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1 
UNIVERSIDAD CENTROCCIDENTAL 
“LISANDRO ALVARADO” 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
DAÑO AUDITIVO EN LOS TRABAJADORES DE UNA EMPRESA 
PROCESADORA DE ALIMENTOS. BARQUISIMETO. EDO. LARA. 
 
 
 
 
 
 
 
 LILA ROSA PINEDA VALENZUELA 
 
 
 
 
 
 
Barquisimeto, 2006 
 
2 
UNIVERSIDAD CENTROCCIDENTAL “LISANDRO ALVARADO” 
DECANATO DE MEDICINA 
POSTGRADO EN SALUD E HIGIENE OCUPACIONAL 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
DAÑO AUDITIVO EN LOS TRABAJADORES DE UNA EMPRESA 
PROCESADORA DE ALIMENTOS. BARQUISIMETO. EDO. LARA. 
 
 
 
 
Trabajo presentado para optar al grado de 
Especialista en Salud e Higiene Ocupacional 
Mención: Educación para la Salud de los Trabajadores 
 
 
 
 
 
 
 Por: LILA ROSA PINEDAVALENZUELA 
 
 
 
 
 
 
 
Barquisimeto, 2006 
 
3 
INDICE 
 
 PAG. 
INDICE DE CUADROS iv 
INDICE DE GRÁFICOS v 
RESUMEN vi 
INTRODUCCIÓN 1 
 CAPITULO 
 I EL PROBLEMA 5 
 Planteamiento del Problema 5 
 Objetivos 9 
 Generales 9 
 Específicos 9 
 Justificación e importancia 10 
 Alcances y limitaciones 11 
 II MARCO TEORICO 12 
 Antecedentes de la investigación 12 
 Bases teóricas 18 
 Bases legales 26 
 III MARCO METODOLOGICO 33 
 Tipo de investigación 33 
 Población y muestra 33 
 Procedimiento 34 
 Técnicas e instrumentos de Recolección de Datos 35 
 IV RESULTADOS 38 
 V DISCUSIÒN 52 
 VI CONCLUSIONES 58 
 VII RECOMENDACIONES 60 
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS 62 
BIBLIOGRAFIA 
ANEXOS 68 
A. Currículum Vitae del Autor 69 
B. Niveles permisibles de ruido 70 
C. Tabla exposiciones máximas permisibles 71 
 
4 
D. Consentimiento informado 72 
E. Instrumento de Recolección de Datos 73 
F. Tabla de clasificación del daño auditivo 76 
G. Planilla para la evaluación de ruido 77 
 H-1 Registro de enfermedades ocupacionales año 2002 78 
 H-2 Registro de enfermedades ocupacionales año 2003 79 
 H-3 Registro de enfermedades ocupacionales año 2004 80 
 H-4 Registro de enfermedades ocupacionales trimestre I 2005 81 
 H-5 Registro de enfermedades ocupacionales trimestre II 2005 82 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
5 
 
INDICE DE CUADROS 
 
CUADRO Pág. 
1 Trabajadores de una empresa procesadora de alimentos, según 
 edad y sexo. Barquisimeto, 2005…………………………….. 38 
 
2 Grados de daño auditivo en los trabajadores de una empresa 
 procesadora de alimentos. Barquisimeto, 2005……………….. 40 
 
3 Frecuencia de daño auditivo según el sexo en los trabajadores 
 de una empresa procesadora de alimentos. Barquisimeto, 2005.. 41 
 
4 Frecuencia de daño auditivo según la edad en los trabajadores 
 de una empresa procesadora de alimentos. Barquisimeto, 2005.. 42 
 
5 Frecuencia de daño auditivo según los antecedentes personales 
 patológicos en los trabajadores de una empresa procesadora de 
 alimentos. Barquisimeto, 2005………………………………..... 43 
 
6 Frecuencia de daño auditivo según los antecedentes personales 
 extraocupacionales en los trabajadores de una empresa procesa- 
 dora de alimentos. Barquisimeto, 2005………………………... 44 
 
7 Frecuencia de daño auditivo según la antigüedad en la empresa 
 en los trabajadores de una empresa procesadora de alimentos. 
Barquisimeto, 2005...…………………………………………… 45 
 
8 Frecuencia de daño auditivo según el tiempo de exposición a 
ruido industrial en los trabajadores de una empresa procesadora 
de alimentos. Barquisimeto, 2005….…………………………… 46 
 
9 Frecuencia de daño auditivo según los antecedentes personales 
 ocupacionales en los trabajadores de una empresa procesadora 
 de alimentos. Barquisimeto, 2005………………………………. 47 
 
 10 Frecuencia de daño auditivo según el puesto detrabajo en los 
 trabajadores de una empresa procesadora de alimentos. Barqui- 
 simeto, 2005……………………………………………………. 48 
 
 
 
 
 
 
 
6 
INDICE DE GRÁFICOS 
 
 
GRÁFICO 
Pág. 
 1 Trabajadores de una empresa procesadora de alimentos, según 
 edad y sexo. Barquisimeto, 2005…………................................ 39 
 
 2 Grados de daño auditivo en los trabajadores de una empresa 
 procesadoras de alimentos. Barquisimeto, 2005……………… 40 
 
 3 Frecuencia de daño auditivo según el sexo en los trabajadores 
 de una empresa procesadora de alimentos. Barquisimeto, 2005 41 
 
 4 Frecuencia de daño auditivo según la edad en los trabajadores 
 de una empresa procesadora de alimentos. Barquisimeto, 2005 47 
 
 5 Niveles de ruido en los puestos de empaque y flexografía de 
 una empresa procesadora de alimentos. Barquisimeto, 2005… 49 
 
 6 Niveles de ruido en el puesto de operador de molino de una 
 empresa procesadora de alimentos. Barquisimeto, 2005……... 50 
 
 7 Niveles de ruido en el puesto de operador de producción de 
 una empresa procesadora de alimentos. Barquisimeto, 2005…. 51 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
7 
 
UNIVERSIDAD CENTROCCIDENTAL “LISANDRO ALVARADO” 
DECANATO DE MEDICINA 
POSTGRADO DE SALUD E HIGIENE OCUPACIONAL 
 
DAÑO AUDITIVO EN LOS TRABAJADORES DE UNA EMPRESA 
PROCESADORA DE ALIMENTOS. BARQUISIMETO. EDO. LARA. 
 
 Autor (a): Lila Rosa Pineda Valenzuela 
 Tutor (a): Yolanda Verratti Soto. 
 
RESUMEN 
 
Los trabajadores se encuentran sometidos constantemente a ruido, riesgo físico que es 
capaz de generar daños auditivos que son irreversibles una vez instaurados pero que 
pueden prevenirse, realizando controles periódicos de ingeniería sobre las maquinarias 
productoras de ruido y con el uso de equipos de protección personal. El objetivo de 
esta investigación fue determinar la frecuencia de daño auditivo en los trabajadores 
de una empresa procesadora de alimentos, de la ciudad de Barquisimeto, para ello se 
realizó un estudio descriptivo transversal de campo, a 132 trabajadores de ambos 
sexos, los cuales fueron sometidos a anamnesis, evaluación otoscópica y 
audiométrica, también se realizaron mediciones de niveles de ruido en los puestos de 
operador de molino, empaque, flexografía y producción. El 57.6 % de la población 
estudiada resultó normal, 31.1 % presentó deterioro auditivo inicial y 10.8 % 
hipoacusia grado I, predominando el sexo masculino con 77.3%. Además se encontró 
que en los puestos donde se realizó la medición, los niveles de ruido equivalente 
continuo son superiores al límite permisible establecido por la Norma COVENIN 
1565-95. Concluyendo, que 57.6% resultaron normales, pero el resto ya presenta daño 
auditivo, unos en etapa recuperable pero otros lamentablemente tienen una 
enfermedad ya instaurada, por trabajar en ambientes con altos niveles de ruido. 
 
 
 
 
 
 
 
Palabras clave: Daño auditivo, niveles de ruido, puesto de trabajo. 
 
8 
INTRODUCCIÓN 
 
 
 Desde que la humanidad comenzó a desarrollarse, apareció la industrialización y el 
avance de la tecnología, por lo que el hombre ha tenido que exponerse a una serie de 
factores nocivos para la salud, entre ellos el ruido, el cual esta presente no sólo en su 
ambiente de trabajo sino que también se encuentra fuera de este. 
 El ruido presenta gran diferencia con respecto a otros contaminantes, no tienen un 
efecto acumulativo en el ambiente, pero sí puede tener un efecto acumulativo de sus 
efectos en el hombre. 
 La exposición a niveles de ruido durante un período de tiempo significativo, da 
lugar a pérdida de la audición, siendo en un principio recuperable cuando el ruido 
cesa, pero con el tiempo pueden llegar a hacerse irreversibles, convirtiéndose en 
hipoacusia y generando una enfermedad ocupacional. 
 La agencia Europea para la seguridad y la salud laboral, en el año 2000 publica un 
artículo en donde señala, que la pérdida auditiva como consecuencia del ruido es la 
enfermedad profesional más común en Europa y representa aproximadamente una 
tercera parte de las enfermedades de origen laboral. 
 Al igual que en muchos países Latinoamericanos, en Venezuela la sordera 
ocupacional ocupa el 2° lugar como causa de morbilidad en los trabajadores, según los 
reportes del registro de enfermedades profesionales de la dirección de Medicina del 
Trabajo de los Seguros Sociales (I.V.S.S) 2002. Epidemiología Instituto Nacional de 
Prevención, Salud y Seguridad Laborales (INPSASEL), (2005) “a”. (Ver anexo H-1). 
 Aunque el riesgo de padecer hipoacusia evidentemente aumenta conforme lo hace 
la intensidad del ruido al que se está sometido, aún no se ha comprobado una relación 
lineal entre ambas variables, además debido a las características particulares de cada 
individuo y a las diferencias individuales de la capacidad acústica del oído, hacen que 
la influencia del ruido presente perfiles únicos y distintos para cada sujeto. Esta 
diferencia en el grado de sensibilidad al ruido despierta el interés de muchos 
investigadores sobre este tema y las variables a ser estudiadas. Piñero (2002) “a”. 
 
9 
 Desde el punto de vista físico el sonido es un movimiento ondulatorio con una 
intensidad y frecuencia determinada que se transmite en un medio elástico (aire, agua 
o gas), generando una vibración acústica capaz de producir una sensación auditiva. 
 Al mismo tiempo, fisiológicamente se considera que el ruido es cualquier sonido 
desagradable y desde el punto vista ocupacional puede definirse como el sonido que 
por sus características especiales es indeseado o que puede desencadenar daños a la 
salud. Rendiles (1997) “a”. 
 Por lo tanto se puede definir a la hipoacusia neurosensorial como la debida al 
deterioro de la cóclea, por pérdida de los cilios del órgano de Corti; entre las diversas 
causas más frecuentes de sordera sensorial, está la exposición continua al ruido que 
exceda 85 dB. LaDou (1999) “a”. 
 Existen algunos factores determinantes en los efectos nocivos del ruido como: 
 1. Variabilidad biológica: (Susceptibilidad individual) La susceptibilidad al ruido 
puede ser hereditaria. 
 2. Intensidad del ruido: La Norma Venezolana COVENIN 1565 en su última 
revisión de 1995, denominada: "Ruido Ocupacional. Programa de Conservación 
Auditiva. Niveles Permisibles y Criterios de Evaluación". Establece que para una 
jornada de trabajo de 8 horas, el límite de nivel de sonido es de 85 dBA. Niveles 
de intensidad mayores de ruido deben ser compensados con el acortamiento del 
tiempo de exposición en la jornada. 
 3. Niveles permisibles de ruido en el tiempo de trabajo: (ver anexo B) 
 4. Espectro de frecuencia: En general los sonidos de alta frecuencia son más 
dañinos que los de baja frecuencia. En el ambiente laboral predomina la exposición 
a ruidos de alta frecuencia 
 5. Tiempo de exposición diaria: La duración de la exposición está directamente 
relacionada con la intensidad del ruido, el nivel de ruido equivalente continuo (Leq) 
y la dosis recibida. Norma Venezolana COVENIN 1565. 
 6. Edad: La presbiacusia es un proceso degenerativo natural de la capacidad 
auditiva que se inicia para algunos autores a los 35 años en promedio, lo cual favoreceel efecto nocivo del ruido. La presbiacusia temprana se asocia a pérdida rápidamente 
 
10 
progresiva de la capacidad auditiva en trabajadores expuestos a ruido. Rendiles (1997) 
“b”. 
 7. Sexo: En general la mujer tiene agudeza auditiva superior a la del hombre ya 
que tiene el umbral de audición más bajo. Rendiles (1997) “c”. 
 8. Enfermedades concomitantes del oído: Son determinantes, los antecedentes de 
patología del oído medio, tales como infecciones, perforación timpánica o anquilosis 
de la cadena de huesecillos. Esto puede conllevar a la pérdida del reflejo estapedial 
Rendiles (1997) “d”. El cual permite una protección de modo parcial contra los 
efectos del ruido constante, este se inicia cuando se somete al oído a un ruido más 
intenso de 90 dB y genera que los músculos del oído medio se contraigan, y por tanto, 
tensen al sistema conductor y lo hagan más resistentes al paso de los sonidos. La Dou 
(1999) “b”. 
 Por esta razón, la evaluación audiométrica de los trabajadores es primordial para 
desarrollar un programa de vigilancia epidemiológica, que a su vez sirva para la 
evaluación de los programas de prevención de la hipoacusia laboral, ya que a través de 
la comparación anual de los test audiométricos se pueden dilucidar y establecer 
programas de intervención para prevenir el daño auditivo. La audiometría consiste en 
la medición de los umbrales a través de tonos puros, por conducción aérea (audífonos) 
como en la ósea (oscilador óseo), de las frecuencias 125, 250, 500, 1000, 2000, 3000, 
4000, 6000 y 8000 Hz en ambos oídos. La frecuencia 8000 Hz se evalúa sólo como 
forma de esclarecer la etiología de la pérdida auditiva, ya que es un patrón sugestivo, 
de cambio por la edad y no de exposición al ruido. Los umbrales de la audición se 
expresan en decibeles y los límites normales en cada frecuencia, van de 0 a 20 dB. 
Cuando la conducción aérea y la ósea disminuyen, hay sordera neurosensorial. LaDou 
(1999) “c”. 
 El presente trabajo se realizó en un lapso de 24 semanas para la cual se solicitó el 
permiso y la colaboración de todos los trabajadores que laboran en la empresa 
procesadora de alimentos a través de la oficina de personal y la gerencia, una vez 
obtenido el permiso se procedió a la recolección de datos para lo cual se diseñó una 
encuesta que fue aplicada por el propio investigador, al mismo tiempo se realizó el 
 
11 
estudio audiométrico y paralelamente se realizaron mediciones de ruido en las áreas 
críticas de la empresa, en los puestos de operador de molino, flexografía, producción 
y empaque. Una vez finalizada la recolección se realizó el análisis, tabulación e 
interpretación de los resultados en las semanas siguientes, para luego ser 
presentados en cuadros y gráficos. 
 La presente investigación esta conformada por siete capítulos. 
 En el primer capítulo se realizó un análisis y planteamiento del problema, además 
se formularon los objetivos generales y específicos, así mismo la justificación e 
importancia y finalmente los alcances de la investigación. 
 El segundo capítulo llamado marco teórico desarrolló los siguientes aspectos: 
antecedentes de la investigación, las bases teóricas, basamentos legales. 
 El tercer capítulo trata del marco metodológico en donde se expone la naturaleza 
del estudio, se describe la población y muestra, el procedimiento para recabar la 
información así como las técnicas e instrumentos de recolección de datos. 
 En el cuarto capítulo se realizó el análisis estadístico e interpretación de los 
resultados obtenidos, que luego fueron presentados en cuadros y gráficos. 
 El quinto capítulo denominado discusión donde se comparan los resultados 
obtenidos con los estudios anteriores realizados por otros autores. 
 Finalmente se formularon las conclusiones que corresponde al sexto capítulo y el 
séptimo capítulo en donde se dan las recomendaciones. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
12 
 
 
 
 
 CAPITULO I 
 
 
EL PROBLEMA 
 
 
 
Planteamiento del Problema 
 
 
 
 En el año 1.150 de esta era ya se encontraban referencias sobre los daños a la 
audición del ser humano causados por el ruido, en el Régimen Sanitatus 
Salerenitanun, por lo que el efecto nocivo que este ocasiona a la audición ya era 
conocido en una época donde el desarrollo de la actividad laboral era solo artesanal. 
Pero no fue sino hasta que se perfeccionó el audiómetro, que se estableció el 
instrumento para medir con exactitud el grado de sordera, ayudando a Fowler en 1.929 
y a Dickson más tarde, a señalar la muesca en los 4.000 Hz. como primer signo de 
pérdida auditiva por la exposición a este agente físico. Martínez (1.995) “a”. 
 Así tenemos que, un aumento en la capacidad productiva, como la aparición de 
nuevas áreas en la economía industrial y el incremento de los procesos tecnológicos, 
han ido a la par con el aumento de los niveles sonoros. La exposición al ruido en el 
trabajo puede ser perjudicial para la salud de los trabajadores. 
 El efecto más conocido del ruido en el trabajo es la pérdida de audición, problema 
que ya se observaba entre los trabajadores del cobre en 1731 como lo comenta la 
agencia Europea para la seguridad y la salud en el trabajo en publicación del año 
2000, de igual manera señala: “la pérdida auditiva como consecuencia del ruido es la 
enfermedad profesional más común en Europa y representa aproximadamente una 
tercera parte de las enfermedades de origen laboral”. 
 Por lo general, la pérdida auditiva como consecuencia del trabajo es provocada por 
una exposición prolongada a ruidos intensos. Su primer síntoma suele ser la 
 
13 
incapacidad para escuchar los sonidos de tono alto. A menos que se resuelva el 
problema de la exposición al exceso de ruido, la capacidad auditiva de la persona 
continuará deteriorándose, hasta llegar a tener problemas para detectar los sonidos de 
tono más bajo. Este fenómeno se produce en ambos oídos, es irreversible y se puede 
producir sin una exposición prolongada. Una exposición breve a ruidos de impulsos 
(incluso a un único impulso fuerte), como los producidos por armas de fuego, pistolas 
de clavos o de remaches, puede tener efectos permanentes, como la pérdida de 
audición y el tinnitus continuo. 
 La Organización Mundial de la salud (2.003) estima que en América Latina y el 
Caribe la notificación de enfermedades ocupacionales apenas alcanza entre el 1% y el 
5% de los casos, ya que por lo general se registran solamente los casos que causan 
incapacidad sujeta a indemnización. Las Enfermedades Ocupacionales tradicionales 
más reportadas en todos los países de América Latina y el Caribe son la hipoacusia 
laboral, intoxicación aguda por plaguicidas y metales pesados entre otras. En 
Colombia la hipoacusia inducida por ruido (HIR) también es la primera causa de 
morbilidad laboral reportada por el Centro de Atención en Salud Ocupacional 
(C.A.S.O) del Seguro Social en Medellín. Martínez (1.995) “b”. 
 Según Martínez (1.995) “c”, la HIR es una enfermedad que incapacita a un 
importante sector laboral, por la que se erogan grandes cantidades de dinero en 
indemnizaciones y demandas penales. Otros gastos adicionales están representados 
por la pérdida en los días-hombre-producción, asistencia a consultas médicas, cambios 
de puestos de trabajo, etc. 
 Así mismo, Chepesiuk (2005) citando a la Organización Mundial de la Salud 
(OMS), expresa: “El deterioro de la audición inducido por ruido es el riesgo 
ocupacional más prevalente e irreversible en el mundo, y se estima que 120 millones 
de personas alrededor del mundo tienen dificultades de audición incapacitantes” 
igualmente hace referencia de acuerdo con el National Institute for Occupational 
Safety and Health (NIOSH), en los Estados Unidos (EE.UU.) cerca de 30 millones de 
trabajadores están expuestosa niveles peligrosos de sonido en sus trabajos. Las 
industrias con alto número de trabajadores expuestos a sonidos fuertes incluyen 
 
14 
construcción, agricultura, minería, manufacturas, servicios, transporte, y defensa. Al 
mismo tiempo señala, el ruido en la industria de los EE.UU. es un problema 
extremadamente difícil de monitorear, según lo reconoce el higienista industrial de la 
Occupational Safety and Health Administration (OSHA). La misma requiere que todo 
empleador con trabajadores sobreexpuestos a ruido, provea de protección auditiva 
contra los efectos dañinos del ruido a esos trabajadores. Adicionalmente, los 
empleadores deben implementar un programa de conservación auditiva continuo y 
efectivo como ha sido delineado por los Estándares de Ruido de OSHA. 
 En salud ocupacional, Venezuela evidencia una debilidad institucional, ya que la 
población trabajadora no cuenta con estructuras funcionales coordinadas y 
desarrolladas. Los riesgos ocupacionales en la última década tienden a incrementarse, 
aún con el subregistro existente. En Venezuela la sordera ocupacional representó 
24,5% de las enfermedades laborales según el registro de enfermedades profesionales 
de la dirección de Medicina del Trabajo del IVSS para el año 2002, (Ver anexo H-1). 
Para el año 2003 reportó que la sordera ocupacional representaba 19,0% del total de 
las enfermedades ocupacionales, (Ver anexo H-2). Luego el año siguiente la afección 
auditiva por ruido constituyó 2,5 %, (Ver anexo H-3). En el primer trimestre del año 
2005 1,6% y el segundo trimestre 1,9%, (Ver anexo H-4, H-5). Observándose un 
descenso considerable, debido probablemente al subregistro de las enfermedades 
laborales. Esta patología ocupa el 2° lugar dentro de las enfermedades ocupacionales 
reportadas por la dirección de Medicina del Trabajo de los Seguros Sociales (I:V:S:S) 
(2.002-2003) (Ver anexo H-1,H-2) 
 Según Gaynéz (2000) cualquier persona expuesta a ruido de forma repetida, puede 
desarrollar una hipoacusia progresiva al cabo de los años. La pérdida auditiva empieza 
en la zona extraconversacional y, por tanto, no es percibida por el paciente. A 
menudo, el síntoma inicial es el acúfeno que suele presentarse al término de la jornada 
laboral. En fases posteriores, se inicia la pérdida de comprensión del lenguaje oral, 
sobre todo en ambientes ruidosos, hecho que origina "la comprensión del mal" por 
parte del afectado y la búsqueda de soluciones imposibles ya en ese estadio. Si la 
agresión no cesa, sobreviene la distorsión de los sonidos y aún más sensaciones de 
 
15 
inestabilidad, traducidas como vértigo, con manifestaciones neurovegetativas más o 
menos importantes, casi siempre fugaces. Este cuadro no tiene tratamiento y por ello, 
la medida más correcta es impedir la aparición o su evolución en el peor de los casos. 
 Para el mes de Agosto del 2003 el servicio médico de la empresa procesadora de 
alimentos, objeto de la investigación, realizó un estudio audiométrico a 22 
trabajadores pertenecientes a las diferentes áreas de la empresa que arrojó los 
siguientes resultados: de 6 trabajadores del área de flexografía encargada del timbrado 
del polipropileno para bolsas , 5 presentaron audiometría alterada, asimismo en el área 
de producción fue realizada a 3 trabajadores de los cuales 2 presentaron audiometría 
alterada, en el área de molino se estudiaron 6 trabajadores de los cuales 2 presentaron 
alteración, llegándose a la conclusión que era insuficiente el número de pacientes 
vistos para dar un perfil audiométrico, pero quedó la inquietud al ver los resultados 
que reportaban que casi la mitad de los trabajadores estudiados presentaron 
audiometrías alteradas en las diferentes áreas, lo que motivó la realización de este 
estudio, para lo cual se incluyeron a todos los trabajadores a fin de obtener resultados 
más fidedignos y poder así implementar planes de promoción y prevención de 
alteraciones auditivas, en áreas específicas y así preservar la salud auditiva de los 
trabajadores de la empresa , por ser una enfermedad ocupacional prevenible, más no 
curable una vez instaurada. 
 A lo largo de todo el proceso se origina ruido por la acción de las diferentes 
máquinas utilizadas, los niveles de este factor de riesgo hasta ahora no habían sido 
medidos en la empresa pero se perciben al estar en las instalaciones, por lo que sus 
trabajadores son dotados de equipos de protección personal (auditivo) en las áreas 
críticas de la empresa. 
 En el presente trabajo se realizó un estudio descriptivo transversal de campo con la 
población de trabajadores de la empresa procesadora de alimentos, para determinar la 
frecuencia de daño auditivo en los mismos, diagnosticar los grados del daño, al 
mismo tiempo se realizaron mediciones de niveles de ruido en las área críticas de la 
empresa, en los puestos: operador de molino, flexografía, producción y empaque, para 
determinar la frecuencia de daño auditivo por puestos de trabajo, además se estudiaron 
 
16 
otras características individuales de los trabajadores expuestos a factores de riesgo 
para daño auditivo, este estudio se desarrolló en el lapso comprendido desde el mes de 
Marzo a Diciembre del 2005. 
 En esta empresa se carece de información acerca de cómo estos factores han 
incidido en los trabajadores, de igual forma no poseen registros actualizados sobre los 
niveles de ruido los cuales son cambiantes al variar las condiciones del proceso 
productivo, incorporación de nueva tecnología y deterioro de las maquinarias, 
siendo importante esta investigación para proponer un programa de prevención y 
control de hipoacusia laboral. 
 
Objetivos 
 
Objetivo General 
 
 Establecer la frecuencia de daño auditivo en los trabajadores de una empresa 
procesadora de alimentos de la ciudad de Barquisimeto. Marzo-Diciembre 2005. 
 
Objetivos Específicos 
1. Diagnosticar los grados de daño auditivo en los trabajadores estudiados. 
2. Establecer la frecuencia de daño auditivo según el sexo y edad. 
3. Determinar la frecuencia de daño auditivo según: 
- Antigüedad laboral en la empresa procesadora de alimentos. 
- Tiempo de exposición. 
- Antecedentes personales ocupacionales. 
- Puestos de trabajo. 
- Antecedentes personales patológicos y extraocupacionales. 
4. Medir los niveles de ruido en los puestos de operador de molino, flexografía, 
producción y empaque de la empresa procesadora de alimentos. 
 
 
17 
Justificación e importancia: 
 La importancia de realizar una evaluación auditiva a todos los trabajadores 
sometidos a ruido industrial, se hace cada día más imperiosa ya que los trabajadores 
que están expuestos a ruido, son más propensos a sufrir un accidente de trabajo, al 
mismo tiempo es necesario determinar la existencia o no de la pérdida auditiva, con 
el fin de establecer las medidas correctivas y de control, y por otro lado establecer el 
grado de invalidez si fuera necesario. 
 El ruido es un factor de riesgo físico presente en el ambiente laboral que tiene 
especial relevancia para la medicina ocupacional, en atención a la gran cantidad de 
trabajadores que están expuestos a sus efectos nocivos, que pueden ser auditivos y 
extra-auditivos. 
 La Organización Panamericana de la Salud (OPS) en 1981, señala “La importancia 
del problema reside en su elevada prevalencia en la mayoría de las ramas industriales, 
así como el hecho de producir incapacidad permanente en una importante parte de los 
trabajadores expuestos”. 
 Otro aspecto importante a considerar en este problema es la poca divulgación sobre 
sus efectos, que contribuye a que empresarios y trabajadores no tengan una conciencia 
clara de sus consecuencias, lo que dificulta la implementación de adecuados 
programas de control, sumándose a esta dificultad la tecnología empleada en lasindustrias, por otra parte el requerimiento de complejos equipos de medición que 
permitan la evaluación objetiva de estos riesgos. 
 Por lo anteriormente expuesto, era necesario realizar un estudio de frecuencia así 
como el diagnóstico del daño auditivo, que proporcionara las bases para realizar la 
propuesta de un plan de promoción y prevención para la salud auditiva, partiendo de 
la premisa que la audición es vital en muchos aspectos de la seguridad y el 
funcionamiento en el lugar de trabajo. Además de comunicarse los unos con los otros, 
los trabajadores deben ser capaces de escuchar los avisos y llamados que se hacen por 
medio del sistema de altavoces de la empresa, así como las alarmas de fuego, las 
alarmas que indican la urgencia de evacuar la planta, y las señales de vehículos para la 
marcha en retroceso. Los operadores de maquinarias, suelen dejarse llevar, por 
 
18 
cambios en el sonido de estas, para determinar si está funcionando adecuadamente. Al 
mismo tiempo la buena audición ayuda a los trabajadores a evitar accidentes y reduce 
la incidencia de lesiones graves, muchos estudios han comprobado que los 
trabajadores, en ambientes con altos niveles de ruido, pierden más tiempo debido a 
accidentes y son menos productivos que los que están expuestos a niveles más bajos 
de ruido. 
 Al mismo tiempo, aportar recomendaciones y posibles soluciones al caso, para 
evitar un incremento en esta enfermedad laboral, no curable una vez establecida pero 
prevenible con las correcciones de ingeniería y el uso de protectores auditivos, en ese 
orden de prioridades, resultaría a la larga más económico para el empresario que tener 
que indemnizar a los trabajadores por esta enfermedad ocupacional. La salud de los 
trabajadores no tiene precio y no se debe escatimar en los gastos para preservarla. 
 
Alcances y Limitaciones: 
 
 Esta investigación se realizó en una empresa que tiene sus características 
particulares, por lo que sus resultados son válidos solo en este contexto, sin embargo 
ellos contribuyeron a conocer la magnitud y distribución de esta patología en la 
empresa a fin de buscar las soluciones que corresponden. 
 Una de las limitaciones de este estudio fue que no participaron todos los 
trabajadores, ya que se respetó la voluntad de participar y se habían pautado algunos 
criterios de exclusión. También se presentó otra limitación, en los trabajadores que se 
desplazan constantemente, alejándose o aproximándose a las fuentes de ruido, en ellos 
se debió utilizar un dispositivo tipo dosímetro para la medición de los niveles de 
ruido, del cual no se disponía para el momento del estudio y solo se realizaron las 
mediciones con el sonómetro. Asimismo se debió complementar la audiometría de 
tonos puros, con la vía ósea en los trabajadores con audiometría anormal, a fin de 
hacer el diagnóstico de hipoacusia inducida por ruido, esta exploración no se llevó a 
cabo por no contar con el dispositivo. 
 
19 
 
 
CAPITULO II 
 
 
MARCO TEÓRICO 
 
 
 Antecedentes 
 
 En Nicaragua se han incrementado las exigencias, normas y observancia de lo que 
constituyen la higiene y seguridad industrial, a pesar de que hace falta mucho camino 
por recorrer. Al igual que en Venezuela encuentran relevancia en lo concerniente a la 
conservación auditiva de los trabajadores. Es conocido que un buen porcentaje de los 
trabajadores que laboran en la industria estuvieron expuestos en algún momento de su 
vida a intensidades de ruido que sometieron a su aparato auditivo a una carga acústica 
que en muchos casos pudo ocasionar daños permanentes. Sánchez (1999) 
 Prada (1989-1990) realizó en Bogotá un estudio sobre la prevalencia de hipoacusia 
neurosensorial a 393 trabajadores que laboraban en ECOPETROL, industria extractiva 
del petróleo, expuestos a alto nivel de ruido industrial superiores a 85 dB (A), 
encontrándose una prevalencia de 3.5% de hipoacusia atribuible a la exposición a 
altos niveles de ruido industrial, siendo mayormente afectados los trabajadores 
expuestos a alto ruido de impacto, así como los grupos de mayor edad y con mayor 
permanencia en la empresa. 
 Bauer y colaboradores (1991) pertenecientes al Instituto de Estadística Médica y 
Documentación, Colonia Universitaria, Alemania, realizaron un estudio para 
determinar los umbrales de audición de 47.388 obreros expuestos a ruido según las 
variables: edad, sexo y otras como: enfermedades auditivas, lesiones craneales, 
tinnitus, relacionándolas a su vez con el uso de protectores auditivos y la audiometría 
en el rango de 0.5 a 6 KHz. Demostrando que los umbrales auditivos a cualquier 
frecuencia son dominados por la edad del obrero y que las mujeres, después de las 
 
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condiciones equivalentes de exposición, oyen mejor que los hombres. Las variables de 
sexo, niveles de ruido, enfermedades auditivas y tinnitus se relacionaron con el uso de 
protectores auditivos y con los resultados de la audiometría. El uso de protectores 
auditivos está fuertemente relacionado con el umbral auditivo en el rango de baja 
frecuencia. La frecuencia que se afecta con el ruido es la esperada, la de 4.000 Hz, 
para todas las variables estudiadas. 
 De la misma manera, Maisarah y colaboradores (1993) realizan un estudio a 524 
obreros industriales, de los cuales 442 estaban expuestos a ruido y 82 no expuestos a 
ruido. El propósito era comparar el predominio de pérdida de la audición 
neurosensorial entre los obreros expuestos a ruido y los no expuestos. El predominio 
de pérdida de la audición neurosensorial fue significativamente superior en el grupo 
expuesto a ruido 83%, mientras que los no expuestos 31.7%. La posibilidad de 
desarrollar la pérdida de la audición debido a la exposición al ruido excesivo sólo era 
conocida por 35.5% del los obreros expuestos a ruido. Los resultados resaltan la 
necesidad de educar a los obreros sobre los riesgos de exposición al ruido y la 
relación con la pérdida auditiva. 
 En marzo de 1994, la oficina de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) 
en Colombia solicitó al Instituto Nacional para la Seguridad y Salud Ocupacional 
(INSSO) su colaboración para desarrollar y ejecutar algunas partes de un estudio de 
Salud Ocupacional en la Industria Petrolera. El propósito de esto fue investigar los 
efectos de la exposición a solventes aromáticos y al ruido en la audición, en esta 
investigación se halló que la exposición ocupacional simultánea al ruido y a los 
solventes aromáticos aumenta significativamente la probabilidad de desarrollar una 
pérdida auditiva entre trabajadores de refinerías de petróleo, al compararlos con un 
grupo de empleados no expuestos. Se demostró que sus exposiciones aumentaron la 
prevalencia y el riesgo de pérdida auditiva, con riesgo relativo ajustado mayor que la 
obtenida en el grupo no expuesto. 
 Igualmente, Londoño F et al. (1977-1997) realizaron un estudio analítico 
retrospectivo con base en una muestra de 745 trabajadores de la refinería de 
ECOPETROL, en Barrancabermeja, para calcular la prevalencia y la incidencia de la 
 
21 
hipoacusia neurosensorial en cuatro grupos de trabajadores, expuestos a ruido, a 
solventes aromáticos, a solventes, y no expuestos. La prevalencia puntual de la 
hipoacusia calculada en los cuatro grupos estudiados varió entre 8 y 13,5% con 
diferencias que no fueron estadísticamente significativas, esto se atribuyó a los niveles 
bajos de exposición a los solventes y en el caso del ruido, a los programas de 
prevención vigentes en la empresa. 
 Por otra parte, Hernández-Gaytan y colaboradores (1997) realizaron un estudio 
transversal en una planta productora de cemento en el estado de Morelo de la ciudad 
de México a 85 trabajadores para determinar la prevalencia de pérdida auditiva 
inducida por el ruido. Los resultados mostraron que el ruido es un serio riesgoen 
algunas áreas, y que algunos casos de pérdida auditiva inducida por el ruido habían 
sido desarrollados por exposición ocupacional en esta industria, además de proponer 
un diseño y aplicación de un programa de conservación auditivo. 
 Asimismo, Almeida y otros (2000) de la Universidad Federal de Sao Paulo 
realizan un estudio retrospectivo a 222 trabajadores con pérdida de la audición 
neurosensorial inducida por ruido y a la vez correlacionan las manifestaciones clínicas 
auditivas, las alteraciones de los umbrales de la audiometría en las frecuencias de 250 
Hz a 8000 Hz, con la edad y el tiempo de exposición, obteniendo los siguientes 
resultados: se comprobó el aumento de hipoacusia según la edad y el tiempo de 
exposición, el tinnitus es constante, los descensos en los umbrales de la audiometría se 
encontraron en las frecuencias altas de 3000 Hz a 8000 Hz, como consecuencia del 
daño de las áreas basales de la cóclea, siendo mayores según la edad y el tiempo de 
exposición. Concluyendo que los trabajadores con hipoacusia inducida por ruido 
presentaron umbrales característicos en la audiometría que varían según la edad y el 
tiempo de exposición al ruido. 
 Además, Hong y Kim (2001) de la Universidad de Michigan realizaron un estudio 
cuyo propósito era identificar factores asociados con la pérdida de la audición de los 
obreros del aeropuerto de Corea, para ello estudiaron a 255 trabajadores que laboraban 
jornada completa expuestos a ruido intenso, todos del sexo masculino. Los datos eran 
recogidos en una encuesta llenada por el mismo trabajador, además se realizó toma de 
 
22 
la tensión arterial, valoración audiológica y otológica, así como mediciones de los 
niveles de ruido en las áreas de trabajo. El resultado del análisis de las múltiples 
variables demostró que la exposición al ruido laboral (el nivel de exposición, años de 
exposición al ruido) y los factores de riesgo personales que incluyen la exposición al 
ruido no laboral, la historia de enfermedades otológicas, el uso de medicamentos 
ototóxicos, así como el hábito de fumar y padecer de hipertensión arterial están 
significativamente asociados con la pérdida de la audición. 
 Del mismo modo, Reina (2002) realizó en Colombia un análisis de los 
principales problemas de salud y principales enfermedades ocupacionales padecidas 
por los trabajadores, para ello revisó un estudio diagnóstico realizado por la división 
de Salud Ocupacional Del Instituto de Seguro Social (I.S.S) Colombia, Seccional 
Cundinamarca en 1989, donde se detectó que el ruido estaba presente en el 60% de 
las empresas encuestadas, y además era el riesgo físico más frecuente en las mismas. 
La presencia de este factor de riesgo en las empresas afiliadas al Seguro Social, ha 
generado que la Hipoacusia neurosensorial, se encuentre en el primer lugar dentro de 
las enfermedades profesionales. Así, para 1989 constituyó 42,7%; en 1992 el 56,2% y 
para 1994 representó 64,9% del total a nivel nacional. 
 Por otra parte Otero (2002) escribió un artículo titulado Pérdida de audición en 
odontólogos, en donde reseña: Zubick y colaboradores realizaron en 1980 una prueba 
de audiometría a 137 odontólogos y a 80 médicos. Al comparar los resultados, se 
evidenció que los médicos tienen mejores niveles de audición, sobre todo en el rango 
de 4000 Hz. Además, se encontró que el oído izquierdo de los odontólogos derechos 
mostró un nivel menor de pérdida auditiva, relacionada presumiblemente a su mayor 
distancia con la fuente de sonido. Dentro de los odontólogos, se encontró niveles 
similares de daño en la audición en el grupo de especialistas, al compararlos con los 
odontólogos de práctica general. 
 Asimismo, Rebuzne y otros (2004) realizaron un estudio a 23 trabajadores 
encargados de la música en las discotecas, donde indagaron la pérdida auditiva y 
síntomas otológicos asociados a la exposición al ruido, para ello usaron una encuesta y 
realizaron audiometría de tonos puros, además mediciones de niveles de ruido en los 
 
23 
puestos de trabajo para lo cual utilizaron dosímetros. Tres miembros del grupo en 
estudio, mostraron clara evidencia de pérdida auditiva inducida por ruido en las 
audiometrías, 70% presentó cambio temporal del umbral y 74% tinnitus .El nivel de 
ruido en la sala de fiesta fue de 108 dB (A) y el nivel medio 96 dB (A). Concluyendo 
que los trabajadores encargados de la música en las discotecas, están en riesgo alto de 
desarrollar pérdida auditiva inducida por exposición al ruido en las salas de fiestas que 
exceden los niveles seguros. 
 De la misma manera, Oslzewski y colaboradores (2005) realizaron el estudio 
denominado “El ruido de impulso de las armas y las explosiones producen daño 
auditivo en el personal del servicio militar”, el mismo comprendió a 92 soldados, 
expuestos a ruido de impulso durante un año de servicio militar, la evaluación se 
realizó antes y después de un año de servicio militar, usando la audiometría tonal y la 
timpanometría. Obtienen resultados de un deterioro significativo en la audición 1–2 
dB por término medio para 125- 3000 Hz y 4-6 dB para 1200-4000 Hz para todos 
después del servicio militar. Las disminuciones del umbral audiométrico estaban 
predominantemente registradas en las frecuencias de 3000 y 4 000 Hz. 
 Guerra et al. (2005) realizaron un estudio para analizar el predominio de casos 
sugestivos de la pérdida de la audición inducida por ruido entre los obreros 
metalúrgicos que fueron expuestos potencialmente al ruido industrial de 83 a 102 dB, 
el mismo se llevó a cabo en una empresa metalúrgica que presta sus servicios en 
Brasil. Se obtuvieron datos clínicos y laborales de 182 obreros que eran activos entre 
Noviembre del 2001 a Marzo del 2002. Para caracterizar el grado de exposición al 
ruido dentro del ambiente laboral, se usaron las clasificaciones acústicas de las 
unidades que opera la compañía del cliente y asociándolos con las variables como la 
edad, antigüedad en la compañía, tiempo de exposición al ruido laboral y el grado de 
uso del equipo de protección personal. Los resultados obtenidos demostraron que el 
predominio de casos sugestivos de hipoacusia inducida por ruido sólo se presentó en 
15,9% asociado con las variables de mayor edad y el grado de uso del equipo de 
protección personal. Los resultados encontrados contribuyen a entender bien la 
conducta de algunas de las características principales de la hipoacusia inducida por 
 
24 
ruido, en una situación particular de la organización de trabajo que es relativamente 
común en el contexto industrial brasileño. 
 Hong (2005) de la Universidad de Michigan realizó un estudio sobre la exposición 
al ruido laboral y la pérdida de la audición inducida por ruido entre los obreros de la 
construcción en los Estados Unidos. El propósito de este estudio era determinar el 
predominio y características de la pérdida de la audición entre los ingenieros que 
operaban la maquinaria pesada de la construcción. Para ello realizó una prueba 
audiométrica en una cámara insonorizada. Antes de realizar la prueba audiométrica, 
les fue suministrada una encuesta y se les realizó un examen otoscópico. La pérdida 
de la audición era determinada por el nivel del umbral auditivo en el oído más 
afectado con valor por debajo de 25 dB. Los resultados fueron, para un total de 623 
trabajadores del sexo masculino, predominantemente de mediana edad (43 años) 
representando 90% de la población estudiada, más del 60% de los trabajadores que 
manejan maquinaria pesada presentaron pérdida de la audición en las frecuencias de 
4 y 6 Hz. La proporción de pérdida de la audición fue particularmente superior entre 
los obreros que informaron más antigüedad laboral en la industria de la construcción. 
Los obreros mostraron que el oído significativamente más afectado era el oído 
izquierdo, yuna característica típica de la hipoacusia inducida por ruido es una (V)-
muesca a 4 o 6 Hz. 
 Por otro lado, Martínez (1995) “d”, realizó una investigación epidemiológica 
descriptiva, tipo estudio de casos, en 122 trabajadores, expuestos en forma crónica a 
niveles elevados de ruido de la zona industrial de la Victoria, Estado Aragua, 
Venezuela, en los años 1.988 a 1.992. Los resultados demostraron que 65,6% de los 
trabajadores presentaban afectación en el área de la comunicación social, existiendo 
pérdida de la audición de carácter irreversible. El 70,4% de los trabajadores refirieron 
manifestaciones extra-auditivas, mientras 19% presentaban hipertensión arterial. 
Todas las manifestaciones fueron más frecuentes en aquellos trabajadores con mayor 
tiempo de exposición al ruido de tipo continuo. El 27% de los trabajadores ameritó 
incapacidad laboral. Además se estableció el grado de lesión auditiva; encontrándose 
señal de acción de ruido ocupacional 30,4%, Hipoacusia Grado I 43,3%, Hipoacusia 
 
25 
Grado II 22,3%, y 4% restante presentó Hipoacusia Grado III. Así mismo se confirmó 
el carácter crónico de la enfermedad, como la relación con el tiempo de exposición, 
las lesiones más graves Hipoacusia Grado II y III se presentaron en trabajadores con 
tiempo de exposición mayor a 15 años. 
 Piñero (2001-2002 )“b” realizó un trabajo para determinar la incidencia de trauma 
acústico en los trabajadores de la rotativa en una imprenta de la localidad de 
Barquisimeto, para lo cual practicó una anamnesis detallada, evaluación otoscópica y 
audiométrica a 36 trabajadores que laboraban en un ambiente donde el ruido superaba 
los 85 dB, durante una jornada de trabajo de 8 horas diarias, encontrando que 59% de 
la población estudiada presentó trauma acústico y además no se demostró relación 
entre el tiempo de exposición y la presencia de trauma acústico. 
 Al conocer el daño que se produce en los trabajadores al estar expuestos al factor 
de riesgo físico como es el ruido, presente en muchos ambientes laborales ha hecho 
que los investigadores se interesen más por estudiar sus consecuencias con el fin de 
proponer recomendaciones para evitar esta enfermedad laboral no curable una vez 
instaurada, pero si prevenible. 
 Al realizar la revisión de los diferentes estudios se puede observar que existe una 
relación entre la producción de daño auditivo y el ruido, como agente causal del 
mismo, dicho factor está presente en muchos ambientes laborales, teniendo este 
mucha relación con el estudio planteado ya que en la empresa donde se realizó la 
investigación está presente en muchas áreas y hasta ahora no se han realizado 
estudios sobre los niveles de ruido a los que están expuestos los trabajadores, por lo 
que se planteó determinar la frecuencia del daño ocasionado a la audición en los 
trabajadores estudiados. 
 
Bases Teóricas 
 
 
 Desde el punto de vista físico el sonido es un movimiento ondulatorio con una 
intensidad y frecuencia determinada que se transmite en un medio elástico (aire, agua 
o gas), generando una vibración acústica capaz de producir una sensación auditiva. La 
 
26 
intensidad del sonido corresponde a la amplitud de la vibración acústica, la cual es 
medida en decibeles (dB). La frecuencia indica el número de ciclos por unidad de 
tiempo que tiene una onda, ciclos por segundo (c.p.s.) o Hertzio (Hz). Rendiles 
(1997) “e”. 
 El rango de frecuencia de los sonidos audibles en personas jóvenes y sanas es entre 
20 Hz. Y 20.000 Hz. Los ruidos de alta frecuencia son los más dañinos para el oído 
humano. En los programas de vigilancia médica del ruido en trabajadores, es posible 
detectar sus efectos iniciales en las frecuencias de 4000 y 6000 Hz (Señal de alerta) 
Rendiles (1997) “f”. 
 El valor mínimo de presión sonora que puede detectar el oído humano es de 2x10-5 
Nw/m2, prolongándose hasta el umbral de dolor que se ubica cercano a los 20 Nw/m2. 
En vista de este rango tan amplio se requiere de la utilización de una escala 
logarítmica para la medición. Desoille (1986). 
 Fisiológicamente se considera que el ruido es cualquier sonido desagradable. 
El ruido desde el punto vista ocupacional puede definirse como el sonido que por sus 
características especiales es indeseado o que puede desencadenar daños a la salud. Es 
clásico el ejemplo de los integrantes de alguna orquesta, aunque el sonido puede ser 
muy agradable, si supera los límites recomendados por los estándares internacionales 
se deben considerar ocupacionalmente expuestos a ruido. Rendiles (1997) “g”. 
 Existen diferentes tipos de ruido, contemplados en la Norma Venezolana Covenin 
1565:1995; definiendo al Ruido Continuo como aquel cuyo intervalo de tiempo entre 
2 niveles máximos tiene una duración menor o igual a 0.5 segundos, al Ruido 
Continuo constante aquel cuyo nivel es detectado en forma continua durante todo el 
período de medición y las diferencias entre los valores máximos y mínimos no 
excedan a 6 dB, como Ruido Continuo Fluctuante aquel cuyo nivel es detectado en 
forma continua durante el período de medición, pero presenta diferencias mayores de 
6 dB entre los valores máximos y mínimos alcanzados, así mismo el Ruido 
Intermitente es aquel que durante un segundo o más presenta características estables 
fluctuantes, seguidas por interrupciones mayores a 0,5 segundos y finalmente el Ruido 
Impulsivo o de impacto como aquellos de corta duración (menor de 1 segundo) con 
 
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niveles de alta intensidad que aumentan y decaen rápidamente en menos de 1 
segundo presentando diferencias por encima de 35 dB entre los valores mínimos y 
máximos alcanzados. 
 En la práctica el ruido se presenta como una mezcla de todos los tipos, por ello 
la Norma Venezolana Covenin recomienda el Nivel Sonoro Equivalente (Leq), el 
cual representa en un nivel de presión de sonido continuo constante la misma 
cantidad de energía sonora que el sonido continuo fluctuante medio durante el mismo 
período. Asimismo establece que deben colocarse avisos de advertencia a la entrada 
de los lugares de trabajo, donde los niveles de ruido sean igual o mayor a 85 dB (A) y 
que se deben usar equipos de protección, ya que puede causar pérdida auditiva. 
Además el empleador debe aplicar las medidas de control primero sobre la fuente y 
luego sobre el ambiente (en ese orden de prioridades). Del mismo modo recomienda 
los métodos de evaluación, equipos e instrumentos, y el procedimiento, como medida 
general recomienda mediciones de nivel de ruido en dB (A). 
 Del mismo modo la norma describe: para realizar las mediciones de nivel de ruido 
al que está expuesto el personal se deberá hacer mediciones en los lugares en los que 
trabaja, colocando el micrófono del sonómetro a una altura y localización aproximada 
a la zona de audición. Para fines de control deberá medirse en distintos puntos, para 
ello se recomienda medir de 1,2 m a 1,5 m de altura sobre el piso y mantener el equipo 
a una distancia prudencial de la persona que realiza la medición, se recomienda una 
distancia de 0,30 m en sentido horizontal de la zona alrededor para así reducir las 
reflexiones de sonido hacia el micrófono. El sonómetro deberá ubicarse como mínimo 
a una distancia 1,20 m de las paredes. Se deben realizar lecturas de niveles de ruido 
cada diez segundos durante el mayor tiempo posible para obtener la mayor 
representatividad de la situación que se mide. Debe medirse mediante un mínimo de 
veinte minutos, cada 10 segundos. 
 Además existen estrategias de evaluación para determinar exposición ocupacional 
a ruido como son la evaluación de oficio o de puesto de trabajo la cual se elige 
cuando se desea saber la cantidad de ruido que se presenta en un oficio determinado, 
como producto de la exposición y la otra sería la evaluación de áreas para la cual se28 
debe dividir el área en cuadrículas hasta por 4 x 4 metros como máximo utilizando un 
plano a escala. Se enumeran y se calcula la muestra mediante la fórmula siguiente: n = 
(pq)/ (E2/Z2 + pq / N). Las mediciones deben realizarse cada cierto tiempo, para 
abarcar toda la jornada además se recomienda realizarlas en turno diferentes, otra 
forma es utilizando la experiencia del técnico que realiza la medición. Otra de las 
características para la medición de la exposición al ruido, es que los trabajadores que 
se desplazan constantemente, alejándose o aproximándose a las fuentes de ruido se 
deben utilizar otros dispositivos para tal medición. Por esta razón, el instrumento más 
adecuado para efectuar una evaluación de exposición es el dosímetro. Estos 
instrumentos, disponen de un micrófono que se sitúa próximo al oído del trabajador. 
El micrófono está conectado al dosímetro mediante un cable flexible. Por su parte, el 
dosímetro puede ser ubicado en un bolsillo o en forma más frecuente, mediante un 
clip, que se fija al cinturón del trabajador. De este modo, la persona efectúa sus 
actividades, trasladando un instrumento que no pesa más de 200 a 300 gramos, el cual 
permite registrar los niveles de ruido al que están expuestos los trabajadores durante la 
jornada o en períodos de tiempo representativos de sus actividades laborales 
 En relación al mecanismo fisiológico de la audición la onda sonora es recibida por 
el pabellón auricular quien la conduce a través del conducto auditivo externo hasta 
llegar a la membrana timpánica. Existe gran impedancia para la transmisión de la 
onda sonora desde el exterior hasta el oído interno, donde se encuentra inmerso 
en un líquido conocido como endolinfa, el órgano de Corti. Esta impedancia es 
neutralizada por el tímpano y la cadena de huesecillos quienes transmiten el 
estímulo sonoro en forma de vibración, a través de la ventana oval, a la rampa 
vestibular del caracol: la cual por deflexiones de su membrana vestibular espirilar, 
estimula el órgano de Corti situado en el conducto coclear. Para evitar un estímulo 
excesivo la onda es atenuada cuando pasa de la rampa vestibular hacia la rampa 
timpánica, desembocando en el oído medio a través de la ventana redonda. 
 El órgano de Corti está constituido por un conjunto de células con 
microvellosidades altamente especializadas, que son capaces de transformar el 
estímulo mecánico en una señal nerviosa que viaja a través de la rama coclear 
 
29 
del VIII par craneal hasta el Sistema Nervioso Central. Rendiles (1997) “h”. 
 Existen diferentes mecanismos de la lesión por ruido expresados en las siguientes 
teorías: Rendiles (1997) “i”. 
1. Teoría del Microtrauma: Los picos del nivel de presión sonora de un ruido 
constante, conducen a la pérdida progresiva de células, con la consecuente 
eliminación de neuroepitelio en proporciones crecientes. 
 2. Teoría Bioquímica: Postula que la hipoacusia se origina por las alteraciones 
bioquímicas que el ruido desencadena, conllevando a un agotamiento de metabolitos 
y en definitiva a la lisis celular. Estos cambios bioquímicos son: 
 (a) Disminución de la presión de O2 en el conducto coclear. 
 (b) Disminución de los ácidos nucleicos de las células. 
 (c) Disminución del Glucógeno, ATP, etc. 
3. Teoría de la conducción del Calcio intracelular: El ruido es capaz de 
despolarizar las neuronas en ausencia de cualquier otro estímulo. Estudios recientes al 
respecto han demostrado al menos que, las alteraciones o distorsiones que sufre la 
onda de propagación del calcio intracelular en las neuronas son debidas a cambios en 
las alteraciones neurológicas que se presentan durante la exposición al ruido. 
4. Mecanismo mediado por Macrotrauma: La onda expansiva producida por un 
ruido discontinuo intenso es transmitida a través del aire generando una fuerza capaz 
de destruir estructuras como el tímpano y la cadena de huesecillos. 
 Se puede definir a la hipoacusia neurosensorial como la debida al deterioro de la 
cóclea, por pérdida de los cilios del órgano de Corti; entre las diversas causas más 
frecuentes de sordera sensorial, está la exposición continua al ruido que exceda 
85 dB. LaDou (1999) “e”. 
 Existen algunos factores determinantes en los efectos nocivos del ruido como: 
 1. Variabilidad biológica: (Susceptibilidad individual) La susceptibilidad al ruido 
puede ser hereditaria 
 2. Intensidad del ruido: La Norma Venezolana COVENIN 1565, cuya última 
 
30 
revisión fue en 1995, denominada: "Ruido Ocupacional. Programa de Conservación 
Auditiva. Niveles Permisibles y Criterios de Evaluación". Establece que para una 
jornada de trabajo de 8 horas, el límite del nivel de sonido es de 85 dB. Niveles de 
intensidad mayores de ruido deben ser compensados con el acortamiento del 
tiempo de exposición en la jornada. 
 3. Niveles permisibles de ruido en el tiempo de trabajo: (ver anexo B) 
 4. Espectro de frecuencia: En general los sonidos de alta frecuencia son más 
dañinos que los de baja frecuencia. En el ambiente laboral predomina la exposición 
a ruidos de alta frecuencia, dependiendo sus efectos dañinos de la intensidad y 
tiempo de exposición entre otros. Martínez (1995) “e”. 
 5. Tiempo de exposición diaria: La duración de la exposición está directamente 
relacionada con la intensidad del ruido, el nivel de ruido equivalente continuo (Leq) 
y la dosis recibida. Norma Venezolana COVENIN 1565. 
 6. Edad: La presbiacusia es un proceso degenerativo natural de la capacidad 
auditiva que se inicia para algunos autores a los 35 años en promedio, lo cual favorece 
el efecto nocivo del ruido. La presbiacusia temprana se asocia a pérdida rápidamente 
progresiva de la capacidad auditiva en trabajadores expuestos a ruido. Rendiles (1997) 
“j”. 
 7. Sexo: En general la mujer tiene agudeza auditiva superior a la del hombre ya 
que tiene el umbral de audición más bajo. Rendiles (1997) “k”. 
 8. Enfermedades concomitantes del oído: Son determinantes, los antecedentes de 
patología del oído medio, tales como infecciones, perforación timpánica o anquilosis 
de la cadena de huesecillos. Esto puede conllevar a la pérdida del reflejo estapedial 
Rendiles (1997) “l”. El cual permite una protección de modo parcial contra los 
efectos del ruido constante, este se inicia cuando se somete al oído a un ruido más 
intenso de 90 dB y genera que los músculos del oído medio se contraigan, y por lo 
tanto, tensen al sistema conductor y lo hagan más resistentes al paso de los sonidos. 
La Dou (1999) “f”. 
 Dentro de las formas clínicas tanto de los síndromes auditivos como extra-
auditivos se hace la siguiente descripción: entre los primeros se tiene el 
 
31 
Desplazamiento temporal del umbral de la audición (DTU) que no es más que la 
exposición a ruidos intensos, que con frecuencia causa una ligera disminución de la 
sensibilidad auditiva, y a menudo se acompaña de zumbidos, por lo general dura 
pocas horas; pero puede ser más prolongada si la intensidad del ruido ha sido grande. 
Para considerar que una persona ha sufrido solo un desplazamiento transitorio del 
umbral de la audición, deberá tener una recuperación total de sus facultades auditivas 
después de un lapso de reposo de 16 horas. Rendiles (1997)“m”, así mismo se 
describe el desplazamiento permanente del umbral de la audición (DPU) o sordera 
ocupacional como el resultado de la acción perturbadora del ruido, sobre los 
estereocílios en las células especializadas del órgano de Corti, sobreviniendo en forma 
irreversible, la incapacidad de estos transductores electromecánicos para transmitir la 
señal nerviosa. Se debe tener presente que el riesgo para desarrollar hipoacusia 
inducida por ruido (HIR) está en directa relación con eltiempo de exposición, la 
intensidad del ruido, así como factores genéticos que predispones al trauma acústico. 
La HIR ejerce su mayor efecto en las zonas de la cóclea encargadas de recibir los 
sonidos de alta frecuencia. Por lo general el déficit es más grave para las frecuencias 
cercanas a 4.000 Hz, extendiéndose progresivamente hacia las “Frecuencias de la 
Conversación” (500 a 2000 Hz.). Los pacientes se quejan de deterioro progresivo de la 
audición, aunque éste síntoma es reflejo de la ineficacia de un programa de protección 
de la audición, ya que muy constantemente las deficiencias auditivas se inician en las 
áreas de alta intensidad, mucho antes que la lesión abarque las zonas que interfieren 
en las frecuencias de la conversación. A menudo el examen audiométrico formal 
revela sordera neurosensorial bilateral con predominio del déficit para las altas 
frecuencias con una caída máxima que se presenta alrededor de los 4.000 Hz en 
audiograma de tonos puros. Es posible sufrir desplazamiento permanente del umbral 
de la audición si hay exposición a ruido discontinuo intenso; como el que se produce 
en una explosión, en este caso la sordera es de tipo conductiva debido a lesión 
timpánica o en la cadena de huesecillos por efecto de la onda expansiva. Con menor 
frecuencia el ruido discontinuo intenso puede provocar daño al órgano de Corti, por 
efecto de su onda expansiva. Entre otros efectos auditivos provocados por la 
 
32 
exposición a ruido se encuentra el tinnitus, caracterizado por una falsa sensación de 
sonido que frecuentemente acompaña a la hipoacusia y el cual es muy molesto. El 
tinnitus puede ser continuo o intermitente y se exacerba generalmente con la 
exposición al ruido. Dependiendo de la intensidad, el ruido puede distorsionar la 
comunicación interpersonal en el área de trabajo, pues durante la exposición a dos 
sonidos simultáneos el de mayor intensidad anula la percepción del otro, demostrado 
esto al superponer dos sonidos de igual frecuencia (diferente intensidad) en la clásica 
Prueba de Stenger. Rendiles (1997) “n”. 
La O.M.S. (1.980) señala que la exposición a ruido puede evocar distintas clases 
de respuestas reflejas, especialmente cuando el ruido es de carácter desconocido o 
inesperado. Estos reflejos son mediados por el Sistema Nervioso Vegetativo y 
representan una parte del patrón de respuesta conocido como “reacción al stress”. Si la 
exposición al ruido se mantiene pueden ocurrir patrones de inadaptación 
psicofisiológica con repercusiones neurosensoriales, endocrinas, cardiovasculares, 
digestivas, etc., de tal manera que ruido pasaría a comportarse como un estresor de 
tipo físico. Así mismo, la exposición a ruidos intensos puede ocasionar trastornos del 
equilibrio, sensación de malestar y fatiga psicofisiológica, que afecta los niveles de 
rendimiento. Rendiles (1997) “ñ”. 
 La evaluación audiométrica de los trabajadores es primordial para desarrollar un 
programa ya que a través de la comparación anual de los test audiométricos se pueden 
dilucidar y establecer programas de intervención y de motivación a los trabajadores. 
La audiometría consiste en la medición de los umbrales con tonos puros por 
conducción aérea de las frecuencias 500, 1000, 2000, 3000, 4000 y 6000 Hz en ambos 
oídos. La frecuencia 8000 Hz puede ser evaluada sólo como forma de esclarecer la 
etiología de la pérdida auditiva. Rendiles (1997) “o”. 
 La audiometría de base debe ser obtenida antes de que el trabajador ingrese a la 
empresa o dentro de los 30 días siguientes a la incorporación teniendo en cuenta que 
en este caso el trabajador no debe de haberse expuesto a niveles por encima de 85 dB 
o más por un tiempo mínimo de 12 horas. No se debe considerar como sustituto del 
reposo auditivo el uso de protectores auditivos. Rendiles (1997) “p”. 
 
33 
 La empresa procesadora de alimentos utiliza como materia prima trigo el cual es 
almacenado en los silos, de donde es transportado por un sistema de ductos al área de 
molino donde sufre una serie tamizados y limpieza, en este proceso se obtiene la 
sémola y afrecho que también comercializan, el resto de la harina más fina es la que 
se utiliza para la elaboración de los diferentes tipos de pastas que se lleva a cabo en el 
área de producción a través de varios procesos como humedecimiento, presecado, 
secado y cortado de acuerdo al tipo de pasta, por ejemplo: pasta larga, corta y nido, 
entre otras, existen 18 tipos de pastas. Posteriormente se lleva a cabo el proceso de 
empaquetado individual y por bultos para luego ser llevados al almacén desde donde 
son cargados los camiones para su distribución y comercialización. 
 En otra área separada del proceso productivo se encuentra flexografía donde se 
encargan del timbrado del polipropileno para bolsas, en las que se empaquetaran los 
diferentes productos fabricados (con el logo de la empresa y las especificaciones de 
cada artículo). 
 
Bases Legales: 
 
Legislación Venezolana 
 
 En la legislación venezolana se contempla el derecho a la salud, la higiene y la 
seguridad industrial del trabajador enmarcados en leyes, reglamentos, acuerdos, 
convenios y resoluciones de organismos internacionales, con el fin de proteger la 
integridad física, psicológica, económica, social y moral de los trabajadores. 
 Dentro del marco legal del presente estudio, se citan las normas jurídicas, 
siguiendo la jerarquía establecida en la pirámide de Kelsen, que implica deberes y 
derechos, tanto a los trabajadores y trabajadoras, así como a los empresarios, a fin de 
preservar la salud de la población trabajadora, que en nuestro país es muy joven y se 
encuentra expuesta a muchos factores de riesgo. 
 
 
 
34 
Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (1999) 
 Artículo 83: La salud es un derecho social fundamental, obligación del Estado, 
que lo garantizará como parte del derecho a la vida... Todas las personas tienen 
derecho a la protección de la salud, así como el deber de participar activamente 
en su promoción y defensa, y el de cumplir con las medidas sanitarias y de 
saneamiento que establezca la ley, de conformidad con los tratados y convenios 
internacionales suscritos y ratificados por la República. 
 
 Artículo 87: Toda persona tiene derecho al trabajo y el deber de trabajar… 
Todo patrono o patrona garantizará a sus trabajadores y trabajadoras 
condiciones de seguridad, higiene y ambiente de trabajo adecuados. El estado 
adoptará medidas y creará instituciones que permitan el control y la promoción 
de estas condiciones. 
 
 Estos artículos consagran el derecho de toda persona a la Seguridad Social y la 
protección frente a las contingencias de riesgos laborales. Encomiendan al Estado la 
obligación de asegurar la efectividad de este derecho mediante la creación de 
instituciones y la adopción de medidas destinadas a hacer cumplir la obligación del 
patrono o empleador de garantizar a los trabajadores y trabajadoras condiciones 
óptimas de seguridad y salud en el trabajo, siendo de vital importancia, para preservar 
la salud de todos los trabajadores expuestos a riesgos propios de los procesos 
productivos. 
 
Ley orgánica de Prevención, Condiciones y Medio Ambiente de Trabajo (2005) 
 
 Artículo 1: Establecer las instituciones, normas y lineamientos de las políticas, 
y los órganos y entes que permitan garantizar a los trabajadores y trabajadoras, 
condiciones de seguridad, salud y bienestar, en un ambiente de trabajo 
adecuado …promoción del trabajo seguro y saludable, la prevención de los 
accidentes de trabajo y las enfermedades ocupacionales. 
 
 Artículo 53: Los trabajadores y las trabajadoras tendrán derecho a desarrollar 
sus labores en un ambiente de trabajo adecuado… y que garantice condiciones 
de seguridad, salud y bienestar adecuadas. En el ejercicio del mismo tendrá 
derechoa: 
 - No ser sometido a condiciones de trabajo peligrosas o insalubres que, de 
acuerdo a los avances técnicos y científicos existentes, puedan ser eliminadas o 
atenuadas con modificaciones al proceso productivo o las instalaciones o 
 
35 
puestos de trabajo o mediante protecciones colectivas. Cuando lo anterior no 
sea posible, a ser provisto de los implementos y equipos de protección personal 
adecuados a las condiciones de trabajo presentes en su puesto de trabajo… 
- Que se le realicen periódicamente exámenes de salud preventivos… 
 
 Artículo 54: Son deberes de los trabajadores y trabajadoras: 
- Usar en forma correcta y mantener en buenas condiciones los equipos de 
protección personal de acuerdo a las instrucciones recibidas dando cuenta 
inmediata al responsable de su suministro o mantenimiento, de la pérdida, 
deterioro, vencimiento, o mal funcionamiento de los mismos. 
 
 Artículo 56: Deberes de los empleadores y las empleadoras: 
- Informar por escrito a los trabajadores y trabajadoras y al Comité de 
Seguridad y Salud Laboral de las condiciones inseguras a las que están 
expuestos los primeros, por la acción de agentes físicos, químicos, biológicos, 
meteorológicos o a condiciones disergonómicas o psicosociales que puedan 
causar daño a la salud. 
 
 Artículo 68: Se entiende por Niveles Técnicos de Referencia de Exposición, 
aquellos valores de concentraciones ambientales de sustancias químicas o 
productos biológicos, o niveles de intensidad de fenómenos físicos que, 
producto del conocimiento científico internacionalmente aceptado y de la 
experiencia, permitan establecer criterios pata orientar las acciones de 
prevención y control de las enfermedades ocupacionales. 
 El empleador o empleadora deberá iniciar las acciones de control en el ambiente 
de trabajo cuando la concentración ambiental de la sustancia en cuestión o el 
nivel de intensidad del fenómeno físico sea superior al cincuenta por ciento 
(50%) del Nivel Técnico de Referencia de Exposición correspondiente. 
 
 Lo antes expuesto le garantiza al trabador el derecho a ser protegido contra 
factores presentes en el ambiente de trabajo que puedan causar daños a su salud, y a 
fomentar el autocuidado cumpliendo con sus deberes. 
 
Ley Orgánica del trabajo 
 
 Artículo 185: “El trabajo deberá prestarse en condiciones que: 
a) Presten suficiente protección a la salud y a la vida contra enfermedades y 
accidentes; y 
b) Mantengan el ambiente en condiciones satisfactorias”. 
 
 
36 
 Artículo 236: El patrono deberá tomar las medidas que fueren necesarias para 
que el servicio se preste en condiciones de higiene y seguridad que respondan a 
los requerimientos de la salud del trabajador, en un medio ambiente de trabajo 
adecuado y propio para el ejercicio de sus facultades físicas y mentales… 
 
 Artículo 237: “Ningún trabajador podrá ser expuesto a la acción de agentes físicos, 
condiciones ergonómicas, riesgos sicosociales, agentes químicos, biológicos o de 
cualquier otra índole…” 
 Esta ley le garantiza al trabajador el derecho que tiene a realizar sus labores en 
ambientes de trabajo libres de factores nocivos a su salud. 
 
Reglamento de las Condiciones de Higiene y Seguridad en el trabajo 
 
 Artículo 3: “Todo trabajador debe: a) Hacer uso adecuado de las instalaciones de 
higiene y seguridad y de los equipos personales de protección”. 
 Artículo 137: “En todo sitio de trabajo se eliminarán o limitarán los ruidos y 
vibraciones que puedan ocasionar trastornos físicos o mentales a la salud de los 
trabajadores”. 
 Artículo 138: “En los sitios o locales donde existan niveles de ruido sostenidos, de 
frecuencia superior a 500 ciclos por segundo e intensidad mayor a 85 decibeles, y sea 
imposible eliminarlos o limitarlos el patrono deberá suministrar equipo protector 
adecuado…” 
 Artículo 139: “Cuando las medidas precedentes resultaren insuficientes para 
eliminar la fatiga nerviosa u otros trastornos orgánicos de los trabajadores, se les 
concederá pausas de reposo sistemático o de rotación en sus labores, de manera de 
evitar tales trastornos” 
 Artículo 40: “En las oficinas y lugares de trabajo donde predomine la labor 
intelectual, los niveles sonoros (ruido) no podrán ser mayor de 70 decibeles 
independientemente de la frecuencia y tiempo de exposición.” 
 Artículo 494: “En los lugares de trabajo se tomarán medidas apropiadas para que: 
a) Se reduzcan hasta el mínimo posible las condiciones inseguras o peligrosas.” 
 
 
37 
 Artículo 495: El ambiente de los locales, en los cuales debido a la naturaleza 
del trabajo puedan existir concentraciones de polvo, vapores, gases o 
emanaciones desagradables, tóxicas o peligrosas, se examinará periódicamente 
a intervalos tan frecuentes como sea necesario, a fin de garantizar que tales 
concentraciones se mantengan dentro de los límites permisibles. 
 
 Artículo 793: “Es obligatorio cumplimiento el uso del equipo de protección 
personal cuando no sea posible eliminar el riesgo por otro medio…” 
 Artículo 794: “La construcción, calidad y resistencia del equipo de protección 
entregado a los trabajadores se ajustará a las normas aprobadas por la autoridad 
competente…” 
 Artículo 795: “Los artículos de protección personal deberán mantenerse en 
perfectas condiciones de uso.” 
 
Norma Venezolana Covenin N° 1565-95. Ruido ocupacional programa de 
conservación auditiva. Niveles permisibles y criterios de evaluación (3° Revisión) 
 
 Esta norma constituye un documento de gran utilidad para estandarizar la 
valoración del ruido en los lugares de trabajo y establecer medidas de vigilancia y 
control. 
 La Norma Venezolana establece: 
 (a) “Los niveles de ruido permisibles para evitar que las personas expuestas al 
ruido en sus lugares de trabajo sufran deterioro auditivo, pérdida de la concentración o 
interferencias en la comunicación oral.” (Anexo B) 
 (b) “Recomendaciones sobre niveles de ruido para locales de trabajo típicos” 
 (c) “Método para determinar la exposición y los niveles de ruido en lugares de 
trabajo” 
 (d) “Puntos mínimos de un Programa de Protección Auditiva” 
 Se aplica a la exposición del trabajador al ruido durante la jornada de trabajo. 
 
 
 
 
38 
Referencias Normativas: 
 
 (a) COVENIN 871:78 Protectores Auditivos. 
 (b) COVENIN 1432:82 Medidores de nivel de sonido. Especificaciones. 
 (c) COVENIN 187:92 Definiciones y clasificaciones de colores y señales de 
seguridad. 
 El Reglamento de las Condiciones de Higiene y Seguridad en el Trabajo y las 
Normas Covenin, establecen lineamientos de de cumplimiento obligatorio algunos, 
que responden a las necesidades de seguridad e higiene en los ambientes de trabajo. 
 
Organización Internacional del Trabajo (OIT) 
 
 Ha elaborado Convenios y recomendaciones para los países miembros en materia 
de Higiene, Seguridad Industrial, Salud en el Trabajo, los cuales han sido ratificados 
por Venezuela, entre ellos tenemos: 
 
 Convenio Nº 120 sobre la Higiene (Comercio y Oficinas), 1964 (Ratificación 
registrada el 03-06-1971; Gaceta Oficial Nº 29.475 del 30-03-1971): Los 
gobiernos se obligan a adoptar y mantener una legislación que asegure la 
aplicación de los siguientes principios generales: buen estado de conservación 
y limpieza de los locales y equipos utilizados por los trabajadores; suficiente y 
adecuada ventilación e iluminación; temperatura agradable; agua potable o 
cualquier otra bebida sana; instalaciones sanitarias; asientos adecuados y 
suficientes; protección contra las sustancias y procedimientos incómodos, 
insalubres, tóxicos o nocivos. [Recomendación N° 120 sobre la Higiene 
(Comercio y Oficinas), 1964]. 
 
 Convenio Nº 155 sobre Seguridad y Salud de los Trabajadores, 1981 
(Ratificación

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