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Proporcionalidad: La proporcionalidad es una relación matemática entre dos cantidades que mantienen una relación constante entre sí. Cuando dos cantidades son proporcionales, su relación se puede expresar mediante una ecuación de proporción. En una proporción, se tienen cuatro términos: dos términos conocidos como antecedentes y dos términos conocidos como consecuentes. La relación entre los antecedentes y los consecuentes se mantiene constante. La ecuación de proporción se escribe en la forma "a/b = c/d", donde "a" y "c" son los antecedentes y "b" y "d" son los consecuentes. La proporcionalidad se utiliza para resolver problemas en los que se busca encontrar el valor desconocido de una cantidad en función de su relación con otra cantidad conocida. Puede aplicarse en diversas situaciones, como problemas de razón y proporción, regla de tres, escalas, y problemas de velocidad y tiempo. Porcentaje: El porcentaje es una forma de expresar una proporción o relación en términos de partes de cien. El símbolo utilizado para representar un porcentaje es el "%" (por ciento). El número antes del símbolo "%" se llama cantidad o valor porcentual, y representa la parte de un todo. El porcentaje se calcula dividiendo la cantidad que se desea expresar como porcentaje por el total y luego multiplicando el resultado por 100. Matemáticamente, se puede expresar como una ecuación de proporción: "cantidad/total = porcentaje/100". El porcentaje se utiliza ampliamente en diversos contextos, como cálculos financieros, descuentos, incrementos, tasas de interés, cambios porcentuales y estadísticas. También se usa para comparar cantidades y realizar análisis comparativos. El porcentaje también se puede utilizar para realizar operaciones matemáticas básicas, como sumar, restar, multiplicar y dividir. Por ejemplo, se pueden calcular descuentos aplicando un porcentaje de reducción a un precio original, o se pueden determinar aumentos agregando un porcentaje al valor original. En resumen, la proporcionalidad es una relación matemática constante entre dos cantidades, mientras que el porcentaje es una forma de expresar una proporción en términos de partes de cien. Ambos conceptos son fundamentales en matemáticas y se utilizan en una amplia gama de situaciones y cálculos en la vida cotidiana, las finanzas y otras disciplinas.
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