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Biologia la Vida en La Tierra-comprimido-812

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780 Capítulo 38 EL SISTEMA NERVIOSO Y LOS SENTIDOS
Durante casi toda la historia de la humanidad, el cerebro se
consideró como una “caja negra” de la cual era posible obser-
var qué entraba y qué salía, pero cuyo funcionamiento interno
era inherentemente impenetrable. Sin embargo, nuevas técni-
cas de imágenes están arrojando conocimientos interesantes
acerca de la función cerebral. Entre tales técnicas se encuentran
la tomografía por emisión de positrones (PET, descrita en el ca-
pítulo 2) e imagenología por resonancia magnética funcional
(fMRI); ambas permiten a los investigadores observar al cerebro
en acción. 
Las regiones del encéfalo que mayor actividad tienen nece-
sitan más energía, así que consumen más glucosa y atraen un
mayor flujo de sangre oxigenada que las áreas menos activas.
En las exploraciones por PET, los científicos inyectan al sujeto
una sustancia radiactiva, digamos una forma radiactiva de glu-
cosa, y luego monitorean los niveles de radiactividad que refle-
jan las diferencias en las tasas metabólicas. Los niveles de
consumo de glucosa se traducen en colores en imágenes del
encéfalo. Al monitorear la radiactividad mientras se está reali-
zando una tarea específica, los científicos pueden identificar
qué partes del cerebro están más activas durante esa tarea. En
contraste, la fMRI detecta diferencias en la forma en que la san-
gre oxigenada y la desoxigenada responden a un campo mag-
nético intenso aplicado por un electroimán enorme que rodea
al cuerpo. Las regiones activas del cerebro pueden distinguirse
mediante fMRI sin usar radiactividad y en menor tiempo que si
se emplea PET.
Utilizando fMRI o PET, los investigadores pueden observar
cambios cuando el cerebro responde a un olor o a un estímulo
visual o auditivo o realiza una tarea de razonamiento específica.
Mediante exploraciones del encéfalo, los científicos han confir-
mado que diferentes aspectos del procesamiento del lenguaje
se relacionan con áreas bien definidas de la corteza cerebral (FI-
GURA E38-7). Con fMRI, los investigadores analizaron las áreas
del lóbulo frontal que las personas bilingües utilizan para gene-
rar palabras. En sujetos que crecieron hablando dos idiomas, se
usó la misma región del lóbulo frontal para hablar en ambos
idiomas. En sujetos que aprendieron un segundo idioma en una
etapa posterior de su vida, se activaron áreas distintas pero ad-
yacentes del lóbulo frontal para los dos idiomas. 
Las exploraciones con fMRI también se han utilizado para
determinar las partes del cerebro que son más activas durante
varios estados emocionales. Por ejemplo, cuando una persona
tiene miedo, la amígdala se activa (FIGURA E38-8a). Cuando la
gente enamorada ve fotografías de su pareja sentimental, se
activan otras áreas del cerebro (FIGURA E38-8b). Es interesan-
te hacer notar que la mayoría de estas mismas áreas se activan
con el consumo de drogas, como la cocaína.
Por cierto, nunca dejes que alguien te diga que ¡utilizamos
sólo una pequeña fracción de nuestro cerebro! Aunque las imá-
genes producidas por PET o fMRI a veces sugieren que sólo una
pequeña área del cerebro está activa, esto es porque la activi-
dad de otras regiones se ignoró durante el proceso de forma-
ción de imágenes, con el fin de mostrar dónde cambió la
actividad cerebral como resultado de un estímulo. Las imáge-
nes mostradas aquí sólo destacan áreas donde la actividad es
más intensa de lo normal.
Neuroimágenes: Una mirada al interior de la “caja negra”INVESTIGACIÓN CIENTÍFICA
Escuchar palabras Ver palabras
Generar verbosLeer palabras
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FIGURA E38-7 Localización de las tareas del lenguaje
Los cambios en el consumo de glucosa, medidos por PET, re-
velan las diferentes regiones de la corteza que intervienen en
varias tareas relacionadas con el lenguaje, con base en las in-
vestigaciones del doctor Marcus Raichle de la Facultad de Me-
dicina de la Universidad de Washington en Saint Louis, Estados
Unidos. La escala va del blanco (más baja) al rojo (más alta).
FIGURA E38-8 Localización de emociones
a) La experiencia de miedo activa la amígdala, una parte del
prosencéfalo que aparentemente produce emociones como
miedo e ira. b) Al mirar fotografías de la persona amada se ac-
tivan múltiples partes del cerebro, incluyendo áreas en la cor-
teza cerebral (izquierda) y los ganglios basales (derecha).
a)
b)

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