Logo Studenta

Biologia la Vida en La Tierra-comprimido-864

¡Estudia con miles de materiales!

Vista previa del material en texto

El aborto sustrae al embrión del útero
El aborto no se considera un método de anticoncepción ya
que pone fin al embarazo, en vez de evitarlo. Por lo general,
implica dilatar el cérvix y retirar al embrión mediante suc-
ción. La mayoría de los abortos se practican durante los tres
primeros meses del embarazo. De manera alternativa, el
aborto puede ser inducido durante las primeras siete semanas
de embarazo mediante el fármaco RU-486 (mifepristone),
que se une a los receptores de progesterona y bloquea las ac-
ciones de esta hormona, la cual resulta esencial para conser-
var el endometrio durante el embarazo.
Quizá hayas notado que las técnicas de control natal están
diseñadas principalmente para las mujeres. ¿Por qué? ¿Se es-
tán desarrollando anticonceptivos para el hombre? Para des-
cubrirlo, lee la sección “Investigación científica: En busca de
un anticonceptivo masculino”.
Los únicos métodos temporales de control de la natalidad dis-
ponibles para los hombres son el condón y la abstinencia. Una
razón es que los hombres producen unos 100 millones de esper-
matozoides al día, por lo que, incluso en el caso de que se ex-
terminara al 95 por ciento de ellos, quedarían suficientes para
provocar un embarazo no deseado. Además, la investigación 
sobre los métodos anticonceptivos para los hombres se ha que-
dado rezagada en comparación con los métodos para las muje-
res, en parte porque las principales empresas farmacéuticas
creyeron que el mercado era demasiado pequeño para justificar
los enormes gastos que implicarían la investigación, la produc-
ción y el lanzamiento al mercado de estos nuevos fármacos. Pe-
ro encuestas recientes en todo el mundo han mostrado que los
hombres están dispuestos a asumir una mayor responsabilidad
frente a la anticoncepción. Existen tres posibilidades para desa-
rrollar métodos anticonceptivos no permanentes para hombres. 
Bloqueo de conductos deferentes: Decenas de miles de hom-
bres en China utilizan tapones de silicón que se colocan en el
conducto deferente para bloquear la liberación de espermato-
zoides. En India se están haciendo pruebas clínicas en seres hu-
manos con una sustancia (RISUG) que bloquea parcialmente el
vaso deferente y daña los espermatozoides que logran pasar.
Los tapones de silicón se retiran quirúrgicamente y el RISUG se
disuelve con una solución que se inyecta en el vaso deferente.
Métodos hormonales: Administrar testosterona evita la forma-
ción de espermatozoides al impedir la liberación de LH y FSH
mediante retroalimentación negativa (véase la figura 40-15). Un
prometedor anticonceptivo a base de hormonas para los hom-
bres (ahora en la fase de pruebas clínicas) combina inyecciones
de testosterona, cada 4 o 6 semanas, con un implante de pro-
gesterona sintética que suprime la posterior liberación de 
FSH y LH.
Fármacos no hormonales: Se están realizando pruebas en ani-
males para un fármaco que bloquea una proteína en el epidídi-
mo que normalmente activa la capacidad de los flagelos de los
espermatozoides para nadar. Con sus flagelos inmovilizados,
los espermatozoides no serán capaces de nadar hacia el óvulo.
Un segundo enfoque es una “vacuna” que hace que el organis-
mo produzca anticuerpos para una proteína (eppin), la cual 
resulta crucial para producir espermatozoides funcionales. En
los monos esta vacuna causó esterilidad temporal, que pudo
mantenerse estable mediante inyecciones periódicas.
Aunque estos fármacos y otros en proceso de desarrollo 
no estarán disponibles en Estados Unidos todavía durante va-
rios años, prometen diversificar las opciones de anticonceptivos
masculinos en el futuro.
En busca de un anticonceptivo masculinoINVESTIGACIÓN CIENTÍFICA
Aunque la tecnología repro-
ductiva asistida (TRA) está en-
caminada a salvar especies en
peligro de extinción, no resulta
atractiva para todos los conservacionistas.
Algunos sostienen que la única forma apro-
piada de preservar una especie es mantener
suficientes hábitat naturales para dar susten-
to a una población en desarrollo lo bastante
grande como para mantenerse a sí misma y
conservar una diversidad genética razonable.
Los defensores de la TRA están de acuerdo
con lo anterior, pero apoyan los esfuerzos de
alta tecnología como una acción paralela a
la preservación de los hábitat, en particular
para los animales en peligro crítico de extin-
ción. El doctor Oliver Ryder, genetista y 
director del zoológico congelado de San
Diego, explica: “[El zoológico congelado]
representa un legado genético, un banco de
DNA. En el futuro, los científicos tendrán
mejores herramientas, pero no tendrán ac-
ceso a más genes”. La doctora Betsy Dres-
ser, quien preside el Centro Audubon para la
investigación de especies en peligro de ex-
tinción en Nueva Orleáns, describe la TRA
como “una red de seguridad”. “Si congela-
mos 200 o 300 embriones, es más que sufi-
ciente para evitar que una población se ex-
tinga”. Dresser, quien trabaja para desarro-
llar técnicas de transferencia de embriones
entre especies que permitirán a las leonas
FIGURA 40-22 Un tigre de probeta
O T R O V I S TA Z O A L E S T U D I O D E C A S O
E L Z O O L Ó G I C O C O N G E L A D O

Continuar navegando

Otros materiales