Descarga la aplicación para disfrutar aún más
Vista previa del material en texto
adernos de 13 . en in stituto nacional de Bella s Artes d e partam e nto d e ar g uit ec tura ~uadernos de 18 arquiteetnra contenido: Ptig. 2 Propositos 1 ARQ. RuTH RIVERA. 3 Tendencias de Ia Arquitectura Mexicana 1 ARQ. R uTH RIVERA. 5 Edificio de Oficinas 1 ARQ. AuGusTo H. ALvAREZ. 8 Edificio de los Poderes 1 ARQ. JoAQUIN ALVAREZ ORDONEZ. II Casa Habitacion 1 ARQ. FRANCisco ARTIGAS. 14 Centro Cultural I ARQ. PASCUAL BROID. 17 Ciudad Industrial I ARQ. RAUL CACHO A. 21 Un Nuevo Estilo en Ia Arquitectura Mexicana 1 ARQ. RAMON VARGAS SALGUERO. 23 Iglesia en Mexico, D. F. 1 ARQ. FELix CANDELA. 26 Unidad Prefabricada I ARQ. J UAN JosE: DIAZ INFANTE. 29 Centro Urbano Manacar 1 ARQ. ENRIQUE CARRAL E lcAZA. 32 I. N. I. I ARQ. ALEJANDRO CASO. 35 Casa Habitacion I ARQ. ENRIQUE CASTANEDA T. 38 Banco en Guadalajara, Jal. I ARQ. ERIC CouFAL. 41 Escuela Normal Rural , en Jal. I ARQ. SALVADOR DE ALBA. 44 Capilla en Coyoacan, D. F. 1 ARQ. ENRIQUE DE LA i\loRA. 47 Edificio de Apartamentos 1 ARQ. AGusTIN HERNANDEZ. 50 Fabricas Auto-Mex 1 ARQ. RICARDO LEGORRETA. 53 Casa Habitacion 1 ARQ. BENJAMiN MENDEZ. 56 Edificio de Oficinas I ARQ. HECTOR MESTRE. 59 Edificio de Oficinas 1 ARQ. CARLOs ORTEGA, ARQ. BENJAi\IiN i\fi:NDEZ. 62 Conjunto Urbano Nonoalco-Tlatelolco I ARQ. MARIO PANI. 65 U. P. del I. P. N. 1 ARQ. REYNALDO PEREZ RAYON. 68 Centro Vocaciona l 1 ARQ. ALEJANDRO PRIETO. 71 Museo Nacional de Antropologia I ARQ. PEDRO RAMiREZ VAZQUEZ. 74 Casa Habitacion 1 ARQ. MANUEL RosEN. 77 Garita Internacional en Tijuana, B. C. I ARQ. G uiLLERMO RosSEL, ARQ. MANUEL DE LA ROSA. 80 Centro Hospitalario en Culiacan, Sin. I ARQ. JOAQUIN S . .\NCHEZ HIDALGO. 83 Unidad Deportiva en Guadalajara I ARQ. ALEJANDRO ZoHN. 88 Directorio de los Arquitectos que presentan sus obras. PROPOSITOS La Arquitectura, como toda actividad realizada por el hom- bre en todas las etapas de su desarrollo, no es sino un fie! reflejo del grado de evoluci6n de los grupos humanos que Ia crearon, tambien representa los valores sociales y culturales principalmente considerados por esa sociedad, asi como su momento en Ia plastica. Arquitectura de Vanguardia en Mexico, tema del presente CUA- DERNO DE ARQUITECTURA, tiene el prop6sito de iniciar el analisis consciente de nuestro desarrollo arquitect6nico sin olvidar Ia estrecha relaci6n que Ia arquitectura guarda con Ia evoluci6n de las sociedades humanas. Este es el motivo por el cual conside- ramos de interes marcar Ia importancia que tiene esta actividad del hombre. Estamos seguros de que las obras presentadas no son Ia totalidad, ni son las tmicas que pueden determinar nuestras caracteristicas arquitect6nicas, sin embargo creemos que a traves de elias se pue- de realizar plenamente la valoraci6n de nuestra arquitectura. Arquitectura Social, Arquitectura de caracter netamente comer- cia!, Arquiter tura de ostentaci6n o de audacia, que sin embargo, en todos los c«sos resulta representativa, porque demuestra el gra- do de evoluci6n en lo tecnico y lo econ6mico y Ia estabilidad de una sociedad que ha hecho motivo de culto y respeto al hombre, sus herencias culturales y sus necesidades vitales. Arq. RuTH RIVERA. TENDENCIAS DE LA ARQUITECTURA MEXICAN A El minimo contacto que tuvimos con los movimientos arquitectonicos europeos posteriormente a Ia Primera Guerra Mundial, tuvo como consecuencia que ' Ia arquitectura mexicana de los alios veinticinco haya sido Ia mas esponta- nea, Ia mas sincera y Ia mas meritoria en ciertos sentidos. La espontaneidad no es por si misma garantia de que las accio- nes impregnadas de ella sean valiosas; nada de eso. Los grandes atractivos de Ia espontaneidad virginal que preconi- zaba Rousseau, han sido desmentidos por Ia experiencia, que hace ver que el aparente estado idilico del primitivo en contacto mas directo con Ia Naturaleza, es falso, totalmente falso. Las obras que ya Ia historia del arte ha sustraido al tiempo para expresar en elias Ia obje- tivacion de todo un conjunto de si- tuaciones que tipificaron a! Mexico de entonces, son valiosas por su esponta- Arq. Ruth Rivera neidad, que Ia tienen, solo en tl sentido en que fueron producto del talento crea- dor de sus arquitectos sin mas inspira- cion formal que las obras clasicas y renacentistas; sin mayor ejemplo de Ia correcta intervencion de Ia tecnica que Ia arquitectura gotica. El aislamiento en que vivio nuestra arquitectura, y quienes Ia hacian, del resto del mundo, es im- portante destacarlo para hacer ver que los mismos grandes lineamientos que es- timulan Ia admiracion mas irreflexiva por obras realizadas en otros paises, son las que se encuentran espontaneamente realizadas en aquellas obras del primer cuarto de siglo. Es importante desta- car que no se disponia de mayor orienta- cion que los tra tados de Teoria de Ia Arquitectura de los franceses del pasado y presente siglo, y que a partir de ahi, nuestros arquitectos convergieron donde Ia historia demandaba. 3 Es claro que podemos argUir si acaso le estamos dando un espaldarazo a los eclecticismos o a todos los anacronismos de aquellos entonces: nacionalistas y ex6- ticos. Nose trata de eso, pero si de aqui- latar en todo su merito a esos afios como el laboratorio que mucho equivoc6, pero del cual salieron los productos que seran los que nuestro momenta estaba necesi- tando. Valorar en su limitaci6n todos los eclecticismos no puede hacernos descono- cer que fueron ellos Ia experiencia que permiti6 Ia sintesis genial a que llegaron algunas obras especificas que sirvieron de norma para los tiempos posteriores. Hubo eclecticismo, es cierto, pero de ahi emergieron busquedas brillantes como las obras de Juan Segura y las sintesis de Villagran . Muchas cosas podriamos in- dicar acerca de elias pero no siendo el momenta, queremos restringirnos a asen- tar que a mas de sus proyecciones en varios valores, tambien estan rubricadas por Ia espantaneidad, par Ia necesidad de enfrentarse a un problema sin mas armas que el talento personal: y se sali6 triunfante. Tal calidad puede apreciarse mejor a Ia luz de lo que es nuestra arquitectura posteriormente a esos alios. Las situacio- nes variaron notablemente. Entre una guerra y otra, pudimos reencontrar de nuevo y aprovechar, hasta el hastio, los avances de occidente que nos llegaban entre revistas y jovenes que habian hecho Ia obligada peregrinacion a Francia. El mundo habia sido enormemente destrui- do; Ia produccion en serie se impania, y ya se disponia de un gran intento, por unificar industria y creacion, y llevar Ia industrializacion a Ia arquitectura: se llamo "Bauhaus". Su influencia fue grande y Ia sencillez de sus principios permitian su reproduc- cion indiscriminada en todo el mundo. En realidad, no solo Ia sencillez de sus principios expuestos hasta en forma de canones hacia posible su proliferacion; de hecho, pienso que tambien influyo que su principia fundamental era ese 4 precisamente: el de Ia posibilidad de re- solver cualquier problema mediante los mismos principios, aquellos de planta libre, de estructura sobre pastes, libera- cion del muro, jardines y otros. Estos principios encontraban su expresion en las obras de Mies Van Der-Rohe y Ia Arquitectura corrio golosa a elias. Le Corbusier, el menos fun cionalista de to- dos los arquitectos, entendiendo al fun- cionalismo como Ia tendencia arquitec- t6nica expresada textualmente en sus propios escritos, publico esos principios, con el animo polemico y demagogico de todas sus acciones. Le Corbusier escri- bio y difundio esos principios del funcio- nalismo, para que fueran seguidos par otros, porque el. el no se atenia en la practica, a formulas, asi fueran las suyas propias; las formulas son para los qul! no pueden crearlas; ja ellos hay que pro- porcionarselas! Eso es poco mas o menos lo que pademos concluir de los escritos y obras de este talentoso arquitecto. Las publico, las obrasfueron exhaustivamen- te difundidas, y su influencia en muy corto tiempo cruzo las fronteras de todo el mundo. Fue el momenta en que nues- tra arquitectura perdio su espontanei- dad. De ahi en adelante lo que se discutia eran esas doctrinas, que doctrinas son y no teorias. Claro que lo que era mas facil de seguir, eran los lineamientos del funcionalismo. A Le Corbusier o a Frank Lloyd Wrigth, jimposible! Cada dos o tres obras se apartaban con verdadero radicalismo de lo que habian hecho, para intentar algo nuevo. Le Corbusier seguia proyectando sus obras sobre pastes, cuan- do asi lo queria o cuando asi lo necesita- ba el problema mismo, pero nada mas. Y si el funcionalismo tiende como conse- cuencia logica al concepto ritmico de la plastica, Le Corbusier lo nego una y otra vez. De hecho existe una gran con- tradiccion en las obras de Le Corbusier; entre Ia ritmicidad de la estructura con el volumen que Ia cubre que notoria- mente tiende hacia el concepto armo- nico. EDIFICIO DE OFICINAS MEXICO, D. F. Arq. A ugusto H. Alvarez De ahi en adelante, se han conj ugado varias circu nstancias en nuestra arqui- tectura. Por un !ado, como vengo afir· mando, las tendencias mas representati- vas, mas populares en a lgunos casos, sur· gidas en Europa y Estados Unidos, se desplazan a todo el mundo y tifien de su matiz toda Ia arquitectura ... Ia t in en h asta el punto de que en algunas ocasio- nes no es posible distinguir a primera vista, Ia obra original de Ia del a lumno; del a lumno, que discipulos ha habido pocos. 5 Tradiciones, giros, acentos, las melo- dias y Ia letra en cada pueblo entonaba sus sentires, fueron cediendo ante el em- puje de Ia moda, de Ia propaganda, de Ia extension y ramificacion del estilo: de Ia penetracion economica y politica en ellos. Estos ultimos son los grandes vehiculos que unifican los estilos. que cohesionan las expresiones, que dan aire de familia a las diversas tribus. Las tra- diciones por otra parte, saben esperar; tiene una paciencia puesta a prueba en 6 Planta del segundo piso. Vista exterio!". todos los siglos que han necesitado para constituirse, para pulirse, para calar en lo hondo de sus pueblos. Ya las veremos aparecer de nuevo afios mas tarde. La influencia politica y economica se hace cada vez mas fuerte, y los estilos que han sido su producto se ponen de moda; sociologicamente, si no nos movemos dentro de las producciones, habitos de vida, productos y demas, nos sentimos fuera de Ia historia. Nuestros problemas, semejantes a los de todo el mundo, pero impregnados de nuestras tradiciones, y principalmente, de nuestros medios y economia, se ven vestidos en formas fun- cionalistas. Nuestra posicion dista mucho de ser chovinista. No juzgamos las realidades segun el pais de que proceden, sino en Ia medida y proporcion en que pueden sernos aplicadas. Pero eso es diferente a sostener que tal y como estan las rela- ciones y los niveles de desarrollo de los pueblos, puedan todos, por ahora, em- plear los mismos medios para los identi- cos fines: tal vez los medios les sean clemasiado onerosos. Lo anterior no desclice en nada el hecho de que algunas de las grancles co- rrientes que han cobrado naturalizacion munclial, tienen en las obras que se rea- lizan en Mexico exponentes de primer grado. Funcionalismo, estructuralismo, regionalismo y tantas otras son rapida- mente asimiladas por nuestros arquitec- tos y podemos presentar obras dentro de 7 EDIFICIO DE LOS PODERES EN CAMPECHE, CAMPECHE esos rubros, sin desdoro alguno. No in- tentamos siquiera plantear el problema desde un punto de vista sociol6gico, por- que presenta altibajos que hay que en- frentar con pinzas. ~Hasta que punto es valido resolver nuestros problemas con aquellas formas? ~Podemos hacer tabla rasa de lo que Ia economia y tradiciones nos representan? ~Podemos considerar que las superestructuras se han unifica- clo y preconozcan lo mismo? El funcionalismo deja honda huella en nuestra arquitectura. La Hamada ar· 8 Arq. J oaquin Alvarez Ordonez Colaborador: Arq. Edmundo R odriguez Exterior Pianta quitectura internacional se reproduce y en algunos casos, presentes en esta expo- sici6n grafica de algunas obras recientes de nuestra arquitectura, advienen a un alto grado de tecnica y sencillez estetica. Pero pronto, hablando en u~rminos de historia, surge Ia oposici6n. Como suele suceder en este tipo. de procesos, no des- colla organizada, programada; sus objeti- vos en Ia mayoria de los casos, no son conscientes; sus realizaciones coinciden con otras porque son los aires de £ronda que corren e inoculan a todos. Poco a I poco se van identificando realizaciones y realizadores, hasta que Ilega el mo- mento en que se puede hablar con toda objetividad de que ha surgido una nue- va tendencia. Tal sucedi6 en nuestro caso. Claro es que ya nadie osa repetir en sus detalles las formas de otras epocas, nuestras o extraiias; esa fue Ia etapa del nacionalis- mo ut6pico. Pero ahora, con Ia experien- cia que tenemos, con las Iimitaciones que ya le sabemos a tal tipo de tendencia, es- tilo o escuela artistica, esos errores no 9 pueden repetirse. Estructuralismo, indi· vidualismo y otro nacionalismo de nue- vo cufio, se dejan sentir con fuerza vivi- ficadora. Ei primero, como su nombre lo indica, sublima uno de los elementos de Ia obra edificada y con el, abarrocado. complicado, sofisticado, intenta inutil- mente hacer surgir el ave fenix. Las hor· monas que prescribe, son debiles para el padecimiento. EJ individualismo siempre es un re- curso, que subjetivo, tiene consecuencias objetivas. La sensibilidad personal, Ia bus· 10 Vista noctuma queda del detalle, el gozo por Ia forma insolita, por el espacio inusitado, por el asombro de Ia distribucion, son los facto- res en que se nutre. Dadas las condiciones sociales en que vivimos, el individualismo siempre es una puerta abierta, una via de escape, cuyas posibilidades y perspectivas estan en funcion directa del incremento de las necesidades del conjunto de Ia sociedad y de Ia firmeza de su prop6sito por re- solverlas. Mientras mas crezcan estas ne- cesidades y Ia decision de enfren tarse a Vista noctuTna CASA HABIT A CION elias, menos margen tiene el individua- lismo. Este se mueve en tanto Ia libera- lidad tiene ciertos margenes de accion. Las obras que producen ciertamente atraen por Ia imaginacion que las susten- ta, y otras veces por el retruecano que se hace. Pero el mismo darle juego a Ia individualidad, conlleva los restringidos limites que lo cobijan. EJ neonacionalismo a que nos referi- mos arriba, responde igualmente a Ia necesidad de renovar Ia arquitectura en Arq. Francisco Artigas I I Interior Ja que la hegemonla ha sido conservada por decenas de anos por el funcionalis- mo. Las Jimitaciones de este ante pro· blema en los cuales la concresion al- canza un maximo y su proliferacion irrestricta en todas las latitudes, asl como el avance de nuestras circunstancias bacia otros ideales, es lo que nutre a esta po- sicion. Es un nacionalismo mas elaboraclo que su ingenio antecesor; aquel era esponta- neo, este es intelectualizado; uno era de 12 raigamen popular, el otro es selecto; uno buscaba al esplritu barroco y el otro se mueve en Ja pureza de los planos. A poco del nacimiento de los naciona- lismos en Europa, la inherente necesidad de toclas las creaciones humanas de con- tinuar su propia diaJectica, hada ver que el tomar Ja cita textual del pasado histo· rico, era Ja via primera . pero tambien la mas obvia que podia considerarse. En Ja musica, donde el nacionalismo tuvo tan grandes y preclaras manifestaciones, fue ampliamente discutida Ia posibilidad de un nacionalismo que siendolo y ba- sandose en un pasado, conservara sin embargo su actualidad y tuviera una funcion en este momento. ~Que es lo que puede perdurar del pasado, se pre- guntaban?La forma espedfica no, dado que ella es resultante de unas series de condiciones y modo peculiar de enfren- tarse a elias. Tomar un segmento de his- toria y presentarlo en sociedad cambian- Vista exterior dole unicamente de ropaje, tampoco es valido, respondian. La dodecafonia no puede aplicarse validamente a una mu- sica homofona clasica. Lo unico que pue- de subsistir es lo esencial del arte. ~y que es ello? Pues el modo peculiar de consi- derar el timbre, el gusto por ciertas com- binaciones, el uso de ciertos elementos. La respuesta era vaga; no podia ser de otra forma . Determinar con rigor cienti- fico una esencia de esta indole, tal y 13 tii:H rSOUUMTitO LONGITUOINJ\l CENTRO CULTURAL como lo pretenden algunos investigado- res, es columpiarse en Ia abstracci6n. Pero sirvi6 de todas formas, para que ciertos elementos constitutivos de cada arte permitieran el nacimiento de mas obras dentro de esos lineamientos. En el caso que nos ocupa, Ia arquitec- tura, es clara que el gusto por el plano, por los grandes muros ciegos, ciertos co- lares como el blanco, el uso de las dobles alturas, todo ello y mas elementos forma- les, podrian ser conside,rados como aque- 14 Arq. Pascual Broid I! a esencia a que se referian los in vestiga- dores. No se trata de Ia cita textual de formas, como en el nacionalismo prece- dente, pero si de Ia "esencia" de nues- tro pas ado en alguna de sus eta pas. Este nacionalismo, ademas de sustentar y re- memorar vagamente un pasado en Ia evocaci6n de ciertas formas no claramen- te identificables, tambien se presenta como una reacci6n ante Ia uniformidad industrializada del funcionalismo . .. in- dustrializada en Ia pretension, ya que a! aplicarse a nuestro subdesarrollo, tiene que echar mano de Ia artesania en un noventa por ciento. Pero es una reacci6n ante Ia uniformidad de alturas. e l ritmo siempre igual, e l respeto a los ejes de com- posicion en que se convierten los ejes de estructura. N uestra arquitectura se mueve dentro d e estos lineamientos. Cada uno de ellos permite que apreciemos obras de talento variable. El principio formal que se adopte no es garantia en ningun sentido; ni obliga a concluir en una obra trascen- dente para Ia Humanidad, n i tampoco, necesariamente, puede por si mismo des- calificarla. Es claro que ciertos estilos ya est<\n definitivamente periclitados y que serian vanos todos los intentos por resucitarlos. Pero este no es el caso de los que aqui hemos mencionado. Todos ellos pueden considerarse como diferen- tes tendencias dentro de Ia actualidad de 15 Ia concepcion, del problema y del modo especial de enfrentarse a ei. Cada una por su parte, tiene meritos y posibilida- des diferentes. Cada una aporta algo a Ia arquitectura, a Ia que evidentemente no es posible estarle pidiendo a diario obras excepcionales. Como tendencia, es uno el juicio que podemos hacer; pero siempre teniendo en cuenta que este juicio no puede apli- carse miembro a miembro en cada una de las obras en particular. E igualmente, el merito de una obra, no podemos ha- 16 cerlo extensivo aLeonjunto. Pero si esto es asi, tambien es cierto que el indivi- dualismo, como tendencia general, esta ya descalificado por el avance de nues- tro momento y de los nuevos ideales que tienden a construir. Alguna obra en par- ticular puede ser valorada en alguno de sus aspectos; como totalidad, ya no es posible. El correr del tiempo cierra definitivamente ciertas vias para abrir otras. EI individualismo fenecio en 17; estas manifestaciones lo estan sobrevi- viendo. PersjJectiva CIUDAD INDUSTRIAL EN CUERNAVACA, MORELOS Arq. Raul Cacho A. 17 CliO A, 18 Ubicaci6n de las ciudades para contener )' descentmliza>' indust,-ial y demogrdficamente a Ia mel1'6poli capital. Detalle 'de Ia secci6n Balsas-Acapulco, Elaboraci6n B N M £studios Econ6micos Corte e· OtlANO ,.ACir f CO 19 UN NUEVO ESTILO EN LA ARQUITECTURA MEXICAN A Un nuevo estilo se ha integrado ya a Ia historia de Ia arquitectura mexicana : el de arquitectura social. El caso es peculiar, porque cuando nos referimos a eJ buscando sus origenes y prefigurando sus posibilidades, Jo hace- mos a sabiendas de que no es ni el estan- darte de un grupo organizado de arqui- tectos, ni pueden todavia citarse obras que puedan ser consideradas como mues- tras de el. Se trata, mas bien, de una tendencia en etapa de gestacion que se mueve pre- ponderantemente en los ambitos del ideal mas que en los de Ia practica con- creta; pero que aun en el estado inicial en que se encuentra, pergefiandose en un cuerpo de teoria y doctrina, ha entrado con pleno derecho a Ia historia del arte. Ramon Vargas y Salguero EI curriculum vitae que presenta a Ia academia, esta constituido por el conte- nido humanistico de su lema, y porque desde ahora se opone radicalmente a ser considerado como uno mas dentro de Ia pleyade de movimientos artistico-estilis- ticos que Ie han antecedido, y que en esencia, d ifieren radicalmente de el. Es algo nuevo cua litativamente hablando. Si los estilos que Ie antecedieron ganaron su carta de ciudadania impugnando una forma y una tecnica preponiendo otras en su Iugar, este se basa en aquello para de ahi, insertar un nuevo contenido a Ia arquitectura. Este es su nexo con el pasado y a Ia vez, su salto dialectico. Le otorga su apoyo nuestro momento histo- rico que por todas las vias busca consoli- dar ese nuevo humanismo. 21 Del funcionalismo a! integralismo, re- corriendo toda Ia escala que pasa por el internacionalismo, el organicismo, el es- tructuralismo y otros ismos de menor jerarquia, nuestra epoca se ha acostum- brado a! ir y venir de tendencias ar- tisticas. La necesidad de diferenciar catalogando, hace que cualquier mani- festaci6n mas o menos peculiar le sea adjudicada de inmediato un rubro mas o menos acorde a sus pretensiones o ca- racteristicas. Este a que ahora me refiero ciertamente es otro lema mas, pero de cufio diferente. Por el momenta no va- mos a detenernos a comprobar si ya hay obras en que poder valorarlo y Ia signi- ficaci6n que corresponda a cada una en particular, y a Ia tendencia en su con- junto: ya he explicado por que. Lo im- portante por ahora es, apreciar hasta que punto estamos moviendonos dentro de una nueva dimension. Para eso, tenemos que reparar aunque sea brevemente en los lineamientos de los movimientos an- teriores. Reconocido el merito de todos los ismos precedentes, tenemos que concluir que surgieron de las aportaciones que cada escuela , grupo, tendencia o estilo, hicieron dentro de los aspectos formales o tecnicos de Ia arquitectura. El funcio- nalismo no fue importante como movi- miento renovador unicamente porque propugnara por el apego de los espacios a las necesidades de habitabilidad que se les exigian; sino porque a mas de eso trat6 de ganar para Ia arquitectura las ventajas en materiales y tecnicas que Ia industria proporcionaba a otros campos. Se le desvirtuo adjudicandole el afa- nismo de que Ia "forma sigue a Ia fun- cion"; se le prostituyo haciendo crecer a! maximo a uno de sus elementos y cons- truyendo las inhumanas "maquinas para vivir", de las que por cierto no fue autor Le Corbusier. La grandeza del funciona" lismo y los aportes que lo llevaron a ser una nueva etapa dentro del desarrollo de Ia arquitectura, representan a! mismo tiempo su limitacion a los aspectos for- males y tecnicos. Los mismos sectores y 22 clases que ya disfrutaban de Ia arquitec- tura fueron los beneficiarios de estos lo- gros. En el caso del organicismo y del integralismo encontramos meritos seme- jantes. Insistir en que Ia arquitectura de Ia democracia tenia que ser concebida como un organismo, en el que Ia pare es a! todo como el todo a Ia parte, a mas de repetir las tesis mas manidas de Ia filoso- fia, persistia considerando a Ia arquitec- tura como Ia soluci6n del caso individual aislandoladel conjunto social. Tal y como lo podemos comprobar, ese todo no iba mas alia de las necesidades y medios concretos del cliente especifico a! cual se destinaba Ia construccion. Era un todo que nos cabia en el bolsillo. El integralismo de las artes, por su parte, propugnaba porque nuestro tiem- po volviera a conjuntarlas a semejanza de las grandes epocas. No surgio como una nueva tendencia arquitect6nica; se debio a Ia concepcion del arte que entre nosotros impulsaba un grupo de pintores, agrupados en Ia que se ha titulado de Escuela Mexicana de Pintura, y que con bastante antela- cion habia renovado Ia pintura, sacan- dola a Ia calle, realizandola en los muros de los edificios publicos. La Ciudad Universitaria fue su cenit y su ocaso. Las dicotomias tajantes en que concluy6, fue- ron prueba plena de que Ia integraci6n de las artes va mas alia de ciertos logros meramente formales. Podriamos recordar, no obstante que sus meritos han sido mucho menores, pese a Ia proliferacion que a ultimas fe- chas ha tenido en todo el mundo, Io que ha sido titulado de estructuralismo, que de hecho no constituye una tendencia mas que en el sentido en que Ia preocu- pacion de todos los arquitectos que se encaminan por esta via, es encontrar una estructura novedosa. El programa de Ia obra es ~I mismo, pero las cubiertas prin- cipalmente revelan Ia simiente formalista de todas elias. En algunos casos se ha avanzado realmente, Iogrando nuevos tipos de cubiertas y economia en los detalle interior IGLESIA EN ME X ICO, D. F. LA MEDALLA MILAGROSA Arq. Felix Candela 23 + , ... Plant a medias: es el caso de los hiperboliudes de revoluci6n. Pero desde el punto de vista que en este momenta nos sirve para diferenciar a esas tendencias de Ia arqui- tectura social que ha nacido, son claros ejemplos de que Ia arquitectura en nin- guno de esos casos ha hincado en lo sus- tancial de ella, en su conte"lido humano, limitandose a aportar, si, pero dentro de los mismos limites y concepciones libera- les que rubrica nuestro siglo desde sus principios. Ya los lineamientos del internaciona- lismo y del nacionalismo anacr6nico, son 24 interior mi.n en construcci6n paradigmaticos: Lo unico que buscan es lograr Ia novedad formal sin prejuicio alguno de tomar formas que correspon- dieron a otra concepcion del mundo. No cabe ni insistir mas en elias, pese a que en Ia mayoria de los casos el talento este- tico de sus creadores es notable. La arquitectura antecedente a Ia ar- quitectura social, nunca tuvo por pre- ocupaci6n Ia de dirigirse a solucionar las demandas de espacios habitables de los grandes nucleos de Ia poblaci6n. Para ella no existi6 conservandose mas que el problema particular individual, que podia ser mas o menos amplio, pero siempre dentro de los limites de lo in- dividual. Tengase en cuenta, que cuando me refiero a problemas particulares indivi- duales, no supongo que Ia arquitectura pueda resolver en serie todos los proble- mas. Estamos plenamente convencidos de que cada problema siempre es particular, y que debe resolverse atendiendo precisa- mente a programa particular, y que en tanto Ia sociedad toda no se unifique, su- perando sus contradicciones e intereses de clase, y alcance a disponer de una industria potente que haga de los paises neocoloniales y su bdesarrollados pa i- ses industrializados, estas limitaciones o datos del programa tienen que hacer de cada obra, un caso particular. No es pues en ese sentido que vengo empleando Ia nominaci6n de problemas particulares individuales. Se trata de hacer ver que los problemas de los grandes conjuntos, de capacidad adquisitiva mucho menor y minima en un porcentaje superior, fueron ignorados por toclas esas tenclen- 25 interior de Ia habitaci6n UNIDAD PREF ABRICADA CEL ULA DIN AMICA Arq. Juan Jose Diaz Infante 26 .. ~::: 1 I I I I l I ! B \ \ \ ' Planta cias, cuyos Iogros innegables, siempre fueron usufructuados por Ia clase y sec- tares que disponen de lo suficiente para resolver sus propios problemas: que son individuales. Tener en cuenta los generos arquitec- tonicos representativos de nuestro mo- menta, es acudir a una prueba contun- dente: son claramente demostrativos de lo que vengo asentando. Se trata de edi- ficios de renta, de muy varios tipos y A c' I; li !: ,, ~~l ,, 8' subgeneros: de traba jo, recreacwn y ha- bitacion. Ejemplos de arquitectura des- tinada a satisfacer las necesidades de los grandes conjuntos, no existen. Si asi fue- ra , seria casa-habitacion el genera repre- sentativo de nuestro momenta; y no puede rebatirse hacienda ver que en las casas habitacion que obviamente han proliferado cuantitativamente, se pueden encontrar ejemplos notables de habilidad compositiva, objetivaciones de nuevos 27 conceptos ph\stico esteticos o intentos de solucion industrializada, prefabricada, porque todos los ejemplos y mas que pudieran citarse, persisten siendo casos individuales. Los escasisimos ejemplos que podemos traer a colacion de edificios de habita- cion multifamiliar, tampoco constituyen una prueba en contrario. Las rentas que alcanzan en unos casos; el precio a que se venden en condominia en otros; los 28 Vista de conjunto de Ia unidad de habitaci6n, multice lula1· a base de unidades prefabricadas de pldstico sectores burocraticos a que se destinan y Ia infima cantidad en que se han cons- truido -infima si acudimos a Ia cantidad de personas, trabajadores de Ia industria o del campo que carecen de un techo en nuestro pais- conducen a Ia misma con- clusion a que hemos llegado en el caso de las anteriores tendencias: que se han dirigido a! problema particular indivi- dual. El palacio y el templo fueron los gene- vista exterior EDIFICIO DE OFICINAS CENTRO URBANO MANACAR corte Arq. Enrique Carra] lcaza I' - . ·-· ' __ ! comercial ·• 0 Plan/a principal ros arquitectonicos representativos de otras epocas; Ia nuestra los tiene en sus edificios comerciales, y tal vez hasta pu- dieramos mostrar que son los edificios Jlamados de despachos o de comercio y los bancos, los que mas destacan. lntere- sante a! menos seria analizar sociologi- camente las nuevas sucursales bancarias que se estan realizando, para comprobar 30 si son o no los nuevos palacios de nues- tro momento. Es por eso que cuando ya se vislumbra una tendencia que insiste no en una nueva forma, no en otra tecnica, no en un principia estetico, sino en que Ia arquitectura toda debe buscar su propio clesenvolvimiento en Ia solucion de las necesidacles de los grandes nucleos, tene- mos que concluir que estamos ante algo Planta a nivel de solano @ ..... @ @@ @ Interim· del cine 31 INS~ITUTO NACIONAL Il' Arq. Alejandro Caso Planta principal 32 Detalle IGENISTA, MEXICO, D. F. nuevo. Quiero decir que el humanismo que esta tratando de consolidarse, de construirse en nuestro mundo, ya ha inoculado a Ia arquitectura. No se habla aqui de tal o cual aspecto u!cnico o for- mal; se insiste en el hombre, en sus necesidades sociales, en Ia necesidad de obtener para ellos el beneficio que ahora Circulaci6n interior alcanzan solamente unos cuantos grupos. Lo que se quiere decir cuando se insiste en Ia arquitectura social es que lo tras- cendente no radica en los materiales que se emplean, en el dispendio de medios y espacios a que se echa mano ; no se habla de las obras que aparecen en las revistas e imponen por medios publicita- rios toda Ia gama de arquitectura de re- lumbron; se insiste en que aun con pobreza de medios, es posible realizar arquitectura, que no lo sera por formas o tecnicas novedosas, sino porque tiene como meta las masas que estan "avidas 33 de un techo aunque no sea alabado, in- ternacionalizante o hiperb6lico". La ar- quitectura social no podra vanagloriarse de haher concebido una nueva forma plasticamente excelsa, pero side hacer de Ia arquitectura un instrumento a! ser- vicio de nuestras necesidades. ~Cuales son los datos que permiten 34 afirmarnos en lo que venimos diciendo respecto a! nacimiento de un nuevo esti- lo, sus caracteristicas y posibilidades? Po- dria responder que es suficiente com- probar si los objetivos particulares que se plantean en esta tendericia dentro del terreno del arte coinciden con los que preconizan el momento hist6rico del Vista del jardin CASA HABIT A CION CLUB DE GOLF "LA HACIENDA" Arq. Enrique Castaneda Tamborrell 35 CJ - -- cual formamos parte, que puede mostrar los exitos alcanzados ya en otros terrenos, y las bases que se estan construyendo para hacerlo extensivo a todas las mani- festaciones y relaciones humanas. Y se- gundo, los testimonios teoricos que inclu- yan este cambio de rumbo, que planteen sistematicamente su necesidad y Ia com- prension, analisis y valor que cabe hacer de el dentro de toda una concepcion del arte: dentro de una teoria del mismo. 36 La necesidad de aclarar los puntos an- teriores no responde a un prurito intelec- tual que agota a! conocimiento en el co- nocimiento mismo. Es claro que saber de un problema, puede ser interesante, loable y beneficioso, pero solo en mar- genes muy limitados, si no se hace de el un instrumento para mejor orien- tarnos dentro de los problemas. Para nosotros, saber de Ia arquitectura so- cial es una necesidad producto de Ia Ia casa desde el campo de golf crisis formal en que se debate Ia arqui- tectura actual, por un !ado, y Ia impos- tergable necesidad que de ella tienen nuestros grandes grupos de poblacion. ~Como revitalizar las experiencias pasa- das? ~Como darle nuevo contenido a Ia arquitectura? ~De donde ha de surgir ese plan vital? Estas preguntas y muchas mas, consciente o inconscientemente per- cibidas, son las que al responderse ofre- ceran, ademas de una satisfaccion inte- lectual para el que asi lo necesite, Ia orientacion indispensable para salir de las arenas movedizas en que nos encon- tramos varados. Hincar en sus origenes, diseccionar su estructura y prever sus perspectivas, es pues una necesidad. En primera instancia, apelariamos a las acciones de los trabajadores por desgajar para si el usufructo de los bienes de con- sumo de los que el es el productor; sus !ides, planteadas en todos los niveles, desde el sindical a! juridico, del politico a! moral, del economico a! social, son claramente demostrativas de que termi- nar con Ia desigualdad superando Ia di- ferencia de intereses, no es una gracia ni 37 BANCO INDUSTRIAL GUADALAJARA J ALISCO Arq. Eric Coufal un capricho, sino el advenimiento de un derecho inherente a los ideales de demo- cracia que han impulsado hacia de- lante el desarrollo de Ia Humanidad. Estos enfrentamientos paso a paso van Iogrando concesiones en ese sentido. En unos casos, le cuestan desangramientos tragicos a Ia Humanidad; en otros son Exterior menores. Tanto en el ambito internacio- nal como en el nacional, lo que da Ia tonica del momenta son precisamente esas acciones, pudiendo comprobarse como en todas las latitudes las concesio- nes que se obtienen significan un paso mas en Ia conciencia que acepta Ia nece- sidad de modificarse en ese sentido. Los 39 programas de los distintos gobiernos que ascienden incluyen como parte sustan- cial de ellos, puntos que en mayor o menor medida responde a esta necesidad democd.tica en Ia que los grandes grupos no queden a! margen de los beneficios de lo que Ia ciencia, Ia tecnica y el des- arrollo de las fuerzas productivas obtie- nen. La lucha contra Ia pobreza, Ia re- forrna agraria, el desarrollo de Ia indus- 40 tria, Ia extenswn de Ia educacion, Ia lucha contra el analfabetismo, el seguro social, Ia libertad de expresion, Ia liber- tad para que existan todas las ideas, son Ia expresion de que los trabajadores propugnan por su democracia. Tanto los paises altamente industria- lizados, como los subdesarrollados que acaban de conquistar su independencia politica, expresan su preocupacion por ESCUELA NORMAL RURAL Arq. Salvador de Alba Martin CIUDAD GUZMAN, JALISCO exteri01· de la escuela . ,. ..J II I E W"'z~~ ~· : ,.,. of'r-J J.·J·JJ·J-JJ·J-JJ.JJ.J .. J r· .. .-.~ ... 3 r • '\ .... .... ____ , " ! ··-· N R c G hacer Ilegar a! conglomerado social lo que hasta ahora ha sido patrimonio de unos cuantos. Es 16gico que las primeras manifesta- ciones de este nuevo sentido humanista se hayan presentado en las relaciones entre el capital y el trabajo: del modo como se realice este dependen todas las demas expresiones de un momento hist6- rico. Y es importante tener en cuenta que si bien esas reivindicaciones prime- ramente laborales no han accedido a Ia cuspide todavia, porque Ia cuspide es 42 ... .... .. Planta general infinita y porque apenas estamos en Ia linea de arranque, han extendido su es- piritu a todas las superestructuras, pu- diendo comprobarse su impacto en los ambitos de Ia politica, de Ia educaci6n, del arte, de las relaciones sociales. Edu- caci6n, derechos, cultura, salubridad, tienden a hacer participes a toda Ia po- blaci6n de sus beneficios: el motor que las impulsa hacia esa actitud no es otro que Ia depauperizaci6n de un grupo, Ia conciencia de que es necesario consolidar Ia democracia y Ia firmeza de una parte 43 Vista principal EL AL TILLO, CAPILLA EN COYOACAN, D. F. Arq. Enrique de Ia Mora y Palomar detalle posterior 44 interior Planta de Ia Humanidad que no ceja en sus ideales. Son esos hechos, que ahora pergefia- mos violentamente, los que nos han per- mitido considerar en un principio, que Ia tendencia que se deja sentir ba jo el lema de Arquitectura social esta en con- sonancia con los ideales de vida que ya en otros terrenos de Ia cultura han dado sus primeros pasos; y no puede ser de otra manera, puesto que esta tendencia, en uno de sus aspectos, esta madurando bajo Ia influencia de todo ese ideal: el que sus voceros lo comprendan asi o no, es algo que no interfiere en nada. Hacer extensiva Ia arquitectura a toda Ia po- blacion que carece de ella, es como afirmamos anteriormente, es polvo de aquellos lodos, harina del mismo costal, astilla del mismo palo: es consecuencia del humanismo hacia el que se encamina toda Ia Humanidad. 45 46 Vista interior desde Ia parte posterior Fachada Suroeste asoleadero y a/berea en el Penthouse EDIFICIO DE DEPARTAMENTOS Arq. Agustin Hernandez N. 47 Corte longitudinal 48 Detalle de la entrada Dedamos que otra de las fuentes que prefiguran a la arquitectura social, brota del terreno de las ideas; ideas que tienen su propia dialectica y que ante cada nueva respuesta hace surgir una nueva pregunta, pero que en ultima instancia, dependen de las condiciones materiales por las que se rige la sociedad en su conjunto. Esto no obstante, el conoci- miento mantiene una relativa autonomia que le permite adelantarse, en un cierto grado, a las situaciones precisas, pre! u- diando los que las contradicciones inter- nas a Ia misma base econ6mica exigen, pero que el pensamiento concretiza en teorias; teorias que posteriormente, a! prender en Ia conciencia de Ia sociedad, se tornaran en reales doctrinas. 49 , •"""""" ,,. r h ....... ~ . ...., n . I'! oehodo 1 u r 50 Vista exterior del cuerpo de oficinas FABRICAS AUTO MEX Arq. Ricardo Legorreta Colaboradores: Arq. Carlos Hernandez Arq. Ramiro Alatorre Arq. Noe Castro Vista del cuerpo de fabricaci6n de motores .,-,, ftawl d\, dctalle de los tanques de al- macenamiento .... -.. -:-.;:..::· .. ·.: .... -: . . . pI El caso de Ia teoria de Ia arquitectura, es ese. Tambien ella se ha visto contagia- da por ese humanismo que caracteriza a nuestros tiempos y a! cual se adhiere esta nueva tendencia, Ia de Ia arquitectura sociaL Primero empez6. no como uno delos principios sistematicamente estructu- rados dentro del cuerpo te6rico, sino mas bien como un ideal, un ansia insatisfe- cha, una necesidad intuida de justicia. Para el arquitecto Jose Villagran, autor Planla general de Ia teoria vigente, era clara, desd;; sus primeras intervenciones en el afio de 1932, que Ia arquitectura de nuestra epoca solo podia cumplir el cometido social que Ie da vida, si tendia a resol- ver con integridad artistica y moral, las necesidades reales , objetivas de Ia pobla- ci6n. Por eso es que ante Ia primera Convenci6n de Arquitectos Mexicanos, insiste en que Ia arquitectura no se agota en Ia creaci6n de belleza, y que 51 Detalle de las o(tcinas 52 Vista posterior CASA HABIT A CION Arq. Benjamin Mendez Planta de conjunto 53 .i ~ ! . .......__ ~· ·---- · tiene dentro de su estructura anal6gica que cumplir con todos los requerimien- tos extra-esteticos de habitabilidad y constructibilidad. No fue comprendido el llamado que h izo en aquella ocasi6n para que se formaran cuerpos de inve>- 54 Estancia Planta tigadores que con su cuantificaci6n y cualificaci6n rigurosa de las necesidades de nuestro pais le prestaran a! arquitecto Ia base objetiva para ligar su actividad a los programas que Ia demadaban. Poste- riormente, una y otra vez insiste en que Exterior Vista desde l'estibulo 55 EDIFICIO DE OFICINAS Arq. Hector Mestre Arq. Manuel de Ia Colina Detalle Planta Tipo 57 58 Vista posterior el arquitecto est<i a! servicio de Ia socie- dad. Integrar dentro de Ia teoria de Ia arquitectura ese ideal, fue una tarea penosa y lenta. Partimos de lo acumulado por otras epocas, de las preguntas que se plantea- ron -y que no eran sino el reflejo que su economia provocaba en el anchuroso campo de las ideas-. Conocemos d in- tento por conferirle una esencia inmu- table; con los dialecticos, pero tambien idealistas, Ia comprendimos como un eslabon mas de Ia cadena que entreteje EDIFICIO DE OFICINA S Arq. Carlos Ortega Arq. Benjamin Mendez Intaim de una de las oficinas 59 Planta de S6tano 60 el espiritu en su perenne develamiento; Ia Humanidad saluda entusiasmada el descenso de las alturas y Ia precision positiva que explic6 at arte y a Ia arqui- tectura a partir de ciertas relaciones y datos socio-ambientales; junto con las demas artes, ha sido vista como juego, magia y factor terapeutico; Ia sicologia Vista exterior nos hizo penetrar en los reconditos para- jes de Ia sique del creador y del que Ia vive estableciendo lazos de simpatia; Ia potemica se despert6 al saberla instru- mento ideologico a cuyo traves una clase espedfica busca consolidarse_ Y con todo, nuestra epoca no estuvo satisfecha, y como las que Ia antecedie- 61 !.LI!f .. ... .... ...... 4! .... .... .... .... .... .... ... ... ... .. CONJUNTO URBANO Arq. Mario Pani Arqs. Asociadas 52 Planta 'de conjunto NONOALCO-TLATELOLCO ron, nego sm invalidar, todo lo acunado hasta nosotros haciendo ver que cada una de esas investigaciones, no podian era su pretension, y a! restringirlas a su explicar Ia totalidad del fenomeno, como campo especifico, plante6 una nueva pre- gunta. Esta surgi6 del conocimiento que vini- mos a tener del valor. Del valor que sub- yaci6 a lo largo de todo el desarro llo de Ia Humanidad y de Ia filosofia que lo intenta explicar. Primero lo rescat6 Ia economia, para quien era piedra clave para explicar las relaciones entre capital y trabajo. Despues fue Ia filosofia quien lo atrajo para si y a! determinar las categorias que lo estructuran mostr6 que todas las cosas, ademas de ser, valian, y que el valor era una entidad propia. La estetica varia su tono y los anteriores planteamientos cedieron su Iugar a! que inauguraba Ia axiologia. La arquitectura, 63 64 Vista de una parte del conjunto N onoalco-Tlatelolco UNIDAD PROFESIONAL DEL INSTITUTO POLITECNICO NACIONAL Arq. Reinaldo Perez R ay<'>n Colaboradores: Arq. Pedro Klenburg Z. Arq. J uan Polo E. Arq. J uan Antonio Vargas G. Arq. Santiago de Ia Torre Arq. Raul I ll<in G . Arq. Antonio Gonzalez J . 65 Planta general ZONA PARTES £Sf'[O.t.LD PLAl.l or"'"'" Otlti:C:C:!OJI OllllltAL CliiTIIO (dllfl,llt.f.L Z 0 Iii A" [ ,1 COL A II ' .. I LAIOJIATOJI!OI LIIIIIOS LAIOIIATOIIIOJ I'!IADOI llttiiiiiiiiA TIXTIL I FIIICA AVAIIJ:ADA CIIITIIO OllCALCULO I l II V . -1 C I 0 S II IITACIOIIAMIIIIT -0 II PAID .. Olllt!VIL OIPOITI 111'0 Ill MAL 11 ~u.aKT-.T'IOl.IIIOI.. M C A II" 0 I I' UTI 0 L lli'OIITIOIII,IIIU.DO II CA II P 0 I I' UTI 0 L II VIITIOOIUI ri.ITIOL "'UITIDOIIIIII.IIIALII II UIIIIAO IIATACIOII II TIt I I U II A I 10 I' ft 0 II T 0 II I I II UIIIDAO ATLI T I I M 0 U CAlli PO II I I IOL II 111111.110 Plt .. CTIC.f.l 14 IIIIIIAIIO lUIIIICIOII U IIIIYICIO IIIIOICO II CAI'ITIIIIA CliiTitAL lOll A COMI'LlMIMTAIIIA I? ..UilODI:CiliiCIA'tUC:MICA II I'LAII IT A It 10 UNlOAD PROFESIONAL DEL INSTITUTO POLITECNICO NACIONAL o\JtQ , JtiiNALDO PEREZ ftAYON MEXICO 66 ... Aulas, edificio tipo Fachada Norte par fin, pudo ser explicada como una te- tralogia de valores, que siendo indepen- dientes entre si, tal y como lo especifica Ia axiologia, determinan con su concu- rrencia simultanea en una obra, un valor de segundo grado, que es precisamente el artistico o arquitectonico; terminos que asi planteados, son sinonimos. AI ver las teorias, asi, a distancia, pa- recen perder parte de su significacion, y lo obvias que ahara nos parecen tienden a diluirnos Ia clarificacion que produje- ron en Ia explicacion. Todas las teorias " ~ ,,, ~ -. 'if }, "" a! hacerse el concenso comun pierden un tanto el ambiente polemico que las acom- pal'io en su lucha par Ia sobrevivencia. Esta polemica parece no haberse dado en el caso de Ia teoria de Ia arquitectura a que me vengo refiriendo. Pero Ia po- Jemica se esta desplegando de todas ma- neras, unicamente que reviste tonicas especiales. La controversia, el careo con las otras tesis, ahara periclitadas y esta, se encuentra implicitamente manifiesta en Ia nulidad de las primeras para expli- car teoricamente aspectos de Ia arquitec- 67 CENTRO VACACIONAL 68 Arq. Alejandro Prieto P. EN OAXTEPEC, MORELOS 69 Vista de conjunto del Centm Vacacional para tmbajadores del IlviSS, localizado en OaxtefJec, Edo. de More los 70 MUSEO NACIONAL DE ANTROPOLOGIA Arq. Pedro Ramirez Vazquez Arq. Rafael Mijares Arq. Jorge Campuzano Vista del patio interior del museo 71 72 "Tlaloc" , a Ia entrada del museo Vista exterior CASA HABIT A CION EN MEXICO, D. F. Arq. Manuel Rosen Morrison 74 75 tura que solo son comprensibles a Ia luz de esta teoria; nueva, aunque tenga unJ vigencia de dos lustros. Ya en otros escri- tos publicados en estos mismos Cuader· nos Ia he expuesto geneticamente; no cabe insistir mas en ello, ademas de que en sus enunciados mas generales es ple- namente conocida de los arquitectos me- xicanos, al menos para quienes ha fun- 76 gido como orientaci6n en su practica profesional, hasta el punto de que Ia arquitectura realizada en Mexico en los ultimos cuarenta afios puede ser explica- da, en algunos de sus aspectos , como Ia concretizaci6n de esta teoria en las obras especificas. Si Ia I ucha de est a teoria por ganarse el derecho a ser vista como Ia superaci6n GAR IT A INTERN A CION AL EN TIJUANA, BAJA CALIFORNIA Arq. Guillermo Rossell de Ia Lama Arq. Manuel Ia Rosa 77 Vista general 78 de todas las que le antecedieron y en las cuales abrev6, no ha revestido expresio- nes mas vigorosas, y no ha cobrado vi- gencia mundial, se debe entre otras cosas a Ia falta de difusi6n. No cabe en los Hmites de este escrito hacer una relaci6n entre Ia falta de difusi6n y Ia subestima- ci6n que las sedicentes historias hacen de, practicamente, toda Ia arquitectura latinoamericana. Peroel hecho existe y sin acudir a las causas que lo motivan, determina lo poco conocida que es nues· tra arquitectura y Ia teoria que Ia sus· tenta. En otras oportunidades he mostrado que concebir al arte, especificamente a Ia arquitectura, como una pluralidad de valores, no tmicamente super6 a las ante- rim·es teorias de los grandes maestros franceses del pasado siglo y principios de este, sino que de hecho extendi6 su im- pacto a Ia concepcion que teniamos de Ia estetica, conceptuada tradicionalmente como Ia disciplina filos6fica que podia aclarar las categorias del arte. Hemos po- dido comprobar que distinguir entre es- tetica, teoria del arte y filosofia del mis- mo, confiere campos especificos a cada una de las disciplinas -principio l6gico de todo conocimiento cientifico- y hace 79 CENTRO HOSPITALARIO 80 Arq. Joaquin Sanchez Hidalgo EN CULIACAN, SINALOA 81 UNIDAD DEPORTIVA ADOLFO LOPEZ MA TEOS GUADALAJARA~ JALISCO Arq. Alejandro Zohn coherente nuestro conocimiento; impide extrapolaciones de teorias a campos que no Ies incumben, y pone coto a! esteti· cismo, a! afan por extender el valor este· tico a fenomenos que lo rechazan. Las ciencias tienen diversas amplitu· des, Io que no desdice ni de su significa· cion ni de Ia objetividad de Ia explica· 83 L y 84 cion. Simplemente son diferentes tipos de conocimientos con objetivos distintos y medios igualmente diferentes; no puede concluirse de aqui que porque una cien· cia analiza las ca tegor ias de un fcn6meno, como lo hace Ia filosofia. esta sea mas importante que otras cuyo campo parece a primera vista mas restringido. Pueden , como sucede, dedicarse a! mismo fen6- meno, como lo es el arte, y sin embar:zo detenerse en realdades distintas de el: realidades igualmente importantes y que en su conjunto integran a! fen6meno. Una cosa es el arte cuando Ia pregunta lo i nserta de lie no en su significaci6n, dentro del cumulo de actividades reali- zaclas por Ia Human idad en su desarro- llo, a ella responde con plenitud Ia fi'osofia especifican do sus ca tegorias par- t;culares; o tra d istinta es Ia realidad a que se dirige Ia teoria de Ia arquitectura, pa~a Ia que tiene sentido preguntar por el ser y el va ler de Ia arquitectura, pero ub 'cacla en un m ol'1en to historico cleter- minad o; Ia est ~ tica recobra su autonomia cua n do ana 'iza otro ingred iente del arte, 85 como Io es Ia belleza, o las bellezas his- toricas, y que obviamente no ~e restrin- gen a las manifiestas en el artc. A partir de estas consideraciones, Ia arquitectura pudo ser explicada como cuadruple concurrencia axiologica, en la que cada valor mantien; su independe~ cia respecto a los demas, pero determl- nan con su objetivacion conjunta el sur- gimiento de un valor de segundo orden, el arq uitectonico o artistico. El valor social, uno de los que inte- gran Ia calidad arquitectonica de una obra edificada pronto ha tornado rele· vante importancia. Ello se debe a Ia tonica general de nuestro momento a que me referi con an~;Iacion, y que nos exige, ante Ia encruClpda formahsta en que se encuentra Ia arquitectura . y Ia necesidad imperiosa que de ella t1enen nuestros grandes grupos de poblacion, hacer un examen de conciencia y deter- minar el rumbo que cabe conferirle, para que al marchar a! unisono con los idea- les a que se tiende, refrendar ante Ia sociedad su derecho a Ia existencia. Cuan- do Villagran planteo de modos sistema- ticos, que Ia autentica obra de arquitec- tura exigia ineludiblemente expresar a su tiempo y coadyuvar a formarlo, supi- mos Io que ignorabamos; Ia arquitectura no solamente no puede salirse de su mo- mento, sino que tiene que hacer concien. cia de el, de los lineamientos generales a que tiende, de las necesidades que tiene que resolver y de los medios de que puede disponer. Expresar a su cultura, es un paso casi obligado; y digo que casi obligado, porque no obstante que a todo hecho podemos encontrarle sus progeni- tores materiales, no todos los reflejan con Ia misma Iimpidez. Pero ademas de ello, Ia arquitectura, en base a Ia solucion de espacios que proporcione, tiene que ser factor que impulse el progreso, Ia eleva- cion del nivel de vida a Ia sociedad. Ya he mostrado en otras partes, que este incluir el valor social dentro de los 86 constitutivos de Ia obra de Ia arquitec- tura impide los anacronismos de to~a indole, los eclecticismos, los academls- mos. Pero tambien obliga a atender las reales necesidades de Ia sociedad y hace de este cometido, el contenido moral del profesional de ella. Fuera del ~ontexto estricto de Ia teoria de Ia arqmtectura, Villagran ha insistido una y otra vez en Ia tmica arquitectura posible de tener sentido historico: de Ia que a! dirigirse a solucionar lm problemas de nuestra poblacion objetiva el nuevo humanismo que en toda Ia cultura actual se deja sentir herculeo. AI cobrar forma en el laconismo de un lema, el de Ia arquitectura social, esta tesis teorica y el ideal de un momento han sido tornados como estandarte por las nuevas generaciones, que a! enrietrar con el y por el, prefiguran con claridad el contenido humanista de Ia nueva ar- quitectura. Emblema que en boca de unos se torna slogan demagogico; que sirve de bisuteria que prenden en Ia solapa los que se sienten a si mismos como progresistas y que para Ia clase que lo demanda es contenido moral que im- pulsa todas sus acciones, Ia arquitectura social es el nuevo estilo que ha ingre- sado en nuestra historia. No se caracteriza como los anteriores por aportes en Ia tecnica o en Ia forma; probablemente emplee esas mismas tecni- cas y formas, no podemos decir nada a! respecto, pero lo que si cabe insistir, es que por encima de ello, Ia arquitectura social tiene su baluarte en ser instru- mento idoneo de nuestras necesidades. No puede tipificarse en unas cuantas obras, porque Ia arquitectura social nose distingue por Ia forma; sera cuando Ia veamos acudir a nuestra poblacion y ser disfrutada por todos, cuando ese estilo este concretizado en Ia practica, y cuan- do eso suceda, toda Ia arquitectura sera social, cuenta aparte del ropaje que vista. Mexico, D. F., junio de 1966. DIRECTORIO ARQ. AUGUSTO H. ALVAREZ Naci6 en Ia ciudad de Merida , Yucatan, el 24 de diciembre de 1914. Estudi6 en la Escuela Nacional de Arquitectura de Ia Universidad Nacional Aut6noma de Me- xico. Obtuvo el titulo de Arquitecto el 19 de agosto de 1939. Es Director de Ia Escuela de Arquitectura de Ia Universidad Iberoamericana. Es Profesor de Composici6n Arquitect6nica en Ia Univcrsidad Nacional Aut6noma de Mexico , J efe de uno de los Talleres de Ia Escuela de Arquitectura. (La E. N. de Arquitectura se ha dividido en II talleres, inclu yendo cada uno de ellos Ia totalidad de las materias impartidas en Ia carrera. El jefe de taller, congrega junto a los dem<is profesores las tendencias en ]a ense- fianza de Ia arquitectura, de acuerdo con su criterio estCtico personal, pero basados en cl plan general de ensd\anza de Ia Escuela). Ha realizado numcrosas obras en el ejercicio profesional, que destacan por su tendencia al perfeccionamiento en el disefio racional de los diversos elementos constructivos de sus obras, obtenido por un estudio minucioso de las fun- ciones y su resultante en volumen, que ha lie- gada a ser distintivo de su estilo arquitect6nico personal, basado en los postulados del funcio- nalismo, los cuales ha aprovechado. Entre sus Ultimas obras s6lo mencionaremos, el proyecto inicial realizado de Ia Torre Latina- americana. Es el edificio mcis alto de Mexico. (182 mts.) 1957. Edificio de Apartamientos en Ia Glorieta Boli- var, Mexico, D. F. (con Juan Sardo Madalena). 1949. Edificio de Oficinas, en Mexico, D. F. (en las calles de Salamanca, Oaxaca y Colima), colabo- rador: Arq. Jose Aspe. 1960. Edificio de apartamientos y comercios. En Cu- liacan, Sinaloa. 1961. Proyectopara un banco y edificio de oficinas en las calles de Varsovia y Paseo de Ia Reforma. 1961, Proyecto de Ia Universidad lberoamericana, junto con el Arq. Enrique Carra!, en Ia Col. Campestre-Churubusco, Mexico, D. F. 1961. Proyecto para el Anexo a Ia Camara Nacional de Comercio en Paseo de Ia Reforma y Donato Guerra, con el Arq. Enrique Carra!, Mexico, D. F. 1960. Edificio d e Oficinas, en Paseo de Ia Reforma. ARQ. JOAQUIN ALVAREZ ORDONEZ VOCAL EJECUTIVO DE LA COMISION CONSTRUCTORA E INGENIERIA SANITARIA DE LA S.S.A. Presidente de Ia Soc. de Alumnos de Ia Escuela Nacional de Arquitectura U.N.A.M. (1952- 1953). Presidente del 1er. Congreso Internaciona l de Estudiantes d e Arquitectura (1953) . Presidente de Ia Federaci6n Estudiantil Uni- versitaria U.N.A,M. (1952- 1953) . Menci6n honorifica examen profesional (1955). Autor de l estudio ''Pianificaci6n de los Servicios Arquitect6nicos del Autotransporte Nacional ". (1955). Maestro de Ia Escucla Nacional de Arquitectura (1952- 1965). Jefe de Planificaci6n del Departamento de Tr;in- sito Federal S.C.O.P. (1953-1954). Miembro del Consejo General de Planificaci6n de Ia S.C.O.P. (1954-1955). Miembro de la Comisi6n Tecnica Consultiva de Vias Generales de Comunicaci6n (1955). Miem bro de Ia Mesa Directiva del Colegio Na - cional de Arquitectos (1959-1960, 1963-1964). Miembro de Ia Mesa Directiva de Ia Sociedad de Arquitectos Mexicanos (1959-1960). Consejero del Instituto d e Estudios Politicos, Econ6micos y Sod ales del I' .R.I. (1963). Prcsidcnte de Ia Comisi6n Nacional de Estudios sabre Ia Vivienda Popular, P .R.!. (1963). Presidente del Comite Ejecutivo de Arquitectos Revolucionarios de Mexico (1963-1964). Asesor Tecnico del C. Secretario de Comunica- ciones y Obras Publicas (1953-1955). Asesor Tecnico del Instituto Nacional de Ia .Ju- ventud Mexicana (1959-1962). Estudio Integral de Ia Arquitectura Hotelera Mundial (1960). Asesor Tecnico del Gobierno d el Estado de Mi- choadn (1963). Director de Planeaci6n y Obras Urbanas del Go- bierno del Estado de Campechc (1962-1964). Delegado de Mexico a! VI Congreso Mundial de Arquitectos celebrado en Londres (1961). Comisionado de Ia Secretaria del Patrimonio Nacional para efectuar estudios de Planeaci6n y de Urbanismo en Europa y Asia (1961). OBRAS PROFESIONALES Primer Premia Edificio del Colegio Nacional de Economistas. Proyecto de las Casas de Ia Juventud. Plan de Obras de Habitaci6n Popular del B.N.H.U,O.P.S.A. 87 Plano Regulador de la Ciudad de Campeche, Camp. Plano Regulador de Ia Ciudad de Tuxpan, Ver. Plano Regulador de Boca del Rio, Ver. Plano Regu lador de la Ciudad de Morelia, Mich. (Mercado Revoluci6n, Mercado Indepen· dencia). Plan de Obras de la Ciudad de Campeche, Camp. (Mercado Pedro Sainz de Baranda, Pala- cio de Gobierno, Camara de Diputados, Monu- mento a los HCroes, Monumento a Hfctor PC- rez Martinez, Monumento al Lie. Adolfo L6pez Mateos, Monumentos a la Nacionalizad6n de Ia Industria Electrica, Monumento a Ia Patria, Monumento Resurgimiento de Campeche, Plaza de la Republica, Plaza de las Americas, etc.). Casas habitaci6n. Restaurantes. Talleres. Bodegas. Fabricas. Campos deportivos. Edificios habitaci6n. ARQ. PASCUAL BROID Cund Ia carrera profes ional en Ia escuela de Arquitectura en Ia Universidad Nacional Au- tdnoma de Mexico donde present6 examen pro- fesional en 1954 gradudndose con mencidn honorifica por Tesis y Estudios. RELACI ON DE TRABA]OS DESARROLLADOS DE 1959 A LA FECHA 1. Tenninal de Autobuses en Matamoros, Tamps. (2 niveles). 2. Edificio de Apartamentos Amueblados en Col. ]udrez, Mexico, D. F. (7 niveles). 3. Peritaje para el Hospital Maternidad del IMSS en Gabriel Mancera, Mexico, D. F. 4. Palacio Municipal en ]alpa, Zac. (2 niveles). 5. Peritaje en casa de la Asegurada del IMSS en Calzada de Guadalupe, Mexico, D . F. 6. Casa Habitaci6n Sr. Villamichel en Mexico, D. F. (2 niveles) (Proyecto). 7. Centro Administrativo para los Ferrocarriles Nacionales de Mexico, consiste en Estaciona- miento para 350 automoviles, Edificio de Ofici- nas (16 niveles) Auditorio, Plaza, ]ardines, etc_ 8. Clinica del IMSS en Matamoros, Tamps. (Proyecto ). 9. Clinica del JMSS en Reynosa, Tamps. (Pro· yecto). IO. Clinica del IMSS en Nuevo Laredo, Tamps. (Proyecto ). II. Casa Habitacion tipo en Pantaco, D . F. para FF.CC.NN. de Mexico. 12. Casa Habitaci6n en Cuautitldn, Edo. de Mexico. 88 13. Estudio de Estacion de Autobuses Fordneos para el D. F. 14. Casa Habitacidn para Ia Srit.a. Antonieta L i - zardi, Col. Florida, 15. Est~cidn Terminal en Nogales~ Sonora. Fe- rrocarrrles del Pacifico, 16, Laboratorios de Pruebas y Anrilisis de los Ferrocarriles 1Vacionales de M t!xico . 17. Monumento a la Indepen dencia en Dolores, Hidalgo, Gto. (Concurso) 2o. premio. 18. Estaci6n de Ferrocarril en !rapuato, Gto. 19. Archivos Generales de los Ferrocarriles Na- cionales de Mexico. 20. Conjunto de Casas Obreras en Dolores, Hi- dalgo, Gto. 21. Residencia del Sr. Rober to Rivera, Pedre- gal de San Angel, Mexico, D. F. 22. Estacidn de Pasajeros, Exfness y Carga en Fo1'tin, Ver, 23. A lmacenes de Concentraci6n de material en Tlalnepantla, Edo. de Mexico. 24 . Casa tipo para obreros de Ia Bacardi. 25. Conjunto de 50 casas para obreros en San Miguel Allende, Gto. 26. Arreglo d e oficinas de Alitalia e n Mt!xico, D. F. 27. Escaparate de los Ferrocarriles Nacionales de 1\1ixico en la Feria del Libra. 28. Edificios de Departammtos en Socrates 405, Mexico, D. F. (II niveles). 29. Arreglos de oficinas de Alitalia en Los An- geles, California, EE. UU. 30. Residencia del Ing. M. j\!fizrahi, en Teca- machalco, Edo. de Mt!xico . 31. Proyectos para el Concuno de Ia Peugeot en Buenos Aires, Argentina. 32. Conjunto de Habitaciones en Haifa , lnael . 33. Estacion de Pasa jeros Express y Carga en Celaya, Gto. 34. Edificio de Oficinas en lnsurgent :s 1844 (10 niveles). 35. Oficinas en el D. F. para Ia Cia . ,Lufthansa, 1Ht!x ico, D. F. 36, H ospital de 60 camas en Chihuahua, Chih. 37. Anteproyectos de casa habitacion para obre- ros del D. F. 38. £studios de zona urbana en San CristObal, Ver. 39. Casa Habitaci6n Sra. Martln , en Mt!xico , D. F. 40. Casa Habitacion en el Club de Golf B ella- vista . 41. Hospital en Durango, Dgo. (en construe- cion). 42. Estaci6n para jJasajeros y SujJerintendencia de Ferrocarriles en Mazatldn, Sin. (en construe- cion). 43. Casa HabitacirJn en Fuente de los Angeles 9, Tecamachalco, Edo . de Mexico . 44. Centro Cultural en las calles de Acapulco y Guadalajara, Mexico, D. F. Templo o{icinas y Sa- lon de fiestas, estacionamiento, etc. (10,000 M'). 45. Residencia en Av. de los Basques} Tecama - chalco, Edo. de Mt!xico. 46. Casa Habitacion Dr. Mario Lasky . 47. Casa Habitacidn en Fuente de Hermes Te- catnachalco, Edo. de Mt!xico. 48. Residencia del Ing. ZamoraPio en Coyoacdn. 49. Casa Habitaci6n en Fuente de Hermes 68. 50. Casa Habitacidn en Fuente de Venus No. 11. 51. Residencia en Fuente de Parian No. 10. 52. Casa Habitaci6n en Fuente de Cervantes 22. 53. Casa Habitacidn en Fuente de Ceroantes 36. 54. Casa Habitacion en Fuente de San Su lpi. cio 14. 55. Casa Habitacion m Fuente de San Sulpi. cio 12. 56. Casa Habitacidn en Fuente de Cantari tos No.3. 57. Casa Habitacidn en Fuente de La Bastilla 42. 58. Fdbrica de mui"iecas en Alee Blanco No. 11 (3.000 M•). 59. Fdbrica de Camas lxtapalapa (9.000 M'). 60. Fdbrica de Muebles de meta l en Calzada de l Moral (5.000 M•). 61. Escuela Secundaria y Preparatoria en Lago Bangeolo. 62. 3 Residencias en el Pedregal de San Angel. 6J. 3 Residencias en Lonws de Tecamachalco 64. Conjunto para £studio de Artistas en Sa~ Angel. 65. Fracionamiento para 1,000 lotes de Habi· taci6n de intert!s Social en el Edo. de Mt!xico con el disefw de dichas habitaciones. Anterior a 1959 o sea de 1952 a 1958 proyectt! y construi aproximadamenle 30 obt·as de diversos gt!neros como Fdbricas,Edificios de Departamentos, Ca- sas Habitacidn, en caso de ser necesario puedo presentar La relaci6n completa de dichas obras. TRABA ] OS D1VE.RSOS Y PUBL/CACIONES 4 atios Presidente de La Comisidn de Asunlos Gremiales de Ia Sociedad de A rquitectos M exi- canos y del Colegio Nacional de Arquitectos de Mt!xico. Representante del C.N.A)H. durante 3 mios an- te cl D.D.F. en Ia Comisi6n de Admisi6n de Peritos Responsables. Representantc de Ia Escuela Nacional de A r- q_uilectum ante la Direcci6n General de Profe- swnes. Ponencia del C.N.A.M. en el aiio de 1961 para el Congreso Nacional de la I ndustria de La Cons- truccion (Medal/a de Oro). Ponencia del C.N.A.M. en el aiio 1962 para el Congreso Nacional de Ia Industria de Ia Cons- trucci6n ( M enci6n Especial). Forme parte del grupo Editor y Director de Ia Revista de A rquitectura Contempordnea "CA- LLI'" durante 4 alios. Asesor Arquitecto de lnversiones Turisticas de Israel para atraer Turismo Latinoamericano (para esta etnpresa proyecte un centro turistico y deportivo en TEL·A V1V·1SRAEL sobre una superficie de 120.000 M'). Mis trabajos han sido publicados entre otros por la revista Arquitectura-Mixico. Arquitectos de Mt!xico. Arquitectura Espanola. Architecture D'aujoardhui-Francia. The Time -lnglaterra (periodico). Excelsior -Mexico (periodico). No· vedades -Mexico (periodico). Forum U.S.A. Calli Mexico. Atentamente. Arq. Pascual Braid. Ced. Prof. 47037, Perito 1er. Grupo. ARQ. JORGE CAMPUZANO FERNANDEZ Naci6 en Ia Ciudad de ~1t!xico el 21 de noviem. bre de 1931. Hizo sus estudios profesionales en la £5cuela Nacional de Arquitectura de la Universidad Na- cional Aut6noma de MCxico durante los ai'ios de 1950 a 1954 habiendo recibido el titulo de Arquitecto en 1957. Maestro de Composici6n en la Escuela Nacional de Arquitectura a partir de 1957 a Ia fecha. PrestO sus servicios profesionales en La Direc- ci6n de Planificaci6n de Ia Secretaria de Com.u· nicacion -:?s y Obras P1iblicas en el aiio de 1956. Nombrado ]efe de Zona de l Comitt! Administra_ dor del Programa Federa l de Construcci6n de Escuelas en el Estado de Guanajuato en el aHa de 1958. llevando a cabo la construccion de 20 escuelas en coordirwci6n con el Gobierno del Estado. Nombrad'J Subdirector de Construcci6n del mis· mo organismo en el mio de 1959. puesto que ha desempeiiado hasta Ia fecha. Proyecto y direcci6n de escuelas primarias en la ciudad de MCxico. Ciudad Acuiia. Piedras Ne- gras. Corralcjo. Villa de Ayala. etc .. Jardin de nitios y Mercado en Villa de Ayala. Mor .. Es- cuela de Enserianzrt. Agropecuaria en D~Jiores Hidalgo. Normal Rural en Saucillo. Chih. y Nonn.~l Rural en Apatzingdn, Mich. Proyecto arquitectdnico de Ia Escuela Rural Prefabricada (aulacasa rural) ganadora del Grau Premia en la Xll Trienal de Mildn, y de la cual se han construid0 12.000 aulas. de 1959 a la fecha. en Ia Republica . Miembro del Seminario de Ia Jndustrialiwci6n de la Arquitectura para el estudio de Ia prefa· bricaci6n de la Casa-habitaci6n. Proyectos de diversos tipos de garitas y estacio· nes migratorias prefabricadas para la Secretaria de Gobernacidn. Miembro de Ia Del -:gaci6n ~1exicana al Sexto Congreso de La UniOn lnternacional de Arqui- tect~s y a fa ReuniOn previa de Ia Cmnisi6n de Construcciones Escolares de Ia UTA ambas cele- bradas en Londres en 1961. Colaboraci6n con el Arq. Pedro Ramirez Vdz- quez en Ia elaboracion de los proyectos del Mu· seo Nacional de Antropologia y del Museo de Arte Moderno, ambos en Ia Ciudad de Mt!xico. 89 Miem.bro d el Colegio Nacional de Arquileclos d e Mr!xico y de Ia Sociedad de Arquiteclos Me- xicanos, ARQ. FELIX CANDELA 1, Iglesia de La Medalla Milagrosa, en Mexico, D. F. (1953·54). La primera obra que proyect6 completamen- te FClix Candela a base de cascarones con superficies de doble curoatura·paraboloides hiperb6licos que tiene dos sistemas de gene- ratrices rectas, que permiten el uso de cim- bra comUn y corriente, con lo que obtiene del concreto armada una plasticidad rnuy adecuada para cubrir grandes claros; hace trabajar al concreto mds racionalmente -a cmnpresi6n-, y une el espacio interior con su resultante volumCtrico al exterior. IGLESIAS Iglesia de Ia Virgen Milagrosa. Col. Narvarte. Mexico, D. F., 1953. Arq. Felix Candela. Capilla de los Misioneros del Espiritu Santo. Coyoacan, Mexico, D. F., 1955. Arqs. Enrique de Ia Mora y Fernando L6pez Carmona. Iglesia de San Antonio de las Huertas. Tacu- ba, Mexico, D. F .. 1956, Arqs. Enrique de Ia Mora y Fernando L6pez Carmona. Capilla de San Vicente de Paul. Coyoacan, Me- xico, D. F., 1959. Arqs. Enrique de Ia Mora y Fernando L6pez Carmona. Iglesia de San Jose Obrero. Monterrey, N. L,, 1959. Arqs. Enrique de Ia Mora y Fernando L6pez Carmona. Capilla abierta en Lomas de Cuernavaca. Cuer- navaca, Mor., 1958. Arqs. Guillermo Rossell y Manuel Larrosa. Iglesia de Ntra. Sra. del Refugio. Edo. de Mex., 1960. Arqs. Antonio Garfias y Guillermo Rode. Sinagoga en Guatemala, 1959. Ing. Mauricio Castillo Contoux. Iglesia en Ia ciudad de Oklahoma. EE. UU., 1961. Arqs. Jones-Murray-Jones_ CLUBES Y RESTAURANTES Club Junio. 1952. Mexico, D. F. Arq. Fernando Fernandez. Club Espana. 1953. Mexico, D. F. Arq. Julio Gadsen. Cabaret La Jacaranda. Mexico, D. F., 1954. Arq. Max Borges, Restaurante en Xochimilco. 1957, Arq. Juan Sordo Madaleno. Restaurante en Xochimilco, 1957. Arq. Joaquin Alvarez Ord6fiez. Centro Gallego. 1953. Arq. Jose Caridad Mateo. 90 CUBIERTAS VARIAS Pabell6n de Rayos C6smicos. C. U. de Mexico. 1951. Arq. Jorge Gonzalez Reyna. Bolsa de Valores, Mexico, D. F., 1959. Arq. En- rique de Ia Mora y Fernando L6pez Carmona. Concha acustica en Ia Unidad de Habitaci6n Sta. Fe. I. M, S. S. Arq . Mario Pani. Entrada a un fraccionamiento en Tequesqui- tengo, Mor, 1957. Arqs. Guillermo Rossell y Manuel Larrosa. Plaza de los Abanicos, Lomas de Cuernavaca, Mor., 1958. Arqs. Guillermo Rossell y Manuel Larrosa. lnstituto Anglo Mexicano de Cultura. Cubier- ta del Auditorio. Mexico, D. F. 1961. Arq. Enrique de Ia Mora. MERCADOS Mercado en Coyoacan, D. F., 1955. Arqs. Pedro Ramirez Vazquez y Rafael Mijares. Mercado en Azcapotzalco, D. F. Arqs. Pedro Ramirez Vazquez y Rafael Mijares. Mercado Anahuac. Mexico, D. F., 1956. Arqs. Pedro Ramirez Vazquez y Rafael Mijares. Mercado en Jamaica, D. F., 1956. Oficina de Edificios y Monumentos, D. F. Mercado de I. Ia Cat6lica, Mexico, D. F., 1956. Oficina de Edificios y Monumentos. Mercado en Lomas de Cuernavaca, Mor., 1957. Arqs. Guillermo Rossell y Manuel Larrosa. Mercado en Puebla, Pue., 1958. Arq . Mario Bautista. Mercado en Los Mochis, Sinaloa, 1960. Arq. Juan Rivaud. Mercado en Veracruz, 1959. Direcci6n de Obras Publicas del Edo. de Veracruz. Mercado en Comitan, Chiapas, 1961. Arq, H. Iannini. EDIFICIOS INDUSTRIALES Aduana de Mexico, D. F., 1952. Arq. Carlos Recamier. Laboratorios CIBA de Mexico. Mexico, D. F., 1952. Arq. Alejandro Prieto. Textiles Rivetex. Cuernavaca, Mor,, 1953, Arq. F. Candela_ Destiladora Bacardi, La Galarza, Puebla, 1954. Arqs. Hector Mestre y Manuel de Ia Colina. Fabrica Herdez. S. Bartolo, Mex., 1955. Arq. F. Candela, Laboratorios LEDERLE. Mexico, D. F., 1955. Arq. Alejandro Prieto. Fabrica Cafes de Mexico. Mexico, 1955. Arq. Guillermo Rivadeneyra. Nueva Planta Bacardi. Cuautitlan , Mexico, 1959. Arqs, Sacmag, Bodega para Nacional Distribuidora. Mexico, D. F, 1960. Arq. Rodrigo Zorrilla, y numerosas bodegas y fabricas hasta un total de 240, obras de cascar6n. Biograffa Naci6 en Madrid, Espa•ia, el 27 de enero de 1910, Estudi6 en Ia Escuela Superior de Arquitectura de Madrid, graduandose en 1935. Se radica en Mexico en 1939. Adopta Ia nacionalidad mexicana en 1941. Profesor de Ia Escuela de Arquitectura de Ja Universidad Nacional Aut6noma de Mexico. Es presidente de Ia empresa Cubiertas ALA, especializada en el disefio y construcci6n de es- tructuraslaminares o cascarones de concreto. Se da lista aparte de las obras realizadas. Ha publicado numerosos articulos sobre arqui- tectura e ingenieria, en las revistas nacionales y extranjeras, asi como en secciones especializa- das de los principales diarios de Mexico. Ha dictado cursos, como profesor visitante en las Universidades de Harvard, Yale, Minnesota y en el Instituto Tecno16gico de Massachusetts, y conferencias en Inglaterra. (1959). Dict6 Ia catedra Charles Norton of Poetry en Ia Universidad d e Harvard para el curso 1961- 1962. Recibe el premio Auguste Perret de Ia Uni6n Internacional de Arquitectos en el Congreso In- ternacional de julio de 1961. Se le otorga Ia medalla de oro de The Institu- tion of Structural Engineers de Inglaterra. 1961. (Este premio se ha otorgado s6lo cuatro veces: J. F. Baker, 1952. E. Freyssinet, 1957; Hardy Cross, 1958). ARQ. ENRIQUE CARRAL ICAZA Recibido en Ia Escuela Nacional de Arquitectu- ra. Maestro de composici6n de Ia misma escuela de los anos 1947 a 1950. Jefe de taller en Ia Ciudad Universitaria de 1952 a 1956. Profesor de composici6n en Ia Universidad Ibe- ro-Ameri cana de 1956 a 1958. Director de Ia escuela de Arquitectura de Ia Universidad !hero-Americana de 1959 a 1961_ Trabaj6 en el taller del arquitecto Villagran Garcia en el desarrollo del Hospi ta l de avanza- dos Huipulco y posteriormente en el taller del arquitecto Del Moral colaborando en el proyecto del Hospital de Infecciosos. Obra desde 1940 a 1950: casas habitaci6n y pe- queilos edificios de apartamientos. Los proyectos y obras m<is importantes son a partir de esa fecha los siguientes. 1950 Secretaria de Comunicaciones y Transpor- tes. Aeropuerto Internacional de Ia ciudad d e Mexico. En colaboraci6n con los Arqs. Augusto H_ Alvarez y M. Martinez Paez. 1952 Arqs. Augusto H_ Alvarez y Enrique Ca- rra} Icaza. Talleres y oficinas en Ca mpos Eli- seos No. 432. 1953 Alberto Ricardo Pani. Plaza d e toros d e Caletilla, Acapulco, Gro. 1955 Inmobiliaria y U~banizadora, S. A. Escue- la P rimaria y Secundaria . Col. Moctezuma. 1955 Centros Urbanos, S. A. Conjunto Lomas, Av. Las Palmas. En colaboraci6n Arq. Augusto H . Alvarez_ 1956 Colegio Oxford_ Aulas: Kinder, Primaria, High School. Antiguo Camino a Acapulco. En colaboraci6n con el Arq. Augusto H . Alvarez_ 1957 Club de Industriales, A. C. Locales del Club. Manuel Ma. Contreras. En colaboraci6n con el Arq. Augusto H. Alvarez. 1958 Camara Nacional de Comercio. Edificio de Oficinas. P. de Ia Reforma. En colaboraci6n con el Arq_ Augusto H. Alvarez. 1958 General Electric, S. A. de C. V. Cia_ Const. d e Ed. Esp .. S. A. Oficinas, talleres y bodegas, Marina Nacional. 1959 Inmobiliaria y Urbanizadora, S. A. Edifi- cio d e Apartamentos en Torres Adalid. 1960 Casa de Ejercicios Francisco Javier. Cruz Manca. 1960 Inmobiliaria y Urbanizadora . S. A. Edifi- cio de oficinas. Tiber No. 68. 1960 F.I.C.S.A.C. Conjunto de edificios para Ia Universidad !hero-Americana. En colaboraci6n con el Arq. Augusto H . Alvarez. 1961 Bienes Nacionales. Iglesia de Ia Sagrada Familia, en Portales. 1962 Ingenieros Santacruz. Casa habitaci6n. Ta. ta-Vasco 77. 1963 Centro Urbano Manaca r. Edificio de ofici- nas, comercios y cine. lnsurgentes Sur y Valerio Trujano. 1965 Centro de Investigaci6n, Ensef\anza y Ex- tensi6n Agricola. Chapingo, Edo. de Mexico. En colaboraci6n com el Arq Augusto H. Alvarez como asociadas de Perkins & Will . ARQ. ALEJANDRO CASO Fecha de nacimiento: 12 de julio de 1926, en Ia ciudad de Mexico. Curs6 cstudios en Ja Escuela de Arquitectura en Ia Universidad Nacional Aut6noma de Me- xico, y en Ia de Artes PIAsticas. TRABAJOS PUBLICADOS: En 1953 Plano R egulador de Tijuana, Baja California. En 1955 Estudios para un Sistema Vocacional. Proyecto arquitect6nico y organizaci6n. En 1959 Estudio socio-econ6mico para e l plano regulador de Nuevo, Laredo, Tamps. En 1959 Ponencia a Ia R euni6n Nacional para d Estudio de las Ciudades Fronterizas. Pre- miada en 2o. Iugar en el tema " aspecto de normas y programas". En 1961 "Propasal for a Museum of Natural History for the National U niversity of Mexico" 91 curator, the American Museum of Natural His· tory, Volume IV, number 4. En 1961 Proposici6n de nuevo enfoque para resolver el problema de la vivienda rural en Mexico. OBRAS REALIZADAS: 1961 y 1962: Estudio y Proyecto para el Museo de Historia Natural de Ia U,N.A.M. "Urbe Excelsior; Mexico en Ia Cultura", Suple· menta de Novedades, "Calli", revista de arqui- tectura analitica contempor3.nea. 1966: "Arquitectura para las Zonas Indigenas" , revista ''Calli". En preparaci6n: "La Herencia Africana de Ia Arquitectura Moderna". Proyecto y construcci6n, por encargo de Ia Co- misi6n del Papaloapan , del poblado de reaco- modo denominado Nuevo Soyaltepec, Oax. J>royecto y Construcci6n de los Centros Coordi- nadores Indigenistas de: San Crist6bal las Ca- sas, Chis.; Jamiltepec, Oax.; Peto, Yuc.; Gua- chochi, Chih. y Mexquitic, Jal. Nuevo Paso Nacional, Oax.; Tlaxiaco, Oax.; Huautla de Jimenez, Oax. ; Tlapa, Gro. (1952-1965). Asi como las obras realizadas en las areas de acci6n de dichos centros como, escuelas, alber- gues, escolares y clinicas, habitaciones, centros de acci6n social, costureros, molinos, unidades de agua, etc. Proyecto y promoci6n de vivienda rural para Ia construcci6n del nuevo poblado de Chamula, Chis. Proyecto y construcci6n de 4 casas habitaci6n en Ia ciudad de Mexico y en Acapulco, Gro. Proyecto y construcci6n del edificio para las Oficinas Generales del Instituto · Nacional Indi- genista (1963) en Ia ciudad de Mexico. Proyecto para 2 gasolineras de Pemex en: Av. Insurgentes Sur. frente a! Monumento de Alvaro Obreg6n; Juanacath\n y Tamaulipas, Me_ xico, D. F. Actualmente en construcci6n: Centro Coordinador Indigenista de Ia Regi6n Tarasca, Cheran, Mich. 5 casas habitaci6n en Ia ciudad de Mexico. ARQ. ENRIQUE DE LA MORA Y PALOMAR Naddo en Guadalajara, Jalisco, el 16 de junio de 1907. £studios profesionales en Ia Escuela de Arquitec. tura de Ia Universidad Nacional Aut6noma de Mexico, de 1927 a 1931 , obteniendo el titulo de arquitecto en 1933. Arquitecto de Ia Direcci6n de Edificios de Ia Secretaria de Comunicaciones y Obras Pllblicas, de 1931 a 1934. Arquitecto de Ia Oficina de Construcd6n de Edificios de Ia Secretaria de Salubridad y Asis· tencia, de 1934 a 1935. 92 Profesor de composici6n Arquitect6nica en el lnstituto l'olitecnico Nacional, de 1934 a 1935. Profesor de composici6n Arquitect6nica en Ia Escuela de Arquitectos de Ia Universidad Na- cional Aut6noma de Mexico, de 1943 a 1945. Premio Nacional de Arquitectura de la Secreta- ria de Educaci6n Publica, en 1946. Condecoraci6n "Jose Clemente Orozco", del go- bierno del Estado de Jalisco, 1957. Profesor de composici6n Arquitect6nica en Ia Escuela de Arquitectura de Ia Universidad Ibe- roamericana, de 1956 a 1959. Miembro de numero del Colegio Nacional de Arquitectos de Mexico. Miembro fundador de Ia Asociaci6n de Egresa- dos de Ia Escuela Nacional de Arquitectura. PROYECTOS Y OBRAS REALIZADOS Entfe un gran nUmero de encargos realizados en el ejercicio de Ia practica profesional, desta- can Jon siguientes: GUARDERIAS: Hogar Infantil No. 9 (en colaboraci6n con el Arq. Jose Villagran), en 1934. Centro Materna Infantil "Maximino Avila Ca- macho", en Tacubaya, D. F., en 1946. Centro Materno Infantil "Beatriz Velasco de Aleman", en Mexico, D. F., en 1952. ESCUELAS Y CENTROS EDUCATIVOS: Instituto Tecnol6gico de Monterrey, N. L., 1944. Facultad de Filosofia y Letras en Ia Ciudad Uni- versitaria de Mexico (en colaboraci6n con los Arqs. Enrique Landa y Manuel de Ia Colina), 1953. Universidad Labastida en Monterrey, N. L., 1957. Facultad de Medicina en el Centro Medico de Guadalajara, Jal., 1963. Internado Granada en Le6n, Gto. (en construc- ci6n). HOSPIT ALES: Hospital General Escuela en Guadalajara, Jal. (en construcci6n).
Compartir