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Ensenanza Basada en los Conceptos

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―Cuando falta el pensamiento conceptual, 
la imaginación desaparece‖ 
-Lev S. Vygotski 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
2018 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
D.R. Alejandro Armando Anaya Hernández® 
Diseño de Portada: L.D.G. Amed Martínez Ojesto 
Edición: Alejandro Armando Anaya. 
Editado en México. 
1ra. Edición Impresa. 2018 
Quedan rigurosamente prohibidas, sin la autorización escrita del autor, 
bajo las sanciones establecidas en las leyes, la reproducción total o parcial 
de esta obra, por cualquier medio o procedimiento, comprendida la 
reprografía y el tratamiento informático y la distribución de ejemplares de 
ella, mediante alquiler o préstamo públicos. 
Colección Cuadernillos Didácticos del Fútbol Formativo 
ISBN de la Colección. 978-607-00-9026-4 
ISBN Edición Impresa. 
 
 
 
INDICE GENERAL 
Introducción 
¿Cuál es la historia de los conceptos tácticos? 
¿Qué importancia tiene una formación basada en 
conceptos? 
¿Cuáles son los beneficios de un modelo de formación 
basado en el pensamiento conceptual? 
¿Qué importancia han tenido los conceptos en los 
entrenadores? 
¿Podría existir en poco tiempo una metodología de 
enseñanza futbolística basada en conceptos? 
¿Qué ha pasado hasta ahora cuando se pretende formar a un 
jugador de un modo y otro? 
Diferencias entre situaciones futbolísticas y conceptos 
¿Existirá en los próximos años un entrenador conceptual? 
Los conceptos de juego 
Acción- reacción 
Actuar en Trayectoria 
Activar al compañero. 
Achique. Véase reducción de espacios. 
Adelantar líneas 
Agrandar (sobrarse) 
Alargar 
Alineación como factor táctico y formativo 
Alternativas de Ataque 
Análisis y Lectura de partidos 
Amplitud 
Análisis Funcional. 
Análisis Posicional Estructural. 
Ángulos de soporte. 
Anti fundamentos. 
Anti fundamentos Ofensivos. 
Anti fundamentos defensivos 
Anti fundamentos combinados o mixtos (tanto en fase 
ofensiva como en defensiva) 
Apoyo. 
Aprendizaje por Descubrimiento. 
Árbol de Navidad 
Armado en ataque. 
Ataque de espacios 
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33 
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35 
35 
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45 
45 
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Ataque a la presión 
Ataque Zonal 
Atracción (atraer para soltar) 
Atraer punta rival. 
Autopase 
Basculaciones 
Betón 
Bitácora de Juego 
Botarse 
Calentamiento 
Calidad táctica (Excelencia táctica) 
Combatir 
Competitivo, ser. 
Capitán del equipo, aspectos tácticos. 
Carril de progresión. 
Cierre de ángulos o líneas de Pase 
Concept Football 
Conocimiento Táctico 
Corte de Pared 
Creación de ángulos o líneas de pase 
Centro delantero, aspectos tácticos 
Cinco contra cinco. 
Cinco contra tres. 
Cobertura 
Comprimir para liberar. Véase espacios tácticos. 
Consignas 
Contra anticipo 
Contra ataque 
Contragolpe 
Concentración, aspecto táctico 
Concentración, aspecto conductual 
Control 
Cues (claves o pistas) 
Cultura Táctica 
Cuarta línea. 
Cuarto Hombre. 
Defender con pelota 
Defensa Articulada a Profundidad 
Defensa lateral 
Densidad. 
Derivar 
Descomposición de la última línea de defensa 
Desdoblamientos 
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70 
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74 
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Desmarque 
Destreza 
Determinar la dirección del juego ofensivo del contrario. 
Dimensiones de la Acción Motriz 
Distancia de enfrentamiento motor 
Distancias de relación. 
Diversificación Motivante 
Dividir al punta. 
Doble Presión 
Doce contra seis con comodines 
Emparejar 
Enfoque 
Enfrentamientos Individuales (uno vs uno) 
Enganche 
Equilibrio 
Equilibrio Previsor 
Entradas o finalizaciones (con arco) 
Estrategia 
Espacios Reducidos 
Espacios tácticos o de Juego 
Evoluciones 
Extremo 
Excelencia Táctica (véase calidad táctica) 
Factor Rush 
Fases del Juego 
Fijar 
Fluidez posicional 
Formas de ataque y defensa (transiciones) 
Fuga Táctica 
Fundamentos Tácticos Individuales. Conceptos tácticos 
individuales. Véase también principios técnico tácticos. 
Elementos Conceptuales que conforman los fundamentos 
tácticos individuales. 
Ganar el Frente 
Ganar las esquinas. 
Gegenpressing, presión tras la pérdida. 
Generar contextos 
Geometrizaciones sin arco (rondos) 
Habilidad 
Handicap táctico 
Inteligencia Táctica 
Integración de líneas 
Invitar a la salida 
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109 
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114 
114 
Impar (Asimetrías) 
Improvisación 
Índice de Calidad Futbolística 
Juegos Simplificados 
Juego Zonal 
Jugar con el último defensa 
Juego de posición 
Juegos Menores 
Juegos Tácticos Menores 
Lateralizar al central. 
Lectura táctica del juego. 
Lectura física del juego 
Lectura psicológica del juego 
Línea de Presión 
Línea Principal de Resistencia 
Línea de tres. 
Limpiar el juego. 
Manejo de intención 
Mapa de calor 
Marcaje 
Marcaje de Presencia 
Marcar en ataque 
Marcar el pase 
Meterse en la trayectoria 
Modelo de Juego 
Modulaciones Tácticas 
Movilidad (aspecto táctico) Véase Rotaciones. 
Neutralizar 
Ocupación de posiciones intermedias defensivas. 
Once contra siete. 
Opciones de ruptura. 
Organización defensiva. Véase marcaje. 
Paralela. 
Paredes 
Partido Aplicado - reglado 
Pase (aspectos tácticos) 
Pase al hueco 
Pase a la red 
Pase entre líneas 
Patrón de Juego – Morfociclo Patrón 
Pedagogía Integrada/Modelo Comprensivo 
Penetración 
Perceptivo Decisional 
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Perfilado Ofensivo 
Perfiles, manejo de 
Pericia Deportiva 
Periodización Táctica 
Pilares de los equipos eficientes y eficaces. 
Plataforma de Contra Ataque 
Portero (aspectos tácticos) 
Posesión del Balón 
Posesión Direccionada 
Premeditación 
Pressing 
Principios técnico - tácticos 
Profundo Intermedio 
Propensiones, Principio de. 
Principios generales 
Proceso formativo 
Profundidad 
Punta cercano 
Punta de lanza. 
Rebotero 
Recibir girado 
Reciprocidad adquirida en el juego. 
Reconversión 
Reducción de Espacios. Achique. 
Regista 
Regla de los diez minutos 
Relevos por eliminación 
Relevos por eliminación total 
Referencia de marca 
Referencia de ataque 
Relación con alejados 
Remate por Incorporación 
Remate por Ocupación 
Respetar el movimiento 
Retardo 
Retracción 
Rotaciones. Véase Movilidad. 
Rúbrica Deportiva 
Saltar líneas, véase relación con alejados. 
Seis contra seis más seis. 
Siete contra Siete 
Siete contra once. 
Sistemas de juego. 
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171 
171 
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Elementos que componen un sistema de juego. 
Clasificación de los sistemas de juego 
Fundamento técnico – tácticos de los sistemas de juego: 
¿Cómo diseñar el sistema de juego? 
Situación Simuladora Preferencial 
Sorpresa, factor 
Superioridad activa. 
Superioridad Numérica 
Superioridad Posicional 
Táctica 
Táctica Fija 
Tipos de jugadas a balón parado. 
Observaciones tácticas durante las ABP 
Saque inicial a favor. 
Saques de banda a favor. 
Saque de meta a favor. 
Tiros de esquina a favor. 
Tiros libres a favor 
Tiro Penal a favor. 
Saque inicial en contra. 
Saque da banda en contra 
Tiros de esquina en contra. 
Tiro Penal en contra.Tiros de Esquina en contra. 
Tiros libres en contra. 
Formación de la barrera 
Táctica Individual 
Tapar o vigilar el segundo plano. 
Tarea de entrenamiento. 
Características de las tareas de entrenamiento. 
Tercer hombre. 
Terminar la jugada. 
Tiempo de Estudio. Véase tiempo táctico. 
Tiempo táctico 
Tiro Centro 
Tocar y romper 
Trescuartista 
Triangulaciones 
Trivote 
Tres contra Tres 
Tres contra uno. 
Tres contra cinco. 
Transferencia. 
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211 
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212 
213 
213 
Tipos de ataque 
Tipos de defensa 
Umbral de calidad 
Uno contra tres. 
Variantes tácticas 
Variantes aplicativas 
Velocidad de aproximación 
Versatilidad Táctica. 
Verrou 
Volante Box to Box 
Volumen de juego 
Zona 14. 
Zona Fuerte y Zona Débil 
Conclusiones 
Referencias 
Anexos 
Enseñanza basada en conceptos 
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213 
214 
214 
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Introducción 
Este libro es una primera aproximación heurística sobre la enseñanza del 
fútbol empleando pensamiento conceptual. Pero ¿A qué nos referimos 
cuando le llamamos heurística? A un método de investigación que ayuda 
a identificar estrategias para resolver problemas concretos de forma 
creativa. 
Por lo tanto, pretende alcanzar dos cometidos importantes: por una parte 
rescatar los antiguos conceptos tácticos del fútbol y explicarlos de una 
forma sencilla, ilustrativa y anecdótica, pues aunque no se crea, siguen 
cohabitando en los campos de fútbol, y por otra, revelar de manera breve 
pero muy bien fundamentada, los conceptos de vanguardia más recientes. 
Cualquier club o Centro de Formación que se ocupe por explicar y 
aplicar en cancha este tipo de conceptos tendrá una identidad propia, 
alcanzará mejores niveles de desempeño y estará contribuyendo 
cualitativamente en el bagaje futbolístico de sus planteles en formación. 
Recordemos las palabras del profesor Lorenzo Buenaventura (preparador 
físico español que ha trabajado gran parte de su carrera con Pep 
Guardiola): hay personas que piensan que el fútbol es un juego y hay 
quien lo considera una actividad que debe medirse todo; es decir la eterna 
disputa entre lo cualitativo y lo cuantitativo. 
Consta de 240 páginas con información acerca del área táctica para el 
fútbol formativo. Se compone de 111 elementos conceptuales y 230 
términos relacionados con el trabajo cotidiano del entrenador. Cabe 
mencionar que han pasado los años y aún no contábamos en México con 
un material que tratara sobre el pensamiento conceptual y aclarara cada 
uno de los conceptos tácticos para ir conformando con ellos un cuerpo de 
conocimientos emanado de lo nacional, ya que casi siempre lo que leemos 
viene de otro país y a muchos formadores le cuesta mucho comprender su 
significado. 
Hoy en día se está hablando de un pensamiento complejo y por eso para 
ser entrenador se debe estar preparado en varios aspectos de nuestra 
actividad que vayan más allá de saber correr detrás del balón, ver muchos 
vídeos en Internet o leer libros biográficos de personajes estelares. De 
hecho no todas las personas que jugaron al fútbol profesionalmente 
entienden o saben qué significan todos estos conceptos que alguna vez les 
pidieron sus entrenadores que pusieran en práctica en un partido o 
entrenamiento, pero tampoco se han preocupado por darle argumento a su 
saber práctico. 
 Mientras no haya más materiales de apoyo como estos, cada entrenador 
seguirá definiendo y explicando sus conceptos de forma distinta. Aquí 
vale la pena recordar las palabras del profesor Argentino Geronazzo 
cuando señalaba que ―los técnicos (…) cuentan con muy pocos elementos 
bibliográficos como guía y por eso la profesión del entrenador, entre 
nosotros, está todavía en pañales‖. Acordémonos también del gran César 
Luis Menotti cuando opina que ―una cosa es jugar a la pelota y otra al 
fútbol‖. 
Este libro no consiste en haberse inventado metodologías de la nada o 
nuevos términos deportivos, futbolísticos o tácticos. Tampoco tiene como 
propósito bautizar a las cosas que cotidianamente hacemos en los 
entrenamientos para ahora reunirlas en un material con nombres 
rimbombantes; copiarlos con tal de vernos "in". Mucho menos consistió 
en poner "nuevos" significados a las palabras, porque simplemente éstas 
ya los tienen (solo es cosa de recurrir al diccionario y no a un libro de 
conceptos sobre táctica). 
El modelo pedagógico propuesto es un conjunto de conceptos destinados 
a representar de forma global los aspectos lógicos de los diferentes tipos 
de elementos existentes en la realidad del juego. Es una representación de 
una experiencia empírica y una búsqueda tenaz, que tiene como objetivo 
ayudar a comprender mejor la importancia de manejar conceptos. Son 
marcos o estructuras que representan la realidad, pero no son la realidad 
sino su abstracción. 
Sirva el presente documento como un reconocimiento a todos esos héroes 
anónimos que todos los días se levantan y acuden a las canchas para 
compartir a sus jugadores y buscar junto con ellos el tan anhelo sueño de 
ser alguien en la vida. 
Esta colección de cuadernillos didácticos está dedicada a ese gigante 
dormido que se llama fútbol formativo de México. Es decir, aquella 
modalidad del deporte de las patadas que incluye: el que practican las 
personas con capacidades diferentes (futbol adaptado), el de la tercera 
edad, el que sirve como terapia ocupacional, el que llega a las 
comunidades indígenas más olvidadas, el que practican cada fin de 
semana los obreros, campesinos, pescadores, etc. Dedicado no solo a la 
etapa de iniciación o juvenil. 
Este cuadernillo didáctico, ha sido producto de muchos años de 
experiencia y horas de investigación. Reflejan muy atinadamente la 
manera de entender los conceptos del autor con respecto a la formación 
en el fútbol asociación. Pone en estas páginas, las ideas que considera que 
son lo mejor para una adecuada formación basada en conceptos. Explica 
(como ya lo dijimos) lo que para muchos es incomprensible y lo hace de 
fácil digestión mediante un lenguaje simple y resumido que se refleja a 
medida que el lector va avanzando en su contenido. 
¿Cuál es la historia de los conceptos tácticos? 
Pocas personas se imaginan lo difícil que era para un entrenador de fútbol 
(todavía a finales del siglo XX) adquirir materiales especializados que le 
permitieran actualizarse, acceder a nuevos conocimientos, reafirmar el 
camino trazado o reconocer lo que están haciendo y pensando sus pares al 
otro lado de la acera. 
Partiendo de la idea de que con el paso del tiempo cada actividad en 
particular va generando su propio lenguaje tanto por factores geográficos 
(dialectos o geolectos), como por factores sociales (sociolectos) o etarios 
(cronolectos), algunos autores advierten que es el tecnolecto el sistema de 
comunicación que se refiere a las palabras y locuciones propias del 
lenguaje técnico de una jerga en particular. Aquí es donde el deporte en 
general y el fútbol en particular, va generando sus propios espacios 
léxicos y códigos de comprensión para la técnica, para la parte física, la 
parte mental y en este caso, para la parte táctica. 
 
 
 
 
Ejemplos de uso: 
Denominación 
 
Uso Correspondencia 
Geolecto/Dialecto 
Variante 
geográfica de una 
lengua asociada. 
Lengua: Náhuatl Dialectos: náhuatl de la sierra 
norte de Puebla, del centro del 
país, del sur de Veracruz, etc. 
Cronolecto 
Variante de un 
idioma empleado 
por personas de un 
grupo de edad. 
Palabra: trolear Término empleado por la 
juventud para referirse a 
alguien que ha estado vacilando 
o incomodando.Sociolecto 
Variante de una 
palabra empleando 
el mismo idioma. 
Palabra: Niño Variaciones: chamo, chaval, 
morro, pibe, etc. 
Tecnolecto 
Lenguaje o 
palabras empleadas 
por personas de un 
mismo ámbito 
profesional. Jerga o 
tecnicismo. 
Tecnicismo: 
bascular (véase 
p. 37) 
Variaciones: recorrer, pendular, 
desplazamientos defensivos, 
abanicos defensivos, etc. 
 
Hay que recordar que esta jerga, argot, terminología o tecnolecto del que 
nos estamos refiriendo generalmente viene acuñada desde su país de 
origen, o al menos de aquél en el que adquiere más desarrollo. En el caso 
del fútbol, prácticamente todos los nombres de las posiciones, las zonas 
de la cancha, los movimientos tácticos. etc. vinieron del idioma inglés. 
De ese modo es como los conceptos futbolísticos llegan a México e 
irrumpen desde la época del Porfiriato con la irrupción de los primeros 
ingenieros británicos que en sus años escolares, habían jugado football y 
quizás se tuvieron que aprender tanto las reglas como la jerga básica que 
lo caracterizaba y diferenciaba de otros deportes como el rugby. 
Por otra parte, existen algunos antecedentes históricos acerca de la 
publicación de libros que tratan el tema de los conceptos táctico – 
estratégicos en idioma español. Por ejemplo, en el año 1953 la editorial 
La Nueva España publica en Oviedo El Fútbol con método de Jesús 
Barrio Álvarez, mientras que en 1954 salía a la venta La táctica en el 
fútbol moderno de J. García del Ramo bajo el sello de editorial Sintes de 
Barcelona. En ese libro se explicaba entre otras cosas cómo podríamos 
anular a Kubala jugando limpio y con toda deportividad. En 1957 
Alejandro Scopelli publica los libros Hola míster y El fútbol por dentro 
con la editorial Juventud de España. En 1965 Fútbol estrategia y 
desmarque de la WM editado por Sintes y escrito por el profesor J. García 
del Ramo. En 1966 la editorial Jorge Álvarez publica en Argentina uno de 
los primeros libros especializados en táctica y estrategia escrito por 
Osvaldo Zubeldía y Argentino Geronazzo. Muchos periodistas lo han 
considerado como ―La Biblia del Fútbol‖ o el que comenzó con la 
transformación del fútbol argentino. 
Posteriormente vino la época de escuchar hablar por la radio y ver jugar 
por la televisión a muchos grandes futbolistas y entrenadores españoles, 
argentinos, italianos brasileños e incluso serbios, alemanes o suecos. 
En nuestro país encontramos a don Julio Mera Carrasco como uno de los 
autores – entrenadores más productivos en cuanto a libros de fútbol para 
entrenadores: en 1973 publicó con la editorial Diana Cómo mejorar su 
fútbol y entre 1974 y 1975 puso a la venta con la editorial Editores 
Mexicanos Unidos, Fútbol Amateur, Fútbol, el arte de jugar, Fútbol, 
método de preparación físico atlética, Cómo hacer goles, Fútbol 100 
estudios técnicos y El libro del espectador. 
Todavía hasta hace algunas décadas, acceder a información reciente, en 
idioma español y de calidad comprobada era algo muy complicado. Por 
ejemplo a mediados de los años ochenta, obtener unas copias fotostáticas 
de un libro de fútbol (ni pensar en un ejemplar nuevo impreso) se 
convertía en una odisea en un país que en esa época no estaba tan abierto 
a la globalización como hoy. Había que ir a las bibliotecas de las escuelas 
de Educación Física o Entrenamiento deportivo y ―buscar una aguja en un 
pajar‖. 
Existía también un banco de datos dirigido por el Consejo Nacional de 
Ciencia y Tecnología (CONACYT) que era operado en las principales 
universidades del país llamado Servicios de Consulta a Bancos de 
Información (SECOBI) en el que se pagaba un arancel por usarlo, se 
anotaban en un formato las palabras clave para la búsqueda y pasados 
algunos días los usuarios volvían para recoger los resultados: cientos de 
hojas impresas con muy poca información realmente relevante. Eran los 
últimos días del fax y los comienzos del World Wide Web. 
¿Qué importancia tiene una formación basada en conceptos? 
Una de las causas invisibles que más ha atrasado el desarrollo de nuestro 
fútbol fue el desfase que ocurrió entre la teoría y la práctica. Haber dejado 
que la enseñanza del fútbol fuera a un ritmo y el acceso a materiales de 
capacitación deportiva avanzara a otro, provocó lo que estamos viviendo 
ahora: un país que en materia de formación lectora futbolística está 
tristemente anticuado y es profundamente dependiente de las influencias 
de otros países. 
Hoy más que nunca los conceptos futbolísticos coexisten con el mercado 
y se ponen de moda por épocas: hace muchos años se leía en los 
periódicos deportivos que el extremo había incursionado por el entrevero; 
otras veces se habló en las primeras transmisiones radiofónicas de jugar 
por el lado ciego o se mencionó en algún programa televisivo en blanco y 
negro que tal equipo cuenta con una masa central compacta en el medio 
terreno y un frágil sistema de ataque en la delantera. Ya en las 
postrimerías del siglo XX se declaraba en las conferencias de prensa que 
nos faltó volumen de juego. Así que han habido ocasiones donde para 
explicar lo que pasa en el fútbol se usaban términos militares, otras 
apoyándose de la retórica y algunas más de asuntos de cartera y 
banalidad. 
Los conceptos son ―representaciones mentales que tenemos de las 
acciones, situaciones, objetos y sujetos‖. Un concepto también se puede 
definir como ―una unidad de pensamiento, generada mediante la 
agrupación de objetos individuales relacionados entre sí por 
características comunes‖. Son del mismo modo ―las denominaciones 
lingüísticas que le damos a los términos‖. Obedecen a una finalidad 
práctica de la acción con respecto a sus fines concretos de utilidad. Por lo 
tanto el pensamiento conceptual es la utilización del razonamiento 
creativo aplicado a conceptos existentes o para definir conceptos nuevos. 
Pensamiento conceptual, es comprender una situación o problema 
armando las partes a fin de establecer la totalidad. Incluye 1) la 
identificación de patrones o conexiones entre situaciones y 2) la 
identificación de los elementos clave que subyacen en situaciones 
complejas. El pensamiento conceptual implica formas de pensar que 
incluyen la resolución de problemas, el análisis de la situación, el 
desarrollo de nuevas ideas y la reflexión sobre las experiencias del pasado 
y del presente. 
En otras palabras lo que se ha de definir, lo que explica cómo funciona, 
cómo se hace o qué lo caracteriza, no es el término, sino el objeto o idea 
en cuestión, y más concretamente su representación conceptual. Por eso 
decimos que un conjunto de conceptos forman una terminología. 
Así pues, una cosa es conceptualizar o sea darle nombre o bautizar a las 
cosas que se hacen para que todo mundo sepa cómo llamarles y otra es 
definir un concepto. Cuando hablamos de concepto nos referimos a una 
idea que concibe o forma entendimiento, es decir imágenes mentales 
capturadas o retenidas en la mente, que explican o resumen experiencias, 
razonamientos o imaginación, las cuales emergen de la interacción con 
nuestro entorno. Cuando nos referimos a una definición hablamos de una 
proposición mediante la cual se trata de exponer de manera universal y 
con precisión, la comprensión de una idea, término o dicción, así como de 
una expresión o locución. Por lo tanto, la definición es una descripción 
precisa y en cambio el concepto es un juicio, una opinión o idea más 
global y sin precisar. 
Por eso se dice que todo tiene una definición y un nombre: por ejemplo 
todos los entrenadores saben que cuando un jugador conduce el balón lo 
puede hacer con varias intenciones: 1) enfrentar al portero, 2) desbordar y 
dar profundidad o 3) crearse un espacio y atraer oponentes. Estamos 
hablando de una acción técnica en la que pueden aplicarse distintos 
conceptos de juego: 1) encarar, 2) desbordar y 3) fijar. Así es como unasituación de juego va necesitando una acción técnica y ésta a su vez, va 
haciendo uso de los principios de la táctica individual, es decir aplicando 
conceptos. 
¿Cuáles son los beneficios de un modelo de formación basado en el 
pensamiento conceptual? 
En primer lugar, uno de los objetivos de la enseñanza basada en conceptos 
que casi nunca se expresa abiertamente es el desarrollo del intelecto. En 
un modelo de enseñanza de este tipo los entrenadores utilizan los 
principios conjuntamente con los conceptos y las acciones para dar lugar a 
este pensamiento sinérgico de orden superior. Los conceptos sirven de 
base y apoyo al pensamiento táctico y la comprensión conceptual más 
profunda. En el modelo de formación basado en conceptos se otorga 
importancia a la comunicación intrapersonal de los jugadores y al 
aprendizaje constructivista para impulsar la construcción de significado. 
 
El objetivo ya no es la memorización —una forma inferior de trabajo 
mental— sino la indagación personal donde los jugadores descubran las 
conexiones entre los principios, sus acciones motoras y los conceptos 
clave. Los beneficios de un modelo basado en conceptos son numerosos. 
 
Desde el aspecto de las habilidades del pensamiento: 
 
 Requiere futbolistas que piensen y apliquen habilidades de 
pensamiento conceptual, crítico, creativo y reflexivo. 
 Facilita el ―pensamiento sinérgico‖, es decir, la interrelación 
cognitiva entre los niveles fáctico y conceptual del pensamiento. 
 Requiere un procesamiento intelectual más profundo para que los 
jugadores relacionen los conceptos, los principios y las acciones 
motoras. 
 Desarrolla las estructuras conceptuales en el cerebro (esquemas 
cerebrales) para relacionar conocimiento nuevo y existente, y para 
favorecer el establecimiento de patrones y conexiones de 
conocimientos. 
 Valora y respeta el pensamiento del individuo porque la 
comprensión del juego no se da por transmisión sino que da lugar 
a su desarrollo. 
 Valora el pensamiento, los debates y la resolución de problemas 
en colaboración con sus demás compañeros ya que se parte del 
convencimiento de que la construcción social de significado no 
solo conduce a un producto de calidad sino que también motiva a 
los participantes. 
 
Desde el punto de vista de la enseñanza y aprendizaje un modelo de 
formación basado en conceptos: 
 
 Facilita la transferencia de conocimientos a nivel conceptual. 
 Ofrece oportunidades de construcción de significado personal por 
medio de procesos de pensamiento, creación y reflexión. 
 Facilita la transferencia del aprendizaje, ya que los jugadores 
entrenan en todo momento con los conceptos como guía. 
 Estimula la indagación sobre cuestiones de interés de los propios 
jugadores y no del entrenador puesto que ponen de relieve las 
múltiples perspectivas y situaciones de diferentes culturas y 
modos de ver el juego del fútbol. 
 Incrementa la motivación para el aprendizaje al invitar a los 
chicos a pensar sobre los conceptos clave pertinentes y de interés 
personal. 
 Favorece el empleo de experiencias de aprendizaje constructivista 
que son pertinentes e importantes en todas las pedagogías que 
tienen como propósito hacer pensar al jugador. 
 Desarrolla la fluidez en el tecnolecto, ya que los jugadores 
explican y fundamentan su comprensión conceptual con sus 
propias palabras. 
 Refuerza un vocabulario conceptual común y una comprensión 
conceptual fundamental lo cual puede ayudar a superar las 
barreras de antaño cuando ingresen a otros clubes. 
 Quizás algo de lo más relevante sea que no se basa en la división 
tradicional de los equipos por rangos de edad cronológica, sino 
que da la posibilidad de entrenar por ejemplo a un niño de 8 años 
con un adolescente de 13 dándole prioridad a la conciencia y la 
comprensión del juego y no a factores cuantitativos. 
 
¿Qué importancia han tenido los conceptos en los entrenadores? 
Costa, Garganta y otros autores (2014:1) señalan que existe muy poca 
literatura que trate acerca de los conceptos de juego y añaden que ―el 
conocimiento sobre los principios tácticos puede ayudar al proceso de 
evaluación táctica y a una mejor planeación de contenidos‖. 
Partiendo de la idea de que los comportamientos dinámicos de un equipo, 
así como su eficacia en el juego, puede ser apreciado a partir de las 
variantes cualitativas y cuantitativas de las acciones de los jugadores en 
sus relaciones de cooperación y oposición, ha de suponerse que la 
comprensión de los principios tácticos constituye una herramienta útil 
para ayudar en esa evaluación. Para ello, el diseño, construcción y 
validación de instrumentos capaces de cuantificar y evaluar la aplicación 
de los principios tácticos de juego se vuelven importantes, con el fin de 
llegar una respuesta o un resultado que ayude a identificar el nivel de 
logro del jugador en los entrenamientos y en la competencia. 
Las palabras del profesor Julio Garganta son bastante elocuentes al 
respecto pues nos recuerda que ―el jugador ve con los ojos pero observa 
con los conceptos‖. Para Pierre Pibarot ―debemos centrar la enseñanza del 
fútbol en los fundamentos del juego‖ y para Ángel Cappa ―el fundamento 
del entrenamiento es el concepto.‖ (Cappa, 1996, p. 157) Si el jugador 
está bien conceptuado se puede adaptar a cualquier compañero, a 
cualquier táctica e incluso a cualquier estilo de juego. 
Decía Carlos Salvador Bilardo que al jugador en formación habría que 
conceptualizarlo, pero ¿a qué se refiere con eso? Cuando escuchamos que 
cierto técnico conceptualiza se pueden estar refiriendo a dos cosas: 1) está 
denominando o bautizando las cosas que él u otros hacen; es decir, le está 
poniendo nombre de pila a lo que acaba de descubrir como cuando 
Robinson Crusoe lo hizo con aquel muchacho que rescató de sus captores 
en la isla; o bien 2) está definiendo un término ya existente. 
Señalaba también el profesor Carlos Leonel Trucco que cuando se habla 
de conceptualizar en el fútbol de iniciación se refiere a ―proporcionarle al 
jugador un conocimiento teórico que le ayudará a tener orden y 
sincronización con los movimientos de los demás jugadores‖; añade que 
durante su etapa como futbolista profesional, el profesor Jorge Luis Pinto, 
(en aquellos tiempos su entrenador en Unión Magdalena y Deportivo Calí 
de Colombia) le enseñó y tuvo que dominar 52 conceptos de táctica 
específica defensiva y 33 de ofensiva, los cuales tenía que saber aplicar 
ante circunstancias específicas en los partidos. El profesor Trucco agrega 
y recuerda que cuando él ha encabezado la coordinación de porteros en 
algún club, pide a sus porteros (independientemente de su edad) el manejo 
de 14 conceptos defensivos. 
Recordemos asimismo las palabras del colega Dany Ramos cuando señala 
que ―usar la terminología correcta nos jerarquiza‖ y otorga a la vez varias 
ventajas: 1) Le da valor a nuestro diálogo, 2) Nos da seguridad al saber 
que estamos actualizados, 3) Nos diferencia de los entrenadores empíricos 
y anticuados y 4) Los conceptos tácticos modernos ofrecen argumentos a 
los dirigentes que le dan un valor económico adicional a nuestra labor. 
―Los entrenadores nos olvidamos que alguna vez aprendimos la 
terminología técnica (en los cursos de titulación) que es necesaria para 
comprender y conceptualizar pero también sirve como una base para 
lograr una diferencia cierta con los empíricos‖ (Burgos, 2016, citado por 
Ramos, 2016). 
En síntesis, podemos puntualizar lo siguiente: muchos entrenadores son 
incomprendidos por la manera en la que les hablan a sus jugadores. 
Digamos que algunos 1) oralizan la redacción de los libros de fútbol y 
otros peor aún, 2) no pueden explicar lo que saben hacer en la práctica. El 
reto para este tipo de formadores pareciera fácil pero no lo es. Ajustar las 
características del mensaje a la comprensión de tus jugadores con claridad 
y brevedades un valor comunicacional intangible que casi siempre marca 
la diferencia. 
¿Podría existir en poco tiempo una metodología de enseñanza 
futbolística basada en conceptos? 
Desde luego que sí. Posiblemente ya la hemos tenido entre nosotros pero 
pasó desapercibida. Quizás no se trate de algo nuevo para muchos 
formadores deportivos pues este tipo de aplicaciones pedagógicas cuyo 
centro de atención es el jugador ya han estado presentes. 
En efecto, una formación futbolística basada en conceptos pone en 
práctica el aprendizaje centrado en el jugador con propósito y aplicación a 
los entornos de atención (memoria, retención, etc.) La enseñanza 
conceptual es esencial para el aprendizaje pues fomenta el "pensamiento 
conceptual" en lugar de la repetición. Recordemos que el aprendizaje se 
dificulta cuando no se sabe explicar lo que se sabe hacer o se expone a los 
alumnos a elementos abstractos separados del contexto. 
Habitualmente los entrenadores de fútbol base les recuerdan a sus 
jugadores la necesidad de aplicar las dos caras básicas del fútbol 1) La del 
sacrificio (podrán haber muchas cosas a negociar en el equipo pero la 
entrega y el compromiso son irrenunciables) y 2) La de la creatividad 
(los entrenadores podrán enseñar muchas cosas pero quien toma las 
decisiones durante el partido es el jugador), pero entonces faltarían los 
elementos de los que versa este libro: conocer, identificar y aplicar los 
conceptos. 
El uso de conceptos evita que la memorización de jugadas o las 
indicaciones del entrenador se convierta en el fin último. En un modelo 
basado en conceptos los jugadores deben procesar los datos por medio de 
su intelecto, es decir, su pensamiento conceptual. El concepto táctico 
permite concentrar el trabajo en el tema objeto de estudio y actúa como 
estímulo motivacional para el interés personal y el procesamiento mental. 
Hasta ahora los modelos de formación de jugadores se habían basado en 
dos elementos: 1) las instrucciones de los entrenadores y 2) las 
habilidades demostradas por los jugadores. Nos guste o no, la finalidad 
era cubrir un contenido y hacer jugadores obedientes. 
Este modelo alternativo es multidimensional: 1) se centra en los 
conceptos, 2) se agrupa en los principios y 3) le deja una buena dosis de 
intervención autónoma al jugador relacionando sus habilidades 
futbolísticas con los conceptos de juego y así alcanzar una comprensión 
más profunda del contenido y para facilitar la transferencia de conceptos y 
las distintas situaciones del juego. Pero además también, estos elementos 
conceptuales van a estar relacionados con la situación de entrenamiento, 
la intención y la acción táctica, las consignas y la cultura táctica del 
jugador. Independientemente de las formas de entrenar, el tipo de tarea, 
las reglas a cumplir, la edad, el nivel, etc. 
¿Qué ha pasado hasta ahora cuando se pretende formar a un jugador 
de un modo y otro? 
Se debe partir de la necesidad de que el jugador reciba no solo una 
formación práctica, sino también conceptual, de forma que las prácticas 
que realicen adquieran sentido y no se ejecuten simplemente porque sea lo 
encomendado por el entrenador, dado que en el partido el jugador debe 
tomar constantes decisiones, sin la presencia del entrenador y por eso éste 
debe dotar al primero de los suficientes conocimientos para que pueda 
elegir la solución más adecuada a la situación. Recordemos que las 
dimensiones de la preparación futbolística son tres y siempre deben ir de 
la mano: 1) actitudinal, 2) conceptual y 3) procedimental. 
Tradicionalmente, la enseñanza del fútbol ha estado repleta de marcados 
caracteres autoritarios y directivos, donde, a través del mando directo, el 
entrenador se hacía fuerte entre sus jugadores. Como lo mencionan 
autores como Pino Ortega, Vegas Haro o Isabel Moreno (2011) 
―Desafortunadamente, estas connotaciones están a la orden del día en 
todos los niveles del fútbol, desde la iniciación hasta el alto rendimiento. 
Del mismo modo, dicha enseñanza, se ha caracterizado por la posesión de 
toda la razón en la figura del entrenador, el cual otorgaba una formación 
mecanicista a sus jugadores, quienes se limitaban a ejecutar las órdenes de 
aquel‖. 
Los jugadores sean de la edad que sea, tienen preconcebidas ideas de 
juego bastante interiorizadas y casi siempre esa es la principal labor de un 
buen entrenador: convencer a toda la plantilla para que esas ideas de 
juego individuales converjan en una en común. Por ejemplo como dice 
Xavier Tamarit ―si queremos que un delantero juegue en el sector interior, 
incomodando a los zagueros y ayudando al delantero centro, pero éste 
jugador siempre ha jugado por bandas, entonces lo más seguro es que 
entren aspectos decisionales relacionados incluso con el subconsciente: 
los primeros 15 minutos jugará como segundo punta por dentro tal y 
como se le indicó, pero conforme pasa el tiempo irá colocándose en su 
posición habitual porque fue lo que siempre hizo‖. Se dice hasta el 
cansancio que este tipo de asuntos tienen su raíz en las costumbres hechas 
hábitos. Es verdad y por eso insistimos que la labor persuasiva del 
entrenador es determinante. Digamos entonces que ante la presencia de 
este tipo de nuevos modelos de formación, el entrenador deberá saber 
deshabituar las viejas costumbres alejando al jugador de sus intereses 
personales o de su afán protagónico a cambio de un juego colectivo 
basado en conceptos. Se sabe que nueve de cada diez cosas que se hacen 
en la cancha son a través del subconsciente, están adquiridas y no las 
decidimos en el momento. Por eso si no entrenamos estas nuevas formas 
de hacer las cosas, por más que las pidamos, los futbolistas seguirán 
decidiendo lo contrario. 
Diferencias entre situaciones de juego y conceptos de juego. 
La mayoría de estos conceptos son redactados de forma sencilla para una 
mejor comprensión por parte de todas las personas. Hay algunos que se 
aprendieron como producto de la experiencia personal en cancha y de 
miles de horas de acalorados pero productivos debates con los colegas y 
en otros se recurrieron a diversas fuentes bibliográficas para una mejor 
consignación. En la mayoría de los casos se recomienda al lector que vaya 
con sus jugadores y los ponga en práctica; que profundice más acerca de 
cada uno de estos conceptos y desarrolle ejercicios donde pueda 
corroborarse su comprensión, utilidad y aplicación. 
Situaciones de Juego Conceptos de Juego 
Dependen de las formaciones y 
sistemas de juego. 
Son independientes de los sistemas 
y formaciones. El jugador que 
maneja conceptos se adapta más 
fácil a cualquier sistema. 
Están enmarcados en hechos 
aislados 
Proveen al jugador un marco de 
referencia aplicable a diferentes 
situaciones. 
Lleva la enseñanza al nivel de solo 
conocer aquello que es aprendido 
por medio de una tarea de 
entrenamiento. 
El jugador aprende a identificar 
elementos conceptuales desde 
diferentes vías de entrada. 
Tienen un tiempo límite de 
aplicación pues dependen de la idea 
de juego de cada entrenador. 
Son aprendizajes universales que le 
van a servir al jugador para todo su 
proceso deportivo. 
El futbolista novato siente que se le 
abruma con tanta indicación y 
percibe muy poca libertad de 
acción. 
El futbolista toma decisiones con 
base al aprendizaje de conceptos y 
los sistemas o formaciones son solo 
referencias para su distribución en 
el espacio. 
Los planes de entrenamiento está 
sobre cargados de contenidos y los 
entrenadores a como dé lugar 
buscan cubrirlo. 
Son flexibles y avanzan conforme 
los jugadores vayan demostrando 
de manera consistente el dominio 
de los conceptos. 
La terminología empleada depende 
de cada entrenador. 
Los conceptos son un lenguaje 
homologado. 
La transferencia se logra solo con 
la especificidad que te da el 
entrenamiento. 
Se logra mediante múltiples yvariados estímulos motores pues lo 
que importa es el concepto no la 
mecanización. 
 
¿Existirá en los próximos años un entrenador conceptual? 
De hecho ya existe. El entrenador alemán Volker Finke fue quien acuñó 
este término y señala que este tipo de entrenador es aquel que logra 
fusionar entre el desarrollo general de un equipo con métodos modernos 
de entrenamiento con el apoyo de los dirigentes para que se dé la 
continuidad de sus ideas. ―Ahora se llevan los conceptos generales, las 
estructuras duraderas y los entrenamientos que incluyen conocimientos 
extraídos de las escuelas de deporte‖ agregaba el técnico teutón. No es 
que se trate de entrenadores adelantados a su época, sino de jóvenes 
entrenadores innovadores que han encontrado en diversas disciplinas 
científicas las respuestas a las incógnitas que se habían estado haciendo 
otros en años anteriores. No se trata solo de un entrenador metódico y 
obsesivo con su trabajo, sino de alguien que basa su éxito en el amplio 
manejo de los conceptos y en una metodología basada en ellos. Algunos 
entrenadores han considerado a Christoph Daum ex Director Técnico del 
F.C Colonia y el Bayer 04 Leverkusen como el primer exponente de esa 
familia; hoy en día Robin Dutt, del SC Freibug, Marco Kurz, del 
Kaiserslautern o el ex del Borussia Dortmund Thomas Tuchel o incluso 
José Mourinho, Joachin Low y Jürgen Klopp como sus más notorios 
exponentes. 
Los conceptos de juego 
Si bien el fútbol es un juego de incertidumbre, debemos partir de la idea 
de que durante su desarrollo se presentan una serie de acontecimientos 
que se encuentran ligados unos con otros mediante un denominador 
común: los fundamentos ofensivos y defensivos. (Lagar, 2013) Estos son 
inalterables en cualquier equipo y difícilmente varían entre un cotejo y 
otro. Enseñar los fundamentos nos lleva a la utilización de distintas 
estrategias didácticas basadas siempre en el manejo de conceptos. 
Con este modelo pedagógico se pretende desarrollar en los niños y 
jóvenes los conceptos tácticos defensivos y ofensivos que se aplican de 
manera universal en el fútbol y con ello poder hacer una contribución 
sistemática, sencilla e innovadora para poder ayudar al progreso de 
habilidades cognitivas que se deben tener en cuenta en la condición 
táctica, como lo son: la concentración, el pensamiento, y la inteligencia 
deportiva. Si lo que deseamos es que nuestros jugadores lean bien el 
juego y lo desarrollen, todo participante debe conocer y saber aplicarlos

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