Logo Studenta

INFORMACIÓN GENERAL DE ITALIA-signed

Esta es una vista previa del archivo. Inicie sesión para ver el archivo original

ITALIA 
 
 
 
País integrante de la Unión Europea, cuya capital es Roma, enmarcado al norte por el arco Alpino 
y, surcando toda la península como eje dorsal, aparecen los Apeninos. Como única gran llanura, 
tan sólo destacan las del Po y Véneto. En su parte septentrional, incrustada en el continente 
europeo, limita por el oeste con Francia, por el este con Eslovenia, por el norte con Suiza y Austria, 
mientras que el resto peninsular está bañado por el Mar Mediterráneo que, en el este se 
individualiza en el Mar Adriático, en el sur en los mares Jónico y de Sicilia, y en el oeste en los 
 Lic. Carmen Rodriguez
mares de Tirreno, de Cerdeña y de Liguria. Se divide políticamente en regiones y éstas en 
provincias 
 
 
 
 
El clima es templado continental en el norte y mediterráneo en el resto, con matices regionales y 
comarcales, derivados de la topografía, de la distancia del mar, de la orientación de los Alpes 
 En el área alpina hay un clima de montaña, de bajas temperaturas medias, considerables 
oscilaciones térmicas anuales y diurno – nocturnas, e intensas y frecuentes precipitaciones 
invernales bajo forma de nieve. 
En la gran llanura Padana (Pó ) y Véneta (Venecia ) el clima es netamente continental, con fuertes 
contrastes entre crudos inviernos y fuertes veranos. Igualmente continental puede considerarse el 
clima de las áreas apenínicas. 
A lo largo de los litorales Liguria y tirrénico todo está dominado por un clima más claramente 
mediterráneo. En el litoral del Mar Adriático vuelve a dominar un clima con ciertos caracteres 
continentales. Las costas del Mar Jónico y las islas disfrutan del más puro clima mediterráneo. 
 
 
 No posee grandes cuencas hidrográficas como consecuencia de la disposición montañosa. El más 
importante es el río Pó que recorrer gran parte del país en las llanuras entre sus montañas y 
recoge las aguas de sus pequeños afluentes. Se destaca por la importancia de las ciudades el río 
Arno que atraviesa la ciudad Florencia y el río Tíber o Tevere en Roma. 
 
 Este país es otra de las grandes potencias turísticas a nivel mundial porque posee una gama de 
recursos, infinita en cuanto a número, y puntera en cuanto a calidad y variedad. No hay recurso, 
por exclusivo o particular que sea, que no esté presente en este país y con niveles de calidad 
prácticamente insuperables. Dispone de numerosas y prestigiadas áreas de esquí en las regiones 
apenínicas y en la cordillera alpina. 
En lo referente a turismo de playa basta echar una mirada a la enorme extensión de los litorales y 
tener presentes las características climáticas para comprender que necesariamente ha de figurar 
entre los países punteros en esta modalidad: Riviera Italiana (prolongación de la Costa Azul ) 
centrada en torno a San Remo, Costa Esmeralda en Cerdeña. 
 De norte a sur, de este a oeste, el territorio montañoso desciende por las costas rocosas y 
abruptas del Mar Tirreno al oeste y del Mar Jónico en la parte sureste y posteriormente a través 
de las suaves y arenosas del Adriático en el este. Los mares que bañan Italia acogen dos grandes 
islas, Sicilia y Cerdeña, y numerosos pequeños archipiélagos, como, por ejemplo, el archipiélago 
de Toscana, donde se encuentra la Isla de Elba, el archipiélago de La Magdalena en Cerdeña, el 
archipiélago Campano con las islas de Isquia y Capri; además de las islas Pontinas en Lacio. Entre 
las costas tunecinas y sicilianas se sitúan las islas Pelagias (o Pelasgas), entre las que destaca 
Lampedusa; las Islas Lípari- que cuentan con dos volcanes activos, Strómboli y Vulcano- y las 
Egades –reserva natural- todas ellas en Sicilia, para concluir con las islas Tremiti en Apulia. 
De Liguria los Alpes Marítimos, al oeste de Génova, y los Apeninos Ligurios, se extienden hasta 
tocar las olas del mar. Altas y rocosas estas costas muy a menudo se presentan abruptas y llenas 
de ensenadas con profundos fondos marinos. Suponen un paraíso para diversas especies marinas 
y para quien ama los deportes acuáticos y la naturaleza protegida, como en el caso del Golfo de los 
Poetas y las Cinco Tierras ó Cinqueterre 
La costa de Toscana centro-norte, en su mayor parte baja y arenosa, comprende la costa apuana, 
Versilia, el litoral pisano y la costa de los Etruscos, todas ellas objeto de un turismo vivaz y familiar 
que se remonta a los años 60. Bañadas por el mar de Liguria están también las islas del 
archipiélago toscano más conocidas: la isla de Elba y la isla de Capraia. 
Procediendo a lo largo de la costa del Tirreno, encontramos el litoral de la Maremma grossetana, 
de Lacio y de Campania, son casi todos ellos planos y de arena con distintas penínsulas rocosas, y 
alcanzan casi la parte frente a las islas Pontinas. 
Continuando a lo largo del Tirreno se abre el Golfo de Nápoles al que siguen la Costa Amalfitana y 
el Golfo de Salerno. El promontorio de Cilento prosigue casi completamente constituido por una 
costa alta y rocosa, hasta el estrecho de Messina, que divide Sicilia del continente. 
Las costas meridionales, bañadas por el mar Jónico, son muy parecidas a las del tramo del Tirreno: 
lineales y empinadas donde los Apeninos se acercan más al mar y uniformes prosiguiendo por 
Calabria, Basilicata y Apulia hacia el norte, en dirección a la desembocadura del Po. 
Con la excepción del promontorio del Monte Gargano y del Monte Cónero, los demás tramos del 
litoral bañado por el mar Adriático están formados por una larga franja arenosa y por los 
establecimientos de playa. 
La mayor isla italiana, Sicilia presenta costas montañosas y accidentadas en el tramo septentrional 
y oriental (Taormina), mientras que en la parte occidental y meridional (La Costa de Trapani y las 
Égadas) aparecen bajas y planas. 
Llena de reservas naturales y de belleza paisajística, Sicilia, sorprende por sus islas menores, meta 
de flujos turísticos provenientes de todo el mundo. 
Continuando en el Mar Tirreno encontramos Cerdeña. Su costa, con tramos de rocas y de arena 
(Costa Esmeralda), se caracteriza por los numerosos escollos, islotes e islas, las principales de las 
cuales son la isla de La Magdalena y Caprera. 
Deporte, diversión y relax se emparejan de maravilla con la idea de unas vacaciones en la montaña 
italiana, tanto en la nieve como durante el período estival. 
La mayor parte de las localidades de montaña italianas ofrecen numerosas oportunidades 
culturales y de actividades al aire libre tanto en invierno como en verano: esquí, alpinismo, 
snowboard, senderismo, caminata nórdica, mountain bike, etc., y son también muchas las ofertas 
de entretenimiento en óptimas estructuras donde se pueden practicar actividades como patinaje 
sobre hielo, natación, tenis, equitación y mucho más. 
LOS ALPES 
La gran cadena montañosa de Europa, precedida por las cumbres de los Prealpes, se alza en el 
extremo norte de Italia, defendiendo su confín geográfico. El imponente arco alpino afecta a 
diferentes regiones, desde Liguria al Valle de Aosta, el Piamonte, Lombardía, Trentino-Alto-Adige, 
Veneto o Friuli-Venezia-Giulia. . Pero decir turismo de nieve en Italia es decir turismo en los 
Dolomitas, el sector de los Alpes más bonito y más conocido internacionalmente. Bastará citar las 
estaciones, frecuentemente muy congestionadas, de Ortisei, Corvara y, muy especialmente, de 
Cortina d’Ampezzo. Dispone de muchísimas y prolongadas pistas, remontes, etc. y de 
equipamientos de todo tipo. Al norte de los Dolomitas aún sobresalen importantes estaciones, 
como Sesto Pusteria o Plan de Corones. 
 
LOS APENINOS 
Es el sistema montañoso que une las dos partes de Italia, de Liguria a Calabria, pasando por Emilia 
Romagña, Toscana, Umbría, Lacio, los Abruzos, Campania, Basilicata y Molise. Está formado por 
montañas de menor altura que las que se encuentran en los Alpes, pero también aquí se pueden 
encontrar estaciones de esquí de gran importancia, como Roccaraso,
Campo Felice y Rivisondoli. 
La riqueza de sus ríos y la densa vegetación crean paisajes salvajes de extrema belleza, donde 
encuentra hospitalidad una rica fauna. 
Un país lleno de lagos: de hecho, existen más de mil, famosos por su incomparable belleza y cada 
uno con características diferentes. El Lago de Garda, el Lago Mayor y el Lago de Como, 
actualmente conocidos en todo el mundo, se han convertido en la meta ideal para transcurrir 
algunos días al aire libre, en contacto directo con el sol y la naturaleza. 
 
Los lagos principales están perfectamente equipados y cuentan con instalaciones hoteleras. Las 
playas que se encuentran en las riberas permiten bañarse y están perfectamente equipadas. 
Además del relax, también se pueden practicar numerosas actividades al aire libre: deportes 
acuáticos, como el esquí acuático, la canoa, el windsurf, la vela y el buceo, pero también la pesca 
deportiva, con competiciones a nivel nacional. Además, se practican mucho el golf, la equitación y 
el mountain bike. Los lagos italianos presentan paisajes encantadores debido a la extraordinaria 
riqueza de los ecosistemas que se formaron a lo largo de milenios y al desarrollo de varias especies 
animales y vegetales. 
Los pequeños lagos alpinos, bastante frecuentes en alta montaña, son meta de excursiones 
emocionantes. Un microcosmos de emociones por explorar, siguiendo los instintos y las pasiones, 
probando sabores y oliendo perfumes. 
Los parques naturales de belleza pura representan un escenario excepcional para quien decide 
transcurrir unas vacaciones en Italia en estrecho contacto con la naturaleza. 
Son muchos los Parques Nacionales por descubrir: el Gran Paradiso, el Circeo, el Stelvio, los 
Dolomitas Belluneses, el Gran Sasso y los Montes de Laga, el Cilento y Vallo di Diano, el Gargano, 
los Parques de Calabria y del Aspromonte, sin olvidar el Archipiélago de la Maddalena y el 
Archipiélago Toscano, el Vesubio y las Cinco Tierras. Y, además, numerosas áreas naturales 
protegidas, reservas y parques marinos. 
Se puede vivir el mar en todas sus dimensiones: wind-surf, kite-surf, natación, vela y motor, esquí 
náutico, con el apoyo de los servicios operativos de los numerosos puertos y servicios para el 
turismo náutico. 
Hay infinitas posibilidades para los amantes de la montaña: en verano, senderismos y paseos a pie 
o a caballo, rafting y canoa por torrentes y rápidos, pesca en ríos y lagos de ricas aguas cristalinas, 
y parapente y ala delta disfrutando de paisajes únicos. En invierno, las montañas se transforman y 
se convierten en el paraíso para los que quieren practicar deportes de invierno. 
En cualquier momento del año, cualquiera que sea la preferencia, este país ofrece unas 
vacaciones sin igual para disfrutar del deporte: golf, ciclismo, ciclo-excursionismo, rafting, 
mountain bike, senderismo y cualquier deporte en plena naturaleza cuentan con un escenario 
ideal en Italia; escenarios para recorrer a caballo, a través de extraordinarios caminos. 
Además cuenta con diferentes destinos termales conocidos en todo el mundo: Saturnia, 
Montecatini, Bagno Vignoni, San Gimignano, Abano, Bormio, Salsomaggiore e Ischia, Trentino-Alto 
Adige, Umbría y Toscana. 
 
 
 
Ejemplo de Regiones y actividades turísticas. 
“El estudiante tendrá que identificar todas las Regiones, provincias que las componen y en que 
destinos se realiza la actividad.” Hay material en los PDF con imágenes 
 
LA REGIÓN DE TOSCANA 
La costa, que alterna playas de arena y zonas rocosas, así como las islas del Archipiélago Toscano 
ofrecen la oportunidad de vivir intensamente el mar conjugando relax, actividad física y deportes 
acuáticos: desde vela hasta el windsurf, desde la canoa hasta el buceo en fondos marinos 
conocidos por su belleza. 
Famosa por sus paisajes, Toscana es el lugar ideal para pasar unas vacaciones en la naturaleza: 
desde Garfagnana hasta Maremma, desde Casentino hasta Chianti, en cualquier parte se pueden 
hacer excursiones a pie, bicicleta de montaña y paseos a caballo, tal vez hospedándose en una 
casa rural. 
Las numerosas áreas protegidas encierran entornos excepcionales, como las cumbres de los Alpes 
Apuanos, la laguna di Orbetello y el Parque de la Maremma, dominados por el bosque 
mediterráneo. 
Increíbles rutas permiten descubrir los recursos mineros de la región, como el Parque Arqueo-
Minero de San Silvestro, que contiene la historia milenaria de la extracción llevada a cabo en las 
colinas Metalíferas a través de recorridos geológicos de las minas, mientras que en los Alpes 
Apuanos se pueden visitar las preciosas canteras de mármol blanco. 
Para una estancia en nombre del bienestar se puede acudir a una de las numerosas localidades 
termales, cada una de ellas con características únicas, como Saturnia, Montecatini o 
Monsummano Terme, famosa por sus curas desintoxicantes y del cuidado de la piel. 
 
 
REGIÓN DEL PIAMONTE Las provincias son: Turín (capital), Alessandria, Asti, Biella, Cuneo, 
Novara, Verbano-Cusio-Ossola y Vercelli. 
Es una región de la Italia noroccidental en la frontera con Suiza y Francia. 
Como su nombre indica, el Piamonte es la tierra de las montañas: está rodeada por los Alpes, 
donde están las montañas más altas y los glaciares más grandes de Italia. 
El Monviso, la parte del Piamonte del Monte Rosa y otras espectaculares montañas, ofrecen 
paisajes de singular belleza. También se encuentran aquí numerosas estaciones de esquí, como la 
Vía Láctea y Sestriere, que, con sus modernas instalaciones, acogen a los entusiastas de los 
deportes de invierno. 
Con el telón de fondo de los Alpes, se abren grandes valles amplios y pintorescos, incluyendo el de 
Val di Susa, Valsesia y Val d'Ossola. 
Muy diferente pero igualmente digno de mención es el paisaje de las colinas de Langhe y 
Monferrato: una cadena de colinas cubiertas de viñedos, salpicados de pequeños pueblos y 
castillos. 
Lagos y campos de arroz con largas filas de álamos y antiguas granjas son los escenarios típicos de 
las llanuras que se extienden en Novara y Vercelli. 
Un destino turístico por excelencia es el Lago Mayor, con Stresa y la islas Borromeo, encantadores 
paisajes que son el hogar de hermosas casas antiguas rodeadas de parques que recuerdan el más 
puro estilo inglés. 
SICILIA 
 Es la isla más grande de Italia, separada del continente por el estrecho de Messina y bañada por el 
Mar Jónico, el mar Tirreno y el Mediterráneo. 
Es una de las joyas del sur de Italia, que se puede descubrir, conocer y vivir a través de una serie 
de rutas alternativas que, dependiendo de los gustos y necesidades, se pueden desarrollar a 
través de la naturaleza, la historia o la tradición. 
La naturaleza parece haber destinado a esta tierra todas sus maravillas: montañas, colinas y, 
especialmente, el mar, que con sus increíbles colores, la transparencia del agua y la belleza de sus 
fondos marinos. 
En esta tierra, el Mediterráneo ofrece escenarios, olores y sabores únicos e intensos que sólo una 
naturaleza incontaminada es capaz de ofrecer. Un ejemplo de ello son las islas que rodean Sicilia: 
Lípari, Egadas, Pelagias, Pantelleria y Ustica. Sin olvidar de sus volcanes, símbolos de su naturaleza 
exuberante, algunos de los cuales en activo, como el Etna y el de Strómboli. 
La Isla ofrece una multitud de lugares que visitar que alternan naturaleza, historia y tradición, 
entre las peculiaridades del territorio destacan los volcanes, como el Etna, el volcán activo más 
grande de Europa, está situado al este de Sicilia y es una de las etapas esenciales para descubrir 
esta tierra. Sus espectaculares erupciones han creado a lo largo de los siglos paisajes únicos en el 
mundo. Posee entre sus paisaje áreas protegidas del Etna, de Madonia o del Nebrodi, el paraíso 
vulcánico de Pantaleria, rodeado de rincones encantados, como los que se pueden admirar en 
Pertusa di Notaro
(gruta que emite aire fresco) o por los característicos dammusi (típicas 
construcciones de piedra lávica). 
El Valle del Bove, con sus altos muros de hasta 1000 m., la Gruta del Gelo, con el único ejemplo de 
glaciar perenne existente a estas latitudes, las Gargantas de Alcántara, una densa red de canales 
de rocas atravesadas por las aguas frías del río del mismo nombre, son algunas de las maravillas 
que se pueden admirar visitando este gigante de la naturaleza. 
Las islas de los alrededores de Sicilia son muchas y fascinantes, pero una mención aparte la 
merecen las Islas Lípari (también llamadas islas Eolias) introducidas en el año 2000 en la Lista del 
Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO. El archipiélago de las Lípari está formado por 7 islas 
(Lípari, Vulcano, Strómboli, Salina, Filicudi, Alicudi y Panarea) y por una serie de islotes y rocas de 
diversos tamaños. 
La historia está indisolublemente ligada a los volcanes, los verdaderos artífices de estas hermosas 
obras de la naturaleza, donde es posible sumergirse en el profundo mar azul, realizar excursiones 
en las grutas dispersas a lo largo de la costa o relajarse en las pequeñas playas bañadas por las 
aguas cristalinas, sazonando todo con una buena gastronomía local a base de pescado. 
Desde siempre, Italia ha sido considerada una de las metas más deseadas por los amantes de los 
tratamientos termales, una forma de medicina natural que existe en Italia desde los tiempos de los 
antiguos romanos. Tierra de agua y volcanes, Sicilia ofrece una amplia posibilidad de elección para 
los que quieren recuperarse del estrés de la vida cotidiana, regenerándose con tratamientos 
terapéuticos y, por qué no, también de belleza. Entre los más conocidos está Sciacca, con las 
famosas Stufe de San Calogero, grutas con una gran cantidad de vapor que alcanzan una 
temperatura de 40°C, o las termas de Acireale, donde las aguas subterráneas del mar se mezclan 
con las sulfurosas del Etna.

Continuar navegando