Cuento literatura infantil - Yuliana Barreto (5)

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CUENTO LITERATURA INFANTIL
PRESENTADO POR:
YULIANA BARRETO ARRIETA 
PRESENTADO A:
LUISA FERNANDA LLORENTE 
UNIVERSIDAD DE CÓRDOBA 
FACULTAD DE EDUCACIÓN Y CIENCIAS HUMANAS
LICENCIATURA EN EDUCACIÓN INFANTIL 
2022
EL PODER DE MIS RUEDAS
En un pequeño pueblo un poco alejado de la ciudad vivía un niño llamado Carlos que la mayoría del tiempo siempre pasaba triste y solo ya que los niños que vivían cerca se burlaban y no querían jugar con él, pues Carlos cuando tenía 5 años habría sufrido un accidente que no le permitió volver a caminar y por lo tanto tenía que estar en silla de ruedas, él vivía con su abuelo, quien siempre le contaba las maravillosas historias de un superhéroe llamado Valiente, su poder era la fuerza y siempre ayudaba a todos los que necesitaban de su ayuda pero nunca lo habían visto de cerca, ya que siempre que ayudaba nunca se dejaba ver.
 Abuelito yo quiero ser un superhéroe así como Valiente para ayudar a todos los niños del mundo para que no se sientas solitos, así como yo dijo Carlos emocionado.
 Claro que si hijo mío, tu eres un niño muy bueno y si te lo propones lo vas hacer le dijo el abuelo mirándolo con lágrimas en los ojos.
 Aunque no creo poder hacerlo abuelito, estoy en esta silla de ruedas que no permite hacer muchas cosas, todos los niños de la calle se ríen de mí y siempre me andan colocando apodos, espero poder algún día demostrarles que aunque no pueda caminar soy igual a ellos.
 Ay hijo mío como me gustaría que no sufrieras, pero nunca dejes de soñar que yo sé que algún día lo vas a lograr Le dijo el abuelo dándole un pequeño beso en la frente.
Una tarde Carlos estaba afuera de su casa mirando el cielo y jugando con su perrito Lalo, como solía hacerlo todos los días, cuando de repente llegan los niños que siempre lo molestaban y empiezan a empujarlo de la silla de ruedas.
 Miren donde está el que nunca va a poder caminar y cree que con ese sillita va a poder ser un superhéroe Dijo el niño burlándose de Carlos y empujando la silla de ruedas.
 ¿Por qué siempre me molestan si yo nunca les hago nada?, al contario yo quiero ser su amigo y jugar juntos Dijo Carlos con lágrimas en sus ojos.
Nuestro amigo, no nos hagas reír, nosotros nunca seremos amigos de alguien como tú, no te das cuenta que eres diferente a nosotros.
 El no poder caminar no me hace diferente a ustedes, mírenme yo puedo ver, escuchar, puedo jugar y hasta puedo divertirme.
 Vámonos chicos dejen al rarito solo Dijo el niño burlándose y llevándose a los otros niños.
Carlos se quedó muy triste pues su deseo de poder ser amigo de los otros niños nunca se iba cumplir si seguía en silla de ruedas.
 Pasaron los días y en el pueblo empezó el rumor de que una persona se estaba llevando los animales de todos los que vivían ahí y que con gran sacrificio habían conseguido durante años, el abuelo de Carlos ante esta situación estaba muy nervioso pues ellos con lo único que contaban era con una vaquita la cual les daba la leche todos los días y unas cuantas gallinas.
Una noche mientras Carlos y su abuelo dormían escucharon como las gallinas empezaron a cacarear muy desesperadas como si algo les estuviera pasando, el abuelo de Carlos salió al patio de la casa y se llevó la gran sorpresa de que un hombre estaba subiendo sus gallinas a un camión con la intención de llevárselas, pero cuando el ladrón se dio cuenta que lo habían descubierto empezó a correr para huir, Carlos al ver la desesperación de su abuelo quiso ir detrás del ladrón lo más rápido en su silla de ruedas pero fue imposible ya que a mitad de camino se tropezó con una rama y se calló. 
Como por arte de magia apareció el superhéroe Valiente quien al ver la situación se fue detrás del ladrón y al poco de tiempo de haberlo perseguido ya lo había atrapado y regreso para ayudar a Carlos quien quedo llorando en el suelo.
 ¿Pero qué te ha pasado pequeño niño? Le pregunto el superhéroe a Carlos.
Nunca voy a poder ser un superhéroe gracias a esta silla de ruedas que me impide hacer muchas cosas Le dijo Carlos limpiándose las lágrimas de sus mejillas.
El superhéroe al ver al niño llorando lo levanto del piso y le dio un pequeño consejo ya que él había pasado por la misma situación.
Te voy a contar un secreto, cuando yo era un niño todos mis compañeros de clase se burlaban de mi por esta razón el superhéroe se quita la capa que le cubría todo el cuerpo y le muestra a Carlos que le hace falta un brazo.
El niño a verlo se queda totalmente sorprendido.
 ¿Pero si te hace falta un brazo como puedes ser tan fuerte? ¿Cómo luchas contra los malos?
 El pasar ese situación cuando era un niño y ver como se burlaban de mí, hizo que tuviera más confianza en mí mismo y me di cuenta que la discapacidad solamente existe en la mente de las personas incapaces y que yo podía lograr todo lo que me propusiera siempre cuando yo me amara y me aceptara tal cual como soy. Así que pequeño todo lo que te propongas si confías en ti lo puedes lograr.
Los niños del pueblo se acercaron dónde estaba el superhéroe con Carlos para ver lo que estaba pasando y este aprovecho para mostrarles a los demás niños lo que había ocultado por tantos años. Los niños al verlo quedaron sorprendidos pues no se lo esperaban y eso les llevo a pensar que si el superhéroe que tanto admiraban le faltaba un brazo y aun así podía ayudar a los demás, Carlos en su silla de ruedas también podría hacerlo.
Desde ese día Carlos empezó a aceptarse tal y como es y los niños que lo molestaban también empezaron a aceptarlo ya que vieron más confianza en él, ya que si el superhéroe más fuerte lo había logrado, su silla de ruedas nunca sería un impedimento para lograr sus sueños, al contrario ese sería su más grande motivación.