrucción del tracto de salida del ventrículo derecho con anormalidades en el desarrollo del ventrículo derecho. No existe comunicación entre el ventrículo derecho y la arteria pulmonar siendo un conducto arterioso permeable o colaterales aortopulmonares la única fuente de flujo hacia los pulmones. Se ha asociado con anomalías importantes en las arterias coronarias; hasta en un 10% de los casos las arteriascoronarias proximales están obstruidas. Las caracteristicas del VD suelen ser muy variables, este puede ser severamente hipoplásico, con la sola presencia de la porción de entrada (unipartita) hasta ventrículos bien desarrollados con sus tres porciones de entrada, trabecular y salida (tripartita). Las arterias pulmonares casi siempre son confluentes. En la gran mayoría de casos, la circulación pulmonar está mantenida por el conducto arterioso o en algunos casos se pueden observar colaterales aortopulmonares. Las manifestaciones clínicas son cianosis durante el periodo neonatal y taquipnea. Los pulsos y la presión sanguínea pueden ser normales mientras que el 13 gasto cardiaco no se vea afectado. Una CIA pequeña puede causar hepatomegalia. El pulso yugular se encuentra elevado en los recién nacidos y no es un signo diagnostico útil. La actividad precordial es normal, el segundo ruido en el borde paraesternal izquierdo alto es invariablemente suave, único o inaudible. Algunos soplos intensos pueden ser encontrados, pero el más común es el soplo continuo de tono alto ubicado en el borde esternal izquierdo, secundario a conducto arterioso persistente. El hallazgo físico más consistente y fuerte después de que la prostaglandina E1 sea administrada, es la hipoxemia refractaria al incremento de la fracción inspirada de oxigeno. Un leve grado de hipocapnia refleja la taquipnea con acidosis metabólica. En la Rx las marcas vasculares pulmonares se encuentran reducidas y pueden ser confirmadas en la radiografía lateral donde las marcas del hilio pulmonar se encuentran disminuidas. En el ECG se puede encontrar crecimiento de AD, hipoplasia del ventrículo derecho y sobrecarga del ventrículo izquierdo, que provoca hipertrofia ventricular izquierda. El ecocardiograma es considerado una técnica primaria en el diagnóstico y la evaluación de la morfología del ventrículo derecho. La estenosis infundibular y la atresia pulmonar puede ser demostrada en las vistas de eje corto y la oblicua subcostal. La falta de flujo anterógrado a través de la luz pulmonar puede ser confirmada mediante la evaluación con el Doppler. El manejo médico está basado en la administración de prostaglandina E1 para promover la permeabilidad del conducto. El tratamiento definitivo al presentar un ventrículo derecho hipoplásico es llevar hacia la operación de Fontan o trasplante cardiaco (8,9). 14 1.3.3 Canal atrioventricular desbalanceado El canal atrioventricular (AV) describe alteraciones en la formación de las válvulas atrioventriculares. Corresponde a un 4 – 5% de las CC. La forma completa es la más común. El ácido retinoico ha sido considerado como causa de defectos atrioventriculares, al igual que la deleción del cromosoma 16. El canal AV completo tiene como característica anatómica un defecto septal interauricular ostium primum, un defecto septal interventricular de entrada y una válvula AV común que conecta ambas aurículas con ambos ventrículos. Por lo general, en los defectos de la tabicación AV existen orificios separados valvulares atrioventriculares derecho e izquierdo, o un orificio valvular común con circunferencias comparables, y por lo tanto, los ventrículos tienen tamaños similares, lo que se denomina: formas balanceadas. Cuando los ventrículos no tienen formas similares, se les considera como formas desbalanceadas. La unión atrioventricular común puede estar relacionada en gran parte con el ventrículo derecho, produciendo una dominancia derecha, o con el ventrículo izquierdo, dando dominancia izquierda. La primera se asocia con hipoplasia o anormalidades en el ventrículo izquierdo y las estructuras aórticas, pero lo que más frecuentemente se observa es una mala alineación entre las estructuras septales atrial y ventricular. Por el contrario, en presencia de dominancia izquierda, las estructuras ventriculares derechas y arteriales pulmonares son hipoplásicas y están asociadas con mala alineación entre el septum atrial y el septum ventricular muscular. El punto 15 crítico en estos casos es la definición de si el paciente es candidato a reparación biventricular o a una paliación univentricular. Los síntomas incluyen: retraso del crecimiento, fatiga a la alimentación y los síntomas o signos clásicos de la insuficiencia cardiaca, que incluyen taquicardia, taquipnea y hepatomegalia. El precordio es hiperactivo y el componente pulmonar del segundo ruido esta acentuado. Tres alteraciones electrocardiográficas son frecuentes en los defectos de la tabicación atrioventricular: el bloqueo atrioventricular (AV) de primer grado, la desviación del QRS a la izquierda y el bloqueo de la rama derecha. El ecocardiograma es un excelente método de diagnóstico, nos da información anatómica con respecto a la presencia de comunicación interauricular o interventricular, las anomalías de las válvulas AV, el grado de balance ventricular, las características del tracto de salida ventricular izquierdo y otras anomalías. En las lesiones complejas que incluyen canal AV completo desbalanceado, la anastomosis cavo pulmonar total, conocida como cirugía de Fontan, es la cirugía indicada (8,9). 1.3.4 Síndrome de ventrículo izquierdo hipoplásico (Sx VIH) Consiste en un amplio espectro de alteraciones en las estructuras del lado izquierdo del corazón, desde la hipoplasia hasta la atresia aórtica con severa hipoplasia de la aorta ascendente y del ventrículo izquierdo. Se debe considerar corazón izquierdo hipoplásico cuando el diámetro de las estructuras del lado izquierdo sea menor al 60% del valor medio normal para la superficie corporal. El corazón izquierdo es una unidad compuesta por aurícula izquierda, válvula mitral, ventrículo 16 izquierdo, válvula aórtica y arteria aorta. No existe una definición morfológica especifica, ya que pueden existir diversos grados de hipoplasia de cada una de las estructuras. El síndrome puede ocurrir cuando hay atresia o hipoplasia severa de una de las estructuras o hipoplasia leve a moderada de varias. El termino corazón izquierdo hipoplásico se refiere, especialmente, a la atresia aórtica y/o mitral. Frecuentemente coexiste con foramen oval permeable, un conducto arterioso persistente y coartación severa de aorta. El síndrome de corazón izquierdo hipoplásico se presenta en el 7 – 9% de los neonatos con cardiopatías y es responsable del 25% de las muertes en la primera semana de vida. Mas del 29% de los pacientes presentan alguna anomalía en sistema nervioso central como agenesia del cuerpo calloso y holoproscencefalia, esta ultima se observa hasta en el 10% de los pacientes. Cuando hay atresia aórtica, la válvula y la aorta ascendente son diminutas y el VI es severamente hipoplásico en el 95% de los casos (10) ; la válvula mitral es atrésica en 30% de los casos o con hipoplasia severa en los casos restantes. Desde el punto de vista de la morfología de la válvula, el Sx VIH se puede clasificar en cuatro grupos: - I. Atresia aórtica y mitral: es la variedad más común (60%) - II. Atresia aórtica y estenosis mitral - III. Estenosis aórtica y atresia mitral: corresponde a menos del 5% - IV. Estenosis aórtica y mitral 17 Desde el punto de vista fisiológico, Nicolson (11) propone clasificarla de acuerdo con el tamaño de la comunicación interauricular: - I. Defecto interauricular restrictivo Qp/Qs 1:1 - II. Defecto interauricular no restrictivo Qp/Qs mayor de 1:1 - III. Defecto interauricular muy restrictivo Qp/Qs menor de 1:1 Se presenta en neonatos a término, con cuadro de dificultad respiratoria severa, polipnea, disnea, cianosis, pulsos periféricos débiles, precordio con hiperactividad del VD, hepatomegalia, edema pulmonar agudo. Estos signos corresponden a congestión venocapilar, severa hipertensión pulmonar por hiperflujo y bajo gasto cardiaco (12). Dado que es una patología conductodependiente, al cerrarse el conducto sobreviene el colapso circulatorio y la muerte. Al examen físico se encuentra un segundo ruido reforzado y único, soplo sistólico en el borde paraesternal izquierdo y la presencia de estertores pulmonares y signos claros de congestión venocapilar. La Rx demuestra una cardiomegalia moderada a severa con signos de hiperflujo pulmonar e hipertensión pulmonar venocapilar. En el ECG se encuentra hipertrofia de cavidades derechas y eje derecho. El ecocardiograma permite hacer el diagnostico preciso y definitivo. Se observará un gran VD, con un VI pequeño o ausente, conducto arterioso persistente, con válvulas aórtica, mitral y aorta ascendente de pequeño tamaño. Sin tratamiento quirúrgico es una patología fatal. El tratamiento quirúrgico se encamina hacia la paliación iniciando con cirugía de Norwood, derivación cavopulmonar bidireccional y finalmente operación de derivación cavopulmonar total (8,9). 18 1.3.5 Doble entrada a Ventrículo Izquierdo Es un tipo de conexión atrioventricular en la que un ventrículo recibe más del 50% de las dos válvulas atrio ventriculares cuando están separadas, o más del 75% cuando está presente una válvula atrio ventricular común. Anatómicamente se expresa por un desarrollo ventricular desigual; el ventrículo morfológico izquierdo posee dos porciones de entrada representadas por ambas válvulas atrioventriculares, presenta dilatación de la cavidad e hipertrofia de sus paredes; esto contrasta con el hipodesarrollo del ventrículo derecho que carece de porción de entrada, ya que solo posee porción trabecular y de salida. Se asocia frecuentemente con estenosis pulmonar. Las características anatómicas de la cardiopatía hacen que la sangre desaturada, proveniente de la aurícula derecha y la oxigenada proveniente de la aurícula izquierda, se mezclen a nivel de la cámara ventricular principal. El ápex se encuentra desplazado a la izquierda, el primer ruido es normal, el segundo ruido esta disminuido en caso de haber estenosis valvular pulmonar. El estudio ecocardiográfico es idóneo para conocer la anatomía de la malformación, ya que por este medio se pueden analizar las válvulas atrioventriculares y sus relaciones con la masa ventricular, definir las lesiones asociadas y cuantificar el grado de disfunción de las válvulas. Las opciones quirúrgicas para la paliación de estos pacientes son la cirugía de derivación cavopulmonar total y el trasplante cardiaco (13). 19 1.3.6 Doble salida del ventrículo derecho (DSVD) Es un tipo de conexión ventrículo-arterial que hace mención del origen de la válvula pulmonar y más del 50% del anillo de la válvula aórtica emergiendo del ventrículo derecho, es decir, ambos grandes vasos están conectados al ventrículo derecho. Requiere también de una CIV, la cual, es la única vía de salida del ventrículo izquierdo. Afecta del 1 – 1.5% de los pacientes con enfermedad cardiaca congénita, se ha relacionado con trisomía 13 y 18. Se han descrito 3 relaciones de las grandes arterias: primera, aorta posterior y a la derecha de la arteria pulmonar; segunda, la aorta paralela y a la derecha de la arteria pulmonar; y tercera, la aorta anterior (pudiendo ser a la derecha o a la izquierda). Así como también existen variables con la comunicación interventricular: comunicación interventricular subaórtica, comunicación interventricular subpulmonar, comunicación interventricular doblemente relacionada y comunicación ventricular no relacionada. La clínica está determinada por la relación de la comunicación interventricular con la aorta y la presencia de estenosis pulmonar o no. En la Rx, la cardiomegalia y el aumento en la trama vascular pulmonar van a estar determinadas por la ausencia o presencia de estenosis pulmonar y las resistencias vasculares pulmonares. En el ECG la hipertrofia ventricular derecha es invariable en el periodo neonatal, la desviación del eje a la izquierda puede ocurrir por el desplazamiento posterior del haz de His causado por la comunicación interventricular y esta desviación se puede encontrar en el 6 – 50% de los casos de doble salida del ventrículo derecho. El bloqueo aurículoventricular de primer grado es común en los grandes defectos septales. 20 El ecocardiograma es el instrumento para realizar un adecuado diagnóstico; con el Doppler color se determina la presencia de estenosis e insuficiencias valvulares. El tratamiento médico para la falla cardiaca congestiva está indicado. El tratamiento quirúrgico depende de la relación que guarda la CIV con la aorta, así como de la presencia o ausencia de estenosis pulmonar. A pesar de que en esta entidad habitualmente existen dos ventrículos bien desarrollados, algunas variantes de la enfermedad complican o imposibilitan una reparación biventricular, siendo estos los casos en los que se opta por realizar el procedimiento de derivación cavopulmonar total (8,9) 1.3.7 Anomalía de Ebstein severa Ocurre en menos del 1% de los defectos cardiacos congénitos, sin diferencia de géneros, por lo que se considera una anomalía congénita rara. Es una alteración cardiaca congénita donde existe una inserción normal de la válvula tricúspide con adosamiento y displasia, principalmente de la valva septal y posterior. De forma que, una parte del ventrículo derecho se incorpora a la aurícula derecha, es decir, se crea un ventrículo derecho atrializado, produciendo una hipoplasia funcional del ventrículo derecho. La valva anterior puede, ocasionalmente estar adosada; pero lo usual, es que sea grande y flote libre en el ventrículo dando forma de vela de bote. Es frecuente la presencia de una comunicación interauricular (tipo foramen oval o defecto septal auricular) con cortocircuito de derecha a izquierda. La fibrosis está presente en las paredes libres de ambos ventrículos, tanto izquierdo como derecho, esto puede generar síntomas muy severos a edades muy tempranas. 21 Hay un grupo de pacientes completamente asintomático y otro, en quienes los síntomas pueden aparecer durante el periodo neonatal, en la primera semana de vida. Si la deformidad es severa, estos síntomas pueden presentarse como cianosis, dificultad respiratoria, falla cardiaca e incluso la muerte intrauterina. Una historia de taquicardia supraventricular es frecuente. En los casos leves, la Rx puede ser normal. Pueden verse grados variables de cardiomegalia a expensas del crecimiento de la aurícula derecha, con un reborde izquierdo rectificado. En el paciente cianótico hay disminución de la vasculatura pulmonar. El ECG se caracteriza por crecimiento de la aurícula derecha, con ondas “p” picudas y BRDHH, bloqueo AV de primer grado (PR prolongado) se observa en el 40% de los pacientes. En 20 – 30% se evidencia un síndrome de pre-excitación del tipo Wolff-Parkinson-White (PR corto y onda delta). El ecocardiograma define los detalles anatómicos, el grado de adosamiento de las valvas, el grado de insuficiencia tricuspídea y las anomalías asociadas. Los recién nacidos con dificultad respiratoria, deben ser intubados y debe iniciarse manejo con prostaglandinas; si no responden al manejo medico, se procederá entonces a la paliación quirúrgica. Esta decisión conllevará una cirugía en tres tiempos: inicialmente con una fistula sistémico-pulmonar o a la operación de Starnes (cierre de la tricúspide mediante parche de pericardio fenestrado, ampliación de la CIA), luego se realizará el procedimiento de Glenn bidireccional (anastomosis de la cava superior con la pulmonar) y la sección de la fistula sistémico-pulmonar para posteriormente, llevar a cabo la operación de Fontan. 22 1.4 Historia natural de la enfermedad del paciente con CUV Es determinada por la cantidad de flujo pulmonar y por las lesiones asociadas. Los pacientes sin estenosis pulmonar desarrollaran insuficiencia cardiaca congestiva yfracaso de crecimiento durante la lactancia, con riesgo de desarrollar hipertensión arterial pulmonar. Sin un procedimiento quirúrgico el 50% fallecerá antes de alcanzar el año. Los pacientes con aumento del flujo pulmonar desarrollaran hipertensión pulmonar grave e irreversible con mejoría clínica de la insuficiencia cardiaca. En caso de una obstrucción hacia la circulación pulmonar sin un tratamiento adecuado cerca del 80% de los pacientes habrá fallecido a los 6 meses de edad, la muerte suele coincidir con el cierre espontaneo de un conducto arterioso. En los pacientes que sobreviven hasta la segunda década de la vida sin someterse a una operación de Fontan, la sobrecarga crónica de volumen del ventrículo funcional suele producir disminución de la contractilidad cardiaca llevándolo a la falla cardiaca y muerte. 1.5 Diagnóstico El diagnóstico consiste en demostrar las características morfológicas ventriculares, así como describir las conexiones atrioventriculares y conexiones ventrículoarteriales, siendo la piedra angular para determinar el tipo de cardiopatía y cirugía a realizar. 23 Generalmente se utiliza una amplia gama de estudios de gabinete como radiografía de tórax, electrocardiograma, ecocardiograma y cateterismo cardiaco, todos ellos de vital importancia para determinar el tratamiento definitivo. 1.6 Tratamiento La paliación quirúrgica del CUV no puede efectuarse en un solo tiempo quirúrgico, por lo que los pacientes son sometidos a una serie de intervenciones encaminadas a dirigir pasivamente el flujo de las venas sistémicas hacia la circulación pulmonar, dejando el ventrículo único para impulsar la circulación sistémica, lo que se conoce como situación o fisiología de Fontan (derivación cavopulmonar total). En el periodo neonatal frecuentemente la primera fase de la paliación univentricular es la creación de una fistula sistémico-pulmonar de una fuente arterial, asegurando con ello, un adecuado flujo sanguíneo pulmonar. Habitualmente se opta por una fistula de Blalock-Taussig modificada. La segunda etapa se realiza entre los 6 y 9 meses de edad, la cual consiste en la creación de una anastomosis cavo pulmonar superior (derivación cavopulmonar bidireccional o Hemifontan) y la eliminación de la fistula sistémico pulmonar preexistente (7,14). Finalmente, la tercera etapa de la paliación univentricular consiste en la llamada cirugía de Fontan (derivación cavopulmonar total). Se ha observado que la mortalidad es mayor durante los procedimientos previos y a menor edad; procedimientos necesarios para llevar al paciente a derivación cavopulmonar total. Ya que, primeramente, al realizar una fístula sistémico pulmonar en el periodo neonatal, la mortalidad oscila alrededor del 13% de los casos, 24 posteriormente esta mortalidad se reduce cuando se lleva al paciente a su segundo procedimiento previo a Fontan, en el cual se realiza la derivación cavopulmonar bidireccional, donde la mortalidad oscila en un 3.9% (14), y finalmente, para realizar la corrección univentricular a la edad promedio de 4 años, la mortalidad se reduce a 1.3% (4). 1.7 Cirugía de Fontan Descrita en 1971 por Francis Fontan de Bordeaux, Francia, propuesta en un inicio para el manejo de atresia tricuspídea, la cirugía de Fontan es ahora también indicada en otras cardiopatías congénitas complejas que tienen como característica primordial tener un solo ventrículo funcional. El principio quirúrgico consiste en conectar el retorno venoso sistémico con las ramas de la arteria pulmonar y el ventrículo único funcional con la circulación sistémica, con el fin de disminuir el trabajo de dicho ventrículo, separar la sangre venosa pulmonar de la sistémica y aliviar con esto la hipoxemia. La vena cava es conectada directamente a la arteria pulmonar, evitando pasar por la AD y el VD. Existen dos variables para conectar la vena cava inferior: el túnel lateral, el cual ofrece un camino tubular entre la vena cava inferior y la arteria pulmonar consistiendo en un deflector de prótesis y una porción de la pared lateral de la aurícula derecha, sin embargo, una complicación de esta cirugía es la alta incidencia de arritmias auriculares. La otra variable es el conducto extra cardiaco, introducida en 1990, esta es la técnica mas empleada y consiste en un injerto de tubo entre la vena 25 cava inferior y la arteria pulmonar. Este circuito es extra-cardiaco ofreciendo así, la oportunidad de optar realizar la cirugía con o sin circulación extracorpórea (15). De esta manera, el ventrículo único funciona como una bomba aspirante, que se encarga previamente de la circulación pulmonar, y a su vez, funciona como una bomba expelente, que se dedica solo a la circulación sistémica. El adecuado funcionamiento de este delicado sistema depende fundamentalmente de la buena función ventricular tanto sistólica como diastólica, la presencia de ritmo sinusal, presiones y resistencias pulmonares bajas y la adecuada anatomía del árbol vascular pulmonar. El cateterismo cardiaco se ha considerado necesario, desde los inicios de la técnica, como parte de la evaluación previa a la operación de Fontan. Esta cirugía es paliativa y su fisiología establece algunas ventajas, como la normalización de la saturación arterial y la abolición de la sobrecarga crónica de volumen (16), sin embargo, también condiciona ciertos efectos deletéreos tanto en la circulación pulmonar como en la sistémica, que incluyen congestión de las venas sistémicas, hipertensión venosa crónica y disminución del gasto cardiaco en reposo y durante el ejercicio (17), lo cual implica un deterioro en la clase funcional a largo plazo. Durante las ultimas dos décadas, la cirugía de Fontan ha surgido como una opción para la paliación quirúrgica de aquellas cardiopatías en las cuales no es posible realizar la corrección biventricular. 26 1.8 Indicaciones de la cirugía de Fontan Existen criterios para realizar esta cirugía, los cuales son: - Entrada ventricular sin obstáculos (sin estenosis de la válvula atrio ventricular y sin regurgitación severa). - Función ventricular razonable, y tracto de salida ventricular sin obstrucciones. - Los requisitos a nivel pulmonar son una buena anatomía de las arterias pulmonares, resistencias vasculares pulmonares normales menores a 2.5 U/m2. La evaluación hemodinámica justo antes de la cirugía de Fontan predice la evolución e interacción corazón-pulmón después de la finalización del Fontan (18). Los criterios para una cirugía exitosa de Fontan son: a) Resistencias pulmonares menores a 2 U/M2 (unidades Woods) b) Presión media de la arteria pulmonar < 15 mm Hg c) Presión telediastólica del VI < 10 mm Hg Puede aceptarse una presión media de la arteria pulmonar mayor de 15 mmHg si esta es por flujo pulmonar excesivo que disminuirá después de la operación. La presión telediastólica del ventrículo izquierdo se relaciona con la presión en la aurícula izquierda, en ausencia de lesión mitral, y es de 5 a 10 mm Hg en el niño y algo menor en el neonato. 27 Se consideran factores de riesgo para la realización de la cirugía de Fontan: presión media de la arteria pulmonar (PAMP) > 15 mmHg; resistencias arteriolares pulmonares (RAP) > 2 unidades Woods; disfunción del ventrículo sistémico, definida por una fracción de expulsión (FE) < 60% o por una presión diastólica final del ventrículo sistémico (D2VI) ≥ 10 mmHg; y los índices del tamaño de las ramas pulmonares, Nakata < 250 mm2/m2 y/o McGoon < 2. El índice de Nakata se calcula como el área de la rama derecha de la arteria pulmonar (RDAP) + área de la rama izquierda de la arteria pulmonar (RIAP)/superficie corporal. El índice de McGoon se calcula como el diámetro de RDAP + diámetro de RIAP/diámetro de la aorta descendente a nivel del diafragma (10). Este procedimiento puede acompañarsede una fenestra que va del tubo hacia el atrio derecho. Las ventajas de la fenestración incluyen la descompresión de la circulación venosa sistémica y el aumento del gasto cardiaco en el periodo postoperatorio temprano. Las indicaciones de una fenestración son: alteración en la función ventricular, presión pulmonar por arriba de rangos adecuados, pacientes con fistula sistémico pulmonar por tiempo prolongado. Las desventajas son: desaturación arterial sistémica con posible embolización y necesidad de cierre posterior a la fenestración. 1.9 Reintervención: cateterismo después de una cirugía de Fontan La indicación más común de cateterismo posterior a una cirugía Fontan es el cierre de fenestra, la cual se realiza de carácter electivo. Otras intervenciones comunes son: dilatación con balón y colocación de stent para aliviar la estenosis de la 28 arteria pulmonar. Así como también, se puede llevar a cabo el procedimiento para embolización de colaterales veno-venosas o colaterales aortopulmonares. Se ha observado que los pacientes se encuentran libres de alguna intervención por cateterismo tras realización de Fontan en el 53% de los casos a 15 años y en el 50% a 20 años. Excluyendo el cierre de fenestración, que se realiza de manera electiva, los pacientes se encuentran libres de alguna intervención no electiva en el 64% a 15 años y en el 59% a 20 años. Sin embargo, existen factores de riesgo que aumentan las intervenciones no electivas por cateterismo debido a la anatomía y fisiología cardiaca, donde en primer lugar en frecuencia se encuentran aquellos pacientes sometidos a Fontan, así como aquellos operados de Norwood o quienes presentaron una circulación extracorpórea prolongada. Si hablamos de factores hemodinámicos, cabe señalar que los pacientes que han estado con un plazo mayor a una semana en la unidad de cuidados intensivos y aquellos con un drenaje pleural prolongado, han tenido que ser sometidos a cateterismo. Cabe señalar que existe un aumento de riesgo para uso de marcapaso en aquellos pacientes sometidos a Fontan con tubo extra cardiaco. No se tiene todavía clara la razón de ello, sin embargo, se sabe que a largo plazo la derivación cavopulmonar total aumenta la incidencia a largo plazo de padecer arritmias. En una cohorte de estudio se observó que la disfunción del nodo sinusal fue la causa más 29 común de indicación de colocación de marcapaso, y éste a su vez disminuye la necesidad de trasplante cardiaco. Otras indicaciones comunes para intervención por cateterismo incluyen la estenosis de la arteria pulmonar y obstrucción del arco. En el Children’s Hospital of Philadelphia (CHOP) llevaron a cabo el cierre de la fenestración electivamente al cabo de uno o dos años tras haber realizado la operación de Fontan. Pero actualmente esta se realiza solo cuando esta indicado debido a la cianosis o tromboembolismo. Así mismo el procedimiento llevado a cabo con mayor frecuencia fue colocación de stent en la fenestra, seguido de colocación de stent en una rama pulmonar y en tercer lugar la embolización de colaterales aorto-pulmonares (19). En la Clínica Mayo se observó que pacientes con elevadas resistencias vasculares pulmonares/índice cardiaco bajo, presentaban menor sobrevida y mayor falla en el Fontan, en comparación con aquellos que presentaban resistencias vasculares pulmonares bajas/ bajo índice cardiaco, observando aumento en la sobrevida y menor tasa de fallo en el Fontan. En la Clínica Mayo las indicaciones de cateterismo cardiaco fueron: cianosis (27%), falla cardiaca (17%), enfermedad hepática (13%), arritmia (11%), enteropatía perdedora de proteína (7%) (20). 30 1.10 Derrame pleural: complicación de Cirugía Univentricular El derrame pleural es un reto posterior a la cirugía de Fontan, ya que incrementa los días de estancia hospitalaria, así como la morbilidad, y estos pacientes pueden llegar a requerir una pleurodesis como tratamiento. Es por esto que, es indispensable saber que causas pueden producirlo y como resolverlo. Todos los pacientes postquirúrgicos de Fontan deben salir de quirófano con drenajes pleurales. Hay que tener en cuenta que una buena indicación para retiro de los drenajes es cuando su gasto sea menor de 1 – 2 ml/kg/día, y se ha determinado que un derrame pleural prolongado es aquel que dura > 15 días. Se produce menos gasto a través de los drenajes cuando la cirugía se lleva a cabo sin bomba extracorpórea en comparación de aquellas que entran a circulación extracorpórea. Otras causas de derrame prolongado y aumento de gasto son: pacientes menores a 4 años, presiones arteriales pulmonares mas altas (> 18 mm Hg), RVP (> 2 UI/Wood), baja saturación de oxigeno preoperatoria, cirugía sin fenestración, colocar un conducto (tubo extra cardiaco) menor a 18 mm, llevar a cabo el procedimiento durante los meses de invierno, lo que se asocia a mayor frecuencia de infecciones respiratorias, así mismo usar IECAS (inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina). Durairaj y colaboradores reportaron el uso de fenestración diafragmática para la resolución de los derrames pleurales prolongados después de una cirugía de Fontan. Observaron que el drenaje del tubo pleural disminuyó a menos de 100 ml en los primeros 4 días de realizar este procedimiento y pudieron retirar los drenajes al 31 séptimo día. También se ha propuesto la fenestración del tubo extra cardiaco como beneficio, ya que mantiene un gasto cardiaco adecuado a expensas de la oxigenación, limitando así el aumento de la presión auricular y disminuyendo con esto la incidencia y duración de los derrames pleurales. La principal complicación en el paciente con derrames pleurales prolongados son las infecciones; ya que se pierden linfocitos y proteínas plasmáticas a través de este, como se observa en el quilotórax. Un gasto elevado a través de los drenajes después de las dos semanas posquirúrgicas puede plantear la necesidad de llevar a cabo una pleurodesis. La decisión de llegar a este procedimiento es cuando no funcionan las medidas preventivas. Algunas de estas medidas son: una dieta baja en grasas, si esto no es exitoso, se deberá cambiar la dieta dejando en ayuno e iniciando nutrición parenteral. Una vez que el gasto por el drenaje haya cesado, se reiniciara la dieta baja en grasas vía oral. Si posterior a esto ocurre un gasto significativo nuevamente por el drenaje se debe de considerar la realización de una pleurodesis (21–23). 1.11 Pronóstico La tasa de mortalidad de la cirugía de Fontan oscila entre 1 – 27%, sin embargo, en los últimos años ha sufrido una disminución paulatina en series reportadas a nivel internacional. En relación con la mortalidad operatoria, es decir, en 32 los primeros 30 días postoperatorios, la mayoría de las muertes suceden en la primera semana, principalmente por falla ventricular y arritmias (24). Mendoza y colaboradores, en un estudio retrospectivo que incluyo a 32 pacientes operados de Fontan entre el periodo 2000 y 2009, reportó una mortalidad hospitalaria del 3% con una supervivencia del 90% y una alta incidencia en el tipo de atresia tricuspídea como la cardiopatía mas frecuente. La mortalidad fue del 9% (25). Otro estudio con una muestra de 636 pacientes realizado por Hirsch y colaboradores entre 1992 y 2007, reportaron una supervivencia hospitalaria del 96% (12). Cazzaniga y colaboradores, en un estudio de 124 pacientes operados de Fontan entre 1978 y 2000, registraron 39% de muertes (26). A nivel nacional, Calderón y colaboradores (27), en un estudio retrospectivo en pacientes posoperados de Fontan entre 1989 y 2003, incluyendo un total de 81 pacientes con pacientes de tipo atresia tricuspídea, atresia pulmonar con septum integro, conexión atrio-univentricular y anomalía de Ebstein concluyeron una mortalidad del28%. Yves d’Udekem y colaboradores reportan que el riesgo de mortalidad durante los primeros 5 años tras el procedimiento de Fontan es elevado, sin embargo este porcentaje va disminuyendo conforme pasa el tiempo: se reporta supervivencia del 82% tras el primer año del procedimiento, 74% pasados 5 años del procedimiento y 71% a los 15 años del procedimiento, llegando a mantenerse sin cambios posterior a los 15 años de realizado el procedimiento (4). 33 Tras un seguimiento de 14 a 42 meses, con un promedio de seguimiento de 21 meses, sólo el 1.9% tuvieron que ser llevados a trasplante cardiaco por presencia de falla cardiaca (28). 2 Planteamiento del Problema El corazón univentricular engloba a un grupo de cardiopatías complejas que resultan en una amplia variedad de alteraciones anatómicas que requieren tratamiento paliativo finalizando con la cirugía de Fontan, en la cual, se crea una conexión entre la vena cava inferior a la arteria pulmonar por medio de un conducto extra cardiaco. El adecuado funcionamiento de este sistema depende de las características preoperatorias de cada paciente: la presión telediastólica del ventrículo izquierdo, las resistencias vasculares pulmonares, presión media de la arteria pulmonar, índices de Nakata y McGoon. Ya que dicho sistema se vuelve un flujo no pulsátil, para mantener un adecuado funcionamiento de éste, debemos tener estos índices en valores adecuados para evitar su disfunción y el desmantelamiento de la cirugía. Sin embargo, a veces los pacientes presentan una mala evolución clínica, requiriendo de un cateterismo diagnóstico y posiblemente intervencionista en el postquirúrgico. Desde el 2003 a la fecha se realiza en el Instituto Nacional de Cardiología “Ignacio Chávez” este tipo de paliación sin presentar un estudio que enumere y describa los tipos de reintervención más frecuentes en pacientes sometidos a cirugía de Fontan, por lo que se pretende describir esto, así como comparar los resultados con la literatura mundial. 34 3 Pregunta de investigación ¿Cuáles son los tipos de reintervención por cateterismo más frecuentes posterior a procedimiento de derivación cavopulmonar total en pacientes pediátricos del Instituto Nacional de Cardiología “Ignacio Chávez”? 4 Justificación En nuestro Instituto, se lleva a cabo el procedimiento de Fontan como técnica paliativa en pacientes con cardiopatías con fisiología univentricular. El realizar este estudio podrá evidenciar los tipos más frecuentes de reintervención por cateterismo de los pacientes que fueron sometidos a dicho procedimiento en nuestro medio, siendo el Instituto Nacional de Cardiología “Ignacio Chávez” un centro de referencia a nivel nacional, con el objetivo de comparar las cifras y frecuencia con la literatura mundial. Es importante tener conocimiento sobre la frecuencia, tipo y desenlace de las reintervenciones realizadas en estos pacientes con la finalidad de valorar en qué tipo de cardiopatía univentricular y por qué la cirugía de Fontan no fue exitosa. 5 Objetivos 5.1 General Describir la incidencia de cateterismo cardiaco en pacientes posoperados de derivación cavopulmonar total en el Instituto Nacional de Cardiología de 2003 a 2018. 35 5.2 Objetivos específicos - Describir el diagnóstico anatómico y morfológico cardiaco prequirúrgicos - Describir el procedimiento quirúrgico realizado. - Describir las características de los pacientes que se sometieron a cateterismo en el periodo posquirúrgico - Identificar cuáles fueron los procedimientos intervencionistas realizados en los cateterismos posquirúrgicos. - Describir las complicaciones secundarias al cateterismo postquirúrgico. - Describir la presencia de derrame pleural bilateral o unilateral posquirúrgico y los días de derrame. - Identificar los factores de riesgo de los pacientes que presentaron derrame pleural prolongado (> 15 días). 6 Diseño del estudio Se realizo un estudio descriptivo, longitudinal, observacional y retrospectivo, incluyendo a todos los pacientes pediátricos sometidos a derivación cavopulmonar total en el Instituto Nacional de Cardiología “Ignacio Chávez” en el periodo comprendido entre 2003 y 2018. 7 Población 7.1 Población objetivo Pacientes pediátricos quienes fueron sometidos a cirugía de Fontan. 36 7.2 Población de estudio Pacientes pediátricos quienes fueron sometidos a cirugía de Fontan en el Instituto Nacional de Cardiología “Ignacio Chávez” de enero de 2003 a diciembre de 2018. 8 Criterios de selección 8.1 Inclusión - Pacientes pediátricos de cualquier género. - Pacientes sometidos a cirugía de Fontan de enero de 2002 a diciembre de 2018. - Pacientes con expediente electrónico completo. 8.2 Exclusión - Pacientes de 18 años o de mayor edad. - Pacientes que hayan fallecido durante el procedimiento quirúrgico. 9 Material y Métodos 9.1 Material - Los recursos que serán utilizados para la realización del estudio son: o Hoja de captura Excel prediseñada o Computadora con paquete Microsoft Office 2016 Versión 15.2 o Paquete estadístico SPSS v.23 o Expediente electrónico del Instituto Nacional de Cardiología “Ignacio Chávez” 37 9.2 Métodos Se identificaron los pacientes del Instituto Nacional de Cardiología “Ignacio Chávez” que cumplieron con los criterios de selección. Posteriormente se recabaron del expediente electrónico las variables consideradas relevantes para el estudio y se registraron en la hoja de captura Excel previamente diseñada. Finalmente se realizó el análisis estadístico utilizando SPSS v.23. 10 Variables del estudio A continuación, se presenta el listado de variables con su definición conceptual u operacional correspondiente: Variable Definición Tipo de variable Unidad Género División del género humano en dos grupos: mujer u hombre Nominal dicotómica 0: Femenino 1: Masculino Edad Tiempo transcurrido desde el nacimiento de un individuo al momento de la cirugía Numérica discreta Años Menores de 4 años Pacientes con factor de riesgo edad menor a 4 años Nominal dicotómica 0: No 1: Sí Peso Peso al momento de la cirugía Numérica discreta Kilogramos Talla Altura del individuo previo a la cirugía Numérica discreta Centímetros Tipo de cardiopatía congénita Defectos anatómicos intracardiacos demostrados por ecografía Nominal policotómica 1: TGA + EP 2: Anomalía de Ebstein severa 3: AT con CIV 4: DEVU + EP 5: Dextromorfismo con VU 38 6: AP sin CIV 7: DSVD +VI hipoplásico 8: AT con VU 9: DEVD + VI hipoplásico 10: AP con CIV 11: Doble discordancia + CIV Cirugía previa Manipulación mecánica de las estructuras anatómicas con un fin médico, diagnóstico o terapéutico, previo Nominal policotómica 1: FSP 2: DCPB 3: Damus-Kaye 4: Bandaje Técnica quirúrgica Cirugía de Fontan como tratamiento paliativo en pacientes con corazón univentricular, puede ser intracardiaca o extracardiaca Nominal Policotómica 0: intracardiaca 1: extracardiaca Cirugía realizada (fenestrada) Realización de cirugía de Fontan con comunicación a la aurícula derecha (fenestra) Nominal Policotómica 0: con fenestra 1: sin fenestra Tamaño de fenestración Medición en milímetros de la comunicación con la aurícula derecha Numérica continua Milímetros Fenestración 5 ≤ mm Fenestración menor a 5 mm Nominal Policotómica 0: ≤ 5 mm 1: ≥ 6 mm Derrame pleural Acumulación de líquido en el espacio pleural Nominal dicotómica 0: derrame bilateral 1: derrame derecho 2: derrame izquierdo 3: sin derrame Días de derrame pleural Días transcurridos en el posquirúrgico con presencia de derrame Numérica discreta días 39 pleural Derrame pleural prolongado Derrame pleural con duración mayor a 15 días Nominal dicotómica 0: ≤ 14 días 1: ≥ 15días Cateterismo posquirúrgico Realización de procedimiento intervencionista posquirúrgico Nominal dicotómica 0: No 1: Sí Procedimiento en el cateterismo Procedimiento realizado durante el cateterismo en el periodo posquirúrgico Nominal policotómica 0: Ninguno 1: Stent en rama pulmonar 2: Stent en fenestración 3: Stent en unión VCI-Tubo 4: Stent en colateral 5: Oclusión del TAP por HAP 6: Stent en unión VCS con RDAP 7: Angioplastía con balón en fenestración 8: Diagnóstico 9: Dos stents fenestración + otro sitio Complicaciones en el cateterismo Situación no esperada durante el procedimiento de cateterismo Nominal policotómica 0: sin complicaciones 1: embolización de Stent a Aorta Desmantelamiento Desmontar el procedimiento quirúrgico previamente realizado. Nominal 0: Si 1: No Estado del paciente Estado actual del paciente Nominal policotómica 0: vivo 1: muerto 2: se desconoce 11 Análisis estadístico Para todas las variables se realizó un análisis descriptivo. Las variables numéricas continuas se sometieron a pruebas de normalidad para reportarlas de acuerdo con su distribución; promedios y desviación estándar, si presentaron distribución normal; 40 mediana con mínimos y máximos, si presentaron distribución no paramétrica. Las variables cualitativas se reportaron con frecuencias y porcentajes. Con la finalidad de predecir la probabilidad de la presencia de derrame pleural prolongado en función de las variables recabadas (género, edad, menores de 4 años, peso, talla, técnica quirúrgica [intracardiaca o extracardiaca], presencia de fenestración, fenestración < 5 mm, tamaño de fenestración) junto con su respectiva magnitud independiente en la variable dependiente (presencia de derrame pleural prolongado), se realizó una regresión logística. 12 Consideraciones éticas Para la realización de este estudio no se requiere de una intervención que ponga en peligro al sujeto de estudio. Todos los datos se obtendrán a través del expediente electrónico, los datos personales permanecerán en el anonimato, ya que los pacientes se identificarán de acuerdo con folios no relacionados con su registro de expediente. Se considera una investigación sin riesgo que no transgrede las normas de la Conferencia de Helsinki de 1964 ni su revisión de 2012, al igual se respeta el reglamento de la Ley General de Salud en Materia de Investigación para la Salud. 13 Conflicto de intereses Los investigadores que participan en este estudio declaran no tener ningún conflicto de intereses en la realización de este estudio. 41 14 Factibilidad En el Instituto Nacional de Cardiología “Ignacio Chávez” se realizan más de 300 cirugías pediátricas por año, incluyendo cirugías para tratamiento paliativo de corazón univentricular, por lo que se cree factible la realización de este estudio durante el periodo de tiempo considerado. 15 Resultados Se incluyeron 148 pacientes a quienes se les realizó una derivación cavopulmonar total en el periodo comprendido de enero 2003 a diciembre de 2018. La mediana de edad de 8 años (mínimo 3 años, máximo 17 años) El 50% de los pacientes fue de género femenino. El diagnóstico más frecuente fue atresia tricuspídea en 33.1% (n = 49) de los pacientes, seguido de doble salida de ventrículo derecho con ventrículo izquierdo hipoplásico en el 12.8% (n = 19) de los pacientes y atresia pulmonar sin comunicación interventricular en 12.8% (n = 19). La descripción demográfica de la muestra se presenta en la Tabla 1. La fístula sistémico pulmonar fue la cirugía más realizada antes de la derivación cavopulmonar total en el 54.7% (n =81) de los pacientes, seguida de la derivación cavopulmonar bidireccional en el 34.5% (n = 51) de los pacientes, así como cerclaje de la arteria pulmonar en el 6.8% (n = 10) y cirugía de Damus-Kaye-Stansel en el 1.4% (n = 2) de los pacientes. 42 Tabla 1. Descripción demográfica de la muestra (n = 148) Característica mediana (mín. – máx.) Edad (años) 8 (3 - 17) Peso (kilogramos) 22 (11 - 64) Talla (centímetros) 123 (85 - 164) Género Femenino, n (%) 74 (50) Diagnóstico, n (%) TGA + Estenosis pulmonar 3 (2) Anomalía de Ebstein 4 (2.7) AT con CIV 49 (33.1) Doble entrada de VU + EP 16 (1) Dextromorfismo con VU 16 (10.8) AP sin CIV 19 (12.8) Doble salida de VD + VI hipoplásico 19 (12.8) AT con VU 10 (6.8) Doble entrada de VD + VI hipoplásico 3 (2) AP con CIV 7 (4.7) Doble discordancia con CIV 1 (0.7) TGA, transposición de grandes arterias; AT, atresia tricuspídea; CIV, comunicación interventricular; VU, ventrículo único; EP, estenosis pulmonar; AP, atresia pulmonar; VD, ventrículo derecho; VI, ventrículo izquierdo En el 93.2% (n = 138) de los pacientes se realizó una derivación cavopulmonar extracardiaca, realizándose fenestración en el 95.9% (n = 142) de las cirugías. En la Tabla 2 se muestran las características de las cirugías realizadas. Tabla 2. Cirugías realizadas (n = 148) Característica n (%) Extracardiaco* 138 (93.2) Intracardiaca* 8 (5.4) Fenestración* 142 (95.9) Fenestración < 5 mmº 89 (60.1) Tamaño de la fenestración (mediana, mín., máx.) 7 (3 - 10) *Se reportan 2 casos perdidos ºSe reportan 5 casos perdidos 43 En el 100% de los pacientes se registró la presencia de derrame pleural, siendo el derrame pleural bilateral el más frecuente en el 91.9% (n = 136) de los pacientes. En el total de la muestra se registró una mediana de 13 días (mínimo 1 día, máximo 162 días) de duración de derrame y en el 37.4% (n = 56) de los pacientes se presentó un derrame pleural prolongado (≥ 15 días). Las características del derrame pleural se muestran en la Tabla 3. Tabla 3. Derrame pleural (n = 148) Característica n (%) Derrame pleural, n (%)* Bilateral 136 (91.9) Derecho 8 (5.4) Izquierdo 2 (1.4) Derrame pleural prolongado (≥ 15 días), n (%)º 56 (37.4) *Se reportan 2 casos perdidos ºSe reportan 7 casos perdidos El 42.6% (n = 63) de los pacientes fueron llevados a cateterismo posquirúrgico, en el cual el procedimiento mayormente realizado fue colocación de Stent en la fenestración en 21 pacientes (14.2%), seguido de la colocación de dos Stents, uno en la fenestración y en otro sitio en 12 (8.1%) pacientes. En 2 pacientes se reportó embolización del Stent a la aorta como complicación. Los procedimientos realizados por cateterismo se describen en la Tabla 4. Debido a los resultados obtenidos en el cateterismo posquirúrgico el 3.4% (n = 5) se indicó el desmantelamiento de la cirugía. 44 Tabla 4. Cateterismo posquirúrgico (n = 63) Característica n (%) Procedimiento, n (%) Stent en rama pulmonar 7 (4.7) Stent en fenestración 21 (14.2) Stent en unión VCI - tubo 1 (0.7) Stent en colateral 1 (0.7) Oclusión de TAP 4 (2.7) Stent en unión VCS - RDAP 3 (2.0) Angioplastía con balón en fenestración 5 (3.4) Dos Stent en fenestración y otro sitio 12 (8.1) Diagnóstico 5 (3.4) Complicaciones Embolización a aorta 2 (1.4) VCI, vena cava inferior; TAP, tronco de arteria pulmonar; VCS, vena cava superior; RDAP, rama derecha de arteria pulmonar Se realizó un análisis bivariado para las variables independientes de interés, únicamente se encontró relevancia estadística en la edad con una mediana de edad de 10 años (3 – 17 años) y 7 años (3 – 17 años) con una p < 0.05 entre los pacientes con derrame prolongado y derrame menor de 15 días, respectivamente. Así como en las variables de peso 26 kilogramos (12 – 57 kg) y 20 kilogramos (11 – 58 kg) con una p < 0.05 y talla de 129 centímetros (88 – 164 cm) y 119 centímetros (85 – 164 cm)con una p < 0.05 entre los pacientes con derrame prolongado y derrame menor de 15 días, respectivamente. Además, se observó un OR de 1.517 (IC 95% 0.974 – 2.534) para la fenestración menor de 5 mm y la presencia de derrame pleural prolongado con una p 0.050. Los resultados de este análisis se observan en la Tabla 5. 45 Con la finalidad de predecir la probabilidad de presentar derrame pleural prolongado en función de la información recabada como variables de factor de riesgo (género, edad, menores de 4 años, peso, talla, técnica quirúrgica [intracardiaca o extracardiaca], presencia de fenestración, fenestración < 5 mm, tamaño de fenestración) se realizó una regresión logística. Se observó una significancia estadística p < 0.05 en 4 variables: edad, peso, talla y fenestración < 5 mm. Al correr el modelo con estas variables la regresión logística presentó significancia con p de 0.034, ya que el modelo explica el 17.4% (R2 de Nagelkerke) de la varianza de la presencia de derrame pleural prolongado y clasifica correctamente el 65.7% de los casos. El presentar un peso, edad y talla mayor se relacionó con mayor probabilidad de presentar Tabla 5. Comparación entre pacientes (n = 148) Derrame ≥ 15 días Derrame < 15 días Característica 56 (37.4) 92 (62.1) p OR IC 95% Género femenino* 27 (38) 44 (61.9) 0.680 1.089 (0.725 - 1.637) Género masculino* 29 (41.4) 41 (58.6) 0.680 0.918 (0.611 - 1.379) Edad (años)ª 10 (3 - 17) 7 (3 - 17) 0.001 Peso (kilogramos)ª 26 (12 - 57) 20 (11 - 58) 0.000 Talla (centímetros)ª 129 (88 - 164) 119 (85 - 164) 0.002 Menores de 4 años* 53 (42.0) 73 (57.9) 0.099 0.475 (0.169 - 1.335) Cirugía extracardiaca* 52 (39.3) 80 (60.6) 0.552 1.269 (0.615 - 2.619) Cirugía intracardiaca* 4 (50) 4 (50) 0.552 0.788 (0.382 – 1.626) Cirugía con fenestración* 54 (39.7) 82 (60.2) 0.679 0.829 (0.308 – 2.230) Cirugía sin fenestración* 2 (50) 2 (50) 1.000 1.259 (0.463 – 3.429) Tamaño de fenestración (mm)ª 7 (3 - 10) 6.5 (4 - 10) 0.181 Fenestración < 5 mm* 41 (47.2) 46 (52.8) 0.050 1.571 (0.974 – 2.534) *n (%), Chi cuadrado ªmediana (mín. – máx.), U de Mann-Whitney 46 derrame pleural prolongado, así como tener una fenestración menor a 5 mm muestra una asociación de 2.077 veces de presentarlo (IC 95% 0.947 – 4.557) con una p de 0.050. El 10.1% (n = 15) de los pacientes incluidos en el estudio fallecieron. El estado actual de los pacientes se muestra en la tabla 6. Tabla 6. Estado de los pacientes (n = 148) Característica n (%) Defunciones 15 (10.1) Vivo 103 (69.6) Se desconoce 30 (20.3) 16 Discusión La cirugía de Fontan ha mejorado la expectativa de pacientes con fisiología univentricular, principalmente aquellos con atresia tricuspídea, mejorando su estado clínico al disminuir la carga volumétrica ventricular y lograr una mejor presión arterial de oxígeno. Sin embargo, la fisiología de Fontan implica un tipo de circulación no pulsátil hacia los pulmones, el incremento en la presión venosa sistémica y una respuesta hemodinámica alterada al estrés, así como un deterioro en la clase funcional a largo plazo en algunos pacientes. Podemos observar que en nuestro estudio tanto hombres como mujeres se encuentran con la misma frecuencia de afección cardiaca, que hace que tengan que ser llevados a una cirugía univentricular, así mismo en nuestros resultados se observa que la cardiopatía llevada mas frecuentemente a cirugía univentricular es la atresia tricuspídea, siendo igual de frecuente a la reportada en la literatura. 47 La edad a la que se realiza el Fontan es uno de los factores que con el tiempo se ha relacionado con la evolución. En los estudios iniciales la realización de la operación de Fontan a menor edad era uno de los principales factores de mortalidad, probablemente en relación con las fases iniciales de la técnica quirúrgica. Sin embargo, con el tiempo la tendencia ha sido hacia la realización más precoz de esta intervención sin un aumento de la mortalidad, en promedio realizar dicha operación a los 4 – 5 años. Las ventajas teóricas de realizar esta intervención más precozmente se atribuyen a una exposición menos prolongada del organismo a la cianosis y su influencia negativa en la función cardiaca. También se evitaría en parte la formación de colaterales aortopulmonares, que en algunos estudios se ha asociado con aumento de la presión pulmonar y mayor duración de los derrames pleurales tras el Fontan. En nuestro estudio observamos que los pacientes llevados a cirugía univentricular a una edad óptima entre 4 – 5 años, sólo se realizó en el 25% de los casos. La mediana de edad de llevar a cabo este procedimiento en nuestro Hospital es de 8 años. Sin embargo, esto también puede ser debido a que los pacientes que llegan a este centro son referidos de otros estados de la república a edades mas tardías y sin tener un procedimiento quirúrgico previo para llevar a cirugía univentricular, este factor retrasa la edad óptima para llevar a los pacientes a cirugía de Fontan. El 54.7% de nuestros pacientes (n = 81) tenían una fistula sistémico pulmonar como procedimiento previo a corrección univentricular y 34.5% (n = 51) cirugía de 48 derivación cavopulmonar bidireccional. Recordando que no es necesario que los pacientes tengan una derivación cavopulmonar bidireccional obligatoria para ser llevados a procedimiento de Fontan, también pue en ser llevados a cirugía univentricular aquellos que presentan una fistula sistémico pulmonar. En nuestro Hospital, al igual que en la mayoría del mundo, se prefiere realizar la cirugía de Fontan extracardiaca a un procedimiento intracardiaco, ya que las complicaciones a largo plazo son menores, conllevando menor riesgo de arritmias (flutter auricular y fibrilación auricular) y muerte. Esto es debido a que la cicatrización del atrio, especialmente si la conexión de la VCI con las arterias pulmonares implica un deflector o túnel intracardiaco, puede producir arritmias en el postquirúrgico. Es por esto que la cirugía extracardiaca se utiliza mas frecuentemente en nuestro Instituto, y se llevó a cabo en el 93.2% (n = 138) de nuestros pacientes y sólo en un mínimo de éstos, el 5.4% (n = 8) se les realizó cirugía intracardiaca. El procedimiento intracardiaco se realizó a aquellos pacientes sometidos a cirugía antes del año 2004, a partir de esta fecha en adelante se dejó de usar el procedimiento intracardiaco en el Instituto Nacional de Cardiología, debido a que la otra técnica quirúrgica demostraba mayor sobrevida y menor riesgo de mortalidad. Así mismo, a casi la totalidad de nuestros pacientes, 95.9% se les realizó fenestra, la cual permite mejorar el gasto cardiaco si el paciente lo requiere a expensas de la oxigenación. Una complicación posterior a la cirugía fue la presencia de derrame pleural, el cual se presento en la totalidad de nuestros pacientes, siendo bilateral en el 91.9% de éstos. En el 56% el derrame se consideró prolongado con una duración mayor a 15 49 días. Comparamos algunas características de nuestra muestra de estudio para valorar cuáles tendrían relación con la presencia de derrame prolongado (tomando en cuenta género, peso, talla, tipo de cirugía, si tuvieron fenestra o no, y el tamaño de la fenestra). Observamos resultados estadísticamente significativos con p <0.05, con respecto a tener mayor edad, peso y talla, asociándose a derrame pleural prolongado (>15 días), así mismo, el haber realizado una fenestración < 5 mm se asociaba a presentar derrame pleural prolongado. A diferencia de el estudio realizado por Raymond T. Fedderly y colaboradores, quienes encontraron que una edad menor de 4 años se relaciona con la presencia de derrame prolongado, en nuestro estudio observamos que, a mayor edad, se incremento el tiempo en días de duración de derrame pleural. El usode fenestra se asocio a una menor presencia de derrame pleural prolongado, sin embargo, al comparar el tamaño de la fenestra en quienes se les realizó el procedimiento, se observó que el presentar una fenestra menor a 5 mm respecto a aquellos que presentaban una fenestra > 6 mm, presentaron un tiempo de derrame pleural más prolongado. De nuestra muestra de estudio se observó que el 42.5% (n = 63) de los pacientes que fueron llevados a cirugía de derivación cavo pulmonar total, tuvieron que ser sometidos a procedimiento de mínima invasión (cateterismo) en nuestro Hospital. De estos, el procedimiento mas frecuentemente realizado fue la colocación de stent en fenestra (14.2% de los casos) seguido de realizar dos procedimientos en 50 la misma intervención (colocar stent en fenestra + en otro sitio: ya sea colocación de stent en ramas pulmonares o stent en unión de tubo extra cardiaco con vena cava o rama pulmonar), esto en un 8.1%. En frecuencia, si no se considera la colocación de stent en fenestra, encontramos que el procedimiento en segundo lugar mayormente realizado fue la colocación de stent en ramas pulmonares en un 4.7%, similar a lo reportado en la literatura. 17 Conclusión La cirugía de Fontan es el procedimiento paliativo de elección para todo paciente con fisiología univentricular. Así mismo, la mortalidad en esta operación ha disminuido tras implementar el procedimiento quirúrgico extracardiaco aunado al uso de fenestración. Hay que tener en cuenta que existen los criterios de Choussat que son indispensables para seleccionar a los candidatos para realizar dicha cirugía y que ayudan a predecir una cirugía exitosa tras llevar a un paciente a cirugía univentricular. Por lo que el diagnóstico y tratamiento precoz son fundamentales para proteger a los pulmones de la hipertensión pulmonar y evitar así el aumento de las presiones a nivel intracavitario por sobrecarga de presión y volumen. Realizar un cateterismo cardiaco antes del procedimiento de Fontan es un buen método para seleccionar a los pacientes de alto riesgo e implementar en ellos medidas que permitan mejorar su evolución. Así mismo, el cateterismo como ya vimos, permite la realización de diferentes tipos de intervencionismo que podrían mejorar la evolución postoperatoria del paciente. 51 Al realizar este estudio, nos damos cuenta que debemos implementar una estrategia para acelerar la programación a quirófano de todo paciente que se este acercando a una edad mayor de 7 años, ya que la mediana de nuestro Hospital fue llevarlos a cirugía a la edad de 8 años; sin embargo, se observó que en pacientes menores de 7 años, con peso menor de 20 kilogramos presentan menos días de derrame pleural. Además, si se implementa el colocar una fenestra > 5 mm, tendremos tres factores pronósticos, que pueden disminuir los días de derrame pleural y con ello evitar una estancia hospitalaria prolongada. Por último, se puede observar que la sobrevida de nuestros pacientes tras la cirugía de Fontan se mantiene en un 70%, similares a la tasa de sobrevida a nivel mundial, la cual oscila entre el 70 – 75% al pasar los 5 a 10 años tras la cirugía. En nuestra población, únicamente se reportó un 10.1% de defunciones a largo plazo entre nuestros pacientes de estudio posterior a cirugía. 52 18 Referencias 1. Ferencz C, Rubin JD, Mccarter RJ, Brenner JI, Neill C a, Perry LW, et al. Congenital Heart Disease: Prevalence at Livebirh The Baltimore-Washington Infant Study. Am J Epidemiol. 1985;121(1):31–6. 2. Mendieta-Alcántara GG, Santiago-Alcántara E, Mendieta-Zerón H, Dorantes-Piña R, de Zárate-Alarcón GO, Otero-Ojeda GA. Incidencia de las cardiopatías congénitas y los factores asociados a la letalidad en niños nacidos en dos hospitales del estado de México. Gac Med Mex. 2013;149(6):617–23. 3. Rosano A, Botto LD, Botting B, Mastroiacovo P. 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