La psicología de la cohabitación y la convivencia antes del matrimonio

Vista previa del material en texto

La psicología de la cohabitación y la convivencia antes del matrimonio
La cohabitación es la práctica de vivir juntos sin estar casados. Se ha vuelto cada vez más común en los últimos años, y ahora es la forma más común de formar una pareja en los Estados Unidos.
Hay una serie de razones por las que las personas pueden optar por cohabitar. Algunas personas creen que es una forma de probar el matrimonio antes de casarse. Otros creen que es una forma de ahorrar dinero. Y otros simplemente prefieren vivir juntos sin estar casados.
La cohabitación puede tener una serie de beneficios psicológicos. Por ejemplo, las personas que cohabitan pueden sentirse más cercanas a su pareja, más felices y más satisfechas con sus relaciones. También pueden ser más propensas a comunicarse mejor y a resolver los conflictos de una manera más constructiva.
Sin embargo, la cohabitación también puede tener algunos riesgos psicológicos. Por ejemplo, las personas que cohabitan pueden ser más propensas a divorciarse o a tener relaciones conflictivas. También pueden ser más propensas a tener problemas financieros y de salud.
En general, la cohabitación puede ser una experiencia positiva o negativa para la psique, dependiendo de una serie de factores, como la personalidad de las personas involucradas, la calidad de la relación y las circunstancias personales.
Desarrollo
Algunos de los beneficios psicológicos de la cohabitación incluyen:
· Mayor cercanía con la pareja: Las personas que cohabitan pueden sentirse más cercanas a su pareja porque tienen más tiempo para pasar juntos y conocer mejor sus necesidades y deseos.
· Mayor felicidad: Las personas que cohabitan pueden ser más felices porque tienen la sensación de estar en una relación segura y estable.
· Mayor satisfacción con la relación: Las personas que cohabitan pueden ser más satisfechas con su relación porque tienen la sensación de estar en una relación igualitaria y equitativa.
· Mejor comunicación: Las personas que cohabitan pueden ser mejores comunicadores porque tienen más oportunidades de hablar sobre sus necesidades y deseos.
· Resolución de conflictos más constructiva: Las personas que cohabitan pueden ser mejores en la resolución de conflictos porque tienen más oportunidades de practicar la comunicación y la cooperación.
Sin embargo, la cohabitación también puede tener algunos riesgos psicológicos, como:
· Mayor probabilidad de divorcio: Las personas que cohabitan pueden ser más propensas a divorciarse porque tienen más probabilidades de tener problemas financieros, de comunicación y de conflictos.
· Mayor probabilidad de tener relaciones conflictivas: Las personas que cohabitan pueden ser más propensas a tener relaciones conflictivas porque tienen más oportunidades de discutir y pelear.
· Mayor probabilidad de tener problemas financieros: Las personas que cohabitan pueden ser más propensas a tener problemas financieros porque tienen que compartir los gastos y los ingresos.
· Mayor probabilidad de tener problemas de salud: Las personas que cohabitan pueden ser más propensas a tener problemas de salud porque tienen más probabilidades de fumar, beber alcohol y consumir drogas.
Conclusión
En general, la cohabitación puede ser una experiencia positiva o negativa para la psique, dependiendo de una serie de factores, como la personalidad de las personas involucradas, la calidad de la relación y las circunstancias personales. Si estás considerando cohabitar, es importante que te informes sobre los posibles beneficios y riesgos psicológicos antes de tomar una decisión.