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1 Índice Factores abióticos y bióticos que causan enfermedades en las plantas” ............... 2 Introducción. ....................................................................................................... 2 Importancia de las enfermedades. ...................................................................... 3 Factores abióticos. ............................................................................................. 4 Contaminación del suelo. ................................................................................ 4 Factores bióticos. ............................................................................................... 4 Hongos. .......................................................................................................... 4 Bacterias. ........................................................................................................ 5 Mollicutes. ....................................................................................................... 5 Nematodos ..................................................................................................... 5 Protozoarios flagelados. .................................................................................. 6 Virus. .............................................................................................................. 6 Viroides ........................................................................................................... 7 Conclusión.......................................................................................................... 7 2 “Factores abióticos y bióticos que causan enfermedades en las plantas” ISPA María Guadalupe de los Santos Zavala1, Brayan Cosco Rivera2 Introducción. Las enfermedades de las plantas son ocasionadas por microorganismos infecciosos o bióticos como hongos, bacterias, nematodos y protozoarios flagelados, y por agentes infecciosos como virus y viroides; así mismo, por factores no infecciosos o abióticos, como alteraciones edafoclimáticas y toxicidad por plaguicidas, entre otros (Agrios, 2005). La enfermedad es una interacción dinámica entre un patógeno, un hospedante y el medio ambiente, la cual causa en los hospedantes cambios anormales de tipo fisiológico y morfológico. Por consiguiente, enfermedad no es una propiedad del hospedante, sino un producto de la interrelación del hospedante y el patógeno, bajo un ambiente específico. La enfermedad puede considerarse también como las respuestas visibles e invisibles de las células y tejidos de las plantas a un agente infeccioso o factor no infeccioso, que resulta en cambios adversos en la forma, función o integridad de la planta, interfiriendo con la formación, traslocación o utilización de nutrientes minerales y agua, de tal manera que la planta afectada cambia en apariencia y rinde menos que una planta sana de la misma variedad (Agrios, 2005). La etiología se define como la determinación del agente causante de una enfermedad. Para tal fin, se debe recolectar una muestra fresca adecuada de los tejidos de las plantas que presenten los síntomas típicos de la enfermedad, que 1 Docente del ITSJC. Pról. Miguel Hidalgo No. 1514, Col. Centro, CP 96950, Jesús Carranza, Ver. 2 Alumno del ITSJC. Pról. Miguel Hidalgo No. 1514, Col. Centro, CP 96950, Jesús Carranza, Ver. 3 permita realizar un análisis correcto, para poder establecer las medidas de manejo apropiadas (Agrios, 2005). Importancia de las enfermedades. Existen aproximadamente 350.000 especies de plantas, de las cuales unas 3.000 son empleadas como alimento por los humanos, constituyendo el 99% de suministro de su alimento. De estas, solo 300 especies son ampliamente cultivadas y solo 11 cultivos: arroz, maíz, trigo, sorgo, caña de azúcar, papa, yuca, frijol, patata, banano y coco, constituyen el 95% del suministro de alimentos a la humanidad (Castaño- Zapata, 1994). Más de 1.300 especies de hongos causan enfermedades en estos cultivos (Farr et al., 1989). Se conocen 26.646 especies de nematodos, distribuidas entre especies de vida libre (10.681); y parásitos de: invertebrados (3.501), vertebrados (8.359) y plantas (4.105) (Hugot et al., 2001). Estos últimos causan pérdidas anuales del 11 y el 14% en cultivos de importancia como las leguminosas, granos, banano, yuca, coco, remolacha azucarera, caña de azúcar, papa, hortalizas y varios frutales, equivalentes a US$80 billones año¹ (Agrios, 2005). De las 2.290 especies de virus descritas por el Comité Internacional de Taxonomía de Virus, se conocen alrededor de 950 que afectan plantas, equivalente al 41% (ICTV, 2010). Se reportan alrededor de 30 viroides que afectan cultivos importantes como: papa, tomate, lúpulo, aguacate y cítricos (Hammond & Owens, 2006). Se conocen cerca de 1.600 especies de bacterias, de las cuales 100 causan enfermedades en plantas, equivalente al 16% (Agrios, 2005). 4 Factores abióticos. Los factores abióticos incluyen: condiciones climáticas como las temperaturas extremas, el exceso o deficiencia de agua, luz o nutrientes, suelo compacto, sequía, estancamiento de agua y/o prácticas de cultivo adversas. Estos factores pueden ser el resultado de una interacción que ha existido por un periodo largo de tiempo entre la planta y uno o más factores como la falta de espacio para un crecimiento radicular óptimo, la presencia de niveles crónicos de contaminantes del aire o agua. Contaminación del suelo. El aumento de inóculo de un patógeno en el suelo lo torna eventualmente inapropiado para la siembra de un cultivo susceptible en particular y requiere de medidas directas de manejo, como tratamiento químico del suelo, u otra medida como rotación de cultivos (Castaño-Zapata, 1994). Un buen ejemplo en pasifloráceas es N. haematococca, que produce clamidosporas, las cuales pueden sobrevivir en el suelo por varios años. Los nematodos Quiste de la soya y la papa (H. glycines y Globodera rostochiensis (Wollenweber) Behrens, respectivamente) producen quistes que les permiten sobrevivir por más de 20 años en el suelo (Perry & Moens, 2006). Factores bióticos. Hongos. Esta palabra proviene del griego sphongos, que significa esponja (Harper, 2010). Las hifas miden entre 2 y 10 µm de diámetro hasta varios centímetros de longitud. La mayoría de las especies están compuestas por filamentos tubulares que pueden ser cenocíticos o septados, cuyo conjunto se denomina micelio. Los componentes principales de las paredes celulares de los hongos son celulosa, pectona y quitina, 5 y se distinguen por la carencia de clorofila, posesión de núcleos y nucléolos con membranas bien definidas (eucariotas). Su reproducción se realiza mediante esporas de origen sexual o asexual (Castaño Zapata, 1994). Bacterias. Palabra que deriva del griego bakterion, y significa bastón pequeño cuyo tamaño oscila entre 1 y 2 mm (Harper, 2010). Estos microorganismos son unicelulares, cuyo material genético (ADN) carece de una membrana celular y por ello no está organizado en un núcleo (procariotas). Sus células consisten en citoplasma que contienen ADN y ribosomas pequeños (70S). El citoplasma está rodeado por una membrana y una pared celular. La mayoría de las bacterias fitopatógenas tienen forma de bastón o bacilo y poseen flagelos, usualmente en los polos, y fimbrias o pili (Vidaver & Lambrecht, 2004; Agrios, 2005). Mollicutes. Nombre proveniente del latín mollis (suave) y cutis (piel), son bacterias que carecen de pared celular, pero están provistas de una membrana celular trilaminar. Incluyen los llamados anteriormente fitoplasmas y espiroplasmas, que son organismos celulares más pequeños con un tamaño de 0,3-1,2 µm de diámetro y se autorreplican (Fletcher & Wayadande, 2002). Nematodos. Provienen de los vocablosgriegos nema (hilo) y eidés u oidos (con aspecto de), son definidos como animales filiformes con cuerpo sin segmentos y más o menos transparentes, cubierto de una cutícula hialina, la cual está marcada por estrías o anillos; son redondeados, poseen boca y carecen de apéndices; aunque las hembras adultas de algunos géneros son abultadas, como Meloidogyne Goeldi y 6 Heterodera Schmidt (Siddiqi, 2000; Perry & Moens, 2006). La mayoría son microscópicos, con una longitud entre 300 y 1.000 mm, y entre 15 y 35 mm de diámetro (Agrios, 2005; Luc et al., 2005; Perry & Moens, 2006). Los nematodos parásitos de plantas tienen un estilete hueco, también llamado lanza, pero hay algunos con estilete sólido modificado. El estilete es usado para perforar o penetrar las células de la planta, y a través de él se extraen los nutrientes desde la célula (Luc et al., 2005; Perry & Moens, 2006). Protozoarios flagelados. Provienen de las raíces griegas proto (primero) y zoo (animal), y del latín flagellum, que significa flagelo, pero más largo y capaz de realizar movimientos (RAE, 2010). Los protozoarios flagelados son microorganismos unicelulares con uno o más flagelos largos y delgados en algunos o todos los estados de su ciclo de vida. Los fitopatógenos pertenecen al género Phytomonas (Kinetoplastida: Trypanosomatidae); tienen cuerpo en forma de huso con extremos aguzados, entre 12 y 18 µm de longitud y 1 a 2,5 µm de ancho y con un flagelo de 12 a 18 µm de largo; su núcleo está situado a un tercio del extremo anterior; se multiplican en el floema, y son transmitidos por hemípteros fitófagos (Agrios, 2005). Virus. Proviene del latín ‘virus’, que significa veneno. Los virus son agentes infecciosos compuestos de una o varias moléculas de ácido nucleico (ADN o ARN de cadena sencilla o doble) cubiertas por una o varias capas de proteína o lipoproteína capaces de replicarse en las células de un hospedante susceptible (Hull, 2009). Su tamaño oscila entre 20 y 70 nm de diámetro para los virus isométricos y 150 a 2.200 nm de longitud para virus con forma de varilla. La traducción del genoma (para producir proteínas) o transcripción y replicación (para producir más ácido nucleico) ocurre 7 dentro de las células del hospedante usando su “maquinaria” metabólica (Adams & Antoniw, 2010). Viroides. Proviene de la unión de la palabra latina “virus” que significa veneno y del sufijo “oid” que significa imperfecto o incompleto. A diferencia de los virus, los viroides son moléculas de ácido ribonucleico (ARN) de cadena sencilla que ocasionan enfermedades en varias especies de plantas. Sus genomas son de 239 a 401 nucleótidos de ARN circular de cadena sencilla; además, no codifican proteínas (Hammond & Owens, 2006). Conclusión. Los ecosistemas naturales están compuestos de factores abióticos y bióticos. Los factores abióticos están conformados por elementos carentes de vida, los factores bióticos o con vida se clasifican según la función que desempeñan dentro del ecosistema y pueden ser organismos productores, consumidores y regeneradores. Las interrelaciones entre estos componentes se aprecian cuando se analizan los flujos de energía que se llevan a cabo entre los componentes del ecosistema, cadenas de alimento, patrones de diversidad en tiempo y espacio, ciclos de los nutrientes, desarrollo y evolución, y control. Referencias. Smith, S., & Romero, K. U. (2019). Envío de Muestras de Plantas para el Diagnóstico de Enfermedades. University of Arkansas, Cooperative Extension Service. Guzmán-Piedrahita, O., Castaño-Zapata, J., & Villegas-Estrada, B. (2009). Diagnóstico de enfermedades de plantas de origen biótico. Agronomía, 17(2), 7-24.
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