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UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO FACULTAD DE MEDICINA DIVISIÓN DE ESTUDIOS DE POSGRADO E INVESTIGACIÓN HOSPITAL GENERAL DEL ESTADO DE SONORA DR ERNESTO RAMOS BOURS T E S I S “PREVALENCIA DE SOMNOLENCIA EXCESIVA DIURNA EN PACIENTES DE LA CONSULTA EXTERNA DE NEUMOLOGIA DEL HOSPITAL GENERAL DEL ESTADO: ERNESTO RAMOS BOURS” QUE PARA OBTENER LA ESPECIALIDAD DE MEDICINA INTERNA PRESENTA: Juan Valentín López Avilés TUTOR PRINCIPAL DE TESIS: Dr. Fausto Miguel Pérez Méndez Hospital General del Estado: Dr Ernesto Ramos Bours CODIRECTOR DE TESIS: M. en C. Nohelia G. Pacheco Hoyos Hospital General del Estado: Dr Ernesto Ramos Bours COMITÉ TUTOR: Dr. Moisés Acuña Kaldman Hospital General del Estado: Dr Ernesto Ramos Bours Hermosillo Sonora; julio 2017 UNAM – Dirección General de Bibliotecas Tesis Digitales Restricciones de uso DERECHOS RESERVADOS © PROHIBIDA SU REPRODUCCIÓN TOTAL O PARCIAL Todo el material contenido en esta tesis esta protegido por la Ley Federal del Derecho de Autor (LFDA) de los Estados Unidos Mexicanos (México). El uso de imágenes, fragmentos de videos, y demás material que sea objeto de protección de los derechos de autor, será exclusivamente para fines educativos e informativos y deberá citar la fuente donde la obtuvo mencionando el autor o autores. Cualquier uso distinto como el lucro, reproducción, edición o modificación, será perseguido y sancionado por el respectivo titular de los Derechos de Autor. 1 FIRMAS DE AUTORIZACIÓN DEL COMITÉ DIRECTIVO DE TESIS Los presentes hemos revisado el trabajo del médico residente de cuarto año Juan Valentín López Avilés y lo encuentran adecuado para continuar con su proceso de titulación paca obtener su grado de médico especialista en Medicina [nterna. Fausto Miguel Pérez Méndez Tutor Principal Hospital General del Estado: Dr. Ernesto Ramos Bours Nohelia G. Pacheco Hoyos Cod irector de Tesis Departamento de Investigaciones Científicas y Tecnológicas, Universidad de Sonora Hospital General del Estado: Dr. Ernesto Ramos Bours 1 és Acuña Kaldman Miero o del comité rutaral Hospital General del 'Estado: Dr. Ernesto Ramos Bours FIRMAS DE AUTORIZACIÓN DEL COMITÉ DIRECTIVO DE TESIS Los presentes hemos revisado el trabajo del médico residente de cuarto año Juan Valentin López Avilés y lo encuentran adecuado para continuar con su proceso de titulación para obtener su grado de médico especialista en Medicina Interna. Fausto Miguel Pércz Méndcz Tutor Principal Hospital General del Estado: Dr. Ernesto Ramos Bours Nohel;. G. Pacheco Hoyos Codirector de Tesis Departamento de Investigaciones Cientilicas y Tecnológicas. Universidad de Sonora Hospital General del Estado: Dr. Ernesto Ramos Bours I és Acuña Kaldmao Miem o del comité nltoral Hospital General del 'Estado: Dr. Ernesto Ramos Bours 2 "-Á Hospital General I ~ ~ del E"ado • Or lP lt" ,IU P"IHUS BOHfI. ENSEÑANZA E INVESTIGACIÓN Hospital General del Estado "Dr. Ernesto Ramos Bours" División de Enseñanza e Investigación No. de oficio: SSS/HGE/EM/246/17 Hermosillo, Sonora a 11 de julio de 2017 2017 'Can/anoria de /0 constitución. Pacto Sociel Supremo de los Mexicanos" LIBERACiÓN DE TESIS la División de Enseñanza e Investigación del Hospital General del Estado de Sonora hace constar que realizó la revisión del trabajo de tesis del médico residente: JUAN VALENTíN LÓPEZ AVILÉS; cuyo titulo es: "PREVALENCIA DE SOMNOLENCIA EXCESIVA DIURNA EN PACIENTES DE LA CONSULTA EXTERNA DE NEUMOLOGíA DEL HOSPITAL GENERAL DEL ESTADO: ERNESTO RAMOS BOURS." Con base en los lineamientos metodológicos establecidos por el Hospital General del Estado "Dr. Ernesto Ramos Bours," se considera que la tesis reúne los requisitos necesarios para un trabajo de investigación cientifica y cumple con los requerimientos solicitados por la Universidad Nacional Autónoma de México. Por lo tanto, la División de Enseñanza e Investigación acepta el trabajo de tesis para ser sustentado en el examen de grado de especialidad médica; reconociendo que el contenido e información presentados en dicho documento son responsabilidad del autor de la tesis. ATENTAMENTE ENSEÑANZA E INVESTIGA 6N HOSPITAL GENERAL DEL ESTADO C.c.p. Archivo NGPH A-A Hospítal General VAV del Estado V [)(. ErneslO Ramos Baurs 2 M en C. NOHElIA G. PACHECO COORDINADOR DE INVESTIGACl6N CIENTíFICA y MÉTODOS DE ANÁLISIS DIVISl6N DE ENSEÑANZA E INVESTlGACl6N Unidos logramos más Blvd. Luis Enci nas Johnson S/N Colonia Centro Hermosillo. Sonora. Tels. (66212592501, 2592505 www.saludsonora.gob.mx Hospital General I del E.lilado ()r [II\I ... h1 P"IUU!I BoUl .. ENSEÑANZA E INVESTIGACiÓN Hospital General del Estado "Dr. Ernesto Ramos Bours" División de Enseñanza e Investigación No. de oficio: SSS/HGE/EM/246/17 Hermosillo, Sonora a 11 de julio de 2017 2017 'Centenerio de /8 constitución. Pacto Sociel Supremo de los Mexicanos" LIBERACiÓN DE TESIS La División de Enseñanza e Investigación del Hospital General del Estado de Sonora hace constar que realizó la revisión del trabajo de tesis del médico residente: JUAN VALENTíN LÓPEZ AVILÉS; cuyo titulo es: "PREVALENCIA DE SOMNOLENCIA EXCESIVA DIURNA EN PACIENTES DE LA CONSULTA EXTERNA DE NEUMOLOGíA DEL HOSPITAL GENERAL DEL ESTADO: ERNESTO RAMOS BOURS." Con base en los lineamientos metodológicos establecidos por el Hospital General del Estado ' Dr. Ernesto Ramos Bours," se considera que la tesis reúne los requisitos necesarios para un trabajo de investigación cientifica y cumple con los requerimientos solicitados por la Universidad Nacional Autónoma de México. Por lo tanto, la División de Enseñanza e Investigación acepta el trabajo de tesis para ser sustentado en el examen de grado de especialidad médica; reconociendo que el contenido e información presentados en dicho documento son responsabilidad del autor de la tesis. ATENTAMENTE ENSEÑANZA E INVESTIGA 6N HOSPITAL GENERAL OEL ESTADO C.c.p. Archivo NGPH A-A Hospital General VA" del Estado V Dr. Erneslo Ramos Baurs 2 M en C. NOHELlA G. PACHECO COORDINADOR DE INVESTIGACl6N CIENTiFICA y MÉTODOS DE ANALISIS DIVISl6N DE ENSEÑANZA E INVESTlGACl6N Unidos logramos más Blvd. Luis Encinas Johnson S/N Colonia Centro Hermosillo. Sonora. Tels. (662) 2592501, 2592505 www.saludsonora.gob.mx 3 AGRADECIMIENTOS A la UNAM, la máxima casa de estudios, por adoptarnos durante todo este proceso de formación académica y profesional. Por brindarnos las herramientas de aprendizaje necesarias en todo momento. Al que orgullosamente puedo llamar: mi hospital, el Hospital General del Estado de Sonora, mi segunda casa, mi segunda familia en ésta travesía, en ésta aventura de cuatro años a la que llamamos residencia médica. Siempre con el cobijo y la fraternidad de todas y cada una de las personas que ahí trabajan, con las que tuve la fortuna de convivir, aprender, sufrir y disfrutar de cada momento. A los miembros del comité de tesis, a la M. en C. Nohelia Pacheco, por mostrar interés en éste proyecto desde el principio, por su apoyo en todo momento, por formar parte de esta tripulación durante éstos meses en los que nos hizo fácil lo difícil, nos hizo ver que no hay imposibles y que si fijamos la meta, con trabajo se puede lograr. Al Dr. Fausto Pérez, por su entusiasmo, su disposición para con éste trabajo, por sus consejos, sus pláticas que en todo momento me sirvieron como motivación y sin darse cuenta, se fue convirtiendo en un íntegro ejemplo a seguir. Al Dr. Moisés Acuña, por ser el creador de ésta idea, una persona a la que verdaderamente se le puede llamar maestro, por siempre tener las palabras óptimas, por no dejar de enseñar en cada oportunidad, por esa disposición que lo caracteriza, por ser, un verdadero ejemplode vida, como persona, como médico. Un reconocimiento a la médico interno de pregrado Esmeralda Rivas, por su gran apoyo y colaboración para con éste proyecto, sin duda, con todo un futuro por delante. 4 AGRADECIMIENTOS A TÍTULO PERSONAL A toda mi familia, por ser siempre el pilar, los cimientos sobre los que me he edificado. A mis padres por estar siempre al pendiente de mí, por los sacrificios, por entregarse por completo para forjar profesionistas, por enseñarme valores, por la perseverancia y el amor incondicional, a ustedes les debo lo que soy. A mis hermanos, Helena e Isaac, por estar siempre ahí, por el apoyo, por sufrir y disfrutar conmigo cada uno de mis logros. Aidé, físicamente no estás para ver culminada ésta meta, pero sé que has estado conmigo, desde el día en que Dios te llamó a su lado y tú también eres cómplice y gran responsable de lo que soy ahora. Kyra y Boronita, por haberme entregado los más leales, sinceros y amorosos años, y aunque no están físicamente ya, las llevo conmigo a todos lados. Todas las personas llegan a nuestra vida con una finalidad: Dave, por ser un gran apoyo, por los consejos, por estar siempre conmigo en los buenos momentos, y ayudarme a salir a flote en los malos, por todas y cada una de las aventuras que hemos vivido y las que nos faltan por vivir, por las experiencias que me han fortalecido enormemente como persona, por todo lo que me has dejado aprender de ti, como profesionista, como persona, te admiro mucho, gracias por todo. A mis maestros, por enseñarme no solo aspectos académicos, sino cuestiones sobre la vida, por su paciencia, perseverancia, por su dedicación, por ese amor por transmitir sus conocimientos, de cada uno de ellos, se fue forjando el profesionista que egresa. A Carolina, Hugo, Eduardo, Gabriel, Ignacio y Pepi, mis hermanos de generación, mejores compañeros no pude haber tenido, gracias por dejarme conocerlos y aprender de ustedes. Al resto de residentes de Medicina Interna. 5 A los pacientes que me brindaron la fortuna de atenderlos, por la confianza ciega que depositaron en mí, por haberme permitido aprender de ellos. Amigos, personal del hospital general y en general a todos los involucrados en mi formación, de todos me llevo una enseñanza, sin darme cuenta se fueron convirtiendo en parte de mi vida. Sin todos ellos, indudablemente, ésta etapa de mi vida no hubiera sido la misma. 6 DEDICATORIA Aidé, sigues siendo una estrella guía, un ángel en el cielo que mantengo conmigo día a día. A mis padres y mis hermanos, mi fuerza y motor. 7 “Nuestra recompensa se encuentra en el esfuerzo y no en el resultado; un esfuerzo total es una victoria completa” -Mahatma Gandhi. 8 ÍNDICE RESUMEN 11 1. INTRODUCCIÓN 14 2. PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA 16 3. JUSTIFICACIÓN 17 4. OBJETIVOS 19 5. MARCO TEÓRICO: 5.1 Antecedentes históricos 20 5.2 Neurobiología del sueño 21 5.3 Trastornos del sueño 26 5.4 Hipersomnia 31 5.5 Escalas de medición de la somnolencia 35 6. MATERIALES Y MÉTODO 6.1 Diseño del estudio 38 6.2 Población 38 6.3 Periodo del estudio 38 6.4 Criterios de muestreo 38 6.5 Criterios de selección 38 6.6 Categorización de las variables 39 6.7 Descripción metodológica del estudio 42 6.8 Análisis estadístico de datos 43 6.9 Recursos empleados 43 6.10 Aspectos éticos de la investigación 44 7. RESULTADOS, DISCUSIÓN, CONCLUSIONES 7.1 Resultados 45 7.2 Discusión 62 7.3 Conclusiones 65 8. LITERATURA CITADA 66 9. ANEXOS Anexo 1. Cuestionario de somnolencia diurna de Epworth 71 Anexo 2. Índice de calidad del sueño de Pittsburgh 72 Anexo 3. Escala de somnolencia de Stanford (ESS) 76 Anexo 4. Oficio de aprobación del Comité de Investigación del Hospital General 77 9 INDICE DE TABLAS Tabla 1. 23 Neuroquímica de los estados de alerta y sueño, tomado de Carillo et al., 2013. Tabla 2. 29 Principales funciones cognitivas afectadas con la pérdida del sueño, tomado de Carillo, et al., 2013. Tabla 3. 34 Prevalencia de Somnolencia Excesiva Diurna en diversas poblaciones, tomado de López- Meza, et al., 2006. Tabla 4. 41 Descripción de las variables analizadas. Tabla 5. 45 Características clínicas y metabólicas de los pacientes incluidos en el estudio. Tabla 6. 46 Características clínicas de los pacientes en base al grado de Somnolencia Diurna. Tabla 7. 47 Grados de somnolencia diurna en la población estudiada. Tabla 8. 47 Relación entre el grado de somnolencia diurna con el rango de edad de los pacientes. Tabla 9. 49 Relación entre el grado de somnolencia diurna con el sexo de los pacientes en estudio. Tabla 10. 50 Relación entre el grado de somnolencia diurna con hipertensión arterial (HAS). Tabla 11. 51 Relación entre el grado de somnolencia diurna con diabetes mellitus (DM). Tabla 12. 51 Relación entre el grado de somnolencia diurna con dislipidemia. Tabla 13. 52 Prueba de Chi Cuadrado de Pearson para evaluar la independencia de la Somnolencia Diurna con los grupos etarios en estudio. Tabla 14. 52 Prueba de Chi Cuadrado de Pearson para evaluar la independencia de la Somnolencia Diurna con el sexo de los pacientes en estudio. 10 Tabla 15. 53 Prueba de Chi Cuadrado de Pearson para evaluar la independencia en la variable hipertensión arterial en relación al grupo de estudio. Tabla 16. 53 Prueba de Chi Cuadrado de Pearson para evaluar la independencia en la variable diabetes mellitus en relación al grupo de estudio. Tabla 17. 53 Prueba de Chi Cuadrado de Pearson para evaluar la independencia en la variable dislipidemia en relación al grupo de estudio. Tabla 18. 54 Medida simétrica Tau-b de Kendall para los grupos etarios en estudio. Tabla 19. 54 Medida simétrica Tau-b de Kendall para el sexo de los pacientes en estudio Tabla 20. 55 Medida simétrica Tau-b de Kendall para hipertensión Arterial en los pacientes en estudio. Tabla 21. 55 Medida simétrica Tau-b de Kendall para diabetes mellitus en los pacientes en estudio. Tabla 22. 55 Medida simétrica Tau-b de Kendall para dislipidemia en los pacientes en estudio. Tabla 23. 57 Medidas direccionales para valorar la asociación de la Somnolencia Diurna con los grupos etarios. Tabla 24. 58 Medidas direccionales para valorar la asociación de la Somnolencia Diurna con el sexo de los pacientes en estudio. Tabla 25. 59 Medidas direccionales para valorar la asociación de la Somnolencia Diurna con hipertensión arterial en los pacientes en estudio. Tabla 26. 60 Medidas direccionales para valorar la asociación de la Somnolencia Diurna con diabetes mellitus en los pacientes en estudio. 11 Tabla 27. 61 Medidas direccionales para valorar la asociación de la Somnolencia Diurna con dislipidemia en los pacientes en estudio. 12 INDICE DE FIGURAS Figura 1. 22 Marco Conceptual Básico: Circuitos talamocorticales con modulación intrínseca y extrínseca, modificado de Moszczynski et al., 2012. Figura 2. 25 Las etapas o fases del sueño No MOR y MOR y su duración, tomado de Carillo et al., 2013. Figura 3. 33 Distribución por género de puntajes de la Escala de Somnolencia de Epworth, modificado del Sleep Heart Health StudyBaldwin, et al., (2004). Figura 4. 47 Grados de somnolencia diurna en la población estudiada. Figura 5. 48 Relación entre el grado de somnolencia diurna con el rango de edad de los pacientes en estudio. Figura 6. 48 Relación entre el grado de somnolencia diurna con el sexo de los pacientes en estudio. Figura 7. 50 Relación entre el grado de somnolencia diurna con componentes del síndrome metabólico (hipertensión arterial sistémica, diabetes mellitus y dislipidemia). 13 RESUMEN El sueño es un proceso fisiológico inherente al ser humano, necesario para mantener la salud tanto física como emocional, he ahí, la importancia de conocer los síntomas y trastornos relacionados al dormir. Los trastornos del sueño, son todo un grupo de patologías diversas, entre las cuales, la somnolencia juega un papel común en algunas de ellas, e incluso, ser el detonante de patologías más severas. El otro aspecto importante, es la relación que guardan las enfermedades del sueño, con el riesgo cardiovascular y el síndrome metabólico. Todo esto, hace de la patología del sueño, un verdadero y masivo problema de salud pública, del que aún falta mucho por conocer. Objetivo: Conocer la prevalencia de somnolencia excesiva diurna en los pacientes que acuden a consulta de neumología del Hospital General del Estado de Sonora. Metodología: Estudio clínico, descriptivo, transversal, prospectivo. Se aplicaron cuestionarios de somnolencia de Epworth a todos los pacientes que cumplieron con los criterios de inclusión, que acudieron a la consulta de neumología entre enero y abril 2017, obteniendo una muestra de 54 pacientes. Se emplearon medidas de independencia y de asociación para estimar la relación entre las distintas variables analizadas. Resultados: De los 54 pacientes incluidos, el 57.4% fueron mujeres, el 40.7% correspondió al grupo de edad de mayores de 60 años, 64.8% presentaban algún grado de obesidad, 48.1% tenían antecedente de hipertensión arterial sistémica, 22.2% de diabetes mellitus y 7.4% algún tipo de dislipidemia. La prevalencia de somnolencia excesiva diurna encontrada fue de 35.2%. No se logró relacionar el grado de somnolencia con las variables: grupos etarios χ2= 8.3, p= 0.08; sexo χ2= 3.93, p= 0.1; hipertensión arterial χ2= 1.11, p= 0.5; diabetes mellitus χ2= 0.45, p= 0.7; dislipidemia χ2= 0.83, p= 0.6. Las medidas de asociación mostraron perfectos negativos, no logrando obtener asociación entre variables. Conclusión: No se obtuvo una asociación estadísticamente significativa entre los grados de somnolencia y la edad o el género, no así tampoco con los componentes del síndrome metabólico. Sin embargo, es necesario realizar más estudios al respecto, e incluso analizar variables como economía, fármacos, estado social, y patologías neuropsiquiatricas involucradas en los trastornos del dormir. 14 SUMMARY Background: Sleep is a physiological process, inherent to the humans, necessary to maintain both physical and emotional health, therefore, knowledge of the symptoms and disorders related to sleep is very important. The sleep disorders are a whole group of different pathologies, among which, sleepiness plays a common role in some of them, and even be the trigger for more severe diseases. The other important aspect is the relation of sleep diseases, cardiovascular risk and metabolic syndrome. All this, makes the sleep disorders, a real and massive public health problem, which is still a long way to go. Objective: To know the prevalence of excessive daytime sleepiness in the patients who visit the pneumology clinic of the General Hospital of the State of Sonora. Methodology: Clinical, descriptive, cross-sectional, prospective study. Epworth sleepiness questionnaires were applied to all patients who met the inclusion criteria, who attended the pneumology consultation between January and April 2017, obtaining a sample of 54 patients. Independence and association measures were used to estimate the relation between the different variables analyzed. Results: Of the 54 patients included, 57.4% were women, 40.7% were >60 years, 64.8% had some degree of obesity, 48.1% had a history of high blood pressure, 22.2% had diabetes mellitus and 7.4% had dyslipidemia. The prevalence of excessive daytime sleepiness was 35.2%. It was not possible to relate the degree of somnolence with the variables: age groups χ2= 8.3, p = 0.08; gender χ2= 3.93, p = 0.1; high blood pressure χ2= 1.11, p = 0.5; diabetes mellitus χ2= 0.45, p = 0.7; dyslipidemia χ2= 0.83, p = 0.6. And the measures of association showed perfect negatives, failing to obtain association between variables. 15 Conclusions: There was no statistically significant association between the degrees of sleepiness with the age or gender, but neither did the components of the metabolic syndrome. However, further studies are needed, including variables such as economics, drugs, social status, and neuropsychiatric pathologies involved in sleep disorders. 16 1.- INTRODUCCIÓN Los síntomas y trastornos del sueño representan un importante problema de salud pública, y aunque existen más de cien trastornos del dormir (Torre, et al., 2016), los más frecuentes son el síndrome de apnea e hipopnea del sueño (SAHS), el ronquido primario, el insomnio y la somnolencia excesiva diurna (Vázquez, et al., 2012). Hablando específicamente de Hipersomnia (o somnolencia excesiva diurna), Boulos (2010), establece que es una de las quejas más comunes evaluadas por especialistas en trastornos del sueño. Incluso se ha sugerido que una de cada cinco personas experimenta somnolencia diurna significativa. Por otro lado, Erro (2007) refiere que “La hipersomnia conlleva problemas de concentración, de memoria y del humor y repercute en las actividades de la vida diaria” y es por tal motivo que se le ha dado especial auge a las catastróficas consecuencias de tal padecimiento. Existen datos que sugieren que la hipersomnia es causa importante de accidentes de tránsito y que dichos accidentes están relacionados a una alta tasa de morbi-mortalidad (Rey De Castro, 2003). De igual forma, se ha demostrado que la somnolencia excesiva diurna tiene repercusiones a nivel sistémico, ya que se ha asociado con características independientes del síndrome metabólico, como la resistencia a la insulina y la diabetes (Hayley et al., 2014). Así mismo, los trastornos del sueño en general se han visto implicados en trastornos vasculares, manifestados como accidentes cerebrovasculares (Moszczynski et al., 2012). Se sabe que existen diferencias raciales o étnicas en los trastornos del sueño, pero la mayoría de estas diferencias han sido investigadas solamente en población caucásica y afroamericana (Vázquez et al., 2012). Respecto a la población hispana, la información es mucho más limitada. Sin embargo, diversos estudios sugieren que estas poblaciones 17 exhiben diferencias en la arquitectura de sueño, una mayor prevalencia de ronquido y mayor somnolencia excesiva diurna (Vázquez et al., 2012). Por lo que consideramos crucial la realización de un estudio enfocado en identificar la prevalencia de dicha entidad en nuestra población. 18 2.- PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA Los trastornos del sueño constituyen un grupo numeroso y heterogéneo de procesos, que la mayoría de las veces suelen ser mal diagnosticados, retrasando de forma importante el inicio de un tratamiento adecuado. Las consecuencias en la salud, así como la mortalidad representan una carga de salud pública no reconocida. Los pocos estudios realizados en nuestro país, apuntan a que no es un proceso raro, sino con gran prevalencia en las ciudades mexicanas en donde se ha investigado intencionadamente. La somnolencia excesiva diurna puede serel síntoma inicial de múltiples condiciones médicas no sospechadas de forma temprana, incluyendo narcolepsia, depresión, apnea del sueño, cambios en los hábitos del sueño, uso de drogas y disrupción del ciclo circadiano. Las consecuencias en la salud de la hipersomnia diurna incluyen accidentes vehiculares, disminución del rendimiento escolar o laboral y disminución en la calidad de vida. Se ha vinculado a la somnolencia excesiva diurna con un aumento en los índices de adiposidad, lo cual conlleva a toda una serie de procesos inflamatorios característicos de trastornos metabólicos, incrementando la morbilidad y mortalidad en los pacientes (Hayley et al., 2014). Por lo tanto, su evaluación y reconocimiento es muy importante para los especialistas para la toma de decisiones relacionadas con el diagnóstico y las modalidades de tratamiento, principalmente en pacientes con un mayor riesgo de accidentes asociados a ésta entidad y complicaciones de la misma. 19 3.- JUSTIFICACIÓN Se ha establecido que una de cada cinco personas experimentan algún grado significativo de somnolencia diurna (Boulos, 2010). Se considera que el hecho de conocer la situación actual que se vive en el Hospital General del Estado de Sonora en lo referente a Hipersomnia diurna permitiría la identificación oportuna, así como el establecimiento de estrategias terapéuticas para el manejo de ésta entidad. Incluso, puede dar pie a futuros estudios clínicos que involucren pruebas diagnósticas y de tratamiento específicas en nuestra población. De igual se pretende implementar de forma rutinaria, la aplicación de cuestionarios de síntomas de sueño en la consulta externa de Neumología, para identificar individuos con un riesgo particularmente alto de complicaciones que requieran tratamiento urgente y de ésta manera, ser referidos a clínicas especializada en sueño. El manejo farmacológico no adecuado o poco sustentado favorece el uso indiscriminado de fármacos con un alto potencial de adicción, además de mantener costos permanentes que con las estrategias actuales pudieran ser menores. Por lo tanto, se considera que este proyecto podría tener un impacto sobre el conocimiento y la sensibilización en el ambiente médico que no está formado en medicina del sueño, para la identificación de hipersomnia diurna y canalizarla de forma temprana. La identificación de trastornos específicos del sueño que concurren con patologías crónicas degenerativas, permitirían el tratamiento específico de las mismas, lo que favorece la prevención y/o rehabilitación de complicaciones consecuentes del mal dormir en dichas patologías. Para dar éste primer paso, se cuentan con todas las herramientas en el Hospital General del Estado en lo que se refiere a recursos materiales y recursos humanos para 20 llevarlo a cabo. Por lo tanto, se puede presentar una investigación de bajo costo pero con un gran impacto económico, emocional y social. 21 4.- OBJETIVOS OBJETIVO GENERAL: Identificar la prevalencia de somnolencia diurna en los pacientes que acuden a consulta Externa de Neumología del Hospital General del Estado: Ernesto Ramos Bours, durante el periodo de febrero a abril de 2017. OBJETIVOS PARTICULARES: 1.- Describir los grados de somnolencia de la población en estudio. 2.- Relacionar somnolencia diurna con la edad y el género. 3.- Relacionar somnolencia diurna con hipertensión, diabetes mellitus y dislipidemias. 22 5.- MARCO TEÓRICO 5.1 Antecedentes históricos El interés por el sueño se remonta a los inicios de la humanidad, pero hasta fechas relativamente recientes se ha conocido poco sobre él. Históricamente, se establecen dos etapas: a) Etapa pre – electroencefalográfica. Es un largo período de tiempo que se inicia en la prehistoria y termina en el primer tercio del siglo XX. En esta etapa, el sueño se ve como un fenómeno pasivo de aparición diaria y de finalidad incierta. Esta etapa fue un terreno más propio de sacerdotes, adivinos, poetas, filósofos y románticos que del médico y otros científicos (Bové, 2015). b) Etapa electroencefalográfica. marca el gran desarrollo de la medicina del sueño en sus diferentes apartados de neuroquímica, electrofisiología, neurofisiología, cronobiología y patología, puesto que permite disponer de un instrumento capaz de registrar la actividad cerebral. En el último cuarto de siglo se comenzaron a acreditar los primeros profesionales y centros de medicina del sueño en los Estados Unidos. El siglo XXI ve nacer en Europa los primeros médicos acreditados en medicina del sueño. Y, es durante la década de los 90, que se describe el peligro derivado de la somnolencia excesiva, la elevada incidencia del síndrome de apnea de sueño en la población general y su asociación con la obesidad hacen que tanto el síndrome de apnea de sueño como la obesidad sean merecedores de una atención prioritaria (Bové, 2015). 23 5.2 Neurobiología del sueño Durante mucho tiempo ha existido la falsa creencia de que el sueño constituye la ausencia de vigilia, lo que ha provocado que se le preste escasa atención. Además, a lo largo de la historia, la medicina casi siempre se ha centrado en el paciente despierto, siendo el sueño un terreno árido y de los campos menos estudiados (Bové, 2015). Por definición, el sueño es la acción de dormir. Es un estadio fisiológico recurrente de reposo del organismo, que se caracteriza por una inacción relativa, con ausencia de movimientos voluntarios y aumento del umbral de respuesta a estímulos externos, fácilmente reversible. Es un proceso activo del cerebro, una actividad esencial para la supervivencia del organismo. Además, cumple con la función de descanso y con una finalidad restauradora y homeostática, el almacenamiento de energía celular y de procesos de memoria, así como de la termorregulación (Secretaría de Salud, 2010). Neuroanatomía y Neurofisiología. Moszczynski et al. (2012) proponen que la neuromodulación externa por factores químicos en regiones remotas del cerebro influye en los circuitos tálamo-corticales. La anatomía de los circuitos tálamo-corticales y el núcleo reticular talámico conducen a una ritmicidad intrínseca (Figura. 1). Este circuito consta de tres componentes fundamentales: 1. Proyecciones corticotalámicas: de la corteza a los núcleos talamocortical y reticular del tálamo. 2. Núcleos de relevo talamocortical (TC): estos núcleos envían señales sobre sensación a la corteza para la percepción de estímulos. 24 3. Núcleo reticular talámico: estas neuronas de Ácido g-Aminobutírico (GABA) forman una cobertura alrededor del tálamo dorsal y lateral y proporcionan retroalimentación intrínseca al tálamo. La corteza se proyecta hacia el tálamo y excita las células talamocorticales y talamoreticulares. Las proyecciones corteza - talamocortical tienen una débil excitación glutamatérgica directa y una fuerte inhibición polisináptica indirecta. Las proyecciones corteza - talamoreticulares son glutamatérgicas. Las células talamocorticales se proyectan a la corteza y dan colaterales a las células talamoreticulares, las cuales se proyectan de nuevo a las células talamocorticales y ésto conduce a un circuito inhibitorio intratalámico. Esta retroalimentación reticular conduce a una modulación de la señal entre el tálamo y la corteza. Las proyecciones núcleo reticular - talamocorticales son GABAérgicos y las ráfagas de picos de alta frecuencia conducen a una potente inhibición en el sueño No REM (Movimientos Oculares Rápidos). Una reducción en la actividad de la ráfaga reticular conduce a menor inhibición del sueño REM y la vigilia (Moszczynski, et al., 2012). Figura 1. Marco Conceptual Básico: Circuitos talamocorticales con modulación intrínseca yextrínseca, modificado de Moszczynski et al., 2012. 25 El tálamo es modificado por neurotransmisores. Todas las regiones cerebrales que producen neurotransmisores asociados con la excitación (Tabla 1) que se proyectan a la corteza también tienen proyecciones al tálamo y modulan ritmos talámicos. Tabla 1. Neuroquímica de los estados de alerta y sueño, tomado de Carillo et al., 2013. Núcleo cerebral responsable Neurotransmisor involucrado Estado de actividad en neuronas cerebrales relevantes Alerta Núcleo colinérgico en la unión de puente y cerebro medio Acetilcolina Activado Locus coeruleus Norepinefrina Activado Núcleo del rafé Serotonina Activado Núcleo tuberomamilar Orexina Activado Sueño No REM Núcleo colinérgico en la unión de puente y cerebro medio Acetilcolina Disminuido Locus coeruleus Norepinefrina Disminuido Núcleo del rafé Serotonina Disminuido Sueño REM activo Núcleo colinérgico en la unión de puente y cerebro medio Acetilcolina Activo (ondas ponto-geniculo- occipitales) Núcleo del rafé Serotonina Inactivado Sueño REM inactivo Locus coeruleus Norepinefrina Activado De esta manera actúan como una fuente de impulso en la vigilia que se retira durante el sueño. Las neuronas corticales generan los ritmos rápidos de vigilia los cuales son sincronizados por los circuitos intracorticales. Los núcleos colinérgicos (núcleo tegmental laterodorsal y núcleo pedunculopontino) despolarizan las células talamocorticales e hiperpolarizan las células reticulares, de ésta forma se potencializan los ritmos de frecuencia más alta asociados con el estado de alerta y bloquean a su vez las oscilaciones delta asociadas con el sueño (Moszczynski et al., 2012). 26 Fases del sueño. Existen dos tipos principales de sueño: Sueño de movimientos oculares rápidos (REM por sus siglas en inglés) o paradójico y el No REM (Secretaría de Salud, 2010). El sueño No REM o sueño de movimiento ocular no rápido, comprende los estadios 1, 2, 3 y 4. En él, la mayoría de las funciones fisiológicas del organismo están disminuidas y aparecen movimientos corporales involuntarios. Se divide en sueño superficial (fases 1 y 2) y sueño profundo (fases 3 y 4), también llamado sueño delta o de ondas lentas (Figura. 2) Fase 1: el sueño comienza por la fase 1, que es un período de adormecimiento que dura entre 1 y 7 minutos y se sigue de la fase 2. A partir de este momento no vuelve a presentarse. Fase 2: se caracteriza por un enlentecimiento del ritmo cerebral, que se refleja en el electroencefalograma por un ritmo generalizado de ondas alfa y desaparición de las ondas beta habituales durante la vigilia. Puede aparecer alguna onda delta, pero no supera en ningún caso el 20% del trazado. Se produce además, un estado de relajación muscular generalizada y una disminución del ritmo cardíaco y respiratorio. Fases 3 y 4: constituyen el sueño profundo o sueño de ondas delta. En estas fases el tono muscular es aún menor y en el EEG (electroencefalograma) se observan ondas delta. La diferencia entre ambas es únicamente cuantitativa: se habla de fase 3 si las ondas delta suponen más del 20% pero menos del 50% en una unidad de medida temporal del sueño (en los registros de sueño se toma como unidad mínima de medida 30 segundos, aunque también pueden darse los porcentajes por cada minuto); la fase 4 se caracteriza por un predominio de las ondas delta, que representan más del 50% del sueño en una unidad de tiempo. 27 Figura 2. Las etapas o fases del sueño No MOR y MOR y su duración. Tomado de Carillo et al., 2013. El sueño REM, o sueño de movimiento ocular rápido, también llamado fase R; se caracteriza por la disminución del tono de todos los músculos (con excepción de los músculos respiratorios y los esfínteres vesical y anal), así mismo la frecuencia cardiaca y respiratoria se vuelve irregular e incluso puede incrementarse; existe erección espontánea del pene o del clítoris. Durante el sueño REM se producen la mayoría de los sueños. Un adulto joven pasa aproximadamente entre 70-100 min en el sueño no REM para después entrar al sueño REM, el cual puede durar entre 5-30 min, y este ciclo se repite cada 90 minutos durante toda la noche de sueño. Por lo tanto, a lo largo de la noche pueden presentarse normalmente entre 4 y 6 ciclos de sueño REM (Carillo, et al., 2013). 28 5.3 Trastornos del sueño 5.3.1 Generalidades Los trastornos del sueño son una serie de alteraciones relacionadas con el proceso de dormir, existiendo tanto en las etapas de inicio, de mantenimiento, como durante el ciclo sueño-vigilia (Secretaría de Salud, 2010). La mayoría de los seres humanos pasan aproximadamente un tercio de sus vidas durmiendo. En la sociedad moderna hay una tendencia a disminuir el tiempo de sueño y aumentar la somnolencia diurna como consecuencia. Es relevante el conocimiento que podamos tener de las alteraciones del sueño, ya que tienen una gran repercusión en diferentes ámbitos de la vida. 5.3.2 Factores de Riesgo. Se considera que los principales factores de riesgo para el desarrollo de trastornos del sueño son (Clinical Practice Guidelines Working Group, 2007): Edad.- Principalmente en las últimas décadas de la vida. Sexo.- La mayoría de los estudios epidemiológicos coinciden que ser del sexo femenino es un factor de riesgo para padecer algún tipo de trastorno del sueño. Factores socioeconómicos.- Circunstancias adversas en la vida, como por ejemplo, estrés, problemas personales, económicos, etc. en la mayoría de las veces son causa de trastornos del sueño principalmente de insomnio primario. Estado civil.- Se ha visto que en las personas que se encuentran divorciados, separadas o viudas, la frecuencia de trastornos del sueño es mayor. 29 Uso y/o abuso de sustancias.- Es frecuente detectar algún tipo trastorno del sueño en personas que suelen tener consumo de sustancias con algún efecto estimulante o somnífero principalmente. Enfermedades médicas.- Muchas enfermedades en sus diferentes etapas de evolución suelen cursar con algún tipo de trastornos del sueño como por ejemplo insomnio o hipersomnio. Enfermedades psiquiátricas.- Los trastornos psiquiátricos en su mayoría cursan con trastornos del sueño. 5.3.3 Epidemiologia General La prevalencia reportada en estudios descriptivos de algunos otros trastornos del sueño son: Hipersomnia primaria o idiopática del 5-10% de los pacientes que acuden a consulta de clínica del sueño, narcolepsia de 0.03 a 0.16% con pico de incidencia a los 14 años, sonambulismo del 17% en menores y 4% en adultos, terrores nocturnos de 1-6.5% en niños y menos del 1% en adultos (Secretaria de Salud, 2010). 5.3.4 Mecanismos de Privación del Sueño. Banks et al., (2007) proponen que la privación parcial del sueño puede ocurrir de tres maneras: La primera consiste en impedir que el sueño sea fisiológicamente consolidado y se denomina fragmentación del sueño, que puede ocurrir en ciertos trastornos del sueño (por ejemplo, apnea obstructiva del sueño no tratada). Durante la fragmentación del sueño, la progresión y la secuenciación normales de las fases del sueño se interrumpe típicamente en grados variables, dando por resultado menos tiempo de sueño fisiológico, con respecto al tiempo en cama. El segundo tipo de privación parcial del sueño implica la pérdida de estadios fisiológicos específicos del sueño y, por lo tanto, se denomina deprivación selectiva del 30 estadio del sueño. Esto se presume que es menos común que los otros tipos, pero las estimaciones de prevalencia no existen para ningún tipo de restricción de sueño. La privación selectiva del estadio del sueño puede ocurrir si la fragmentación del sueño se aísla en una etapa específica del sueño (por ejemplo, cuando los episodios apneicos alteran principalmente una etapa del sueño,como el sueño REM o cuando los medicamentos suprimen una etapa específica del sueño). El tercer tipo de privación parcial del sueño es la restricción del sueño, que también se conoce como depresión del sueño y se caracteriza por una duración reducida del sueño. Las principales funciones afectadas por las alteraciones en el sueño se resumen en la Tabla 2. 5.3.5 Clasificación La Secretaria de Salud (2010) y la Clasificación internacional de enfermedades décima versión (CIE-10) han clasificado a los trastornos del sueño como: Trastornos no orgánicos del sueño. Insomnio no orgánico: Se caracteriza por una cantidad y/o calidad de sueño insatisfactorio que persiste durante un período considerable de tiempo e incluye dificultad para conciliar y mantener el sueño, o despertar precoz. Es el tipo más frecuente de trastorno. 31 Tabla 2. Principales funciones cognitivas afectadas con la pérdida del sueño, tomado de Carillo, et al., 2013. Hipersomnio no orgánico: La principal característica de la hipersomnia idiopática es la somnolencia excesiva durante el día al menos por un mes, evidenciado por sueño prolongado (mayor de ocho horas) con la calidad del sueño normal, dificultad al despertar, somnolencia en las horas habituales de vigilia por lo que hay siestas intencionadas y sueños inadvertidos. Trastorno no orgánico del ciclo sueño-vigilia (trastornos del ritmo circadiano): Esta categoría comprende: 1.-Retraso de la fase de sueño. 2.-Desfase por cambio de husos horarios. 3.-Trabajos en turnos (cambios de turno de trabajo). 4.-No especificados (adelanto de la fase del sueño, patrón de sueño vigilia irregular, y ritmo distinto de 24 horas). Sonambulismo: Es un estado de conciencia alterada en las que se combinan fenómenos del sueño y vigilia. Durante un episodio de sonambulismo el individuo se levanta de la cama por lo general durante el primer tercio del sueño nocturno, y deambula, mostrando un nivel Atención sostenida intencional: la atención se vuelve variable e inestable y se incrementan los errores de omisión y comisión. Enlentecimiento cognitivo El tiempo de reacción se prolonga La memoria de corto plazo y de trabajo disminuye Se afecta la adquisición de tareas cognitivas (aprendizaje) Aumentan las respuestas perseverativas Toma de decisiones más arriesgada El desempeño inicial de las tareas es bueno al inicio pero se deteriora con las tareas de larga duración Alteración de la capacidad de juicio Disminución de la flexibilidad cognitiva Alteraciones del humor: irritabilidad, enojo Disminuye la autovigilancia y autocrítica Fatiga excesiva y presencia de “microsueños” involuntarios 32 bajo de conciencia, reactividad y torpeza de movimientos, cuando despierta no suele recordar el acontecimiento. El sonambulismo puede aparecer a cualquier edad, aunque la mayoría de los episodios se presenta en niños entre los cuatro y ocho años y sueñe remitir en la adolescencia. En el adulto suele adoptar un carácter crónico con altas y bajas o episodios aislados. Puede formar parte de otros trastornos del sueño tales como la apnea obstructiva del sueño, narcolepsia, uso y abuso de sustancias. Terrores del sueño (terrores nocturnos): Se caracteriza por episodios nocturnos de terror y pánico que se acompañan de gritos, movimientos bruscos e hiperactividad vegetativa. Es muy frecuente en la población infantil, sobre todo en el sexo masculino, rara vez persiste en la adolescencia. Pesadillas: Experiencias oníricas acompañadas de ansiedad o miedo, existe un recuerdo muy detallado que implica una amenaza para la supervivencia, la seguridad o autoestima. Con frecuencia suele repetirse el mismo tema. No existe amnesia al evento, ni problemas en la orientación. Narcolepsia: es un trastorno de etiología desconocida que se caracteriza por somnolencia excesiva típicamente asociada a cataplejía y otros fenómenos del sueño REM, como parálisis del sueño o alucinaciones específicas. Los ataques de sueño deben ocurrir diariamente al menos por tres meses, son desencadenas por emociones intensas. Los síntomas no deben asociarse al uso de sustancias o a otra enfermedad médica. Aunque la CIE-10 la clasifica en el capítulo dedicado a las enfermedades neurológicas, lo incluye en este apartado para permitir el diagnóstico diferencial. El individuo deberá demostrar un ritmo circadiano regular y una cantidad adecuada de sueño nocturno. Trastornos orgánicos del sueño. Aquellos explicados por el uso de sustancias, enfermedades médicas y enfermedades psiquiátricas. 33 5.4 Hipersomnia/ Somnolencia diurna 5.4.1 Definición. La somnolencia diurna fue definida por la Clasificación Internacional de Trastornos del Sueño como la incapacidad de permanecer despierto y alerta durante los principales episodios de vigilia del día, dando lugar a lapsos no intencionados de somnolencia o sueño (Boulos et al., 2010). Y es una de las principales consultas en diversas especialidades. 5.4.2 Causas de Hipersomnia: Puede ser causada por trastornos como apnea obstructiva del sueño, narcolepsia e hipersomnia idiopática (Wu et al., 2012). Dentro de las causas de Hipersomnia destacan (Erro, 2007): Hipersomnia secundaria a sueño nocturno insuficiente: a) Sueño Insuficiente: La privación del sueño es la causa más común de somnolencia excesiva diurna en la población general. Los individuos que pueden estar particularmente somnolientos debido a su estilo de vida incluyen adultos jóvenes, los trabajadores por guardias, los profesionales de la salud y los que trabajan en el transporte (Boulos, 2010). b) Sueño Fragmentado: La calidad del sueño es tan importante como la cantidad. La continuidad es el factor más importante para que el sueño sea reparador. El sueño puede fragmentarse por periodos de vigilia obvios para el paciente y también pueden ocurrir breves despertares o fragmentaciones más ocultas que pueden pasar desapercibidas (Erro, 2007). Trastornos primarios del mantenimiento del estado de alerta o vigilia: a) Narcolepsia: Es un trastorno neurológico asociado con alteraciones en el control del sueño y la vigilia. Las manifestaciones clínicas incluyen somnolencia diurna prominente (que debe estar presente para hacer el diagnóstico), parálisis del sueño (despertarse del sueño pero incapaz de moverse), alucinaciones hipnagógicas (imágenes sensoriales vivas, 34 generalmente visuales, al inicio del sueño) y cataplexia (pérdida del tono muscular). Se cree que estos síntomas representan intrusiones de fenómenos de sueño de movimiento ocular rápido (REM) en estado de vigilia. Más del 90% de los narcolépticos tienen un haplotipo específico HLA-DQB1 * 060226 (Boulos, 2010). b) Hipersomnia Idiopática: La principal característica de la hipersomnia idiopática es la somnolencia excesiva durante el día al menos por un mes, evidenciado por sueño prolongado (mayor de ocho horas) con la calidad del sueño normal, dificultad al despertar, somnolencia en las horas habituales de vigilia por lo que hay siestas intencionadas y sueños inadvertidos. La somnolencia debe de ser de la suficiente gravedad para provocar un deterioro clínicamente significativo o deterioro social, laboral o de otra actividad del individuo, no se debe a otros trastornos del sueño o de otro trastorno mental ni se debe a efectos fisiológicos directos de una sustancia o enfermedad médica. Debe haber ausencia de síntomas secundarios de la narcolepsia (Secretaria de Salud, 2010). c) Sindrome de Kleine Levin: afecta principalmente a los adolescentes, se caracteriza por ataques episódicos de sueño durante los cuales el paciente duerme entre 16 y 18 horas por día o más. Otros trastornos del comportamiento durante los episodios incluyen hiperfagia, hipersexualidad, deterioro de la memoria, confusión y alucinaciones (Boulos, 2010). 3.- Enfermedadesdel Sistema Nervioso que cursan con Hipersomnia. Enfermedades tóxicas y metabólicas, demencias degenerativas, enfermedades neuromusculares, síndrome de piernas inquietas. Enfermedades Psiquiátricas Drogas 35 5.4.3. Epidemiología En el Sleep Heart Health Study de Baldwin et al., (2004), la prevalencia de somnolencia diurna, que se definió como puntuaciones en la Escala de Somnolencia de Epworth > 10 puntos fue de 29.7% para hombres y 20.8% para mujeres mayores de 40 años (Figura 3). La National Sleep Foundation (2005) reveló que el 26% de los estadounidenses tenían puntuaciones en la Escala de Somnolencia de Epworth entre 10-14 puntos. Mientras que el 6% presentaron puntuaciones entre 15-24. Por otro lado, Joo et al., (2008) demostraron una prevalencia de somnolencia excesiva diurna en Corea del 12.2% de los sujetos en estudio. Figura 3. Distribución por género de puntajes de la Escala de Somnolencia de Epworth, modificado del Sleep Heart Health Study Baldwin, et al., (2004). La somnolencia excesiva diurna (SED) tiene una prevalencia estimada entre 2.5% - 18.5% en la población general y es más común en mujeres que en hombres (Theorell- Haglöw et al., 2015). Hayley et al., (2014) reporta una prevalencia de SED en la población de Australia, de 10.4% en hombres y 13.6% en mujeres. Hombres Mujeres Po rc en ta je Puntaje en la Escala de Somnolencia de Epworth 36 En la Ciudad de México, López-Meza et al., (2006) reportaron una prevalencia de SED en 31.5% de los sujetos en estudio (Tabla 3), mientras que en la ciudad de Monterrey, Nuevo León, la prevalencia de SED reportada (con un cuestionario distinto a la Escala de Epworth) fue de 21.5% (Téllez et al., 1995). Tabla 3. Prevalencia de Somnolencia Excesiva Diurna en diversas poblaciones, tomado de López-Meza, et al., 2006. Región Autor Prevalencia (%) California (EUA) Roberts 6.7 Finlandia Hublin 9.0 Europa del Norte Janson 14.7 Inglaterra Ohayon 20.7 Brasil Souza 18.9 Monterrey Tellez-López 21.5 Israel Melamed 22.6 México López-Meza 31.5 5.4.4. Asociación de Hipersomnia con Accidentes de tránsito. Se ha estimado que 2-4% de los conductores en general se encuentran habitualmente somnolientos mientras conducen. La somnolencia es una causa reconocida de accidentes de tráfico que cuesta a nuestra sociedad millones de dólares cada año. Hay diferentes estimaciones de la frecuencia de los accidentes automovilísticos relacionados con la somnolencia: tan baja como 1-3% en los Estados Unidos, pero es al menos dos a diez veces más frecuente en pacientes con apnea obstructiva del sueño en comparación con los controles (Boulos, 2010). Por tal motivo, en países como Estados Unidos los Departamentos de Vehículos Motorizados de algunos estados tienen regulaciones o guías 37 específicamente relacionadas con la apnea del sueño y narcolepsia, que prohíben manejar si estas condiciones no están controladas. La Asociación Médica de Canadá tiene una sección de trastornos del sueño donde se menciona que los pacientes con apnea del sueño tienen mayor riesgo de accidentes al conducir, por lo que pueden manejar cualquier clase de vehículo una vez tratado y controlado el problema. Proponen estudiar a los pacientes con hipersomnia y si ésta interfiere con la capacidad para conducir, inhabilitarlos hasta ser tratados con éxito. En Inglaterra sugieren, para la apnea del sueño, suspender la conducción hasta obtener un adecuado control de la enfermedad por lo menos durante 12 meses, con controles anuales posteriores. En Suecia las personas con episodios apneicos, ronquidos y somnolencia diurna que no han logrado resultados satisfactorios con el tratamiento están inhabilitadas para manejar vehículos comerciales (Santin, 2004). 5.4.5 Asociación de Hipersomnia con Enfermedad Cardiovascular En la primera Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Qureshi et al., 1997) el riesgo de accidente cerebrovascular se asoció de forma independientemente con la SED. En el Estudio de Salud Cardiovascular (Newman et al., 2000) la SED fue el único síntoma de alteraciones del sueño asociado con la incidencia de infarto del miocardio, insuficiencia cardiaca, morbilidad y mortalidad cardiovascular general y mortalidad por todas las causas. En la cohorte de Caerphilly (Elwood et al., 2006) se encontró que la SED se asocia con un riesgo aumentado de cardiopatía isquémica y en hombres con apnea del sueño, mayor riesgo de evento cerebro vasculares isquémicos. 5.5 Escalas de Medición de la Somnolencia La Escala de Pittsburg (Buysse et al., 1989) consiste en 19 reactivos, más una calificación de cinco reactivos realizada por el compañero de cama (no incluida en el puntaje). Los encuestados indican la cantidad de sueño que obtuvieron y valoran el grado en que varios 38 factores interfieren con su sueño en una escala de cuatro puntos (0 = no del todo, 3 = tres o más veces a la semana). Estos artículos producen puntuaciones en siete subescalas: eficiencia subjetiva del sueño, latencia del sueño, duración del sueño, calidad del sueño, alteración del sueño, uso de medicamentos para dormir y disfunción diurna debido a la somnolencia. Las subescalas producen una puntuación de 0 a 3 y se suman para obtener una puntuación total que varía de 0 a 21, con puntuaciones totales más altas indicando una calidad de sueño más pobre (Nishiyama et al., 2013) (Anexo 2). En la Escala Stanford (Hoddes et al., 1973) el sujeto debe elegir entre descripciones de diferentes niveles de somnolencia (desde completamente despierto hasta completamente dormido) que mejor define su estado actual. El problema con esta escala es que sólo da una imagen instantánea de la somnolencia del paciente, que puede variar ampliamente de un momento a otro (Boulos, 2010) (Anexo 3). La Secretaria de Salud (2010), recomienda, como Punto de Buena Práctica Clínica, realizar la detección de somnolencia excesiva diurna mediante la Escala de Somnolencia de Epworth. Ésta escala fue publicada por el Hospital Epworth en Melbourne, Victoria, Australia (Johns, 1991) y es la medida de la somnolencia más comúnmente utilizada en la investigación del sueño (Kendzerska et al., 2014). Se considera el método más simple, más barato y que ocupa el menor tiempo en ser contestado (Wu et al., 2012). Además, intenta medir el nivel general de somnolencia diurna durante un período reciente, en lugar de proporcionar información sobre la somnolencia de un individuo en un momento determinado. Es un instrumento autoaplicable que consta de ocho reactivos para evaluar la propensión a quedarse dormido en ocho situaciones, en su mayoría monótonas. El sujeto responde cada reactivo en una escala de 0-3, donde 0 significa nula probabilidad de quedarse dormido y 3 alta probabilidad. La suma de las calificaciones en cada reactivo 39 proporciona la calificación total, con un rango de 0-24 puntos (Sandoval et al., 2013) (Anexo 1). Se han desarrollado diferentes versiones de la Escala de Epworth; por ejemplo, en México, Jiménez et al., (2009) propusieron una versión corta la cual excluye el reactivo 8 argumentando que en países en vías de desarrollo la mayoría de las personas usan el transporte público. A pesar de que se han validado varias versiones en español de la Escala de Somnolencia de Epworth, consideramos que es esencial que se respete la integridad de la versión original, con la finalidad de preservar la viabilidad en la comparación de los resultados entre los estudios que empleen este instrumento y es por tal motivo que se decidió usar la versión original para el presente estudio. 40 6.- MATERIALES Y MÉTODO 6.1 Diseño del estudio Se realizó un estudio clínico, descriptivo, transversal, prospectivo. 6.2 Población Se aplicóel cuestionario validado de Somnolencia Diurna de Epworth (Johns et al., 1991) a todos los pacientes que acudieron a la consulta externa de Neumología del Hospital General del Estado de Sonora (HGE) durante el periodo febrero- abril 2017. 6.3 Periodo de estudio El desarrollo del proyecto se llevó a cabo de enero a julio de 2017. La aplicación de cuestionarios de somnolencia de Epworth se realizó de febrero a abril de 2017. La búsqueda de literatura y elaboración de marco teórico se realizó de enero a junio. Se concluyó el análisis de información y discusión de resultados en el mes de julio del 2017. 6.4 Criterios de muestreo y elección del tamaño de muestra Se realizó un muestreo por conveniencia donde se aplicaron cuestionarios de somnolencia a todos los pacientes que acudieron a consulta externa de Neumología del Hospital General del Estado de Sonora. La muestra con la que se trabajó fue de 54 pacientes que cumplieron con los criterios de selección. 6.5 Criterios de selección Criterios de inclusión Paciente mayores de 18 años que acudan a la consulta Externa del Hospital General del Estado: Ernesto Ramos Bours”. Pacientes que deseen participar en el estudio. Pacientes que firmen el consentimiento informado. 41 Criterios de exclusión Que presenten diagnóstico de Síndrome de Apnea/Hipopnea del Sueño al momento del estudio. Que presenten diagnóstico de Narcolepsia al momento del estudio. 6.6 Categorización de las variables según la metodología 6.6.1 Variable dependiente: Somnolencia Diurna: se define como la incapacidad de permanecer despierto y alerta durante el período de vigilia, con episodios no intencionados de somnolencia y/o sueño. Es una variable dependiente, cuya medición es cualitativa mediante la aplicación del cuestionario de somnolencia de Epworth y clasificada como: Somnolencia diurna baja o ausente (≤ 6 Puntos); Somnolencia media de la población (7-8 Puntos); Somnolencia diurna excesiva (≥ 9 Puntos). 6.6.2 Variables independientes y sociodemográficas: Edad: se define como el tiempo que ha vivido una persona contando desde el día de su nacimiento. Es una variable numérica cuya medición se realiza en años cumplidos al momento del estudio. Grupo etario: hace referencia a un grupo de personas que comparten cierto rango de edad establecido. Es una variable cualitativa, nominal, expresada como Adulto joven (18-39 años); Adulto Maduro (40-59 años) y Adulto Mayor (>60 años). Sexo: se refiere a las características biológicas y fisiológicas que definen a hombres y mujeres. Es una variable cualitativa dicotómica, expresada como hombre o mujer. Índice de Masa Corporal (IMC): es una medida que asocia el peso de una persona con su talla o estatura, se calcula dividiendo el peso (en kilogramos) entre talla2 (en metros). Es una variable cualitativa ordinal, clasificada como: Sobrepeso (25.00 – 42 29.99); Obesidad G1 (30.00 – 34.99); Obesidad G2 (35.00 – 39.99); Obesidad G3 (≥40.00). Hipertensión Arterial: definida como cifras tensionales mayores a 120/80 mmHg, se tomarán aquellos con diagnóstico y/o tratamiento ya establecido, por lo que es una variable cualitativa dicotómica, expresada como presente o ausente. Diabetes Mellitus: definida como cifras de glucemia >126 mg/dL en ayuno, se tomarán aquellos con diagnóstico y/o tratamiento ya establecido, por lo que es una variable cualitativa dicotómica, expresada como presente o ausente. Dislipidemia: definida como niveles de colesterol total >200 mg/dLy/o niveles de colesterol de baja densidad (LDL) >130 mg/dL y/o niveles de triglicéridos >150mg/dL; se tomarán aquellos con diagnóstico y/o tratamiento ya establecido, por lo que es una variable cualitativa dicotómica, expresada como presente o ausente. 43 Tabla 4. Descripción de las variables analizadas Variable Tipo de Variable Definición Operacional Escala de Medición Indicador Somnolencia Diurna Dependiente ≤ 6 Puntos: Somnolencia diurna baja o ausente 7-8 Puntos: Somnolencia media de la población ≥ 9 Puntos: Somnolencia diurna excesiva -Cualitativa ordinal o cuasicuantitativa Baja o Ausente, Media Poblacional, Excesiva Edad Independiente/ Sociodemográfica Tiempo que ha vivido una persona contando desde el día de su nacimiento expresado en años. Numérica Años cumplidos. Grupos Etarios: Independiente/ Sociodemográfica Adulto joven (18-39 años) Maduro (40-59 años) Mayor (>60 años) Cualitativa ordinal o cuasicuantitativa Adulto Joven, maduro, o mayor. Sexo Independiente/ Sociodemográfica Hombre o Mujer Cualitativa Dicotómica Hombre o Mujer 44 6.7 Descripción metodológica del estudio Inicialmente se aplicaron los cuestionarios de somnolencia de Epworth a todos los pacientes atendidos en la consulta externa del Servicio de Neumología del Hospital General de Estado que cumplieran con los criterios de Inclusión. Se explicó a cada paciente el objetivo del estudio y se firmó el consentimiento informado correspondiente. A todo Índice de Masa Corporal (IMC) Independiente/ Sociodemográfica Será calculado en base a la fórmula de Peso (en kilogramos) entre la talla ( en metros) elevada al cuadrado. Sobrepeso (25.00 – 29.99) Obesidad G1 (30.00 – 34.99) Obesidad G2 (35.00 – 39.99) Obesidad G3 (≥40.00) Cualitativa ordinal o cuasicuantitativa Sobrepeso Obesidad G1 Obesidad G2 Obesidad G3 Hipertensión Arterial Independiente/ Sociodemográfica Presión Arterial > 120/80 Cualitativa Dicotómica Presente o Ausente Diabetes Mellitus 2 Independiente/ Sociodemográfica Niveles de Glucosa sérica en ayuno >126 mg/dL Cualitativa Dicotómica Presente o Ausente Dislipidemia Independiente/ Sociodemográfica Niveles de colesterol total >200 mg/dLy/o niveles de colesterol de baja densidad (LDL) >130 mg/dL y/o niveles de triglicéridos >150mg/dL Cualitativa Dicotómica Presente o Ausente 45 paciente que entró a consulta, se le tomó su peso en Kilogramos y talla en metros, para poder realizar el cálculo del índice de masa corporal. Posteriormente la información se vació en una hoja de cálculo (Microsoft Office Excel 2010) en donde se incluyeron todas las variables en estudio. 6.8 Análisis de datos Las variables categóricas fueron analizadas por medio del paquete estadístico IBM SPSS Versión 24 para Windows 32bits. Se realizó un análisis de medidas de tendencia central para las variables numéricas y se construyeron tablas de frecuencia para las características encontradas. Para medir el grado de relación o dependencia entre las variables analizadas, se realizó un estadístico de Chi cuadrado y se elaboraron tablas de contingencia. Todas las pruebas estadísticas se realizaron considerando una p<0.05 como estadísticamente significativa. La Prevalencia es la proporción de individuos de una población que presentan el evento en un momento o periodo de tiempo determinado. Se calcula dividiendo el número de eventos entre el número de individuos totales. 6.9 Recursos empleados Recursos Humanos: Médicos adscritos del Servicio de Neumología. Médicos residentes de Medicina Interna que roten por el servicio de Neumología. Médicos Internos de Pregrado. Personal de Enfermería. Personal de Informática. 46 Recursos Físicos: Cuestionarios de Epworth impresos en Papel Tamaño Carta. Expedientes físicos y expediente electrónico ASSIST. Equipo de cómputo personal. Balanza con Estadímetro. Recursos Financieros: Las fotocopias en hoja de tamaño carta de los cuestionarios de Epworth se realizaron en instalaciones del Hospital General del Estado. 6.10 Aspectos éticos de la investigaciónEste estudio se llevó a cabo en conformidad con los aspectos éticos que demanda la investigación médica en seres humanos reglamentados en el Titulo Quinto de la Ley General de Salud y, establecidos en la declaración de Helsinki. A todos los pacientes se les explicó la finalidad de la investigación, firmando consentimiento de confidencialidad. Sin embargo, durante el análisis de los datos, no se hace referencia a la identidad de los pacientes participantes. 47 7.1 RESULTADOS 7.1.1 Características Clínicas De los 54 pacientes incluidos en el estudio, el 57.4% (n=31) fueron del sexo femenino. La distribución de género en la muestra presentó una edad máxima de 83 años y una edad mínima de 29. En concordancia con esto, el grupo etario de más de 60 años de edad (adulto mayor) fue el más frecuente, representando un 40.7% de la población total. El 64.8% eran pacientes con algún grado de obesidad; es decir, un índice de masa corporal mayor a 30. Por otro lado el 48.1% presentó hipertensión arterial, el 22.2% diabetes mellitus tipo 2 y el 7.4% mostró dislipidemia (Tabla 5). Tabla 5. Características clínicas y metabólicas de los pacientes incluidos en el estudio. En el grupo de somnolencia baja o ausente se encontró el paciente de menor edad (29 años), mientras que en el grupo de somnolencia excesiva, el de mayor edad (83 años). Así mismo, los índices de masa corporal en los tres grados de somnolencia, mostraron obesidad grado 3, es decir IMC mayor a 40 (Tabla 6). Población Total N (%) 54 (100) Hombres 23 (42.6) Mujeres 31 (57.4) Grupo Etario: Adulto Joven 11 (20.4) Adulto Maduro 21 (38.9) Adulto Mayor 22 (40.7) Obesidad (IMC >30) 35 (64.8) Hipertensión Arterial 26 (48.1) Diabetes Mellitus 12 (22.2) Dislipidemia 4 (7.4) 48 Tabla 6. Características clínicas de los pacientes en base al grado de Somnolencia Diurna. Entre los sujetos estudiados, el 51.9% mostraron un grado bajo o ausente de somnolencia diurna, el 13% correspondió a la somnolencia media poblacional, y un 35.2% de los pacientes, resultaron con somnolencia excesiva diurna, definido por un puntaje en la escala de Epworth mayor o igual a 9 (Tabla 7) (Figura 4). Tabla 7. Grados de somnolencia diurna en la población estudiada. Frecuencia Porcentaje Porcentaje acumulado Somnolencia diurna baja o ausente 28 51.8 51.9 Somnolencia media poblacional 7 13.0 64.8 Somnolencia diurna excesiva 19 35.2 100.0 Total 54 100.0 Mínimo Máximo Valor medio Desviación estándar Somnolencia baja (n=28) Peso (kg) 47.50 165.00 79.5 26.9 Talla (m) 1.51 1.80 1.64 0.08 IMC 22.85 59.53 34.21 10.28 Edad (años) 29 81 58 16.9 Somnolencia media (n=7) Peso (kg) 65.0 127 83.35 20.9 Talla (m) 1.52 1.73 1.60 0.66 IMC 32.16 58.99 38.96 9.2 Edad (años) 39 57 50 7.020 Somnolencia excesiva (n=19) Peso (kg) 51.0 125.0 82.64 17.51 Talla (m) 1.50 1.80 1.64 0.076 IMC 21.50 58.93 34.89 9.15 Edad (años) 34 83 54 16.56 49 51.8% 13% 35.2 % BAJA O AUSENTE MEDIA POBLACIONAL EXCESIVA Figura 4. Grados de somnolencia diurna en la población estudiada. Respecto a los distintos grupos etarios incluidos en el estudio, se observó que el grupo de adultos mayores fue el más prevalente con un 40.7%, siendo el grupo que predominó tanto en los pacientes con somnolencia diurna ausente (25.90%), como en los pacientes con somnolencia diurna excesiva (14.80%). (Tabla 8) (Figura 5). Tabla 8. Relación entre el grado de somnolencia diurna con el rango de edad de los pacientes Somnolencia diurna baja o ausente Somnolencia media poblacional Somnolencia diurna excesiva Total Grupo Etario Adulto joven Recuento 6 1 4 11 Recuento esperado 5.7 1.4 3.9 11.0 % del total 11.1% 1.9% 7.4% 20.4% Adulto medio Recuento 8 6 7 21 Recuento esperado 10.9 2.7 7.4 21.0 % del total 14.8% 11.1% 13.0% 38.9% Adulto mayor Recuento 14 0 8 22 Recuento esperado 11.4 2.9 7.7 22.0 % del total 25.9% 0.0% 14.8% 40.7% Total Recuento 28 7 19 54 Recuento esperado 28.0 7.0 19.0 54.0 % del total 51.9% 13.0% 35.2% 100.0% 50 11.10% 1.90% 7% 14.80% 11.10% 13.00% 25.90% 0% 14.80% 0.00% 5.00% 10.00% 15.00% 20.00% 25.00% 30.00% Somnolencia Diurna Ausente Somnolencia Diurna Media Somnolencia Diurna Excesiva Adulto joven Adulto Maduro Adulto Mayor 27.80% 1.90% 13% 24.10% 11.10% 22.20% 0.00% 5.00% 10.00% 15.00% 20.00% 25.00% 30.00% Somnolencia Diurna Ausente Somnolencia Diurna Media Somnolencia Diurna Excesiva Hombre Mujer Figura 5. Relación entre el grado de somnolencia diurna con el rango de edad de los pacientes en estudio. Como se aprecia en la Figura 6, el sexo masculino predominó entre los pacientes con somnolencia diurna baja o ausente (27.8%). Por otro lado, fueron más pacientes del sexo femenino que presentaron somnolencia diurna media y excesiva (11.l% y 22.2% respectivamente) (Tabla 9). Figura 6. Relación entre el grado de somnolencia diurna con el sexo de los pacientes en estudio. 51 Tabla 9. Relación entre el grado de somnolencia diurna con el sexo de los pacientes en estudio. En relación a algunos de los componentes del síndrome metabólico, tales como hipertensión arterial y diabetes mellitus, se observó la mayor prevalencia en los pacientes que resultaron compatibles para somnolencia diurna baja o ausente (22.2% y 11.1% respectivamente), mientras que la dislipidemia mostró una prevalencia similar en los pacientes con somnolencia diurna baja o ausente y aquellos con somnolencia diurna excesiva (3.7% en ambos grupos) (Figura 7) (Tablas 10, 11, 12). Total Somnolencia diurna baja o ausente Somnolencia media poblacional Somnolencia diurna excesiva Sexo del paciente Femenino Recuento 13 6 12 31 Recuento esperado 16.1 4.0 10.9 31.0 % del total 24.1% 11.1% 22.2% 57.4% Masculino Recuento 15 1 7 23 Recuento esperado 11.9 3.0 8.1 23.0 % del total 27.8% 1.9% 13.0% 42.6% Total Recuento 28 7 19 54 Recuento esperado 28.0 7.0 19.0 54.0 % del total 51.9% 13.0% 35.2% 100.0% 52 22.20% 5.60% 20% 11.10% 1.90% 9.30% 3.70% 0% 3.70% 0.00% 5.00% 10.00% 15.00% 20.00% 25.00% Somnolencia Diurna Ausente Somnolencia Diurna Media Somnolencia Diurna Excesiva Hipertensión Arterial Diabetes Mellitus Dislipidemia Figura 7. Relación entre el grado de somnolencia diurna con componentes del síndrome metabólico (hipertensión arterial sistémica, diabetes mellitus y dislipidemia). Tabla 10. Relación entre el grado de somnolencia diurna con hipertensión arterial (HAS). Total Somnolencia diurna baja o ausente Somnolencia media poblacional Somnolencia diurna excesiva HAS PRESENTE Recuento 12 3 11 26 Recuento esperado 13.5 3.4 9.1 26.0 % del total 22.2% 5.6% 20.4% 48.1% AUSENTE Recuento 16 4 8 28 Recuento esperado 14.5 3.6 9.9 28.0 % del total 29.6% 7.4% 14.8% 51.9% Total Recuento 28 7 19 54 Recuento esperado 28.0 7.0 19.0 54.0 % del total 51.9% 13.0% 35.2% 100.0% 53 Tabla 11. Relación entre el grado de somnolencia diurna con diabetes mellitus (DM). Total Somnolencia diurna baja o ausente Somnolencia media poblacional Somnolencia diurna excesiva DM PRE SEN TE Recuento 6 1 5 12 Recuento esperado 6.2 1.6 4.2 12.0 % del total 11.1% 1.9% 9.3% 22.2% AUS EN TE Recuento 22 6 14 42 Recuento esperado 21.8 5.4 14.8 42.0 % del total 40.7% 11.1% 25.9% 77.8% Total Recuento 28 7 19 54 Recuento esperado 28.0 7.0 19.0 54.0 % del total 51.9% 13.0% 35.2% 100.0% Tabla 12. Relación entre el grado de somnolencia diurna con dislipidemia. Somnolencia diurna baja o ausente Somnolenciamedia poblacional Somnolencia diurna excesiva Total Dislipidemia PRE SEN TE Recuento 2 0 2 4 Recuento esperado 2.1 .5 1.4 4.0 % del total 3.7% 0.0% 3.7% 7.4% AUS EN TE Recuento 26 7 17 50 Recuento esperado 25.9 6.5 17.6 50.0 % del total 48.1% 13.0% 31.5% 92.6% Total Recuento 28 7 19 54 Recuento esperado 28.0 7.0 19.0 54.0 % del total 51.9% 13.0% 35.2% 100.0% 7.1.2 Prueba de hipótesis estadística La prueba de independencia de Chi-cuadrado, nos permite determinar si existe una relación entre dos variables categóricas; es decir, nos indica si existe o no una relación entre las variables. Esta prueba parte de la hipótesis que las variables son independientes; es decir, 54 que no existe ninguna relación entre ellas y por lo tanto ninguna ejerce influencia sobre la otra. El objetivo de esta prueba es comprobar la hipótesis mediante el nivel de significación. En las variables analizadas en el presente estudio, los resultados demuestran independencia y no marcan diferencias significativas entre ellas: grupos etarios χ2= 8.3, p > 0.05; sexo χ2= 3.93, p > 0.05; hipertensión arterial χ2= 1.11, p > 0.05; diabetes mellitus χ2 = 0.45, p > 0.05; dislipidemia χ2= 0.83, p > 0.05 (Tablas 13, 14, 15, 16, 17). Tabla 13. Prueba de Chi Cuadrado de Pearson para evaluar la independencia de la Somnolencia Diurna con los grupos etarios en estudio. Tabla 14. Prueba de Chi Cuadrado de Pearson para evaluar la independencia de la Somnolencia Diurna con el sexo de los pacientes en estudio. Valor gl Significación asintótica Chi-cuadrado de Pearson 3.931 2 .140 Razón de verosimilitud 4.247 2 .120 Asociación lineal por lineal 1.532 1 .216 Valor gl Significación asintótica Chi-cuadrado de Pearson 8.330 4 .080 Razón de verosimilitud 10.217 4 .037 Asociación lineal por lineal .178 1 .673 55 Tabla 15. Prueba de Chi Cuadrado de Pearson para evaluar la independencia en la variable hipertensión arterial en relación al grupo de estudio. Valor gl Significación asintótica Chi-cuadrado de Pearson 1.115 2 .573 Razón de verosimilitud 1.118 2 .572 Asociación lineal por lineal .960 1 .327 Tabla 16. Prueba de Chi Cuadrado de Pearson para evaluar la independencia en la variable diabetes mellitus en relación al grupo de estudio. Valor gl Significación asintótica Chi-cuadrado de Pearson .450 2 .799 Razón de verosimilitud .469 2 .791 Asociación lineal por lineal .125 1 .724 Tabla 17. Prueba de Chi Cuadrado de Pearson para evaluar la independencia en la variable dislipidemia en relación al grupo de estudio. Valor gl Significación asintótica Chi-cuadrado de Pearson .832 2 .660 Razón de verosimilitud 1.321 2 .517 Asociación lineal por lineal .140 1 .708 56 Las medidas de asociación entre variables ordinales se basan en el nivel de concordancia y discordancia entre ellas y aclaran los resultados de las pruebas de independencia previamente descritas. Para corroborar los resultados de las pruebas que mostraban independencia entre las variables estudiadas, se calculó el estadístico Tau-b de Kendall, la cual es una medida no paramétrica de asociación para los datos ordinales que mostró que la asociación entre las variables es baja y confirma la hipótesis de independencia entre ellas. Así mismo, los valores de significancia para la prueba de independencia y para los índices de concordancia de variables ordinales no muestran resultados estadísticamente significativos por lo que es prioritario la continuidad del muestreo para obtener una mayor confiabilidad y menor rango de error en los resultados (Tablas 18, 19, 20, 21, 22). Tabla 18. Medida simétrica Tau-b de Kendall para los grupos etarios en estudio. Valor Error estándar asintóticoa T aproximadab Significación aproximada Grupos Etarios Tau-b de Kendall -.070 .133 -.530 .596 a. No se presupone la hipótesis nula. b. Utilización del error estándar asintótico que presupone la hipótesis nula. Tabla 19. Medida simétrica Tau-b de Kendall para el sexo de los pacientes en estudio. Valor Error estándar asintóticoa T aproximadab Significación aproximada Sexo Tau-b de Kendall -.174 .130 -1.340 .180 57 a. No se presupone la hipótesis nula. b. Utilización del error estándar asintótico que presupone la hipótesis nula. Tabla 20. Medida simétrica Tau-b de Kendall para hipertensión Arterial en los pacientes en estudio. Valor Error estándar asintóticoa T aproximadab Significación aproximada Hipertensión Arterial Tau-b de Kendall -.126 .129 -.975 .330 a. No se presupone la hipótesis nula. b. Utilización del error estándar asintótico que presupone la hipótesis nula. Tabla 21. Medida simétrica Tau-b de Kendall para diabetes mellitus en los pacientes en estudio. Valor Error estándar asintóticoa T aproximadab Significación aproximada Diabetes Mellitus Tau-b de Kendall -.043 .134 -.317 .751 a. No se presupone la hipótesis nula. b. Utilización del error estándar asintótico que presupone la hipótesis nula. Tabla 22. Medida simétrica Tau-b de Kendall para dislipidemia en los pacientes en estudio. Valor Error estándar asintóticoa T aproximadab Significación aproximada Dislipidemia Tau-b de Kendall -.043 .141 -.305 .760 a. No se presupone la hipótesis nula. b. Utilización del error estándar asintótico que presupone la hipótesis nula. 58 Las medidas basadas en la reducción proporcional del error (RPE) son medidas de asociación que expresan la proporción en que conseguimos reducir la probabilidad de cometer un error de predicción cuando, al intentar clasificar un caso o grupo de casos como pertenecientes a una u otra categoría de una variable, efectuamos la clasificación teniendo en cuenta las probabilidades de las categorías de esa variable en cada en cada categoría de una segunda variable. Para medir dicha asociación entre las variables en estudio, se calculó el índice Lambda, Tau de Goodman-Kruskal y el coeficiente de incertidumbre. Cada medida se acompaña de su nivel crítico de significancia; el cual, es en todos los casos > 0.05. Por lo tanto, no podemos rechazar la hipótesis de independencia y los valores de asociación de las variables deben considerarse como independientes y bajos. Con base en éstos resultados, se considera importante continuar con el muestreo, ya que tamaños de muestra más elevados permiten cubrir los rangos de error y se establecerían medidas de independencia o no independencia más confiables (Tablas 23, 24, 25, 26, 27). 59 Tabla 23. Medidas direccionales para valorar la asociación de la Somnolencia Diurna con los grupos etarios. a. No se presupone la hipótesis nula. b. Utilización del error estándar asintótico que presupone la hipótesis nula. c. No se puede calcular porque el error estándar asintótico es igual a cero. d. Se basa en la aproximación de chi-cuadrado e. Probabilidad de chi-cuadrado de razón de verosimilitud. Valor Error estándar asintóticoa T aproximadab Significación aproximada Grupos Etarios Lambda Simétrico .103 .037 2.598 .009 Grupo Etario dependiente .188 .069 2.598 .009 Somnolencia Diurna dependiente .000 .000 .c .c Tau Goodman y Kruskal Grupo Etario dependiente .095 .039 .040d Somnolencia Diurna dependiente .051 .036 .250d Coeficiente de incertidumbre Simétrico .093 .039 2.335 .037e Grupo Etario dependiente .089 .039 2.335 .037e Somnolencia Diurna dependiente .097 .038 2.335 .037e 60 Tabla 24. Medidas direccionales para valorar la asociación de la Somnolencia Diurna con el sexo de los pacientes en estudio. a. No se presupone la hipótesis nula.
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