Logo Studenta

Sistemas Ambientales II Tarea 5 - MARIO ALAN DIAZ LOPEZ

¡Estudia con miles de materiales!

Vista previa del material en texto

Plan Urbano de uso de suelos.
El uso del suelo y el planeamiento urbano implican la reglamentación del uso y el desarrollo de bienes raíces. La forma más común de regulación del uso del suelo es el planeamiento urbano. Las municipalidades implementan restricciones y reglamentos de planeamiento urbano para controlar y dirigir el desarrollo de propiedades dentro de sus fronteras.
¿Qué son los reglamentos de planeamiento urbano?
La función y el objetivo básico del planeamiento urbano es dividir un municipio en distritos (o zonas) residenciales, comerciales e industriales que, en general, están separados el uno del otro y el uso de la propiedad dentro de cada distrito es razonablemente uniforme. Dentro de estos tres tipos principales de distritos, suele haber restricciones adicionales que pueden ser bastante detalladas, lo que incluye requisitos específicos en cuanto al tipo de construcciones permitidas, la ubicación de las líneas de servicios públicos, restricciones sobre construcciones accesorias, espacios entre las construcciones y la calle u otros límites, el tamaño y la altura de las construcciones, la cantidad de ambientes, el espacio o el área de los pisos y los pies cúbicos, y el costo mínimo de las construcciones.
Regulación del desarrollo
La regulación del uso del suelo no está limitada a controlar el uso y las construcciones existentes; en gran medida, está diseñada para servir de guía para el futuro desarrollo. En general, las municipalidades siguen un proceso de planeamiento que, en última instancia, deriva en un plan maestro o integral y, en algunos estados, en la creación de un mapa oficial para un municipio.
Límites para la regulación del planeamiento urbano
Debido a que los reglamentos sobre el uso del suelo y el planeamiento urbano limitan los derechos de los propietarios de usar su propiedad de la manera en la que lo harían (o desearían hacerlo), a veces se presentan controversias. Asimismo, es difícil determinar con especificidad el alcance y los límites de la capacidad de los gobiernos de regular el uso del suelo. Los tribunales han sostenido que la regulación del planeamiento urbano es permisible siempre que sea razonable y no arbitraria; si guarda una relación razonable y considerable con la salud pública, la seguridad, la comodidad, la ética y el bienestar general; y si los medios empleados son razonablemente necesarios para cumplir con su propósito. Dada la naturaleza subjetiva de estos factores, es evidente que hay mucho margen para que se generen disputas y, a veces, acciones legales
Díaz López Mario Alan. INME.

Continuar navegando