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ENSAYO CONFORMACIÓN SOCIAL DE MÉXICO

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UNIVERSIDAD AÚTONOMA DE 
SINALOA 
 
MATERIA: 
CONFORMACIÓN SOCIAL DE MÉXICO 
 
ALUMNA: 
ARENAS MARTÍNEZ CELESTE ALEHLÍ 
 
FACULTAD: 
FACULTAD DE CIENCAS SOCIALES 
 
GRUPO: 
I-01 
 
NO. DE LISTA: 
#02 
 
PROFESOR: 
BORQUEZ BUSTAMANTE ROGELIO 
 
 
MAZATLÁN, SINALOA; 06 DE JUNIO DE 2022 
INTRODUCCIÓN 
 
Tras la consumación de la Independencia, México sufrió grandes cambios tanto 
económico como social, ya que generalizaba una preocupación por el 
enfrentamiento de ideologías, dificultades económicas y la desigualdad social, a 
causa de ello, se dificultó la conformación de la nueva nación. México se vio en 
vuelto en varios conflictos económicos y políticos por la forma en que se gobernaba, 
siendo así, causa de varias disputas entre la población y el mismo gobierno, por lo 
que convirtió a México en un país sumamente vulnerable, fragmentado, humillado, 
desmoralizado y en bancarrota. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
ORÍGENES DE ESTADO Y LA SOCIEDAD MEXICANA 
Con la consumación de la independencia en las tres primeras décadas como nación 
independiente se caracterizaron en el país por afrontar guerras interinas por el 
poder, al igual que el desorden de distintos ámbitos en la vida del país; pues el 
principal propósito de la independencia de México fue volverse una nación libre y 
soberana, pero para esto tuvo que pasar diferentes obstáculos como la pérdida de 
territorios dentro del país debido a la invasión estadounidense. La gran guerra 
concluyó con la firma del Tratado de Guadalupe-Hidalgo, en el que México 
reconocía la frontera texana en el río Bravo y "cedía" los territorios de California y 
Nuevo México 
La guerra de intervención norteamericana fue causada tanto por las tendencias 
expansionistas norteamericanas como por la inestabilidad reinante en México y el 
mal manejo de la relación con EE. UU.; como consecuencia, trajo consigo un cambio 
en la nación y en las instituciones políticas, ya que no sólo México afrontaba la 
invasión al país, si no que de igual forma se encontraba en guerra interina para 
poder tener control del país. Fue así como, en 1847, durante la Guerra de Reforma 
en la que los conservadores mexicanos buscaron recuperar el poder al derrotar a 
Antonio López de Santa Anna y las fuerzas populares liberales que apoyaban la 
extinta Constitución de 1824 para seguir manejando el país. Sin embargo, la victoria 
liberal en Ayutla dictó que se formaría un gobierno interino o probablemente 
provisional basado en sobre lo que se suponía que era una estructura de gobierno 
temporal llamada “República Constitucional” gobernaría a México en su estado 
de transición. 
Todo ello atribuyó la creación de la “Constitución de 1857”, puesto que su objetivo 
era buscar la estabilidad y el crecimiento de país. Fue escrita por un grupo de 
liberales, entre ellos, Lerdo de Tejada y Benito Juárez; para formar un nuevo 
gobierno después de la Guerra México-Estadounidense. De igual forma, fue 
producto de la Reforma liberal y significó una ruptura tanto con la era colonial 
española como con las tradiciones mexicanas como el corporativismo y el gobierno 
clerical. 
La Constitución de México de 1857 fue la primera constitución escrita en México; 
promulgada el 18 de enero de 1857, después de una guerra civil mortal entre 
liberales y conservadores que luchaban por el dominio de la república. Diez años 
antes de que se ratificara la constitución actual, los liberales mexicanos llegaron al 
poder después de derrotar a las facciones conservadoras en guerras prolongadas 
y de establecer el libre comercio con los países europeos. La constitución estuvo 
influenciada en gran medida por la constitución de los Estados Unidos, pero también 
incluyó algunos aspectos de la constitución de Francia. Estableció que México sería 
una república federal con nueve estados y tres territorios. Es considerada uno de 
los documentos más importantes de la historia mexicana ya que estableció muchos 
principios importantes como los derechos individuales, la libertad, la democracia, la 
separación entre iglesia y estado. 
Si bien, no todo fue color de rosa para el país, ya que seguía existiendo caos y la 
lucha entre conservadores y liberales parecía ser eterna; puesto a que el 17 de 
diciembre, tres meses después de entrar en vigor la Constitución, se promulgó el 
“Plan de Tacubaya”, declarando que la Constitución dejaba de regir en el país. 
Este momento marcó el inicio, oficial, de un periodo de conflictos que desangró al 
país durante una década, el cual finalizó el 19 de junio de 1867, al ser ejecutados 
Maximiliano de Habsburgo, Miguel Miramón y Tomás Mejía en el Cerro de las 
Campanas. Con el triunfo del ejército liberal se restauró la República. 
La restauración de la República inicia formalmente con la entrada de Juárez y su 
ejército a la CDMX el 15 de julio de 1867. Una de sus primeras medidas fue 
convocar a elecciones para renovar el Congreso y la presidencia de la República. 
Juárez consideraba reformar la Constitución de 1857, lo que sólo podía hacerse con 
la aprobación de las legislaturas estatales. Juárez propuso que a la par de las 
elecciones se llevara a cabo un plebiscito en el que los ciudadanos respaldaran sus 
cambios constitucionales 
Benito Juárez y el general Porfirio Díaz se presentaron como candidatos a las 
elecciones. Juárez fue elegido para el periodo 1867-1871, pero no consiguió que 
los electores aprobaran las modificaciones a la Constitución. Entonces, el 
presidente Juárez integró a su gabinete a un grupo de intelectuales que se había 
mantenido fiel a la República y, junto con ellos, emprendió una política moderada 
que se apegó a los principios fundamentales de las Leyes de Reforma. 
Finalizado el periodo de Juárez; en 1871 se presentaron como candidatos a las 
elecciones presidenciales Benito Juárez (quién todavía era presidente), Sebastián 
Lerdo de Tejada y Porfirio Díaz. Tras la victoria de Juárez por un escaso margen, el 
general Porfirio Díaz se levantó en armas, acusándolo de violar el espíritu de la 
Constitución, en las que se adujo hubo fraude electoral a favor de Juárez, dio como 
resultado la revolución, mediante el llamado “Plan de la Noria”. Pero durante dicho 
movimiento acaeció la muerte de Benito Juárez, dando así la presidencia interina 
de Sebastián Lerdo de Tejada. 
Luego de terminar su periodo interino trató de reelegirse, dando como resultado que 
Porfirio y otros destacados militares idearan y realizaran el “Plan de Tuxtepec”, 
movimiento que llevaría posteriormente a Porfirio Díaz a la presidencia convocando 
a elecciones luego de las cuales fue elegido presidente de México. Es así que el 5 
de mayo de 1877, Porfirio Díaz se convirtió en presidente de México. Junto con él, 
llegó al poder de una nueva generación política, así como intelectuales formados en 
los preceptos de la filosofía positivista. 
Porfirio Díaz comenzó una política de conciliación entre los sectores más 
favorecidos del país. A los caciques regionales les permitió mantener el poder local 
a cambio de su lealtad. México disfruto de cerca de 3 décadas de “paz” al final de 
un siglo de batallas. La economía tuvo una recuperación significativa: la minería, la 
industria y las comunicaciones se desarrollaron rápidamente; por primera vez en su 
historia, México se convirtió en exportador de productos agrícolas y ganaderos; 
además esta economía estuvo constituida por la expansión mercantil, el desarrollo 
comercial y los avances de las actividades lucrativas. Durante esa etapa, México 
transitó de un estado precario a uno capitalista. 
A medida que progresaba el mercado externo gracias a los aportes nacionales, 
algunos sectores internos dejaron de funcionar debido a la falta de inversión. 
Además, los campesinos tuvieron que trabajar como esclavos en sus propias tierras 
para incrementar la producción. El crecimiento capital solo favoreció a los burguesesy limitó la calidad de vida de las personas de bajos recursos 
A partir de ese momento, Díaz se dedicó a instaurar un proyecto que diera como 
resultado la evolución de la economía. Para ello se enfocó en dos principios: la 
ampliación del área agropecuaria y la construcción de industrias. Sin embargo, en 
1910 se inició un conflicto bélico. La Revolución mexicana fue una respuesta a la 
exclusión e inestabilidad en la que vivieron los habitantes alrededor de tres décadas. 
Dicha manifestación ocasionó que en 1911 cesara la dictadura del porfiriato. 
Ahora bien, todo mexicano conoce también esta pequeña historia, donde se 
levantaron en armas a causa de los más de 30 años ejerciendo en el poder nuestro 
Porfirio Díaz y como siempre, fue destrucción y un gran desequilibrio dentro de la 
economía mexicana. Pero es de reconocer que ciertamente Porfirio Díaz logró 
modernizar el país y mejorar la situación económica, pero para la mayoría las 
circunstancias de vida empeoraron mucho y la falta del Porfiriato era el 
maquiavelismo y el no considerar la situación de las masas. Se puede decir que el 
Porfiriato por un lado hizo necesario una revolución por la desigualdad social, por 
otro lado sólo el Porfiriato hacía posible la revolución, porque la situación en el siglo 
XIX todavía era demasiado caótica para organizar los intereses comunes. 
 
 
 
 
 
 
CONCLUSIÓN 
Después de los problemas que tuvo México en dichas épocas, tuvo varios cambios 
drásticos los cuales trajeron consigo consecuencias perjudiciales; pues desde su 
Independencia, vivió momentos de inestabilidad muy significativa. La falta de 
cohesión de sus instituciones políticas, entre otros factores, fueron la principal causa 
de dicho problema en la vida política mexicana, ya que influyó mucho los distintos 
gobiernos que México tuvo, puesto a que el país vivió un proceso de evolución en 
la forma de gobierno, aunque esta evolución fue truncada por la gran división 
ideológica que dominaba en aquel entonces. 
Sin embargo, gracias a todo este gran alboroto político-económico, México ha 
logrado consolidarse como lo que hoy conocemos, claro, sin dejar de lado todo lo 
malo que conocemos de este, pero, aun así, podemos llegar a decir que, sin nada 
de ello, lo que hoy conocemos como México, muy posiblemente, ni siquiera 
seríamos un país en desarrollo. Todas las guerras que afrontó el país surgieron 
nuevos planes políticos que ayudaron a poder tener una estructura firme, pero con 
grandes fallas dentro del sistema. 
Sin más que decir, México si es un país libre y soberano, no en su totalidad, pero 
hoy en día contamos con muchos factores a favor del ciudadano y que sobrevivimos 
a partir de ello.

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