Logo Studenta

Biologia la Vida en La Tierra-comprimido-145

¡Estudia con miles de materiales!

Vista previa del material en texto

RESUMEN DE CONCEPTOS CLAVE 113
ne utilizando soluciones con alta concentración de sal (piensa
en el tocino o la carne de puerco salada), que matan a la
mayoría de las bacterias. Las sales se descomponen en iones,
que forman enlaces con los aminoácidos en las proteínas con
función de enzimas. Demasiada sal (o muy poca) interfiere
con la estructura tridimensional normal de las enzimas, impi-
diendo así su actividad. Los encurtidos se conservan bastante
bien en una solución de vinagre y sal, que combina las condi-
ciones de un medio salado con las de uno ácido. Los organis-
mos que viven en ambientes salinos, como es previsible,
tienen enzimas cuya configuración depende de la presencia
de iones salinos.
O T R O V I S TA Z O A L E S T U D I O D E C A S O E N E R G Í A L I B E R A D A
Aunque tanto los corredores como
los demás atletas requieren del
azúcar como combustible, en reali-
dad todos los seres vivos la “que-
mamos” de una forma controlada,
utilizando enzimas en vez de fuego
para impulsar la activación de ener-
gía. Así como un alpinista desciende de una
montaña en una serie de pequeños pasos en
vez de brincar desde la cima, las enzimas
permiten a nuestras células descomponer el
azúcar en varios pasos, cada uno de los cua-
les libera una cantidad pequeña y segura de
energía. Los pasos clave en esta vía liberan
justo la energía suficiente para ser captada
en las moléculas portadoras de energía y pa-
ra utilizarse en las reacciones que consumen
energía.
La vida, con su constante demanda de
energía en forma útil, genera calor, como in-
dican las leyes de la termodinámica. En los
maratonistas, por ejemplo, conforme el ATP
se descompone para impulsar la contracción
muscular, parte de la energía química se
convierte en energía cinética y otra parte se
pierde como calor. En el capítulo 2 aprendis-
te que el agua tiene uno de los calores de
vaporización más elevados de todas las mo-
léculas; por eso utilizamos el sudor (consti-
tuido en su mayor parte por agua) para en-
friar nuestro cuerpo. Los corredores de
maratón pierden grandes cantidades de agua
por el sudor durante la carrera, y corren el
riesgo de sobrecalentarse si no la reponen.
Piensa en esto Cuando la temperatura cor-
poral de un corredor comienza a subir, se 
activan varios mecanismos, incluida la sudo-
ración y el aumento de la circulación sanguí-
nea hacia la piel. Compara esta respuesta al
sobrecalentamiento con la respuesta a la in-
hibición de las enzimas.
¿Te resulta difícil imaginar la vida sin beber leche, o sin saborear
un helado o un trozo de pizza? Aunque algunos consideran que
éstos son alimentos esenciales en la dieta de un ciudadano oc-
cidental, la mayoría de la población mundial no puede disfrutar
de ellos. ¿Por qué? Aproximadamente el 75% de los seres 
humanos, incluyendo el 25% de los habitantes de Estados Uni-
dos, perdieron la capacidad de digerir la lactosa, o “azúcar de
la leche”, durante la infancia. Alrededor del 75% de los afro-es-
tadounidenses, hispanos y nativos de ese país, así como el 90% de
los asiático-estadounidenses, son intolerantes a la lactosa. Desde
una perspectiva evolutiva, esto es perfectamente explicable. La
enzima que permite digerir la lactosa, llamada lactasa, se en-
cuentra en el intestino delgado de todos los bebés normales.
Durante la infancia, después del destete, nuestros antepasados
dejaban de consumir leche, la principal fuente de lactosa. Como
se requiere energía para sintetizar las enzimas, el hecho de per-
der la capacidad para sintetizar una enzima que no se necesita
más constituye una ventaja adaptativa. Sin embargo, una pro-
porción relativamente pequeña de seres humanos, principal-
mente los descendientes de los europeos nórdicos, conservaron
la capacidad de digerir la lactosa, criaron ganado para obtener
leche y fabricaron productos lácteos que consumían como una
parte regular de su dieta.
Cuando los individuos que carecen de la enzima lactasa consu-
men lácteos, la lactosa sin digerir introduce agua al intestino por
ósmosis y también alimenta a las bacterias intestinales que produ-
cen gases. La combinación de exceso de agua y gases produce
dolor abdominal, inflamación, diarrea y flatulencia, todo lo cual
representa un alto precio por disfrutar de un helado o un trozo
de pizza. La mayoría de las personas que son intolerantes a la
lactosa no necesitan evitar por completo todos los productos
lácteos; algunos de ellos producen suficiente lactasa para tole-
rar unas cuantas raciones de éstos. El yogur con bacterias vivas
y los quesos añejos (como el cheddar) tienen relativamente po-
ca lactosa porque las bacterias que contienen se encargan de
descomponerla. También es posible consumir suplementos de
lactasa junto con los productos lácteos. No obstante, en com-
paración con otras consecuencias de la deficiencia de enzimas,
esta incapacidad para tolerar la leche es en realidad un incon-
veniente menor. Puesto que estos catalizadores biológicos que
conocemos como enzimas son esenciales para todos los aspec-
tos de la vida, las mutaciones que hacen que ciertas enzimas
dejen de funcionar adecuadamente podrían evitar que un em-
brión se desarrolle por completo o provocar trastornos que
amenazan la vida.
La falta de una enzima produce intolerancia a la lactosaENLACES CON LA VIDA
R E P A S O D E L C A P Í T U L O
RESUMEN DE CONCEPTOS CLAVE
6.1 ¿Qué es energía?

Continuar navegando

Otros materiales