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El Templo de los Últimos días- Thomas Ice y Timothy Demy

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Serie «Profecía»
HI
is
E D ITO R IA L P O R TA V O Z
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uti ice este material para su evaluación, y, si es de su gusto, 
bendiga al autor, editores y librerías, con la compra del libro.
KnmiknYE PDF
Título del original: The Truth About the Last Days’Temple, 
© 1996 por Pre-Trib Research Center y publicado por Harvest 
House iHiblishers, Eugene, Oregon 97402.
Edición en castellano: El templo de los últimos días por 
Thomas Ice y Timothy Demy, © 1997 por Editorial Porta­
voz, filial de Kregel Publications, Grand Rapids, Michigan 
49501.
Traducción: Santiago Escuain 
Diseño de la portada: Alan G. Hartman 
Compaginación: Nicholas G. Richardson
EDITORIAL PORTAVOZ
Kregel Publications 
P O. Box 2607
Grand Rapids, Michigan 49501 EE. UU. 
ISBN 0-8254-1341-9
2 3 4 5 edición/año 01 00 99
Printed in the United States o f America
Contenido
--------------- P R IM E R A P A R T E -----------
¿Qué es el templo de los últimos días?
1. ¿Cuántos templos se mencionan en la Biblia? 8
2. ¿ Cómo preparó el tabernáculo a Israel para el 
templo ? 9
3. ¿Cuál es el propósito del templo de Israel? 11
4. ¿Dónde enseña la Biblia acerca del Templo de los 
últimos días ? 13
--------------- S E G U N D A P A R T E ----------------
¿Qué enseña la Biblia acerca de los
templos de Israel?
5. ¿Qué enseña la Biblia acerca del primer templo? 15
6. ¿Qué enseña la Biblia acerca del segundo templo? 18
7. ¿Qué enseña la Biblia acerca de la iglesia como 
templo espiritual? 20
8. ¿Qué enseña la Biblia acerca del tercer templo? 21
9. ¿Qué enseña la Biblia acerca del cuarto templo? 24
---------------- T E R C E R A P A R T E --------------
¿Qué más sabemos acerca del 
Templo de la Tribulación?
10. ¿Ha habido intentos de edificar el tercer templo en 
tiempos modernos ? 26
11. ¿Quién posee y controla actualmente el monte del 
Templo? 27
12. ¿Cuáles son los planes y los preparativos para el 
próximo templo de Israel? 29
13. ¿Qué impide a los judíos la construcción del templo 
en la actualidad? 30
14. ¿Cuándo se reconstruirá el templo de Israel? 32
NDBG-U35-HDQD
4 El templo de los últimos días
15. ¿Dónde se situará el próximo templo sobre el monte del
Templo? 33
16. ¿Tiene alguna relación el Arca del Pacto con la
reconstrucción del templo ? 37
------------------ C U A R T A P A R T E ----------------
¿Qué más sabemos acerca del templo milenario?
17. ¿Porqué habrá un templo milenario? 38
18. ¿Porqué habrá sacrificios en el templo milenario? 39
19. ¿Cuál es el origen del templo milenario? 41
20. ¿Es eterno el templo milenario? 42
------------------- Q U IN T A P A R T E ------------------
¿Cuál es la relevancia de los 
templos para los cristianos en el día de hoy?
21. ¿ Por qué son importantes los templos pasados de
Israel ? 43
22. ¿Qué importancia tiene el templo espiritual? 43
23. ¿Qué importancia tiene el templo de la tribulación? 43
24. ¿Qué importancia tiene el templo milenario? 44
Conclusión 44 
Cronología del templo 45 
Notas 46
Acerca de esta serie
La serie «Profecía» está pensada para dar a los lectores 
un breve sumario de temas y cuestiones individuales de la 
profecía bíblica. Para referencia rápida y facilidad de es­
tudio, estas obras se redactan en un formato de pregunta y 
respuesta. Las preguntas siguen una progresión lógica, de 
modo que el lector que las lea seguidas conseguirá un mejor 
aprecio por el tema y las cuestiones involucradas. Cada 
título está totalmente documentado con notas al final del 
libro.
La perspectiva teológica que se presenta en toda la se­
rie es la premilenarista y pretribulacional. Los autores re­
conocen que ésta no es la única posición aceptada por los 
cristianos evangélicos, pero creemos que es la perspectiva 
de mayor aceptación y más destacada. Es también nuestra 
convicción que el premilenarismo, y de manera específica 
el pretribulacionismo, es la explicación más acorde con el 
plan profètico de Dios revelado en la Biblia.
El estudio de la profecía y de sus intrincados compo­
nentes es una empresa detallada y compleja, pero no es de 
imposible comprensión o resolución. Es susceptible de 
error, malas interpretaciones y confusión. Pero esas posi­
bilidades no deberían inducir a ningún cristiano a apartar­
se del estudio de la profecía ni a alejarse de una sincera y 
útil discusión acerca de la misma. El propósito de esta se­
rie es proporcionar una herramienta concisa y coherente a 
todos los que deseen una mejor comprensión de las Escri­
turas. Si el lector profundiza, tendrá grandes compensa­
ciones, y obtendrá satisfacción al ir creciendo en el 
conocimiento y en el amor de nuestro Señor Jesucristo y 
de su Palabra.
5
Libros de la serie «Profecía» por 
Thomas Ice y Timothy J. Demy
El Anticristo 
El arrebatamiento
2.000 d.C .y la predicción de la venida de Cristo
El milenio
Jerusalén en la profecía bíblica 
El templo de los últimos días 
La tribulación
P R IM E R A P A R T E
¿Qué es el templo de los últimos días?
En 1989, la revista Time publicó un artículo titulado «¿Es 
hora ya de un nuevo templo?», en el que informaba del creciente 
deseo de muchos judíos devotos de ver un nuevo templo erigido 
sobre el monte del Templo en Jerusalén. El corresponsal 
comenzaba escribiendo:
«Que sea tu voluntad que el templo sea rápidamente 
reconstruido en nuestros días
» Este ruego a Dios, recitado tres veces cada día en las 
oraciones judías, expresa un anhelo que hace del monte 
del Templo en Jerusalén los 35 acres potencialmente 
más conflictivos sobre la tierra.1
En los años transcurridos desde este artículo, en nada ha 
disminuido el deseo para la reconstrucción del templo. De 
hecho, las expectativas y los preparativos continúan creciendo. 
El apoyo público para la reconstrucción del templo, que antes 
era bajo, está constantemente creciendo. Las tensiones en el 
Oriente Medio siguen intensas, y los problemas religiosos y 
políticos de la región siguen haciendo titulares en las noticias 
de todo el mundo. Pero, incluso en estos tiempos turbulentos, 
los activistas del movimiento del templo siguen intensificando 
sus esfuerzos.
Las fuerzas de la política, de la diplomacia, de la religión 
y de la cultura convergen todas sobre el monte del Templo 
del que se puede decir que es el trozo de terreno más 
significativo del mundo entero. Un conflicto principal entre 
judíos y musulmanes es que hay una mezquita musulmana, 
la Cúpula de la Roca, que se levanta sobre lo que se reconoce 
generalmente como el emplazamiento del templo de Jerusalén. 
El activismo centrado en el templo ha causado preocupación 
y conflictos a nivel internacional, y sigue siendo un 
detonador a corto plazo que podría hacer estallar la 
próxima guerra mundial. No hay soluciones fáciles ni 
sencillas en este 
complejo drama internacional, y la retórica está al rojo vivo.
El líder de los fieles del monte del Templo, el doctor
7
8 El templo de los últimos días
Gershon Salomón, que es uno de los defensores más visibles 
y activos en favor de la reconstrucción del templo, declara:
Creo que es la voluntad de Dios. [La Cúpula de la 
Roca] tiene que ser desplazada. Debemos, sabe usted, 
quitarla de este lugar. Y en la actualidad tenemos todos 
los instrumentos para hacerlo, piedra a piedra, muy cui­
dadosamente, y luego ponerla en un paquete y enviarla 
de vuelta a La Meca, de donde vino.2
Las declaraciones de esta clase están sumamente caiga- 
das de emoción y se expresan con una fírme convicción. Con 
toda certeza, cualquier actividad alrededor del monte del Tem­
plo fomentará el caos y suscitará condenas de una o más de 
las entidades religiosas o políticas involucradas.
Pero el sueño de reconstruir el templo es a la vez realista y 
bíblicamente exacto; un día se cumplirá de manera íntegra. 
La Biblia enseña de manera explícitaque esta reconstruc­
ción se hará realidad. Sin embargo, la alegría será pasajera y 
el culto será interrumpido. Como veremos de atisbos de la 
historia y de la Biblia, el nuevo templo no será el primero ni 
el último en ser erigido. Su construcción es segura, pero tam­
bién son ciertos los días turbulentos que la acompañarán.
1. ¿Cuántos templos se mencionan en la Biblia?
La Biblia emplea el término templo de muchas maneras. 
El término castellano templo se deriva del vocablo latino 
templum, que es traducción del sustantivo hebreo hekal, 
que significa «casa grande». En el Antiguo Testamento, 
templo se refiere casi siempre al templo de Jerusalén. Al 
pasar al Nuevo Testamento, el uso primario de templo sigue 
haciendo referencia al templo de Jerusalén. Sin embargo, 
Cristo comparó su cuerpo a aquel templo (véanse Mt. 
26:61; Mr. 14:58; 15:29; Jn. 2:19). El apóstol Pablo se 
refiere al «cuerpo de Cristo» como un templo espiritual 
(Ef. 2:21); y el cuerpo del creyente individual es un «templo 
del Espíritu Santo»; «¿No sabéis que sois templo de Dios, 
y que el Espíritu de Dios mora en vosotros?» (1 Co. 3:16; 
véase también 6:19).
En ocasiones, la Biblia se refiere también a un templo 
celestial. Isaías fue llevado al cielo, y describe una escena 
que bien podría ser el templo celestial (Isaías 6). Juan, el 
Revelador, arrebatado al cielo, habla de manera específica de 
un templo celestial desde donde Dios supervisa los juicios de 
la tribulación y envía a sus ángeles con sus órdenes (Ap. 7:15; 
11:19; 14:15, 17; 15:5,6,8; 16:1,17). El templo celestial, en
¿Qué es el templo de los últimos días? 9
cierto sentido, sirve de modelo para las varias moradas 
terrenales de Dios (es decir, el tabernáculo, el templo y el 
templo espiritual).
En relación con el templo en Jerusalén, la Biblia se refiere 
a cuatro otros templos:
En la Biblia se mencionan cuatro templos de Jerusa 
lén. Dos de ellos (el de Salomón y el de Herodes) han 
venido y se han ido, pero está profetizada la 
construcción de otros dos en el futuro (el templo de la 
tribulación y el templo milenario). El último templo (el 
milenario) 
será erigido por el Señor Jesucristo mismo cuando Él 
establezca el reino mesiánico
 Pero antes ha de ser levantado el templo de la 
tribulación.3
Es digno de observar que en la eternidad no hay templo. 
«[Un ángel] me mostró la gran ciudad santa de Jerusalén, 
que descendía del cielo, de Dios
 Y no vi en ella templo; porque el Señor Dios 
Todopoderoso es el templo de ella, y el Cordero» (Ap. 
21:10, 22).
2. ¿Cómo preparó el tabernáculo a Israel para el 
templo?
El tabernáculo podría ser considerado como un «templo 
transportable», un templo peregrino para un pueblo 
peregrino. «El tabernáculo era una estructura provisional, 
siendo movido de lugar a lugar hasta que los israelitas se 
unificaran política y espiritualmente».4 Como precursor del 
templo de Salomón, el tabernáculo sirvió para muchas de 
las mismas funciones y propósitos.
Israel vino a ser una nación al ser librada de la esclavitud 
de Egipto. En este punto, la presencia de Dios se manifestaba 
por medio de una nube durante el día y de una columna de
fuego durante la noche. Una vez los israelitas quedaron li
bres de la persecución de Faraón, el Señor les dio 
instrucciones tocantes a la construcción del tabernáculo:
Y harán un santuario para mí, y habitaré en medio de 
ellos. Conforme a todo lo que yo te muestre, el diseño 
del tabernáculo, y el diseño de todos sus utensilios, así lo 
haréis (Éx. 25:8,9).
Y santificaré el tabernáculo de reunión y el altar; 
santificaré asimismo a Aarón y a sus hijos, para que 
sean mis sacerdotes. Y habitaré entre los hijos de 
Israel, y 
seré su Dios. Y conocerán que yo soy Jehová su Dios,
Los cuatro templos de Israel
Primera 
venida del 
Mesías
Primer templo
(de Salomón) 
Presencia de la Shekiná 
(1 R. 5-8)
Segundo templo
(De Zorobabel y Herodes)
Presencia del águila romana
(Esd. 3:7— 6:18; Mt. 24:1-2; 
Mr. 13:1-2; Le. 21:5-6)
Segunda 
venida del 
Mesías
t
Templo en ruinas
La Cúpula de la Roca 
domina el emplazamiento
Diàspora judía 
Era de la Iglesia
Inclusión de los gentiles 
(Ro. 9-11)
Tercer templo
Presencia de la 
abominación de la 
desolación
(2 Ts. 2:4;
Ap. 11:1-2)
Templo
milenario
Presencia de la Shekiná
(Ez. 40-43:27;
Is. 2:2-3; 56:7)
n
I
Edificación 
del primer 
templo
Io» U"l
o®
I
Destrucción 
del primer 
templo (por 
ios babilonios)
a» en
PiS
I
Edificación 
del segundo 
templo (de 
Zorobabel)
n
Ampliación 
del segundo 
templo (por 
Herodes)
O
Destrucción 
dei segundo 
templo (por 
los romanos)
La Iglesia, 
el templo 
espiritual 
de Cristo
(Hch. 2; Ef. 2).
Edificación 
del tercer 
templo
Profanación 
del tercer
Batalla de Gog
y de M agog * A n t't ri %{ o ) 
(Ez 38-39) (Dn. 926- 27;
' ; 11:31; 12:11;
M t. 24:15; 
Mr. 13:14)
Milenio
(Edad mesiánica)
(Is. 2:2-4; 11; 29:6; Sal. 2; Dn. 7:13- 
14; Jer. 23:5; Zac. 14.-9-21; M t 19.28; 
Hch. 1:6-7; 3:18-24; Ro 8:18^22; He. 
2:10; Ap. 11:5; 20).
^ Edificación del cuarto 
tem plo (por el Mesías)
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¿Qué es el templo de los últimos días? 11
que los saqué de la tierra de Egipto, para habitar en 
medio de ellos. Yo Jehová su Dios (Éx. 29:44-46).
Cuando Israel estaba todavía en su peregrinación en el 
desierto, Dios dio disposiciones para el tiempo futuro en que 
el tabernáculo llegaría a ser el templo.
Sino que el lugar que Jehová vuestro Dios escogiere 
de entre todas vuestras tribus, para poner allí su nombre 
para su habitación, ése buscaréis, y allá iréis
 Mas pasaréis el Jordán, y habitaréis en la tierra que 
Jehová vuestro Dios os hace heredar; y él os dará 
reposo de todos vuestros enemigos alrededor, y 
habitaréis seguros. Y al 
lugar que Jehová vuestro Dios escogiere para poner en 
él su nombre, allí llevaréis todas las cosas que yo os 
mando: vuestros holocaustos, vuestros sacrificios, 
vuestros diezmos, las ofrendas elevadas de vuestras 
manos, y todo lo escogido de los votos que hubiereis 
prometido a Jehová (Dt. 12:5, 10, 11).
Después que la nación entrase en la Tierra Prometida, y 
David fuese rey. Dios habló con él acerca de la edificación 
del templo. El sueño de Salomón vino a ser la realidad de 
Salomón. Una vez quedó consagrado el templo, la presencia 
visible de Dios pasó del tabernáculo al templo. «Porque aho
ra he elegido y santificado esta casa, para que esté en ella mi 
nombre para siempre; y mis ojos y mi corazón estarán ahí 
para siempre» (2 Cr. 7:16).
El tabernáculo temporal preparó el camino para el templo 
permanente al establecer la pauta y el propósito para el culto de 
Israel al Señor. Una vez Israel pasó del tabernáculo al templo, 
el emplazamiento de la presencia de Dios quedó establecido y 
sacralizado para el resto de la historia.
3. ¿Cuál es el proposito del templo de Israel?
El templo de Israel dio al pueblo de Dios un símbolo 
visible de su presencia invisible, y sirvió para enseñar a los 
judíos muchas lecciones. Aunque Israel era como los 
gentiles en que todos tenían templos para sus dioses, el 
templo de Israel era diferente en muchas maneras:
Por todo el antiguo Medio Oriente, los templos se 
edificaban como regias residencias para los dioses de la 
gente. El deber del hombre era proveer a las necesidades 
físicas de los dioses: alimentos, agua, vestido e 
innumerables golosinas, y a cambio de estos servicios,
12 El templo de los últimos días
se esperaba de los dioses que proveyeran a las 
necesidades humanas.
El culto de Israel estaba en total oposición al concepto 
pagano de dios y de templo. El Dios israelita no era un 
dios local, ni se le podía localizar. Él era el Trascendente, 
cuyo ser no podía quedar encerrado en ninguna estructura 
física, ni necesitaba lugar para refugio ni santuario.
Además, el Dios de Israel no tenía necesidad alguna 
de provisión humana. Él era quien proveía a las necesi
dades humanas desde unas infinitas reservas de riquezas 
divinas....... La presencia de Dios no moraba en el templo 
israelita del mismo modo que un dios estaba presente en 
todos los templos paganos del mundo. Por esta razón el 
Dios de Israel no podía ser representado en forma por un 
ídolo (Éx. 20:4; Dt. 4:15-19) y colocado en un santuario 
(Ez. 8:2-12) según la práctica de la religión cananea.
El templo de Israel, en lugar de ser un lugar donde se 
suplían las necesidades de Dios; era un lugar donde Dios 
suplía las necesidades de su pueblo.s
Desde el Huerto del Edén, ha sido el deseo de Dios tener 
comunión con su pueblo y establecer una presencia en medio 
del mismo. La gramática hebrea en Génesis 3:8 sugiere que el 
Huerto del Edén, antes de la Caída, era un santuario donde Dios 
se encontraba con Adán y Eva para tener comunión con ellos. 
«Y oyeron la voz de Jehová Dios que se paseaba en el huerto, 
al aire del día; y el hombre y su mujer se escondieron de la 
presencia de Jehová Dios entre los árboles del huerto.»
Después de la intrusión del pecado en el mundo, un Dios 
santo ya no podía encontrarse cara a cara con la humanidad 
pecadora. Así, fue necesaria la expulsión de los hombres del 
santuario y el establecimiento de guardas angélicos (Gn. 
3:22-24).
A fin de que Dios restableciese una santa presencia y 
relación con la humanidad en un mundo pecaminoso, se debía 
establecer un lugar sagrado. El tabernáculo de Israel, y 
posteriormente el templo, suplieron esta necesidad.
Mientras que el propósito general de Dios era establecer 
su presencia y mostrar favor a su Pueblo Escogido, también 
se hacen evidentes muchas otras razones: el templo era un 
recordatorio diario de que Dios era un Dios santo e Israel una 
nación escogida; el sacerdocio y los rituales diarios demos
traban que para que una gente pecadora pudiese acudir a la 
presencia de Dios, tenía que existir algún método aceptable 
de aproximación; la obra prefigurada en ios sacrificios dia
rios era la de Cristo en la cruz; y también enseñaba que Israel 
debía vivir una vida separada y santa cada uno de sus días.
¿Qué es el templo de los últimos días? 13
4. ¿Dónde enseña la Biblia acerca del templo de los
últimos días?
La Biblia habla de dos templos en el futuro de Israel. Los 
dos primeros templos han venido y se han ido, mientras que 
los dos últimos tienen que ser erigidos todavía. El templo de 
la tribulación (el tercer templo) será el próximo, mientras que 
el templo milenario (el cuarto templo) aparecerá después que 
Jesús el Mesías vuelva al planeta Tierra y lo edifique para 
emplearlo durante su reinado mesiánico.
El templo de la tribulación
No hay versículos bíblicos que digan: «Existirá un tercer 
templo.» Pero el hecho de que habrá un templo judío en Jeru- 
salén al menos hacia el punto central del período tribulacional 
de siete años es sustentado por al menos cuatro referencias 
escriturarias:
Daniel 9:27 (RVR77)
Y [el Anticristo] hará que se concierte un pacto con 
muchos [la nación de Israel] por una semana [siete años]; 
a la mitad de la semana [tres años y medio] hará cesar 
[el Anticristo] el sacrificio y la ofrenda; y en el ala del 
templo [el altar en el templo] estará la abominación ho­
rrible [del Anticristo], hasta que la ruina decretada se 
derrame sobre el desolador [el Anticristo].
Este pasaje describe un futuro periodo temporal de siete 
años, durante el que el Anticristo profana el templo de Israel 
por medio de un acto de maldad al cabo de tres años y medio. 
A fin de que esto suceda, ha de haber un templo en Jerusalén. 
Por tanto, podemos concluir en base de este acontecimiento 
futuro que el tercer templo ha de ser edificado y ha de estar 
en operación para este tiempo.
De la misma manera, Daniel 11:31 habla de un futuro 
acontecimiento, cuando se abolirán «el sacrificio y la 
ofrenda» normativos y se establecerá la «abominación de 
la desolación» en el tercer templo. El erudito profètico John 
Walvoord observa que el «templo de aquel tiempo futuro 
será profanado de manera muy semejante a como Antioco 
profanó el templo de su tiempo en el siglo segundo a.C., 
deteniendo los sacrificios y poniendo el templo al servicio 
del paganismo».6 Daniel 12:11 se relaciona también con esto: 
«Y desde el tiempo que sea quitado el continuo sacrificio 
hasta la abominación desoladora, habrá mil doscientos 
noventa días.»
14 El templo de los últimos días
Mateo 24:15, 16 (RVR77)
Por tanto, cuando veáis en el lugar santo la abomina­
ción de la desolación, anunciada por medio del profeta 
Daniel (el que lee, entienda), entonces ios que estén en 
Judea, huyan a los montes.
Cuando Jesús se refiere a «la abominación de la 
desolación» que está «en el lugar santo», se está refiriendo 
al mismo acontecimiento que menciona Daniel en Daniel 
9:27. El «lugar santo» es una referencia a la estancia más 
santa dentro del templo de Israel. ¿Qué templo? El tercer 
templo, por cuanto es un acontecimiento futuro. El doctor 
Tim LaHaye nos dice que «Mateo 24:15 nos presenta “la 
abominación de la desolación“ cuando el Anticristo profana 
el templo reconstruido de Jerusalén». Luego añade: 
«Evidentemente, tiene que ser reconstruido para poder 
profanado.»7
2 Tesalonicenses 2:3, 4
Nadie os engañe en ninguna manera; porque [el día 
del Señor] no vendrá sin que antes venga la apostasía, y 
se manifieste el hombre de pecado, el hijo de perdición 
[el Anticristo], el cual se opone y se levanta contra todo 
lo que se llama Dios o es objeto de culto; tanto que se 
sienta en el templo de Dios como Dios, haciéndose pa­
sar por Dios.
En este pasaje vemos, por tercera vez, una descripción 
de «la abominación de la desolación». Esta vez se designa 
como el acontecimiento en el que el Anticristo «se sienta en 
el templo de Dios». Otra vez, ¿qué templo? La clara 
respuesta es que se trata del futuro tercer templo. El doctor 
Charles Ryrie nos dice que «a la mitad del período de la 
tribulación, el Anticristo execrará el reconstruido el templo 
judío en Jerusalén al colocarse él mismo, presentándose allí 
para ser adorado».8 Este acto de autodeificación es la 
abominación de la desolación.
Apocalipsis 11:1,2
Entonces me fue dada una caña semejante a una vara 
de medir, y se me dijo: Levántate, y mide el templo de 
Dios, y el altar, y a los que adoran en él. Pero el patio 
que está fuera del templo déjalo aparte, y no lo midas, 
porque ha sido entregado a los gentiles; y ellos hollarán 
la ciudad santa cuarenta y dos meses.
¿Qué enseña la Biblia ... ? 15
Por cuanto la sección de Apocalipsis en el que aparece 
este pasaje tiene lugar durante el período de la tribulación, se 
trata de una referencia al tercer templo de Israel en Jerusalén.
El templo milenario
La Biblia enseña en Ezequiel 40-48 que habrá un cuarto 
templo. Este templo final será el centro alrededor del que gi­
rará la adoración de Jesucristo durante el milenio.
Y me dijo: Hijo de hombre, este es el lugar de mi 
trono, el lugar donde posaré las plantas de mis pies, en el 
cual habitaré entre los hijos de Israel para siempre; y 
nunca más profanará la casa de Israel mi santo nombre, 
ni ellos ni sus reyes, con sus fornicaciones, ni con los 
cuerpos muertos de sus reyes en sus lugares altos (Ez. 
43:7).
Tú, hijo de hombre, muestra a la casa de Israel esta 
casa, y avergüéncense de sus pecados; y midan el diseño 
de ella (Ez. 43:10).
El Antiguo Testamento hace referencia también a los sa­
crificios que se llevarán a cabo en el templo milenario en los 
siguientes pasajes: Isaías 56:7; 60:7, 13; 66:20-23; Jeremías 
33:15-22; Zacarías 14:16-21.
S E G U N D A P A R T E
¿Qué enseña la Biblia 
acerca de los templos de Israel?
5. ¿Qué enseña la Biblia acerca del primer templo?
El primer templo (conocido también como el templo de 
Salomón) fue edificado por el hijo de David, el Rey Salomón, 
después de la muerte de David. Aunque había sido deseo de 
David edificar el templo, Dios no se lo permitió, por cuanto 
David había sido hombre de guerra más que de paz (véanse 1 
R. 5:3; 2 S. 7:1-13). Su propósito fue dar un hogarpermanen­
te al arca del pacto y al culto del Señor.
Salomón comenzó la construcción en el cuarto año de su 
reinado (c. 967-960 a.C.) y la terminó siete años después (1 
R. 6:1, 37, 38). La Biblia da relatos detallados acerca de la 
construcción del templo en 1 Reyes 5-8 y 2 Crónicas 2.
El templo de Salomón, que seguía las proporciones del 
tabernáculo, cubría unos 325 metros cuadrados, y estaba edi­
ficado sobre una plataforma de 3 metros de altura con diez
16 El templo de los últimos días
escalones que llevaban a la entrada. Dos columnas de bron­
ce, de unos 12 metros de altura y de 3,6 metros de circunfe­
rencia, estaban a cada lado de la entrada del templo. La primera 
estancia, la más pequeña del templo, era un porche que con­
ducía a la estancia principal, la segunda de las tres estancias, 
llamada en la Biblia el Lugar Santo.
Las paredes interiores del Lugar Santo están cubier­
tas de paneles de cedro esmeradamente tallados 
recubiertos o chapados de oro. El suelo está cubierto de 
tablas de ciprés, de modo que no se ven las piedras. Ade­
más, Salomón ha adornado esta estancia con hermosas 
piedras preciosas.
Dentro de esta maravillosa cámara central están los 
magníficos candeleros de siete brazos, o menorahs, la 
mesa de los panes de la proposición, sobre las que hay el 
sagrado pan de la presencia, y el Altar de Oro del incien­
so, donde se queman especias aromáticas para enmasca­
rar el terrible hedor del sacrificio en el exterior. También 
en esta estancia había diez mesas (cinco al lado del noite 
y cinco al del sur), acompañadas de diez lámparas sobre 
lampadarios, así como numerosos instrumentos emplea­
dos en el servicio sacerdotal.9
El Lugar Santísimo, la estancia tercera y final, era la más 
significativa.
Siguiendo, nos veríamos impedidos de entrar al Devir, 
la estancia más interior, por una doble cortina de espesa 
tela y por una pared cuya única puerta se mantiene ce­
rrada excepto en raras ocasiones. El acceso a esta estan­
cia, llamada «el Lugar Santísimo», está prohibido a todos 
excepto al sumo sacerdote, y él sólo puede entrar una 
vez al año, en el Yom Kippur, el gran y santo Día de la 
Expiación. En esta estancia, un cubo perfecto de alrede­
dor de casi once metros de lado, cubierto de 23 tonela­
das de oro, se encuentra la gran Arca del Pacto, asimismo 
cubierta de oro.
El arca reposaba sobre una plataforma rocosa 
llamada la Shetiyyah Lisa («Piedra de fundamento»).10 
El sumo sacerdote deja el incensario sobre esta roca 
cuando entra en el Lugar Santísimo.11 (Fuentes judías 
posteriores afirman que esta gran masa rocosa era el 
fundamento de todo el templo, y que meramente 
afloraba a través de la tierra en el emplazamiento del 
Lugar Santísimo.)12
¿ Qué enseña la Biblia ... ? 17
Al ir dominando la decadencia espiritual y la idolatría so­
bre Israel con el paso de los años, el juicio de Dios sobrevino 
primero sobre el Reino del Norte, el año 721 a.C. El Reino 
del Sur, que incluía a Judá y el templo de Jerusalén quedaron 
maduros para el juicio 135 años después. El Señor declaró, 
por medio de sus profetas: «También quitaré de mi presencia 
a Judá, como quité a Israel, y desecharé a esta ciudad que 
había escogido, a Jerusalén, y a la casa de la cual había yo 
dicho: Mi nombre estará allí» (2 R. 23:27).
La destrucción de Jerusalén por parte del rey 
Nabucodonosor y de los babilonios fue por etapas. En el año 
605 a.C., Nabucodonosor despojó al Reino del Sur de sus 
dirigentes, llevándose de vuelta a Babilonia, como esclavos, 
a su rey y a toda la corte y a toda la mano de obra diestra 
(incluyendo a Daniel y sus amigos). El profeta Ezequiel ad­
virtió a la nación de juicios adicionales, cuando vio una vi­
sión de la gloria de la Shekiná (la presencia de Dios) 
apartándose del templo y desapareciendo por encima del 
monte de los Olivos hacia el este (Ez. 10:18, 19). En el 586 
a.C., el ejército de Babilonia destruyó Jerusalén y quemó el 
templo (2 R. 25:8, 9; 2 Cr. 36:18, 19).
El majestuoso templo de Salomón
18 El templo de los últimos días
Jeremías, el profeta desolado, da el siguiente lamento acer­
ca de la destrucción del templo de Salomón: «Desechó el 
Señor su altar, menospreció su santuario; ha entregado en 
mano del enemigo los muros de sus palacios; hicieron reso­
nar su voz en la casa de Jehová como en día de fiesta» (Lm. 
2:7).
¿Qué enseña la Biblia acerca del segundo te ii
El cautiverio babilónico de Israel duró setenta años. El 
Señor comenzó a devolver un remanente de alrededor de 
50.000judíos a la tierra en el 538 a.C., dirigidos por Zoiobabel. 
Isaías había profetizado que el rey persa Ciro sería el instru­
mento para la reconstrucción del templo: «Que dice de Ciro: 
Es mi pastor, y cumplirá todo lo que yo quiero, al decir de 
Jerusalén: Serás edificada; y al templo: Serás fundado» (Is. 
44:28).
El libro de Esdras en el Antiguo Testamento habla de los 
esfuerzos de Israel por construir el templo. Encontramos que, 
al volver a Jerusalén, se echaron los cimientos del segundo 
templo, copiando el plan de Salomón (Esd. 3:7-10). Los va­
sos y utensilios del templo fueron devueltos de Babilonia, se 
construyó un altar, se reanudaron los sacrificios y se restauró 
la observancia de las fiestas bíblicas (Esd. 1:7-l 1; 3:1 -5). Para 
los judíos, la restauración del sistema sacrificial para el tem­
plo constituye un templo en operación, con independencia de 
cuánto haya progresado el resto de la construcción.
La adicional construcción del templo se vio detenida de­
bido a la oposición de residentes samaritanos del Reino del 
Norte, y no fue reanudada durante otros quince años. Final­
mente, la obra quedó completada en el 515 a.C., después de 
un decreto del rey persa Darío, que no sólo permitió la edifi­
cación, sino que prescribió impuestos locales (¡incluyendo 
impuestos a los samaritanos!) para financiar la construcción 
(Esd. 6:1-15).
En comparación con el templo de Salomón, el segundo 
templo era un edificio modesto. Sin embargo, fue muy agran­
dado y remodelado bajo Herodes el Grande, que inició las 
obras en el 20 a.C. Herodes dobló la altura del segundo tem­
plo original y lo amplió mucho. Se cree que las mejoras de 
Herodes posibilitaron que el segundo templo excediera en 
belleza y grandeza al templo de Salomón. Muchos lo consi­
deraban el edificio más hermoso de mundo. El segundo tem­
plo era considerado como una de las maravillas del mundo 
antiguo. El historiador Josefo nos dice que el templo estaba 
hecho de mármol recubierto de oro, y aparecía desde la dis­
tancia como un monte de nieve resplandeciendo al sol. Uno
¿Qué enseña la Biblia ... ? 19
de los sabios de aquel tiempo escribió: «Quien no ha visto el 
edificio de Heredes, no ha visto un edificio hermoso en su 
vida.»13
Es significativo que nuestro Señor Jesucristo llevó a cabo 
su ministerio durante la era del segundo templo. Muchos de 
los incidentes narrados en el Evangelio y muchos de los acon­
tecimientos en el libro de los Hechos tuvieron lugar en el 
conjunto del templo de Herodes. El rechazamiento judío de 
la condición mesiánica de Jesús gira alrededor de aquel tem­
plo. Cristo, sentado sobre el monte de los Olivos y contem­
plando el templo, lloró sobre Jerusalén debido al 
rechazamiento de que había sido objeto por la ciudad y al 
inminente juicio sobre la misma:
¡Jerusalén, Jerusalén, que matas a los profetas, y ape­
dreas a los que te son enviados! ¡Cuántas veces quise 
juntar a tus hijos, como la gallina junta sus poliuelos 
debajo de las alas, y no quisiste! He aquí vuestra casa os 
es dejada desierta. Porque os digo que desde ahora no 
me veréis, hasta que digáis: Bendito el que viene en el 
nombre del Señor (Mt. 23:37-39).
El juicio sobre la nación de Jerusalén y sobre el templo 
comenzó con una insurrección contra Roma por parte de 
zelotas judíos en el 66 d.C.
Un sensacional acto de desafío tuvo lugar en el tem­
plo cuando Eleazar, hijo del capitán del templo, ordenó 
el fin del sacrificio imperial (que había sido ofrecido por 
el Emperadorjunto con el tradicional servicio judío du­
rante el período del dominio romano). La formidable 
Décima Legión romana intentó reconquistar el monte 
del Templo, pero fracasó, perdiendo muchos pertrechos 
a los defensores judíos.
El desafío, que se transformó en una revuelta en toda 
regla, pronto dejó toda Judea en manos judías. Encoleri­
zado por el éxito de esta revuelta, el emperador Nerón 
envió el mejor general romano, Vespasiano, con las me­
jores legiones romanas, para aplastar la rebelión a cual­
quier precio. Alrededor del 69 d.C., después de años de 
acerba lucha, los romanos habían retomado todo el país, 
excepto Jerusalén; entonces Vespasiano, que había re­
cientemente sucedido a Nerón como Emperador, puso a 
su hijo Tito al caigo de la campaña de Jerusalén.
Después de un asedio de Jerusalén, Uto tomó conse­
jo con los oficiales de su ejército acerca de la suerte del
20 El templo de los últimos días
templo. Hay relatos en conflicto acerca de las órdenes 
que se dieron. El historiador romano Tácito registra que 
la mayoría de los oficiales estaban de acuerdo en que 
nada menos que la total destrucción del templo conse­
guiría una paz duradera. Por ello, el noveno día del mes 
judío de Av en el 70 d.C., la ciudad y el templo fueron 
quemados, como Daniel había profetizado.
Josefo dice que Tito había dado órdenes específicas 
de que el templo quedase intacto, y que un soldado, ac­
tuando de forma impulsiva, echó una antorcha a través 
de un portal del templo, incendiando los tapices del inte­
rior. Cuando el edificio ardió, se dice que el oro sobre 
los muros se fundió y corrió dentro de las junturas entre 
las piedras. Después, tratando de recuperar el oro, los 
soldados romanos quitaron todas las piedras una por una, 
cumpliendo precisamente la predicción de Jesús, que de 
aquel templo no quedaría piedra sobre piedra.14
Así, el segundo templo vino al mismo fin que el Primero. 
La destrucción del templo del año 70 d.C. ha sido el foco de 
los judíos intrépidos que anhelan la construcción y dedica­
ción de un tercer templo.
7. ¿Qué enseña la Biblia acerca de la iglesia como 
templo espiritual?
El Nuevo Testamento enseña que la iglesia —el cuerpo de 
Cristo— es actualmente el templo espiritual de Dios. Así como 
la presencia de Dios estaba en el Huerto del Edén, en el 
tabernáculo y en el templo de Israel, así nuestro Señor está 
actualmente presente entre su pueblo en la actualidad. La igle­
sia no es un edificio, sino que se compone de aquellos que 
han entrado en una relación recta con Dios por medio del 
perdón de sus pecados gracias a la obra de Cristo en la cruz.
El apóstol Pablo enseña que el Espíritu de Dios habita en 
todos los creyentes individualmente, y en la iglesia 
corporativamente.
¿No sabéis que sois templo de Dios, y que el Espíritu 
de Dios mora en vosotros? Si alguno destruyere el tem­
plo de Dios, Dios le destruirá a él; porque el templo de 
Dios, el cual sois vosotros, santo es (1 Co. 3:16,17).
Así que ya no sois extranjeros ni advenedizos, sino 
conciudadanos de los santos, y miembros de la familia 
de Dios, edificados sobre el fundamento de los apóstoles 
y profetas, siendo la principal piedra del ángulo Jesucristo 
mismo, en quien todo el edificio, bien coordinado, va
¿ Qué enseña la Biblia ... ? 21
creciendo para ser un templo santo en el Señor; en quien 
vosotros también sois juntamente edificados para morada 
de Dios en el Espíritu (Ef. 2:19-22).
En la actualidad, la presencia de Dios no está situada en 
un templo de piedra, sino en un templo de piedras vivas: los 
creyentes individuales en Cristo. El conocimiento por parte 
de un creyente de su actual relación con Dios por medio de 
Cristo debería llevarle a una vida pura y piadosa, por cuanto 
se supone de un templo que es representativo de Dios y de 
sus normas.
El hecho de que la iglesia es un templo espiritual hoy no 
entra en conflicto con el concepto de que el plan de Dios 
incluye dos más templos de piedra en el ftituro, como tampo­
co el hecho de la existencia de un tabernáculo impidió un 
futuro templo en Jerusalén. La creencia de que la iglesia es 
un templo espiritual y que Dios sigue teniendo otros dos tem­
plos de piedra en su plan para la historia no son perspectivas 
mutuamente excluyentes.
8. ¿Qué enseña la Biblia acerca del tercer templo?
Hemos observado en la Pregunta 4 el apoyo escriturario 
para el futuro tercer templo. Este templo es llamado también 
el templo del Anticristo porque él lo profanará estableciendo 
su imagen en el Lugar Santísimo. Este acto blasfemo es co­
nocido en la Biblia como «la abominación de la desolación» 
(Dn. 9:27; 11:31; 12:11; Mt. 24:15; Mr. 13:14; 2 Ts. 2:4; Ap. 
13:15). También es designado como el templo de la tribula­
ción porque existirá al menos hacia el punto central de aquel 
período de siete años (Dn. 9:27).
Este templo jugará un papel central en los 
acontecimientos del tiempo del fin relacionados con la 
restauración nacional de Israel durante sus últimos siete años 
de historia (Dn. 9:24-27), que prepararán a la nación para la 
aceptación de Jesús como Mesías justo antes de la segunda 
venida.
El libro de Apocalipsis da una interesante interrelación 
entre el templo del Anticristo en la tierra durante la tribula­
ción (Ap. 11:1, 2) y «el templo de Dios en el cielo» (Ap. 
11:19). Un aforismo militar es «ocupar las cotas altas». La 
posición de nuestro Dios Soberano en el cielo sigue desde 
luego esta estrategia, originando Él su juicio sobre los mora­
dores de la tierra que rechazan a Cristo aquí abajo, y que se 
agazapan dentro de las rocas y cavernas.
El templo de la tribulación es mencionado en Apocalipsis 
11: 1-2:
22 El templo de los últimos días
Entonces me fue dada una caña semejante a una vara 
de medir, y se me dijo: Levántate, y mide el templo de 
Dios, y el altar, y a los que adoran en él. Pero el patio 
que está fuera del templo déjalo aparte, y no lo midas, 
porque ha sido entregado a los gentiles; y ellos hollarán 
la ciudad santa cuarenta y dos meses.
¿Por qué manda Dios a Juan que mida este templo? Hay 
pasajes del Antiguo Testamento, como Ezequiel 40 y Zacarías 
2, que relacionan la medición con una evaluación espiritual 
de la gente. Hal Lindsey observa:
La valoración [por parte de Dios] de este templo fu­
turo determina por tanto si está verdaderamente cum­
pliendo el propósito para el que ha sido designado. 
Desafortunadamente, resulta ser un lugar de culto 
apóstata. Su reconstrucción no se basa en un reconoci­
miento de Jesús como el Mesías, sino en un deseo na­
cionalista de poseer una vez más un símbolo religioso y 
de llevar a la gente de vuelta a una creencia en su Dios.15
La medición del templo del Anticristo fracasa de manera 
especial cuando se compara con la norma celestial mencio­
nada por Juan en Apocalipsis 11:19. Este fracaso justifica la 
continuación por parte de Dios del juicio sobre los morado­
res de la tierra y sobre su falso templo y culto.
Algunos intérpretes de la Biblia dicen que la referencia al 
templo en Apocalipsis 11:1,2 no es a un templo futuro, sino 
que se refiere más bien al segundo templo, o que se trata de 
una figura de lenguaje para designar a una entidad espiritual 
apóstata como Israel o la iglesia. Pero si estos versículos se 
refieren al segundo templo de la época de Cristo, entonces 
todo el libro de Apocalipsis y virtualmente toda la profecía 
del Nuevo Testamento habría quedado ya cumplida, y desde 
luego hay los que enseñan esto. Pero la mayoría de los erudi­
tos bíblicos creen que Apocalipsis no fue escrito hasta muy 
después del año 70 d.C., lo que haría imposible esta interpre­
tación. Es aún más improbable que virtualmente todo el libro 
de Apocalipsis ya se haya cumplido.16 Si Apocalipsis ha sido 
ya cumplido, entonces la iglesia primitiva vivió a través de 
este tiempo desconocedora de que estas cosas habían ya su­
cedido.
La postura que supone un templo espiritual, sea con refe­
rencia a Israel, sea a la iglesia, es errónea debido a que el uso 
detemplo en esos contextos no tiene la intención de ser to­
mado en sentido figurado. Por ejemplo, en Mateo 24, Jesús
Las Setenta Semanas de Daniel (490 años)r
r
i
Los cuatro reinos de Daniel 
(Dn. 2:37-43; 7:1-7)
Venida del 
Mesías
(D n . 9 :24, 2 5 )
Arrebatamiento 
de la iglesia
«Sesenta v nueve semanas»
nanas (483 años) 
(Dn. 9:25c)
Ascensión del 
sías
f 7 semanas 
(49 años)
Templo reconstruido 
516 a.C.
I 62 semanas 
(434 años)
Templo reconstruido
1? t C i ,
o !
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S Í * . ^
Segundo templo i 
(de Zorobabel) £ ¡g
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Segundo templo 
(Herodiano)
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S- o*
PERÍODO PARENTÈTICO 
(El «intervalo« entre los w.
26 y 27)
El reloj de tiempo profètico 
se detiene respecto a la
nación judía
El «cuerno pequeño» del 
cuarto reino de Daniel y su reino 
(Dn. 7:8. 19-26)
Vuelve a ponerse en marcha el reloj 
profètico respecto a la nación judía
«Septuagésima semana»
Ì
Venida del 
Mesías
El reino 
eterno de 
Daniel 
(Dn. 2:44- 
45:6:25: 
7:13-14, 27: 
12:12-13)
1 Semana 
(7 años)
1/2 semana 
(3 1/2 años)
1/2 semana 
(3 1/2 años)
Era mesiánica 
o
Era del reino 
(El milenio)
Periodo de la tribulación 
1.290 dias (Dn. 12:11)
i Gobierno de la «cuarta bestia» 
(Dn. 7:23-25) prefigurada por 
Antioco IV (Dn. 11:36-39)
oj- =;■
i Tercer templo | 
(Tribulación) ^ 
(Dn. 9:27)
KJ
I ? -
I 75 días Cuarto templo g (Mesiánico)
a
i s rf!33
3 s -o
!Vo• O — — a* bO
U )
24 El templo de los últimos días
se refiere a un templo literal, ya que, en el contexto de este 
pasaje, está en pie y mirando directamente al segundo tem­
plo. La abominación de la desolación tuvo lugar por primera 
vez por acción de Antioco Epffanes en el siglo segundo a.C., 
cuando detuvo los sacrificios y profanó el segundo templo al 
sacrificar en él un inmundo cerdo sobre el altar, y erigió lue­
go una estatua de Júpiter en el templo. Esto cumplió literal­
mente Daniel 11:31. Por tanto, estos acontecimientos futuros 
serán similares en clase a los prototipos: serán acontecimien­
tos históricos reales en un templo de los últimos días.
El papel bíblico para el tercer templo se relaciona con una 
restauración apóstata del sistema de culto judaico durante la 
tribulación. Esta restauración permite al Anticristo desafiar e 
insultar a Dios, que responde con juicio desde su templo ce­
lestial. Así, el tercer templo tendrá un papel central en los 
acontecimientos del 6n dentro del programa de Dios.
9. ¿Qué enseña la Biblia acerca del cuarto templo?
Destinado a ser quizá el edifìcio más hermoso y magnífi­
co en la historia humana, el cuarto templo (o templo milenario) 
se trata con detalle en Ezequiel 40:5—43:27. Éste será el tem­
plo final de Israel en la historia, y existirá durante el reinado 
de mil años de Jesús el Mesías desde Jerusalén. El templo 
milenario será el centro de todo el mundo. Israel y su templo 
servirán como centro para los rituales y ofrendas sacerdotales 
que servirán de pauta en el culto a Jesús el Mesías.
El doctor John Walvoord describe el templo milenario y 
su culto:
El templo que será construido en el Milenio será 
mucho más grande que cualquier templo histórico de 
Israel, y será de forma cuadrada de 267 metros (500 co­
dos) de largo y de ancho. Lo mismo que los templos 
anteriores, mirará hacia el este y tendrá una muralla ex­
terior en los otros tres lados. El templo tendrá treinta 
cámaras construidas a tres niveles. Excepto por la pared 
occidental, los otros tres lados tendrán un gran patio ex­
terior que rodeará al templo mismo con puertas en cada 
una de las tres murallas.
Ezequiel dio varias reglas acerca de las funciones de 
los sacerdotes y de los levitas en el culto del templo. Se 
debían ofrecer sacrificios especiales en el primer mes y 
en el primer día (46:18, 19). También se menciona la 
observancia de la fiesta de la Pascua en el decimocuarto 
día del primer mes, acontecimiento seguido por la fiesta 
de siete días de los panes sin levadura (45:21-25).
... En relación con el templo, Ezequiel predijo que 
habrá un gran río que saldrá del templo hacia el sur, te­
niendo el suficiente volumen para que no se pueda va­
dear (47:3-6). Las riberas del río estarán cubiertas de 
árboles (vv. 7-9) y el río tendrá peces y otros seres vi­
vientes. Evidentemente, el salobre Mar Muerto dará lu­
gar a aguas dulces, y el río seguirá fluyendo al sur de 
Israel hasta llegar al Golfo de Arabá.17
Por cuanto el milenio será un tiempo en el que Israel será 
exaltado y Cristo regirá el mundo por medio de una teocracia 
desde Jerusalén, tiene sentido que la adoración del Mesías 
gire alrededor de un templo. Será en verdad un tiempo mara­
villoso; será un tiempo en el que la gloria del Señor volverá 
al templo en tanto que Israel cumple su vocación nacional 
(véase Ez. 43:1-5).
¿Qué enseña la Biblia ...? 25
43.75
LA PUERTA DEL TEMPLO MILENARIO
(Dimensiones en pies.)
C Cámaras para los guardas (40:7a, 10, 12)
P Portal (40:8-9)
G Gradas (40:6a)
U Umbrales (40:6b, 7b)
V Ventanas (41:16)
26 El templo de los últimos días
T E R C E R A P A R T E
¿Qué más sabemos acerca 
aeitemplo de la tribulación?
10. ¿Ha habido intentos de edificar el tercer templo en
tiempos modernos?
Los judíos han intentado reconstruir el templo en varias 
ocasiones desde la destrucción del segundo templo el 70 d.C. 
En unas pocas ocasiones han tenido un éxito limitado y tem­
poral, pero nada que se acerque a la edificación de sus prime­
ros dos templos.
Después de la destrucción del templo el 70 d.C., la vida 
en Jerusaién para los judíos que quedaron cayó en una pro­
funda decadencia debido a la ausencia de su centro de vida: 
el templo. El vacío monte del Templo vino a ser el centro de 
sus esperanzas y sueños. Estas esperanzas subieron de punto 
cuando el emperador romano Publio Aelio Adriano comenzó 
su reinado el 117 d.C. Aparentemente, se entablaron contac­
tos oficiales entre judíos de Judea y el gobierno romano bajo 
Adriano, y se concedió permiso para la reconstrucción del 
templo.
Las esperanzas judías de un avivamiento terminaron en el 
129 d.C., cuando Adriano llegó a Jerusaién para inaugurar la 
erección de una colonia romana sobre las ruinas de la ciudad. 
En el 132 d.C. estalló una revuelta bajo el caudillo judío Simón 
Bar Kosiba (que recibió el sobrenombre de Bar Cochba, «Hijo 
de la Estrella», de parte del sabio talmúdico Rabí Akiva, que 
lo proclamó como el Mesías).
La revuelta logró la expulsión de las guarniciones roma­
nas, y los rebeldes judíos consiguieron mantener Jerusaién 
por casi tres años. Durante este tiempo se estableció un go­
bierno independiente y Bar Cochba se proclamó el Mesías. 
Comenzó a reconstruir el templo y reanudó el ritual del tem­
plo, quizá incluyendo la reanudación de los sacrificios.18
La principal evidencia de un templo de Bar Cochba procede 
de monedas que acuñó con una imagen de la fachada del 
templo y el nombre de Eleazar, su sumo sacerdote.19
El reinado de Bar Cochba terminó cuando Adriano recon­
quistó Jerusaién el 135 d.C. El emperador destruyó el templo 
de Bar Cochba20 y erigió un templo a la tríada romana de 
Juno, Júpiter y Minerva, junto con una estatua ecuestre de sí 
mismo, sobre el monte del Templo.
En los siglos que siguieron, se llevaron a cabo varios in­
tentos para organizar un esfuerzo de reconstrucción del tem­
plo. El más significativo de estos tuvo lugar durante el reinado
¿ Qué ... sabemos ... del templo ... ? 27
de 19 meses de Flavio Claudio Julián, conocido en la historia 
como «Julián el Apóstata» a causa de su apartamiento del 
cristianismo. Julián intentó reconstruir el templo en Jerusa- 
lén con la esperanza de que esto sirviera para desacreditar el 
cristianismo.
En el 363 d.C., Julián dispuso para la provisión de los 
fondos y de los materiales de construcción y designó a Alipio 
de Antioquía para que supervisara la reconstrucción. Fuentes 
cristianas cuentan de multitudes de judíos que volvían a 
Jerusalén para ayudaren aquel proyecto. Luego sucedió lo 
inesperado. Justo cuando los edificadores intentaban excavar 
para llegar al fundamento del monte del Templo, un 
terremoto —no infrecuente en la región— interrumpió el 
intento. El terremoto aparentemente encendió bolsas de gases 
atrapados en el subsuelo, y la explosión resultante destruyó 
los materiales de construcción que estaban en el lugar. Julián 
murió poco después, y con él se desvanecieron las esperanzas 
de los judíos.
Otros intentos fallidos tuvieron lugar bajo la Emperatriz 
Eudocia en el 443 d.C. y bajo el gobierno de los persas en el 
614-617 d.C.21 Los intentos de reconstruir el templo judío en 
Jerusalén, desde estos tempranos esfuerzos, se han reanuda­
do sólo en las últimas y recientes décadas. Sin embargo, to­
dos estos intentos fortalecieron la resolución de los judíos y 
centran su atención en un futuro templo reconstruido. Duran­
te los años de persecuciones que soportaron durante toda la 
Diàspora, no es sorprendente que su lema viniese a ser: «El 
año que viene en Jerusalén.»
11. ¿Quién posee y controla actualmente el monte del 
Templo?
Como resultado de la victoria y conquista judía durante la 
Guerra de los Seis Días en junio de 1967, el monte del Tem­
plo estuvo brevemente bajo un control total de los israelíes: 
al tercer día de la guerra, las tropas israelíes consiguieron el 
control del monte del Templo. Sin embargo, después de la 
guerra, el 17 de junio de 1967, el Ministro de Defensa Moshe 
Dayán se encontró con miembros del Consejo Supremo Mu­
sulmán (conocido también como el Waqf o Wakf) que super­
visaba los lugares santos del islam. La reunión tuvo lugar 
para decidir cómo se administraría el monte del Templo. Para 
el fin de las negociaciones, el control del monte del Templo 
fue devuelto a manos musulmanas sólo después de diez días 
de jurisdicción israelí. El relato de la reunión y de su resulta­
do es para hacer pensar; los resultados fueron increíbles y, 
para muchos, incomprensibles:
28 El templo de los últimos días
Dayán había ya ordenado que se quitase la bandera 
israelí de la cúspide de la Cúpula de la Roca en la tarde 
de la liberación de la Ciudad Vieja. Las discusiones con 
los musulmanes llevaron a adicionales concesiones. El 
control administrativo sobre el monte del Templo sería 
exclusiva responsabilidad del Consejo Supremo 
Musulmán: el Waqf. Aunque se permitiría a los judíos el 
libre acceso al monte, quedaba prohibida la oración o el 
culto público a los judíos
 El gobierno israelí distribuyó luego la responsabilidad 
del área del monte del Templo a diferentes grupos
...................................... Pero la cumbre del monte del 
Templo, el emplazamiento del primer y segundo templo, 
fue dado a la administración musulmana. Aunque 
permiten que lo visiten los turistas, no permiten libertad 
de culto ni ninguna actividad arqueológica no 
musulmana.22
Las concesiones de Dayán tomaron totalmente por sorpresa 
a los judíos religiosos. Nunca se habrían imaginado que 
pudiese suceder tal cosa. ¿Por qué actuó Dayán así? Dayán, 
un judío secular, había trabajado durante muchos años con 
árabes como oficial en el ejército británico. Por cuanto los 
aspectos religiosos del moderno estado de Israel quedaban 
en segundo plano en relación con sus intereses políticos, vio 
el monte del Templo como una pieza negociable que esperaba 
apaciguaría a los musulmanes y los haría más fácil de gobernar 
bajo el poder israelí. Del Monte de templo dijo: «No abrigo 
ninguna duda de que por cuanto el poder está en nuestras 
manos hemos de adoptar una actitud basada en la cesión. 
Debemos contem plar el monte del Templo como un 
emplazamiento histórico que tiene que ver con memorias del 
pasado.»23
Las acciones de Dayán vinieron a ser un estorbo en lugar 
de una ayuda. Los judíos religiosos se enfurecieron, y los 
musulmanes no se apaciguaron por ello. Este acto ha estado 
en el centro de mucho del conflicto árabe-israelí actual. El 
control del monte del Templo vino a ser el terreno fértil para 
el establecimiento de muchas organizaciones judías que 
quieren edificar el tercer templo. La división del área del 
monte del Templo permanece hoy como estaba en 1967: el 
monte del Templo como tal está bajo la administración del 
Waqf. Surgen altercados una y otra vez, que son objeto de 
la atención de los medios de información nacional e 
internacional, por causa de la prohibición del culto judío en 
el Monte (aun
que no todos los dirigentes o seguidores religiosos judíos creen 
que sea necesario, o ni siquiera deseable).24
¿ Qué ... sabemos ... del templo ... ? 29
La propiedad y el control del monte del Templo son dos 
cosas distintas. El estado de Israel es el propietario del monte 
del Templo; el Waqf musulmán lo controla. La actual situa­
ción con el monté del Templo es algo similar a una inmobi­
liaria que posee una finca y que desea edificar en ella. No 
puede hacerlo sin la aprobación de otras autoridades. En el 
caso del templo, el permiso de construcción (aprobación y 
aquiescencia) precisará desde luego de un milagro. En últi­
mo término prevalecerá la providencia, no la política.
12. ¿Cuáles son los planes y los preparativos para el
próximo templo de Israel?
Se hacen muchos planes para la reconstrucción del 
templo,25 y muchos grupos en Israel se están preparando para 
ello. Algunas de las organizaciones y actividades incluyen:
Los fieles del monte del Templo, dirigidos por Gershon 
Salomón, que emplea medidas activistas en su intento de 
motivar a sus compatriotas a reconstruir el templo. Un acto 
ha sido su intento de poner una piedra angular de cuatro tone­
ladas y media sobre el monte del Templo. El activista Gershon 
Salomón demuestra su resolución con estas palabras:
En el día oportuno —y creo que será muy pronto— 
esta piedra será puesta sobre el monte del Templo, y será 
trabajada y pulimentada ... y será la primera piedra para 
el tercer templo. Ahora mismo esta piedra se encuentra 
no lejos del monte del Templo, muy cerca de las mura­
llas de la Ciudad Vieja de Jerusalén, cerca de la Puerta 
de Siquem ... y esta piedra contempla desde arriba el 
monte del Templo. Pero no está lejano el día en que esta 
piedra estará en el sitio que le corresponde —podría ser 
hoy ... o mañana; estamos muy cerca del día oportuno.26
Otro acto que han instituido ha sido el sacrificio de 
animales.
El Instituto del templo, encabezado por Israel Ariel, ha 
elaborado casi todos los 102 utensilios necesarios para el culto 
del templo, según las normas bíblicas y rabínicas. Están en 
exhibición para los turistas en el centro turístico del Instituto 
del templo centrado en la Ciudad Vieja de Jerusalén.
El Ateret Cohanim ha establecido una yeshiva (escuela 
religiosa) para la educación e instrucción de sacerdotes del 
templo. Su tarea es investigar las normas, reunir levitas cuali­
ficados e instruirlos para un futuro sacerdocio.
Han surgido muchas yeshivas por toda Jerusalén para pre­
parar la eventualidad de un templo reconstruido y con unos
30 El templo de los últimos días
servicios en plena operación. Se están preparando 
vestiduras, construyendo arpas, elaborando planes 
arquitectónicos 
mediante ordenadores, y algunos rabinos están decidiendo 
qué innovaciones modernas pueden adoptarse en un nuevo 
templo. También se está haciendo un esfuerzo para conseguir 
animales kosher para el sacrificio, incluyendo vacas alazanas. 
Y algunos siguen intentando la oración diaria sobre el monte 
del Templo para ayudar a abrir el camino.
Muchos otros preparativos están actualmente en marcha para 
el regreso de Israel a todos los aspectos del culto del templo.
13. ¿Qué impide a los judíos la construcción del templo 
en la actualidad?
Hay unos significativos obstáculos políticos y teológicos 
para la reconstrucción del templo. Desde una perspectiva 
teológica judía, no hay acuerdo acerca de cuando, o siquiera 
acerca de si se debería reconstruir el templo por manos 
humanas. Aunque algunos grupos judíos están llevandoa 
cabo preparativos para la reconstrucción, otros grupos y 
segmentos dentro del judaismo no favorecen estos 
preparativos:
Incluso entre los mismos ultraortodoxos hay varias 
interpretaciones acerca de cómo se puede reconstruir el 
templo. Los sabios judíos, hablando desde la lejana 
perspectiva de la Diàspora, enseñaban que el templo ha de 
esperar a la llegada del Mesías. Maimónides también 
argumentó que sólo el Mesías podía construir el 
templo ....... El gobierno israelí concuerda con esta postura, 
y mantiene que sus acciones para prohibir a los judíos el 
culto sobre el monte del Templo se basan en estas razones,
y no en argumentos políticos___Pero otros grupos creen
que el templo puede ser reconstruido ya con los medios 
que sean posibles. Los proponentes de esta postura 
observan que el Talmud de Babilonia tiene opiniones 
contradictorias acerca de la cuestión, y que el Talmud de 
Jerusalén permite a los judíos construir un edificio 
intermedio antes de la era mesiánica.27
No sólo hay diferencias teológicas dentro del judaismo, 
como se acaba de observar, sino que hay también significati
vas cuestiones políticas y religiosas en juego con el mundo 
islámico. El Waqf controla el monte del Templo, y mientras 
retenga este control, no habrá ninguna reconstrucción. La 
Cúpula de la Roca se levanta firme sobre el monte del 
Templo, y toda el área es un lugar sagrado del Islam. Si el 
templo ha de ser reconstruido sobre el monte del Templo, 
entonces
¿ Qué ... sabemos ...del templo ...? 31
sólo quedan dos posibilidades lógicas para la Cúpula de la 
Roca y para la Mezquita de Al-Aqsa: estos edificios sagrados 
han de ser o bien trasladados o destruidos. Cualquiera de es­
tas dos opciones, en el clima político actual, causaría una 
guerra total entre Israel y el mundo árabe.
Aunque existe la tecnología para mover y relocalizar edi­
ficios, no hay indicación alguna de que esto sería jamás con­
siderado como una posibilidad desde una perspectiva 
musulmana. Aunque es concebible que los edificios puedan 
ser destruidos como consecuencia de una guerra o de actos 
terroristas, esto no parece probable. Algunos judíos creen que 
fenómenos naturales, como una serie de terremotos, podrían 
también destruir estos lugares. Incluso en este caso, es im­
probable que el monte del Templo fuese abandonado por los 
musulmanes. De hecho, cuando esto ha sucedido en el pasa­
do, la Cúpula ha sido rápidamente reparada.
Incluso si estos lugares musulmanes fuesen destruidos 
por un desastre natural o por acción humana, bien 
accidentalmente, bien a propósito, hay todas las razones 
para sospechar que los musulmanes sencillamente los 
reconstruirían como lo han hecho en repetidas ocasiones 
en el pasado. La solución a la reconstrucción del templo 
debe basarse en un acontecimiento mayor, uno que afecte 
de manera dramática a la situación religiosa y política 
en Israel.28
Incluso en el caso improbable de que algo hiciese que los 
35 acres del monte del Templo quedasen totalmente limpios 
de las actuales estructuras, esto no daría solución a los pro­
blemas políticos asociados con este lugar santo. El islam se­
guiría considerándolo su territorio santo y lo trataría como si 
sus lugares santos permaneciesen en él.
Cualquier intento actual para reconstruir el templo se en­
contraría con toda probabilidad con una feroz oposición polí­
tica y religiosa de muchos lados. Sin embargo, en tiempos 
turbulentos las cosas pueden suceder con rapidez. Aunque 
pudiera parecer improbable, no es impensable que la cons­
trucción pudiese comenzar pronto.
Muchos que han seguido la historia del movimiento 
Sionista —que trabajó para un regreso y por el establecimiento 
del moderno Estado de Israel— saben que había obstáculos 
similares en el camino para el establecimiento del moderno 
Estado de Israel. Pero los acontecimientos de la historia 
condujeron a lo imposible: al Estado de Israel. Quizá, de una 
manera similar, se reconstruirá el templo.
32 El templo de los últimos días
14. ¿Cuándo se reconstruirá el templo de Israel?
Desde una perspectiva cristiana, no hay nada ni bíblica 
ni teológicamente que prohíba o que enseñe que el templo 
no pueda ser reconstruido antes del arrebatamiento o en 
nuestros propios días, aunque todas las referencias bíblicas 
al templo de la Tribulación aparecen en el contexto del futuro 
período de siete años conocido como la tribulación. El 
templo podría ser reconstruido antes del arrebatamiento y 
de la tribulación, al modo en que Israel, en nuestros propios 
días, volvió a la tierra antes de comenzar los acontecimientos 
de la tribulación.
El hecho de que hay muchos movimientos y organizacio­
nes en Israel hoy que están planeando y preparándose para el 
Tercer templo sólo intensifica nuestras expectativas de que 
los problemas se puedan resolver pronto y que pueda pronto 
iniciarse la construcción.29 El único requisito bíblico es que 
el templo tiene que estar ya reconstruido y en operación para 
el punto medio de la tribulación de siete años.
Una especulación acerca de un posible escenario, basado 
en un modelo de acontecimientos futuros derivado de las Es­
crituras, se desarrolla de la siguiente manera: hay diferentes 
perspectivas entre los eruditos acerca de cuándo tendrá lugar 
la batalla de Gog y de Magog en relación con el plan de Dios 
para los últimos días (véase Ez. 39-39). Lo más probable es 
que esta batalla tenga lugar durante un período relativamente 
breve de tiempo después del arrebatamiento pero antes del 
inicio de la tribulación, lo que suscitará una actitud de simpa­
tía europea hacia Israel. Las grandes pérdidas de Israel, parti­
cularmente contra una alianza árabe-rusa, serán compensadas 
por una total soberanía sobre el monte del Templo y por la 
autorización para reconstruir el Tercer templo. Probablemen­
te, el control del monte del Templo por parte de Israel será 
parte de un acuerdo conseguido en negociaciones entre Israel 
y el dirigente europeo (el anticristo), que, cuando sea firma­
do, dará comienzo al período de tribulación de siete años (Dn. 
9:24-27).
Este escenario resuelve el problema de sacar a los árabes 
y su Cúpula de la Roca del Monte, por cuanto Israel recibiría 
el pleno control de todo ello como resultado de una guerra. 
El control de Israel del monte del Templo no podría dar ini­
cio a una guerra, por cuanto la guerra habrá recién termina­
do. Israel también habrá conseguido la autorización para la 
reconstrucción de parte de Occidente, que tendrá el control 
del mundo por medio del Anticristo. Por cuanto el templo 
tiene que estar ya en pie sólo a partir de la mitad del período 
de siete años, Israel tendrá abundante tiempo, especialmente
¿Qué ... sabemos ... del templo ...? 33
gracias a las modernas tecnologías y a los preparativos que 
ya se están haciendo ahora. Esta vez los judíos no se retarda­
rán, ni devolverán el monte del Templo a los árabes como lo 
hizo Moshe Dayán en 1967.
Creemos que esta especulación tiene sentido a la luz del 
marco bíblico; pero se trata meramente de esto: de una espe­
culación a la luz de acontecimientos conocidos.
15. ¿Dónde se situará el próximo templo sobre el monte 
del Templo?
Todos están de acuerdo en que el tercer templo será edifi­
cado en alguna parte de los 35 acres del monte del Templo en 
Jerusalén. Pero el lugar preciso en que el templo, de tamaño 
relativamente pequeño, será situado sobre el Monte, es moti­
vo de grandes debates. ¿Cuáles son las opciones?
Hay tres lugares que han recibido la mayor atención como 
posibles emplazamientos del templo: el emplazamiento Nor­
te; el emplazamiento Tradicional, y el emplazamiento Sur.
El emplazamiento Sur
El menos probable es el emplazamiento Sur, que fue 
propuesto por el erudito católico Bellarmino Bagatti en 1979.30 
Bagatti concluía en base de su estudio de antiguos documentos 
y de su exploración y mediciones personales, que el antiguo 
templo debió haber ocupado un emplazamiento al sur, en 
alguna parte entre la Cúpula de la Roca yla Mezquita de Al- 
Aqsa.
La opinión de Bagatti es la más débil de las tres, porque se 
basa, en puntos cruciales, en datos históricos falsos que em­
pleó para sus presuposiciones operativas. Una de sus falsas 
presuposiciones es que la roca sagrada en la parte superior 
del monte del Templo no es una base para la localización del 
templo.
El emplazamiento Norte
El doctor Asher Kaufman de Israel desarrolló una opinión, 
a finales de la década de los 70, en el sentido de que el templo 
estaba situado en la esquina nordeste del monte del Templo, 
con una línea este-oeste alineando el monte de los Olivos con 
la Puerta Oriental, y el templo partiendo exactamente en dos 
la pequeña cúpula que se levanta ahora sobre el Lugar 
Santísimo. Cree que este punto es el punto naturalmente más 
alto del monte del Templo, y que es donde el templo debería 
quedar situado.31
El arqueólogo israelí doctor Dan Bahat suscita las siguien­
tes objeciones a la postura de Kaufman:
34 El templo de los últimos días
Tres ubicaciones sugeridas 
para el emplazamiento
del templo
(Todos los templos se 
orientan en sentido este/oeste)
N
1020 100
50 100 200i
150 
metros
300
Jcodos
Emplazamiento
Norte
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t
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¿Qué ... sabemos ... del templo ... ? 35
Nosotros [los arqueólogos] no aceptamos el punto 
de vista del doctor Asher Kaufman. Su ubicación del 
tem plo no concuerda en abso lu to con lo que 
conocemos hoy acerca de la disposición del monte del 
Templo. Hay otro monte del Templo que data bien del 
período asmoneo o de la época de Simón el Justo (no 
podemos establecer de manera precisa la fecha aún), 
y era un monte del Templo que se ajustaba de manera 
precisa a la topografía del área. Fue hecho de tal 
manera que nadie podría haber hecho adición alguna 
sin perturbar los rasgos topográficos. Por ejemplo, el 
valle central de Jerusalén comienza en un punto que 
desciende a donde se encuentra hoy la M uralla 
Occidental, y desde este punto pasa bajo el monte del 
Templo para salir abajo.
Esta es la razón por la que cuando Herodes el 
Grande quiso agrandar el monte del Templo, porque 
no podía edificarlo sin perturbaciones topográficas, y 
porque los asmoneos, o Simón el Justo, habían hecho 
la mayor expansión posible del templo dentro del 
marco de la topografía alrededor del monte del Templo 
... ésta es la razón que Herodes el Grande, entonces, 
para hacer esta ampliación, tuvo que rebasar el valle 
central y otros valles alrededor en Jerusalén. Por ello 
conocemos de manera precisa las condiciones de cómo 
el templo estaba instalado antes del tiempo de Herodes 
el Grande.
Si aceptamos la teoría de Asher Kaufman acerca de 
la ubicación del Lugar Santísimo, esto obligaría a la 
edificación del templo entero más allá del valle del norte 
del monte del Templo, y esto es una imposibilidad 
debido a la gran profundidad del valle debajo. Además, 
Charles Warren descubrió un enorme foso en esta área 
del norte, y si aceptamos la teoría de Kaufman, la mitad 
del templo tendría que ser edificado dentro de este 
foso.32
Este punto de vista ha ganado popularidad entre algunos 
evangélicos como una solución que vencería los problemas 
políticos asociados con la reconstrucción del templo. 
Algunos han sugerido que si la opinión del emplazamiento 
Norte es correcta, se podría edificar el templo sin tocar la 
Cúpula de la Roca. Sin embargo, esto no es solución, porque 
ni los judíos ni los árabes religiosos admitirían que la 
presencia cercana del edificio de los otros contaminase su 
lugar santo.
36 El templo de los últimos días
El emplazamiento tradicional
El punto de vista sostenido por la mayoría de los judíos 
religiosos en Israel hoy es que el emplazamiento tradicional, 
preservado por la Cúpula de la Roca, es donde se construirá 
el próximo templo. Este es el punto de vista que creemos 
correcto. No obstante, poco importa lo que nadie piense, aparte 
del hecho de que los judíos tomarán las decisiones cuando 
llegue el momento.
Aunque se podrían dar muchos detalles en apoyo de este 
punto de vista, todo se reduce a una sola realidad: la Cúpula 
de la Roca preserva la roca, y por ello el emplazamiento de 
los anteriores templos. Dan Bahat dice de manera inequívoca:
Diré justo ahora que el templo se encuentra exacta­
mente donde está hoy la Cúpula de la Roca sobre el monte 
del Templo. Quiero decir de manera explícita y clara que 
creemos que la roca bajo la Cúpula es el emplazamiento 
preciso del Lugar Santísimo. El templo se extendía exac­
tamente al lugar donde está la Cúpula. La «piedra fun­
damental» es realmente aquella piedra que comprendía 
el Lugar Santísimo.33
Chaim Richman, del Instituto del templo, dice:
Tenemos una tradición que nos ha sido transmitida 
por una cadena ininterrumpida desde nuestros padres de 
que la roca, la piedra debajo de la Cúpula de la Roca, es 
la «piedra fundamental».34
Dan Bahat está de acuerdo con esto cuando añade:
Si este emplazamiento no fuese el lugar del templo, 
no tendríamos la santidad que ha sido asignada a aquella 
piedra durante siglos. Los padres de la Iglesia describen 
cómo los judíos acudían años tras año a aquel lugar, y 
los musulmanes decidieron edificar su santuario sobre 
aquella misma piedra porque conocían la tradición ju­
día. . . . Ornar, el conquistador musulmán de Jerusalén, 
fue llevado por un judío directamente a aquella piedra, y 
no a otra. De modo que la tradición es bien clara acerca 
de la tradición de este lugar.35
La Biblia no demanda que el templo sea edificado sobre 
un lugar específico en Jerusalén para que se cumpla la profe­
cía. Sin embargo, el punto de vista judío mantiene que debe 
ser edificado donde estuvieron los anteriores templos. En este
¿Qué ... sabemos ... del templo ...? 37
tiempo, la creencia dominante en los círculos judíos es que 
será edificado donde se levanta ahora la Cúpula de la Roca. 
Creen que si el templo pudiese construirse en alguna otra parte 
fuera del monte del Templo, ya se habría hecho hace mucho 
tiempo.
16. ¿Tiene alguna relación el Arca del Pacto con la 
reconstrucción del templo?
Es difícil construir un argumento claro en base de la 
Biblia de que el Arca del Pacto esté relacionada con la 
reconstrucción del templo. Aunque hay muchas tradiciones 
judías de que el Arca del Pacto y otros utensilios del templo 
deben 
ser hallados y restaurados al templo reconstruido, no están 
directamente sustentadas por la Escritura.36 La Biblia no dice 
de manera directa que el Arca del Pacto será restaurada al 
tercer templo. El doctor Randall Price intenta dar un 
argumento escriturario en el sentido de que la antigua 
Arca del Pacto será recuperada para el tercer templo.
Este pasaje (2 Cr. 36:18, 19) revela que el templo y 
sus utensilios son inseparables; por lo tanto, el destino 
de ambos debe estar igualm ente enlazado 
proféticamente ....................................................................
Así como el templo fue destruido primero por los 
babilonios y luego por los romanos (Jer. 7:14; Le. 21:5, 
6, 20-24), también los utensilios del templo fueron 
llevados cautivos (2 R. 24:13; Jer. 27:16-22). Sin 
embargo, 
así como el templo fue (y ha de ser) reconstruido (Dn. 
9:16, 17, 29-27), también estos tesoros serán 
restaurados. Se encuentra apoyo para esta deducción en 
Jeremías 27:22
 Isaías también predijo la restauración de los 
utensilios [Is. 52:11-12].
Jeremías e Isaías estaban refiriéndose a la primera 
restauración del templo cuando los judíos volvieron de 
Babilonia (Jer. 28:1-6), pero sus profecías 
establecieron una pauta para el predicho segundo 
regreso (Is. 
11:11; Ez. 36:24-28) y la segunda restauración del 
templo
 Así como Jeremías e Isaías predijeron la destrucción 
de Babilonia y la restauración de Israel en el 
pasado, tambiénlo hizo Juan para el futuro (Ap. 17- 
20). Si la primera destrucción del 587 a.C. fue seguida 
por una reconstrucción, ¿por qué no también la 
segunda destrucción del 70 d.C.? Y si los utensilios 
formaron parte del segundo templo, ¿no deberían 
formar parte del tercero? El texto de Jeremías 
implica que la res
puesta es que sí.37
38 El templo de los últimos días
El problema básico con el argumento del doctor Price es 
que está sacando deducciones de suposiciones. Ninguno de 
los pasajes citados establece una base factual para sus deduc­
ciones.
Puede que se encuentre el Arca del Pacto y que sea restau­
rada al tercer templo, pero no hay base bíblica para tal decla­
ración. Desde luego, si se encontrase un arca de la antigüedad, 
quizá bajo el monte del Templo, esto daría un sólido argu­
mento para muchos en Israel de que el único lugar adecuado 
donde ponerla sería en un templo reconstruido. Se podría 
además argüir que la providencia de Dios les era propicia, 
por cuanto su mano habría provisto la pieza más importante 
de mobiliario del templo.
Puede suceder que se encuentre el arca, pero la Biblia no 
lo exige. Israel podría suplir su necesidad de utensilios para 
el templo proveyendo a un templo reconstruido con utensi­
lios nuevos, incluyendo el Arca del Pacto, si decidiesen que 
debían situar una en el tercer templo.
CUARTA PA R TE
¿Qué más sabemos 
acerca del templo milenario ?
17. ¿Por qué habrá un templo Milenario?
El propósito del templo milenario se encuentra en Ezequiel 
37:26-28:
Y haré con ellos pacto de paz, pacto perpetuo será 
con ellos; y los estableceré y los multiplicaré, y pondré 
mi santuario entre ellos para siempre. Estará en medio 
de ellos mi tabernáculo, y seré a ellos por Dios, y ellos 
me serán por pueblo. Y sabrán las naciones que yo Jehová 
santifico a Israel estando mi santuario en medio de ellos 
para siempre.
El Señor declara que el templo milenario será una de las 
maneras en que su nombre es conocido por las naciones y en 
que Él es vindicado. En Ezequiel 37:21-28 se nos dice que en 
la segunda venida de Cristo se cumplirán varias promesas 
para Israel. Una de las promesas es la presencia de Dios en su 
nuevo santuario, el templo milenario. Así como Dios habitó 
en el tabernáculo con Israel después de la liberación de ellos 
de Egipto, así también de nuevo «Tabemaculará» con Su pue­
blo cuando hayan aceptado a Jesucristo como su Mesías.
¿Qué más sabemos acerca del templo milenario? 39
18. ¿Por qué habrá sacrificios en el templo milenario?
Un aspecto del templo milenario descrito en Ezequiel 
40-46, especialmente en 43:13-27, que ha hecho pausar a 
muchos estudiosos proféticos para reflexionar, es el 
propósito y el papel de los futuros sacrificios. Al menos otros 
cuatro profetas del Antiguo Testamento se unen con Ezequiel 
en la afirmación de un sistema sacrificial en un templo 
milenario (véanse Is. 56:7; 66:20-23; Jer. 33:18; Zac. 14:16- 
21; Mal. 3:3-4).
Si aceptamos la interpretación literal de un sistema 
sacrificial durante el Milenio, ¿contradecimos con ello pasajes 
como Hebreos 7:26, 27 y 9:26, que enseñan que Jesucristo fue 
el sacrificio perfecto y final por los pecados? Los eruditos 
premilenaristas reconocen plenamente las cuestiones enjuego 
aquí. El doctor John F. Walvoord ha observado esta cuestión y 
escribe:
El único verdadero problema en relación con un 
templo futuro literal no es la cuestión de si se podría 
edificar un templo así en el milenio, sino el hecho de 
que esto indicaría asimismo una interpretación literal 
del ritual del tem plo y de sus sacrific ios
 Naturalmente, se suscita la cuestión de por qué se 
deben 
llevar a cabo sacrificios en el milenio si el sacrificio de 
Cristo cumplió una vez y por todas la expectativa 
tipo lóg ica del sistem a sacrific ia l del A ntiguo 
Testamento. Mientras que se hacen también otras 
objeciones de carácter inferior, es evidente que esto 
constituye el principal obstáculo no sólo para aceptar 
el sistema sacrificial, sino también para la posibilidad 
del futuro templo en el milenio.38
Hay al menos dos soluciones legítimas a esta pregunta. 
Primero, muchos estudiosos y maestros de la profecía han 
observado que los sacrificios pueden operar como memorial de 
la obra de Cristo. El doctor Jerry Hullinger recapitula esta 
postura:
Según esta postura, los sacrificios ofrecidos durante 
el reinado terrenal de Cristo serán memoriales visibles 
de su obra en la cruz. Así, estos sacrificios no tendrán 
eficacia alguna, excepto el recuerdo de la muerte de 
Cristo. El apoyo primario para este argumento es el 
paralelo de la Cena del Señor. Se argumenta que así 
como la mesa de comunión mira atrás a la Cruz sin 
manchar su gloria, así lo harán los sacrificios del 
milenio.39
40 El templo de los últimos días
Sin embargo, esta postura no resuelve totalmente todos 
los problemas. Ezequiel dice que los sacrificios son para 
expiación y no para memorial (Ez. 45:15, 17, 20). Por ello, 
una segunda solución a este planteamiento es que los 
sacrificios son para la purificación ceremonial. En lugar de 
una postura de que son meramente memoriales, el doctor 
Hullinger sugiere:
... una solución que m antiene los distintivos 
dispensación ales, que afronta con honradez el texto de 
Ezequiel, y que en modo alguno rebaja la obra de Cristo 
en la cruz. Este estudio sugiere que los sacrificios de 
animales durante el milenio servirán primariamente para 
quitar la impureza ceremonial y para impedir la conta­
minación del templo, tal como lo contempla Ezequiel. 
Esto será necesario, porque una vez más la gloriosa pre­
sencia de Yahweh estará habitando en la tierra en medio 
de un pueblo pecaminoso e impuro.40
El doctor Hullinger concluye diciendo:
Debido a la promesa de Dios de habitar en la tierra 
durante el milenio (como se declara en el Nuevo Pacto), 
es necesario que Él proteja su presencia por medio de 
sacrificios___Se debería añadir, además, que este siste­
ma sacrificial será temporal en tanto que el milenio (con 
su población parcial de humanidad no glorificada) dura­
rá sólo mil años. Durante el estado eterno, todos los 
moradores de la Nueva Jerusalén estarán glorificados y 
por ello no serán una fuente de impurezas contaminan­
tes que puedan profanar la santidad de Yahweh.41
La presencia y el propósito de los sacrificios, tal como se 
entienden más arriba, no disminuyen la obra de Cristo, ni 
violan la interpretación normal y literal de los pasajes 
proféticos. Aunque habrá sacrificios, el centro de toda la 
adoración se mantendrá en la persona y la obra del Salvador.
Los sacrificios del templo milenario no serán un regreso a 
la Ley de Moisés, por cuanto la Ley ha quedado para siempre 
cumplida y discontinuada por medio de Cristo (véanse Ro. 
6:14,15; 7:1-6; 1 Co. 9:20,21; 2 Co. 3:7-11; Gá. 4:1-7; 5:18; 
He. 8:13; 10:1-14). En lugar de ello, como observa el doctor 
Fruchtenbaum:
.. . habrá un sistema sacrificial instituido en el Milenio 
que tendrá algunos rasgos similares al sistema mosaico,
¿Qué más sabemos acerca del templo milenario? 41
junto con algunas nuevas leyes. Por esta misma razón, el 
sistema sacrificial del Milenio no debe ser contemplado 
como una reinstitución del sistema mosaico, porque no 
lo es. Será un nuevo sistema que contendrá algunas co­
sas viejas y algunas cosas nuevas, y que será instituido 
para un propósito totalmente diferente.42
19. ¿Cuál es el origen del templo milenario?
La Biblia indica que Jesús, el Mesías de Israel, que es 
conocido profèticamente como el «Renuevo», construirá per­
sonalmente el templo Milenario.
Toma plata y oro, haz una corona y ponía en la cabe­
za del sumo sacerdote Josué, hijo de Josadac, y háblale, 
diciendo: “Así dice el Señor de los ejércitos: *He aquí 
un hombre cuyo nombre es Renuevo, porque El brotará 
del lugar donde está, y reedificará el templo del Señor. 
Sí, Él edificará el templo del Señor, y Él llevará gloria y 
se sentará y gobernará en su trono. Será sacerdote sobre 
su trono y habrá consejo de paz

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