Descarga la aplicación para disfrutar aún más
Vista previa del material en texto
892 Capítulo 43 REPRODUCCIÓN Y DESARROLLO DE LAS PLANTAS se encuentra en el interior. El espermatozoide baja por ese tu- bo y entra en el gametofito femenino, donde ocurre la fecun- dación. En los siguientes apartados exploraremos los detalles de la reproducción sexual en las plantas con flor. Las flores completas tienen cuatro partes principales La evolución suele producir nuevas estructuras, modificando estructuras anteriores; en realidad las partes de las flores son hojas muy modificadas, moldeadas por la mutación y la selec- ción natural hasta adquirir una forma que promueve la poli- nización. Una flor completa, como las de las petunias, rosas y azucenas, consiste en un eje central al cual están unidos cua- tro juegos sucesivos de hojas modificadas (FIGURA 43-5). Es- tas hojas modificadas forman los sépalos, pétalos, estambres y carpelos. Los sépalos están en la base de la flor. En las dicoti- ledóneas, los sépalos suelen ser verdes y tienen aspecto de hoja (figura 43-5a); en las monocotiledóneas, casi todos los sépalos se parecen a los pétalos (figura 43-5b). En ambos casos, los sé- palos rodean y protegen al capullo de la flor mientras se de- sarrollan las otras tres estructuras. Justo arriba de los sépalos están los pétalos, que suelen tener colores brillantes y perfu- me para anunciar la ubicación de la flor. Las estructuras reproductoras masculinas, los estambres, están sujetos inmediatamente arriba de los pétalos. Casi todos los estambres consisten en un filamento largo y delgado que sostiene una antera, la estructura que produce polen. Las es- tructuras reproductoras femeninas, los carpelos, ocupan la po- sición central en la flor. Un carpelo comúnmente tiene forma aproximada de jarrón, con un estigma pegajoso para atrapar polen montado sobre un estilo alargado. El estilo conecta al estigma con el ovario, que es bulboso (figura 43-5a). Dentro del ovario hay uno o más óvulos que el ovario formará una envoltura protectora, adhesiva y/o comestible, el fruto. Las flores incompletas carecen de una o más de las cuatro partes florales. Por ejemplo, las flores de los pastos (véase la figura 43-9) carecen tanto de pétalos como de sépalos. Otras flores incompletas carecen ya sea de los estambres masculi- nos o de los carpelos femeninos. En tales casos, las flores se consideran imperfectas, además de incompletas. Éste no es un juicio de valor; las especies de plantas con flores imperfectas subsisten con mucho éxito. Producen flores masculinas y fe- meninas por separado, algunas veces en la misma planta, co- mo sucede con la familia de las calabazas, en especial con las calabacitas (FIGURA 43-6), o con la “flor cadáver” y el filoden- dro. Estas dos últimas flores contienen una estructura central alargada, llamada espádice, que aloja muchas flores pequeñas masculinas y femeninas. Otras plantas con flores imperfectas generan flores masculinas y femeninas en plantas separadas. Un ejemplo es el acebo americano, cuyas bayas de color rojo se producen sólo en las plantas femeninas. El polen contiene el gametofito masculino El polen se desarrolla dentro de la antera de la planta espo- rofita. Cada antera consta de cuatro cámaras llamadas sacos polínicos (FIGURA 43-7). Dentro de cada saco se desarrollan de cientos a miles de células madre de microsporas, que son di- ploides. Cada una de esas células se divide por meiosis (des- crita en el capítulo 11) para producir cuatro microsporas haploides. Cada microspora se divide una vez, por mitosis, pa- ra producir un gametofito masculino haploide. En muchas es- pecies, el gametofito masculino inmaduro consta de sólo dos células: una célula tubo grande y una célula generadora sépalo pétalo filamento estilo estigma antera ovario carpelo estambre b) pétalo sépalo a) anteras estigma estilo FIGURA 43-5 Una flor completa Una flor completa tiene cuatro partes: sépalos, pétalos, estambres (las estructuras reproductoras masculinas) y por lo menos un carpe- lo (la estructura reproductora femenina). Este dibujo muestra una flor completa de dicotiledónea. b) La azucena es una flor completa de monocotiledónea, con tres sépalos (prácticamente idénticos a los pétalos), tres pétalos, seis estambres y tres carpelos (fusionados en una sola estructura). Las anteras se encuentran en un nivel más bajo que el estigma, probablemente para evitar la autopolinización.
Compartir