Logo Studenta

FISIOLOGÍA HUMANA-581

¡Estudia con miles de materiales!

Vista previa del material en texto

Regulación humoral 
La regulación humoral del flujo sanguíneo se realiza
por un número importante de sustancias de diferente pro-
cedencia. Entre los agentes vasodilatadores hay que desta-
car al óxido nítrico (NO) derivado del endotelio; es el
principal factor vasodilatador del organismo (véase Capí-
tulo 38), y tiene la capacidad de equilibrar todas las accio-
nes constrictoras, tanto nerviosas como humorales.
Además de este factor vasodilatador de origen endotelial, el
llamado factor hiperpolarizante derivado del endotelio
(EDHF) parece desempeñar un papel importante en la
regulación de los flujos coronario y mesentérico. Sin
embargo, otros vasodilatadores como la prostaciclina,
diversas prostaglandinas y la histamina, parecen tener un
papel poco relevante en la regulación del flujo sanguíneo
de la mayoría de los territorios vasculares. 
Entre los agentes de acción vasoconstrictora, las cate-
colaminas adrenomedulares y la angiotensina II son los
principales factores con capacidad reguladora del tono
vasomotor y del flujo sanguíneo. El tromboxano A2 pare-
ce tener cierta importancia en la regulación del flujo coro-
nario en circunstancias determinadas, aunque su papel
regulador sistémico no está bien determinado. La endote-
lina-1 no parece tener demasiada importancia en la regula-
ción del flujo sanguíneo en condiciones normales, ya que
a pesar de ser un potente vasoconstrictor, su acción se
encuentra contrarrestada por la acción del NO. Por último,
la vasopresina parece tener una importancia reguladora
menor, siendo la regulación de la osmolaridad su principal
acción.
Integración intrínseca y extrínseca en la 
regulación del flujo sanguíneo
Cabe destacar que los tres procesos, autorregulación
del flujo sanguíneo, hiperemia activa y reactiva, se deben
fundamentalmente a mecanismos intrínsecos a los tejidos
y ocurren incluso en tejidos aislados. Sin embargo, dichos
procesos se ven afectados por los sistemas de regulación
nerviosos y humorales, ya que el tono vasomotor de un
lecho vascular precapilar depende tanto de la actividad
intrínseca como de las influencias extrínsecas. El sistema
nervioso simpático (SNS), las catecolaminas circulantes,
la angiotensina II y el óxido nítrico (NO) son los principa-
les factores extrínsecos que afectan a la regulación del flu-
jo sanguíneo local. Así, en presencia de actividad
simpática elevada o de factores vasoconstrictores como las
catecolaminas o la angiotensina II, la respuesta autorregu-
ladora se va a producir de manera paralela a la basal, pero
para un nivel más reducido de flujo sanguíneo. Lo mismo
sucede en presencia de inhibidores del NO: la autorregula-
ción no se interrumpe, sino que se produce a un nivel de
flujo sanguíneo más reducido. Al revés, en presencia de
inhibidores del sistema nervioso simpático o de factores
vasodilatadores se producirá la autorregulación a un nivel
superior de flujo sanguíneo. Igualmente, cuando se produ-
ce la hiperemia reactiva en situaciones de deficiencia de
NO (como la disfunción endotelial asociada a hiperten-
sión, diabetes, hipercolesterolemia y otros factores de ries-
go cardiovascular) o en presencia de activación simpática
o de agentes vasoconstrictores, el aumento de flujo san-
guíneo, después de desbloquear la interrupción de éste, es
menor que en condiciones normales de producción de NO
y en ausencia de actividad vasoconstrictora. Asimismo,
cuando se produce un fenómeno de hiperemia activa, el
aumento de flujo sanguíneo compensador es menor o más
dificultado si existe una activación local del SNS, mayor
presencia de catecolaminas o angiotensina II, o una menor
producción de NO que en situación normal. Por lo tanto,
aunque los procesos de regulación del flujo sanguíneo
tisular dependen de factores y mecanismos intrínsecos al
tejido, los sistemas de regulación extrínsecos, tanto sisté-
micos (SNS) como locales (NO), tienen capacidad de
afectar la respuesta de los primeros.
REGULACIÓN DEL FLUJO SANGUÍNEO
A LARGO PLAZO
Los mecanismos locales de regulación del flujo san-
guíneo actúan en segundos o pocos minutos. Sin embargo,
existe una regulación a largo plazo más completa que la
que tiene lugar de manera aguda. Si se produce una situa-
ción de hipertensión mantenida, los tejidos se perfunden a
un flujo mayor, y en un período de días o pocas semanas el
flujo se habrá normalizado mediante un proceso de auto-
rregulación a largo plazo que, como indica la Figura 41.3
es más eficaz que los mecanismos de autorregulación a cor-
to plazo, cuya capacidad es más limitada y no son capaces
de normalizar el flujo. Por el contrario, si un tejido o un
órgano recibe menos sangre de la necesaria de manera per-
manente como consecuencia de la obstrucción de una arte-
ria, aumentará la circulación colateral con objeto de
abastecer las necesidades de oxígeno y nutrientes. Cuando
un órgano o tejido mantiene de manera crónica una activi-
dad metabólica elevada, requiere un elevado aporte mante-
nido de oxígeno y nutrientes, por lo que necesita que
aumente el flujo sanguíneo de manera permanente.
El principal mecanismo de regulación del flujo san-
guíneo a largo plazo consiste en variar el grado de vascu-
larización de los tejidos. Este mecanismo es aplicable
tanto al aumento de las necesidades de nutrientes por
aumento de la actividad metabólica o de disminución de
flujo por una obstrucción arterial. El proceso de vasculari-
zación es especialmente evidente en tejidos de crecimien-
to rápido, como el caso de tejidos jóvenes en el desarrollo
(recién nacidos), tejido cicatricial o tejido tumoral, donde
se observa un rápido desarrollo de la vascularización. El
oxígeno parece ser el factor mediador de la variación de la
vascularización tisular, ya que la hipoxia produce un
aumento de ésta y la hiperoxia la disminuye, según se ha
demostrado en el desarrollo de vasos en situaciones de cre-
cimiento en ambientes ricos o pobres en oxígeno. En los
últimos años se han descrito diversos factores de creci-
552 F I S I O L O G Í A D E L S I S T E M A C A R D I O VA S C U L A R

Continuar navegando