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UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO FACULTAD DE CIENCIAS POLITICAS Y SOCIALES XÄ zÜtÇ wxáty •É wx Ät vtÑ|àtÄM Ät |ÇáxzâÜ|wtw (Reportaje sobre la disputa entre los delincuentes y los encargados del orden en el Distrito Federal) T E S I S QUE PARA OPTAR POR EL TÍTULO DE LICENCIADO EN CIENCIAS DE LA COMUNICACIÓN P R E S E N T A: eÉwÜ•zâxé V{öäxé i•vàÉÜ `tÇâxÄ Asesor (a): Ángel Colchado María Guadalupe 2007 UNAM – Dirección General de Bibliotecas Tesis Digitales Restricciones de uso DERECHOS RESERVADOS © PROHIBIDA SU REPRODUCCIÓN TOTAL O PARCIAL Todo el material contenido en esta tesis esta protegido por la Ley Federal del Derecho de Autor (LFDA) de los Estados Unidos Mexicanos (México). El uso de imágenes, fragmentos de videos, y demás material que sea objeto de protección de los derechos de autor, será exclusivamente para fines educativos e informativos y deberá citar la fuente donde la obtuvo mencionando el autor o autores. Cualquier uso distinto como el lucro, reproducción, edición o modificación, será perseguido y sancionado por el respectivo titular de los Derechos de Autor. A mis padres por su apoyo incondicional Agradecimientos A la profesora Ángel Colchado María Guadalupe Las orientaciones de los profesores (as) Adriana Solórzano Fuentes Arturo Guillemaud Rodríguez Vázquez Enriqueta Luna Velázquez Ignacio Valle Buendía Mario Ruiz Sotelo Rosalinda Sandoval Orihuela INDICE INTRODUCCIÓN…………………………………………………………………7 1 LA INSEGURIDAD EN EL DF………………………………………………13 1.1 Seguridad Pública. Definición……………………………………………13 1.2 Estadísticas y relevancia………………………………………………….14 2 PROVOCADORES DE LA CRIMINALIDAD…………………………..…21 2.1 Violencia y agresión.……………………………………………………...21 2.2 La situación económica, ¿perturbadora de la delincuencia?..................25 2.3 Las causas individuales…………………………………………………...28 2.4 La impunidad, solapando la criminalidad……………………………….30 3 LOS CUERPOS POLICIACOS……………………………………………...34 3.1 Policías delincuentes………………………………………………………37 3.2 Llegar a viejo en la SSP…………………………………………………...39 3.3 La Hermandad…………………………………………………………….45 3.4 Limpia en las corporaciones del DF…………………………………...…51 3.5 Las Fallas del a policía del DF……………………………………………53 3.6 Turnos de miedo en la SSP………………………………………………..58 3.7 Policías suicidas……………………………………………………………60 3.8 ¿Y los servicios médicos de la PBI………………………………………..63 3.9 Los riesgos de ser policía…………………………………………………64 3.10 “Y al cumplir con su deber, los arrestan”…………………….………66 3.11 Testimonios policiales………………………………………….……….71 4 CRUZADA NACIONAL CONTRA EL CRIMEN Y LA DELINCUENCIA…….74 4.1 Una policía de calidad……………………………………………………76 4.2 La participación ciudadana al rescate de la capital……………………82 4.3 Programas antidelincuencia……………………………………………..86 4.4 La gran marcha contra la inseguridad………………………………….94 CONCLUSIONES………………………………………………………………..98 FUENTES……………………………………………………………………….,105 Bibliografía……………………………..………………………………………..105 Hemerografía y referencias..……………………………………………………107 Documentos………………………………………………………………………121 ANEXOS………………………………………………………………………….123 ANEXO A………………………………………………………………………...124 Secretaría de Seguridad Pública> Misión y Valores………………………...124 ANEXO B………………………………………………………………………...142 Condecoraciones policiales…………………………………………………….142 Â_t Äâv{t vÉÇàÜt Ät |ÇáxzâÜ|wtw? vÉÇàÜt xÄ vÜ|ÅxÇ? vÉÇàÜt Ät wxÄ|ÇvâxÇv|t? xá âÇt Äâv{t wx àÉwÉá? Öâx xÇàÜx àÉwÉá ztÇtÜxÅÉá á| âÇ|ÅÉá ÇâxáàÜtá yâxÜétá? ÄÉá Åxå|vtÇÉá ÇÉ ÑxÜÅ|à|ÜxÅÉá Öâx xáàt Äâv{t Ät ztÇxÇ ÄÉá wxÄ|ÇvâxÇàxáA aÉ áxÜö yöv|Ä ÑÉÜ xÄ vÉÇàÜtÜ|É? àÉÅtÜö à|xÅÑÉ ç Åâv{É xáyâxÜéÉ ÂA XÜÇxáàÉ mxw|ÄÄÉ ;\i \ÇyÉÜÅx wx ZÉu|xÜÇÉ<A INTRODUCCIÓN Nos encontramos inmersos en un mundo de conceptos y palabras a través de las cuales podemos manifestarnos, mostrarnos, exteriorizarnos. Por medio de los diversos sucesos que giran a nuestro alrededor obtenemos información para fines materiales, espirituales, políticos o sociales los cuales dan la pauta en el desenvolvimiento de nuestras vidas. El periodismo proveé al hombre información que gira en su entorno satisfaciéndole esa necesidad de conocer qué sucede más allá de él mismo. Sin embargo sólo un género periodístico puede llegar al fondo de la noticia, revelar qué es lo que hay detrás de ella, sus causas y sus efectos: el reportaje. La palabra reportaje tiene su origen en la lengua francesa (reportage). Significa una comte rendu, información sobre un acontecimiento o viaje escrito por un periodista. Vivaldi completa: Reportaje, voz francesa de origen inglés y adaptada al español, proviene del verbo latino reportare, que significa traer o llevar una noticia, anunciar, referencia; es decir, informar al lector sobre algo que el reportero juzga digno de ser referido. 1 1 Martín Vivaldi, Géneros Periodísticos, Paraninfo, Madrid, 1973. Pág. 65. El reportaje es el más complejo de los géneros periodísticos en el cual se utilizan la documentación, la observación, la entrevista, la encuesta, los cuales, proveen a éste de un material abundante y sustancioso sobre el tema que se está tratando. Este género periodístico se utiliza para ampliar, completar, complementar y profundizar una Noticia; explicar un problema, plantear y argumentar una tesis o narrar un suceso. Investiga, informa, describe, entretiene o documenta sobre un hecho o acontecimiento. Un reportaje es un periodismo que no admite rectificaciones sustanciales, y aún menos desmentidos como afirman Vicente Leñero y Carlos Marín en su libro Manual de periodismo 2 , por el escrúpulo con que se escogen las fuentes que se manejan durante el proceso de la investigación, y el cuidado en su redacción; por ello, el uso de este género periodístico fue imprescindible para la realización de este trabajo. Esta tesis representa un esfuerzo que expone de una manera sencilla la serie de situaciones que se han dado, y se dan en el Distrito Federal, las cuales, originaron el elevado número de incidencias delictivas. La inseguridad existente a nivel nacional, no sólo en el DF, está extendiéndose como una especie de dominio sobre la sociedad, y, aunque ese dominio no se encuentra bien establecido, los ciudadanos ya sienten algunos “rasguños”. 2 Leñero Vicente, Marín Carlos Manual del periodismo. Grijalbo, México, 1986. Pág. 44. Desde hace ya algún tiempo se señalaron en los medios de información, a través de las numerosas notas periodísticas, las vinculaciones que existen entre bandos de robo y secuestro con altos mandos policíacos; también se han encontrado en algunas bandas delictivas personas que pertenecen o pertenecieron a corporaciones policíacas En la capital de la república mexicana, grupos de policías han sido desintegrados por realizar actos escandalosos para la sociedad, por ejemplo en el caso de los jóvenes desaparecidos en la colonia Buenos Aires 3 ; igualmente hace unos años estos “servidores públicos” no dejaron de ser noticia después de que tres jóvenes el 24 de julio de 1999, fueron abusadas sexualmente por un grupo de la policía montada en la delegación Tláhuac, entre ellas se encontraban dos menores de edad. La impunidad que existe a favor de los delincuentesprovoca de igual manera que éstos no tengan miedo de la impartición de justicia, pues, como se documenta en algunos casos, los Ministerios Públicos pueden tener gran culpa ya que existen ocasiones en que ni siquiera levantan las actas. En un caso de violación que se denunció en “A quién corresponda” (programa televisivo de Televisión Azteca), el Ministerio Público no integró el acta correspondiente supuestamente porque el presunto agresor no había sido detenido en flagrancia. Los delitos que día a día ocurren en la capital nos condujo a realizar una investigación periodística en donde queríamos presentar, en un principio, el por qué los índices de delincuencia, centrándolo en aspectos de índole psicológica, pero con la investigación se fue descubriendo que el problema es mucho más complicado y tiene numerosas vertientes. 3 El 8 de septiembre de 1997 seis jóvenes fueron detenidos por elementos de la Secretaría de Seguridad Pública en la colonia Buenos Aires del DF; posteriormente tres de ellos fueron encontrados muertos cerca de unas minas en Tláhuac y los restantes de igual suerte poco después en el Ajusco, al sur de la capital. Así por medio de este género periodístico se expone un trabajo con el objetivo primordial de informar y dar a conocer hechos significantes que en mucho entorpecen el concepto de Seguridad Pública en el Distrito Federal. Esta investigación periodística detalla los hechos que se dan alrededor de los elementos de la Secretaría de Seguridad Pública del DF, quienes a pesar de que no cuentan con los recursos técnicos y materiales para realizar su trabajo, día a día arriesgan sus vidas para resguardar nuestra seguridad. La estructura del Reportaje da la factibilidad de exponer el hecho en todas sus dimensiones, en este caso específico las limitaciones técnicas y humanas que han dado pauta para que no pueda hacerse frente a la delincuencia, exponer circunstancias que entorpecen la labor policíaca y buscar una alternativa. Por ello, la hipótesis de partida fue que estos hechos eran propiciados y solapados por las deficiencias de la policía con la que cuenta la Ciudad de México. Esta visión maniqueísta 4 de los grupos de seguridad fue en gran parte ocasionada por los medios informativos, debido a que en un tiempo los noticiarios de televisión abierta de nuestro país tomaron como tema imprescindible la policía del DF, en hechos de robo, corrupción, secuestro, etc., de una manera generalizada. En ese momento era más importante “denunciar” a un “mal” elemento al cual otorgaban un buen “espacio” en sus noticieros que “mostrar” o “reconocer” el “buen” acto o “caída” de un policía en cumplimiento de su deber. Sin embargo últimamente ya salieron a “flote” algunas de las carencias con las que “cuentan” nuestras corporaciones policíacas. El tratamiento noticioso de los 4 Maniqueísmo. Visión de la realidad reducida a dos principios opuestos, especialmente el bien y el mal. Diccionario de la lengua española, editorial Larousse. 1994. hechos positivos son abordados de una manera “vaga” y poco profunda y con menos tiempo, en comparación con el número de notas adversas, es por ello que en este trabajo se encuentra enfocado en los elementos de la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal, mostrando sus carencias y limitaciones contra la delincuencia en la Ciudad de México. Los policías preventivos en numerosos casos no tienen la capacitación para la utilización de armamentos, no transmiten seguridad a la población y tampoco tienen el respeto del pueblo por la idea generalizada de que un policía es sinónimo de corrupción. Los integrantes de los cuerpos policíacos se enfrentan a un gran reto: deben responder a una formación académica, tener ética profesional, deben sentirse orgullosos de ellos mismos en cuanto a la realización de su trabajo y recuperar esa dignidad que ya han perdido. Estos aspectos también son tratados de manera colateral en el presente trabajo. Por ello, es necesario crear condiciones indispensables para que los elementos que se encuentran dentro de las corporaciones policiacas realicen su trabajo de manera eficaz y correctamente, y que de ello dependa de una manera decorosa su bienestar y el de su familia. Es preciso verificar de qué manera las prestaciones sociales, económicas y legales afectan el trabajo de los policías preventivos del DF., para el desempeño de su labor. Acabar con la delincuencia que prevalece en el país no es una tarea fácil, pero es un objetivo primordial que se puede alcanzar con ayuda de todos. La lucha contra la inseguridad, contra el crimen, contra la delincuencia, es una lucha de todos, que entre todos ganaremos si unimos nuestras fuerzas, los mexicanos no permitiremos que esta lucha la ganen los delincuentes, no será fácil por el contrario, tomará tiempo y mucho tiempo. Ernesto Zedillo (IV informe de Gobierno). El siguiente trabajo está compuesto por cuatro secciones que muestran, que la inseguridad no tiene una sola cara y lo que es más aún, que los responsables de la Seguridad se enfrentan a problemáticas individuales y sociales, además de los delincuentes. En la primera parte se muestran los índices y estadísticas delictivas en el DF de 1998 hasta abril del 2005; en la segunda se exponen algunas de las causas que conducen a la criminalidad; éstas van desde los desórdenes psicológicos aunados a las condiciones económicas. En el tercer capítulo se hace un breve análisis de las corporaciones policíacas y los cambios que se requieren dentro de ellas para contar con una policía de calidad la cual pueda hacer frente a la delincuencia. Dentro del último capítulo, se muestra la campaña que realiza el gobierno para hacer el alto total a la oleada de inseguridad que se vive en el país y no sólo en la capital de la república, en donde la participación ciudadana es de suma importancia. WxuxÅÉá twÅ|à|Ü xÇ Ät áxzâÜ|wtw ÑØuÄ|vt? ÄÉá gÜxá cÉwxÜxá wx Ät hÇ|™Ç ç ÄÉá gÜxábÜwxÇxá wx ZÉu|xÜÇÉ? Äx {xÅÉá ytÄÄtwÉ t Ät v|âwtwtÇ•tÊA XÜÇxáàÉ mxw|ÄÄÉ (IV Informe de Gobierno) 1 LA INSEGURIDAD EN EL DF El 94% de los delitos sin resolver 1.1 Seguridad Pública. Definición La palabra seguridad proviene del latín securus –sine eura- que quiere decir ciudadano “calidad de seguro”, definido como “libre y exento de todo peligro, daño o riesgo”, establecida así en el diccionario de la Real Academia; seguridad es una palabra que oímos comúnmente en el Distrito Federal, sin embargo, a ella le anteceden dos letras la mayoría de las veces “I” y “N”. El miedo o temor a ser víctima de un delito es un sentimiento de inseguridad que angustia a la mayoría de los ciudadanos cuando la seguridad que ofrecen las autoridades ha sido rebasada. De acuerdo con la definición propuesta en el libro de Samuel González Ruiz, Seguridad Pública en México1, la función del Estado en materia de seguridad pública se ejerce en: ...la protección que se genera a través de los mecanismos de control penal, y del mantenimiento de la paz pública, mediante acciones de prevención y 1 González Ruiz Samuel, et.al. Seguridad Pública en México, (Serie Justicia), UNAM, México 1994. 13 represión de ciertos delitos y faltas administrativas que la vulneran particularmente a través de los sistemas de procuración e impartición de justicia y de los sistemas de policías preventivos. 1.2 Estadísticas y relevancia La seguridad pública ha sido rebasada en la capital del país por los índices delictivos. Según datos de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF)2: - El 94% de los delitosquedan sin resolver en la ciudad de México. - Existe un delito cada dos minutos y de las 500 órdenes de aprehensión diarias, sólo 100 presuntos delincuentes quedan en los reclusorios. - 80% de los delitos son de tipo patrimonial. La Presidenta de la Comisión de Equidad y Género de la Asamblea Legislativa, la diputada local Lucero Márquez Franco, en conferencia de prensa el 21 de agosto de 1998 dijo que en los primeros seis meses de ese año “la procuraduría de justicia capitalina recibió tres mil denuncias por el delito de violación” y mencionó que el 60% de ellas fueron contra menores de edad. Este tipo de delitos ocurre uno cada seis minutos.3 Quien fuera el Vicepresidente de la Comisión de Seguridad Pública de la Asamblea Legislativa en ese entonces Víctor Manuel Soto Camacho, tras un año de 2 Programa: “Reporte especial: Contra la delincuencia” 3 Raúl Llanos y Juan Antonio Zúñiga. “De tres mil violaciones reportadas este año, 60% contra menores”. La Jornada. México, 21 de agosto de 1998, p. 61. 14 trabajo, con fuentes de altos mandos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) y de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal, presentó en 1998 un Atlas delictivo de la Ciudad de México, en donde reveló que hay 750 bandas de hampones, integradas en general por 20 mil delincuentes, (datos reafirmados en el artículo “Encerradas en sus casas por miedo a la delincuencia”4), es decir, hay un delincuente por cada 2.77 manzanas. Ahí mismo dijo que “la mayoría de estas bandas son protegidas por altos mandos policíacos y judiciales”. De acuerdo a estadísticas oficiales y datos aportados por criminalistas, como Rafael Ruiz Harrell, se afirma que, entre 1980 y 1996, el número de presuntos delincuentes creció 14%, mientras que la población aumentó poco más de 2%. Por tal motivo puede deducirse que en México la delincuencia registrada crece siete veces más rápido que la población.5 Debido a los altos índices de delincuencia que no han podido ser controlados, de las 55 mil manzanas que existen en el Distrito Federal, aproximadamente 7 mil de ellas han sido bloqueadas con rejas, plumas o jardineras para evitar que personas extrañas “visiten” la comunidad. Las delegaciones con más alto índice delictivo como las de Iztapalapa, Coyoacán, Gustavo A. Madero, Miguel Hidalgo y Álvaro Obregón de acuerdo con la PGJDF y la SSP, son las jurisdicciones con mayor número de calles cerradas. La cifra de los delitos es alarmante de acuerdo con los datos aportados por la encuesta realizada por el Comité Nacional de Consulta y Participación de la 4 Martha Martinez. “Encerradas en sus casas por miedo a la delincuencia” http://www.cimacnoticias.com/noticias/03abr/03042107.html 5 Ricardo Ravelo “El gobierno de Fox, ineficaz contra el crimen”, Proceso, núm.: 1272, México, 18 de marzo 2001, Pág. 11. 15 Comunidad en Seguridad Pública (CONSEGU); el 34 por ciento de la población fue víctima de algún hecho delictivo durante el año 2000.6 En la ciudad de México una de cada tres personas fue víctima de un hecho delictivo durante transcurso del año 2000, según los datos aportados por la encuesta realizada a dos mil personas por el CONSEGU. “Según los resultados de la encuesta levantada entre el 7 y el 1 de octubre, poco más de la mitad de quienes fueron víctimas de la delincuencia sufrieron la agresión en la vía pública”. Con financiamiento del CONSEGU, organismo en el que participan la Confederación Patronal de la República Mexicana (COPARMEX), la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (CANACINTRA), la Confederación de Cámaras Industriales de los Estados Unidos Mexicanos (CONCAMIN), la Arquidiócesis de México entre otras instituciones, la encuesta obtuvo, que en las delegaciones Iztapalapa y Gustavo A. Madero existe un mayor riesgo de ser blanco de algún hecho delictivo entre las 20 y las 22 horas de los viernes. ÍNDICES • 34% de la población ha sido víctima de algún delito. • 91% robo o asalto. • 72% a transeúnte. • 53% en vía pública. • 16% los viernes. • 17% entre las 20:00 y las 22:00 horas. • 47% jóvenes. • 73% no reporta el delito. • 36% considera que es pérdida de tiempo. • 95% no recibió apoyo de las instituciones especializadas. • 15.5% Iztapalapa. • 13.4% Gustavo A. Madero. Metodología: 2 mil entrevistas que representan conjunto para el DF. Fuente: El , “Víctimas del delito, una de cada tres personas…”, Con la encuesta se pretende aportar herramientas e investigación empírica en materia de seguridad pública, además “se busca exponer a la opinión pública las cifras ocultas del delito para que en forma conjunta se tomen las medidas oportunas 6 “Víctimas del delito, una de cada tres personas en el DF.”, SUN, El , Secc Ciudad 17 de noviembre del 2000, Pág. 6. 16 en el combate a la delincuencia”, afirmó la presidenta del CONSEGU, María de la Luz Lima. La Encuesta Nacional sobre Seguridad Pública realizada en los estados de Chihuahua, Guadalajara, Mazatlán, Mérida, México, Puebla, Querétaro, y Villahermosa; por la Unidad de Violencia Social del Instituto de Investigaciones Sociales (UVSIIS) de la UNAM en el año 2000, arrojó como resultado que “el incremento de la delincuencia en México se debe a la falta de empleo, pérdida de poder adquisitivo y bajo nivel escolar en la población”7, asimismo de acuerdo con la opinión de los entrevistados los delitos que más ocurren son “el robo o asalto sin violencia en vía pública, en el hogar y el transporte público.” La misma encuesta resaltó que los delitos no se denuncian por “la pérdida de tiempo en las agencias del Ministerio Público, porque no detienen a los delincuentes, por trámites muy largos y, principalmente, por la desconfianza a las autoridades”. De acuerdo con la Encuesta Nacional sobre Victimización y Percepción de la Seguridad elaborada por la Unidad de Violencia Social (UVIS) del Instituto de Investigaciones Sociales de la UNAM, en el mismo año, el “69 por ciento de los delitos cometidos en México no son denunciados”. Esos fueron los resultados que dieron a conocer el coordinador de la UVIS René Jiménez Ornelas y el representante del Comité Académico Sergio García Ramírez, de acuerdo con la encuesta realizada a cuatro mil 617 domicilios en el país. Entre las principales causas para no denunciar los delitos, se encuentran “la 7 Chavarría Mónica. “El desempleo y falta de economía, factores importantes en el aumento de la delincuencia” http://www.cimac.org.mx/noticias/00oct/00103005.html. 17 desconfianza en la autoridades, por miedo a represalias por parte de los agresores o por que los afectados consideran que solo pierden su tiempo.”8 En una visita realizada a el diario EL UNIVERSAL, el Secretario de Seguridad Pública, Leonel Godoy, reconoció que el 70% de los delitos que se cometen en el DF, no se denuncian y que el crimen organizado se ha desarrollado enormemente por lo que evoluciona más rápido que las leyes, por tanto, “la mejor arma que puede tener la policía es una norma jurídica moderna”.9 Debido al aumento de crimen organizado, la autoridad requiere de leyes modernas, acordes a la realidad que otorguen más facultades a la policía y a la población, eliminen el monopolio del Ministerio Público en la acción penal, contemplen penas alternativas y permitan la persecución de delitos sin importar si son del fuero federal o común. El encargado de la seguridad en el área capitalina también afirmó en el artículo mencionado, que la sociedad reclama policías que no sólo patrullen las calles de la ciudad, sino que también, tengan la capacidad de detectar al delincuenteen su modus operandi y lo presenten ante las autoridades competentes. Ya para el 2003 otra encuesta realizada por la Facultad de Psicología de la misma universidad, en donde se entrevistaron a 460 personas, destacó que “el 76 por ciento de las personas que han sido víctimas de un delito no presentan denuncia” aunque el 100% de los entrevistados declararon sentir impotencia y coraje10. 8 Correa Raúl. “No se denuncia 69 por ciento de los delitos que se cometen”. http://www.unam.mx/gaceta/2000/nov00/06nov00/06novgac.html#BG 9 “Urge Godoy reformar leyes”, El , SUN, México, 30 de julio del 2001, Pág. 17. 10 Martha Martínez. “Encerradas en sus casas por miedo a la delincuencia”. www.cimacnoticias.com/noticias/03abr/03042107.html 18 El siguiente cuadro presenta el promedio diario total de delitos denunciados de 1998 hasta abril del 2005. 199 8, 6 51.5 1 199 9, 6 22. 5 200 0, 4 82. 92 200 1, 4 69.7 8 200 2, 4 87.9 2 200 3, 4 73.5 200 4, 4 43.9 5 Abr -05 , 42 5.2 0 100 200 300 400 500 600 700 Promedio diario de delitos denunciados 1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 Abr-05 Fuente: http://www.pgjdf.gob.mx/estadisticas/totaldelitos.php Promedio diario de delitos denunciados durante los tres últimos periodos de gobierno en el Distrito federal por modalidades. 653 .99 585 .64 470 .6 2.9 8 2.3 4 2.0 7 155 .59 124 .9 95. 93 3.7 9 3.7 1 3.4 8 0 100 200 300 400 500 600 700 Denuncias diarias Homicio doloso Robo de vehículo Violación Oscar Espinoza Cuauhtémoc C-Rosario R Andrés M. López 19 22.6 2 21.0 3 18.7 7 53.7 6 40.7 9 35.0 6 78.1 107 .79 58.5 8 62.8 43.6 7 25.7 4 0 20 40 60 80 100 120 Robo a casa-habitación Robo a negocio Robo a transeunte Robo a transporte Oscar Espinoza Cuauhtémoc C.-Rosario R. Andrés M. López Fuente: http://www.pgjdf.gob.mx/estadisticas/indexpp.php Desde 1998 hasta el mes de abril del 2005 de acuerdo con los datos de la PGJDF los índices delictivos han disminuido, sin embargo, esto podría tener dos explicaciones contrastantes: la primera, que la efectividad de la policía ante la delincuencia ha provocado que los maleantes desistan de sus fechorías; la segunda, que la falta de credibilidad ante las instancias policiacas ha provocado que los ciudadanos se abstengan de levantar las actas respectivas ante alguna agresión o robo, principalmente por la pérdida de tiempo y por las represalias que se pudieran suscitar. A ello también se puede sumar la corrupción que se da en los ministerios públicos o los “arreglos” que se dan antes de llegar ante esta instancia entre policías y maleantes. 20 5XáàtÅÉá vÉÇäxÇv|wÉá wx Öâx àÉwÉá ÄÉá xáyâxÜéÉá Öâx áx {tztÇ ÇÉ áxÜöÇ áây|v|xÇàxá? á| ÇâxáàÜtá ÑÉÄ•à|vtá ÇÉ xáàöÇ utátwtá xÇ Ät ÑÜxäxÇv|™Ç áÉv|tÄ wxÄ wxÄ|àÉ ç xÇ Ät ÑtÜà|v|Ñtv|™Ç v|âwtwtÇtÊ _xÉÇxÄ ZÉwÉç etÇzxÄD 2 PROVOCADORES DE LA CRIMINALIDAD Un delito es un hecho prohibido por la ley o la moral; un delincuente es toda persona que inflinge estas reglas o normas, es un sujeto antisocial, el cual no respeta las normas de convivencia pacífica entre los hombres; sin embargo, la idea de un delito puede presentarse en la conciencia de cualquier persona en algún momento de su vida, basta con reflexionar un poco. La diferencia entre un delincuente y una persona honrada, es, que en la mente de una persona honrada esta idea es rechazada, mientras que en el delincuente, se arraiga y se aumenta hasta el consumo del delito. 2.1 Violencia y agresión Las conductas violentas y agresivas han llegado a ser parte “resaltante” de nuestra sociedad y las podemos ubicar en cualquier nivel social. Están íntimamente 1 “Requiere el DF reforma en seguridad y justicia: Godoy”, SUN, El , Secc. Ciudad, México, 6 de marzo del 2001, pág. 6. 21 vinculadas y psicológicamente, son definidas: Violencia. Acción destructiva contra las personas o propiedades. Agresión. Cualquier comportamiento que pretenda dañar a alguien o a algo. De acuerdo Diane E. Papalia y Rally Wendkos Olds en el libro Psicología2, la agresión es cualquier tipo de comportamiento destinado a dañar a alguien o algo que nos rodea. Esta agresividad a menudo explota en violencia, una acción destructiva destinada a personas y propiedades. Otras veces el impulso agresivo se limita a la rivalidad, a ataques verbales u otras expresiones de hostilidad sin llegar al daño físico. Diversos científicos han dado varias explicaciones del comportamiento agresivo: tendencias heredadas, resultados de la experiencia y el aprendizaje y una mutua interrelación de estas dos fuerzas principales. Al parecer, los seres humanos nacemos con una predisposición a ser agresivos y luego aprendemos en qué momento podemos expresar esta tendencia y en qué momento vedarla. Sociobiólogos, como David P. Barash, sugieren que la agresividad constituye un comportamiento adaptativo que se ha desarrollado a lo largo de la evolución. Los animales amenazan o atacan a otros animales cuando compiten por “algo” como: el alimento, el espacio o una hembra, cuando sienten dolor o están incómodos, esas reacciones, no son exclusivas de los animales, a menudo, los seres humanos se muestran agresivos en circunstancias similares. Korand Lorenz, etólogo (científico estudioso del comportamiento animal en su entorno natural), ha sugerido que el instinto agresivo existe en todos los animales, 2 Diane E. Papalia y Rally Wendkos Olds, Psicología, Primera Edición en Español, McGraw-Hill, México. 1995. Págs. 338-340. 22 incluidos los seres humanos, como un característica inevitable y genéticamente determinada. El antropólogo J. Robin Fox señala que los seres humanos están “programados para” la agresión y este impulso constituye una parte esencial del funcionamiento del organismo, que siempre está presente; puede “encenderse” con facilidad, pero que también puede “apagarse” si se interfiere con otro objetivo. Sin embargo, el hecho de que algunas culturas y algunos individuos en cada una de ellas muestren diferencias en el grado de agresividad, sugiere que, aunque hubiéramos heredado una tendencia agresiva, existen factores que determinan hasta qué extremo puede llevarse ese comportamiento. Existen numerosas investigaciones donde se argumenta la base biológica de la agresión o por lo menos la predisposición a ella. A decir de Moyer K. E., ciertas estructuras cerebrales por ejemplo, se encuentran involucradas en la regulación de la agresión o los diferentes tipos de agresión, como la ira, el ataque, los comportamientos depredadores y el defensivo. De igual forma, se han relacionado diversas hormonas y sustancias químicas cerebrales se han relacionado también con la agresión. Una de ellas es la hormona masculina, conocida como testosterona. Maccoby y Jacklin afirman que entre los seres humanos, como la mayoría de las especies animales, los machos son, por lo general, más agresivos que las hembras. En un estudio realizado por Kreutz y Rose sobre jóvenes delincuentes, los que tenían una historia de crímenes violentos y agresivos contaban con niveles de testosterona más elevado que los de historial menos violento. Son muchas las circunstancias que pueden llevar a una persona a delinquir, estas causas en cierta forma marcan al sujeto para que en cualquier momento pueda salir el afán de cometer un ilícito. La conducta criminal en sus causas, según Raúl 23 Carranza y Trujillo, en su libro Principios de sociología criminal y derecho3 se puede clasificar en tres grupos: 1. Las causas individuales o que se constriñen al sujeto delincuente, particularmente por su constitución, herencia, temperamento y carácter, edad, sexo, salud o enfermedad,ocupación. 2. Las causas naturales, el factor físico, clima, estaciones, topografía, latitud, altitud, cercanía o lejanía del mar. 3. Las causas sociales que comprenden densidad de población, condiciones económicas desde los puntos de vista de miseria, riqueza y lujo, ciudad y campo, instrucción y educación, religión, alcoholismo, vagancia y mendicidad, moral sexual, moral pública, organización, origen legítimo o ilegítimo. Otro aspecto determinante lo constituye el ámbito hogareño ya que influye de muchas maneras dentro de la constitución de las personas; su formación e incluso su condición social; la forma de orientación de padres a hijos, sus limitaciones económicas, pueden contribuir a que el niño no sea socialmente adaptado, “...el más enérgico esfuerzo de adaptación social, lo recibe el niño en el hogar y si ahí le falta el impulso de adaptación, será muy probablemente para siempre un social inadaptado...” reafirma el jurista Carranza y Trujillo. En ésta, la “Ciudad de la Esperanza” la participación de menores de edad en actos delictivos llegan a sumar en promedio 14 delitos al día (2.9% del total de delitos), según datos de la PGJDF. Siendo el robo de vehículos, los asaltos a comercios y transeúntes y la portación de arma prohibida las más reiteradas. 3 Carranza Raúl y Trujillo Principios de Sociología Criminal y Derecho Escuela Nacional de Ciencias Políticas y Sociales, Méx. 1955, págs. 79-80. 24 De acuerdo con estas estadísticas, según el artículo “Aumenta participación de menores en crímenes”4, “tan sólo en el primer bimestre del año 2000, 870 menores de entre siete y 17 años participaron en un ilícito, lo que representa un ligero incremento en los meses de enero y febrero del año 2000, cuando esta cifra llegó a los 866, aunque en general no hay un cambio considerable en esta tendencia.” La utilización de armas blancas y de fuego, aumentó considerablemente en los primeros cuatro meses del 2001 en relación al año antecesor, según los datos de la PGJDF, hubo un aumento de hasta 300% en los detenidos por este ilícito; en el 2000 “fueron detenidos 57 menores, de entre 7 y 17 años, por portación de arma prohibida”; ya para el 2001, 192 menores fueron aprehendidos en el mismo periodo. “Este fenómeno ha generado que en delegaciones como Iztapalapa la delincuencia juvenil se haya recrudecido pues 50% de los delitos violentos son consumados por menores de edad armados, reveló Federico Piña, coordinador de Seguridad Pública de la demarcación...” según el artículo “Aumentan casos de jóvenes y niños armados.”5 2.2 La situación económica, ¿perturbadora de la delincuencia? El hombre desde su nacimiento se encuentra íntimamente ligado al factor económico, éste va a ser determinante en el desenvolvimiento de su personalidad y de sus relaciones. 4 Aumenta participación de menores en crímenes, SUN, El , Secc. Ciudad, México, 28 de marzo del 2001, pág. 6. 5 Aumentan casos de jóvenes y niños armados, SUN, El , Secc. Ciudad, 24 de mayo del 2001, pág 4. 25 Cuando existen condiciones económicas favorables en un país se ha detectado la baja en los índices delictivos; sin embargo, cuando las condiciones son negativas, se da una alta en los delitos contra la propiedad, tales como: las lesiones y homicidios, robos, contrabando, injurias y amenazas. En el siguiente cuadro se muestra el porcentaje de internos en las cárceles del Distrito Federal por tipo de delitos. Población interna por tipo de delito Delitos contra la propiedad Delitos violentos Tráfico de drogas Otros* Total DF 33% 50% 6% 11% 100% • Incluye delitos sexuales, de cuello blanco y otros • Fuente: Encuesta en prisiones, Centro de Investigación y Docencias Económicas (CIDE), 2002.6 La situación económica del país puede ser una de las grandes provocadoras de que haya una mayor incidencia delictiva. En el programa televisivo Contra la delincuencia Alejandro Gertz Manero declaró “...desde el momento en que una situación económica cambió en la ciudad, y en todo el país, nosotros vemos en los niveles de incidencia delictiva, que las grandes crisis económicas han traído un disparo muy grande de la delincuencia en México.”7 Foto: El , 18 de mayo del 2001,pág. 4 6 El Sistema Penitenciario Mexicano, Elena Azaola y Marcelo Bergman, http://repositories.cdlib.org/cgi/viewcontent-cgi?article=1018&context=usmex 26 La difícil situación que viven las personas de clase humilde, la cual cada vez va en mayor incremento, puede ser generadora para que algunas personas dentro de este status recurran a los ilícitos, ya que es mayor el número de delitos concernientes a la propiedad. “El dato estadístico mexicano acusa que el más alto índice de delincuencia contra la propiedad lo dan las personas de clase humilde del pueblo” 8. La delincuencia de parte de las clases sociales “medias” y “altas” tiende a ser menor en las estadísticas, ya que ellas no tienen urgencias económicas, sin embargo también cometen delitos, la forma de delinquir en estas clases es muy diferente. El presidente de la Comisión de Seguridad Pública de la Asamblea de representantes del Distrito Federal (ARDF), Pedro Peñalosa, en entrevista realizada por la revista Nuevo Siglo9 , comentó: ...las cifras escalofriantes en los delitos denunciados se quedan cortas ante las no denunciadas, pero la inseguridad no es un problema estadístico, sino de una realidad agravada por las políticas económicas, que generan condiciones de seudo-servidumbre medieval y cierran la puerta a la esperanza de una vida sustentable... Estudiando los fenómenos delictivos se puede ver que los índices están directamente relacionados con niveles socio-económicos o con la actividad comercial. De acuerdo con un estudio realizado por la Procuraduría del DF, las delegaciones: Azcapotzalco, Miguel Hidalgo y Gustavo A. Madero, son las que mayor número de asaltos a transeúntes registran, además estas delegaciones cuentan con el 90% de las industrias de la ciudad y colindan con Naucalpan y Tlalnepantla, dos de los municipios más importantes en cuanto a industria a nivel nacional. “De allí que en los distintos paraderos de autobuses, en las puertas de bancos y cajeros 7 Programa: “reporte especial: contra la delincuencia”. TV Azteca, México, 5 de septiembre de 1998. 8 Raúl Carranza y Trujillo op.cit. p. 103. 9 “Seguridad por cuenta propia”, Martha Juárez, Nuevo Siglo, México 1996. Secc. Megalópolis, Núm. 233, p. 11. 27 automáticos, entradas y salidas del Metro, fondas, bares y cantinas, coloniales y unidades habitacionales, proliferan bandas dedicadas al asalto a mano armada”.10 Uno de los grandes factores que provocan la delincuencia se encuentra aquí. “Desde un punto de vista general, o sea mirando las causas generales de la delincuencia, las estadísticas revelan la influencia del factor económico en la conducta criminal, mediante los siguientes aportes: carencia de los artículos de primera necesidad, mala alimentación, pobreza...”, según Carranza y Trujillo.11 Las personas que se encuentran entre las clases “privilegiadas” en su ambición por tener un mayor número de riquezas; ya sea por sus relaciones personales, estilos de vida o el libertinaje, tienden regularmente a caer en delitos específicos tales como: la usura (prestamos con intereses excesivos), la falsificación, el fraude, delitos contra la moral o las buenas costumbres (contrabando, tráfico de drogas, redes de prostitución, piratería, etc.) 2.3 Lascausas individuales Las causas individuales que provocan la realización de delitos son muy diversas, pero aun así no se puede hablar de un sólo tipo de delincuentes. De acuerdo con la Enciclopedia de pedagogía / psicología12 es muy difícil clasificar a los delincuentes ya que existe una gran variedad, sin embargo para efectos de esta investigación sólo se exponen los principales grupos: 10 “Delitos a la carta, la geografía de la violencia en el DF.”, Fernando Ramírez de Aguilar, El Financiero, México, 25 de octubre de 1998, p. 10.) 11 Raúl Carranza y Trujillo, op.cit. p. 109. 12 Enciclopedia de Pedagogía / Psicología Primer Volumen, Ediciones Trébol, Barcelona 1997, pág. 159. 28 1) Normales. Son generalmente ocasionales y suelen cometer faltas más que delitos. Su normalidad es física y psíquica. Han sido educados como corresponde y pertenecen a familias bien constituidas. Caen en el delito incidentalmente y casi siempre por ignorancia, por un ambiente desfavorable, o por necesidades momentáneas. El pronóstico de la readaptación social es favorable. 2) Enfermos orgánicos. Se incluyen en este grupo los enfermos mentales, que en los grados más agudos son completamente irresponsables. Su tratamiento de pronóstico pesimista, corresponde al psiquiatra. Dentro de este grupo, pero diferenciándoles pueden incluirse los neuróticos, en los cuales la coincidencia es clara, y la capacidad de discernimiento, normal, pero la motivación delictiva obnubila la coincidencia, con lo que se atenúa su responsabilidad. Generalmente cometen un sólo delito; y si reinciden, lo reproducen. El pronóstico no es tan pesimista y el éxito se consigue si los sujetos son sometidos al adecuado tratamiento. 3) Los difíciles. Son los propiamente antisociales. Encontramos entre ellos una variadísima gama, cuya única nota común es la inexistencia del súper-yo, la inefectividad total. Estos sujetos aunque intelectualmente pueden ser normales, resultan difícilmente reeducables –de aquí su nombre-, el pronóstico de readaptación es pesimista. 4) Los amorfos. Constituyen la gran mayoría de los delincuentes. Son sujetos débiles, poco desarrollados en lo intelectual y en lo afectivo. Tienen rebajado el nivel de aspiración, debilitado el juicio moral y el súper-yo13. Se caracterizan por una inmadurez social, que los hace parecer y ser realmente niños. A pesar de su gran variedad tienen un fondo común, que los asemeja entre sí: la frustración de la personalidad, no sólo en lo psíquico, sino también en lo morfológico. Tal vez por ello rehuyen sistemáticamente todo esfuerzo. 13 Enciclopedia de pedagogía / psicología (1997). Súper-yo. (Lat. super. sobre / yo). En el psicoanálisis parte del inconsciente de la personalidad que aparecería en el niño después del rechazo en el inconsciente de sus tendencias instintivas (pulsiones), en particular de su unión sexual con la persona de sus padres (complejo de Edipo). Sería una especie de censura acusadora que inspiraría el sentimiento neurótico de culpabilidad y de autopunición (Lat. aytós. uno mismo / Lat. punire. castigar). 29 Son recuperados en parte con un tratamiento apropiado, aunque siempre es de temer la reincidencia, dadas las notas distintivas de su modo de ser”. 2.4 La impunidad, solapando la criminalidad Tal vez los mismos ciudadanos tienen mucho que ver con los altos índices delictivos, ya que no se tiene la conciencia de denunciar, en algunos casos por la pérdida de tiempo que puede costar levantar un acta o simplemente porque no se confía en la impartición de justicia. Según estadísticas oficiales el 80% de los delitos realizados en el DF son: asaltos a comercios, casas habitación, repartidores de mercancía y transeúntes, al igual que las lesiones intencionales. Sin embargo el número de denuncias está muy lejos de la realidad, la ciudadanía en muchos casos tiene miedo de denunciar por temor a represalias. De acuerdo con el Instituto de Investigación Sociológica de la UNAM el 69% de los delitos a nivel nacional no son denunciados por el temor de las víctimas a represalias por parte de los agresores, la desconfianza en las autoridades y por la pérdida de tiempo. A las posibles represalias se suma el “castigo” aplicado a los transgresores pues, como afirma Eduardo López Betancourt14, da lo mismo caer en la cárcel por robo o por asesinato: 14 “La pena de muerte no detendrá la delincuencia”, Enrique Bustamante Martínez, Nuevo Siglo, Año 5. Núm. 212, marzo de 1996, p. 9. 30 Es impresionante el actual Código Penal, lo mismo se refiere a un delito insignificante de acoso sexual castigado con una sanción económica, que al delito de violación, el de homicidio, plagio y el del secuestro, lo cual es absurdo. En el Código Penal deben estar las figuras que causan daños sociales. Debemos trabajar por un nuevo Código Penal, un nuevo Código de Procedimientos Penales en el cual la imposición de sanciones sea rápida y no se tarden meses para saber cuál es la sanción que se le impone a una persona. La justicia en México se convirtió en un sistema, el cual en vez de seguir al delito mismo sólo ha castigado en mayor medida a la pobreza. El ex presidente Ernesto Zedillo mencionó alguna vez que las artimañas legales y la justicia lenta “día a día facilita a personas tan turbias que roban millones de dólares a los ahorradores mexicanos, se exhiben públicamente, sonrisa de por medio en los `mejores´ lugares de la sociedad mexicana e internacional sin el mayor pudor y, sobre todo ante la `incapacidad´ de nuestras autoridades. En tanto un juez condena a un miserable a ocho años de cárcel por intentar robar comida de un supermercado”.15 Quienes cuentan con las posibilidades económicas muchas veces tras algunos “pagos” pueden seguir en su vida cotidiana aunque hayan realizado un ilícito, como indica Raúl Carranza.16 “...es bien sabido que la potencialidad económica de las clases poseedoras de la riqueza les permite transitar a lo largo del Código Penal sin quedar prisioneros de sus páginas, ya mediante hábiles defensas profesionales, y/o mediante extralegal “composición” que satisface económicamente a los 15 “La crisis de la credibilidad en nuestras instituciones de justicia” Adriana Valdés Krieg, Uno más Uno, México, 28 de agosto de 1998, p. 6. 16 Raúl Carranza y Trujillo, op. cit. 110. 31 ofendidos y los hace silenciar sus agravios; ya mediante la complacencia de las autoridades obtenida por precio” En los 447 centros penitenciarios del país no se encuentran encarcelados los delincuentes que han cometido los delitos más graves en su mayoría, sino los más pobres, quienes no han contado con suficientes recursos económicos o los llamados “conectes”( personas que pueden influir en hechos determinados). Los Ministerios Públicos son en gran parte los provocadores de que las personas no denuncien los delitos y que los policías no remitan en ocasiones a los delincuentes debido a que son lentos y en algunos casos no levantan las actas, lo que provoca que en la mayoría de las veces los delincuentes queden libres. “…sobre la atención que se da es variable. Como ustedes saben existen en el Distrito Federal varias agencias de ministerio público, y digo que es variable porque en ocasiones algunas de estas agencias están saturadas de trabajo, o como suele suceder en distintos lugares, encuentras empleados que cumplen con sus obligaciones y procuran abreviar la puesta a disposición –ingreso del presunto delincuente- y en otras ocasiones encuentras personal déspota que te ponen trabas diciéndote que no hay sistema en las computadoras o que esel cambio de turno y te puedes tardar en esa puesta desde las seis de la tarde hasta las 4 o 5 de la mañana del otro día.”17 La mala actuación que se da en los Ministerios Públicos es tal hasta en casos de homicidio, claro ejemplo es referido en el artículo “Indignados, familiares de policía muerto”18. Este es un caso en donde un policía preventivo del agrupamiento de grúas después de ser ultimado y tras la captura del presunto homicida, éste fue liberado ya que sólo fue enviado a prisión por el delito de cohecho. “Parece una burla en la que podría haber corrupción o una ineficaz actuación del Ministerio 17 “Ricardo”, policía preventivo, en entrevista con el autor, México, DF, 20 de enero del 2005. 18 “Indignados, familiares de policía muerto”, SUN, El , sección Ciudad, 28 de junio del 2001, p.8. 32 Público”, afirmó el paramédico del Escuadrón de Rescate y Urgencias Médicas (ERUM), Octavio Castillo e hijo del policía caído. En otro hecho, aproximadamente 30 policías del sector San Jerónimo realizaron una reunión en la delegación Magdalena Contreras con el Fiscal de la procuraduría capitalina, para denunciar el maltrato al que son expuestos por parte de los agentes del Ministerio Público de la 25 Agencia Investigadora. Esto debido a que el policía Jorge García Arrasola quien había remitido a una persona por beber en la vía pública, posteriormente fue acusado “del robo de dos mil 500 pesos en efectivo por el propio sujeto que había cometido la falta, juego que finalmente siguió el agente del MP en turno...ya que la mayoría de las veces estos funcionarios se niegan a aceptar las remisiones de los uniformados, por flojera o simple corrupción”.19 México ocupa el lugar 64 entre 133 países dentro del Índice de Percepción de la Corrupción, elaborado en 2003 por Transparencia Internacional, por debajo de Colombia (lugar 59), Malasia (37), o Chile (20). De acuerdo con la Encuesta Nacional de Corrupción y Buen Gobierno, los estados mexicanos con mayores índices de corrupción son Guerrero (sur), Durango (noroeste), el estado de México, Puebla (ambos en el centro), y la capital del país. Los mexicanos sobornan más “a agentes de tránsito, inspectores que ofrecen protección al trabajo en la vía pública” y por trámites… 20 19 Protestan policías por maltrato”, SUN, El , Secc, Ciudad, México, 2 de febrero del 2001, p.6. 20 “La corrupción cuesta a México millones” http://www.vidalatina.cc/hdp.php?edicion=noviembre2004&historia=hdp 33 ‰iöÅÉÇÉá ÑÉÜ Ät ÉàÜt vtÄÄx? wÉÇwx {tç âÇ utàtÄÄ™Ç wx ÑÉÄ|v•t? ÑÉÜÖâx xÇ °áàt {tç Öâx ÑtátÜ xÇàÜx ÑâÜÉá ätzÉበw|}É yâÄtÇÉ wx àtÄ t áâ xáÑÉát ç t áâá {|}táA @@Tç? ÑtÑö á|xÅÑÜx tÇwtá w|v|xÇwÉ Öâx ÇÉá ät t ÑtátÜ tÄzÉ@ ÜxÑÜÉv{™ âÇt wx Ätá wÉá Åâv{tv{tá? ÑxÜÉ ÄÉá vâtàÜÉ áx xÇvtÅ|ÇtÜÉÇ {tv|t wÉÇwx Öâ|áÉ xÄ ÑtwÜxA gÜxá Å|ÇâàÉá wxáÑâ°á Ät ytÅ|Ä|t xÅÑxé™ t ÑtwxvxÜ âÇ |Çy|xÜÇÉ? zÉÄÑxtwt? ÜÉutwt ç äx}twt xÇ xÄ vâtÜàÉ á|Ç äxÇàtÇtá t wÉÇwx yâx áxvâxáàÜtwt ÑÉÜ áx|á âÇ|yÉÜÅtwÉá xÇä|Äxv|wÉáÊAD 3 LOS CUERPOS POLICIACOS Policía (Lat. politiam; del griego politeia, administración de la ciudad). Conjunto de reglas impuestas al ciudadano para que reine el orden, la tranquilidad y la seguridad dentro de un cuerpo social. Fuerza pública encargada del cumplimiento de esas reglas. Conjunto de agentes de esta fuerza pública.2. La policía tiene como función primordial la prevención o represión de la violación de las normas jurídicas ...la idea de seguridad pública está ligada a la protección de la paz pública, de tal manera que pueda ser conceptualizada desde el punto de vista objetivo, como el conjunto de políticas y acciones coherentes y articuladas, 1 Vicente Leñero y Carlos Marín. Manual de Periodismo, Editorial Grijalbo, Séptima edición (México) 1986, pág. 201. 2 Diccionario Enciclopédico Larousse 34 que tienden a garantizar la paz pública a través de la prevención y la represión de delitos y de las faltas contra el orden público, mediante el sistema de control penal y el de la policía administrativa.3 La esfera policial en nuestro país se encuentra constituida por: 1. La policía preventiva estatal y municipal, en todas sus modalidades (policía de seguridad pública, granaderos, grupos especiales de asalto, policía de vigilancia, montada y de tránsito, entre otras); 2. Las policías preventivas federales (de caminos y puertos y, fiscal, entre otras); 3. Las policías judiciales (estatales y federal), y 4. Los cuerpos de seguridad privados. En el caso del Distrito Federal, dentro de la Secretaría de Seguridad Pública existen varios tipos de policías preventivos, los cuales, se encuentran encargados de resguardar la tranquilidad de sus habitantes: 3 Samuel González Ruiz. Seguridad Pública en México (p. 49). 35 Policía del Distrito F Policía Pr Policía Sectorial 70 Coordinaciones Territoriales (Especialidad en seguridad) 36 ederal eventiva Grupo Tigre Policía del Transporte Policía Metropolitana (Agrupamientos) Policía Femenil Policía Montada Policía Turística E.R.U.M (Especialidad en Rescate y Urgencias Fuerzas Especiales Seguridad Vial Asuntos Internos Policía Auxiliar Policía Bancaria e Industrial ) Granaderos (Especialidad en Protección) Unidad Especial (Especialidad en Motociclismo) Especialidad Ribereña Especialidad en Proximidad GODAP Especialidad en Caninos Unidad “Marte” (Especialidad en Supervisión) 6 Regiones (Especialidad en vialidad) Grupo “Alfa” (Especialidad en Control de Drogas) Helicópteros Fuerza de tarea Policía Complementaria Referencia: Cuadro tomado de la página web http://www.ssp.df.gob.mx/htmls/ssp_tipos.htmlUTH 3.1 Policías delincuentes Algunas de las personas que laboran dentro de estas corporaciones se han dado a conocer como delincuentes porque actúan cubiertos bajo una placa y un uniforme. El autor del libro Manual de Derecho Positivo, Eduardo López Betancourt, definió a los cuerpos policíacos como “un conjunto de individuos que en su mayoría se dedica a cometer delitos”4 . En el Distrito Federal grupos de policías han sido desintegrados por realizar actos escandalosos para la sociedad, por ejemplo en el caso de los jóvenes desaparecidos en la colonia Buenos Aires; o el caso en que tres jovencitas (13,15 y 18 años), el 24 de julio de 1999, fueron abusadas sexualmente por un grupo de la policía montada en la delegación Tláhuac. En octubre de 1998, el entonces Jefe de Gobierno de la capital de la República, Cuauhtémoc Cárdenas, señaló: “es muy claro el mensaje para aquellas policías que puedan estar vinculados con la delincuencia: se les combatirá frontalmente dentro y fuera de las filas de la corporación”5. Sobre la relación entre delincuentes y los grupos de mandos de la SSP, conocido como La Hermandad, mencionó que la corporación deberá ser saneada. La imagen que anteriormente se tenía de los policías, admirados por los niños y respetados por los ciudadanos, ya casi no existe. A decir de López Betancourt “resulta que la sociedad considera peligroso encontrarse a un policía en un lugar solitario, porque seguramente será víctima de algún tipo de abuso”.6 4 Enrique Bustamante, “La pena de muerte no detendrá la delincuencia”, Nuevo Siglo, Año 5. Núm. 212, marzo de 1996. págs. 8-9. 5 Ricardo Olayo y Daniela Pastrana. “Combate frontal a policías hampones”, La Jornada, México, 8 de octubre de 1998, p. 42. 6 Enrique Bustamante, art.cit., p 8-9. 37 Sin embargo, durante una ceremonia realizada con motivo de otorgar ascensos a policías preventivos, los altos mandos de la Secretaría de SeguridadPública del Distrito Federal evidenciaron que le han fallado a la sociedad. “Debemos de servir con mayor lealtad a la institución y a la ciudadanía, quien espera mucho de nosotros y que desgraciadamente no le hemos dado todo lo que merece” 7, mencionó el Director Ejecutivo de Control de Tránsito Roberto Velásquez Olazábal. Cuando Alejandro Gertz Manero llegó a esa dependencia, denunció que se encontró con algunas resistencias por parte de algunos mandos superiores para acatar las órdenes, lo que persiste y difícilmente terminará. “Todos los días vemos gente que no tienen interés en respetar y proteger la sociedad”, dijo Velásquez Olazábal. Durante su intervención en la ceremonia el Director de la Unidad de Policía Sectorial, Saúl Vázquez Villanueva afirmó: “desgraciadamente hay alguna gente necia, obcecada, empeñada en seguir anteponiendo a los intereses de la sociedad sus intereses personales, mezquinos”. Esos intereses personales señaló Velásquez Olazábal, es lo que ha provocado la pérdida de confianza de la sociedad: “Si todos funcionáramos con la misma idea, de ser cada día mejores servidores públicos obtendríamos la confianza de esta ciudadanía que hace mucho tiempo perdimos y que queremos recobrarla”. Sin embargo los actos de malicia que se dan dentro de las corporaciones policíacas encargadas de la seguridad de los capitalinos son evidentes hasta en la entrega de equipos. Policías del agrupamiento de moto patrullas denunciaron actos 7 “División en la SSP, reconoce Gertz”, SUN, El , Secc. Seguridad Pública, México, 18 de mayo del 2000, Pág. 6. 38 de corrupción por parte de sus mandos en la entrega de motocicletas a sus subalternos. Al término de una ceremonia realizada con motivo de la entrega de 162 motocicletas por parte del Secretario de Seguridad Pública, Leonel Godoy Rangel, varios policías entre ellos Miguel Vega Usami, “calificaron como farsa la entrega de las unidades, ya que indicaron que lo único que se tomó en cuenta fueron las relaciones de amistad y el dinero para adjudicar las moto patrullas. El uniformado y otros de sus compañeros, que pidieron el anonimato por temor a represalias, manifestaron que hasta por lista se eligió a quienes se le entregarían motos”8. Aunque el jefe de la policía subrayó la transparencia en la entrega de las motos Harley Davidson 2001, “otros elementos incluso aseguraron que supuestamente sus mandos pidieron 5 mil pesos por el derecho a tener motocicleta nueva y sólo pagarían 700 pesos por las unidades viejas”, según el mismo artículo. Foto: El , 14 de junio del 2001, pág.7 3.2 Llegar a viejo en la SSP La corrupción que se da en la policía tal vez se deba en gran medida a que no cuentan con una protección social y económica para su futuro. En el programa “Misión Imposible: Policía y Sociedad” transmitido el día 9 de diciembre de 1998 8 “Entregan motos `con mordida´”8, SUN, El , México, Secc. Ciudad, 14 de junio del 2001, pág. 7. 39 por CNI canal 40 “Un policía que duró 33 años laborando, al jubilarse sólo le dieron 2,000 pesos (sic) por parte de una aseguradora”. Debido a la situación en que se encuentran los policías en el DF tanto económica como moralmente, realizan actos que no son propios de su trabajo. El joven policía al darse cuenta que quienes se jubilan en esa corporación no cuentan con una protección económica, y ni siquiera con el agradecimiento de la ciudadanía, recurre a buscar ingresos de cualquier forma, debido a esto, incurre en el término conocido como corrupción, los delincuentes pueden darle al policía hasta 30 veces más de lo que ganaría en un año honestamente. Gertz Manero9 La causa más común entre los integrantes de la SSP para no jubilarse son las bajas pensiones, las cuales los obligan a seguir laborando año con año, aunque su edad se vaya incrementando cada día y las diversas enfermedades que aquejan a muchos de ellos sean un buen motivo para retirarse. Mario Torres, en su artículo “En la SSP no conviene llegar a viejo”10 publicado para el Universal expone: (Artículo fragmentado) Se quedan más años con la esperanza de que las condiciones para jubilarse mejoren En la Secretaría de Seguridad Pública existen varios policías que tienen entre 43 y 50 años de servicio activo…el 30% de todos los elementos tienen más de 50 años de edad y existe además un grupo de 22 elementos cuyas edades oscilan entre los 75 y 92 años. 9 Reporte Especial: “Contra la delincuencia” TV Azteca, 5 septiembre de 1998. 10 Mario Torres, “En la SSP no conviene llegar a viejo”, El Universal (México), 21 de noviembre de 1999. Secc. Ciudad. Pág. B-4. 40 En todos los casos jubilarse representa un deseo que en el corto plazo deberá cumplirse antes de que el destino los alcance, aunque algunos prefieren morir trabajando, no sólo por el cariño a la institución, sino que, tener un accidente o fallecer les sería más redituable a sus familiares. Ángel Robles Montiel tiene 50 años como policía preventivo y es el uniformado con mayor antigüedad dentro de esa corporación. “Mis compañeros dicen que debería estar en el asilo y no sé que más...” Pero los 70 años que tiene, las enfermedades…y la burla de sus compañeros no evitan que a las cuatro de la mañana se levante todos los días y acuda al sector 15, que se ubica en la colonia Roma, donde es el encargado del depósito de armas. Foto: El Universal, 21 de noviembre de 1999, pág. B4 Aparte de la diabetes este policía padece… de la vejiga y requiere una operación de próstata. La mayor parte de su salario, dice, lo utiliza para comprar medicinas. Fausto Navarrete y Martínez, el segundo policía con mayor antigüedad en la corporación, a diferencia de otros, sí quiere jubilarse y es que a su edad, reflexiona: “¿a dónde voy? a uno ya no lo reciben ni como velador. Ojala me pensionaran o me dieran un beneficio para pagar las enfermedades que tengo...” En la época de los 50s la actividad en materia de tránsito vehicular era totalmente distinta. “La circulación en la ciudad era un infierno porque todo el mundo tocaba el claxon, era difícil aguantar los bocinazos y los insultos” explica. 41 Con 68 años de edad, 47 años en la SSP, explicó que en aquella época había pocos cruceros y los policías tenían que cargar todos los días un cajón de madera, como de 50 por 60 centímetros para poder trabajar. ...“el frente y la espalda, eran el alto, el perfil el siga y hacíamos las preventivas para cuando dieran vuelta con un movimiento de los brazos”. De noche, dijo, se utilizaban lámparas de petróleo, después se comenzaron a utilizar las linternas. El viento y el sol eran otros problemas, ya que le formaban grietas en los labios: “era dolorosísimo, porque la resequedad y utilizar a cada rato el silbato le provocaban a uno que se le hicieran grietas, hasta ámpulas tenían. En la noche al llegar a casa me ponía hielo o pomada de la “campana”, después me fui acostumbrando”, señaló. Ataviado con su uniforme café, que lo porta desde que ingresó a la antigua Dirección de Tránsito, asegura que no quiere jubilarse, “este trabajo es como si fuera mi segunda familia, estoy a gusto y no me quiero jubilar” dice Fausto Navarrete. La pensión económica es otro de los motivos: “indudablemente que al jubilarme me baja mucho el sueldo. Mis hijos me dicen papá... “ya jubílate”, pero les digo que no, porque pa´ el año que entra con el incremento en enero puede que tenga una mejor pensión y así sigo esperando...”. El profesor José Ávila Garibay, pionero en la doctrina de la educación vial en México, es el empleado con mayor edad dentro de la nómina de la SSP. A sus 91 años de edad narra, llegar a esa corporaciónrepresento la oportunidad de crear Campos Infantiles de Educación Vial. La muerte por atropellamiento de uno los alumnos que estudiaban en la escuela Francisco I. Madero, donde daba clase, le orilló a crear programas de prevención en materia de educación vial. Su salario oscila entre los 12 mil pesos y se reduciría a sólo 4 mil 500 si se jubilara en este momento. 42 Esta es una de las razones más por la que los policías de mayor edad y antigüedad no se jubilan, pues saben que si se retiran recibirán una pensión muy por debajo de su salario, explicó el subdirector de Prestaciones y Relaciones Laborales, de la SSP, Timoteo Morales García. “A los preventivos se les paga un riesgo y una contingencia porque ponen en peligro su vida, pero estos conceptos no son cotizables al momento de que se les paga su pensión por jubilación.” Los cinco policías con mayor edad José Ávila Garibay: edad 91 años Carlos De Navia Osorio: edad 81 años Jorge Merino Ramos: edad 79 años Lamberto Montiel Tovar: edad 78 años Bolívar Sierra López: edad 78 años Actualmente, el 30% de todos los policías preventivos tiene una edad que sobrepasa los 50 años, son alrededor de 10 mil 200 y lo recomendable es que se jubilen después de cumplir los 60 años, indicó el funcionario. El secretario de Seguridad Pública del DF, Leonel Godoy Rangel, dio a conocer en el 2002 como medida social, un programa de estímulos, el cual podría aplicarse a mil 300 policías preventivos, quienes se encuentran en edad de jubilarse y sin embargo se oponen a hacerlo, debido a las bajas pensiones a las que son acreedores en su retiro. Foto: El Universal, 21 de noviembre de 1999, pág. B4 Por tal situación las nuevas generaciones de policías egresados del Instituto Técnico de Formación Policial (ITFP) no pueden ocupar sus plazas dentro de la Secretaría ya que “nuestros jubilados todavía no tienen un salario decoroso por los años de servicio que prestaron” lo que ocasiona “...que los 43 policías o cualquier otro servidor público se resistan a jubilarse cuando ya están con el derecho de poder hacerlo” comentó Godoy Rangel. 11 Debido a “la falta de criterios de planeación que guíen la organización y la operación de los servicios policíacos, presupuestos inadecuados, distribución de recursos sin criterios específicos, falta de criterio para la determinación de salarios, sueldos bajos... Las fuerzas policiacas sufren cambios constantes de personal y muchos agentes abandonan el servicio para entrar al mercado laboral delictivo”, se afirma en algunos de los fragmentos del informe “Seguridad pública y gobernabilidad democrática: desafíos para México y Estados Unidos”.12 Sin embargo muchas de las veces los buenos policías son corrompidos por las situaciones que se dan dentro de su trabajo, un policía perteneciente a la Policía Bancaria e Industrial al cual llamaremos “Héctor”, para proteger su identidad por lo delicado del tema, comenta que en un principio perteneció a la Policía Preventiva del DF, y fue comisionado a patrullar la zona Iztapalapa: Una noche agarramos a un chavo, estaba en una esquina y lo vimos medio raro, que nos bajamos de la patrulla y le hicimos una revisión. Le encontramos una bolsa con “grapas” y cuando lo íbamos a subir a la patrulla que nos dice que si lo dejábamos nos daba 3 mil pesos y un estéreo, no quisimos y lo llevamos al Ministerio Público. Al otro día estábamos parados, que llega y nos dice “ya ve poli con el del ministerio nada más fueron mil quinientos”. Estar ahí estaba gacho, ahí si éramos ratas uniformadas, luego teníamos que abrir los coches para sacarles los estéreos y cosas así, para darle su entre al comando, la neta no me latió, por eso me sali. “Héctor R.” (PBI)13 11 “Reconocen bajas pensiones en SSP”, SUN, El , Secc. Ciudad, México, 4 de julio del 2001, pág. 4. 12 Ricardo Ravelo. “El gobierno de Fox, ineficaz contra el crimen”, Proceso, núm.: 1272, México, 18 de marzo 2001, Págs. 11-12. 13 “Héctor R.”, policía bancario e industrial del DF (PBI del DF), en entrevista con el autor, México DF, 24 de septiembre del 2003. 44 3.3 La Hermandad A finales de los años setentas y principios de los ochentas Arturo Durazo Moreno crea una mafia conocida como La Hermandad en la entonces Dirección General de Policía y Tránsito de la cual era dirigente. Se dice que dentro de la SSP, aún existe ésta como se ha denominado a los grupos de mando de esta secretaría, los cuales tienen vinculaciones con delincuentes y para ello el Secretario de Seguridad Pública en 1998, Alejandro Gertz Manero había tomado medidas de control para enfrentarla aunque según él no estaba seguro si ésta en realidad existía. Sin embargo, el Secretario de la SSP, al comparecer ante el pleno de la Asamblea Legislativa el 6 de octubre de 1998, reveló que había recibido presiones desde el interior de esta corporación, “ya estoy sintiendo que La Hermandad sí existe. Se hablaba mucho de ella, pero ya está dando sus efectos y ya está mostrando que ahí está y que se va a defender”.14 De acuerdo con el artículo, “Negro historial de jefes policíacos en el DF” realizado por Luis Muñiz,15 importantes mandos superiores de la Secretaría de Seguridad Pública están relacionados con hechos ilícitos como la venta de estupefacientes, robo, lesiones, corrupción, extorsión, homicidio, acoso sexual, violación y abuso de autoridad. 14 Raúl Llanos, Gabriela Romero y Ricardo Olayo. “Denuncia Gertz presiones para que cese la lucha anticorrupción”, La Jornada, México, 7 de octubre de 1998, p. 58. 15 www.lacrisis.com.mx/especial040603.htm 45 En un informe interno realizado por policías de `inteligencia´ de la propia Secretaría de Seguridad Pública, fueron elaboradas `fichas´ de destacados mandos de la policía uniformada de la ciudad con `negro´ historial. La gran mayoría de ellos pertenece a la arraigada organización delictiva policial denominada La Hermandad y han trabajado muy de cerca con ex jefes policíacos que terminaron en la cárcel o concluyeron su gestión en medio de acusaciones de enriquecimiento ilícito. Pedro Luna Castro, director de Control de Tránsito.- Hace poco más de un mes fue acusado de encubrimiento y nepotismo, por haber nombrado como director de Asuntos Internos de la corporación a su yerno, que cuenta con antecedentes penales por estar involucrado en el robo a bancos. Existe una averiguación previa de este asunto y hasta un juicio penal hay. En el año 2000, Alejandro Gertz Manero, entonces titular de la SPP del DF, le dio un “jalón de orejas” a Luna Castro por las constantes quejas de uniformados de ser objeto de extorsión. El ex diputado federal Armando López, lo responsabiliza de haber participado directamente en las matanzas estudiantiles de Tlatelolco y de San Cosme en 1971. Faustino Gómez Lira, director del agrupamiento Fuerza de Tarea.- Está acusado de lesiones y abuso de autoridad, el 9 de noviembre del año 2000, en la Contraloría General del Gobierno del DF, en la denuncia con número de folio 22576, al agredir con una barra metálica a los policías Eliseo Aguilar Ruiz y Gregorio Hernández Zarate, por haberse negado a ser extorsionados. Javier Orozco Paz, Primer Superintendente (jefe regional de Cuauhtémoc y Miguel Hidalgo).- Fundador de La Hermandad, ex amigo del legendario Arturo Durazo Moreno, ha sido acusado por hostigamiento sexual, por abuso de autoridad y extorsión. Mario Montaño, director de la Policía Montada.- Acusado de lesiones, robo de armas y abuso de autoridad en la Fiscalía Especial de Servidores Públicos de la Procuraduría de Justicia del DF, debido a que en el año 2000 46 golpeó a dos uniformados a fin de liberar a un vendedor de droga que policíasdel Centro Histórico habían atrapado infraganti. Este jefe policiaco dejó en libertad al detenido y la averiguación previa en su contra sigue. Alfredo Angulo Montiel, Primer Inspector (Miguel Hidalgo).- Cuenta con múltiples denuncias en la Contraloría Interna de la SPP del DF (sic) por cohecho, soborno, extorsión y utilizar recursos para beneficio personal. Tiene mala fama entre los uniformados. Pedro Hernández Leyte, Primer Inspector (Jefe regional en Magdalena Contreras, Álvaro Obregón y Cuajimalpa).- Es acusado de proteger a sus subalternos que el 6 de junio de 1997 violaron a niñas de la calle en las inmediaciones de la Central Camionera del Norte a bordo de la patrulla 01294. Víctor Manuel Juárez Sierra, Segundo Superintendente (Azcapotzalco).- Fue secretario particular de Santiago Tapia Aceves, ex jefe de la policía capitalina que terminó su gestión en la cárcel aunque luego quedó libre; también fue secretario particular de otro jefe policíaco que salió con sospechas de fomentar la corrupción en las filas policíacas, René Monterrubio. En ambas administraciones, Juárez Sierra se encargaba de recoger el dinero de extorsiones y llevarlo a sus jefes en turno. Rodomiro Ruiz Rodríguez, director de Protección Ciudadana de Fuerzas Especiales.- Es policía activo desde 1970. Tuvo diferentes comisiones y cargos durante la siniestra y temible administración policíaca de Arturo Durazo Moreno. Hasta hace pocos meses contaba con la clave policial Apolo. En la PGR existe la averiguación previa en su contra (246/MPINCD/95), mediante oficio MET/064/95, con fecha 26 de enero de 1996, fue citado a declarar en relación con la supuesta venta de drogas prohibidas por y entre elementos bajo su mando. El 5 de febrero de 1998, el entonces vicepresidente de la Comisión de Seguridad Pública de la Asamblea de Representantes del DF, Víctor Manuel 47 Soto Camacho, demandó públicamente el cese de este jefe policiaco por estar relacionado en la venta de drogas, robos, lesiones y abuso de autoridad. Recientemente y entre las filas de la policía, es señalado también de proteger el ingreso de contrabando a Tepito y prueba de ello es que hace casi un mes, cuando se establecieron retenes en alrededores del barrio bravo, Ruiz Rodríguez se encargaba de agilizar, personalmente, el tráfico para dejar pasar 17 traileres en una sola mañana a Tepito, sin ser molestados por los operativos. Miguel Salas Moreno, Segundo Superintendente (Venustiano Carranza).- Es acusado de secuestro y abuso de autoridad por parte del policía David Olivo Salgado y el comandante del Grupo de Fuerzas Especiales de la SPP del DF, Luis Morales Villanueva, mediante el acta 586 de la Fiscalía Especialidad de Servidores Públicos. Carlos Calderón Cadena, Segundo Superintendente (Azcapotzalco).En diciembre de 1991, 19 operadores de grúas del Centro Histórico, encabezados por Evaristo Montero Benítez, lo acusaron de exigirles cuotas diarias a sus subalternos de entre 60 y 120 pesos diarios, de recibir injurias, amenazas y ser sometidos a extenuantes jornadas laborales hasta de 18 horas seguidas. En represalia por haber denunciado a este jefe policial, los denunciantes fueron removidos de sus puestos por negarse a aceptar arbitrariedades, amagos y presiones. Pese a todo, Calderón Cadena sigue como jefe de sector. Jaime Colín Colín, Segundo Superintendente (Coyoacán).-Acusado de corrupción y suspendido varios años por la Contraloría Interna de la SPP del DF. Juan Pérez Pastrana, Segundo Superintendente (Jefe regional de Coyoacán, Xochimilco y Tlalpan).- Ex integrante del temible grupo “Zorro”, involucrado en la ejecución de 23 personas en un penal de Tepic, Nayarit, a donde acudieron a sofocar un motín. Ha sido acusado de soborno y cohecho y en diversas ocasiones sus subalternos le han organizado protestas por la corrupción de que son objeto. 48 Eduardo Hernández Mercado, Segundo Superintendente (Venustiano Carranza).- Integrante de La Hermandad, inició su trabajo como policía en la época de Arturo Durazo Moreno y se hizo de mala fama al golpear al personal bajo su mando por no aceptar ser extorsionado. Es motociclista y ha sido denunciado por corrupción y durante mucho tiempo estuvo comisionado en lo que era la Dirección General de Autotransporte donde logró amasar cuantiosa fortuna. Es un hombre millonario. Sergio González Anaya, Primer Inspector (Cuauhtémoc).- Ha sido acusado por la Policía Judicial del DF de escoltar traileres robados y brindar protección a bandas de delincuentes y a pesar de ello sigue trabajando como jefe policiaco. Mario González Moreno, Segundo Inspector (Cuauhtémoc).-. Cuando fue jefe de sector en Aragón, fue acusado de dar protección a bandas de roba coches. José Flores Arzate, Segundo Superintendente (Cuauhtémoc).- Es acusado de brindar protección a antros, bares y cantinas de la Colonia San Rafael. Gildardo García Lora, Primer Inspector (Tacubaya).- Miembro de La Hermandad, es acusado como el encargado de recolectar el “entre” para entregarlo a René Monterrubio, entonces jefe de la policía capitalina. Protector de asesinos, el 30 de mayo de 1995, cuatro de sus subalternos asesinaron al piloto aviador Eduardo Torres Garcicrespo, y evitó que fueran procesados por abuso de autoridad y homicidio. Ramón Suazo Ríos, Segundo Superintendente (Benito Juárez).- Hace siete años fue citado a declarar en la PGR. En el oficio número MET/064/95, que consigna la averiguación previa 246/MPINCD/95, de fecha 26 de enero de 1996, girado por una mesa especial de trámites, se les cita a declarar acompañados de un abogado ante un Agente del Ministerio Público Federal, con relación a la protección a narcotraficantes. Raúl Calderón Soto, Segundo Superintendente (Venustiano Carranza).- Investigado también en 1996 por la PGR por otorgar protección a narcotraficantes. 49 Raúl A. Durán Cabrera, Segundo Superintendente (Jefe regional de Gustavo A. Madero y Azacapotzalco).- Fue segundo comandante del grupo “Zorros” cuando Manuel Camacho Solís era regente de la ciudad. Estuvo involucrado en la ejecución de 23 personas en el penal de Tepic, Nayarit. Fue investigado en 1996 por la PGR por otorgar protección a narcotraficantes en el DF. También es agresor de periodistas. El 8 de febrero de 1990, encabezando al grupo “Zorros”, viajó hasta Veracruz por órdenes del entonces jefe de la policía capitalina, Javier García Paniagua, para escoltar un trailer cargado de armas. Al ser descubiertos por reporteros del periódico “Notiver”, agredieron a comunicadores y les destruyeron sus cámaras fotográficas. El lío fue de tal magnitud, que policías estatales llegaron a apoyar a los periodistas agredidos y Durán Cabrera y sus subalternos fueron detenidos y trasladados a la Procuraduría Estatal de Veracruz. Juan Garibay Méndez, Segundo Superintendente (Jefe Regional de Venustiano Carranza, Benito Juárez e Iztacalco).- Un examen antidoping resultó positivo, es adicto a las drogas. Y en 1996 fue citado a declarar a la PGR por presuntos vínculos con narcotraficantes de Tepito. El 5 de febrero de 1998, el entonces vicepresidente de la Comisión de Seguridad Pública de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF), Víctor Manuel Soto Camacho señaló a dos presuntos integrantes de La Hermandad: Rodomiro Ruiz Rodríguez, Segundo Superintendente, director de la región II centro, así como Pablo Jaime Mendoza Álvarez, igualmente segundo superintendente y encargado de la región III oriente. Respecto a Jaime Mendoza, clave Dragón, “recalcó que de acuerdo con la averiguación previa 6327/93, le resultó orden de aprehensión como presunto responsable en la comisión de los delitos de robo, lesiones y abuso de autoridad en pandilla, habiéndose consignado el expediente ante el juzgado 15 de lo penal, bajo el 50 número de partida 95/93. Sin embargo,
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