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Av. Hidalgo 935, Colonia Centro, C.P. 44100, Guadalajara, Jalisco, México bibliotecadigital@redudg.udg.mx - Tel. 31 34 22 77 ext. 11959 UNIVERSIDAD DE GUADALAJARA COORDINACIÓN GENERAL ACADÉMICA Coordinación de Bibliotecas Biblioteca Digital La presente tesis es publicada a texto completo en virtud de que el autor ha dado su autorización por escrito para la incorporación del documento a la Biblioteca Digital y al Repositorio Institucional de la Universidad de Guadalajara, esto sin sufrir menoscabo sobre sus derechos como autor de la obra y los usos que posteriormente quiera darle a la misma. 1 1 UNIVERSIDAD DE GUADALAJARA CENTRO UNIVERSITARIO DE CIENCIAS DE LA SALUD Efecto de la administración de Ácido Linoléico Conjugado/Leucina más Metformina versus Aceite de Linaza más Metformina sobre la grasa visceral y epicárdica en pacientes con Síndrome Metabólico Director de tesis: D. en C. Fernando Grover Páez Co-Director de tesis D. en H. Carlos Ramos Becerra Alumno: M. en C. David Cardona Müller Co-investigadores: D. en C. Ernesto G. Cardona Muñoz D. en C. Carlos G. Ramos Becerra MD. Patricia Quezada Fernández MD. Mayra Berenice Jiménez Cázarez 2 2 TABLA DE CONTENIDO I. INTRODUCCIÓN 5 II. MARCO TEÓRICO 7 Epidemiología 9 Clasificación del Síndrome Metabólico 10 Complicaciones 13 Tejido Adiposo en patogenia SM 14 Tejido Adiposo Epicárdico y Tejido Adiposo Visceral 16 Tratamiento 17 Ácido Linoléico Conjugado 18 Leucina 22 Aceite de linaza 26 Metformina 28 III. ANTECEDENTES 30 IV. JUSTIFICACIÓN 34 V. PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA 36 VI. HIPÓTESIS 37 VII. OBJETIVOS 37 VIII. MATERIAL Y MÉTODOS 38 Diseño General del estudio 38 Sede 38 Universo de Trabajo 38 Muestra 39 Grupos de Estudio 40 Criterios de Selección 41 Definición Conceptual de variables 42 Definición Operacional de Variables 44 Procedimientos 47 Análisis estadístico 52 IX. CONSIDERACIONES ÉTICAS Y LEGALES CONSIDERACIONES 53 3 3 X. RESULTADOS 55 XI. DISCUSIÓN 66 XII. LIMITACIONES 73 XIII. PERSPECTIVAS 73 XIV. CONCLUSIÓN 74 XV. ANEXOS 75 XVI. REFERENCIAS 103 ABREVIATURAS (ADA) American Diabetes Asociation (AHA) American Heart Asociation (ALC) Ácido Linoléico Conjugado (AGL) Ácidos Grasos Libres (ATP-III) Third Adult Treatment Panel III (BIA) Impedancia Bioeléctrica 4 4 (DM) Diabetes Mellitus (DM2) Diabetes Mellitus tipo 2 (cAMP) Lipasa dependiente de monofosfato de adenosina cíclico (ECV) Enfermedad Cardiovascular (HDL) Lipoproteínas de Alta Densidad (HTA) Hipertensión Arterial (IDF) Federación Internacional de Diabetes (IDL) Lipoproteínas de Intermedia Densidad (IL-6) Interleucina 6 (IMC) Índice de Masa Corporal (INTEC) Instituto de Terapéutica Experimental y Clínica (LDL) Lipoproteínas de Baja Densidad (mToR) Diana de rampimicina en células de mamífero (NCEP) National Cholesterol Education Program, por sus siglas en inglés (OMS) Organización Mundial de la Salud (PAI-1) Inhibidor del Activador del Plasminógeno tipo 1 (PAP) Presión arterial periférica (RI) Resistencia a la Insulina (RNAm) Ácido Ribonucléico mensajero (SM) Síndrome metabólico (TG) Triglicéridos 5 5 (VLDL) Lipoproteínas de muy baja densidad (TAE) Tejido Adiposo Epicárdico (TAS) Tejido Adiposo Subcutáneo (TAV) Tejido Adiposo Visceral (TNF α) Factor de Necrosis Tumoral alfa 6 6 I. INTRODUCCIÓN El síndrome metabólico (SM), es una entidad clínica con amplias variaciones fenotípicas en personas con una predisposición endógena, determinada genéticamente y condicionada por factores ambientales.1 Se trata de un síndrome compuesto de varias alteraciones cardio-metabólicas que pueden aparecer de forma simultánea o secuencial en un mismo individuo, causados por la combinación de factores genéticos y ambientales asociados al estilo de vida en los que la resistencia a la insulina (RI) y la obesidad se consideran los componentes patogénicos fundamentales. 2 En la actualidad, podemos definir el SM como una condición patológica asociada a resistencia a la insulina e hiperinsulinemia que presenta un alto riesgo de desarrollar Diabetes Mellitus tipo 2 (DM2) y enfermedad cardiovascular.1 Según los criterios del NCEP (National Cholesterol Education Program, por sus siglas en inglés), con modificación de los valores de cintura conforme la Federación Internacional de Diabetes, el SM tiene una prevalencia de 42.3% en los adultos mexicanos mayores de 20 años, casi la mitad de la población adulta. 3 El principal contribuyente al desarrollo de RI es la obesidad, la cual es un problema de salud pública a nivel mundial, que produce un marcado incremento en la prevalencia de casi todas las enfermedades cardiovasculares. 4 La obesidad abdominal es uno de los principales componentes del SM la cual se asocia por lo general con resistencia la insulina/hiperinsulinemia. Por la capacidad de producir adipocinas y factores proinflamatorios, tanto el tejido adiposo subcutáneo (TAS) como el visceral (TAV), participan en la fisopatología de este síndrome.4 7 7 Hay evidencia que indica que la grasa visceral, o TAV, por su mayor actividad metabólica tiene una relación importante con muchos factores del SM: intolerancia a la glucosa, hipertensión, dislipemia, y resistencia a la insulina. 5 Se sabe que la disminución de la grasa visceral afecta de manera positiva los componentes del SM. Entre las estrategias que se han identificado para la reducción de la circunferencia abdominal asociada a TAV, existe evidencia que el consumo de ácidos grasos omega reduce el perímetro abdominal, sin embargo, esta información es poco consistente hasta el momento, por lo que hacen falta estudios para demostrar que su consumo pueda reducir el TAV en individuos con SM. En la presente investigación se pretende conocer el efecto del ácido linoléico/leucina sobre la grasa visceral en pacientes con SM. 8 8 II. MARCO TEÓRICO El Síndrome metabólico (SM) es una entidad clínica que aparece, con amplias variaciones fenotípicas, en personas con una predisposición endógena, determinada genéticamente y condicionada por factores ambientales.4 Es un síndrome compuesto por varias alteraciones que pueden aparecer de forma simultánea o secuencial en un mismo individuo, causadas por la combinación de factores genéticos y ambientales asociados al estilo de vida en los que la RI y la obesidad central se consideran los componentes principales. 6 En la actualidad, se puede definir el SM como una condición patológica asociada a RI e hiperinsulinemia que genera un alto riesgo de desarrollar Diabetes Mellitus tipo 2 (DM2) y enfermedad cardiovascular (ECV). 7 Según el “Consenso del Grupo de Trabajo Resistencia a la Insulina de la Sociedad Española de Diabetes” define a la RI como la disminución de la capacidad de esta hormona para ejercer sus acciones biológicas en tejidos diana típicos, como el músculo esquelético, el hígado o el tejido adiposo.8 Sin embargo, un cierto grado de RI es fisiológico durante la pubertad, en el embarazo y con el envejecimiento, siendo normalmente compensada por una mayor secreción de insulina por las células beta del páncreas. 4 El principal contribuyente al desarrollo de RI es la obesidad y más del 80% de los sujetos con obesidad son insulino-resistentes.La expansión de los adipocitos viscerales modifica su actividad endocrino-metabólica con aumento de secreción y niveles plasmáticos de ácidos grasos libres (AGL), factor de necrosis tumoral alfa (TNFα) y otras citoquinas pro-inflamatorias y disminución de adiponectina.4 9 9 El exceso de AGL circulantes, que se derivan de las reservas de triglicéridos (TG) del tejido adiposo son liberados por la lipasa dependiente de monofosfato de adenosina cíclico (cAMP) o bien de la lipólisis de lipoproteínas ricas en TG en los tejidos por la lipoprotein-lipasa. Al desarrollar RI, se aumenta la liberación de AGL en el tejido adiposo que, a su vez, inhiben los efectos antilipolíticos de la insulina. 9 Al acumularse tejido adiposo, se incrementa la producción de citoquinas inflamatorias como TNF- α e interleucina 6 (IL-6), que incrementan la resistencia a la insulina y la disfunción endotelial. Estas alteraciones a su vez se asocian al incremento en el riesgo cardiovascular de los pacientes con SM. 10 Sin embargo, los marcadores de inflamación no son parte de la definición del SM. Esta fisiopatología asociada al aumento del tejido graso es el trastorno primario del SM, un concepto conocido como adiposopatía; la patogenia del tejido adiposo resultante del balance calórico positivo y el estilo de vida sedentario en sujetos genéticamente susceptibles. Esta es manifestada por hipertrofia de los adipocitos, acumulación de TAV y subsecuentemente crecimiento de tejido adiposo. 11 Estas alteraciones presentes en el SM contribuyen con el incremento del riesgo de mortalidad, ECV, DM2, insuficiencia hepática e incluso cáncer que se ve incrementado en los pacientes que lo padecen. (Figura 1). Figura 1 Fisiopatología del SM 10 10 Gimeno ML, Martínez CB, Calleja IP, Lenguas AC. Síndrome metabólico: Retos y esperanzas. Síndrome metabólico. Concepto y fisiopatología. Rev. Española Cardiol. 2005; 5:3-10 Epidemiología del SM De acuerdo con la OMS, las ECV fueron responsables de aproximadamente 17 millones de defunciones en el 2008. La modificación del estilo de vida acompañado del desarrollo económico han sido algunos de los causantes del aumento sustancial en la prevalencia de las EVC, especialmente en los países desarrollados.12 La prevalencia del SM varía según la población, se calcula que es del 21.8% en la población mundial. En estudios de individuos de 20 a 25 años de edad, la prevalencia varía desde un porcentaje bajo como en India del 8% hasta un alto porcentaje del 24% en Estados Unidos para hombres, y desde 7% en Francia hasta 43% en Irán para mujeres (Gráfico 1).13 Figura 2. Prevalencia de SM de acuerdo a la definición de la ATPIII (%) *Bays HE. “Sick fat,” metabolic disease, and atherosclerosis. Am J Med 2009;122:S26-S37. Sin embargo, esta prevalencia es mayor en sujetos México-americanos en los que la prevalencia general es de 31.9%, y cuando se realiza un análisis por género en esta población se observa que la prevalencia es mayor en las mujeres alcanzando 11 11 un valor de 26%; esta misma tendencia se ha observado en otros estudios.14 Por lo tanto, la obesidad puede considerarse como el problema de salud pública principal al cual se enfrenta México en la actualidad dada su gran prevalencia, sus consecuencias y su asociación con las principales causas de mortalidad. 15 El SM, según los criterios del NCEP, con modificación de los valores de cintura conforme a la Federación Internacional de Diabetes (IDF, por sus siglas en inglés), tiene una prevalencia de 42.3% en los adultos mexicanos mayores de 20 años, con distribución de 7.4, 18.9, 31.4, 27.3, 12.5 y 2.5% para 0, 1, 2, 3, 4 y 5 componentes del síndrome metabólico, respectivamente. 16 Un análisis de un estudio de Diabetes de la Ciudad de México encontró que 16% de mujeres y 14.2% de hombres desarrollaron el SM en 6 años de seguimiento, y de éstos, 46% de mujeres y 44% de hombres desarrollaron DM2. 6 Por su parte, la edad parece ser uno de los factores que más influyen en el desarrollo del SM ya que la prevalencia incrementa desde un 6.7% entre los sujetos de 20 a 29 años de edad hasta alcanzar valores del 43.5% y 42% entre los sujetos de 60 a 69 años y mayores de 70 años respectivamente. De hecho, se observa que la prevalencia del SM alcanza su valor máximo en hombres de 50 a 70 años de edad y en mujeres de 60 a 80 años. 17 Criterios diagnóstico para el síndrome metabólico Muchas organizaciones han propuesto criterios para el diagnóstico del SM, sin embargo, el primer esfuerzo en introducir el SM en 1998, fue la OMS; que consideró el papel central de la RI, que es difícil de medir en la práctica diaria, pero aceptó evidencias indirectas, como alteración de la glucosa en ayuno, la glucosa post-carga y la DM2. Entonces, para el diagnóstico del SM según la OMS, el paciente debe presentar marcadores de RI, más dos factores de riesgo adicional que incluyen: hipertensión arterial (HTA) ≥140-90mmHg, dislipidemia TG >150 mg/dL; y/o lipoproteínas de alta densidad (HDL) <35-39 mg/dl en hombres y mujeres respectivamente, obesidad central (índice cintura cadera >0.9-0.85 en 12 12 hombres y mujeres respectivamente y/o índice de masa corporal (IMC) >30 Kg/m2) y/o microalbuminuria ≥ 20mg/dL.18 Recientemente la IDF señaló que el SM requiere la presencia de obesidad central, identificada a través de la circunferencia de la cintura (véase tabla 1). 19 Tabla 1. Valores de circunferencia de cintura especifica del país/etnia* *Zimmet P, Alberti KGMM, Serrano Ríos M. Una nueva definición mundial del síndrome metabólico propuesta por la Federación Internacional de Diabetes: fundamento y resultados. Rev. Española Cardiol [Internet]. 2005; 58(12):1371–6. Una vez identificado el valor de la cintura deberán estar presentes 2 o más de los siguientes factores: TG≥150 mg/dL (≥1.7mmol/L) o tratamiento para dislipidemia. Colesterol HDL: <40 mg/dL (<1.03 mmol/L) en hombres y <50 mg/dL (<1.29 mmol/L) en mujeres. TA ≥130/85 mmHg, diagnóstico previo de hipertensión o tratamiento previo para HTA. Glucosa basal en ayuno ≥100 mg/dL (≥5.6 mmol/L), diagnóstico previo de DM2 o tratamiento previo de DM2. *Deben cumplirse la condición de la obesidad más dos de los cuatro factores.3 13 13 Sin embargo, Bermudez et al 20 en 2012 hace referencia en su estudio para determinar la prevalencia de obesidad en una comunidad de Venezuela, sobre la validez deficiente que presenta este criterio de la IDF hacia la población latinoamericana, puesto que el National Heart, Lung and Blood Institute/American Heart Association y la IDF (IDF/NHLBI/AHA-2009) se unieron para realizar un consenso y determinar el valor específico de la medida de la circunferencia abdominal relacionada a cada país, faltando la comparación con Latinoamérica, por lo que se decide la adecuación con parámetros encontrados en el sur de Asia limitándolo a 90 cm para hombre y 80 cm para mujeres.21 Obesidad: Perímetro abdominal >80 cm en mujeres y >90 cm en hombres. TG ≥150 mg/dL (1.7 mmol/L) o tratamiento farmacológico. Colesterol HDL:< 40 mg/dL (<1.03 mmol/L) en hombres y <50 mg/dL (<1.29 mmol/L) en mujeres o tratamiento farmacológico. TA≥130/85 mmHg, diagnóstico previo de HTA o tratamiento antihipertensivo previo. Glucosa basal en ayuno ≥ 100 mg/dL (≥5.6 mmol/L), tratamiento farmacológico para DM2 o diagnóstico previo de DM2 *Deben cumplirse al menos tres condiciones. Otros criterios han sido los del Third Adult Treatment Panel (ATP-III), (tercer panel de tratamiento para adultos, por sus siglas en inglés); los cuales han adquirido extensa aceptación por la fácil obtención de las variables antropométricas y de laboratorio requeridas para establecer la existencia de SM en individuos y grupos. El diagnóstico del SM es realizado cuando 3 o más de los siguientesfactores de riesgo están presentes: circunferencia abdominal >102 cm (>40 in) en hombres y >88 cm (>35 in) en mujeres; TG≥ 150 mg/dL (≥1.7 mmol/L); presión arterial ≥130/85 mmHg; colesterol HDL<40 mg/dL (<1.0 mmol/L) en hombres y <50 mg/dL (<1.3mmol/L) en mujeres y glucosa de ayuno entre 110-126 mg/dL (6.1 to 7.0 mmol/L) (100 mg/dL [≥5.6mmol/L] también puede ser apropiado).22 14 14 Por otra parte, el basarse en criterios de fácil reconocimiento; permite la detección de un mayor número de pacientes. Uno de los inconvenientes del diagnóstico según los criterios del ATP-III es que no identifica con precisión a los pacientes con RI en la que se basa gran parte de su patogenia.23 Complicaciones asociadas con el SM En México; en la población adulta (20 a 69 años) hay más de 17 millones de pacientes con HTA, más de 14 millones de pacientes con dislipidemia, más de 6 millones de pacientes con DM2, más de 35 millones de adultos con sobrepeso u obesidad y más de 15 millones con grados variables de tabaquismo. En América Latina 75% de la mortalidad total en adultos se debe a enfermedades crónicas. Nuestra pirámide poblacional muestra que la mayoría de los adultos (75%) tiene menos de 55 años de edad y aunque la prevalencia de los factores de riesgo cardiovascular es mayor después de los 40 años, en datos absolutos, los millones de portadores de estos factores de riesgo corresponden a la población económicamente activa. El aumento del riesgo cardiovascular asociado al SM puede deberse a la suma de sus partes ya que cada uno de sus componentes constituye un factor de riesgo independiente: Dislipidemia Obesidad Hipertensión arterial Resistencia a la insulina Dislipidemia: el perfil aterogénico, con aumento de lipoproteínas de muy baja densidad (VLDL), disminución de HDL y presencia de lipoproteínas de basja densidad (LDL) con partículas pequeñas y densas, se asocia a un aumento en el riesgo de enfermedad coronaria cardíaca. 24 15 15 Hipertensión arterial: ha sido incluida como criterio diagnóstico en todas las definiciones de SM, desde que a este último se lo ha relacionado fuertemente con riesgo cardiovascular. 25,26 Resistencia a la Insulina: por todos los efectos que conducen a disfunción endotelial y estrés oxidativo. 27 Obesidad: es un factor de riesgo conocido para ateroesclerosis, pero no todas las personas obesas presentan el mismo riesgo cardiovascular. Los estudios epidemiológicos de las últimas dos décadas han demostrado que el verdadero factor pronóstico independiente de riesgo para la salud no es tanto el exceso de peso, sino la distribución de grasa corporal y su localización intraabdominal en exceso.24 La combinación de estos cuatro elementos fundamentales del SM puede terminar en ateroesclerosis, complicaciones de la placa de ateroma, y finalmente, enfermedad vascular cerebral (EVC).23 El estado protrombótico y proinflamatorio contribuye también a desarrollar eventos aterotrombóticos y ateroescleróticos. 20,21 La microalbuminuria o la presencia de proteínas en orina, son un fuerte predictor de mortalidad cardiovascular según la OMS. En un estudio prospectivo de individuos sin diabetes, la presencia de microalbuminuria predijo el desarrollo de DM2. Ésta ha sido relacionada con un incremento en la salida transcapilar de albúmina y con el estrés oxidativo. 28 Mecanismos patógenos relacionados con el síndrome metabólico La obesidad y el SM como fenómenos independientes hacen necesario identificar los mecanismos responsables de la asociación entre estas condiciones. 15 Como se ha mencionando anteriormente la obesidad central es uno de los principales componentes del SM la cual se asocia por lo general con RI/ hiperinsulinemia. Según esta teoría, la RI es consecuencia de alteraciones en el 16 16 procesamiento y almacenamiento de ácidos grasos y TG (moléculas básicas de reserva energética). La tendencia fisiológica es el almacén de TG en adipocitos pequeños periféricos, pero cuando la capacidad de estas células se sobrepasa, se acumulan en el músculo y causan RI en dichos tejidos. 29 La distribución de la grasa corporal parece estar determinada genéticamente. En su fisiopatología intervienen un aumento relativo de la secreción de diversas hormonas, muchas de ellas producidas en el mismo tejido adiposo.30 La medida de la circunferencia abdominal se ve influida tanto por el TAS como por el TAV. Estos compartimentos poseen características biológicas muy diferenciadas, y aunque mantengan relaciones funcionales bilaterales, su papel en la fisiopatología de las complicaciones derivadas de la obesidad son muy distintos. El TAV comprende hasta el 20% del total del tejido graso en el varón y hasta el 8% en la mujer, quien posee proporcionalmente mayor magnitud de TAS. El TAS se encuentra predominantemente localizado en las regiones femoral y glútea, aunque también se sitúa también en el compartimento subcutáneo abdominal. (31) Publicaciones recientes muestran que los adipocitos del TAS en términos absolutos tienen mayor actividad de lipoproteinlipasa y superior efecto lipolítico tras estimulación farmacológica. No obstante, la capacidad de respuesta lipolítica relativa respecto al nivel basal es superior en los adipocitos del TAV. 34 Los adipocitos del TAV tienen mayor capacidad de captación de glucosa que los del TAS, en probable relación con una mayor expresión de GLUT-4, lo que es un sustrato para alcanzar almacenamiento de triglicéridos superior al del TAS. 32 El mayor grado de lipólisis del TAV favorece el flujo aumentado de ácidos grasos libres al hígado por vía portal, lo que contribuye a generar RI, esteatosis hepática y sus complicaciones metabólicas. 36 Hay indicios de que la magnitud del TAV influye en la sensibilidad a la lipólisis de los adipocitos del TAS, que se ve elevada en pacientes con obesidad visceral, lo que contribuiría a aumentar la concentración de AGL. 33 17 17 Sin embargo, el aumento del TAV conlleva no solo a un mayor tamaño del adipocito, sino también a una mayor expresión de adipocitocinas proinflamatorias con efectos deletéreos tanto a nivel local como sistémico. Es por esto que en los últimos años ha cobrado valor la cuantificación del TAV debido a que permite una mejor estratificación del riesgo cardiometabólico tanto a nivel individual como global. 34 El acúmulo de TAV se ha asociado en forma particular con la presencia de resistenca a la insulina, intolerancia la glucosa y a la presencia de DM2.35 La evaluación del TAE a través de la ecocardiografía se asocia directamente con la acumulación de TAV, incluso mejor que algunas variables antropométricas como el perímetro de la cintura. 36 Recientemente, el interés científico se ha centrado en el estudio de ciertos depósitos de grasa visceral extraabdominal, entre ellos el tejido adiposo epicárdico (TAE), que debido a su íntima relación con el miocardio y las arterias coronarias ha brindado nuevos conocimientos acerca de la asociación entre obesidad y ECV.36 El TAE tiene el mismo origen embrionario que el TAV. El TAE se localiza sobre el miocardio, en los surcos auriculoventriculares e interventriculares, se extiende al ápex y rodea las arterias coronarias. Este tejido graso es extremadamente activo y produce numerosas adipocinas, entre ellas citocinas proinflamatorias y proaterogénicas como el TNF α, el inhibidor del activador del plasminógeno tipo 1 (PAI-1), IL-6, visfatina, leptina, omentina y angiotensina II. Los adipocitos del TAE son de menor tamaño que los adipocitos subcutáneos y los de otros depósitos de TAV, siendo el tamaño un determinante de particular importancia en la expresión de adipocitocinas por parte del TAE.41 Se ha demostrado una relación positiva entre el TAE y los componentes del SM. De hecho, el volumen de grasa epicárdica se incrementa gradualmentecon el número de componentes del SM. De hecho, el volumen de grasa epicárdica se incrementa gradualmente con el número de componentes del SM, incluso cuando otros parámetros cardiometabólicos son evaluados por separado, en tal sentido, 18 18 se ha demostrado que el espesor del TAE se encuentra incrementado en pacientes con obesidad, 40 e inclusive este espesor resulta mayor en pacientes con intolerancia a los carbohidratos que en pacientes con tolerancia glucémica normal, 37 y además el TAE se relaciona con los niveles plasmáticos de insulina basal, glucemia en ayuno y sensibilidad insulínica evaluada por el método de la pinza glucémica-hiperinsulinémica. 38 De hecho, se ha establecido en la población europea, que un espesor de TAE mayor de 9,5 mm es altamente predictivo de RI. Hay varios métodos utilizados para medir el TAE. Inicialmente fue visualizado y descrito por medio de ecocardiograma 2D transtorácico. Se identifica como el espacio libre de ecos que se encuentra entre la pared libre del ventrículo y la pared del pericardio visceral y su grosor se mide en eje paraesternal largo y corto, se hacen las mediciones en donde el TAE es más grueso. Sin embargo, además de la variabilidad inter e intra-observador que puede existir, la principal limitación de éste método es que no permite realizar mediciones volumétricas y la detección de la totalidad de TAE y por lo mismo no permite detectar las variaciones de depósito de TAE que pueden existir. A pesar de esto, midiéndose en al menos 2 sitios diferentes en tres latidos diferentes durante la sístole, utilizando esta técnica se observó una fuerte correlación con la resonancia magnética, actualmente considerada el estándar de oro (r = 0.91, p = 0.001).39 Medidas terapéuticas de síndrome metabólico Una vez que se ha hecho el diagnóstico del SM, el manejo de esta condición deber ser agresivo e inflexible para reducir el riesgo de ECV y DM2. La pérdida de peso se asocia con una disminución sustancial de grasa visceral, lo cual mejora el perfil cardiometabólico de los pacientes con obesidad. Esta reducción de peso puede alcanzarse a través de programas nutricionales basados en dietas hipocalóricas, ejercicio aeróbico, cirugía bariátrica y en menor cuantía a través de tratamiento no farmacológico y farmacológico. 40 Los pacientes deben ser sometidos a una evaluación de riesgo cardiovascular (incluido el antecedente de tabaquismo) en conjunto con lo siguiente: 19 19 Intervención no farmacológica primaria: La IDF recomienda que la intervención primaria del SM sea la promoción del estilo de vida saludable. Esto incluye: Restricción moderada de calorías (para alcanzar una pérdida del 5-10% del peso en el primer año). Incremento moderado de la actividad física (30 minutos de actividad física al menos cinco veces por semana). Cambio en la dieta 21 Suplemento alimenticio: ácidos grasos omega-3 (mediante el incremento en el consumo de aceite de pescado o cápsulas del mismo es recomendado)41, así como el ácido linoléico conjugado, leucina son las sustancias propuestas por su actividad anti-obesidad lo cual se mencionará a continuación. Acido linoléico conjugado El ácido linoléico conjugado (ALC) es un término utilizado para describir a los derivados posicionales o geométricos del ácido linoléico que contiene dobles enlaces conjugados. La fuente natural de este ácido graso conjugado poliinsaturado es por isomerización microbiana de ácido linoléico de la dieta. El término ALC incluye una serie de isómeros posicionales (7,9; 8,10; 9,11; 10,12 y 11,13) y geométricos (cis ó trans) del ácido linoléico (C18:2 serie n-6) como lo podemos observar en la siguiente figura42. Figura 3. Estructura química de los principales isómeros del ALC 20 20 Posterior a su administración oral el ALC se absorbe rápidamente 0.34-0.53 hr con una absorción cercana al 100% de lo administrado. Por el contrario, la eliminación es lenta con vida media de 25 hrs. Presenta su concentración máxima en plasma 7.6 – 8.5 hr. 43 Posterior a su absorción el ALC se incorpora a lípidos neutrales y es metabolizado por procesos de elongación /desaturación. Tiende a acumularse en hígado, plasma y eritrocitos, de igual forma sus principales componentes, el ácido ruménico, ácido vacénico y alfa linoléico siguen una cinética parecida, con concentraciones detectadas a los 15 minutos posterior a la administración, pico de concentración a las 5.5-6.5 hrs, con una vida media de 16.5-19 hrs. En cuanto a sus efectos adversos se ha visto que a dosis elevadas puede producir hipertrofia hepatocelular al administrarse a dosis mayores de 2433 mg/kg/día, el efecto se revirtió al retirar la dosis.44 Sin embargo, los estudios para describir el comportamiento farmacocinético del ALC están hechos en ratas y ratones. El ALC se conoce desde los primeros estudios de Pariza et al 45 en la Universidad de Winsconsin-Madison, de EE.UU, que al investigar ciertos componentes carcinogénicos en carne de ternera a la parrilla descubrieron que algunos ácidos grasos derivados del ácido linoléico presentaban propiedades anticancerígenas. Estudios posteriores, principalmente en modelos animales y con cultivos celulares, han puesto de manifiesto otros efectos benéficos, como son una modificación de la composición corporal, con reducción de la grasa corporal, propiedades antiaterogénicas, efecto hipolipemiante, disminución de la RI y acción sobre el sistema inmunitario, entre otras. Sin embargo, los estudios efectuados en humanos son escasos e incluso muchas veces contradictorios. Las principales fuentes naturales son la carne de animales rumiantes, la leche y los derivados 21 21 lácteos, si bien hoy día existe en el mercado una amplia gama de alimentos enriquecidos en ALC. Los 2 isómeros mayoritarios que se encuentran de forma natural en los alimentos y que tienen actividad biológica son el cis-9, trans-11 y el trans-10, cis-12.46 Origen y presencia del ácido linoléico conjugado en los alimentos El ALC se origina en el rumen del estómago de los animales rumiantes por la acción de microorganismos anaerobios (Butyrivibrio fibrisolvens, entre otros), que son capaces de hidrogenar los ácidos grasos poliinsaturados. De esta forma el ácido linoleico presente en los pastos naturales se transforma en el sistema digestivo del rumiante en ALC. En primer lugar, en el estómago se forma, a partir del ácido linoleico, el isómero cis-9, trans-11, denominado ácido ruménico (AR). El AR es el isómero cuantitativamente más importante en la grasa láctea y en la carne de los rumiantes (supone un 90% del total de isómeros), y es al que actualmente se le atribuye una mayor importancia fisiológica. A partir del AR, por hidrogenación se forma el isómero trans-11 C18:1, denominado ácido vacénico (AV), que es el principal ácido graso monoinsaturado trans presente en grasa animal, carne, leche y derivados lácteos. Se puede decir que éste es un primer paso para la formación de ácidos grasos trans. Estudios recientes indican que, al igual que ocurre en los animales rumiantes, en el organismo humano (principalmente en la glándula mamaria) el AV puede convertirse en AR por acción de la enzima Δ-9 desaturasa. Esta conversión contribuye a aumentar la cantidad de AR disponible en el organismo, por lo que la ingesta dietética de AV debe tenerse en cuenta a la hora de predecir el estado de AR47. Aporte de ácido linoléico conjugado a través de la dieta Es difícil cuantificar la ingesta total de ALC a través de la dieta, puesto que no hay datos suficientes sobre el contenido de los isómeros en los alimentos y los factores que lo condicionan. La ingesta media en EE.UU. se ha estimado entre 52 22 22 y 137 mg/día, mientras en Inglaterra y Australia los valores son bastante superiores, de 600-800 mg/día y 1.500 mg/día,respectivamente48. Datos también más elevados son los referidos por Gómez-Candela 49, que estima la ingesta media en las dietas occidentales en torno a 1,5-2 g/día, aunque resalta oscilaciones entre 0,3 y 2,6 g/día; además, menciona que los cambios ocurridos en los últimos 30 años en cuanto a los hábitos alimentarios y a la producción de alimentos han hecho que se consuma un 80% menos de ALC en la dieta actual española. Como suplemento se aconsejan consumos de hasta 3 g/día, que es una dosis similar a la utilizada en la mayor parte de los estudios científicos efectuados.45 Los estudios toxicológicos con cultivos celulares, con animales de experimentación y con humanos efectuados hasta la fecha no refieren que el ALC pueda tener efectos secundarios perjudiciales para la salud a las dosis administradas. Tampoco se ha descrito, de momento, ninguna interacción con medicamentos, ni un posible agravamiento de enfermedades preexistentes50. Los efectos secundarios descritos sólo contemplan la aparición ocasional de diarrea y halitosis. No obstante, la mayoría son ensayos de corta duración (entre 3 y 24 meses)51 de modo que es necesario realizar estudios a largo plazo con el fin de confirmar sin ningún tipo de dudas su inocuidad para el ser humano y estimar las ingestas adecuadas y seguras. Efectos fisiológicos y mecanismos de acción del ácido linoléico conjugado En la actualidad muchos trabajos publicados califican al ALC de «regulador metabólico» y describen diversas propiedades nutricionales y fisiológicas para sus distintos isómeros. Los mecanismos de acción del ALC no se conocen aún con exactitud, pero se han planteado varias hipótesis relacionadas con sus efectos sobre el metabolismo de eicosanoides, con la expresión génica o con el incremento de la actividad lipolítica de los adipocitos. Entre las propiedades atribuidas al ALC destacan: reducción del peso corporal, efecto antiaterogénico, 23 23 hipocolesterolémico e inmunoestimulante, así como propiedades anticarcinogénicas. 47 Efecto sobre la composición corporal y el metabolismo energético El ALC parece tener efectos antilipogénicos y lipolíticos en una amplia variedad de especies animales, tanto rumiantes como monogástricos52. Entre los mecanismos de acción del ALC que se apuntan para explicar estos efectos, cabe citar los siguientes: disminución del número y tamaño de los adipocitos (que se traduce en un menor almacenamiento de grasa tras la ingesta), aumento de la tasa de degradación de grasa en los adipocitos y/o bloqueo de ciertas enzimas53. El efecto lipolítico del ALC se relaciona principalmente con el isómero trans-10,cis- 121, que presenta un importante efecto inhibidor de la lipoproteinlipasa, enzima responsable de la entrada de ácidos grasos a los adipocitos, y un aumento de la actividad de la carnitina-palmitoiltransferasa I, enzima que limita la entrada de ácidos grasos de cadena larga al interior de la mitocondria para su posterior oxidación49. De esta manera se incrementaría la betaoxidación en el músculo esquelético favoreciendo la movilización del tejido adiposo, a la vez que se preservan las reservas protéicas y así se podría explicar la reducción del peso corporal. La inhibición de la actividad de la enzima lipoproteinlipasa también podría estar involucrada en el efecto modulador del peso corporal que produce el ALC, ya que disminuiría la biodisponibilidad de los ácidos grasos hacia los tejidos extrahepáticos54. Riserus et al 55 señalan que, puesto que el isómero cis-9,trans-11 es el predominante en la dieta y el que se incluye junto con el isómero trans-10,cis-12 en productos dietéticos indicados para el adelgazamiento, es importante conocer con mayor profundidad sus posibles efectos metabólicos. 56 Además, se ha comprobado que tanto el isómero cis-9,trans-11 como el isómero trans-10,cis-12 originan RI en personas con obesidad. Leucina 24 24 La leucina es un aminoácido esencial bifurcado que no puede ser producido y sólo puede ser obtenido de la dieta en el humano. Sirve como componente básico para la síntesis de proteínas, pero es también un activador importante del objetivo mToR (Diana de rampimicina en células de mamífero) una tirosinquinasa implicada en muchos procesos celulares, incluyendo la síntesis de proteínas, el crecimiento celular y el metabolismo. 57 Figura 4. Estructura química de leucina 30 minutos posterior a su administración por vía oral la leucina se encuentra en niveles plasmáticos detectables y se mantienen presentes por aproximadamente 24 hrs. Se elimina aproximadamente el 0.9% de la leucina ingerida mientras que aproximadamente 1/3 de la ingesta es oxidada a metabolitos intermedios como el ácido alfa-ketoisocapróico y la beta-hidroxi-beta-metilbutirato y CO2 y el 65% restante es incorporada y utilizada para la síntesis de proteínas, principalmente proteína muscular.58 Influencias reguladoras de la leucina La leucina media la secreción de insulina, la regulación anabólica y la señalización anti-catabólica para mediar así el depósito de proteína, así como el crecimiento. Influye también en el consumo de alimento y el mantenimiento del peso corporal, depósito de macronutrientes y metabolismo, así como la RI y los síntomas de DM2. La leucina puede influir en el comportamiento en términos de la función física y mental, también todas esas acciones son probablemente indirectas y 25 25 mediadas mediante interacciones metabólicas de leucina con los neurotransmisores del sistema nervioso. 59 Comportamiento de la leucina en relación al manejo del peso corporal.60 Entre los varios métodos populares utilizados para controlar el peso corporal y la pérdida de peso, todas las estrategias exitosas tienen una cosa en común, el balance del control energético. Si lo que buscamos es pérdida de peso, la meta es lograr un balance energético negativo donde el gasto energético exceda a la ingesta energética. Las estrategias populares para hacerlo involucran limitar la grasa dietaria y las calorías totales mientras se ingieren proteínas suficientes para mantener el balance de nitrógeno.61 La práctica nutricional actual para pérdida de peso expuesta por muchos nutricionistas involucra niveles mínimos de proteína y grasa dietaria, siendo los carbohidratos los que aportan el resto de energía requerida. Sin embargo, estudios sugieren que dietas altas en carbohidratos están asociadas con lo siguiente: 1) Menor oxidación de grasa corporal 2) Mayores niveles de triglicéridos en sangre 3) Menor sensación de saciedad. 62 Estos efectos no corresponden con la meta de bajar de peso y produce nuevas preguntas sobre los valores de proporción óptimos de macro nutrientes para balancear las necesidades energéticas, especialmente cuando se trata de la ingesta de carbohidratos. Previamente, el foco para perder grasa eran la relación CH: GRASA, pero investigaciones recientes se enfocan en la relación CH: PRO. 63 La razón de este cambio es la evidencia emergente de que: a) dietas altas en carbohidratos pueden bloquear los intentos por perder peso, y b) algunos aminoácidos tienen roles metabólicos adicionales requiriendo niveles plasmáticos e intracelulares superiores a aquellas cantidades de los requerimientos dietarios actuales (RDA). Esto trae a la leucina y su efecto en el metabolismo a primera línea. La diversidad protéica sugerida por la RDA puede no ser adecuada, porque diferentes aminoácidos contribuyen de diferente manera a la función corporal. Por lo tanto, lógicamente ser requieren aminoácidos en cantidades pertinentes a esos roles. El modelo más reciente de la encuesta nacional de nutrición y dieta de la 26 26 supervisión de la ingesta de proteína del Reino Unido, recomiendan un consumo de 17.6% de la energía alimentaria. En una persona físicamente activa de 70 kg, se le indicaun consumo de proteína de 2.41g x kg-1 o 200 mg x kg -1 x d-1 de leucina64. Por lo que a esta razón se recomienda ingerir 100 gramos de hidratos por día y la gluconeogénesis suple la glucosa para los tejidos obligatorios (cerebro, tejido nervioso, células sanguíneas), así como también asegurándose niveles normales de glucemia. Esto podría permitir que un individuo logre una gran pérdida de peso ingiriendo cantidades moderadas de grasa a través de la dieta, reduciendo la ingesta total de carbohidratos, y aumentando el consumo de proteínas para que se alcance la relación CH: PRO DE 1.5-2. Además, la leucina participa en la iniciación de la transcripción, el segundo rol metabólico de la leucina en cuanto a la pérdida de peso, además de su rol indirecto en la gluconeogénesis, se trata de la previamente mencionada regulación de la vía de la trascripción. Como afirmamos anteriormente, para lograr la pérdida de peso, se necesita un balance energético negativo. Por consecuencia, el estado catabólico del cuerpo durante la pérdida de peso a menudo resulta en perdida de tejido corporal magro. Como la leucina tiene la habilidad de revertir la inhibición de la transcripción observada en condiciones catabólicas, puede ayudar a prevenir la pérdida de masa corporal magra, permitiéndonos mantener la masa muscular mientras disminuimos la masa grasa. 65 Reacciones adversas No se han evidenciado efectos secundarios en estudios sobre Leucina, sólo se reporta un incremento de los niveles de amonio en sangre (<35 mmol/L), aumento de las concentraciones de leucina en sangre y aumento de la excreción urinaria de leucina. 66 Además de la dieta y el ejercicio, hay algunos fármacos de utilidad al respecto. Hasta ahora se han aprobado solamente sibutramina y orlistat, ambos con resultados pobres y tolerabilidad mediana. 67 Con el rimonabant, bloqueador 27 27 selectivo de los receptores endocannabinoides, se logran pérdidas de peso sustanciales, reducciones de las cifras de triglicéridos y de glucohemoglobina y aumento de las HDL en pacientes con obesidad y específicamente en los pacientes con diabetes.68 Sus posibles efectos adversos en la esfera psiquiátrica aún deben estudiarse más a fondo. La cirugía bariátrica está indicada en pacientes con obesidad mórbida o, en casos menos avanzados, si coexiste con ECV o DM2. Aceite de linaza El aceite de linaza es un triglicérido extraído de las semillas secas de la planta Linum usitatissimum.69 El aceite de linaza se diferencia de otros aceites por su contenido elevado en ácido alfa linoleico (principal componente), ácido oleico, ácido linoleico y en menor porcentaje ácido palmítico y esterático. El alto contenido de ésteres di y triinsaturados lo hacen susceptible a la polimerización al exponerse al oxígeno y esta oxidación produce la pérdida de sus propiedades emitiendo un olor desagradable, siendo una reacción exotérmica capaz de producir combustión espontánea70. El aceite de linaza está compuesto entonces de grasa sin tener contenido de carbohidratos o proteínas una cucharadita (14g) de aceite de linaza brinda. Grasas 14 g, omega-3 8g, omega 6 2 gramos y omega 9 3 g.71 Figura 5. Estructura del aceite de linaza https://en.wikipedia.org/wiki/File:Triglyceride_unsaturated_Structural_Formulae_V2.svg 28 28 Posterior a su administración el aceite de linaza es metabolizado por la lipasa gástrica convirtiéndose en los ácidos grasos: ácido linoléico, ácido alfa linoléico y ácido oléico, esto junto al metabolismo producido por la fosfolipasa pancreática A2 y la hidrolasa pancreática de ésteres de colesterol favorece la liberación los ácidos grasos libres para su posterior absorción. Los lípidos absorbidos son re- esterificados para formar una vez mas triglicéridos en el retículo endoplásmico liso. Los triglicéridos, fosfolípidos, colesterol y apolipoproteínas se usan para sintetizar quilomicrones y posteriormente ser secretados a la linfa y de ahí a la circulación sistémica. En los tejidos periféricos y en el hígado por medio de la lipoproteín lipasa se depositan los triglicéridos.72 Esta combinación favorable de ácidos grasos (omega 3 y 6, ácido alfa linoléico y linoléico) en el aceite de linaza ha hecho que se le considere como un posible agente terapéutico para así favorecer a pacientes con enfermedad cardiovascular. En cuanto a su efecto sobre lípidos, varía desde no tener efecto, a una disminución leve. Se ha logrado disminuir los niveles de triglicéridos sin presentar un efecto antioxidante significativo. Se ha identificado en modelos animales que el aceite de linaza puede llegar a disminuir las partículas de adhesión celular y el factor estimulante de colonias de monocitos con efectos variables sobre el perfil inflamatorio. Disminuyendo además la agregación plaquetaria y aumentando la actividad del inhibidor de adhesión plaquetaria 1. 73 En humanos existen reportes de algunos beneficios del aceite de linaza como disminución del crecimiento de tumores en etapas avanzadas explicado por su alto contenido de ácido alfa linoléico.74 Sin embargo, la mayoría de efectos benéficos para la salud en humanos que se le atribuyen a la linaza son sus efectos antioxidantes, contenido de fibra y proteínas, con mejoría en el perfil cardiometabólico y lipídico de los pacientes, sin embargo estos efectos no se le atribuyen al aceite de linaza.75 Intervención secundaria farmacológica: 29 29 En personas cuyo cambio del estilo de vida no fue suficiente y que se consideran que mientras no haya un tratamiento definitivo que pueda modular el mecanismo fisiopatológico del SM se debe reducir el impacto de todos los factores de riesgo y evitar las consecuencias metabólicas y cardiovasculares a largo plazo. Intervenciones farmacológicas en el SM Metformina Es uno de los tratamientos orales más utilizados para disminuir la glucosa en el tratamiento de la DM2. Reduce la incidencia del SM. 76 Es un derivado biguanídico clasificado como antihiperglucémico, no está asociado a hiperglucemia significativa o hiperinsulinemia periférica. Se ha descrito que la monoterapia con metformina reduce los niveles de triglicéridos y de colesterol LDL en pacientes con DM2 con o sin obesidad. Sus efectos favorables en el peso corporal y en los lípidos del plasma sugieren a los científicos considerar la metformina como una terapia de primera línea en pacientes con DM2 y obesidad ya que puede utilizarse la terapia combinada de metformina más sulfonilureas en pacientes con DM2 con obesidad. 77 Figura 6. Fórmula química de la metformina Farmacocinética 30 30 La metformina se administra por vía oral, se absorbe principalmente en el intestino delgado, a una dosis de 500 mg, tiene una biodisponibilidad del 50-60%. El fármaco es estable, no se une a proteínas por lo que tiene un amplio volumen de distribución con una máxima acumulación en la pared del intestino delgado y no se metaboliza en el organismo por lo que se excreta sin cambios en la orina, tanto por filtración glomerular como por secreción tubular, tiene una vida media de 6.2 horas y un efecto que dura 8-12 horas. La dosis máxima oscila entre los 2.5 a 3 gramos al día.44 Farmacodinamia: La acción de la metformina de disminuir la glucosa es en gran parte debido a la mejora de la RI hepática que conduce a una reducción de la salida de glucosa hepática, principalmente como resultado del gluconeogénesis.45 La metformina aumenta la respuesta de la captación de glucosa en el músculo, sin producción suplementaria de lactato y aumenta la insulina ya que actúa sobre los receptores de insulina, aumentando la fosforilación y la actividad de la tirosinquinasa en los receptores de insulina. 45 El mecanismo de acción de la metformina es la inducción de la subunidad beta 1 de la 5- AMP- proteinquinasa (AMPK), un sensor de energía celularque se activa durante el estrés metabólico. La activación de AMPK inhibe la producción de glucosa en el hígado, mejora la sensibilidad insulínica y la respuesta a la glucosa por el músculo induciendo la oxidación de ácidos grasos 45, La metformina también podría actuar sobre el control de glucosa por cambios de los depósitos de amiloide en los islotes. Se sabe que los depósitos de amiloide conducen a una disminución en la cantidad de células β habitual en el tratamiento de la DM2. 44,78 Existen varios estudios que reportan la asociación entre el tratamiento de la DM2 y el riesgo elevado de cáncer y mal pronóstico. Esto es explicado en parte por la hiperinsulinemia y la RI características de la DM2. Como hormona anabólica, la 31 31 insulina promueve el crecimiento, proliferación celular y con esto, posee efectos mutagénicos. Existen estudios que han propuesto que la metformina reduce el riesgo de cáncer en pacientes con diabetes. Evans et al. 45 en un estudio de cohorte presenta pacientes recién diagnosticados con DM2, y encontró que el 23% de los pacientes que estaban en tratamiento con metformina redujeron el riesgo de cáncer comparado con los pacientes que estaban en tratamiento a base de sulfonilureas. Reacciones Adversas Causa síntomas gastrointestinales. Un efecto poco frecuente es la acidosis láctica (4.3 casos por 100,000 pacientes /año). Puede interferir en los niveles de vitamina B12; sin embargo, la anemia no es hallazgo frecuente. 35 32 32 III.- ANTECEDENTES El ALC, por su nombre en inglés: conjugated linoleic acid fue descubierto accidentalmente por Pariza et al 79, quienes investigaban las propiedades cancerígenas de productos generados en la carne asada. Este estudio pionero permitió aislar los diferentes isómeros del ALC e identificarlos como el componente con propiedades anticancerígenas. El ALC se presenta naturalmente con diferente isomería estructural, existiendo más de 28 isómeros distintos (principalmente los isómeros c7t9, c9t11, t10c12 y c11t13), predominando la estructura c9t11 identificada como ácido ruménico.46 Blankson et al 80 en el 2000 realizó un estudio doble ciego controlado en Noruega donde participaron 60 pacientes con sobrepeso u obesidad. Los pacientes fueron divididos en 5 grupos en los cuales uno recibía placebo (9g de aceite de oliva), 1.7, 3.4, 5.1 o 6.8 gramos de ALC por día durante 12 semanas respectivamente. Para la medición de la composición grasa se utilizó absorsiometría de rayos X con energía dual. En ninguno de los grupos hubo una reducción significativa en el peso o el IMC después de las 12 semanas de tratamiento. Sin embargo, se observaron diferencias en la composición de masa grasa entre los grupos tratados con 3.4 y 6.8 gramos de ACL después de las 12 semanas de tratamiento. Risérus et al 81 en el 2001 realizó un estudio doble ciego controlado en Suecia donde participaron 25 hombres con obesidad abdominal (Índice cintura-cadera 1.05±0.05; IMC 32±2.7 kg/m2; de edades entre 39-64 años. Los pacientes fueron 33 33 divididos en dos grupos en donde 14 de ellos recibieron 4.2 g de ALC/día divididos en dos dosis, y los 10 hombres restantes recibieron placebo (aceite de oliva 4.2 g). El diámetro abdominal se midió con una cinta métrica no elongable. Después de las 4 semanas de tratamiento el grupo con ALC obtuvo una reducción significativa del diámetro abdominal (P=0.003), mientras que no hubo un cambio significativo en el grupo placebo (P=1.00). El valor promedio disminuido en el grupo de ALC fue de 0.6 cm de diámetro abdominal. Sin embargo, el grupo con ALC presentó una disminución de la circunferencia de la cintura de 1.4 cm (P<0.01) mientras que en el grupo placebo la disminución fue de 0.7 cm (P=0.08). En 2012 en un estudio doble ciego controlado en China sobre el efecto de la suplementación del ALC sobre la pérdida de peso en personas obesas de China participaron personas con un IMC de 24 hasta 35 Kg/m2 en el que un grupo recibió 1.7 g de cis-9, trans-11 y trans-10, cis 12 de ALC mientras que el grupo placebo 200 mL de aceite en leche esterilizada durante 12 semanas. Sesenta y tres pacientes terminaron el estudio. Comparado con los valores iniciales, el peso, el IMC, el porcentaje de masa grasa, la grasa subcutánea y el valor de la circunferencia de la cintura disminuyeron en el grupo de ALC (P<0.05). 82 En otro estudio doble ciego controlado en donde participaron 51 sujetos con IMC de 23 a 33 kg/m2 se comparó dos mezclas diferentes de isómeros (mezcla en proporción 80:20 y 50:50 de los isómeros c9t11:t10c12 de ALC, respectivamente contra ALC. La mezcla 50:50 ALC redujo significativamente los TG (P≤0.005). La concentración de las partículas VLDL fueron significativas (P≤0.05) ya que se redujeron un 32.2% en el grupo ALC 80:20 y no existió una reducción significativa en el grupo ALC 50:50 ya que ésta fue de 27.5%.47 En una investigación previa, la suplementación con distintas dosis de los isómeros c9t11 y t10c12 demostró que los TG plasmáticos, el colesterol total y el colesterol LDL fueron significativamente menores (P<0.05) luego de la dieta rica en c9t11, en comparación con el isómero t10c12. 83 Estos antecedentes sugieren que el ALC podría tener efectos cardioprotectores, modificando favorablemente el metabolismo lipoprotéico en animales y en humanos. 34 34 El estudio de Moloney et al 84, mostró que una suplementación de 3 g /día de una mezcla de isómeros de ALC aumentó en 8% la concentración de colesterol HDL en pacientes con diabetes y produjo una disminución de la relación colesterol LDL/colesterol HDL. Por el contrario, también se han reportado reducciones del colesterol HDL en mujeres obesas con SM e incluso hay autores que postulan que la mezcla de ALC induce una disminución de los niveles de colesterol HDL en sujetos sanos. En contraste a estos resultados positivos, existen estudios en humanos que han encontrado una débil acción del ALC, mientras que otros no han observado cambios en la composición corporal. Roger E. Adams y cols. 85 realizaron un estudio doble ciego controlado en hombres sanos, con duración de 12 semanas; a un grupo se le asignó el consumo de 3.2 g ALC administrado en cápsulas diarias contra un grupo placebo. La grasa visceral se midió por medio de TC abdominal. Sin embargo, al finalizar el estudio no evidenció una reducción significativa de la grasa visceral entre el grupo placebo y el grupo al que se administró ALC. Uno de los posibles motivos por los cuales se han encontrado resultados discrepantes en humanos radicaría en las bajas dosis administradas (en términos de g/kg de peso corporal) en comparación con los estudios en otras especies de animales. Aunque el mecanismo mediante el cual ALC disminuiría la masa grasa no está totalmente aclarado, se postula que la reducción de la grasa corporal total podría deberse a: 1) aumento del gasto energético 2) aumento en la oxidación de ácidos grasos, 3) disminución del tamaño de los adipocitos, 4) disminución de la ingesta energética e 5) inhibición de enzimas involucradas en el metabolismo de los ácidos grasos y en la lipogénesis. En 2012, Vianna D et al. 86 en Brasil realizaron un estudio experimental en el que evaluaron el efecto de la suplementación crónica de leucina durante el envejecimiento ya que se sabe en estudios anteriores que, con la edad, se encuentran alteraciones corporales como aumento de grasa corporal, sarcopenia y 35 35 osteoporosis, y que con la administración aguda del suplemento de leucina se han encontrado la estimulación de síntesis proteica y el decremento de grasa corporal. Por lo que se administró una intervención durante 40 semanas en un modelo de ratas con 6 meses de edad y se encontró disminuciones significativas en peso, grasa corporal y nose encontró alteración en la masa magra en el grupo con intervención. Binder E et al. 87 en 2013 realizaron un estudio experimental en Italia en el que encontraron una mejora de la sensibilidad a la insulina en el modelo de ratas macho C57BL/6J con una dieta alta en grasa primariamente en el descenso de la adoposidad, así como también se encontraron efectos sobre la gluconeogénesis intestinal y la fisiología de los islotes de Langerhans ayudando a la prevención de DM2. Xue-Wei Yuan et al. 88 en 2015 en China realizaron un estudio experimental sobre la sensibilidad que tiene la suplementación con leucina sobre la leptina. Mediante el siguiente diseño en el que en 48 ratas macho de modelo “sprague-Dawley” fueron alimentadas ya sea con una dieta alta en grasa o con una dieta alta en grasa adicionada con suplemento de leucina al 1.5, 3.0 y 4.5% durante 16 semanas. Al final del experimento, se hicieron las mediciones de los niveles séricos de leptina mediante ELISA, el receptor hipotalámico de leucina (ObR, por sus siglas en inglés) mediante un método inmunohistoquímico, así como también la expresión de proteína del ObR y la vía de señalización de leptina en el tejido adiposo fueron detectados por Western Blot. No se encontraron diferencias en el peso, sin embargo, los niveles séricos de leptina disminuyeron significativamente, así como también aumentó significativamente la expresión de ObR tanto en hipotálamo como en tejido adiposo. Se concluyó que la suplementación con leucina mejora la sensibilidad de leptina promoviendo la señalización de leptina. Lourdes Ibañez et Al.89 evaluaron el efecto de metformina sobre la grasa visceral sobre un total de 38 niñas prepuberales (19 recibieron metformina y 19 placebo) posterior a la administración por 4 años con una dosis de 425 mg los primeros 2 años y 850 mg los últimos 2 años. En su estudio las niñas que recibieron 36 36 metformina tuvieron menos grasa visceral (41 vs 28 cm2), perfil de lípidos menos aterogénico, menos resistencia a la insulina y un perfil menos androgénico con retraso de la menopausia. Más recientemente Ichiro Tokubuchi et Al90 describieron el efecto de metformina administrada por un periodo corto (2 semanas) sobre grasa visceral en ratones observando disminución significativa del área de grasa visceral posterior al tratamiento. IV.- JUSTIFICACIÓN México es un país que en los últimos años ha visto un cambio importante en las causas principales de morbilidad y mortalidad. Esta transición epidemiológica ha visto a las enfermedades crónico-no transmisibles y cardiovasculares reemplazar a las infecciosas como causas principales de morbilidad/mortalidad. Según una encuesta del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) 2012 91 las enfermedades cardiovasculares isquémicas y complicaciones de la DM2 son las 2 causas principales en México de mortalidad. En los últimos años, el SM ha causado una auténtica revolución en la estratificación del riesgo vascular y ha pasado a ser uno de los conceptos más utilizados en el área de ciencias de la salud. Describe la agrupación en un individuo de varios trastornos muy prevalentes en el mundo occidental, que son factores de riesgo de ECV y DM2. Los dos mecanismos subyacentes al SM son la adiposidad central y la RI. Los factores que lo exacerban son la edad, los condicionantes genéticos y un estilo de vida inadecuado, en el que se incluye la inactividad física y el consumo de alimentos hipercalóricos y ricos en grasas saturadas, hidratos de carbono concentrados y sal. Los factores de riesgo que componen el SM son la dislipemia aterógena, la HTA, la disglucemia y la exacerbación de la inflamación y la trombosis. Aunque no se incluyen en la definición de SM, en ocasiones pueden ser útiles otros marcadores biológicos, como los relacionados con el tejido adiposo (porcentaje de grasa abdominal, cociente leptina/adiponectina), otros marcadores de dislipemia 37 37 (apolipoproteína B o tamaño de las LDL), disfunción endotelial (medida por la respuesta vasodilatadora en la arteria humeral), marcadores de inflamación (proteína C reactiva) o marcadores de trombosis (fibrinógeno e inhibidor del activador del plasminógeno 1). La concomitancia de estas alteraciones metabólicas es más frecuente de lo que se esperaría por mera casualidad y su agrupación añade riesgo cardiovascular más allá del que aporta cada uno de los factores por separado. Para su manejo se requiere de un manejo multidisciplinario, que incluye cambios en el estilo de vida, psicológico, nutricional, así como también del apoyo farmacológico y no farmacológico. Dentro de las terapias no farmacológicas destaca recientemente el uso del ALC y la leucina que por sus propiedades atribuidas destacan: reducción del peso corporal, particularmente de la circunferencia de la cintura, efecto antiaterogénico, hipocolesterolémico e inmunoestimulante, así como propiedades anticarcinogénicas. En cuanto a la reducción de peso predomina en su mecanismo de acción el efecto antilipogénico y lipolítico. Además, también se caracteriza por su baja o nula toxicidad conocida. La investigación experimental y cultivos celulares es amplia y con resultados muy prometedores; sin embargo, los estudios en humanos aún son escasos y, a veces, contradictorios. Por tal razón, es sumamente importante la realización de proyectos que puedan evaluar el efecto con la propuesta de un tratamiento que actúe sobre el principal factor de riesgo del SM que es la obesidad central a nivel específico de grasa visceral. Actualmente en el laboratorio de mecánica vascular del INTEC, contamos con un equipo para la medición de grasa visceral mediante el análisis de impedancia bioeléctrica (BIA), que es la principal variable de desenlace en este estudio, y en función de los cambios observados posterior a la intervención, se pudo determinar el impacto sobre el resto de los componentes del SM. Nuestra institución contó con toda la infraestructura necesaria para la realización de este proyecto, además de la participación de profesionales de la salud en medicina, nutrición y enfermería 38 38 entre otros, para brindar un tratamiento multidisciplinario y completo a los pacientes incluidos en este estudio. V.- PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA En México la obesidad representa un importante problema de salud pública. En los últimos años ha presentado un considerable incremento en la población. Como resultado, se ha desencadenado un aumento proporcional en la incidencia de la RI, SM y su expresión final que es la enfermedad cardiovascular. 7 El principal contribuyente al desarrollo de RI es la obesidad y más del 80% de los pacientes con obesidad son insulino-resistentes. La expansión de los adipocitos viscerales modifica su actividad endocrino-metabólica con aumento de secreción y niveles plasmáticos de ácidos grasos libres.15 La IDF recomienda como primera intervención cambio al estilo de vida, actividad física y alimentación sana puede representar un impacto benéfico en los criterios del SM. 21 Se sabe que la grasa abdominal es el principal contribuyente para desarrollar SM, por lo que, aunque escasas, algunas investigaciones en seres humanos se han enfocado en reducir el TAV como objetivo primario, ya sea mediante intervenciones farmacológicas como la metformina y no farmacológicas con algunos fitofármacos y nutracéuticos. Dentro de las estrategias no farmacológicas, se ha visto que el ALC disminuye la circunferencia abdominal y la leucina por su parte, actúa inhibiendo la señalización de la glucosa y estimula la síntesis de las proteínas. Sin embargo, el efecto de esta combinación sobre el TAV y TAE en pacientes con SM se desconoce; por lo que el objetivo de la presente investigación fue evaluar el efecto de la 39 39 administración del ácido linoléico/leucina sobreel TAV y TAE en pacientes con SM. 40 40 PREGUNTA DE INVESTIGACIÓN ¿Cuál es el efecto de la administración del ácido linoléico conjugado/Leucina + Metformina Vs aceite de Linaza + Metformina sobre la Grasa Visceral y epicárdica en pacientes con Síndrome Metabólico? VI.- HIPÓTESIS El efecto de la administración de ácido linoléico conjugado/leucina solo o en combinación con metformina para disminuir la grasa visceral y epicárdica, es mayor en comparación con la administración de aceite de linaza sola o en combinación con metformina en pacientes con Síndrome Metabólico. HIPÓTESIS NULA El efecto de la administración de ácido linoléico conjugado/leucina solo o en combinación con metformina para disminuir la grasa visceral y epicárdica, es igual en comparación con la administración de aceite de linaza sola o en combinación con metformina en pacientes con Síndrome Metabólico. VII.- OBJETIVO GENERAL: Evaluar el efecto de la administración de ácido linoléico conjugado/leucina solo y en combinación con metformina versus la administración de aceite de linaza sola o en combinación con metformina sobre grasa visceral y epicárdica en pacientes con Síndrome Metabólico. OBJETIVOS ESPECÍFICOS Medir en la basal y tras 8 semanas de administración de ácido linoléico conjugado/leucina solo o en combinación con metformina la grasa visceral en pacientes con Síndrome Metabólico. 41 41 Medir en la basal y tras 8 semanas de administración de ácido linoléico conjugado/leucina solo o en combinación con metformina la grasa epicárdica en pacientes con Síndrome Metabólico. Medir en la basal y tras 8 semanas de administración de aceite de linaza sola o en combinación con metformina la grasa visceral en pacientes con Síndrome Metabólico. Medir en la basal y tras 8 semanas de administración de aceite de linaza sola o en combinación con metformina la grasa epicárdica en pacientes con Síndrome Metabólico. Comparar el cambio de la grasa visceral tras 8 semanas de administración de ácido linoléico conjugado/leucina solo o en combinación con metformina versus la administración de aceite de linaza sola o en combinación con metformina en pacientes con Síndrome Metabólico. Comparar el cambio de la grasa epicárdica tras 8 semanas de administración de ácido linoléico conjugado/leucina solo o en combinación con metformina versus la administración de aceite de linaza sola o en combinación con metformina en pacientes con Síndrome Metabólico. OBJETIVOS SECUNDARIOS Comparar el cambio del peso corporal tras 8 semanas de administración de ácido linoléico conjugado/leucina solo o en combinación con metformina versus la administración de aceite de linaza sola o en combinación con metformina en pacientes con Síndrome Metabólico. Comparar el cambio de la circunferencia abdominal tras 8 semanas de administración de ácido linoléico conjugado/leucina solo o en combinación con metformina versus la administración de aceite de linaza sola o en combinación con metformina en pacientes con Síndrome Metabólico. Comparar el cambio del índice de masa corporal tras 8 semanas de administración de ácido linoléico conjugado/leucina solo o en combinación con metformina versus la administración de aceite de linaza sola o en combinación con metformina en pacientes con Síndrome Metabólico. 42 42 Comparar el cambio de la composición corporal (% grasa, masa magra) tras 8 semanas de administración de ácido linoléico conjugado/leucina solo o en combinación con metformina versus la administración de aceite de linaza sola o en combinación con metformina en pacientes con Síndrome Metabólico. Comparar el cambio de las concentraciones de glucosa tras 8 semanas de administración de ácido linoléico conjugado/leucina solo o en combinación con metformina versus la administración de aceite de linaza sola o en combinación con metformina en pacientes con Síndrome Metabólico. Comparar el cambio del perfil de lípidos tras 8 semanas de administración de ácido linoléico conjugado/leucina solo o en combinación con metformina versus la administración de aceite de linaza sola o en combinación con metformina en pacientes con Síndrome Metabólico. Comparar el cambio de la presión arterial tras 8 semanas de administración de ácido linoléico conjugado/leucina solo o en combinación con metformina versus la administración de aceite de linaza sola o en combinación con metformina en pacientes con Síndrome Metabólico. 43 43 VIII.- MATERIALES Y MÉTODOS DISEÑO GENERAL DEL ESTUDIO Ensayo Clínico controlado, doble ciego, aleatorizado. SEDE Instituto de Investigación de Terapéutica Experimental y Clínica, Unidad de Mecánica Vascular del Centro Universitario de Ciencias de la Salud de la Universidad de Guadalajara. UNIVERSO DE TRABAJO Hombres y mujeres residentes de la zona metropolitana de Guadalajara, de nacionalidad mexicana entre los 40 y 60 años de edad, con diagnóstico de SM de acuerdo a los criterios de la IDF 12, que de manera voluntaria aceptaron participar en el estudio y firmaron la carta de consentimiento bajo información (Ver Anexo). Tamaño de muestra El tamaño de la muestra se calculó con la fórmula por diferencia de medias para ensayos clínicos de Jeyasselan 92. 𝑛 = 2 ( (𝑍α − 𝑍1−β)(δ) 𝑑 ) 2 La sustitución de valores se realizó de la manera siguiente: El nivel de la confianza estadística se representó por una Zα, con una confianza estadística del 95%, con valor de 1.96 a dos colas, para un error tipo I del 5% que corresponde a un valor α de 0.05. El poder estadístico del 80% se representó por Z1-β, con un valor de 0.842 a dos colas, para un error tipo II del 20%, que corresponde a un valor de β de 0.20. Se representó con las desviaciones estándar de 5.1 47 en individuos con diagnóstico de SM y la diferencia esperada para las mismas variables. Tamaño de muestra 44 44 Tabla 2. Tamaño de muestra de acuerdo a 3 variables Área de grasa visceral abdominal (cm2)[*] Grasa epicárdica (mm)[1] Cintura (cm)57 Nivel de confianza al (%) 95 95 95 Potencia estadística (%) 80 80 80 Desviación estándar () 60.4 2.2 11.4 Diferencia esperada (cm) 19 3.6 9.8 N 25 0.6 4.4 Pérdidas (20%) 30 2 5 *Blankson H, Stakkestad J a, Fagertun H, Thom E, Wadstein J, Gudmundsen O. Conjugated linoleic acid reduces body fat mass in overweight and obese humans. J Nutr. 2000; 130(12):2943– 8. 1 Risérus U, Berglund L, Vessby B. Conjugated linoleic acid (CLA) reduced abdominal adipose tissue in obese middle-aged men with signs of the metabolic syndrome: a randomised controlled trial. Int J Obes Relat Metab Disord. 2001;25(8):1129–35. GRUPOS DE ESTUDIO Se conformaron 4 grupos de estudio por medio del azar simple con la técnica de sobre cerrado. Cada sobre tuvo un código doble ciego que incluyó la información para el grupo de intervención y el número de intervención. Grupo (1) AC LINOLEICO CONJUGADO/LEUCINA + METFORMINA: 26 individuos recibieron AC LINOLEICO CONJUGADO a dosis de 2,475 mg cada 24 hrs 1,650mg (2 cápsulas) con el desayuno y 825mg (1) cápsula con la comida + METFORMINA a dosis de 500 mg cada 24 hrs, previo a la comida principal durante 8 semanas. Grupo (2) METFORMINA + ACEITE DE LINAZA: 26 individuos recibieron METFORMINA a dosis de 500 mg cada 24 hrs (500mg al día) + placebo 45 45 homologado a una dosis de 3600 mg cada 24, (2 capsulas de 1200mg previo al desayuno y una cápsula de 1200mg con la comida) durante 8 semanas. Grupo (3) de intervención con AC LINOLEICO CONJUGADO/LEUCINA + PLACEBO: 26 individuos recibieron AC LINOLEICO CONJUGADO a dosis de 2,475 mg cada 24 hrs 1,650mg (2 cápsulas) con el desayuno y 825mg (1) cápsula con la comida + placebo homologado en su presentación (magnesia calcinada) a una dosis de 500mg cada24 hrs (500mg al día), previo a la comida principal durante 8 semanas. Grupo (4) ACEITE DE LINAZA + PLACEBO: 26 individuos recibieron placebo homologado en su presentación (lecitina de soya) a una dosis de 3600 mg cada 24, (2 capsulas de 1200mg previo al desayuno y una cápsula de 1200mg con la comida) + placebo homologado en su presentación (magnesia calcinada) a una dosis de 500mg cada 24 hrs, previo a la comida principal, durante 8 semanas. CRITERIOS DE SELECCIÓN Criterios de inclusión: Pacientes femeninos y masculinos Edad de 40 a 60 años Pacientes con Síndrome Metabólico según los criterios de la IDF3: o Obesidad: perímetro abdominal ≥80 cm en mujeres y ≥ 90 cm en hombres. o Triglicéridos ≥150 mg/dL (≥1.7mmol/L) o Rx o Colesterol HDL: ≤40 mg/dL (<1.03 mmol/L) en hombres y 50 mg/dL (<1.29 mmol/L) en mujeres. o Tensión Arterial ≥130/85 mmHg o diagnóstico previo de hipertensión o Rx o Glucosa basal ≥100 mg/dL (≥5.6 mmol/L) o Rx Pacientes que firmen la carta de consentimiento bajo información. Peso corporal estable durante los últimos 3 meses (±5%) 46 46 Mujeres que no contemplaron embarazarse, o contaran con un método anticonceptivo confiable excepto hormonales. Criterios de no inclusión: Ascitis Problemas ortopédicos axiales Pacientes con marcapaso Con cirugía abdominal previa Con patologías que cursen con edema de pared abdominal por retención de líquidos. Con paniculitis de origen reumático o de cualquier otra etiología. Enfermedades reumatoides. Con prótesis metálicas Alergia conocida previamente a cualquiera de ingredientes que conforman el principio activo de los tratamientos asignados Incapacidad para medir el área de grasa visceral Problema conocido de absorción de grasas, esteatorrea, deficiencia de lipasa, problemas intestinales de mala absorción, CUCI. Criterios de exclusión: Efectos adversos serios relacionados con la ingesta del fármaco o nutracéutico de estudio. Pacientes que retiren su consentimiento de participación. Falta de adherencia al tratamiento (adherencia menor al 80%) DEFINICIÓN CONCEPTUAL DE VARIABLES. Síndrome Metabólico: es un desorden común causado por una combinación de cierto grado de predisposición genética, estilo de vida sedentario y hábitos alimentarios deficientes. Este síndrome es un factor de riesgo mayor para varias enfermedades crónicas, principalmente Diabetes Mellitus tipo 2(DM2) y enfermedades cardiovasculares (ECV). 2 47 47 IMC: es una medida de obesidad que depende de la asociación entre la masa y la talla de un individuo, donde la masa se expresa en kilogramos y la talla en metros cuadrados, siendo la unidad de medida Kg/m2. Se obtiene a través de la división del peso corporal total expresado en kilogramos y dividido sobre la talla (estatura corporal) expresada en metros y elevada al cuadrado. 93 Grado de obesidad: La obesidad en términos clínicos, se clasifica en diferentes grados dependiendo el porcentaje de grasa corporal (> el 33% en mujeres o 25% en hombres) o aquel derivado del cálculo de IMC, en donde rebasa los 30kg/mts2 94 Grasa visceral: es el acumulo de grasa intraperitoneal abdominal estimada mediante impedancia bioeléctrica y expresada como área en cm2. 37 Grasa epicárdica: es el tejido que se encuentra en el espacio comprendido entre el músculo epicárdico y la membrana visceral del pericardio y se expresa en centímetros. 41 Peso corporal: es la cantidad de masa que alberga el cuerpo de una persona, y es expresada en kilogramos. Circunferencia de cintura: es el perímetro de la cintura, ubicado a la altura de la cicatriz umbilical, o en personas con sobrepeso en la parte más prominente del abdomen. Se expresa en centímetros y tiene como objetivo estimar la grasa abdominal o visceral.95 Circunferencia de cadera: es el perímetro de la cadera, ubicado a nivel de la parte más prominente de los glúteos, es expresado en centímetros.74 Índice cintura-cadera (ICC): es la relación que resulta de dividir el perímetro de la cintura de una persona por el perímetro de su cadera. Este índice está asociado a un aumento en la probabilidad de padecer ECV. 74 Estatura corporal: es la medida longitudinal del cuerpo humano desde los pies hasta el techo de la bóveda del cráneo. 48 48 Resistencia a la insulina: es una condición que aumenta las probabilidades de desarrollar Diabetes tipo 2 y enfermedades del corazón. 8 Glucosa sanguínea: es la cantidad de glucosa que contiene la sangre y se mide en mg/dL. 69 Colesterol total: es la cantidad total de todos los tipos de colesterol concentrados en la sangre (LDL, HDL y VLDL) y es expresado en mg/dL. 69 Triglicéridos: se refiere a la cantidad total de triglicéridos concentrados en la sangre y se expresa en mg/dL. 69 Riesgo cardiovascular: Es el riesgo de presentar un evento cardiovascular en los próximos 10 años, en función del género, la edad, la presión arterial sistólica, los niveles de colesterol total, colesterol HDL, tabaquismo y diabetes, expresado en porcentaje. DEFINICIÓN OPERACIONAL DE VARIABLES. Tabla 3. Definición operacional de variables 49 49 Variable Unidad Escala Tipo de variable Indicador Estadística descriptiva Estadística analítica IMC kg/m2 Obesidad grado I, obesidad grado II. Cualitativa Obesidad grado I= IMC ≥30 y <35. Obesidad grado II= IMC≥ 35 y <40. Promedio ± DE U de Mann Whitney/ Wilcoxon Grasa visceral Cm2 Normal, Riesgo de comorbilidad aumentado* Cuantitativa >100 cm2 de superficie de grasa visceral. Promedio ± DE U de Mann Whitney/ Wilcoxon Grasa epicárdica Milímetros (mm) Normal, Riesgo de comorbilidad aumentado* Cuantitativa Promedio ± DE U de Mann Whitney/ Wilcoxon Peso corporal total Kilogramos (kg) Normal, Riesgo de comorbilidad aumentado* Cuantitativa Promedio ± DE U de Mann Whitney/ Wilcoxon Circunferencia de cintura Centímetros (cm) Normal, Riesgo de comorbilidad aumentado* Cuantitativa Normal: Mujeres <80 cm Hombres <90 cm Riesgo aumentado: Mujeres ˃80 cm Hombres ˃90 cm. Promedio ± DE U de Mann Whitney/ Wilcoxon Circunferencia de cadera cm Normal, Riesgo de comorbilidad aumentado* Promedio ± DE U de Mann Whitney/ Wilcoxon Índice cintura- cm Normal, Riesgo de Cuantitativa Mujeres Promedio ± U de Mann Whitney/ 50 50 cadera (ICC) comorbilidad aumentado* ≥0.80 Hombres ≥0.95 DE Wilcoxon Estatura corporal Metros (m) Cuantitativa Promedio ± DE U de Mann Whitney/ Wilcoxon PA mmHg Óptima, PA normal, PA fronteriza, Hipertensión (HTA) I, HTA II, HTA III Cuantitativa Óptima: <120/<80 mmHg. PA normal: 120-129/80- 84 mmHg. PA fronteriza: 130-139/85- 89 mmHg. HTA I: 40-159/90-99 mmHg. HTA II: 160-179/100- 109 mmHg. HTA III: ≥140/<90 mmHg. Promedio ± DE U de Mann Whitney/ Wilcoxon Glucosa sanguínea mg/dL Óptima, prediabetes, diabetes Cuantitativa Óptima: <100 mg/dL Prediabetes: 100-125 mg/dL Diabetes: Promedio ± DE U de Mann Whitney/ Wilcoxon 51 51 PROCEDIMIENTOS 1. Se realizó una cita a los pacientes al CUCS de la Universidad de Guadalajara, una vez aquí, se les explicó en qué consistía el estudio, aclarar dudas y posteriormente se les solicitó firmar el consentimiento informado (ver anexo VII). 2. Se elaboró una historia clínica y nutricional completa para determinar el estado general de salud y descartar patología subyacente (Anexo VI) 3. Con el paciente en bipedestación se midió peso corporal con báscula de IB marca
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