Injuria UP 2 MEDICINA PREVENTIVA

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Injuria UP 2
Cátedra de Medicina Preventiva
Salud de los niños y empobrecimiento
La dimensión colectiva o epidemiológica de los problemas de salud difícilmente
entra en la perspectiva del médico que realiza una cotidiana labor asistencial.
Aun sin contar con precisos estudios de morbilidad se puede suponer que el
retroceso económico y social tiene un correlato en las condiciones de salud de la
población. Las estadísticas de mortalidad permiten conocer parcialmente las condiciones
de salud de una población, aunque no se puede decir demasiado acerca de cómo vive la
población. El empobrecimiento tiene una compleja y variada sintomatología. De todas
maneras la forma predominante de atención de salud no registra la relación
empobrecimiento-condiciones de salud.
Las situaciones de crisis dieron lugar a varios conceptos innovadores, en particular
uno. Se trata del concepto de stress, acuñado para dar cuenta del efecto que las
situaciones de tensión producen sobre la salud de los individuos. Las condiciones de vida
que caracterizan a la pobreza constituyen factores estresantes de importancia central.
Esas correlaciones sugieren que el stress de la pobreza puede tener efectos directos y
acumulativos en cuanto al riesgo de enfermar.
Aunque se carece de una definición precisa acerca de lo que constituye el
empobrecimiento, es posible referirlo a un proceso de perdida y deterioro progresivo
respecto de condiciones de vida disfrutadas en un pasado. El empobrecimiento registrado
a través de datos estadísticos generalmente se reduce a la ubicación de los entrevistados
respecto de la disposición o no de una serie de bienes y servicios. En tanto que la
indagación en grupos familiares da cuenta de la percepción o no de la privación relativa
de bienes y servicios, importando este nivel de expresión del empobrecimiento porque da
cuenta de la percepción relativa al propio pasado.
Frente a esta dificultosa situación, aplicamos un método. Se trata de la técnica de
los Eventos Centinela, expresados por tres clases de indicadores de la relación entre
necesidades y recursos:
-Indicadores basados en casos singulares: son los casos individuales de enfermedades o
muertes evitables con la disposición actual de recursos de salud.
-Indicadores basados en tasas: incrementos en la tasa de ocurrencia de una enfermedad
o una causa de muerte representan una señal de alerta.
-Indicadores contextuales: representados por problemas considerados como “medico
sociales” o condiciones ambientales.
Cuando el evento centinela aparece en los registros asistenciales actúa dentro del
sistema, originando una intervención institucional destinada a investigar por que apareció
eses caso o se incrementó una tasa y como evitar la persistencia de la señal de alarma.
El empobrecimiento está generando cambios en las condiciones de salud de la
población y sobre todo en las modalidades de utilización de los servicios de salud. Los
hospitales públicos son los primeros que acusan la magnitud del fenómeno del
empobrecimiento, debido al crecimiento de la demanda de atención, tratando de
adaptarse, lo que afecta directamente la calidad de la oferta. En los empobrecidos los
problemas carenciales que aparecen son atribuidos a factores de desatención familiar
derivada de desajustes económicos y sociales.
Las condiciones contextuales que expresan el empobrecimiento ya están
instaladas en nuestra sociedad y los problemas somáticos y psíquicos que pueden
expresar su impacto se hacen visibles. El identificarlos a tiempo y saber del peligro de su
posible incremento permite emprender acciones que reviertan esta situación.
Seguramente, no se requerirán de acciones sumamente costosas ni extrañas, sino que
con los recursos financieros y humanos disponibles sería posible frenar y contrarrestar el
deterioro de las condiciones de salud de las nuevas generaciones.
Evolución historia de la interpretación de las enfermedades
Históricamente los problemas fundamentales de las Ciencias de la Salud han sido
la salud y la enfermedad. En la antigua Grecia existían tres corrientes para explicar la
existencia de las enfermedades: una de ellas encabezada por Platón, analizaba que las
enfermedades se manifestaban por un principio no material, la causa de la enfermedad
era un castigo enviado por el cielo; otra corriente planteaba que además de la ira de los
dioses existían causas como los cambios del clima e incumplimiento de la dieta y de las
reglas de higiene; y la tercera corriente formulada por Hipócrates determino que la
enfermedad era una manifestación de la vida del organismo, como resultado de cambios
en el sustrato material.
En el siglo XIX surgen las ciencias modernas, que comienzan a interpretar los
fenómenos como consecuencias de un conjunto de causas naturales. Es la teoría
microbiana de la enfermedad, que permitió identificar el agente específico que produce
determinada enfermedad. Los grandes descubrimientos microbiológicos sentaron las
bases para la interpretación materialista, unicausal de la enfermedad. La presencia de la
enfermedad en la persona es siempre posterior a su contacto con el germen, pero este
contacto nova siempre seguido de enfermedad. El germen, el ambiente y el huésped, se
estructuran en una cadena causal necesaria, sobre la que se traslada el agente etiológico.
Pero si se interpreta al hombre como un ser biológico, psicológico y social, el enfoque de
la interpretación causal de las enfermedades no descansa en la compresión exclusiva de
los fenómenos de tipo biológico.
Es así que el estudio del proceso salud-enfermedad han permitido estructura
enfoques interpretativos más avanzados. El llamado enfoque multicausal del proceso
salud-enfermedad rechaza que la enfermedad este producida por un factor único. No es
que sean muchas las causas de una enfermedad, sino que son un conjunto de factores
incidentes y coincidentes en el tiempo y espacio los que la determinan, pudiendo ser
clasificados en necesarios, suficientes y coadyuvantes. Varios autores plantean que la
interpretación multicausal ha estado constreñida por un enfoque biologizador, o por una
evidenciacion de que no se ha otorgado la real significación a los factores sociales.
Enfoques actuales (modelos sociales) convierten en piedra angular de la
interpretación causal de las enfermedades a lo social y a su vez establecen que se
requiere comprender la complejidad para analizar el proceso de salud-enfermedad en las
poblaciones. No es posible hablar de causas sino de determinantes en una red intrincada
y superpuesta, en la que las condiciones de vida y la calidad de vida se constituyen en
categorías ineludibles de analizar.
La historia natural de la enfermedad plantea a la enfermedad a lo largo del tiempo
pero en ausencia de tratamiento, distinguiendo 3 periodos:
-Prepatogenico: la enfermedad no se ha desarrollado, pero se hallan presentes los
diferentes factores que pueden favorecer o determinar el desarrollo de una enfermedad,
los cuales pueden ser llamados factores de riesgo.
-Patogénico: la enfermedad puede ser o no manifiesta, ya que en la interacción con los
factores comienzan a ocurrir cambios en el organismo. Al pasar el horizonte clínico, la
enfermedad se manifiesta con signos y síntomas.
-De resultados: existen cambios en el organismo importantes y se refleja el resultado del
proceso, que puede ser la muerte, la incapacidad momentánea, estado crónico, o
recuperación de la salud.