ENSAYO CRÍTICO GENESIS

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ENSAYO CRÍTICO
Para analizar la realidad política nacional se efectuaron las dos lecturas digitales recomendadas, por un lado se leyó la publicación “Un análisis de la Venezuela más allá de los lugares comunes” escrito por Decio Machado, para un portal internacional, mientras que el otro documento “Los Socialistas y la lucha en Venezuela”, se trata de una entrevista concedida por Gonzalo Gómez a la periodista Eva María del portal socialistworker.org. Ambos documentos en el tiempo se encuentran ubicados en el año 2019. En los días posteriores a la autoproclamación del Diputado Juan Guiado como “presidente interino” de la República Bolivariana de Venezuela. 
Para formarse una idea objetiva del país en el que vivimos es necesario informarse a partir de fuentes dignas de todo crédito, ya que generalmente los medios de comunicación y las páginas en internet o sociales tienen una tendencia determinada, a la que abiertamente apoyan de forma excesivamente parcializada, por lo tanto no hay equilibrio en la información. Es por eso que unos medios son totalmente oficialistas y otros ciento por ciento opositoras, que se escluyen mutuamente. Al respecto, las fuentes recomendadas para nutrir el presente ensayo, una es de procedencia internacional con tendencia opositora, mientras en la otra, se hace una entrevista a un militante socialista, adversario al gobierno, pero contrario a la injerencia extranjera y defensor de la soberanía nacional. 
Comienza (Machado 2019), que producto de los acuerdos de rotación para la Presidencia de la Asamblea Nacional (AN), le tocó el turno al partido Voluntad Popular. En esa ocasión, ese partido hizo la escogencia del Diputado Juan Guaidó para que asumiera las riendas del parlamento. Resulta que 20 días después, el Presidente de la AN, en una plaza del este caraqueño, se autoproclamó como presidente interino de Venezuela. Obviamente, que se trató de un plan diseñado desde el exterior, porque inmediatamente fue reconocido por el Presidente de los EE UU de ese entonces y por el Secretario General de la OEA, seguido de varios Presidentes latinoamericanos de la misma corriente ideológica, además de la Unión Europea. 
Cabe destacar, que desde el año 2016 la AN había sido declarada en desacato por no aceptar una sentencia relativa a la repetición de las elecciones parlamentarias del 2015, en el estado Amazonas, por la presunta compra de votos. La situación política en ese momento era efervescente. Guaidó durante un tiempo logró lo que nunca pudieron hacer Ramos Allup, Capriles, Borges y otros: aglutinar a la oposición en solo bloque. Mientras tanto, Nicolás Maduro continuaba despachando en Miraflores, firmaba los decretos; y era a él, a quien se le paraban firme los militares. 
En ese contexto, afirma Gonzalo Gómez, teníamos un Presidente que la mayoría del pueblo no lo quería y otro interino, al que nadie conocía, ni habían votado por él. Este escenario trajo consigo profundos efectos para la vida de los venezolanos, ya que el acontecer político influye directamente sobre lo económico. Venezuela fue aislada por los cuatro costados, Brasil, Colombia, las islas del caribe, y posteriormente con la creación del Grupo de Lima, tratando de asfixiar al gobierno, estimulando con esto las condiciones para conformar una atmosfera insostenible en todo el territorio nacional. 
De acuerdo a lo planteado por (Machado 2019), la oposición fijó una ruta de trabajo para salir de Maduro, que descansaba en cuatro pilares: en lo internacional solicitar la intervención extranjera y recrudecer en todo tipo de sanciones y bloqueos contra el gobierno, sin importarle que, el gran afectado era el pueblo llano y sencillo< fue el momento en que se bloquearon las cuentas de PDVSA y los activos de Venezuela en el exterior pasaron a manos de la oposición En todo caso lo que se buscaba era inducir al malestar en la población, para que sea ella misma la que derroque al gobierno. 
En cuanto a la injerencia extranjera, como segundo pilat, no solo fue de origen gringo, sino que países tan importantes como Rusia y China tuvieron que ver con el conflicto en Venezuela, en su momento más álgido. Rusia proveyó al gobierno de Maduro armas por más de 17 mil millones de dólares tratando de persuadir una posible intervención. Aunque en amplios sectores del Pentágono y Departamento de Estado Norteamericano, no querían la invasión por el largo tiempo que estas acciones implican, los gastos que acarrea, y por el dolor de cabeza que suponía crear un polvorín en una región tan cercana a ellos, había sectores opositores que clamaban por la invasión. Entonces, en el norte pensaron que la invasión la realizaría Colombia y Brasil, apoyados por el Grupo de Lima, pero el armamento que facilitó Rusia sirvió como elemento de disuasión, porque elevó el poder de fuego de Venezuela. Con respecto a China, se trató un apoyo económico basado en la visión neo colonialista de la nación asiática, ya que no podían dejar escapar tan fácilmente un aliado, con todas las ventajas estratégicas que supone Venezuela. 
Continúa el documento de Machado, explicando que la idea de la oposición a lo interno del país era la deslegitimación del gobierno, presentarlo como un gobierno fallido. En lo económico promovió la profundización de las sanciones, bloqueos, o la incautación de las reservas de oro en el Reino Unido, o sino el cambio de manos de activos como CITGO en EE UU y de Monómeros en Colombia. 
Es el momento de la hiperinflación y la devaluación diaria del signo monetario. En el 2018, el gobierno puso en marcha una segunda reconversión de la moneda, que apenas duró tres años, porque la inflación se la comió totalmente. No solo inflación sino también una brutal escasez en los productos de primera necesidad, en los anaqueles no se encontraban productos como la harina precocida o de trigo, pastas, arroz, leche, mantequillas, cereales, salsas, aceites, mayonesas o enlatados; y otros más. En esos días, la población venezolana sobrevivió gracias al consumo de yuca, masa de maíz o verduras. Según el FMI, el índice de precios al consumidor se elevó a más de un millón por ciento en el año 2019, aunque cifras oficiales la ubican en más de diez mil por ciento, sea como sea, el dato es ensordecedor y por si solo comunica las penurias que vivió la población venezolana en esos tiempos. 
Como salida el gobierno acepto el dialogo auspiciado por México, Uruguay, el Reino de Noruega y el Vaticano, en República Dominicana. Se dice que la oposición se retiró de la mesa de negociaciones, porque considero que el gobierno con el dialogo buscaba oxígeno para sobrevivir, otros aseguran que se debió a órdenes del Departamento de Estado de EE UU. Como quiera que sea fue un tiempo perdido, donde el más perjudicado es la población, ya que gobierno y oposición siguieron disfrutando de todas sus prebendas. 
En ese contexto, apunta Gonzalo Gómez, el gobierno de Maduro empezó a consolidarse, dado los continuos errores de la oposición. Aunque el proceso empezó antes, a partir de febrero y marzo del 2019, con el estrepitoso fracaso de la entrada de la ayuda humanitaria y la profunda frustración del concierto en Cúcuta, entonces la figura de Guaidó inicio un lento pero persistente proceso lleno de desilusión y desengaño. La recuperación de Maduro comenzó con un cambio en su orientación económica, la cual día a día lo aleja del socialismo. En ese proceso, el gobierno y la boliburguesia como sustento económico, se alía con la burguesía tradicional. O sea, poderosos grupos económicos como la Polar, Mavesa, Coposa, entre otros, reinician la producción de bienes y servicios; y los anaqueles vuelven a aparecer los productos.
A la par de la recuperación económica, florece la corrupción como elemento degradante del proceso. Ambos artículos coinciden en este aspecto, tanto el gobierno como la oposición son las ambas caras de la misma moneda, al momento de saquear el erario publico. Desde diferentes cúpulas, la corrupción se fue anidando como un modo de vida fácil, por un ladoestán los contratos, los acuerdos, formas diversas de robar, la venta de divisas, alcabalas, matraquerias; o sino las ayudas humanitarias desde las ONG extranjeras o la bancarrota de monómeros, que en su conjunto conforman una red de corrupción, que se hacen falta mutuamente 
Actualmente: enero del 2023, la figura de Guaidó es parte de la historia y en Miraflores, el que sigue despachando es Nicolás Maduro. Pero el pueblo sigue sufriendo los estragos de la inflación, aunque con manos intensidad que antes, el gran problema ahora son los bajos salarios que según algunos especialistas, son considerados los más bajos del mundo, asimismo persiste una economía que es regida desde paginas virtuales como dólar today o dólar monitor que hacen lo que quieren con nuestra moneda oficial. De la misma manera permanecen las sanciones y cercos financieros, pero con cierta apertura, como es el caso de Chevron y Repsol en materia petrolera. Lo diferente al 2019, es que la situación con respecto a los gobiernos vecinos se ha tornado distinta con mandatarios afines a la ideología del Presidente Maduro, como Lula y Petro como Presidentes
Finalmente, y coincidiendo con las dos publicaciones estudiadas, la salida sigue siendo el dialogo entre las partes. Un dialogo entre el gobierno y la oposición, pero que involucre a los EE UU, ya que como afirma Gonzalo Gómez en su entrevista, la oposición venezolana es tutelada desde la potencia nombrada.