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Elaborado por: Br. Marian F. Rodríguez Hernández, Preparadora de la asignatura. Supervisión/Edición: Dr. Jesús Ignacio Carrillo, Coordinador de la asignatura. UNIVERSIDAD DE CARABOBO Facultad de Ciencias de la Salud Escuela de Medicina Práctica Médica Valencia 2019 INTRODUCCIÓN A LA CLÍNICA INFANTIL Elaborado por: Br. Marian F. Rodríguez Hernández, Preparadora de la asignatura. Supervisión/Edición: Dr. Jesús Ignacio Carrillo, Coordinador de la asignatura. Como complemento de la guía Introducción a la Práctica Clínica (IPC), se ofrece este material de estudio titulado INTRODUCCIÓN A LA CLÍNICA INFANTIL (ICI), el cual brindará un acercamiento al paciente pediátrico basado en un enfoque del niño sano. Al igual que su precedente, IPC, esta guía aportará al estudiante de segundo año de Medicina los conocimientos básicos para facilitar el abordaje clínico de dicho grupo etario, cuando curse por vez primera la asignatura Clínica Pediátrica. En consonancia con la guía de Crecimiento y Desarrollo, estos párrafos servirán de primer acercamiento para el aprendizaje del cuerpo del niño sano, al momento de realizar el examen físico. El contar con un recurso como este, constituye un elemento importante al plantear un tema como el ser humano sano y en desarrollo, el cual ha sido meta consistente de la Medicina, y que en la práctica establece un contraste a su disposición actual de solo curar al enfermo. Es importante recordar que las principales herramientas semiológicas son la anamnesis y el examen físico, los que pueden ser apoyados por los exámenes paraclínicos. La interpretación de la información obtenida, se basa en el conocimiento (aprendizaje) y la experiencia profesional (juicio clínico). Existe una gran diferencia entre el examen físico del adulto y el del niño, por lo que es necesario conocer con exactitud los elementos relacionados con la maduración de los diferentes órganos y sistemas que deben ser objeto de exploración, y que varían en relación con la edad del niño hasta alcanzar la edad adulta. La relación médico-paciente en pediatría tiene características particulares, pues depende de intermediarios, los que habitualmente son los padres, quienes interpretan y comunican las molestias del niño, lo que es más notorio mientras más pequeño y dependiente es este. De igual manera, el médico tiene el deber de adecuarse al paciente pediátrico en cuanto a su comportamiento, conversación y lenguaje, y de ser posible adecuar el ambiente físico en el cual se va a realizar el examen para que el niño se sienta lo más cómodo posible y se pueda realizar con mayor facilidad la práctica clínica. Dicho lo anterior, vamos a iniciar los dos aspectos centrales de la guía ICI, los cuales consisten en la entrevista y una aproximación al examen físico pediátrico. ENTREVISTA PEDIÁTRICA El examen del paciente pediátrico comienza desde el momento en que ingresa por la puerta del consultorio junto a su acompañante, instante desde el cual podemos observar su comportamiento, su estado general de salud y su interrelación con sus acompañantes, lo cual representa una valiosa información para comenzar a plantear posibles diagnósticos antes de entablar la conversación. No existen reglas estrictas sobre cómo llevar a cabo la entrevista, pues cada médico tiene su estilo y cada paciente es diferente, por lo que las habilidades y destrezas para llevarla a cabo con mayor facilidad se van adquiriendo con los años mediante la práctica; lo importante es hacer lo posible por realizar una entrevista completa y eficiente en un tiempo adecuado, sin agotar a los pacientes ni a sus padres o acompañantes. Elaborado por: Br. Marian F. Rodríguez Hernández, Preparadora de la asignatura. Supervisión/Edición: Dr. Jesús Ignacio Carrillo, Coordinador de la asignatura. Sin embargo, se recomienda llevarla a cabo de manera ordenada, para lo cual se puede seguir el siguiente esquema que consta en la división de la entrevista en tres partes, en primer lugar la apertura que corresponde al periodo de saludo, presentación y ambientación que facilita la confianza mutua y el establecimiento de la relación médico-paciente; en segundo lugar el cuerpo, que es la fase de recopilación de la información acerca de la patología presentada por el paciente y en la cual se establece el diagnóstico presuntivo o final; y por último el cierre, que corresponde al momento de resumir la conclusión final, entregar las indicaciones y esclarecer las dudas. En pediatría, como ya mencionamos, el principal interlocutor es uno de los padres u otro adulto acompañante, quien se encarga de interpretar y transmitir los padecimientos del niño; sin embargo, no olvidemos que por pequeño que este sea, es un informante válido que tiene algo importante que decir con relación a sus sentimientos y molestias. Con la anamnesis se obtiene información sobre el paciente, la realidad en que se desenvuelve y su problema de salud. Ella tiene la misma estructura y orden ya vistos en la guía IPC. El cuerpo de la entrevista lo constituye la anamnesis, la cual desde un punto de vista práctico se puede dividir en dos tipos (próxima y remota), y el examen funcional o revisión por sistemas. a) ANAMNESIS PRÓXIMA: está destinada a la recopilación de datos referidos a la enfermedad actual, con el fin de pesquisar y caracterizar los síntomas, que son manifestaciones subjetivas de la enfermedad que son percibidas por el paciente pediátrico, y sus padres o familiares. Se suele iniciar con preguntas abiertas, que inviten al niño o a sus padres a relatar los síntomas o problemas identificados por ellos, lo cual permite obtener una aproximación al problema. Ej.: “¿Qué le pasó?”, “¿Por qué vino a consultar?”, “¿Qué le preocupa?”, “¿Qué más ha notado?”. Posteriormente se procede a realizar preguntas dirigidas o cerradas como ¿Qué?, ¿Cuándo?, ¿Cómo?, ¿Cuánto?, ¿Por qué?, a cada uno de los síntomas encontrados, o su equivalente “ALICIA”. Por otro lado, también existen diversas técnicas que se pueden poner en práctica para facilitar el desarrollo de la entrevista médica y obtener datos de la manera más exacta posible, Ej.: unos padres muy preocupados consultan porque su hijo de 3 años “está malo para comer” 1. Facilitar: animar al paciente a contar lo que le ocurre “¿Y desde cuándo no come bien?” 2. Repetir: repetir lo que el paciente dijo para que proporcione más detalles “Entonces no come nada…” 3. Aclarar: preguntar al paciente o acompañante qué quiere decir exactamente “¿Cómo es eso de que está malo para comer?” 4. Enfatizar: mostrar comprensión y aceptación “Deben estar muy preocupados porque él no come bien” 5. Afrontar la situación: discutir una conducta perturbadora del paciente o su familia “¿Y creen que es útil castigarlo cuando no quiere comer?” 6. Interpretar: repetir lo oído para que el paciente confirme lo que el médico entendió “¿O sea que hace dos semanas que no come nada?” Elaborado por: Br. Marian F. Rodríguez Hernández, Preparadora de la asignatura. Supervisión/Edición: Dr. Jesús Ignacio Carrillo, Coordinador de la asignatura. b) ANAMNESIS REMOTA: es la recopilación de antecedentes médicos, epidemiológicos y sociales, no relacionados directamente con la enfermedad actual, los cuales permiten situarse en el contexto personal, familiar, y ambiental del paciente, con el finde detectar factores de riesgo y adecuar el manejo a su realidad. A continuación, se mencionan los aspectos prioritarios a interrogar de los antecedentes personales, de acuerdo a la edad del paciente: recién nacido, lactante, preescolar, escolar y adolescente. RECIÉN NACIDO Y LACTANTE. Los primeros años de vida están marcados por un rápido crecimiento corporal y un gran desarrollo físico, con progresiva adquisición de capacidades intelectuales y afectivas. Se propone el siguiente orden para recopilar la información: Historia prenatal: es importante conocer como fue el embarazo, si se presentó algún problema significativo (patologías durante la gestación) y la actitud de los padres hacia la paternidad (embarazo deseado). número de gestación, antecedentes de embarazos previos, regularidad en el control del embarazo, uso de fármacos, exposición a radiaciones. Antecedentes del parto: fecha, lugar y tipo de parto (natural, normal, cesárea), edad gestacional al nacer, peso, talla, circunferencia cefálica (CC), APGAR al nacer. Preguntar sobre patologías en el periodo de RN, destacando si necesitó hospitalización. Registro de inmunizaciones: consignar –solicitar cartón de control de vacunas- la edad en que se administraron y si hubo reacciones adversas. Se anexa el esquema de vacunación vigente según la Sociedad Venezolana de Puericultura y Pediatría (SVPP). Elaborado por: Br. Marian F. Rodríguez Hernández, Preparadora de la asignatura. Supervisión/Edición: Dr. Jesús Ignacio Carrillo, Coordinador de la asignatura. Hábitos de alimentación: la alimentación tiene indicaciones precisas durante este periodo, que dependen de los requerimientos nutricionales y características fisiológicas, comenzando por la lactancia materna hasta llegar a la ablactación. Hay que precisar: Lactancia materna, tiempo, horario, frecuencia, duración y causa del destete. Uso de fórmula láctea, determinando cuál es y forma de preparación, edad en que se inició y cantidad. Alimentación sólida (ablactación), edad de inicio, modo de preparación e ingredientes. Aceptación del alimento, apetito y tolerancia. Uso de suplementos como hierro y vitamina D, precisando qué edad se introdujeron y dosis. Crecimiento: es uno de los aspectos fundamentales en la supervisión de salud, siendo importante registrar: últimos datos de talla, peso y circunferencia cefálica (CC) y diagnósticos previos efectuados en relación con evolución pondoestatural. Desarrollo psicomotor: es el proceso de adquisición de independencia, tanto físico como social que sigue una secuencia bien establecida. Su evaluación se realiza durante el examen físico, sin embargo, es importante consignar la edad de adquisición de las principales señales del desarrollo: fijar la mirada, sostener la cabeza, sentarse solo, gatear, caminar sin apoyo, entre otros. Hábitos y conducta: los hábitos comienzan a formarse tempranamente en la vida y son determinantes de conductas futuras, por lo que será importante conocer los hábitos del niño y del grupo familiar. Horario y problemas de sueño, dónde y con quién duerme, hábito miccional y fecal, uso de chupón o chuparse el dedo, temperamento del niño, relación con los padres y con otros familiares, intentado conocer quién cuida al niño y cómo es la disciplina. Antecedentes mórbidos: anotar enfermedades infectocontagiosas, hospitalizaciones y cirugías previas: diagnóstico, tiempo de hospitalización, edad y fecha, accidentes, detectar posible maltrato infantil, alergias a fármacos y ambientales, uso de medicamentos. Antecedentes familiares: el conocimiento de patologías familiares permite conocer el riesgo de desarrollo de las mismas en el niño, llegando incluso a prevenir su manifestación y posibles secuelas. Edad y estado de salud de padres y hermanos, en caso de fallecimiento de algunos, indicar la causa de la muerte y la edad en que ocurrió. De sus padres averiguar: uso de tabaco, alcohol, drogas, estado civil, relación que mantienen, nivel de educación y ocupacional. Historia socioeconómica: permite situarnos en el entorno del paciente, detectar factores de riesgo y adecuar nuestras indicaciones a las posibilidades reales. Preguntar número de personas que conforman el grupo familiar, señalando número de adultos, niños y su parentesco. Conocer el número de personas que habitan una casa nos da un índice del hacinamiento, y el número de personas que comparten una habitación o cama, nos da un indicio de promiscuidad. Datos sobre el tipo de vivienda y sus condiciones. En Venezuela se valora utilizando las Categorías del Método de Graffar-Méndez Castellanos (ver guía de Crecimiento y Desarrollo). Elaborado por: Br. Marian F. Rodríguez Hernández, Preparadora de la asignatura. Supervisión/Edición: Dr. Jesús Ignacio Carrillo, Coordinador de la asignatura. PREESCOLAR Y ESCOLAR. Esta etapa constituye un periodo bastante tranquilo desde el punto de vista de salud, ya que el ritmo de crecimiento es lento. En el preescolar se debe monitorear la evolución del desarrollo psicomotor y en el escolar el proceso de aprendizaje. La recopilación de los datos es similar al descrito en los lactantes, solo haremos algunas acotaciones en los siguientes puntos: Desarrollo psicomotor: se debe poner especial atención al desarrollo del lenguaje, preguntando la edad en que comenzó a decir palabras fluidas, a construir frases y mantener conversaciones. Desarrollo puberal: consignar la edad en la cual aparecieron los primeros signos de desarrollo puberal (adrenarquia) y la secuencia de los mismos. Indagar la edad de inicio de la pubertad de los padres y hermanos. Hábitos y conducta: ayudan a determinar comportamientos y conductas que pueden ser mejorados, orientando a la familia sobre su manejo. Asistencia a jardín de infancia o colegio: horario, curso, rendimiento, problemas de aprendizaje. Relación con amigos, compañeros y familiares. Recreación, uso del tiempo libre, número de horas que dedica a la TV o computador, actividad física, hobbies. Horario y problemas de sueño. Hábito miccional, edad en que comenzó a controlar esfínteres. Hábito fecal, constipación o incontinencia. Uso de chupón, chupar dedos, pica, tics, rabietas. Disciplina. ADOLESCENTE. Periodo caracterizado por un rápido crecimiento pondoestatural, desarrollo puberal y las primeras incursiones en la sexualidad. El adolescente se identifica con sus pares y adquiere constantemente nuevos hábitos, aumentando el riesgo de accidentes, conductas adictivas y trastornos psicológicos en algunos grupos. Es importante identificar las necesidades del adolescente, valorar la evolución del proceso de maduración psicosocial y del crecimiento, conocer las capacidades que dispone, conocer la disposición de la familia. En definitiva, determinar factores protectores o de riesgo. En Venezuela, el interrogatorio de los factores de riesgo y factores protectores se explora siguiendo los siguientes parámetros: Hogar, Educación, Empleo, Actividades, Alimentación, Drogas, Seguridad, Sexualidad, Suicidio, Pobreza (que corresponden al acrónimo HEEAADSSSP). Hogar: se interroga sobre quiénes conforman el núcleo familiar, cómo es la relación entre ellos, si comparte habitación o cama, normas, discusiones. Educación: si estudia o no, qué grado cursa, si ha repetido algún año, si tiene problemas en el liceo, si se siente bien en ese liceo. Averiguar si es víctima o victimario de violencia escolar, bajo rendimiento o ausentismo escolar. Empleo: si está trabajando o ha trabajado alguna vez, en qué trabaja, qué hace con el dinero que gana. Elaborado por: Br. Marian F. Rodríguez Hernández, Preparadora de la asignatura. Supervisión/Edición: Dr. Jesús Ignacio Carrillo, Coordinador de la asignatura. Actividades: qué hace en sutiempo libre, pasatiempos, con quien comparte el tiempo libre, si realiza actividad física, cuántas horas al día, uso de redes sociales. Se indaga sobre participación en deportes extremos, participación en grupos de riesgo, exposición a situaciones de violencia. Alimentación: hacer un recordatorio de 24 horas, explorar cantidad y calidad de la comida, horarios, si acostumbra a comer con la familia. Se busca algún trastorno de alimentación. Drogas: se explora sobre consumo de cigarrillo, alcohol o de alguna otra sustancia, desde cuándo y la frecuencia. Seguridad: investigar sobre sensación de seguridad en la casa y el liceo, violencia en el entorno, si ha estado involucrado en situaciones de violencia. Sexualidad: además de preguntar sobre su desarrollo puberal, en la mujer: edad de la telarquia, vello púbico y axilar. En relación a la menstruación, consignar la edad de la menarquia, además de su frecuencia, duración, intensidad y asociación a molestias o dolor; y en el varón: edad de inicio de crecimiento de los genitales externos, aparición del vello púbico y axilar. Si hubo espermarca, anotar la edad de aparición de esta. Se investiga sobre interacción con el sexo opuesto, si tiene novio/a, si ha tenido algún tipo de contacto íntimo o relaciones sexuales (sexarca), tipo de relación, si tiene curiosidad por relaciones con personas del mismo sexo, embarazo, sospecha de Infecciones de Trasmisión Sexual. Suicidio: se interroga sobre sensación de tristeza o soledad, periodos de aislamiento, deseos de morir, si ha pensado en cómo hacerlo, si lo ha intentado. Buscar signos de depresión. Pobreza: explorar satisfacción de necesidades básicas consultadas con el Graffar. Otros temas son hábitos de sueño, proyecto de vida y grado de aceptación personal (imagen corporal). La recopilación de los antecedentes mórbidos personales y familiares e historia socioeconómica y los aspectos básicos relacionados con el embarazo y parto, siempre son de importancia y para investigarlos seguiremos un esquema similar al descrito previamente. c) REVISIÓN POR SISTEMAS. Luego de terminada la anamnesis próxima y remota, realizamos una breve revisión por aparatos y sistemas (examen funcional) siguiendo una especie de lista con preguntas cerradas en orden céfalo- caudal, las que se deben adecuar a la edad del paciente y tienen por finalidad asegurarnos que no existe problema en algún sistema u órgano distinto al que motivó la consulta, así como no haber omitido algún síntoma de valor. A continuación, se presenta un listado tipo de revisión por aparatos y sistemas: 1. Síntomas generales y nutrición: ánimo, actividad, apetito, cambios de peso. 2. Piel: cambios de coloración, lesiones, alergias. 3. Cabeza: cefalea, traumatismos. 4. Ojos: molestias oculares, uso de lentes. 5. Oídos: antecedentes de dolor, secreciones patológicas, otitis. 6. Nariz y senos paranasales: resfriados, ronquidos, obstrucción nasal, secreciones. 7. Boca y Garganta: antecedentes de cuadros faringoamigdalinos, problemas dentales, evaluación dental. Elaborado por: Br. Marian F. Rodríguez Hernández, Preparadora de la asignatura. Supervisión/Edición: Dr. Jesús Ignacio Carrillo, Coordinador de la asignatura. 8. Cuello: adenopatías, dolor. 9. Sistema respiratorio: tos, secreción, ahogos, disnea, patologías respiratorias. 10. Sistema cardiovascular: consignar antecedentes de soplos. 11. Gastrointestinal: hábito evacuatorio, dolor, constipación, diarrea. 12. Genitourinario: hábito miccional, control de esfínteres, ITU, secreción o prurito genital, desarrollo de caracteres sexuales secundarios, problemas menstruales. 13. Sistema musculoesquelético: dolor, fracturas. 14. Neurológico: convulsiones, desarrollo psicomotor. APROXIMACIÓN AL EXAMEN FÍSICO PEDIÁTRICO El examen físico corresponde a la parte de la entrevista médica en la cual se buscan los SIGNOS, que son manifestaciones objetivas de la enfermedad y por lo tanto, son mensurables y comparables. Es una herramienta semiológica que se debe repetir muchas veces para llegar a realizarla con seguridad y en forma habilidosa. El contacto con los niños y sus padres hará ganar experiencia y mejorar la forma de la forma de aproximación y técnica de examen. Clásicamente, el examen físico se divide en examen físico general y segmentario. El EXAMEN FÍSICO GENERAL: nos da una primera impresión de las condiciones generales y de gravedad del paciente, como sus signos vitales, aspecto, conciencia. En el EXAMEN FÍSICO SEGMENTARIO: se evalúa cada región, sistema u órgano en particular. En la atención pediátrica el médico se enfrenta con pacientes de diversas edades, lo que le exige adaptarse a diversos niveles de desarrollo físico y psicológico, y esto a su vez determina que el examen varíe de un paciente a otro, tanto en la forma de acercamiento y de realización, como en el aspecto de la exploración en que se dará énfasis. La secuencia del examen físico pediátrico es variable según la edad y la capacidad de adaptación del paciente a la situación y estará influenciado por la relación que se haya establecido con el mismo durante el desarrollo de la entrevista médica. Se deben aprovechar las oportunidades que ofrece el paciente para examinar la mayor cantidad de aspectos posibles, por ejemplo, mientras juega, duerme, come, etc. Se tiene como regla general realizar al final del examen aquellos procedimientos que resulten dolorosos o molestos, como la otoscopia, examen de la cavidad oral o puntos dolorosos abdominales, advirtiendo y explicándole con anticipación al paciente el procedimiento que se realizará, independientemente de su edad; pues si se hace al principio del examen lo más probable es que el paciente se asuste, llore, y no permita realizar la examinación con tranquilidad. Se debe realizar siempre de manera ordenada, así como en el examen físico del adulto, pudiendo realizarlo en orden céfalo- caudal. Elaborado por: Br. Marian F. Rodríguez Hernández, Preparadora de la asignatura. Supervisión/Edición: Dr. Jesús Ignacio Carrillo, Coordinador de la asignatura. Existen aspectos importantes que deben tener en cuenta para el desarrollo del examen físico, en primer lugar, el lavado de manos previo al contacto con el paciente, cuyo principal objetivo es evitar transmitir infecciones entre pacientes. Por otro lado, se debe cuidar la temperatura de las manos y de los objetos que se vayan a utilizar durante la examinación, pues si tocamos a los pacientes más pequeños con las manos o con objetos fríos, éste generará rechazo y hará más difícil el resto del examen. En el caso del estetoscopio se puede frotar con las manos o con la ropa antes de colocarlo sobre la piel del paciente. La inspección, palpación, percusión y auscultación constituyen la secuencia que se conoce como los 4 tiempos del examen físico y son base para la exploración de cualquier sistema u órgano del cuerpo. A continuación, se mencionarán los aspectos en los que se debe hacer más énfasis durante el examen físico, de acuerdo a cada edad. RECIÉN NACIDO Y LACTANTE MENOR. El objetivo central es evaluar el crecimiento, descartar la presencia de malformaciones o secuelas de infecciones prenatales y conocer como se está adaptando el niño a su medio ambiente. El procedimiento de la exploración del recién nacido requiere paciencia, suavidad y flexibilidad. Por tanto, si el niño está tranquilo y relajado cuando se inicia la exploración, se debe empezar por la palpación del abdomen o por la auscultación cardíaca, para pasar después a otras manipulaciones más molestas. En relación al desarrollo psicomotor es el área que presenta mayor desarrollo durante esta edad es el área motora y se espera que al finalizar esta etapa el lactante haya alcanzado su independencia desplazándose por sí solo ytomando objetos con sus manos. El examen se debe realizar con la menor cantidad de ropa posible, independientemente de la edad o motivo de consulta. La mayor parte del examen se puede realizar en los brazos de la madre, lugar donde se sentirá cómodo, incluso se pueden examinar mientras duermen o son amamantados, este último aspecto puede ser útil para evaluar las técnicas de lactancia materna. Si el niño llora, se debe evaluar el llanto. Cabe destacar que inmediatamente al nacer, se realiza el test de APGAR (Apariencia, Pulso, Gesticulación, Actividad y Respiración) para evaluar la vitalidad del RN, la cual debe realizarse al 1er min y a los 5 min de vida extrauterina, asignando una puntuación que va del 0 al 10, siendo de 0 a 3 asfixia perinatal, de 4 a 6 asfixia perinatal moderada y de 7 a 10 sin asfixia perinatal. La repetición del test dependerá siempre del estado físico en el que se encuentre él neonato. Si la puntuación resulta ser menor a 7ptos, se repite el test cada 5 min hasta los 20 min o hasta que se alcancen dos puntuaciones seguidas iguales a 7 o mayores. Elaborado por: Br. Marian F. Rodríguez Hernández, Preparadora de la asignatura. Supervisión/Edición: Dr. Jesús Ignacio Carrillo, Coordinador de la asignatura. Otro punto a tomar en cuenta dentro del examen físico del recién nacido, es la clasificación según la edad gestacional y el peso. Esto es de gran utilidad para el médico, ya que puede estimar determinados riesgos que pueda presentar el neonato y orientarlo a la conducta a tomar de acuerdo al caso. La edad gestacional puede ser calculada mediante ecografía, fecha de la última menstruación de la madre y a través del Test de Capurro Modificado, que reúne ciertos parámetros físicos y neuromusculares presentes en el neonato para determinar su madurez y posterior clasificación. PARÁMETROS FÍSICOS Elaborado por: Br. Marian F. Rodríguez Hernández, Preparadora de la asignatura. Supervisión/Edición: Dr. Jesús Ignacio Carrillo, Coordinador de la asignatura. Edad gestacional estimada = (204 + 𝑝𝑢𝑛𝑡𝑎𝑗𝑒 𝑎𝑐𝑢𝑚𝑢𝑙𝑎𝑑𝑜) 7 𝑑í𝑎𝑠 𝑎 𝑙𝑎 𝑠𝑒𝑚𝑎𝑛𝑎 Los resultados se obtienen en base a las semanas de gestación, pudiendo clasificarse entre estos tres grupos: Recién Nacido Pre término (RNPreT): menor a 37 semanas. Recién Nacido a Término (RNAT): entre 37 y 41 semanas más 6 días. Recién Nacido Pos término (RNPosT): mayor a 42 semanas. Según el peso se clasifica de la siguiente forma: Pequeño para la Edad Gestacional (PEG): peso por debajo del percentil 10 de la gráfica de crecimiento intrauterino. Adecuado para la Edad Gestacional (AEG): peso entre los percentiles 10 y 90 de la gráfica de crecimiento intrauterino. Grande para la Edad Gestacional (GEG): peso por encima del percentil 90 de la gráfica de crecimiento intrauterino. Para los recién nacidos a término (RNAT) lo clasificamos en base al peso en kilogramos: PEG: peso menor a 2.500gr. AEG: peso entre 2.500-3.800gr. GEG: peso mayor a 3.800gr. PARÁMETROS NEUROMUSCULARES Elaborado por: Br. Marian F. Rodríguez Hernández, Preparadora de la asignatura. Supervisión/Edición: Dr. Jesús Ignacio Carrillo, Coordinador de la asignatura. LACTANTE MAYOR. En este grupo etario, el crecimiento es un aspecto básico a evaluar. Se evaluará también el desarrollo psicomotor, pero ahora con mayor énfasis en el área del lenguaje, que progresa rápidamente en este periodo. Se debe tratar de examinar al niño sentado y acostándolo lo menos posible, ya que esto le genera ansiedad e inquietud. Lo ideal es que el acercamiento sea con las manos vacías, evitando llevar algún instrumento que pueda asustarlo y posteriormente permitirle familiarizarse con el instrumento, tocándolo, observando cómo se utiliza en alguien más (mamá, papá, juguete) o en alguna parte de cuerpo que sea poco vulnerable como la mano o la rodilla. PREESCOLAR Y ESCOLAR. Este es un periodo relativamente estable desde el punto de vista de la salud y se caracteriza por un crecimiento más lento (desaceleración), el que depende principalmente del potencial genético. La evaluación del aspecto social y afectivo del desarrollo psicomotor y el desempeño escolar se revisan en la anamnesis, por lo que el examen físico se centrará en la evaluación de los órganos de la percepción, como audición y visión, pues son determinantes en el aprendizaje. Se debe evaluar la aparición de cambios puberales, sistema musculoesquelético y dentición. Los accidentes, maltratos y abuso afectan principalmente a este grupo etario, por lo que se deben evaluar conductas de riesgo o signos físicos sugerentes. Para obtener la máxima colaboración se debe explicar al niño la importancia de los procedimientos que se van a realizar, dándole instrucciones de lo que debe hacer. El pudor es un aspecto importante en este grupo etario por lo que el examen siempre se debe realizar con ropa interior. ADOLESCENTE. La evaluación del crecimiento cobra mucha importancia, pues el desarrollo puberal condiciona cambios radicales en las características corporales y la aceleración en la velocidad de crecimiento aumenta el riesgo de patologías del sistema musculoesquelético. Por lo cual, tenemos en cuenta las siguientes consideraciones claves: examen físico general, evaluación nutricional (relación peso/talla e índice de masa corporal), evaluación de crecimiento (talla-estatura), y examen genital masculino y genital femenino que incluye el examen de mamas. El desarrollo puberal es evaluado en su progresión según la Escalera de Maduración Sexual (estadios de Tanner, ver guía de Crecimiento y desarrollo). Para respetar su pudor se le pide que se desvista por partes a medida que avanza el examen. Se le debe explicar por qué se evalúan determinados aspectos, qué alteraciones son frecuentes a su edad, y como él mismo puede preocuparse por su cuerpo, dándole sentido al examen y educándolo sobre el autocuidado. Es importante que el examen se realice siempre con un acompañante, su madre o padre, o un auxiliar preferiblemente de su mismo sexo para evitar malos entendidos. Elaborado por: Br. Marian F. Rodríguez Hernández, Preparadora de la asignatura. Supervisión/Edición: Dr. Jesús Ignacio Carrillo, Coordinador de la asignatura. EXAMEN FÍSICO PEDIÁTRICO I. EXAMEN FISICO GENERAL: Comienza con la inspección inicial del paciente. Durante su realización se recopila la información básica para conocer el nivel de desarrollo y estado de salud del paciente; es en este momento en el que se intenta definir si el paciente que se tiene en frente está enfermo o no y si su patología reviste gravedad. El Examen Físico General constará de la valoración de los siguientes elementos: Aspecto general del paciente: en un primer contacto con el paciente se puede establecer una impresión de la gravedad del mismo, basándose en el aspecto general que presente éste. La determinación del estado de gravedad del paciente se forma mediante aspectos objetivos como son la respuesta a estímulos, consciencia, coloración e hidratación de la piel, perfusión tisular y los signos vitales; por otro lado, la experiencia u “ojo clínico” también juega un papel fundamental en el reconocimiento de la gravedad del paciente. Estado de consciencia: la exploración de la consciencia se basa en dos aspectos: Cuantitativo: se evalúa cuán despierto está el paciente (vigilia, obnubilación, estupor o coma), o a través de la escala de Glasgow. Y Cualitativo: funciones cerebrales superiores, las que se infieren de la observación del comportamiento del niño y su lenguaje. Actitud, grado de actividad y marcha: dependen de la edad, desarrollo psicomotor, estado de consciencia, gravedad y dolor. Ej.: los recién nacidos y lactanteshasta los 3 meses tienden a tener una postura de flexión de las extremidades sobre el tronco, con los puños cerrados y el pulgar incluido. Estado nutricional: durante el examen general se hace una estimación de la condición nutricional valiéndose de la inspección y “ojo clínico”, basándose en el aspecto, desarrollo de la masa muscular y masa grasa, características de la piel y el cabello. Posteriormente, se realiza la antropometría y la evaluación nutricional de acuerdo a los parámetros de referencia (Tablas de FUNDACREDESA). Voz y llanto: la voz es un indicador de bienestar, una forma de expresión y comunicación. Por otro lado, el llanto es un índice de vitalidad en lactantes pequeños, además de una forma de comunicación y relación con el medio, que permite inferir su grado de consciencia, la existencia de dolor o malestar y el estado emocional. Crecimiento y desarrollo. Signos Vitales. II. CRECIMIENTO Y DESARROLLO CRECIMIENTO: es el aumento de tamaño corporal. Es un fenómeno cuantitativo derivado de la multiplicación (hiperplasia) y crecimiento (hipertrofia) celular. La evaluación del crecimiento se realiza a través de medidas antropométricas. Elaborado por: Br. Marian F. Rodríguez Hernández, Preparadora de la asignatura. Supervisión/Edición: Dr. Jesús Ignacio Carrillo, Coordinador de la asignatura. DESARROLLO: es un fenómeno cualitativo que corresponde al proceso de transformación y maduración de los distintos órganos y sistemas. Para evaluar el desarrollo se utilizan índices de maduración como el desarrollo psicomotor y puberal, dentición, cierre de fontanelas y maduración ósea. PESO: el instrumento utilizado para pesar es la balanza, la cual debe ubicarse en una superficie sin inclinación, revisando siempre su calibración en cero antes de pesar. TALLA: es la longitud total del cuerpo desde el vértice del cráneo hasta la plata de los pies. La medición se realiza mediante un instrumento llamado estadiómetro o pedómetro, colocando al paciente de pie o acostado. La determinación de la talla de pie o estatura se mide con el estadiómetro ubicado en un eje vertical fijado a la pared. El paciente debe mantenerse erguido con la mirada paralela al suelo apoyando la cabeza, columna, glúteos y talones contra el instrumento, con los pies separados en 45° para mantener el equilibrio. INCREMENTOS DE PESO ESPERABLES DURANTE LA INFANCIA 1er Mes 600 gr 2do y 3er Mes 800 gr por mes 2do Trimestre 600 gr por mes 3er Trimestre 500 gr por mes 4to Trimestre 300 gr por mes 2do Año 200 gr por mes Preescolar hasta la Pubertad 2 kg por año Los niños menores de 3 años o con menos de 16kg deben pesarse acostados o sentados (si ya puede mantener el equilibrio), siempre desnudo, sin pañal, y con todo su cuerpo dentro de la balanza, asegurándose que no se afirme de su madre o cualquier objeto. Los niños mayores de 3 años se pesan de pie, ubicándolo en el centro de la plataforma, en ropa interior. Cuando la talla se determina con el paciente acostado se denomina longitud corporal y se utiliza hasta los 2 o 3 años. Elaborado por: Br. Marian F. Rodríguez Hernández, Preparadora de la asignatura. Supervisión/Edición: Dr. Jesús Ignacio Carrillo, Coordinador de la asignatura. INCREMENTOS DE TALLA ESPERABLES DURANTE LA INFANCIA Nacimiento 50 cm en promedio 1er año 25 cm (mayor proporción en el 1er trimestre) 2do año 12,5 cm 3er año en adelante 4 - 8 cm por año Estirón Puberal 8 - 12 cm por año PERÍMETRO CEFÁLICO: este indicador mide el tamaño del cráneo e indirectamente evalúa el tamaño del encéfalo. Para medir el perímetro cefálico se requiere una cinta métrica no elástica, de 0,5 cm de grosor. El operador se ubica a la derecha del niño, con el dedo medio de su mano izquierda fija la cinta en la protuberancia occipital y el pulgar izquierdo fija el extremo de la cinta en la región parietal derecha para evitar desplazamientos, mientras con la otra mano circunda con la cinta la cabeza pasando por el arco supraciliar, hasta encontrar el punto cero de la cinta. INCREMENTOS DE PERÍMETRO CEFÁLICO ESPERABLES DURANTE LA INFANCIA Nacimiento 35 cm en promedio 1er año 10-12 cm (la mitad en el 1er trimestre) Posteriormente hay una marcada desaceleración del crecimiento craneal, de modo que a los 6 años alcanza el 90% del tamaño definitivo. 55 cm en promedio EVALUACIÓN DEL CRECIMIENTO: para evaluar el crecimiento corporal, es importante considerar que éste sigue un patrón dinámico, conocido y predecible en el tiempo. Es fundamental conocer la tendencia del crecimiento de cada niño y compararla con un patrón de normalidad, que corresponde a una curva normal de crecimiento poblacional, en las que se han definido parámetros estadísticos que se utilizan como referencia. En Venezuela se utilizan las tablas y curvas de crecimiento publicadas por FUNDACREDESA (ver final de la guía). Elaborado por: Br. Marian F. Rodríguez Hernández, Preparadora de la asignatura. Supervisión/Edición: Dr. Jesús Ignacio Carrillo, Coordinador de la asignatura. EVALUACIÓN NUTRICIONAL: para la evaluación nutricional se utilizan diversos indicadores que permiten establecer el diagnóstico nutricional del paciente pediátrico. Peso para la Edad (P/E): mide en forma global el crecimiento de un niño. Es un indicador muy sensible durante el periodo de crecimiento rápido, especialmente en el lactante; posteriormente pierde sensibilidad y utilidad. Su mayor limitación radica en no considerar las diferencias de talla. Útil ee menores de 2 años Talla para la Edad (T/E): evalúa el crecimiento lineal. Este indicador es útil para conocer la historia nutricional de un niño, y su alteración nos indica alteraciones nutricionales crónicas. Se relaciona con la expresión de la carga genética. Peso para la Talla (P/T): evalúa la armonía del crecimiento. Es un parámetro muy sensible a los cambios del estado nutricional, y su alteración indica alteraciones nutricionales agudas. Útil en mayores de 2 años. Índice de Masa Corporal (IMC): es una razón matemática que asocia la masa y la talla de un individuo. El IMC varia con la edad, especialmente con el grado de desarrollo puberal, ya que el contenido de grasa corporal aumenta a medida que éste avanza. Por lo tanto, se debe interpretar el IMC en función de la edad y el desarrollo puberal de cada niño. Útil de los 6 años en adelante. DIAGNÓSTICO DE IMC Desnutrición < P3 Riesgo de Desnutrición P3 - < P10 Normalidad P10 - P 90 Sobrepeso P 90 - P 97 Obesidad > P 97 III. DESARROLLO PSICOMOTOR Es un proceso dinámico de desarrollo, resultado de la maduración del sistema nervioso, la función neuromuscular y los órganos sensoriales, que ocurre en la medida que el niño interactúa con su entorno, y se traduce en la adquisición sistemática de habilidades y respuestas cada vez más complejas. Sigue una secuencia ordenada y previsible de crecimiento y maduración neurológico y físico. Es decir, los cambios no se producen en cualquier orden, sino que se puede predecir su curso normal, sabiendo que, para un logro determinado, el niño requiere previamente haber madurado otros aspectos. Tiene un sentido céfalo- caudal, que se refiere al orden en que progresan las habilidades, ej. para poder dominar la marcha, el niño debe previamente haber controlado el sostén cefálico, haberse sentado y parado respectivamente. Progresa de proximal a distal, pues el niño no podrá explorar con sus manos aquello que le interesa, si no controla su tronco y hombros para mantenerse erguido. https://es.wikipedia.org/wiki/Masa https://es.wikipedia.org/wiki/Talla_(estatura) Elaborado por: Br. Marian F. Rodríguez Hernández, Preparadora de la asignatura. Supervisión/Edición:Dr. Jesús Ignacio Carrillo, Coordinador de la asignatura. Para poder evaluar y comprender el proceso del desarrollo psicomotor, se separa en cuatro áreas: Motriz Gruesa/ Fina, Coordinación, Social, Lenguaje. Las respuestas del niño van de involuntarias, generalizadas y simétricas a voluntarias, definidas y asimétricas. HITOS DEL ÁREA MOTORA GRUESA Las destrezas motrices gruesas se refieren a la evolución de la bipedestación y deambulación, aparición de patrones de motricidad complejos a medida que mejora el equilibrio y la coordinación, evolucionando de la dependencia completa a la independencia en lo que se refiere a desplazamiento. Edad HITO DEL DESARROLLO Recién Nacido Levanta la cabeza en prono/ Flexión de las cuatro extremidades 3 meses En prono se apoya en los antebrazos/ Levanta la cabeza 5 meses Gira a supino/ Se sienta con apoyo pélvico 6 meses Se sienta con apoyo 9 meses Gatea 10 meses Se pone de pie 12 meses Camina con una mano sostenida 14 meses Camina solo 16 meses Trepa escaleras 20 meses Sube escaleras sin alternar pies 24 meses Salta con ambos pies y patea una pelota 30 meses Sube escaleras alternando pies 3 años Anda en triciclo/ Trepa, sube y baja escaleras 4 años Corre, se detiene y parte bruscamente/ Salta obstáculos 5 años Anda en bicicleta sin ruedas de apoyo HITOS DEL ÁREA MOTORA FINA Esta área comprende la adquisición de destrezas con las manos, comenzando por el desarrollo de la prehensión, la que se irá perfeccionando con el tiempo, haciéndose cada vez más precisa y fina. Edad HITO DEL DESARROLLO Recién Nacido Mano cerrada con el pulgar incluido 3 meses Mano más abierta, inicia liberación del pulgar 4 meses Garra anular o cubital 6 meses Prehensión radial/ Se cambia objetos de mano 7 meses Oponencia del pulgar 10 meses Pinza fina 16 meses Deja caer con precisión bolitas en un recipiente pequeño 22 meses Capaz de realizar torre de 6 cubos 24 meses Hace un tren de cubos/ Traza una línea vertical/ Dibuja un círculo 30 meses Realiza movimientos controlados con un lápiz 3 años Copia una cruz/ Dibuja una figura humana reconocible 4 años Dibuja cuadrados/ Recorta con tijeras/ Toma el lápiz correctamente 5 años Imita letras y triángulos/ Realiza figura humana con todas sus partes Elaborado por: Br. Marian F. Rodríguez Hernández, Preparadora de la asignatura. Supervisión/Edición: Dr. Jesús Ignacio Carrillo, Coordinador de la asignatura. HITOS DEL ÁREA DE COORDINACIÓN Esta área comprende las conductas que requieren coordinación entre movimientos y posturas con los órganos sensoriales. Edad HITO DEL DESARROLLO Recién Nacido Reacciona con aversión a estímulos luminosos o sonidos intensos 1 mes Fija la mirada 2 meses Sigue con la mirada 4 meses Se coloca juguetes en la boca y los observa 12 meses Coopera al vestirse 15 meses Se alimenta con cuchara derramando 2 años Come con tenedor/ Inicia control de esfínter diurno 3 años Ayuda a vestirse y desvestirse/ Come solo/ Desabrocha 4 años Se viste y desviste solo/ Va al baño solo 5 años Control de esfínter diurno y nocturno/ Realiza su aseo personal solo HITOS DEL ÁREA DEL LENGUAJE El lenguaje comprende capacidades receptivas: oír, escuchar y comprender, y expresivas: dar a conocer a los demás ideas, pensamientos o deseos, ya sea a través del habla o del lenguaje no verbal o corporal. El lenguaje receptivo precede al expresivo. Edad HITO DEL DESARROLLO Recién Nacido Llanto 2 meses Gorjeo 4 meses Ríe fuerte 6 meses Balbuceo 8 meses Disílabos 10 meses Detiene la acción a la orden de “No” 12 meses 2 a 3 palabras con significado/ Indica el objeto que desea/ Entiende una orden simple 15 meses 2 a 6 palabras con significado 2 años Frases de 2 a 3 palabras/ Dice su nombre 3 años Frases de 3 palabras/ Utiliza verbos y el “Yo” 4 años Utiliza correctamente los verbos/ Relata historias 5 años Ensaya el lenguaje/ Utiliza adverbios, preposiciones, conjunciones Elaborado por: Br. Marian F. Rodríguez Hernández, Preparadora de la asignatura. Supervisión/Edición: Dr. Jesús Ignacio Carrillo, Coordinador de la asignatura. IV. SIGNOS VITALES Forman parte tanto del examen físico general, como de la evaluación de algunos sistemas, como el cardiovascular o respiratorio. La interpretación de cualquiera de los signos vitales, debe hacerse en el contexto del paciente y del resto del examen, considerando las condiciones fisiológicas que puedan inducir variaciones en los valores basales, y tomando como marco de referencia los rangos de normalidad descritos para cada edad. PULSO: es una onda producida por la sístole ventricular, que puede palparse a nivel de los vasos arteriales debido a la expansión de las paredes de éstos por el paso de la sangre eyectada. Al evaluar el pulso no solo debemos buscar la existencia de éste, sino que se deben describir algunas características del mismo tales como el ritmo, amplitud, frecuencia, consistencia de la pared, entre otros. Se expresa en pulsaciones por minuto. Para la determinación del pulso periférico, se debe buscar la onda de pulso palpando con el pulpejo de los dedos medio y anular la zona anatómica en donde se sabe que discurre la arteria elegida. Durante la palpación no se debe ejercer demasiada presión, pues se puede colapsar la arteria o llegar a percibir erróneamente el pulso propio. HITOS DEL ÁREA SOCIAL Esta área estudia y analiza el desarrollo de la socialización, la capacidad de relacionarse con los demás, de establecer nexos o vínculos con los seres queridos (apego) y el proceso de búsqueda de autonomía e independencia. Edad HITO DEL DESARROLLO 1 mes Vínculo padres- lactante/ Alerta especial a la madre 2 meses Sonrisa social 4 meses Apego del lactante con sus padres 6 meses Inicialmente tímido con los extraños/ Dirige la vista buscando lo que se ha caído/ Descubre objetos parcialmente escondidos 7 meses Angustia de separación 9 meses Aplaude 12 meses Dice “chao” con la mano/ Descubre los objetos escondidos 15 meses Se inicia la información de las relaciones/ Autoconfort 18 meses Abraza a los padres/ Etapa de timidez 2 años Imita a otros para complacerlos/ Juega en paralelo/ Tolera la separación 3 años Juega con otros niños/ Imita acciones de adultos/ Diferencia sexos 4 años Prefiere juegos en grupo/ Le gusta ser el líder 5 años Juega con normas con otros niños/ Expresa sentimientos Elaborado por: Br. Marian F. Rodríguez Hernández, Preparadora de la asignatura. Supervisión/Edición: Dr. Jesús Ignacio Carrillo, Coordinador de la asignatura. El pulso periférico puede tomarse en cualquier arteria que se pueda palpar, aunque existen algunos sitios anatómicos que son de más fácil acceso. A continuación, se mencionan los más frecuentemente utilizados en pacientes pediátricos: Pulso Carotideo: usado principalmente en preescolares y escolares, debido a que los lactantes tienen un cuello corto, lo que dificulta la palpación de esta arteria. Pulso Humeral: es de fácil determinación en todas las edades. Pulso Radial: es difícil de determinar en lactantes dado que tienen panículo adiposo a ese nivel, pero es muy útil en niños mayores. Pulso Femoral: es usado en todas las edades porque es fácil de encontrar en RN, lactantes e incluso en niños obesos, y es de especial utilidad en situaciones de emergencia. FRECUENCIA CARDIACA (FC): determinación del latido cardiaco mediante la auscultación del corazón en los distintos focos cardiacos. Característicamente va disminuyendo con la edad, sus valores más altos se encuentran en el RN y posteriormente en la pubertad se adquiere un rango similar al de la adultez. Se expresa en latidos por minuto. RANGOS NORMALES DE FRECUENCIA CARDIACA Y PULSO SEGÚNGRUPO ETARIO Grupo Etario Latidos/Minuto Recién Nacido 120 - 160 Lactante menor 90 - 140 Lactante mayor 80 - 120 Preescolar 70 - 110 Escolar/ Adolescente 60 - 100 El aumento de la FC sobre el rango esperado para la edad se llama taquicardia y puede deberse a condiciones fisiológicas como el ejercicio, la risa, las emociones, algunos alimentos o bebidas, el dolor, etc.; o patológicas como la fiebre, es importante mencionar que por cada grado °C que aumenta la temperatura, la FC aumenta de 10-15 latidos por minuto. Por otro lado, la disminución por debajo del rango esperado para la edad se conoce como bradicardia. Si hablamos de pulso nos referiremos a taquisfigmia o bradisfigmia respectivamente. TEMPERATURA: es el resultado del equilibrio entre los mecanismos de producción y los de pérdida de calor. Existen múltiples condiciones tanto fisiológicas como patológicas, que producen variaciones de la temperatura corporal. Para la determinación de la temperatura se utiliza de manera estandarizada el termómetro de mercurio, el cual se puede colocar en distintos lugares del cuerpo; la elección del sitio dependerá básicamente de la edad del niño y su colaboración. Independiente del sitio de elección, el tiempo de control de la temperatura será de 3 minutos. Elaborado por: Br. Marian F. Rodríguez Hernández, Preparadora de la asignatura. Supervisión/Edición: Dr. Jesús Ignacio Carrillo, Coordinador de la asignatura. Axilar: se puede realizar en niños de cualquier edad, asegurándose de que el bulbo del termómetro esté efectivamente en el hueco axilar y posteriormente bajar el brazo a lo largo del cuerpo, manteniéndolo firme mientras se controla la temperatura. Rectal: se debe determinar con termómetros rectales de bulbo corto, punta redondeada y vidrio más resistente. Se utiliza principalmente en RN y lactantes debido a que posteriormente es molesto para los pacientes. Bucal: se determina en niños mayores de 6 años para estar seguros de que no intentará morder el termómetro. Para la medición se introduce el termómetro debajo de la lengua. RANGO DE VALORES NORMALES DE TEMPERATURA Temperatura Valor min/máx. Axilar 36°C – 37°C Rectal 36°C - 37,8 °C Bucal 36°C – 37,3°C FRECUENCIA RESPIRATORIA (FR): es el número de respiraciones por minuto. La FR va disminuyendo desde el nacimiento, hasta acercarse a los valores del adulto en la edad escolar. Por lo tanto, los límites de normalidad dependerán de la edad del paciente. La medición de la FR se puede realizar mediante inspección, palpación y auscultación. Debido a que los RN y lactantes tienen una respiración abdominal, se observará la excursión de la pared abdominal. En caso de los niños mayores se puede observar o palpar los movimientos torácicos con la mano sobre el tórax del niño. FRECUENCIA RESPIRATORIA ESPERADA POR GRUPO ETARIO Grupo Etario Respiraciones/ minuto Recién Nacido 40 – 60 Lactante Menor 30 - 45 Lactante Mayor 20 - 40 Niño Mayor 15 - 20 Un aumento de la FR sobre lo esperado se conoce como taquipnea y una disminución por debajo del rango normal bradipnea. PRESIÓN ARTERIAL (PA): tiene dos componentes, la presión arterial sistólica es el valor más alto de presión y depende del gasto cardiaco, y la presión arterial diastólica, que es el valor más bajo de presión y depende de la resistencia vascular periférica. Al contrario de lo que ocurre con la FC y la FR, la presión arterial en los niños va aumentando con la edad, y su rango normal depende además del sexo y de la talla del niño. Elaborado por: Br. Marian F. Rodríguez Hernández, Preparadora de la asignatura. Supervisión/Edición: Dr. Jesús Ignacio Carrillo, Coordinador de la asignatura. Para la determinación de la PA se requiere un estetoscopio y esfigmomanómetro, ambos deberían ser de tamaño adecuado para el paciente. A continuación, palpamos el pulso humeral y sobre el lugar determinado colocamos el estetoscopio. Se infla el manguito de 20-30 mmHg más arriba del punto en el que se siente desaparecer el pulso, y luego se desinfla lentamente, auscultando con atención los ruidos de Korotkoff. La presión que corresponde al inicio de los latidos es la sistólica y el punto en que desaparecen es la diastólica. Ésta forma de determinación es válida para preescolares, escolares y adolescentes. En los lactantes no son perceptibles los ruidos por medio del estetoscopio, por lo que en ellos se determinará la presión palpatoriamente, siguiendo los mismos pasos descritos anteriormente y prestando atención al desinflar el manguito, ya que el punto en el que vuelvan a aparecer las pulsaciones corresponde a la presión sistólica; la diastólica no se puede determinar por este medio. Los valores de PA obtenidos deben ser llevados a las tablas de crecimiento para determinar el P50 para cada edad, sin embargo, se presentan como valores promedio los siguientes. VALORES DE PRESIÓN ARTERIAL POR GRUPO ETARIO Grupo Etario PAS PAD Lactante menor 90 50 Lactante mayor 95 55 Preescolar 100 60 Escolar 110 70 Adolescente 120 75 EXAMEN FÍSICO SEGMENTARIO I. CABEZA, CARA Y CUELLO: la forma habitual de la cabeza es ovalada y simétrica, pero puede presentar deformidades pasajeras en los RN por la posición intrauterina y el paso por el canal de parto, como el cabalgamiento de suturas, cefalohematomas, y edema del cuero cabelludo. PERÍMETRO CEFÁLICO: debe medirse en todos los controles de salud hasta los 2 años de edad y los valores de la medición deben ser llevados a las curvas de crecimiento correspondientes. Las variaciones patológicas del perímetro cefálico se denominan macrocefalia y microcefalia respectivamente. FONTANELAS Y SUTURAS: el cráneo de los RN está formado por placas óseas unidas por las líneas de sutura, que convergen en las fontanelas, para permitir la expansión del cráneo. Las principales suturas son: sagital, coronal, lamboidea y metópica, las cuales se palpan como arrugas en las líneas de oposición de los huesos hasta los 6 meses. Elaborado por: Br. Marian F. Rodríguez Hernández, Preparadora de la asignatura. Supervisión/Edición: Dr. Jesús Ignacio Carrillo, Coordinador de la asignatura. En el RN y lactante se palpan dos fontanelas: ANTERIOR O BREGMÁTICA: se ubica en la unión de las suturas coronal y sagital. Es de forma romboidea, mide 2,5 ± 1,5 cm. En la mayoría de los niños se cierra antes de los 2 años 6 meses, con una media de 14 meses. A la palpación se percibe como una cavidad blanda, ligeramente deprimida, con un latido mínimo y protruye levemente con el llanto. Al palpar una fontanela tensa y abombada es indicador de aumento en la presión intracraneal; por el contrario, una fontanela deprimida suele ser indicador de cuadros de deshidratación. POSTERIOR O LAMBOIDEA: se encuentra en la unión de las suturas sagital y lamboidea. Es puntiforme y mide hasta 1 cm, puede estar cerrada al nacer o cerrarse antes de los 3 meses. CARA: alberga los órganos de los sentidos, los cuales deben explorarse individualmente. OJOS: el examen de los ojos se realiza principalmente mediante la inspección, mientras que la visión se explora con pruebas directas e indirectas. Ambos ojos deben ser de similar diámetro y color. En la exploración de los ojos se evalúan: 1. Estructuras Externas: párpados (se evalúa la simetría y apertura, presencia de enrojecimiento, y edema), Esclerótica (se encuentra tapizada por la conjuntiva bulbar y su color debe ser blanco), Conjuntivas (el color normal de la conjuntiva palpebral es rosado, mientras que la bulbar es transparente, debiendo hacer énfasis en la búsqueda de cambios de coloración en las mismas), Córnea (es transparente, por lo que se debe descartar siempre la presencia de opacidad o turbiedad), tambiénse deben evaluar las cejas y pestañas. 2. Motilidad Ocular: se evalúa haciendo que el niño siga con su mirada un objeto llamativo, el cual se moviliza hacia distintas direcciones de acuerdo a los movimientos que realizan los músculos extrínsecos del ojo, horizontal, vertical y oblicuamente. (La pérdida del paralelismo se denomina estrabismo, siendo éste fisiológico hasta los 6 meses) 3. Reflejos Pupilares a la Luz: al evaluar las pupilas se debe se debe evaluar su forma y diámetro, siendo lo normal una forma redondeada y de igual tamaño (2-4 mm). El reflejo fotomotor se explora iluminando un ojo con una linterna, haciendo incidir el haz de luz Elaborado por: Br. Marian F. Rodríguez Hernández, Preparadora de la asignatura. Supervisión/Edición: Dr. Jesús Ignacio Carrillo, Coordinador de la asignatura. tangencialmente, y bloqueando el paso de la luz al ojo contralateral colocando la mano del examinador verticalmente siguiendo la línea media de la cara, obteniendo como respuesta la contracción de la pupila. La pupila contralateral sin recibir el haz de luz directo también responde contrayéndose, y esto se conoce como reflejo consensual. 4. Reflejo Rojo Pupilar: este examen permite evidenciar, en forma rápida y no invasiva, la indemnidad de todos los elementos transparentes ubicados entre la córnea y la retina. Para realizar esta evaluación el examinador se debe colocar a 30 cm del niño y enfocar con el oftalmoscopio el centro de la pupila, acercándose lentamente hasta ver una zona color rojiza que ocupa todo el diámetro de la pupila. Debe realizarse en todos los controles hasta los 3 años. 5. Visión: su exploración dependerá de la edad del paciente pediátrico: Recién Nacidos: como son miopes, en ellos la visión se evalúa por métodos indirectos, explorando los reflejos pupilares. Lactantes: la exploración se basa en supervisar la progresión de la fijación y seguimiento con la mirada, y el interés que manifiestan en su entorno. Preescolares: una forma práctica de evaluarla consiste en enseñarles láminas de cuentos infantiles o juguetes pequeños para que los identifiquen. A partir de los 3 años, como ya los niños colaboran con la examinación, es posible evaluar la agudeza visual de forma directa, mediante pruebas estandarizadas como las cartillas ortópticas, que consisten en tableros con imágenes de distintos tamaños, ordenadas de mayor a menor tamaño, para determinar cuál es la fila de elementos más pequeños que el niño es capaz de identificar con claridad, mirando con un solo ojo. La cartilla ortóptica se ubica a 5 metros de distancia del niño, el cual debe cubrir sin ejercer presión uno de sus ojos (puede ser con su propia mano o con una cartulina). Con un apuntador, el examinador indica la figura que debe ser leída, se recomienda comenzar por las figuras centrales y luego subir o bajar de acuerdo a la capacidad visual del niño. Existen cartillas ópticas adaptadas a los distintos grupos etáreos: Pupilas Isocóricas (normales) Anisocoria Midriasis Miosis Elaborado por: Br. Marian F. Rodríguez Hernández, Preparadora de la asignatura. Supervisión/Edición: Dr. Jesús Ignacio Carrillo, Coordinador de la asignatura. Cartilla de Allen: ideal para los niños pequeños, la cual tiene figuras de animales. Cartilla E de Snellen (para analfabetos): a partir de los 4-5 años, debiendo identificar hacia qué dirección apuntan las patitas de la E. Cartilla con letras de Snellen (para los que saben leer). OREJAS: el examen incluye inspección y palpación de los pabellones auriculares, la otoscopia y la valoración de la función auditiva. Pabellones Auriculares: se debe observar su forma, simetría e implantación, en búsqueda de malformaciones congénitas. La implantación se explora trazando una línea horizontal, imaginaria, entre el canto ocular externo y la protuberancia del occipucio, y otra vertical perpendicular a la anterior, por delante del pabellón auricular. Normalmente el polo superior sobrepasa esta línea o al menos la toca, con un ángulo anteroposterior no mayor a 10°. Otoscopia: mediante este procedimiento se evalúa el oído externo (constituido por el conducto auditivo externo: CAE), y parte del oído medio (membrana timpánica). Este procedimiento se realiza con la cabeza flexionada hacia el hombro opuesto del oído que se examina, ya sea con el niño sentado o acostado. Con la mano diestra del examinador, se introduce el otoscopio, con el borde cubital de la mano apoyado de la mejilla, éste no debe introducirse más de 1 a 1,5 cm para no ocasionar molestia y dolor. Mientras que con la otra mano se tracciona suavemente el pabellón auricular hacía abajo para rectificar el CAE. Cartilla de Allen Cartilla con letras de Snellen Cartilla E de Snellen Elaborado por: Br. Marian F. Rodríguez Hernández, Preparadora de la asignatura. Supervisión/Edición: Dr. Jesús Ignacio Carrillo, Coordinador de la asignatura. Los hallazgos normales a la otoscopia corresponden a la permeabilidad del CAE, ausencia de secreciones patológicas en éste, la indemnidad de la membrana timpánica, su coloración blanca nacarada, y la presencia del reflejo luminoso. La importancia de su realización en todas las consultas pediátricas radica en que permite diagnosticar precozmente problemas locales, los cuales pudieran determinar trastornos en la función auditiva al impedir la transmisión del estímulo sonoro, así mismo permite el diagnóstico de infecciones del oído externo y medio, las cuales son muy frecuentes en estas edades. Audición: la evaluación de la audición se realiza a lo largo de toda la consulta, a través de los diálogos que sostiene el niño, su grado de atención a la conversación y su respuesta a los sonidos. Sin embargo, esto se debe adaptar a la edad y desarrollo psicomotor de cada niño. Se pueden realizar 3 tipos de valoraciones: Valoración Indirecta: se basa en la supervisión de la progresión de la vocalización y el lenguaje. Valoración Directa: se realiza observando la respuesta del niño a los ruidos y los estímulos auditivos. Percepción de los padres acerca de la audición del niño. NARIZ: se debe examinar su forma, tamaño, y color, así como las fosas nasales y senos paranasales. Fosas Nasales: para su exploración se debe traccionar la punta de la nariz hacia arriba con el pulgar, y con ayuda de una fuente de luz se observa su interior, prestando atención a las características del moco, enrojecimiento o sangramiento de la mucosa, y buscando cuerpos extraños. En los RN es importante evaluar la permeabilidad tanto de las cosas nasales como de las coanas debido a que son respiradores nasales exclusivos, para lo cual se introduce una sonda muy delgada a través de éstas. Senos Paranasales: son espacios aéreos dentro de los huesos craneanos, que se van desarrollando en distintos momentos de la infancia. Su exploración se reserva a niños que presenten clínica sugestiva de sinusitis, en ellos se percute y palpan los senos paranasales en busca de zonas de sensibilidad o dolor. DESARROLLO DE SENOS PARANASALES Seno Presente Etmoidal Nacimiento Maxilar Nacimiento Esfenoidal 3 años Frontal 8 años Elaborado por: Br. Marian F. Rodríguez Hernández, Preparadora de la asignatura. Supervisión/Edición: Dr. Jesús Ignacio Carrillo, Coordinador de la asignatura. BOCA Y OROFARINGE: la exploración se basa principalmente en la inspección de cada uno de sus elementos, lo cual permite determinar las características de cada uno de ellos. El examen de la cavidad orofaríngea en lactantes suele ser sencilla y se puede aprovechar el momento del llanto para realizar el mismo, ya que al llorar abren muy bien la boca.A niños más grandes se les pide directamente que abran la boca y saquen la lengua diciendo “AHH” sostenidamente para lograr visualizar las estructuras orofaríngeas con ayuda de un bajalenguas apoyado en la unión de los dos tercios anteriores con el tercio posterior de la lengua. Labios: se evalúa su color, simetría y movilidad. Mucosa Oral: es rosada y húmeda, y en ella no debe haber lesiones. Aliento: la presencia de halitosis se puede deber a diversas causas como infecciones locales, sistémicas o mala higiene bucal. Paladar: en RN se explora insertando el dedo índice en la boca del niño con el pulpejo orientado hacia arriba para palpar suavemente el paladar y descartar la presencia de malformaciones, mientras simultáneamente se evalúa la calidad de la succión. Lengua: debe estar bien alojada en el piso de la boca y no protruir. Se evalúa además su movilidad pidiéndole al paciente que haga movimientos intentando tocarse la punta de la nariz, la quijada y las mejillas. Orofaringe: la mucosa faringoamigdalina es lisa, suave, brillante, y rosada, sin secreciones. Se debe evaluar las amígdalas en cuanto a su coloración y tamaño, que comienza a crecer a los 2 años y alcanzan su máximo crecimiento entre los 6 y 8 años, involucionando posteriormente durante la pubertad. Dientes: se debe evaluar su forma, separación, y progresión de su desarrollo, los cuales aparecen en pares, alternando dos inferiores y luego dos homólogos superiores. Además de esto se debe identificar la presencia de caries u otras alteraciones dentales. CRONOLOGÍA DE LA DENTICIÓN TEMPORAL Incisivos centrales inferiores 6 meses Incisivos centrales superiores 7 a 9 meses Incisivos laterales inferiores 7 a 8 meses Incisivos laterales superiores 9 meses Primeros molares 12 a 14 meses Caninos 16 a 18 meses Segundos molares inferiores 20 ± 6 meses Segundos molares superiores 24 ± 6 meses Elaborado por: Br. Marian F. Rodríguez Hernández, Preparadora de la asignatura. Supervisión/Edición: Dr. Jesús Ignacio Carrillo, Coordinador de la asignatura. CUELLO: INSPECCIÓN: se evalúa la simetría, largo, forma e implantación. Además, se debe buscar la existencia de aumentos de volumen localizados o generalizados y la presencia de venas distendidas, hallazgos que son siempre patológicos. PALPACIÓN: esta debe ser suave para no provocar molestias, se buscan los pulsos carotideos y se identifican sus características. Se debe palpar la musculatura cervical, fijándose en el tono, y evaluando la movilidad activa y pasiva del cuello, así como la existencia de zonas dolorosas. Así mismo se deben evaluar las características de las cadenas ganglionares cervicales (consistencia, tamaño, sensibilidad, y movilidad) y la glándula tiroides. ASCULTACIÓN: tiene como finalidad la identificación de soplos, que en general, corresponden a la irradiación de soplos cardíacos y su presencia siempre es patológica. II. EXAMEN FÍSICO DE TÓRAX MAMAS: Recién Nacidos: en los RN representan un parámetro de desarrollo, siendo sus características útiles para el cálculo de la edad gestacional (Test de Capurro). Existen tres fenómenos en el RN que pueden ocurrir a causa de la elevación de estrógenos maternos antes del nacimiento, estos son: galactorrea, telarquia y telorragia neonatal, las dos primeras más frecuentes que la tercera. Los pezones pueden secretar un líquido blanquecino (similar a la leche matera), también llamado “Leche de brujas”, y es lo que conocemos como galactorrea; la telarquia es un aumento del tamaño de las mamas del RN. Ambos signos son fisiológicos y se resuelven de manera espontánea alrededor de dos semanas después del nacimiento a medida que se van CRONOLOGÍA DE LA DENTICIÓN DEFINITIVA Incisivos centrales inferiores 5,5 a 6 años Primeros molares 6 a 7 años Incisivos laterales inferiores 7 a 8 años Incisivos laterales superiores 7 a 8 años Incisivos centrales superiores 7,5 a 9 años Caninos 9 a 11 años Primeros premolares 10 a 12 años Segundos premolares 10,5 a 12 años Segundos molares 11 a 13 años Terceros molares 17 a 21 años Elaborado por: Br. Marian F. Rodríguez Hernández, Preparadora de la asignatura. Supervisión/Edición: Dr. Jesús Ignacio Carrillo, Coordinador de la asignatura. eliminando las hormonas maternas. No es recomendable en estas condiciones masajear, apretar o extraer el líquido de las mamas del RN ya que esto puede traer consigo un proceso infeccioso. Por otra parte, la telorragia neonatal es una secreción sanguinolenta uni o bilateral, la causa más común es la ectasia ductal mamaria y se resuelve también de manera espontánea. Lactantes y prepúberes: las mamas no presentan cambios desde la etapa de lactante hasta el inicio de la pubertad, encontrándose un pezón levente pigmentado y plano, sin evidencia de aumento de volumen, dolor o secreción. Adolescente: mediante la inspección se evalúan las características del pezón, y a través de la palpación se precisa la extensión del tejido mamario. Para la palpación de la mama, dividiremos ésta en 4 cuadrantes, los cuales servirán como referencia y se recorrerán ordenadamente, describiendo la presencia de nódulos u otras alteraciones. Para finalizar se presiona ligeramente el pezón para descartar la presencia de secreción a través de éste. En las adolescentes las mamas son indicadores de desarrollo y maduración sexual, debiendo ser evaluadas también mediante la Escalera de Maduración Sexual (escala de Tanner). Es una oportunidad de oro de enseñar a la adolescente el autoexamen de mamas. APARATO RESPIRATORIO: INSPECCIÓN: en un niño sano, ambos hemitórax son simétricos en tamaño y forma. Para evaluar la simetría se debe examinar el tórax desde adelante, atrás y por los laterales, tomando como referencia la línea medioesternal y vertebral. Además, se evalúa si existen malformaciones congénitas como Pectus excavatum o carinatum, así como la presencia de signos de dificultad respiratoria como tiraje intercostal, aleteo nasal y cianosis. Recién Nacido y Lactante Menor: el perímetro torácico es similar al de la cabeza y su forma es circular, siendo el diámetro anteroposterior similar al transversal. La pared torácica es delgada y blanda, y el apéndice xifoides suele ser prominente. En cuanto a la dinámica respiratoria, ésta suele ser predominantemente abdominal. Preescolar: a partir de los 2 años comienza el crecimiento de la caja torácica, predominantemente en sentido transversal, lo que determina que éste se vaya aplanando. Además, aumenta la proporción del tórax en relación a la cabeza, y la dinámica respiratoria es toracoabdominal. Telorragia Galactorrea Telarquia Elaborado por: Br. Marian F. Rodríguez Hernández, Preparadora de la asignatura. Supervisión/Edición: Dr. Jesús Ignacio Carrillo, Coordinador de la asignatura. Escolar y Adolescente: el tamaño del tórax aumenta progresivamente y la pared torácica se hace menos blanda debido a que la estructura ósea se vuelve más firme y se desarrolla la musculatura. La dinámica respiratoria es predominantemente torácica. PALPACIÓN: tiene como objetivo la evaluación de las vibraciones vocales, la expansibilidad y la elasticidad. Recordando que se deben comparar estos parámetros en ambos hemitórax. Vibraciones Vocales: corresponden a la transmisión de los ruidos desde la vía respiratoria, a través del parénquima pulmonar, los que se palpan como un frémito al posicionar suavemente la mano sobre la pared torácica. Normalmente en los niños pequeños, la caja torácica vibra al hablar, llorar, y al existir secreciones en su vía área, debido a la delgadez fisiológica de la pared. En los niños más grandes se evalúa pidiéndoles que digan palabras resonantes como “treinta y tres” “ferrocarril”, entre otras. Expansibilidad: se explora mediante la posición firme de ambas manos, una sobre cada hemitórax respectivamente, alineando los pulgares en dirección a la línea media del tórax, y pidiéndole seguidamente al paciente que realice una inspiración profunda para así visualizar la separación de los pulgares a medida que la inspiración se realiza, esta separación debe ser simétrica. En los niños pequeños que no son capaces de seguir órdenes, se coloca una mano en la cara anterior y otra en la posterior de cada hemitórax, sin ejercer presión, para sentir como excursiona la pared torácica con la respiración. Elasticidad: se explora comprimiendo suavemente, con las dos manos, cada hemitórax por separado, en sentido anteroposterior. PERCUSIÓN: el tórax se debe percutir desde todos sus frentes, es decir, por la cara anterior, posterior, y lateral, comparando constantemente los sonidos que se van encontrando en cada segmento percutido y ambos hemitórax. El sonido normal que se obtiene al percutir un tórax que alberga pulmones sanos es sonoridad, encontrando sonidos mates sobre estructuras macizas como el hígado, corazón y escapulas o por presencia de líquido o consolidaciones del parénquima pulmonar. Elaborado por: Br. Marian F. Rodríguez Hernández, Preparadora de la asignatura. Supervisión/Edición: Dr. Jesús Ignacio Carrillo, Coordinador de la asignatura. Método Directo: se puede realizar en los niños pequeños, y consiste en la percusión directa sobre la pared torácica con el pulpejo del dedo medio de la mano hábil. Método Indirecto: se realiza en los niños más grandes, se utiliza el dedo índice o medio de la mano no hábil como apoyo sobre los espacios intercostales (dedo plexímetro), y sobre éste se percute con el dedo medio de la mano hábil (dedo percutor), realizando un movimiento suave en la muñeca, manteniendo el codo y brazo fijos. AUSCULTACIÓN: para evitar sonidos artefactos y lograr mejor resolución auditiva, la auscultación debe realizarse con el tórax descubierto, en un ambiente silencioso y con el niño lo más tranquilo posible. El estetoscopio se debe ajustar firmemente contra la pared torácica, habitualmente, se ausculta con la membrana o diafragma del estetoscopio, que amplifica los sonidos de alta frecuencia o longitudes de onda más cortas. La campana sirve para los sonidos de baja frecuencia o de longitud de onda más larga, puede ser muy útil para los ruidos respiratorios fisiológicos. Se debe recorrer cara anterior, posterior y lateral del tórax y las regiones axilares. Como la respiración de los niños normalmente es superficial, proporciona información limitada, por lo tanto, se les puede pedir que respiren como “perrito cansado” o “soplando una vela”. Existen tres ruidos fisiológicos a la auscultación: Ruidos Respiratorios: aquellos que se auscultan sobre el parénquima pulmonar, correspondiendo a la mayor superficie torácica. Broncovesiculares: son aquellos que se escuchan sobre los bronquios principales, es decir, se auscultan en la región central del tórax. Laringotraqueales: son ruidos de alta tonalidad y se auscultan en la tráquea por encima del manubrio esternal. Existen además ruidos patológicos que se conocen como agregados o adventicios: RUIDOS AGREGADOS Tipo Mecanismo de Producción Origen Relevancia Sibilancias (Estertor Seco) Oscilación del diámetro de la vía aérea Vía aérea central o inferior. Predominan en espiración. Indica obstrucción vía aérea, limitación al flujo aéreo. En asma suelen ser polifónicos. En obstrucción fija, suelen ser monofónicos. Roncus (Estertor Seco) Movimiento de secreciones, vibración de la vía aérea. Vía aérea principal Indica presencia de secreciones obstructivas bronquiales. Crepitantes (Estertor Húmedo) Burbujeo. Apertura de la vía aérea pequeña con sustancias semilíquidas. Vía aérea inferior. Durante inspiración. Apertura y cierre de vía aérea con secreciones Elaborado por: Br. Marian F. Rodríguez Hernández, Preparadora de la asignatura. Supervisión/Edición: Dr. Jesús Ignacio Carrillo, Coordinador de la asignatura. El choque de la punta es un índice indirecto de la posición, tamaño y actividad cardiaca, ya que, si el corazón está aumentado de tamaño o en una posición anómala, se encontrará el choque de la punta desplazado. Al auscultar un ruido agregado, para orientar su lugar de origen, se le pide al niño que tosa, ya que los ruidos originados en las vías respiratorias de mayor calibre se movilizan con la tos, mientras que aquellos que se originan en el parénquima pulmonar son fijos. Así mismo existen ruidos que son audibles sin estetoscopio: Quejido: corresponde a una espiración con la glotis cerrada y es un signo de dificultad respiratoria, especialmente en lactantes. Estridor: corresponde a una inspiración con glotis cerrada, característica de las obstrucciones de la vía aérea superior y la tosferina. III. EXAMEN FISICO CARDIOVASCULAR En el examen cardiovascular se evalúan todos los aspectos que aportan información sobre el funcionamiento del sistema circulatorio: Color de la piel. Pulsos. Presión arterial. Llenado capilar Circulación venosa Examen cardiaco. Como muchos de estos elementos ya han sido explicados anteriormente, se procederá a describir el examen cardiaco, el cual se basa en la inspección, palpación y fundamentalmente la auscultación. INSPECCIÓN: es necesario observar el tórax del niño desnudo, y estando lo más tranquilo posible. La finalidad es identificar el choque de la punta o ápex cardiaco. Éste se produce durante la contracción ventricular, momento en el que la punta del corazón impulsa o levanta la pared torácica, lo que se evidencia como un pequeño solevantamiento en el espacio intercostal. En los lactantes y preescolares, debido a que poseen una posición más horizontal, habitualmente se encuentra en el 4to espacio intercostal izquierdo con línea media clavicular, y desde la edad escolar lo encontramos en el 5to espacio intercostal izquierdo. PALPACIÓN: se apoya suavemente la palma de la mano sobre la región precordial, con lo cual se siente el latido cardiaco, y se prosigue a ubicar el ápex cardiaco para evaluar el choque de la punta. Elaborado por: Br. Marian F. Rodríguez Hernández, Preparadora de la asignatura. Supervisión/Edición: Dr. Jesús Ignacio Carrillo, Coordinador de la asignatura. AUSCULTACIÓN: la auscultación se lleva a cabo sobre los focos auscultatorios cardiacos, y de esta manera se evalúa: frecuencia y ritmo cardíaco, características del R1 (primer ruido cardíaco) y R2 (segundo ruido cardíaco) en cada foco, y la búsqueda de ruidos anormales o soplos. R1: al iniciarse la sístole, el aumento de la presión intraventricular determina el cierre de las válvulas auriculoventriculares (mitral y tricúspide), lo que origina el primer ruido cardíaco. R2: con el vaciamiento ventricular, disminuye la presión en los ventrículos y se produce el cierre de las válvulas semilunares (aórtica y pulmonar), que corresponde al segundo ruido cardíaco. Durante la auscultación se debe determinar la frecuencia cardiaca y caracterizar su ritmo, intentando identificar los componentes del ciclo cardiaco, describiendo si R1 o R2 tienen alguna característica especial y la presencia de ruidos anormales. La secuencia normal a escuchar será la siguiente: R1 único (se percibe mejor en el foco mitral), un primer silencio que corresponde a la sístole ventricular, R2 único o un desdoblamiento fisiológico (se percibe mejor en los focos aórtico o pulmonar), un segundo silencio que corresponde a la diástole. Los ruidos anormales pueden aparecer en cualquier parte del ciclo cardíaco y son principalmente: Ruidos
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