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1 INSTITUTO MEXICANO DEL SEGURO SOCIAL UMAE HOSPITAL DE PEDIATRIA CENTRO MÉDICO NACIONAL DE OCCIDENTE TESIS DE POSGRADO PARA OBTENER EL DIPLOMA DE LA SUBESPECIALIDAD EN GASTROENTEROLOGIA Y NUTRICION PEDIATRICA Eficacia y seguridad de la alimentación oral temprana comparada con alimentación nasoyeyunal en pacientes pediátricos con pancreatitis aguda leve atendidos en un servicio de gastroenterología. Registro número: R- 2014-1302-23 Presenta: Dr. José de Jesús Vargas Lares UNAM – Dirección General de Bibliotecas Tesis Digitales Restricciones de uso DERECHOS RESERVADOS © PROHIBIDA SU REPRODUCCIÓN TOTAL O PARCIAL Todo el material contenido en esta tesis esta protegido por la Ley Federal del Derecho de Autor (LFDA) de los Estados Unidos Mexicanos (México). El uso de imágenes, fragmentos de videos, y demás material que sea objeto de protección de los derechos de autor, será exclusivamente para fines educativos e informativos y deberá citar la fuente donde la obtuvo mencionando el autor o autores. Cualquier uso distinto como el lucro, reproducción, edición o modificación, será perseguido y sancionado por el respectivo titular de los Derechos de Autor. 2 DIRECCION DE EDUCACION E INVESTIGACION EN SALUD No DE AUTORIZACION DEL COMITE LOCAL DE INVESTIGACION: 2014 -1302 - 023 n virtud de haber terminado de manera satisfactoria su tesis y contar con el val de su Director de tesis para obtener el grado de especialista en: GASTROENTEROLOGíA y NUTRICiÓN PEDIÁTRICA SE AUTORIZA LA IMPRESiÓN DE TESIS DEL ALUMNO: JOSÉ DE JESÚS VARGAS LARES "EFICACIA Y SEGURIDAD DE LA ALIMENTACiÓN ORAL TEMPRANA COMPARADA CON ALIMENTACiÓN NASOYEYUNAL EN PACIENTES PEDIÁTRICOS CON PANCREATITIS AGUDA LEVE A TENDIDOS EN UN SERVICIO DE GASTROENTEROLOGíA" DIRECTOR DE TESIS: DRA. MARIA DEL CARMEN BOJÓRQUEZ RAMOS DIRECTOR DE EDUC~CION E INVESTIGACION EN SALUD: - DR. JOSÉ ALBERTO TLACUILO PARRA 1~+p~ :::::: GuadalaJara Jalisco. Febrero 2015 3 INSTITUTO MEXICANO DEL SEGURO SOCIAL UMAE HOSPITAL DE PEDIATRIA CENTRO MÉDICO NACIONAL DE OCCIDENTE TESIS Eficacia y seguridad de la alimentación oral temprana comparada con alimentación nasoyeyunal en pacientes pediátricos con pancreatitis aguda leve atendidos en un servicio de gastroenterología. Para obtener el título en Gastroenterología y Nutrición Pediátrica, presenta Dr. José de Jesús Vargas Lares ASESOR Dra. Ma. Carmen Bojórquez Ramos. Gastroenterólogo Pediatra Dr. Juan Carlos Barrera de León Pediatra Neonatólogo Guadalajara, Jalisco, febrero 2015 4 Autor: José de Jesús Vargas Lares. Médico Residente de 2do. año de subespecialidad Gastroenterología y Nutrición Pediátrica. UMAE Hospital de Pediatría Centro Médico Nacional de Occidente. Belisario Domínguez 735 Col. Independencia. Guadalajara, Jalisco. México. 36350070. j_jesus_vg_ls@hotmail.com. Asesora: Dra. María del Carmen Bojórquez Ramos. Maestra en Nutrición Humana, Pediatra Gastroenteróloga. UMAE Hospital de Pediatría Centro Médico Nacional de Occidente. Belisario Domínguez 735 Col. Independencia. Guadalajara, Jalisco. México. 36350070. Correo: mcbojorquez@yahoo.com.mx Investigadores asociados: Dr. Juan Carlos Barrera de León. Doctor en Ciencias Médicas, Pediatra Neonatólogo. Investigador asociado B IMSS. SNI Nivel I CONACYT. Jefe de División de Educación en Salud. UMAE Hospital de Pediatría Centro Médico Nacional de Occidente. Belisario Domínguez 735 Col. Independencia. Guadalajara, Jalisco. México. 36350070. Correo: juan.barrerale@gmail.com mailto:j_jesus_vg_ls@hotmail.com 5 Gracias a Mi esposa por su amor, paciencia y comprensión. A mi hija por enseñarme y hacerme cada día una mejor persona. A mis padres por brindarme la oportunidad de seguirme superando. A mi tutores por la confianza y el apoyo brindado. 6 ÍNDICE I. RESUMEN 7 II. MARCO TEÓRICO 8 Antecedentes 15 Justificación 21 Planteamiento del problema 22 Objetivos 23 Hipótesis de trabajo 24 III. MATERIAL Y MÉTODOS Diseño 25 Universo de trabajo 25 Temporalidad 25 Criterios de selección 25 Co intervenciones 26 Operacionalización de las variables 27 Tamaño de la muestra y método de muestreo 31 Aleatorización 31 Cegamiento 31 Desarrollo del estudio 32 Análisis estadístico 35 Consideraciones éticas 36 IV. ORGANIZACIÓN DE LA INVESTIGACIÓN Recursos humanos 37 Infraestructura 37 Financiamiento 38 Resultados 39 Discusión 52 Conclusiones 55 Referencias bibliográficas 56 7 V. ANEXOS Anexo 1. Dieta de líquidos claros, alimentos permitidos 59 Anexo 2. Criterios de Atlanta 60 Anexo 3. Carta de Consentimiento Bajo Información 61 Anexo 4. Dieta Elemental 62 Anexo 5. Requerimientos FAO/OMS 63 Anexo 6. Dieta blanda baja en grasas 64 Anexo 7. Escala analógica graduada de dolor 65 Anexo 8. Hoja de recolección de datos 66 8 Eficacia y seguridad de la alimentación oral temprana comparada con alimentación nasoyeyunal en pacientes pediátricos con pancreatitis aguda leve atendidos en un servicio de gastroenterología. Introducción: El tratamiento en pancreatitis aguda es fundamentalmente de soporte, limitando la secreción exocrina, manteniendo un estado hídrico óptimo y detectando oportunamente las complicaciones que se presenten. Objetivos: Determinar la eficacia y seguridad de la alimentación oral temprana comparada con alimentación nasoyeyunal en pacientes pediátricos con pancreatitis aguda leve a través de evaluar y comparar la presencia de íleo, vómitos, distensión abdominal, exacerbación del dolor, estancia hospitalaria, estado nutricio posterior al inicio de la intervención nutricia; así como y frecuencia de readmisión a 1 mes. Método: Ensayo clínico controlado aleatorizado no cegado. Se incluyeron pacientes menores a 16 años de edad hospitalizados en el servicio de Gastroenterología del Hospital de Pediatría CMNO con el diagnóstico de pancreatitis aguda leve, de marzo de 2014 a enero de 2015. Resultados: Se incluyeron 12 pacientes, 8 dentro del grupo alimentación oral y 4 dentro del grupo alimentación enteral. El grupo de edad predominante al diagnostico fueron los adolescentes, el 75% del sexo femenino. La principal manifestación clínica al ingreso fue la presencia de dolor abdominal. En el 50% de los casos se identificó como factor etiológico la patología biliar. Todos los pacientes del grupo de alimentación enteral presentaron vómitose hiperglucemia. Mientras que en el grupo oral lo que destacó fue la exacerbación del dolor, con 1.2 veces más riesgo de presentar dolor en el grupo oral, sin embargo esto no impidió continuar la intervención nutricia. La estancia hospitalaria tuvo una mediana de 4 días en el grupo oral contra 10 días en el grupo enteral. No hubo diferencia en la tasa de readmisión a 30 días. Conclusiones: La alimentación oral es segura y eficaz como medio de tratamiento de los pacientes con pancreatitis aguda leve; aunque puede exacerbar el dolor abdominal 1.2 veces más que la alimentación enteral, esto no impide mantener la intervención terapéutica. El estado nutricio no se ve afectado por la intervención terapéutica. La estancia hospitalaria es menor en los pacientes alimentados por vía oral que por vía enteral. La tasa de readmisión a un mes fue igual en ambos grupos. 9 MARCO TEÓRICO La pancreatitis se define como la presencia histológica de inflamación dentro del parénquima del páncreas. La pancreatitis aguda es un proceso reversible caracterizado por la presencia de edema intersticial, infiltración por células inflamatorias agudas y grados variables de necrosis, apoptosis y hemorragia. Su fisiopatología aún no se entiende en su totalidad. La creencia actual es que, a pesar de contar con múltiples etiologías, la inflamación en la pancreatitis aguda parece ser el resultado de una vía común, la cual inicia con la generación de señales aberrantes de calcio dentro de las células acinares pancreáticas, seguidas por la activación prematura de proenzimas intra acinares o cimógenos dentro de dichas células. Se piensa que estos cimógenos activados, en particular la proteasa tripsina, se encargan de regular la lesión a las células acinares del páncreas y hasta cierto punto la producción de citocinas como el factor de necrosis tumoral alfa. Estas citocinas a su vez llevan a una respuesta inflamatoria aguda y a grados variables de inflamación extra pancreática (1). Dentro de las causas se consideran: Causas comunes: A. Alteraciones biliares. La pancreatitis biliar es una causa común de pancreatitis aguda en niños, más de lo que se creía anteriormente. Esta se debe sospechar si el paciente tiene elevaciones en los niveles de transaminasas y / o hiperbilirrubinemia. B. Condiciones sistémicas (choque, sepsis, síndrome hemolítico urémico, lupus eritematoso sistémico, enfermedad inflamatoria intestinal, déficit de alfa-1-antitripsina, enfermedad de Kawasaki, Glucogenosis tipo 1). C. Medicamentos: L- Asparaginasa, aziatropina, acido valproico, mesalamina, alcohol, 5-ASA, carbamacepina, clorotiazidas, corticosteroides, enalapril, eritromicina, estrógenos, isoniazida, fenitoína, furosemida, 6-Mercaptopurina, metildopa, metronidazol, pentamidina, sulfonamidas, tetraciclinas, tiazidas, trimetoprim. D. Trauma: no penetrante ya sea intencionado o accidental. 10 Causas menos comunes: A. Infecciosa: Adenovirus, Áscaris/Clonorchis s., Citomegalovirus, Coxsackie B, Echo virus, Epstein Barr, Hepatitis A y B, Influenza A y B, Leptospirosis, Malaria, Micoplasma, Parotiditis, Rotavirus, Rubéola, Salmonelosis, Sarampión, y Varicela. B. Enfermedades metabólicas: Hipercalcemia, hipertrigliceridemia y errores innatos del metabolismo (acidemias orgánicas, acidosis láctica). C. Trastornos genéticos /hereditarios. Estudios recientes sugieren que la presencia de mutaciones en el SPINK1 (inhibidor Kasal tipo de serina) – CFTR (receptor de conductancia de transmembrana de fibrosis quística) agregado el páncreas divisum incrementan el riesgo de pancreatitis aguda. Causas raras: A. Pancreatitis autoinmune: ocurre en 2 formas. El tipo 2 parece ser la más común en niños, y se asocia a enfermedad inflamatoria intestinal. En adultos el diagnóstico de la tipo 1 se asocia a elevación de la IgG4, inflamación difusa o segmentaria del páncreas, contracción difusa de los ductos pancreáticos y características histológicas. En niños no es común la elevación de IgG4 incluso con cambios histológicos. B. Anormalidades anatómicas pancreatobiliares: Páncreas divisum, unión anormal del conducto biliar común y el pancreático (síndrome del canal común). Quiste de colédoco. Páncreas anular. El páncreas divisum está presente en más del 15% de la población (2). Ya que la fisiopatología de este padecimiento no está clara y establecer un diagnóstico histológico de pancreatitis aguda es impráctico, se optó por la creación de criterios clínicos por parte de un grupo de expertos en la enfermedad inflamatoria pancreática aguda en el adulto en el año 1992 en la ciudad de Atlanta, en Estados Unidos (3). De forma histórica, los pediatras han aplicado estos criterios diagnósticos de pancreatitis en adultos a la población pediátrica. De acuerdo a estos criterios los pacientes deben cumplir 2 de 3 parámetros para hacerse diagnóstico de pancreatitis aguda: dolor 11 abdominal típico, elevación de amilasa y lipasa por arriba de 3 veces su valor superior normal y presentar hallazgos confirmatorios en imagenología abdominal. Sin embargo se ha visto que la presentación clínica en los niños difiere con la de los adultos. A este respecto los niños suelen manifestar con más frecuencia dolor abdominal, pero pocos presentan irradiación a la espalda. El segundo síntoma más común es la presencia de náusea o vómito y en lactantes suelen presentarse distensión abdominal e irritabilidad (4). El ultrasonido es una herramienta diagnóstica atrayente como uso inicial ya que no somete a los pacientes a radiación e identifica posibles etiologías de pancreatitis (litiasis vesicular). Sin embargo, tiene las desventajas de ser operador dependiente y que la presencia de distensión de asas intestinales dificulta la observación cuidadosa del páncreas. Se ha visto, por lo tanto, que la tomografía de abdomen con doble medio de contraste (administración oral e intravenosa) es más sensible que el ultrasonido en especial para identificar complicaciones asociadas a pancreatitis severa por lo que, con este fin, no se recomienda realizar este estudio de forma inicial a menos que exista duda en el diagnóstico, ya que es preferible realizarla después de varios días de evolución para evaluar la presencia de necrosis (1,5). Tomando en cuenta los criterios clínicos para pancreatitis aguda en adultos elaborados en Atlanta, se puede clasificar a la pancreatitis aguda en leve y severa. La pancreatitis aguda leve se asocia con disfunción orgánica mínima y una recuperación pronta, mientras que la pancreatitis aguda severa se asocia a falla orgánica la cual se define con la presencia de choque, insuficiencia pulmonar, falla renal, sangrado gastrointestinal, coagulación intravascular diseminada y dismetabolias severas, así como la presencia de complicaciones locales como son la presencia de necrosis, abscesos y pseudoquistes. Clínicamente, la pancreatitis aguda severa se manifiesta a nivel abdominal con irritación peritoneal, distensión e íleo. El grado de severidad se puede clasificar de acuerdo a los criterios de Ranson (si cumple tres o más parámetros), APACHE (por sus 12 siglas en inglés: Acute Physiology and Chronic Health Evaluation, cumpliendo 8 o más parámetros) o Glasgow modificado (si cumple tres o más parámetros). Es importante mencionar que la pancreatitis aguda severa usualmente se declara al inicio del padecimiento y una progresión tardía de pancreatitis leve a severa es extremadamente rara (3). En la población pediátrica se cuentan con pocos estudios sobre criterios pronósticos y tampoco se cuenta con información amplia al respecto de cómo una etiología en particular puede afectar el pronóstico de la pancreatitis aguda en niños (6). En un esfuerzo por desarrollar un criterio pronóstico para pancreatitis aguda en la población pediátrica, DeBanto y colaboradores realizaronun sistema similar al de Ranson utilizado en adultos, en donde se asigna un punto a cada criterio presente tomando en cuenta ocho parámetros, cuatro para ser evaluados al ingreso y cuatro a las 48 horas. Los criterios al ingreso son: edad menor de 7 años, peso menor a 23kg, recuento leucocitario mayor a 18,500 y DHL mayor a 2000. Los criterios a las 48 horas son calcio menor a 8.3mg/dL, albúmina menor a 2.6mg/dL, secuestro de líquidos mayor a 75ml/kg en 48 horas y una elevación del nitrógeno ureico de más de 5mg/dL (7). Sin embargo se ha visto que en términos de sensibilidad y valor predictivo negativo no existe mucha diferencia entre este sistema y los que se utilizan en adultos mencionados previamente, reportándose en algunos estudios una sensibilidad tan baja como de 50% (8,9, 10). El índice de severidad en tomografía computarizada (o puntuación de Balthazar) evalúa las alteraciones tomográficas presentadas en la pancreatitis aguda en base a la apariencia de páncreas así como el grado de necrosis estableciendo una puntuación, como se muestra en la Tabla 1 y Tabla 2. 13 Tabla 1. Índice de severidad tomográfico de Balthazar. Alteración pancreática Grado Puntuación Tomografía normal A 0 Edema pancreático local o difuso B 1 Inflamación peripancreática C 2 Colección líquida única D 3 Colecciones múltiples o presencia de burbujas de aire E 4 Tabla 2. Índice de severidad de acuerdo a porcentaje de necrosis Porcentaje de necrosis Puntuación No necrosis 0 0-30% de necrosis 2 30-50% de necrosis 4 Más del 50% de necrosis 6 Los pacientes que presentan un índice tomográfico de severidad de 0 a 1 exhibían una tasa de mortalidad del 0% y no morbilidad, mientras que los pacientes con un índice de severidad de 2 no tenían mortalidad, pero sí una tasa de morbilidad del 4%. En contraste, un índice tomográfico de severidad de 7-10 se asocia a una mortalidad del 17% y una tasa de complicaciones de 92% (11). En adultos ya se había reconocido que este índice es tan sensible y específico e incluso superior a los índices clínicos en la predicción de severidad del cuadro de pancreatitis (12), lo cual se ha corroborado en pacientes pediátricos, siendo superior 14 incluso a los criterios clínicos creados por De Banto y colaboradores en la identificación de niños con pancreatitis aguda que tienen un riesgo elevado de desarrollar complicaciones (9,13). El tratamiento de la pancreatitis aguda es fundamentalmente de soporte. El objetivo principal consiste en limitar la secreción exocrina del páncreas, mantener un estado hídrico óptimo y detectar oportunamente las complicaciones inmediatas y las que a largo plazo se presenten (25). En los primeros años de la década de los 90s los pacientes con pancreatitis aguda se manejaban con ayuno con apoyo con soluciones intravenosas por un tiempo variable y no sistematizado. En esta experiencia inicial se identificó que los pacientes presentaban desnutrición aguda por bajo aporte de energía, macro y micronutrimentos manifestada como pérdida de peso y por otra parte se observó una proporción significativa de recaídas de dolor abdominal y amilasemia relacionados al reinicio temprano de la alimentación oral (19). Al final de la década de los 90s se inició la alimentación enteral yeyunal con dieta elemental en el intento dual de prevenir la desnutrición aguda y de evitar la activación metabólica del páncreas al infundir nutrimentos en forma de dieta elemental en un segmento distal a la ampolla de Vater (20,21). En los últimos dos lustros se desarrolló la experiencia de alimentación enteral en infusión continua o ciclada, gracias al manejo de bombas enterales con sondas radiopacas con punta de tungsteno y se demostró la factibilidad de manejar el procedimiento de intervención nutricia en el domicilio de los pacientes (22). En lo referente a cuando iniciar, las recomendaciones de las guías clínicas son relativamente vagas. Tal vez, la más clara es la del American College of Gastroenterology (ACG, por sus siglas en ingles), que propone reiniciar la dieta cuando el paciente no precise opiáceos, no refiera náuseas o vómitos y presente una exploración con ruidos peristálticos presentes sin hipersensibilidad abdominal. La European Society for Parenteral and Enteral Nutrition (ESPEN, por sus siglas en ingles) sugiere hacerlo cuando el paciente no refiera dolor y las enzimas pancreáticas estén en 15 descenso, insistiendo en que sea lo más precoz posible. Otros estudios sugieren que la normalización de la lipasa sérica no es obligatoria para poder iniciar la nutrición enteral en pancreatitis aguda leve (35). Esta falta de un criterio unificado se debe a que no hay ensayos controlados en población pediátrica que valoren los datos clínico-analíticos que habitualmente se emplean a la hora de decidir probar tolerancia oral (26). No hay consenso en la forma de iniciar la dieta oral, como norma general se comenzará muy lentamente, incrementando progresivamente la cantidad y calidad de los nutrientes. Teniendo en cuenta la fisiología de la secreción pancreática, parece lógico empezar primero con hidratos de carbono para posteriormente añadir proteínas y mantener una dieta baja en grasas (23). En este punto existe un cierto consenso, recomendándose una dieta baja en grasa, < 30% de las calorías totales ingeridas, sin considerar necesarios preparados especiales (26). Existen dos estudios metodológicamente similares que comparan reiniciar tolerancia con líquidos con pasar directamente del ayuno a dieta blanda. Jacobson B. C. y cols. Aleatorizaron 121 pacientes sin criterios de gravedad a iniciar dieta oral con líquidos, 588 Kcal diarias (incluyendo un total de 2 g grasa/día), o con dieta blanda baja en grasas, 1.200 Kcal (35 g grasa/día). En ambos grupos se reinició la dieta en el día 2 post ingreso (rango 1-3). No presentaron diferencias significativas en cuanto a la reaparición del dolor, náuseas o vómitos (6% con líquidos, 11% con dieta blanda) o en cuanto al porcentaje de pacientes que debieron suspender dieta (28). Sathiaraj E. y cols. Presentaron un grupo de 101 pacientes. En este caso la dieta líquida incluía 458 Kcal, con 11 g de grasa y la dieta blanda 1.040 Kcal con 20 g. La dieta se reintrodujo en menos de 36 horas desde el ingreso en ambos grupos. No se observaron diferencias en cuanto al número de pacientes que presentaron náuseas, 16 vómitos o dolor (13% en líquidos, 8% en blanda). La única diferencia significativa observada aparece en la duración de la hospitalización, 8 días (rango 6-9) con líquidos y 5 (4-7) con sólidos (29). Por lo tanto, de acuerdo a estos datos, la tolerancia oral en la pancreatitis aguda leve se debería iniciar de forma temprana pudiendo emplear directamente una dieta blanda baja en grasa. Cuando la tolerancia es limitada por saciedad o plenitud tempranas, el fraccionamiento de la dieta puede resultar útil. Realizar cinco a seis comidas pequeñas en cantidad al día, en vez de sólo tres comidas de tamaño regular, mejora la tolerancia del paciente y permite un aporte calórico adecuado (30). Se han descrito listas de alimentos permitidos, la cual se detalla en el Anexo 1. Después de analizar los datos de estudios recientes se puede afirmar que en los pacientes con pancreatitis aguda leve, la composición de nutrientes y las características físicas de las comidas no parecen cambiar el curso clínico de la enfermedad. La evidencia nos permite concluir que en la pancreatitis humana el páncreas dañado puede ser menos sensible a la estimulación por los alimentos que lo antes considerado (32). Además recientemente aparece evidencia de que la administración oral se puede restablecer tan pronto como el paciente refiera hambre, (hasta 5 días después de inicio de la enfermedad),siendo esto seguro y acorta la estancia hospitalaria (36). ANTECEDENTES En Chile en el 2001, un estudio prospectivo, no aleatorizado, incluyó 31 pacientes, con edad promedio 45 años, de los cuales el 42% cursaron con una pancreatitis aguda leve, el criterio utilizado en la presente serie, para iniciar la realimentación vía digestiva, se basó principalmente en los signos de mejoría clínica (desaparición del dolor, vómitos, nauseas, íleo, etc.), acompañados del descenso de la actividad enzimática 17 (disminución de la amilasemia un 50%). No obstante, esto reafirma la seguridad de uso de la vía oral, en pacientes seleccionados. Los resultados de la realimentación de acuerdo a los criterios señalados, sugieren que la vía oral es una opción posible y segura, que no aumenta la morbilidad, aún en algunos pacientes con extenso compromiso tomográfico de la glándula pancreática (grados C, D y E de Balthazar), condición que se presentó en 25 de los 31 pacientes estudiados, a pesar de lo cual el 64% de ellos, pudo iniciar su realimentación digestiva por vía oral (24). Tabla 3. Esquema y composición de la dieta utilizada vía oral o enteral en la realimentación de pacientes con pancreatitis aguda. Adaptado de Papapietro VK. Rev. med. Chile 2001. Otra comunicación sobre el tema que merece la pena comentar, por el giro que supone respecto a la práctica tradicional, es la publicada por Eckerwall G. E. y cols en 2007. Se aleatorizaron 60 pacientes con pancreatitis aguda sin criterios pronósticos de gravedad en dos grupos (Ayuno – alimentación oral inmediata). Los criterios de inclusión fueron una amilasa pancreática 3 veces superior a lo normal, el inicio de dolor abdominal dentro de las 48 h, un (APACHE) menor a 8 y PCR menor a150mg / L. Las medidas de resultado fueron la amilasa pancreática, datos de respuesta inflamatoria sistémica, la factibilidad y la duración de la estancia hospitalaria. Los grupos fueron comparables en cuanto a edad, sexo, etiología, APACHE, el tiempo de inicio del dolor y de la amilasa 18 en la admisión. No se observaron diferencias significativas entre los grupos con relación a los niveles de amilasa, PCR, leucocitos, dolor abdominal o síntomas gastrointestinales. La estancia intrahospitalaria fue significativamente menor en el grupo de alimentación oral (4 frente a 6 días, p< 0.05). No hubo diferencias significativas en signos de agravamiento de la enfermedad, incluyendo cifras de amilasa o datos de respuesta inflamatoria sistémica, por lo que concluyen que en la pancreatitis aguda leve, la alimentación oral inmediata es factible y segura además, puede acelerar la recuperación sin eventos adversos gastrointestinales. Los pacientes en el grupo de ayuno tenían líquidos orales y la dieta era reintroducida en una manera escalonada de acuerdo a tolerancia mientras que los pacientes en el grupo de alimentación oral se les permitieron inmediatamente beber y comer libremente según la tolerancia. En ambos grupos, los fluidos intravenosos se administraron en cantidades que se requieren de forma individual. Todos los pacientes fueron evaluados a diario, los líquidos administrados, la ingesta de líquidos y alimentos, gasto urinario, síntomas gastrointestinales (náuseas, vómitos, cólicos y diarrea) y dolor evaluado por la escala visual analógica en reposo. Los pacientes fueron tratados de acuerdo a la rutina clínica, incluyendo la analgesia (27). Gómez Nájera y colaboradores realizaron en este hospital un ensayo clínico abierto, con 17 pacientes, estudiados de noviembre 2008 a diciembre de 2009, con diagnóstico de pancreatitis aguda sustentado en datos clínicos, bioquímicos y de imagen, en un 47% se considero leve. Dentro de las complicaciones asociadas a la nutrición enteral, la más frecuente fue el vómito relacionado al volumen de infusión y que obligo a disminuir la cantidad de esta. Concluyendo que la alimentación enteral con infusión yeyunal continua de dieta elemental en pacientes pediátricos con pancreatitis aguda fue eficaz para mantener el estado nutricio evaluado por indicadores antropométricos, además fue eficaz para mejorar la concentración de albúmina sérica. Demostró como un procedimiento seguro con una baja proporción y magnitud de complicaciones mecánicas, infecciosas y metabólicas. En 2010, Moraes et al llevó a cabo una investigación para tratar de demostrar si una dieta solida completa podría ser más peligrosa dada la evidencia de estudios previos. A 19 través de un estudio prospectivo, aleatorizado, controlado, doble ciego, en el que la realimentación oral, con una dieta sólida en pancreatitis aguda leve, fue bien tolerada por la mayoría de los pacientes y dio lugar a una estancia hospitalaria más corta entre los pacientes, sin recaída dolor abdominal. Por lo que con el empleo de esta estrategia se ahorrarían recursos sanitarios. Se observó que una dieta sólida completa puede ser más aceptable y una alternativa de ahorro de costos para el tratamiento dietético de pacientes que se recuperan de pancreatitis agudas leves. Las características de las dietas utilizadas en este estudio se muestran en la Tabla 4 (31). Tabla 4. Composición de la dieta utilizada para la realimentación oral. DIA CALORIAS (KCAL /DIA) CARBOHIDRATOS (%) PROTEINAS (%) GRASA [GR/KG/DIA (%)] Dieta A: Dieta de líquidos claros hipocalórica, con baja proporción de grasas, con incrementos graduales en las cantidades de calorías otorgadas por proteínas, grasas durante los días subsecuentes. 1 250 90 5-10 2(<5) 2 800 80-85 10-15 5(5) 3 1200 70-80 15-20 13(5-10) 4 1500 65-70 20-25 37(10-15) 5 1800 55-65 25-30 45(15-20) Dieta B: Dieta blanda hipocalórica, con proporción promedio de grasa, con incrementos graduales en las cantidades de calorías durante los días subsecuentes. 1 250 55-65 25-30 5(15-20) 2 800 55-65 25-30 20(15-20) 3 1200 55-65 25-30 30(15-20) 4 1500 55-65 25-30 40(15-20) 5 1800 55-65 25-30 45(15-20) Dieta C: Dieta solida completa, con cantidades normales de caloría y grasas a través del periodo de realimentación. 1 1800 55-65 25-30 45(15-20) 2 1800 55-65 25-30 45(15-20) 3 1800 55-65 25-30 45(15-20) 4 1800 55-65 25-30 45(15-20) 5 1800 55-65 25-30 45(15-20) Adaptado de Moraes JM. J Clin Gastroenterol. 2010 Gómez Navarro y colaboradores en un estudio de casos y controles en este hospital estudiaron 75 pacientes con diagnóstico de pancreatitis aguda en un periodo de 4 años, de enero de 2009 a diciembre de 2012. Reportando una relación 1:2.7 entre los 20 casos de pancreatitis grave y pancreatitis leve, con predominio del género femenino y una edad promedio de 10 años. Se encontró asociación de ciertos datos clínicos con la gravedad del cuadro de pancreatitis aguda entre los que se mencionan: frecuencia respiratoria elevada, acantosis, obesidad (por percentil de Índice de Masa Corporal) y síndrome metabólico. Se encontró asociación de ciertos datos bioquímicos tomados a las 72 horas o más del ingreso del paciente a urgencias con la gravedad del cuadro de pancreatitis aguda, mencionándose: disminución del hematocrito más del 10% del valor inicial, niveles de calcio y albúmina bajos, nivel de DHL elevado y presencia de hipoxemia. En cuanto al valor de Proteína C Reactiva se elevó en la mayoría de los pacientes con pancreatitis aguda, siendo útil en el diagnóstico de dicha entidad, pero no como predictor de severidad. La etiología predominante fue la biliar, la cual predominó en los escolares y adolescentes, reportándose sólo un caso de etiología biliar en lactantes y preescolares, secundario a quiste de colédoco. La etiología idiopática continúa reportándose en una proporción importante de casos, siendo la segunda etiología más común en este estudio. En lo referente a la estancia hospitalaria en los pacientes conpancreatitis aguda leve fue una media de 10 días, y el inicio de la vía oral como media fue a los 7 días. Un 18.5% amerito NPT (nutrición parenteral total), y 76.4% enteral vía sonda nasoyeyunal. Se reportó una mortalidad de 5.3% en este estudio (18). 21 Tabla 5. Publicaciones relacionadas a alimentación oral en pancreatitis aguda. Referencia Sede N Diseño Resultados Papapietro VK, Rev. med. Chile 2001 Chile 31 Prospectivo, no aleatorizado Presenta 31 casos, edad promedio 45ª, 42% leve, 21 pacientes cumplieron los requisitos para indicar la vía oral, en promedio a los 8,1±3,5 días del ingreso, (rango de 3 a 15 días). Eckerwall G. E Clin Nutr 2007; Suecia 60 Prospectivo Aleatorizado 60 pacientes, dos grupos similares en edad, sexo, etiología, APACHE. No se encontraron diferencias en niveles de amilasa, PCR, leucocitos, síntomas abdominales. El tiempo de estancia hospitalaria fue significativamente menor en el grupo de alimentación oral inmediata (4 vs 6). En pancreatitis aguda leve la alimentación oral inmediata fue segura y aceleró la recuperación sin eventos adversos gastrointestinales. Jacobson BC Clin Gastroeneterol Hepatol 2007 Boston 121 Ensayo clínico aleatorizado 121 pacientes: 66 (dieta líquidos claros), 55 (dieta baja en grasas). El cese de la alimentación debido al dolor o la náusea fue similar en ambos grupos (6% DLC), 11% (DBG); p = 0,51). La estancia hospitalaria media después de la realimentación es idéntica en ambos grupos. Los pacientes con DBG consumen significativamente más calorías y gramos de grasa durante su primera comida y el día de estudio # 1. No hubo diferencia en 28 días en las tasas de readmisión. Sathiaraj E. Aliment Pharmacol Ther 2008 India 101 Ensayo clínico Dos grupos: 52 (DLC) y 49 (DB). Una disminución estadísticamente significativa en la duración de la hospitalización (de una mediana de 2 días se observó en los pacientes que recibieron una dieta blanda (p <0,001). No hay diferencia significativa en la necesidad de suspender la dieta debido al dolor, nauseas o vomito. Ocurrió en 11 pacientes (siete de los pacientes DLC, cuatro de los pacientes DB).Los pacientes que iniciaron una dieta blanda consumen significativamente más calorías y las grasas en el día de estudio 1 (p <0,001). Moraes JM J Clin Gastroenterol 2010 Brasil 210 Ensayo clínico controlado aleatorizado doble ciego. 3 Grupos: Dieta líquida, blanda, y solida completa. No hubo diferencia en las tasas de recaída del dolor durante la realimentación (p = 0,80).Se presento en el 19%. Los sujetos que iniciaron una dieta sólida completa consumen significativamente más calorías y grasas en los días de prueba 1 y 2 (p <0,001). A estancia hospitalaria fue más corta (mediana de -1,5 d) en la DSC. No hubo diferencias en la recaída del dolor (p = 0,000). Li Juan Pancreas 2013 China 149 Prospectivo, aleatorizado controlado Dos grupos: Alimentación oral temprana “cuando el sujeto tiene hambre” 75 y Alimentación oral rutinaria (restablecimiento de peristalsis, disminución de amilasa- lipasa, ausencia de dolor abdominal) 74 pacientes, con características iniciales comparables. Los pacientes en el grupo AOT empezaron realimentación mucho antes que los del grupo de AOR (4,56 + 1.53 Vs 6.75 + 2,29 días; p< 0,05). Por otra parte, los pacientes en el grupo AOT tenían significativamente más corto la estancia total (6.8 + 2,1 vs 10.4 + 4,1 días; p< 0,01) y post realimentación. (2.24 + 0.52 vs 3,27 + 0.61 días; p< 0,01).No encontrando diferencia significativa en eventos gastrointestinales adversos entre los 2 grupos. Todos los pacientes que desarrollaron recurrencia del dolor y distensión abdominal, tuvieron recuperación espontánea, por lo que no se tuvo que alterar el régimen de alimentación. 22 JUSTIFICACIÓN Y PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA Magnitud. En reportes de los Estados Unidos de Norteamérica se describe que alrededor de 11,000 niños desarrollan pancreatitis aguda de forma anual, con una incidencia de 2 a 13 casos por cada 100,000 niños, duplicándose la incidencia de esta enfermedad de 1998 a 2002. Tomando en cuenta la estancia hospitalaria y los costos de hospitalización, el costo de hospitalización por sí solo (sin tomar en cuenta si existen complicaciones de la enfermedad) es de aproximadamente 200 millones de dólares al año en este país (1,8, 14). En nuestro país no se cuenta con un reporte de incidencia de casos de pancreatitis aguda en niños a nivel nacional, sin embargo el Hospital Infantil de México reportó una incidencia aproximada de 47 casos del 2001 al 2006 (15). El Hospital de Pediatría del Centro Médico Nacional de Occidente reporto una incidencia de 36 casos entre los años de 2000 a 2005 (16) incrementándose anualmente de forma gradual hasta llegar a 19 casos en el año 2008 (17), y 25 casos anuales del 2009 al 2012 (18). Trascendencia No hay estudios publicados en nuestro país que describan la alimentación oral en pacientes pediátricos con pancreatitis leve. El iniciar de manera temprana la vía oral nos permitirá brindar apoyo nutricio de una forma pronta que a su vez lleve a una recuperación más rápida, disminuyendo los días de estancia hospitalaria y con esto el costo de atención médica. Vulnerabilidad El no haber estudios validados en población pediátrica, pudiera generar desconfianza en iniciar la alimentación oral. Sin embargo la mayor parte de los estudios son hechos en adultos, los cuales describen que es seguro. Por lo que su descripción pudiera mostrar una pauta que nos permita disminuir la estancia hospitalaria de estos pacientes y las complicaciones secundarias a mantener el estado de ayuno innecesario. 23 Factibilidad En este hospital ya se han realizado estudios en los cuales se aborda la pancreatitis aguda, tal es el caso del elaborado por Sánchez-Ramírez CA y cols en el 2007 (16), en el cual se describe la clínica, pronóstico y factores etiológicos tanto de pancreatitis aguda como recurrente en niños en el transcurso de 5 años (2000-2005). Posteriormente Gómez-Nájera M en su trabajo de tesis (17), demostró, mediante la elaboración de un ensayo clínico abierto, que la alimentación enteral con infusión yeyunal continua a base de dieta elemental es un método eficaz y seguro para lograr mantener el estado nutricio en pacientes pediátricos con pancreatitis aguda. Recientemente Gómez-Navarro en un estudio de casos y controles encontró asociación de ciertos datos clínicos con la gravedad del cuadro de pancreatitis aguda. Por lo tanto, se demuestra que es factible la realización de este estudio por tratarse de una Unidad Médica de Alta Especialidad en donde, además de ser centro de referencia para pacientes con esta patología, se cuenta con la capacidad tanto en recursos humanos y materiales para la elaboración de este trabajo de investigación. En la UMAE Hospital de Pediatría del Centro médico Nacional de Occidente, se atienden cerca de 25 pacientes por año con cuadro de pancreatitis aguda, el 90% de estos se clasifica como leve, y se mantienen durante 7 días en ayuno, con una estancia hospitalaria promedio de 10 días, por lo anterior surge la pregunta. ¿Cuál es la eficacia y seguridad de la alimentación oral temprana comparada con alimentación nasoyeyunal en pacientes pediátricos con pancreatitis aguda leve atendidos en el servicio de Gastroenterología de la UMAE Hospital de Pediatría del Centro Médico Nacional de Occidente, IMSS? 24 OBJETIVO GENERAL: Determinar la eficacia y seguridad de la alimentación oral temprana comparada con alimentación nasoyeyunal en pacientes pediátricos con pancreatitis aguda leve atendidos en el servicio de Gastroenterología de la UMAE Hospital de Pediatría del Centro Médico Nacional de Occidente, IMSS. Objetivos específicos: 1. Evaluar la presencia deíleo en los pacientes posterior al inicio de la intervención nutricia en niños con pancreatitis aguda leve. 2. Determinar la presencia de vómitos en los pacientes posterior al inicio de la intervención nutricia en niños con pancreatitis aguda leve. 3. Evaluar la presencia de distensión abdominal en los pacientes posterior al inicio de la intervención nutricia en niños con pancreatitis aguda leve. 4. Identificar la exacerbación del dolor en los pacientes posterior al inicio de la intervención nutricia en niños con pancreatitis aguda leve. 5. Comparar los días de estancia hospitalaria en los pacientes con pancreatitis aguda leve alimentados por vía oral de manera temprana con los pacientes que reciban alimentación nasoyeyunal. 6. Comparar el estado nutricio al egreso en los pacientes con pancreatitis aguda leve alimentados por vía oral de manera temprana con los pacientes que reciban alimentación nasoyeyunal. 7. Comparar la frecuencia de readmisión a 1 mes en los pacientes con pancreatitis aguda leve alimentados por vía oral de manera temprana con los pacientes que reciban alimentación nasoyeyunal. 25 Hipótesis Alterna La alimentación oral temprana comparada con alimentación nasoyeyunal es igual de eficaz y segura en pacientes pediátricos con pancreatitis aguda leve atendidos en el servicio de Gastroenterología de la UMAE Hospital de Pediatría del Centro Médico Nacional de Occidente, IMSS. La estancia hospitalaria es menor en los pacientes en los que se inició de manera temprana la alimentación oral. Hipótesis Nula La alimentación oral temprana comparada con alimentación nasoyeyunal es menos eficaz y segura en pacientes pediátricos con pancreatitis aguda leve atendidos en el servicio de Gastroenterología de la UMAE Hospital de Pediatría del Centro Médico Nacional de Occidente, IMSS. La estancia hospitalaria es igual en los pacientes en los que se inició de manera temprana la alimentación. 26 MATERIAL Y MÉTODOS: Diseño Ensayo clínico controlado aleatorizado no cegado. Universo Pacientes menores a 16 años de edad que fueron valorados en hospitalización por el servicio de Gastroenterología del Hospital de Pediatría del Centro Médico Nacional de Occidente con el diagnóstico de pancreatitis aguda leve. Temporalidad Marzo de 2014 a Enero 2015. Criterios de selección. Criterios de inclusión: 1. Pacientes mayores a 1 mes y menores de 16 años. 2. Hospitalizados a cargo del servicio de gastroenterología. 3. Diagnóstico de pancreatitis aguda leve, de acuerdo a los criterios de Atlanta. (Anexo 2) 4. Consentimiento bajo información firmado por alguno de los padres o tutores. (Anexo 3 ) Criterios de exclusión: 1. Pancreatitis aguda grave definida por Clasificación Tomográfica de Balthazar D o E. (Tabla 1 y Tabla 2). 2. Pancreatitis crónica 3. Pancreatitis recurrente 4. Pancreatitis asociada a insuficiencia renal crónica, leucemia bajo tratamiento de quimioterapia, post quirúrgicos de cirugía cardiovascular, o pancreatitis 27 reactiva a enfermedad sistémica que por la condición del paciente no se maneje en nuestro servicio. Criterios de eliminación: 1. Efectos adversos severos asociados a la patología: recurrencia del íleo, perforación intestinal, abdomen agudo, dolor abdominal que no cede a la administración de opioides, vómito incoercible. 2. Decisión de los padres del retiro del paciente del estudio. 3. Aquel paciente que no tolere la vía oral o enteral y se le ofrecería Nutrición Parenteral Total. Co intervenciones 1. Aporte de líquidos parenterales 2500ml/M2SC/día con electrolitos (Na, K, Mg) de acuerdo a requerimientos. 2. Administración de cargas de solución cristaloide (SS 0.9%) a 20ml/Kg/dosis de acuerdo a la condición clínica del paciente. 3. Reposición de calcio en forma de gluconato de calcio en caso de estar por debajo de 8.3mg/dl a 100mg/kg/día (dividido en 3 – 4 dosis). 4. Administración de procinético (metoclopramida 0.1mg/kg/dosis) intravenosa en caso de presencia de 3 o más vómitos en 1 hora. 5. Administración de inhibidor de receptores 5HT3 (Ondansetron) a dosis de 0.15mg/Kg/dosis intravenosa en caso de vómitos incoercibles a pesar de manejo con procinético. 6. Administración de inhibidor de bomba de protones a dosis de 1mg/kg/día cada 24 hrs, teniendo como dosis máxima 40mg. 7. Control del dolor con ketorolaco intravenoso a dosis de 1mg/kg/dosis cada 8 hrs. 8. Administración de buprenorfina 3 µg/kg/dosis en caso de persistencia de dolor abdominal según escala análoga de dolor mayor e igual a 5 (Anexo 7) a pesar del tratamiento convencional en el caso de pacientes entre 3 a 12 años, teniendo como dosis tope 300 µg, siendo esta la dosis para pacientes mayores de 12 28 años. La cual se podrá repetir cada 4 a 6 hrs según sea conveniente, previa valoración médica. 9. Administración de antibióticos, posterior a toma de Hemocultivo, Urocultivo, en caso de signos físicos y datos laboratoriales de sepsis y de acuerdo a sospecha de germen y modificado según resultado de cultivos. 10. Administración de insulina ya sea en bolos o infusión continua. VARIABLES. VARIABLE DEPENDIENTE: Íleo, vómitos, exacerbación del dolor, distensión abdominal, estancia hospitalaria, frecuencia de readmisión a 1 mes. VARIABLE INDEPENDIENTE: Alimentación oral / Alimentación nasoyeyunal OPERACIONALIZACION DE VARIABLES Variable Tipo Medición Estadística Alimentación oral Cualitativa Nominal Frecuencia y porcentaje, chi cuadrada Alimentación nasoyeyunal Cualitativa Nominal Frecuencia y porcentaje, chi cuadrada 29 Demográficas Variable Tipo Medición Unidad Estadística Edad Cuantitativa Continua Años Mediana y rangos , U de Mann Whitney Género Cualitativa Nominal Sexo Frecuencia y porcentaje, chi cuadrada Antropométricas Variable Tipo Medición Unidad Estadística Peso Cuantitativa Continua Kilogramos Mediana y rangos , U de Mann Whitney Talla Cuantitativa Continua Centímetros Mediana y rangos , U de Mann Whitney IMC Cuantitativa Continua Kg/m2 Mediana y rangos , U de Mann Whitney Clínicas Variable Tipo Medición Unidad Estadística Etiología Cualitativa Nominal 1. Biliar 2. Traumática 3. Infecciosa 4. Medicamentosa 5. Metabólica 6. Condición sistémica 7. Causa genética 8. No determinada Frecuencia y porcentaje, chi cuadrada 30 Bioquímicas Variable Tipo Medición Unidad Indicador Estadística Leucocitosis Cualitativa Ordinal Miles de leucocitos / ul 1. Leucopenia: <4.9 2. Normal 3. Leucocitosis: >10.5 Frecuencia, chi cuadrada Hematócrito Cuantitativa Continua Porcentaje Valor anormal:<40% medianas y rangos, U Mann-Whitney Sodio Cuantitativa Continua mmol/L Valor anormal: < 137 o >145 mmol/L medianas y rangos, U Mann-Whitney Potasio Cuantitativa Continua mmol/L Valor anormal: < 3.5 o >5.1 mmol/L medianas y rangos, U Mann-Whitney Glucosa Cuantitativa Continua mg/dL Valor anormal: > 150 mg/dL en cualquier momento medianas y rangos, U Mann-Whitney Creatinina Cuantitativa Continua mg/dL Valor anormal: >1.25mg/dL medianas y rangos, U Mann-Whitney Amilasa Cuantitativa Continua U/L Valor anormal: tres veces por arriba de 330 U/L medianas y rangos, U Mann-Whitney Lipasa Cuantitativa Continua UI/ml Valor anormal: tres veces por arriba de 900 UI/ml medianas y rangos, U Mann-Whitney Calcio Cuantitativa Continua mg/dL Valor anormal: <8.4mg/dL medianas y rangos, U Mann-Whitney Albúmina Cuantitativa Continua g/dL Valor anormal: <3.5mg/dL medianas y rangos, U Mann-Whitney Urea Cuantitativa Continua mg/dL Valor anormal: >42.9mg/dL medianas y rangos, U Mann-Whitney Proteína C reactiva Cuantitativa Continua mg/L Valor anormal: >5mg/L medianas y rangos, U Mann-Whitney Velocidad de Sedimentación Globular Cuantitativa Continua mm/h Valor anormal : >10mm/hr medianas y rangos, U Mann-Whitney AST Cuantitativa Continua U/L Valor anormal: >59U/L medianas y rangos, U Mann-Whitney ALT Cuantitativa Continua U/L Valor anormal: >72U/L medianas y rangos, U Mann-Whitney 31 Radiológicas Variable Tipo Medición Unidad Estadística Derrame pleural Cualitativa Nominal 1. Sí 2. No Frecuencia, chi cuadrada Litiasis vesicular / lodo biliar Cualitativa Nominal 1. Sí 2. No Frecuencia, chi cuadrada Edema pancreático Cualitativa Nominal 1. Sí 2. No Frecuencia, chi cuadrada Colecciones pancreáticas Cualitativa Nominal 1. Sí 2. No Frecuencia, chi cuadrada Líquido libre Cualitativa Nominal 1. Sí 2. No Frecuencia, chi cuadrada Quiste de colédoco Cualitativa Nominal 1. Sí 2. No Frecuencia, chi cuadrada Clasificación de Balthazar Cualitativa Ordinal 1. A 2. B 3. C 4. D 5. E Frecuencia, chi cuadrada Necrosis pancreática Cualitativa Nominal 1. Sí 2. No Frecuencia, chi cuadrada DHL Cuantitativa Continua U/L Valor anormal: >618U/L medianas y rangos, U Mann-Whitney Fosfatasa alcalina Cuantitativa Continua U/L Valor anormal: >126U/L medianas y rangos, U Mann-Whitney GGT Cuantitativa Continua U/L Valor anormal: >43U/L medianas y rangos, U Mann-Whitney Bilirrubina directa Cuantitativa Continua mg/dL Valor anormal: >0.3mg/dL medianas y rangos, U Mann-Whitney Colesterol Cuantitativa Continua mg/dL Valor anormal: >200mg/dL medianas y rangos, U Mann-Whitney Triglicéridos Cuantitativa Continua mg/dL Valor anormal: >150mg/dL medianas y rangos, U Mann-Whitney 32 Desenlace Variable Tipo Medición Unidad Estadística Exacerbación del dolor abdominal Cualitativa Nominal 1. Sí 2. No Frecuencia, chi cuadrada Vómitos Cualitativa Nominal 1. Sí 2. No Frecuencia, chi cuadrada Íleo Cualitativa Nominal 1. Sí 2. No Frecuencia, chi cuadrada Distensión abdominal Cualitativa Nominal 1. Sí 2. No Frecuencia, chi cuadrada Estancia hospitalaria Cuantitativa Continua Días Mediana, rangos U de Mann Whitney Readmisión a 1 mes Cualitativa Nominal 1. Si 2. No Frecuencia, chi cuadrada Tamaño de muestra y método de muestreo Debido a que no existen estudios publicados en niños que comparen el ayuno versus una alimentación enteral que nos permitan realizar el cálculo de muestra, se realizó una prueba piloto, la cual hasta el momento continúa en proceso. Aleatorización El proceso de aleatorización se llevó a cabo una vez que el familiar firmó la hoja de consentimiento informado. El proceso se llevó a cabo a través de la generación de una tabla de números aleatorios de forma electrónica. Dicha tabla se tuvo a la vista para que al momento del ingreso todo paciente fuera clasificado en el grupo correspondiente. Cegamiento No se realizó de manera cegada, ya que fue evidente la manera en cómo se alimentó el paciente durante la evolución del cuadro clínico. 33 Desarrollo del estudio. SELECCIÓN DE PACIENTES 1. Todos los pacientes con diagnóstico con base en los criterios de Atlanta (Anexo 2) que cumplan los criterios de inclusión. 2. Se solicitó consentimiento informado (Anexo 3) para ingresar al protocolo a aquellos que reunieron los criterios de inclusión. 3. Se aleatorizaron los pacientes de acuerdo a una tabla de números aleatorios obtenidos por computadora. 4. Se distribuyó a los pacientes en dos grupos con las siguientes maniobras terapéuticas: a. Grupo de estudio: Grupo alimentación oral: recibieron dieta líquidos claros (Anexo 1) una vez que se resolvió el íleo y vómito, de haber adecuada tolerancia se progresó a dieta blanda baja en grasas al 100% de requerimientos según FAO/OMS. b. Grupo control: Grupo sonda nasoyeyunal: recibieron dieta elemental (Anexo 4), nutrición enteral por sonda naso-yeyunal en infusión continua, la cual se inició una vez remitido el íleo, con aporte inicial de 100% de los requerimientos recomendados para su edad según FAO-OMS (Anexo 5), incrementando un 15% cada 24 horas hasta haber alcanzado 130%; la concentración inicial fue del 17.5% hasta el 20% de acuerdo al protocolo de manejo utilizado en el servicio de gastroenterología. 5. Antropometría al ingreso / egreso del paciente (Peso, Talla, e índice de masa corporal). La evaluación del estado nutricio se realizó mediante los indicadores directos, peso, talla, e índice de masa corporal. a) Peso: Los niños fueron pesados con ropa interior o pañal limpio y seco. Los lactantes en una báscula electrónica marca SECA Modelo 336. Los 34 preescolares, escolares y adolescentes en una báscula de palanca con una lectura mínima de 100 gr, marca BAME Modelo DGN 5282. b) Longitud: La medición de la longitud se llevó a cabo con un infantómetro como el descrito por Fomon. Un observador detuvo la cabeza en contacto firme con la parte vertical del infantómetro; un segundo observador deflexionó las rodillas del niño y aplico los pies con los dedos hacia arriba contra el área móvil del infantómetro, haciendo un ángulo de 90 grados. c) Estatura: Los niños mayores de 36 meses de edad se midieron con una escala graduada adherida a la pared. Sin zapatos, el sujeto se colocó sobre el piso al lado de la escala graduada, con la punta de los pies levemente separados y los talones juntos. La cabeza, los hombros, las nalgas y los talones se mantuvieron en contacto con el plano vertical y se colocó una escuadra de madera en la cabeza para hacer la medición. d) Índice de masa corporal: se calculó al dividir el peso corporal expresado en kilogramos entre la estatura expresada en metros elevada al cuadrado. e) Puntuación Z: se obtuvo de la diferencia del valor observado de un indicador y el valor promedio estándar de un patrón de referencia sobre la desviación estándar de ese promedio. El patrón de referencia utilizado fue el de la OMS. (Programa WHO Anthro para menores de 5 años y WHO Anthro plus para los mayores de 5 años). 6. Se tomaron laboratorio a su ingreso: BHC, VSG, PCR, Amilasa, Lipasa, Albumina, Calcio, Na, K, DHL, TGO, TGP, GGT, Bilirrubinas, glucosa, urea, creatinina, colesterol y triglicéridos. Las muestras fueron tomadas por personal de enfermería en caso de tomarse por urgencias, o por personal del laboratorio cuando éstas se solicitaron a manera de ordinario. Se tomaron por punción venosa periférica, y cuando el paciente tuvo colocado un acceso 35 venoso central, se tomó del mismo. Se tomaron 1 tubo sin anticoagulante con 5ml, y un tubo con anticoagulante EDTA con 4 ml de sangre venosa. Se llevaron al laboratorio del hospital. 7. Se realizó TAC de abdomen con contraste oral e intravenoso, a las 48 hrs de iniciado el cuadro clínico, como medio de clasificación de severidad. 8. Un día previo a su egreso se solicitó Amilasa, Lipasa, Albumina y PCR. 9. Una vez remitidos los datos clínicos de íleo, y vómitos, se inició la medida terapéutica de acuerdo al grupo de estudio. 10. Posterior al inicio de la medida terapéutica se registraron signos clínicos asociados como la presencia de vómitos (3 o más), distensión abdominal (incremento de 3 cm o más del perímetro abdominal), diarrea (3 o más en 24), exacerbación del dolor y se clasificó según escala análoga de dolor. (Anexo 7) La medición del perímetro abdominal se realizó por encima de las crestas iliacas, y a nivel de la cicatriz umbilical, con una cinta métrica convencional. 36 Se midió previo al inicio de la intervención nutricia y 2 hrs posterior al inicio de la misma. 11. Monitorización de glicemia capilar en el grupo de alimentación oral, se realizó prepandial, postprandial (2 hrs posterior al inicio del alimento).12. Monitorización de glucosa en el paciente en el grupo alimentación enteral fue cada 8 hrs. Se efectuó la punción en la zona lateral del pulpejo del dedo elegido. La trayectoria de la punción debe ser rectilínea. El dispositivo de punción y el lateral del dedo formaron un ángulo de 90º. Se utilizó una aguja de insulina (13mm), que permitiera el flujo sanguíneo; para favorecer la formación de una gota de sangre, se pudo colocar la mano hacia abajo y presionar con su propio pulgar sobre la base del dedo puncionado. Cuando esta gota de sangre sea lo suficientemente grande para cubrir la zona reactiva de la tira, bien por aplicación o por capilaridad, se aplicará sobre la misma. Se utilizaron tiras BETACHEK. Tira reactiva para la determinación semicuantitativa de glucosa en sangre con límites que van de 20 a 800mg/dl. 13. Posterior a 24 hrs de mantener la dieta líquidos claros y de no haber encontrado contraindicación médica se progresó a dieta blanda baja en grasas (Anexo 6). Análisis estadístico. El análisis descriptivo para variables cualitativas categóricas se realizó mediante frecuencias y porcentajes. Las variables cuantitativas se analizaron mediante medianas y rangos independientemente de la distribución de los datos por el número de pacientes. Para el análisis inferencial se utilizó Chi2 para evaluar la diferencia de proporciones. Se utilizó estadística inferencial con pruebas no paramétricas U de Mann Whitney debido al número total de pacientes independientemente de la curva de distribución de los datos. 37 Para determinar la asociación de éxito y fracaso del tipo de intervención nutricia se calculó riesgo relativo. Para calcular el efecto de los eventos adversos de la intervención nutricia se calculó riesgo relativo. Se determinó el valor estadístico a través del valor de p < 0.05 Los datos se capturaron en una base de datos construida en Excel versión 2010 para Windows. Los datos recabados se convirtieron para su análisis al paquete estadístico: Statistical Package for Social Sciences para Windows (SPSS versión 20.0). Chicago Il. Para la elaboración de gráficos y la presentación de los resultados se empleó el programa Power Point. Aspectos éticos Este estudio se basó en la normativa internacional de investigación establecida en la declaración de Helsinki de 1975, debido a la naturaleza del estudio se ubica en la categoría III (riesgo mayor) y requirió consentimiento informado por parte de los familiares responsables del menor. Así como la revisión y autorización del Comité Local de investigación y Ética en salud de la UMAE Hospital de Pediatría, Centro Médico de Occidente del IMSS. Con número de registro R- 2014-1302-23, Una vez autorizado se realizó el estudio. Todo lo anterior de acuerdo con lo establecido en la Ley General de Salud en Materia de Investigación para la Salud (publicada en el Diario Oficial de la Federación el 07 de febrero de 1984) y se dio cumplimiento a los artículos 13 y 14, del Título Segundo y de acuerdo al artículo 17 de la misma ley. Se cuidó la confidencialidad de la información, la cual solo se utilizó con fines científicos y estadísticos. Se respetó el derecho de no participación de los padres del paciente con pancreatitis aguda leve sin que esto hubiera afectado la atención del mismo. En los casos en que se presentaron complicaciones asociadas a la intervención nutricia tales como: la presencia de vomito incoercible, dolor abdominal que no cede a la 38 administración de opioides, se prolongo el ayuno, y se valoró la necesidad de NPT, eliminandose del estudio. Recursos: Humanos. Tesista. Dr. José de Jesús Vargas Lares. Residente de 2 año de la Especialidad de Gastroenterología y Nutrición Pediátrica. Director de Tesis. Dra. Ma. Del Carmen Bojórquez Ramos Jefe de Departamento Gastroenterología. UMAE Hospital de Pediatría Centro Médico Nacional de Occidente. Investigador Asociado. Dr. Juan Carlos Barrera de León. Doctor en Ciencias Médicas, Pediatra Neonatólogo. Investigador asociado B IMSS. SNI Nivel I CONACYT. Jefe de División de Educación en Salud. UMAE Hospital de Pediatría Centro Médico Nacional de Occidente. Belisario Médicos gastroenterólogos pediatras adscritos al servicio, médico radiólogo, personal de enfermería, de laboratorio, técnicos de rayos X, manejadores de alimentos, licenciados en nutrición. Infraestructura. 14 camas censables en el servicio de gastroenterología y nutrición pediátrica. Equipo para procesar los estudios de laboratorio. Equipo de Ultrasonido. Tomógrafo Medicamentos, y insumos hospitalarios (sondas de alimentación, equipos de venoclisis), necesarios en el manejo de pacientes con pancreatitis aguda. 39 Financiamiento Los recursos necesarios para el diagnóstico, y manejo del paciente fueron proporcionados por la institución, ya que se siguieron protocolos de manejo establecidos en el hospital sin que esto haya generado un gasto especial. Los medicamentos e insumos utilizados fueron los que generalmente se utilizan en la atención de un paciente con pancreatitis aguda. Los recursos de papelería y tecnológicos para la captura y análisis de datos fueron a cargo del propio investigador. 40 RESULTADOS Pacientes. De marzo de 2014 a enero de 2015 se incluyeron 12 pacientes pediátricos con diagnóstico de pancreatitis aguda leve sustentado en datos clínicos, bioquímicos y de imagen. De acuerdo a los criterios de inclusión 8 dentro del grupo de alimentación oral y 4 dentro del grupo de alimentación enteral. La mediana de la edad fue de 13.5 años en el grupo oral mientras que en el enteral fue de 12.5. En ambos grupos el 75% de los pacientes eran del sexo femenino. No encontrando diferencia estadísticamente significativa entre los dos grupos (Tabla 6). Tabla 6. Características demográficas de los pacientes con pancreatitis aguda leve con alimentación oral y enteral. Alimentación oral n = 8 Alimentación enteral n = 4 Valor p n % n % Edad, mediana (rango) 13.5 (5-15) 12.5 (9-14) 0.368^ Preescolar 1 (12.5) 0 0 Escolar 1 (12.5) 2 (50) Adolescente 6 (75) 2 (50) Sexo Masculino 2 (25) 1 (25) Femenino 6 (75) 3 (75) ^ U de Mann Whitney El estado nutricio de los pacientes, con base en el índice de masa corporal y patrón de referencia de la Organización Mundial de la Salud (OMS), en tres cuartas partes de los pacientes del grupo oral estaba normal al ingreso, mientras que en el grupo enteral estaban con obesidad (Tabla 7 y Tabla 8). 41 Tabla 7. Peso, talla e índice de masa corporal al ingreso de los pacientes con pancreatitis aguda leve con alimentación oral y enteral. Alimentación oral n= 8 Alimentación enteral n = 4 Valor p Mediana Rango Mediana Rango Peso Kg 49.25 (17.5-62.5) 66.25 (47.5-91.5) 0.214^ Talla cm 156.5 (110-166) 157 (144-175) 0.808^ IMC percentil 46.75 (13.6-97.2) 99 (85-99) 0.016^ ^U de Mann Whitney IMC: Índice de masa corporal Tabla 8. Estado nutricio al ingreso de los pacientes con pancreatitis aguda leve con alimentación oral y enteral. Alimentación oral n= 8 Alimentación enteral n = 4 Valor p n % n % Estado Nutricio Normal 6 (75) 0 0 0.030~ Sobrepeso 1 (12.5) 1 (25) 0.575~ Obesidad 1 (12.5) 3 (75) 0.066~ ~Exacta de Fisher Manifestaciones clínicas. En todos los casos estudiados (n=12) a su ingreso, se identificó la presencia de dolor abdominal, catalogado según escala análoga de dolor en intensidad de 5 en el grupo oral mientras que en el enteral fue de 8. Seis casos (50%) presentaban íleo; 5 pacientes (41.6%) presentaron vómitos. En 3 pacientes (25%) se encontró ictericia y en 2 pacientes (16.6%) distensiónabdominal. La comparación de las frecuencias de presentación de estos síntomas entre el grupo de alimentación oral y enteral no mostró diferencia estadística. Los días de evolución del cuadro clínico, previo al ingreso al hospital en el grupo de alimentación oral fueron de 3, mientras que en el enteral 2.5 sin que se encontrara diferencia estadística entre grupos. (Tabla 9). 42 Tabla 9. Días de evolución y manifestaciones clínicas al ingreso de los pacientes con pancreatitis aguda. Alimentación oral n = 8 Alimentación enteral n = 4 Valor p n % n % Días de evolución, mediana (rango) 3 (1-6) 2.5 (1-4) 0.461^ Dolor 8 (100) 4 (100) 1.00~ Intensidad, mediana (rango) 5 (3-10) 8 (8-10) 0.154^ Vómitos 3 (37.5) 3 (75) 0.545~ Íleo 2 (25) 3 (75) 0.222~ Ictericia 3 (37.5) 0 0 0.491~ Distensión abdominal 0 0 2 (50) 0.091~ Irritabilidad 0 0 0 0 - Disnea 0 0 0 0 - Acantosis 0 0 0 0 - ^U de Mann Whitney ~Chi cuadrada En dos terceras partes de los pacientes tenían antecedente de Diabetes Mellitus en un familiar de primer grado; en 3 pacientes (25%) existía un familiar con litiasis vesicular (Tabla 10). En 8 pacientes (66%) se encontró una enfermedad asociada (litiasis vesicular, colon irritable, obesidad, quiste de colédoco, infección de vías respiratoria superior); en 4 pacientes se encontró proceso infeccioso (gastroenteritis, endoftalmitis, infección de vías respiratoria alta) (Tabla 11). Tabla 10. Antecedentes heredofamiliares de los pacientes con pancreatitis aguda leve. Alimentación oral n = 8 Alimentación enteral n = 4 Valor p n % n % Diabetes Mellitus 6 (75) 2 (50) 0.547~ Litiasis vesicular 2 (25) 1 (25) 1.00~ Dislipidemia 1 (12.5) 0 0 1.00~ Pancreatitis 0 0 0 0 - ~Chi cuadrada 43 Tabla 11. Antecedentes personales relevantes de los pacientes con pancreatitis aguda leve. Alimentación oral n = 8 Alimentación enteral n = 4 Valor p n % n % Enfermedad asociada 4 (50) 4 (100) 0.208~ Proceso infeccioso 4 (50) 0 0 0.208~ Ingesta de medicamentos 0 0 0 0 - Traumatismo 0 0 0 0 - ~Chi cuadrada Etiología. Encontramos como factor etiológico asociado en primer lugar con frecuencia de 6 casos (50%) la presencia de patología biliar, en segundo lugar se catalogó como idiopática (50%), (Tabla 12). Tabla 12. Etiología de la pancreatitis aguda leve Alimentación oral n = 8 Alimentación enteral n = 4 Valor p n % n % Biliar 3 (37.5) 3 (75) 0.545~ Idiopática 5 (62.5) 1 (25) 0.545~ Medicamentosa 0 0 0 0 - Multisistémica 0 0 0 0 - Traumática 0 0 0 0 - Infecciosa 0 0 0 0 - Metabólica 0 0 0 0 - Hereditaria 0 0 0 0 - ~Chi cuadrada Estudios de imagen. En todos los casos estudiados (n=12) se realizó tomografía computada de abdomen con contraste oral e intravenoso a partir de las 48 horas de iniciada la sintomatología, guiados por la clasificación de Balthazar, el estadío fue Balthazar B en 58% de los casos, y otro 42% de los casos se distribuyeron entre Balthazar A, y C (Tabla 13). 44 Tabla 13. Estadificación tomográfica de la pancreatitis de acuerdo a la clasificación de Balthazar. Alimentación oral n = 8 Alimentación enteral n = 4 Valor p n % n % A 2 (25) 0 0 0.017~ B 6 (75) 1 (25) 0.017~ C 0 0 3 (75) 0.017~ ~Chi cuadrada En cuanto a los hallazgos en ultrasonografía, se reportó con mayor frecuencia litiasis vesicular en 41.6% de los casos seguido por edema pancreático en 25% (Tabla 14). Tabla 14. Hallazgos ultrasonográficos en pacientes con pancreatitis aguda leve. Alimentación oral n = 8 Alimentación enteral n = 4 Valor p n % n % Litiasis vesicular 2 (25) 3 (75) 0.22~ Edema pancreático 2 (25) 1 (25) 1.00~ Derrame pleural 0 0 1 (25) 0.33~ Líquido libre 0 0 1 (25) 0.33~ Quiste de colédoco 1 (25) 0 0 1.00~ Colecciones 0 0 0 0 - Pseudoquiste 0 0 0 0 - ~Chi cuadrada Dentro de los datos hematológicos al ingreso en los pacientes con pancreatitis aguda leve, llama la atención que la leucocitosis fue mayor en el grupo de alimentación enteral, no encontrando diferencia estadísticamente significativa en los otros parámetros de la biometría hemática. (Tabla 15) 45 Tabla 15. Datos hematológicos a su ingreso en pacientes con pancreatitis aguda leve. Alimentación oral n = 8 Alimentación enteral n = 4 Valor p Mediana Rango Mediana Rango Hemoglobina g/dl 12.95 (12.4-15.5) 14.5 (11.5-14.8) 0.57^ Hematocrito % 36.7 (35.7-42.7) 41.05 (34.7-42.9) 0.57^ Plaquetas miles/ul 284,500 (120,000-345,000) 236,500 (178,000- 355,000) 1.0^ Leucocitos miles/ul 8740 (5490-14200) 18965 (13440-21280) 0.008^ ^U de Mann Whitney Dentro de los datos bioquímicos al ingreso, la presencia de transaminasemia y elevación de bilirrubina directa se encontró en el 83% de los pacientes con etiología biliar. Solo se encontró diferencia estadísticamente significativa en los niveles de glucosa y DHL entre ambos grupos, lo que nos muestra hasta cierto punto la homogeneidad de los grupos. (Tabla 16) Tabla 16. Datos bioquímicos a su ingreso en pacientes con pancreatitis aguda leve. Alimentación oral n = 8 Alimentación enteral n = 4 Valor p^ Mediana Rango Mediana Rango Sodio mmol/L 139 (134-141) 135 (127-141) 0.283 Potasio mmol/L 3.9 (3.3-5.1) 3.8 (3.3-4.7) 0.57 Calcio mg/dL 9.3 (8.4-10.1) 9.2 (7.7-10.2) 0.933 Glucosa mg/dL 81 (68-106) 130 (105-308) 0.008 Creatinina mg/dL 0.5 (0.4-0.7) 0.5 (0.4-0.6) 0.683 Urea mg/dL 19 (8-26) 15 (6-33) 0.683 Amilasa U/L 461 (177-1170) 933 (437-1200) 0.412 Lipasa UI/ml 3518 (534-6270) 7094 (2433-10000) 0.073 Albúmina g/dL 3.6 (2.5-4.1) 3.3 (2.6-4.8) 0.933 AST U/L 29 (16-328) 88 (38-150) 0.57 ALT U/L 49 (13-420) 135 (26-241) 0.808 DHL U/L 415 (379-569) 613.5 (488-842) 0.024 BD mg/dL 0.6 (0-1.7) .75 (.4-1.09) 0.808 GGT U/L 37 (13-533) 128.5 (30-281) 0.368 FA U/L 208 (61-375) 131 (82-254) 0.548 Colesterol mg/dL 134 (89-158) 119 (76-148) 0.57 Triglicéridos mg/dL 144 (50-230) 98 (59-112) 0.154 ^U de Mann Whitney AST: Aspartato amino transferasa ALT Alanino amino transferasa DHL: Deshidrogenasa láctica BD: Bilirrubina Directa GGT: Gama glutamil transpeptidasa FA: Fosfatasa alcalina 46 En lo referente a los reactantes de fase aguda, velocidad de sedimentación globular y proteína C reactiva, al ingreso no se encontraron diferencias estadísticamente significativas entre los dos grupos. (Tabla 17) Tabla 17. Reactantes de inflamación a su ingreso en pacientes con pancreatitis aguda. Alimentación oral n = 8 Alimentación enteral n = 4 Valor p Mediana Rango Mediana Rango VSG 24 (10-47) 20 (7-42) 0.571^ PCR 5.9 (3.8-46.8) 101.6 (6.6-244) 0.19 ^ ^U de Mann Whitney VSG: Velocidad de sedimentación globular PCR: Proteína C Reactiva A todos los pacientes incluidos en el estudio se les inicio la intervención nutricia de manera temprana, es decir en las primeras 72 hrs de su ingreso. Encontrando diferencia estadísticamente significativa entre grupos, siendo menor el tiempo en los del grupo de alimentación oral (Tabla 18 y Tabla 19). Tabla 18. Tiempo de inicio de la intervención nutricia en los pacientes con pancreatitis aguda leve. Alimentación oral n = 8 Alimentación enteral n = 4 Valor p Mediana Rango Mediana Rango Días 1 1-2 3 2-3 0.016 ^U de Mann Whitney Tabla 19. Distribución de pacientes con pancreatitis aguda de acuerdo al tiempo de inicio de la intervención nutricia. Alimentación oral n = 8 Alimentación enteral n = 4 Valor p n % n % Día 1 4 (50) 0 0 0.141~ Día 2 4 (50) 1 (25) 0.424~ Día 3 0 0 3 (75) 0.413~ ~Chi cuadrada 47 Dentro de las co intervenciones realizadas durante el desarrollodel estudio en el 100% de los pacientes se administró omeprazol; en 11 pacientes (91.6%) el aporte de líquidos fue de 2500 ml/M2SC y se administro ketorolaco como analgésico; 6 pacientes (50%) ameritaron la administración de cargas a 20ml/kg con solución salina 0.9%; solo 3 pacientes (25%) en el grupo de alimentación enteral se les prescribió doble esquema antibiótico (Cefotaxima/amikacina o Cefotaxima/ampicilina) sin haber encontrado aislamientos en hemocultivo periférico o urocultivo (Tabla 20). Tabla 20. Co intervenciones realizadas durante el estudio en los pacientes con pancreatitis aguda leve. Alimentación oral n = 8 Alimentación enteral n = 4 Valor p n % n % Omeprazol 8 (100) 4 (100) - Líquidos 2500M2SC 7 (87.5) 4 (100) 1.00~ Ketorolaco 7 (87.5) 4 (100) 1.00~ Carga 20ml/kg 3 (37.5) 3 (75) 0.545~ Gluconato de Calcio 0 0 1 (25) 0.33~ Buprenorfina 0 0 1 (25) 0.33~ Antibiótico 0 0 3 (75) 0.018~ Insulina 0 0 1 (25) 0.33~ Ondansetron 0 0 0 0 - Metoclopramida 0 0 0 0 - NPT 0 0 0 0 - ~ Chi cuadrada NPT: Nutrición Parenteral Total En lo referente al estado nutricio con base en el índice de masa corporal de los pacientes, no se encontraron diferencias entre el documentado a su ingreso con el del egreso; 6 pacientes (50%) estaban con IMC normal para su edad, 2 pacientes (16.6%) se encontraron con sobrepeso y 4 pacientes (33.4%) tenían obesidad (Tabla 21, Tabla 22, Tabla 23, Tabla 24). 48 Tabla 21. Peso, talla e índice de masa corporal al egreso de los pacientes con pancreatitis aguda. Alimentación oral n = 8 Alimentación enteral n = 4 Valor p Mediana Rango Mediana Rango Peso Kg 49 (18.5-62.5) 61.1 (45-87) 0.283^ Talla cm 156.5 (110-166) 157 (144-175) 0.808^ IMC, percentil 51.5 (13.6-97) 97.7 (85-99.2) 0.016^ ^U de Mann Whitney Tabla 22. Estado nutricio al egreso de los pacientes con pancreatitis aguda. Alimentación oral n = 8 Alimentación enteral n = 4 Valor p Estado Nutricio n % n % Normal 6 (75) 0 0 0.030 Sobrepeso 1 (12.5) 1 (25) 0.575 Obesidad 1 (12.5) 3 (75) 0.066 ~Chi cuadrada Tabla 23. Comparación del estado nutricio al ingreso y egreso de los pacientes con alimentación oral. Prueba de Wilcoxon IMC: Índice de masa corporal Alimentación Oral Ingreso Alimentación Oral Egreso Valor p Mediana Rango Mediana Rango Peso Kg 49.25 17.5-62.5 49 18.5-62.5 1.00 Talla cm 156 110-166 156 110-166 1.00 IMC percentil 46.75 13.6-97.2 51.5 13.6-97 1.00 49 Tabla 24. Comparación del estado nutricio al ingreso y egreso de los pacientes con alimentación enteral. Alimentación Enteral Ingreso Alimentación Enteral Egreso Valor p Mediana Rango Mediana Rango Peso Kg 66.25 47.5-91.5 61.1 45-87 0.125 Talla cm 157 144-175 157 144-175 1.00 IMC percentil 99 89-99 97.7 85-99.2 0.125 Prueba de Wilcoxon IMC: Índice de masa corporal De los datos bioquímicos al egreso solo se encontró diferencia estadísticamente significativa en la PCR, encontrando una mediana de 1.3 mg/L en el grupo oral contra 14.5 mg/L en el grupo enteral (Tabla 25). Sin embargo al comparar los datos bioquímicos por grupo de intervención nutricia no se encontraron diferencias estadísticamente significativas al ingreso y egreso. (Tabla 26 Tabla 27) Tabla 25. Condición bioquímica al egreso de los pacientes con pancreatitis. Alimentación oral n = 8 Alimentación enteral n = 4 Valor p Mediana Rango Mediana Rango PCR mg/L 1.3 (0.15-18.1) 14.5 (5.4-36) 0.024^ Amilasa U/L 187.5 (89-523) 84.5 (66-141) 0.073^ Lipasa UI/ml 1209 (326-4162) 514 (296-832) 0.073^ Albumina g/dL 3.8 (3.6-4.8) 4.5 (3.3-4.9) 0.368^ ^ U de Mann Whitney 50 Tabla 26. Comparación de datos bioquímicos al ingreso y egreso de los pacientes con pancreatitis aguda que se manejaron con alimentación oral. PCR: Proteína C Reactiva Prueba de Wilcoxon Tabla 27. Comparación de datos bioquímicos al ingreso y egreso de los pacientes con pancreatitis aguda que se manejaron con alimentación enteral. Alimentación Enteral Ingreso Alimentación Enteral Egreso Valor p Mediana Rango Mediana Rango PCR mg/L 101.6 6.6-244 14.5 5.4-36 1.00 Amilasa U/L 933 437-1200 84.5 66-141 0.125 Lipasa UI/ml 7094 2433-10000 514 296-832 0.125 Albumina g/dL 3.3 2.6-4.8 4.5 3.3-4.90 0.125 PCR: Proteína C Reactiva Prueba de Wilcoxon Dentro de la evaluación de la seguridad de las intervenciones nutricionales encontramos que todos los pacientes del grupo nutrición enteral presentaron vómitos, uno de ellos fue con el 100% de los requerimientos nutricionales, otro con el 115% y dos con el 130%. Así mismo en todos los pacientes de este mismo grupo se presentó hiperglucemia al 115% de los requerimientos. Del total de los pacientes, en una tercera parte hubo exacerbación del dolor, del grupo de alimentación oral uno de ellos con dieta líquida y dos con dieta blanda y del grupo de alimentación enteral, uno durante la infusión nasoyeyunal. La intensidad de la Alimentación Oral Ingreso Alimentación Oral Egreso Valor p Mediana Rango Mediana Rango PCR mg/L 5.9 3.8-46.8 1.3 0.15-18.1 0.125 Amilasa U/L 461 177-1170 187.5 89-523) 0.453 Lipasa UI/ml 3518 534-6270 1209 326-4162 0.727 Albumina g/dL 3.6 2.5-4.1 3.8 3.6-4.8 1.00 51 exacerbación del dolor cedió a la administración de analgésico, pudiéndose continuar con la intervención nutricia (Tabla 28). Tabla 28. Variables clínicas de desenlace en los pacientes con pancreatitis aguda leve. Alimentación oral n = 8 Alimentación enteral n = 4 Valor p n % n % Vómitos 0 0 4 (100) 0.002~ Hiperglucemia 0 0 4 (100) 0.002~ Exacerbación del dolor 3 (37.5) 1 (25) 0.593~ Recurrencia de Íleo 0 0 0 0 - Distensión abdominal 0 0 0 0 - ~Chi cuadrada La estancia hospitalaria tuvo una mediana de 4 días en el grupo oral contra 10 días en el grupo enteral, siendo esta estadísticamente significativa (Tabla 29). Tabla 29. Estancia hospitalaria en los pacientes con pancreatitis aguda leve. Alimentación oral n = 8 Alimentación enteral n = 4 Valor p Mediana Rango Mediana Rango Estancia hospitalaria, días 4 (2-5) 10 (7-17) 0.004^ ^U de Mann Whitney En lo referente a la readmisión a 30 días del egreso, solo se presento en un paciente (8.3%) y correspondió al grupo de alimentación oral, cabe señalar que la etiología de este paciente fue biliar, y que no se le realizó colecistectomía previo a su egreso (Tabla 30). 52 Tabla 30. Readmisión a 1 mes en pacientes con pancreatitis aguda leve. Alimentación oral n = 8 Alimentación enteral n = 4 Valor p n % n % Readmisión 1 (12.5) 0 0 1.00~ ~Chi cuadrada Para analizar el impacto clínico de las variables dependientes únicamente fue posible realizarlo con la exacerbación del dolor, en la Tabla 31 se obtiene el riesgo relativo resultando en 1.2. Tabla 31. Riesgo relativo de la exacerbación del dolor con la alimentación oral comparada con la alimentación enteral. RR IC 95% Riesgo Relativo 1.20 0.55-2.62 Prevalencia en alimentación oral 0.38 0.10- 0.65 Prevalencia en alimentación enteral 0.25 0.01-0.50 Reducción riesgo relativo -0.020 -1.62-0.45 Reducción absoluta de riesgo -0.13 -0.67-0.42 53 DISCUSION El tratamiento de la pancreatitis aguda es fundamentalmente de soporte, ya que no hay un tratamiento efectivo para prevenir la activación de la cascada inflamatoria y proteolítica (41). El objetivo principal consiste en limitar la secreción exocrina del páncreas, mantener un estado hídrico óptimo y detectar oportunamente las
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