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Las 7 claves de un LRC de alto rendimiento Capítulo I. ¿Qué es un LRC de alto rendimiento? Capítulo ll. Domina tu carrera Capítulo III. Conoce el mercado Capítulo IV. Conoce de finanzas Capítulo V. Desarrolla el control emocional Capítulo VI. Desarrolla el liderazgo Capitulo VII. Desarrolla la disciplina Capitulo VII. Imprime pasión y energía <<Es sabio quien sabe dónde está un tesoro pero es más sabio quien trabaja y lo saca>> Francisco de Quevedo Capitulo I. ¿Qué es un LRC de alto rendimiento? Estimado lector al momento de leer este opúsculo seguramente tus motivadores han sido la preocupación por el crecimiento personal y laboral pues en el largo y duro transitar por la universidad o ya en tu empleo te has encontrado con las consignas <<Hay que dar un extra>> <<Te falta crecer>> <<Aún te falta conocer cosas>> o la expresión que cae a veces como sentencia <<Necesitas ser un profesional de alto rendimiento>> ante este hecho me atrevo a afirmar que en los siguientes capítulos conocerás una formula fácil en su definición pero que requiere mucho trabajo en su aplicación con la cual te convertirás en un LRC de alto rendimiento. Comenzaremos pues con la conceptualización de lo que es un profesional, un LRC y también lo que es alto rendimiento. De acuerdo a la definición de la Real Academia de la Lengua Española un profesional (ya que no es admitida la palabra profesionista) es aquella persona que ejerce su profesión con capacidad relevante; referente al significado de profesión de acuerdo a la misma fuente se refiere la actividad habitual de una persona, para la que se ha preparado, que, al ejercerla tiene derecho a recibir una remuneración o salario. Licenciatura en Relaciones Comerciales, es difícil negar que esta carrera con 50 años de antigüedad en el Instituto Politécnico Nacional genera controversia respecto a su nombre y tomando como referencia la página oficial de la ESCA Tepepan se encuentra la siguiente <<misión>>: Formar profesionales capaces de analizar, plantear, operar, controlar y dirigir todas las actividades del área comercial, con una visión integral de las tendencias de los mercados, logrando cumplir con los objetivos de las organizaciones con un amplio sentido social. De lo anterior podemos tomar como base la primer línea donde se califica al licenciado en relaciones comerciales como un profesional de la comercialización de productos y servicios, es decir tiene una orientación profesional de comercializador o en un sinónimo más coloquial <<vendedor>> por lo que podemos afirmar que un LRC es un profesional de las ventas y lo que atañe al ámbito comercial. Ahora bien ¿a qué se refieren las palabras alto rendimiento? Generalmente el concepto de alto rendimiento se utiliza para referir el desempeño individual o colectivo en una contienda deportiva, no obstante es aplicable también a los equipos profesionales, las organizaciones y las empresas, para nombrar a los grupos de trabajo altamente capacitados para lograr objetivos específicos. Estas personas catalogadas como de alto rendimiento se asegura tienen habilidades y capacidades diferentes y complementarias con respecto a sus condiscípulos; estas habilidades como ya se mencionó están encaminadas a obtener los mejores resultados por el tiempo y esfuerzo invertido; también el alto rendimiento se refiere a la capacidad de <<competir>> bajo estándares superiores al común denominador. El alto rendimiento comienza a tomar <<fuerza>> en el ámbito laboral corporativo a través de las competencias deportivas pues se tiene claro que este término está asociado con la exigencia extra a las obligaciones habituales, se puede tomar como ejemplo el caso de un jugador de voleibol aficionado que, por su condición física no puede jugar más de tres sets ya que terminará agotado al final, además suele fallar al conectar la pelota con las manos y tiene una baja efectividad en su saque. Este jugador evidentemente está lejos del alto rendimiento. Muy distinto y diametralmente opuesto está el caso de un jugador que participa en los juegos olímpicos o en la copa mundial, este puede jugar más de 5 partidos al mes y está en condiciones de competir e inclusive ganar a los mejores de su país o del mundo. Por lo tanto se afirma que dicho jugador de voleibol es un deportista de alto rendimiento Continuando con la construcción del <<concepto>> de alto rendimiento podemos afirmar que esta cualidad está dentro de los deseos de posesión de las personas, es decir, la mayoría de los profesionales aspira a poseer las características que refieren a esta cualidad (profesional de alto rendimiento) ya que se asegura que los beneficios que se obtienen no solo son de auto realización sino que inclusive son pecuniarios lo que nos lleva a afirmar que los beneficios de ser catalogados como un profesional de alto rendimiento nos puede llevar a ocupar cargos de mayor responsabilidad a tener mayores retribuciones salariales y por supuesto a elevar nuestra eficiencia y eficacia. Con las aseveraciones anteriores estamos en condiciones de construir una definición de un LRC de alto rendimiento, así podemos decir que un Licenciado en Relaciones Comerciales es aquel profesional de la comercialización el cual debido a su alto entrenamiento está en condiciones de responder a los retos que presenta el área comercial por ejemplo podrá elaborar con un alto grado de eficacia las siguientes actividades: Administración de ventas Plan de ventas Administración de productos Compras Gestión de inventarios Ventas Distribución y logística En estas actividades que se mencionan el alto rendimiento permite al LRC obtener objetivos planteados entre los que destacan: Logro de objetivos de venta Innovación en los planes Negociación eficaz con clientes y proveedores El alto rendimiento implica un apego total a los programas de acción bien planeados, es decir, deberás elaborar una agenda detallada de tus actividades laborales y personales, en esta agenda se registrarán no solo citas, reuniones o juntas de trabajo sino que deben de mostrarse las actividades cotidianas de tu trabajo sobre todo las de carácter operativo, recuerda que esta cualidad (apego a una agenda de trabajo) será la herramienta que te permitirá evaluar, controlar, y ejecutar de manera correcta tus planes, pero resaltamos que el seguimiento de una <<rutina>> basada en un agenda estricta no es una <<sugerencia>> sino que debe ser tu regla principal de vida en el alto rendimiento pues imagina al atleta que no entrene de acuerdo a horarios bien establecidos y cumplidos, el no seguir estos horarios marcados repercutirían en sus resultados finales así la agenda que elabores no solo implica tus actividades que desearías se realizaran sino por el contario implica actividades que realizas día a día, es decir, deberás detallar todas las actividades concernientes a la operación de tu puesto de trabajo, citamos por ejemplo una rutina de un ejecutivo de compras en la que su hora de entrada a la oficina es en punto de las 8:00 horas a las 8:05 su agenda le señala <<estrictamente>> que debe incorporar a inventario las adquisiciones realizadas el día anterior y esta actividad tiene una <<duración>> de 15 minutos por lo que a las 8:20 ya deberá haber finalizado dicha actividad y su agenda le señala que en punto de las 8:21debe enviar reporte de las muestras generadas por los técnicos de producción para sí terminar esta acción a las 8:30 y así sucesivamente hasta completar su diario quehacer. Trascendente es señalar también que las actividades señaladas en tu agenda nacen de un estricto <<sistema de gestión de procesos>> lo que quiere decir que las diversas actividades han sido bien definidas y comprobadas en cuanto su forma de ejecución y duración lo que implica que son perfectibles, es decir,tu premisa será siempre ejecutar tus actividades de una manera más eficaz y en menor tiempo tal cual un atleta de alto rendimiento intenta de manera permanente romper records. Dentro de las consecuencias de llevar una agenda de trabajo resaltamos uno de los tridentes del alto rendimiento: Trabajar al tope-descansar al tope-recuperación al tope. No debes de confundir el alto rendimiento con el <<supuesto exceso de trabajo>> pues el alto rendimiento no es procrastinación sino que se trata de una eficacia en las actividades para que siempre reduzcas tiempo y lo puedas emplear en nuevas actividades que desarrollen la innovación. Al cerrar este capítulo es importante mencionar que efectivamente existe una clasificación sutil en el mundo laboral entre <<Los ejecutivos de alto rendimiento y el resto>> con esta afirmación concluimos que si un LRC desea obtener beneficios laborales tales como mayor sueldo, un ascenso e inclusive el hecho mismo de dar los mejores resultados en su actividad deberá <<entrenarse a fondo>> más allá de lo aprendido durante los 4 años de la licenciatura. Este entrenamiento no solo es laboral también pasa por aspectos, intelectuales, de salud y emocionales, en el ámbito intelectual deberás nutrirlo con literatura especializada, asistencia a cursos o seminarios con personal capacitado; en el ámbito de la salud deberás tener una disciplina férrea pues tus actividades como alto ejecutivo requerirán una salud estable que repercutirá en tu resistencia física y también en tu imagen personal, esto lo lograrás a través del ejercicio físico constante y de una alimentación balanceada; respecto al rendimiento emocional lo deberás desarrollar a través de un método especifico de identificación y control de las emociones este método es difícil de desarrollar de manera individual pues las emociones son algo inherente al ser humano nos acompañan hasta el último minuto de vida y nos permiten reaccionar ante el entorno pero si la emoción no es bien enfocada existe una alta probabilidad de expresarla de una manera incorrecta y tendrá que como consecuencia el hecho de que tu alta capacidad intelectual y física queden opacadas por un manejo incorrecto de tus emociones; importante es resaltar que el control emocional requiere de un guía especializado en el tema pues es difícil desarrollarlo de manera individual. Recuerda que no bastará con la consigna <<querer cambiar>> por supuesto que es importante desear cambiar pero de nada servirá este profundo deseo sino se basa en un plan bien establecido y lo más importante será que sea un <<un plan ejecutado>>. Por último se resalta que el alto rendimiento ejecutivo te permitirá convertirte en un profesional emocionalmente fuerte, intelectualmente capacitado y físicamente resistente que será capaz de ejecutar planes que aunque difíciles sean realizados lo que te llevará a lograr los objetivos planteados, esto lo notarás cuando te des cuenta de que eres <<constante>> en tus acciones y que las cosas simples o habituales las realizas extremadamente bien lo que te llevará a adquirir el hábito de las actividades realizadas con eficacia, tendrás una consonancia con el ambiente laboral y desarrollarás la <<cultura de las cosas ahora>>. Capitulo II. Domina tu carrera <<No hay cosa más fácil que dar consejo ni más difícil que saberlo tomar>> Lope de Vega Una vez expuesto el concepto del alto rendimiento es menester comenzar a explicar el <<método>> para convertirte en un LRC de alto rendimiento. En este sentido es importante identificar las bases teóricas de la licenciatura, es decir, que asignaturas <<soportan>> la estructura de esta carrera universitaria. Así pues partiendo de la definición que se dio en el primer capítulo donde el Licenciado en Relaciones Comerciales puede definirse como un profesional de la comercialización entonces el área de ventas es una de los pilares de la licenciatura y en este punto una pregunta resalta ¿Cuáles son los principales aspectos qué se debe de aprender de esta área? Estos aspectos principales de aprendizaje son los siguientes: Proceso lógico de la venta Estructura de un plan de ventas Técnicas de venta Pronósticos de ventas Administración de ventas De los puntos mostrados ¿qué es lo que se busca aprender? En esencia en la venta debe de conocer cómo opera un proceso estructurado pues la venta no obedece solo a una intención o al exceso de <<discurso>> por lo que comprender la venta como una serie de pasos comprobados en los que es necesario distinguir y dominar desde la fase de la prospección hasta el cierre de ventas y entender que en cada fase del proceso lógico de la venta existen técnicas específicas para poder operar obtener los objetivos planteados. Una vez que se entienda a la venta como un proceso estructurado e s importante para el licenciado en relaciones comerciales tener el conocimiento necesario para poder interpretar, elaborar y aplicar un plan de ventas, el cual es entendido como un documento de carácter confidencial en el que se muestra el análisis comercial de una empresa, marca o producto, los objetivos que se pretenden lograr y la manera de lograr esos objetivos, es decir, las estrategias de ventas propuestas con sus acciones bien definidas, además deberá de contar con un pronóstico de ventas, un estado costo-beneficio y una calendarización de las actividades propuestas. Para e licenciado en relaciones comerciales es trascendente comprender que toda idea debe de tener un orden de clasificación de prioridades y actividades, es decir, operar como un ejecutivo de ventas o como un gerente de ventas requerirá un alto conocimiento de la administración de ventas donde el licenciado en relaciones comerciales aplicará el proceso administrativo de la manera en la que lo conocemos, planear, organizar, dirigir y controlar todas las actividades concernientes al área de ventas así como al personal que en esta área opera. Otro de los elementos importantes que el LRC debe <<dominar>> es la comprensión y ejecución de los cuatro cuadrantes que engloban a la administración de ventas y estos son: Mantenimiento de cartera de clientes Desarrollo de cartera de clientes Desarrollo de productos Desarrollo de mercados Lo anterior se traduce en que un LRC deberá contar con la capacidad de mantener una cartera de clientes, es decir, no perder clientes ya asignados y cumplir con los pronósticos de venta establecidos para cada cliente y para la cartera total; en el rubro de <<desarrollo de cartera de clientes>> el LRC deberá incrementar la cartera asignada con la adquisición de nuevos clientes es en este punto donde la prospección y el cierre de ventas ocupan un papel preponderante en las habilidades del LRC Capitulo VI. Desarrolla e liderazgo <<Quien mira lo pasado, lo porvenir advierte>> Lope de Vega En este apartado se analiza la importancia del liderazgo pues se considera fundamental esta cualidad en el profesional de alto rendimiento. En primer término debemos analizar la etimología de la palabra <<líder>> así pues encontramos que la palabra <<líder>> proviene del idioma inglés de la palabra <<leader>> cuyo significado es <<el que dirige>> <<el que conduce>>; por lo anterior podemos afirmar que líder es un sinónimo de guía, de conductor, por lo tanto <<el <<conductor>> es aquella persona hombre o mujer quien conduce a una o a más personas hacia un <<destino>>, que en términos empresariales llamaremos objetivos y metas, es decir el guía conduce a su equipo de trabajo a lograr un <<algo>> en un tiempo determinado. El término liderazgo tiende a estar muy <<desgastado>> en pleno siglo XXI pues se confunde con algunos términos alejados del liderazgo profesional de alto rendimiento, así pues enumeramos a continuación lo que consideramos NO ES LIDERAZGO: Jefatura impuesta de unárea de trabajo sin la aprobación inmediata y posterior del equipo. Representantes políticos y sindicales que han sido elegidos sin un medio 100% democrático. Jefes de un equipo de trabajo sin la capacidad del alto rendimiento. Jefes de un equipo de trabajo carentes de control emocional. Jefes de un equipo de trabajo sin la capacidad en la toma de decisiones. Termómetro del empoderamiento Triangulo invertido Disciplina Propósito superior Estrategia 0 tolerancia <<leyenda de la ventana rota>> Competencia (8vo pecado capital) Control de emociones Liderazgo vs productividad DNC vs objetivos Capítulo VII. Imprime pasión y energía <<Hay libros cortos que, para entenderlos como se merecen, se necesita una vida muy larga>> Francisco de Quevedo A lo largo de la vida profesional se pueden encontrar muchos métodos para poder desarrollar el potencial de cualquier persona aquí mismo se ha mostrado una <<formula>> que de seguirse garantiza al lector un mejor rendimiento en su vida laboral y ¿por qué no? Profesional, así pues aunado a estas técnicas se resalta la fórmula <<Querer, Saber y Hacer>> es decir para poder realizar una tarea es trascendental quererlo, desearlo, con todo tu ser, no es solo pensar que lo quieres sino que vivirlo, es algo que nace de todo tu ser, el siguiente compuesto de esta fórmula es <<saber>> por lo que necesitaras hacerte experto en eso que deseas y eso se logra a través del alto rendimiento, la siguiente etapa es que aquello que desees y sepas hacer lo lleves a cabo y tengas la constancia necesaria para continuar a pesar de los obstáculos que se vayan presentando, estas experiencias solo serán comprendidas con los casos reales que puedas palpar es por eso que a continuación te compartimos una historia que nos habla de constancia, pasión y mucha mucha energía: El término emprendedor, según wikipedia, “se usa para referirse a un individuo que organiza y opera una o varias empresas, asumiendo cierto riesgo financiero en el emprendimiento”, en ese sentido básicamente el emprendedor debe pagar el precio de comercializar o producir un bien o servicio para venderlo a un precio con el cual pueda beneficiarse. Antes de que este término fuera popular y se construyera como figura de la cultura del comercio y el dinero, tenía un cariz más heroico, radicado en la aventura de hacer posible con decisión y tesón alguna acción considerada como difícil o ardua, desde este punto nos queda claro que los componente del emprender, radican en el trabajo duro y en aceptar el riesgo económico o personal con la finalidad de conseguir un objetivo, pero ¿Quién en su sano juicio haría esto solo para cumplir un reto?, aquí se devela un tercer componente: la pasión; un emprendedor atribuye un significado mayor al ejecutar la empresa, no emprende por emprender, sino que le apasiona lo que hace porque significa algo para él, el camino es tan importante o más que el destino, donde los posibles beneficios económicos o personales pueden pasar a ser una consecuencia más no el fin. En la década de los 50’s y 60’s en la Ciudad de México, el transporte público estaba limitado básicamente a las rutas de tranvía y a las escasas rutas de trasporte concesionadas a laborar, donde con la creciente población, las deficiencias o inexistencia de la infraestructura vial, así como los costos de adquirir un vehículo, hacia verdaderamente un reto pretender lograr hacer del transporte público un negocio. La figura del operador conocido popularmente como chofer, o chafirete a menudo debía exhibir una especial destreza dentro del oficio haciendo muchas veces al mismo tiempo de maletero, mecánico, cobrador, etc y si además era propietario, debía tener dotes de administrador para lograr que las monedas obtenidas por el pasaje, diera cobertura al pago del automotor, combustible, mantenimiento, pago del permiso para circular y demás impuestos derivados de la actividad, sufriendo para que alcance para llevar algo a casa. Es en este escenario donde un joven emprendedor, llamado Fernando García conoce a su gran amor. Iniciando en esta actividad como cobrador y ayudante general (conocido ahora con el nombre cuasi despectivo de cacharpo), se empieza a familiarizar con las rutas, desmenuzando los intestinos de esta ciudad y el Edó. Mex. Se enamoró de esa línea de autotransporte, de su gente, de esos caminos de polvo, ruido y humo. Pronto logra ascender de puesto para llegar a ser operador, según él “aprendiendo solo de ver”, a menudo pienso que ese es el más grande mito dentro del oficio, pero quien soy yo para contradecirlo, al inicio comienza operando autobuses de otros dueños por un salario fijo, mientras logra juntar lo suficiente para un enganche para invertir en el propio. Es en esos ir y venir, es que conoce a la que sería su esposa, su segundo amor. Con miradas furtivas por el retrovisor, sonrisas veladas escondidas detrás de la cortesía necesaria con el pasaje, roce de manos en la entrega del boleto y el cambio, poco a poco lupita se hace usuaria asidua de esa ruta y en específico de esa unidad; entre pláticas breves sobre el clima, o cualquier tema que sirviera de pretexto, fueron conociéndose, pasando de un asiento de hasta tras del autobús hasta estar en el más cercano del asiento del operador. Algunas veces llevando en brazos a un bebé, lupita seguramente tuvo que aclarar que era hijo de su hermana y que ella seguía soltera, para no desilusionar al caballero, pero justamente ese niño, fue el causante, según contaba lupita, que otra novia de Fer se desilusionara al ver a su galán ayudando a otra mujer cargar al niño al bajar o subir de la unidad, dando a pensar que era casado y esa era su familia. Fernando cuando se le preguntaba al respecto solo sonreía y decía que eran imaginaciones de su esposa, esa sonrisa misteriosa donde no se sabía si pícaramente aceptaba los hechos sin decirlo, o si solo se reía de que su mujer lo creyera suficientemente atractivo para ser fantasía de otras mujeres. Lupita y Fer después de dos años de noviazgo llegan al matrimonio y a su primer hija, y aquí llega el primer revés de su idilio con el autotransporte de pasajeros: obligado por un conflicto interno y por necesidades económicas debe abandonar su empleo y acepta irse de operador de camiones de volteo, en la entonces construcción de su próximo rival de negocios, el metro. Con tres bocas que alimentar y otra más en camino, pasa una temporada entre cascajo y materiales de construcción, no es feliz, a menudo me pregunte el porqué, dado que era en esencia una actividad muy similar, me faltaba aún entender sus motivaciones. Regresa púes como hijo pródigo a la línea de sus amores, con esfuerzos logra ahorrar lo suficiente para comprar una unidad y ser además de operador, el dueño de su negocio, con mucha dedicación y visión a futuro pronto pasa de una unidad a varias, y una década más tarde incursiona en los autobuses de turismo, esta nueva aventura lo lleva a conocer muchos lugares del país, pero tampoco era lo que realmente le gustaba. Después de una época de auge y en medio de las políticas de contención del estado de las crisis económicas de finales de los 70’s , acabo el milagro mexicano, y con ello, el sueño de muchos como Fer, una mañana de enero de 1981, recibió la noticia que el entonces regente del D.F. Carlos Hank González revocaba las concesiones del servicio público de transporte y a pesar de las negociaciones, en agosto del mismo año, el entonces Presidente de la república José López Portillo emite el decreto por el cual se crea el organismo descentralizado denominado Autotransportes Urbanos de Pasajeros R-100, con lo cual a través de una comisión proceden a liquidar (a precios irrisorios claro está) a los permisionarios y hacer la toma de instalaciones y unidades de transporte particularespara hacer funcionar la ruta 100. Ahora con 5 hijos, de los cuales uno discapacitado, Fernando pasa el segundo revés en su vida de emprendedor, quedándose como al principio, un par de autobuses es lo único que le queda de su flotilla, le toca ver como mancillan la pintura de sus ex autobuses y les ponen ese color ocre horrendo, “color caca”, (siempre me evocaron esos autobuses también el olor a excremento), observa cómo hacen uso de las fuerzas armadas para reguardar los terrenos donde se encerraban a los camiones, evitando que regresaran a sus legítimos dueños. Con el corazón roto, y el bolsillo aún más, Fernando debe de seguir, no hay de otra, expulsados ahora fuera del D.F. y restringiendo sus recorridos ahora al Edo. Mex, principalmente a Tlalnepantla, Naucálpan y Atizapán, le es cada vez más difícil pagar sueldos a choferes, obligándolo a doblar su jornada como operador, pero sigue empeñando en seguir en el que su esposa sarcásticamente llama negocio rodante, vende una unidad de las dos que le quedan para poder construir en un terreno una casa para su familia, se queda con un modelo 1974, (“el tres” como cariñosamente lo llaman por ser su número de unidad) con tantos achaques y arrugas en su carrocería como él, pero con un alma inquebrantable como la suya, juntos sacan como pueden adelante a los suyos durante esa década de los 80’s. Inician los 90’s con una línea mermada de inversionistas, solo un puñado de compañeros insisten en vivir de ese negocio, la presión para renovar unidades, y los cumplimientos ambientales vigentes le orillan a vender a su viejo compañero, y embarcarse en la compra de los pronto populares microbuses. Se gestaba un último revés para Fernando. Para enero de 1994, México se despertaba con la ola de destrucción del error de diciembre, una nueva crisis sumía al país en la pobreza, y los emprendedores como Fer, en las deudas de créditos financieros. Desesperado, dormía dentro de su unidad en los paraderos para poder ser de los primeros en salir y dar más vueltas en la hora pico, pero no había jornada que bastará para pagar la deuda y los intereses generados a tasas históricas. Reuniendo los ahorros de sus hijas ya para entonces adultas, y con una renegociación del crédito, Fer logra terminar de pagar su Microbus. Hasta este momento parecería casi una necedad seguir en ese negocio. Desde el punto de vista económico había tenido tantos éxitos como fracasos, Fer sin duda en un sentido estrictamente comercial, no era el modelo de un emprendedor exitoso, sin embargo él cuenta una anécdota, que me permite al fin comprender sus motivaciones y saber que fue muy exitoso en su propósito: En medio de una disputa con otros concesionarios sobre el derecho de explotar una de las viejas rutas que recorrían, llegan a audiencia con un Joven Juez, el cual se decanta a favor de Fer y sus compañeros, ambas líneas aseguraban haber explotado primero esa ruta y por lo tanto el derecho de permanecer en ella, ante el testimonio del abogado de los rivales de tener ese derecho el Joven Juez responde, “a mí no me pueden engañar, cuando yo iba a la escuela, subía al autobús de este señor” haciendo una seña hacia Fer, “lo recuerdo bien porque nunca me cobraba el pasaje y siempre me instigaba a seguir estudiando”. Fer cuando contaba esto se hinchaba de orgullo, nunca fue una persona pretenciosa, un tanto tímido, y muy sencillo, no era de su gusto el presumir nada, pero este breve destello revela su secreto, esa pasión oculta y su razón como emprendedor, Él no era chofer, El no transportaba simplemente, El no hacia lo que hacía por hacerse rico; el ayudaba a convertirse a niños en profesionistas, Él se aseguraba que llegaran a sus escuelas y casas futuros médicos, empresarios, ingenieros, maestros, padres y madres de familia, gente trabajadora como él, ayudaba a forjar el futuro de un país. Cabe una nota final, Fer como cualquier emprendedor que afirme serlo, desarrollo los componentes necesarios: trabajo duro, resolución, visión a futuro y sobre todo pasión, además llevó sobre sus hombros a sus hijos a ser profesionistas y personas felices… además es mi padre y eso es suficiente para estar orgulloso de él. Fernando García R. Como puedes ver la pasión y la energía son la parte final de estas claves para el alto rendimiento son dos componentes del ser exitoso y no se encuentran en ninguna parte sino solo en el interior, es el decirte que a pesar de los obstáculos siempre hay un día más que será mejor que el anterior, es saber que a pesar de que parece que caerás tu logras no solo sostenerte sino que regresas con más fuerza, la pasión por lo que realmente se ama ha permitido al ser humano cruzar un océano desconocido y llegar a un nuevo mundo, ha permitido al ser humano fundar compañías que dan empleo a miles de trabajadores, la pasión por lo que haces te dará la satisfacción del deber cumplido, la energía de tu ser te mantendrá enfocado en tu <<propósito superior>>, en la historia anterior podemos ver que la pasión tiene un filtro muy importante pues algunas personas preguntan algunas veces ¿qué pasa si tal proyecto no me funciona? y la respuesta de la pasión emerge con fuerza <<no te preocupes si realmente es algo que deseas no descansaras hasta lograrlo>> por lo que no nace de la pasión se diluye rápidamente. La energía que necesitas debe nacer de principios que deberás comprender a profundidad esos principios son los siguientes: Las cosas ahora.- Este principio nace de la importancia que tendrá para tu propósito superior no postergar las acciones, imagina a un cliente Comunicación integra y confiable Actitud positiva Empatía y respeto Confiabilidad y apoyo Valentía Integridad Honor Lealtad Enfócate en descubrir y aprender
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