Eucalipto - ALINE CARRILLO

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1.4 MARCO TEORICO
A muchos consumidores les entusiasma la idea de productos “naturales” y no siempre es fácil conseguir un producto que además de funcional, pueda denominarse como natural, en nuestro caso, un repelente de alto rendimiento contra plagas, que además utilice productos naturales, nosotros nos enfocamos en el eucalipto, puesto que las pruebas de repelente CR (consumer reports, Enero 2023), nos indican que esta es una sustancia activa que al mezclarse con un ingrediente activo sintetizado, producen sensaciones que repelen de forma eficaz a cualquier plaga de insectos dañina para nuestro organismo.
Repelente de eucalipto
¿Qué es?
El eucalipto es un género de árbol de la familia de las mitáceas (aromáticos), el cual tiene amplias aplicaciones en aceites y el mundo de la medicina, justo por eso es que es la mejor opción para lograr que sus efectos repelan a los insectos al aplicarlo directamente en nuestra piel, puesto que su fuerte olor genera que los mosquitos se sientan repelidos del medio emisor.
¿Funciona?
Una marca llamada OLE, enfocada en la realización de aceites realizó una prueba en el 2022, exactamente en octubre, enfocándose en la evaluación de su aceite hacia los insectos y su atracción o repulsión y lograron descubrir que el 90% de los mosquitos (y otros insectos) se ven repelidos por este aceite, entonces para nosotros, que queremos lograr un repelente a base de eucalipto, podemos concluir que definitivamente es una sustancia óptima para este fin.
¿Es seguro?
La EPA (agencia de protección ambiental para con la salud humana), clasifica el eucalipto como plaguicida biológico desde el 2007, lo que significa que está sujeto a más pruebas de seguridad que los productos botánicos, pero a menos que los productos sintéticos.
Los reguladores federales están de acuerdo con que el repelente de eucalipto es relativamente seguro.
1.4.1 REPELENTE Y SUS USOS
La verdad sobre los repelentes de insectos
Los repelentes de insectos han sido definidos como compuestos químicos que producen en el insecto movimientos orientados que lo alejan de la fuente emisora. Otros autores lo definen como compuestos químicos o una mezcla de compuestos que, en su fase vapor, desencadenan en los insectos un comportamiento que los hace moverse en sentido contrario a la fuente emisora.
La historia: de lo natural a lo sintético
El uso de los repelentes de insectos no está restringido a la especie humana: se ha observado que otros primates suelen ungirse el pelaje frotándose hojas de distintas plantas o algunas especies de milpiés. Los milpiés de la especie Orthoporus contienen benzoquinomas, unas sustancias que producen un significativo efecto repelente sobre varias especies de mosquitos.
Las poblaciones humanas han utilizado repelentes desde tiempos remotos, por ejemplo el humo proveniente de la quema de plantas para protegerse de los insectos. Hay reportes históricos que documentan la existencia de esta práctica en las antiguas civilizaciones de Egipto, Grecia, Roma y también en poblaciones indígenas americanas.
Existen muchos compuestos químicos que pueden resultar repelentes. Gran parte de ellos son de origen natural, como es el caso de las sustancias contenidas en los humus ancestrales y en los milpiés. Los aceites esenciales de plantas suelen representar propiedades repelentes. Estos compuestos han surgido como una respuesta evolutiva al ataque de insectos herbívoros. De esta manera, las plantas que contienen aceites con propiedades repelentes eran menos atacadas por los insectos y entonces, más exitosas en sus ecosistemas. No solo las plantas productoras de aceites repelentes se han beneficiado, sino que aplicando su ingenio, los primates han aprovechado también las propiedades de estos repelentes para protegerse del ataque de estos insectos.
Efectos adversos
En las últimas décadas se ha prestado especial atención el efecto de la exposición térmica de los humanos en los repelentes. Algunos resultados muestran que este producto puede causar ciertos efectos tóxicos sobre el sistema nervioso, principalmente en niños. Para tranquilidad de las mamás, estos efectos están relacionados solo con la exposición a dosis muy altas y con su mal uso. 
Eucalipto como insecticida
El aceite esencial de eucalipto, presenta propiedades antisépticas, bactericidas e insecticidas. Esto último se debe a la presencia de 1.8-cineol, compuesto característico del género Eucaliptos, que ha sido considerado como un fumigante prometedor. Además, no es tóxico para mamíferos, es de bajo costo, constituye un recurso renovable, posee un manejo que produce abundante follaje como residuo y es una especie que no está en peligro de conservación.
Eucalipto en la industria
El eucalipto crece rápido y su capacidad de regeneración lo convierte en un tipo de árbol muy valioso para la industria maderera. Dos de los más importantes eucaliptos maderables son el E. delegatensis y el E. regnans. Este último se cultiva masivamente en Chile y Nueva Zelanda y en menor cantidad en Zimbabue y Sudáfrica. Su madera es fuerte y durable y con ella se hacen muebles pequeños, suelos y construcciones grandes. En tanto, también se obtiene pulpa de celulosa, con la que se fabrica papel.
Otros tipos de eucaliptos como el E. globulus se cultiva primordialmente para obtener su aceite, el cual se incluye como ingrediente en ungüentos y medicamentos expectorantes y como aromatizante en muchos productos de limpieza y farmacéuticos. La hierba de esta especie es estimulante y puede reducir fiebre, pero en exceso causa dolor de cabeza, convulsiones, delirios e incluso la muerte.
Los aborígenes usaban la madera para construir canoas y fabricar instrumentos musicales, platos y escudos. Además, extraían la savia de algunas especies, como el E. gunnii, para fermentarla y elaborar con ella un jarabe dulce. Del néctar de las flores se produce una miel de sabor particular que en Australia y otros pocos lugares se agrega a panes, aderezos y salsas.
Un uso menos famoso de algunos eucaliptos es que se plantan en ciertos sitios como barreras contra el viento. Otras personas los siembran como árboles ornamentales.