Descarga la aplicación para disfrutar aún más
Vista previa del material en texto
arteriovenosa de contenido de O2 y el contenido arterial de O2 (ER, %): ER = 100 � ([CaCO2 – Cv –O2]/CaO2) = = 100 � (V · O2/Q · O2) es un buen índice, si se interpreta de forma adecuada, para valorar la eficacia del intercambio periférico de O2 en sujetos sanos y en enfermos. Para una misma pendiente de disociación de la curva de oxihemoglobina, el %ER se incrementará al aumentar la capacidad de difusión tisular del O2 y será menor si disminuye el tiempo de tránsito del hematíe por el capilar tisular. El acortamiento de este últi- mo representa una disminución del tiempo de contacto del hematíe con el área afectiva de transferencia de O2. El tiempo de tránsito del hematíe en el capilar tisular es el cociente entre el volumen del capilar y el flujo sanguíneo. En los últimos años, paralelamente a la mejor com- prensión de los factores que intervienen en la transferencia de O2 en el capilar tisular ha tomado cuerpo el concepto de que la capacidad de difusión de O2 y CO2 a través de las membranas biológicas debe considerarse como un factor potencialmente limitante de la transferencia de estos gases. Actualmente se acepta que en determinadas situa- ciones fisiológicas, como el ejercicio extremo o la activi- dad física en condiciones de hipoxia (grandes alturas), la producción de energía (V · O2máx) puede estar limitada por la capacidad de difusión tisular del O2. El interés por el estudio del intercambio periférico del O2 ha llevado a replantear el modelo clásico propuesto por August Krogh a principios de siglo. Según este autor, la resistencia a la difusión del O2 dependería básicamente de la distancia entre el capilar y la mitocondria, siendo prácticamente despreciables las resistencias a la difusión del O2 en el interior del capilar tisular. Sin embargo, estudios recientes efectuados por Honig y colaboradores, del grupo de Rochester (E. U.), demuestran una gran homogeneidad en los valores de PO2 dentro del miocito cuando se efectúa un ejercicio máximo. Los bajos gradientes de PO2 tisular des- critos por estos autores, entre 1 y 5 mm Hg, contrastan con gradientes transcapilares de hasta 20 mm Hg. Estos datos sugieren que la resistencia a la difusión de O2 se localiza- ría principalmente en el trayecto desde el hematíe hasta el exterior de la pared capilar. La distancia desde la pared exterior del capilar a la mitocondria, al menos en el tejido muscular, no constituiría un factor limitante de la transfe- rencia de O2. A su vez, el nuevo modelo de intercambio periférico de O2 propuesto por el grupo de Rochester es consistente con diferentes estudios que aportan pruebas sobre el papel de la capacidad de difusión de O2 como fac- tor limitante del consumo máxirno de O2. En la Tabla 50.2 se indican otros factores que deben considerarse a nivel conceptual en el intercambio periféri- co de O2 aunque su relevancia en el individuo sano no está aún demostrada. Entendemos por shunt anatómico la pre- sencia de sangre desde la arteriola a la vénula sin circular por la zona de intercambio de gases en el capilar tisular. El shunt por difusión consiste en el intecambio de gases por difusión pasiva a lo largo del trayecto de dos vasos (arteriola y vénula) dispuestos de forma paralela, sin que exista comunicación anatómica entre ambos. Este mecanismo implica una desoxigenación de la sangre arte- rial antes de llegar al capilar tisular y un incremento de la oxigenación de la sangre venosa efluente. En dichas con- diciones, la sangre venosa efluente no refleja la PO2 media del capilar tisular. La importancia de ambos tipos de shunt en el intercambio periférico de gases no ha podido esta- blecerse de forma fehaciente, pero existe la convicción de que no tienen un papel relevante en la limitación del con- sumo de O2. Un tercer factor de mayor interés, no exclusivamente conceptual, lo constituye la heterogeneidad regional de las relaciones flujo sanguíneo-consumo de O2 (cocientes Q · /V · O2). Parece ser.que la existencia de desigualdades de los cocientes Q · /V · O2 podría constituir un factor fisiopato- lógico de importancia en la disminución de la eficacia del intercambio periférico de O2 en la enfermedad, por ejem- plo, en las alteraciones de la microcirculación presentes en el síndrome de fracaso multiorgártico. De hecho, altera- ciones de la capacidad de difusión (DO2) y la presencia de desigualdades Q · /V · O2 constituyen mecanismos razonables para explicar la dependencia patológica entre flujo sisté- mico de O2 (Q · V · 2) y consumo de O2 (V · O2), así como las anomalías en la extracción tisular de O2 de los pacientes con fracaso multiorgánico descritas en la Figura 50.5. En dicha Figura 50.5, puede observarse que para valo- res altos de Q · O2, ambas variables (Q · O2 y V · O2) son inde- pendientes (zona plana de la gráfica). Sin embargo, a partir de un cierto valor de Q · O2 (punto crítico del flujo sistémi- co de O2, aproximadamente 8 mLO2 · 100 mLkg -1, min-1 en el individuo sano), si el Q · O2 disminuye se observa una fuerte relación lineal entre consumo de O2 (ordenada) y flujo sistémico de O2 (abscisa). En la parte inferior de la misma Figura 50.5, el ER representa el porcentaje de O2 utilizado por los tejidos en relación al flujo arterial de O2 o aporte de O2. El incremento de la fracción de extracción de O2 observado en la gráfica se produce con el objetivo de mantener valores de VO2 estables y adecuados a las nece- sidades metabólicas del organismo. A partir de la cifra de Q · O2 crítico, si el Q · O2 sigue disminuyendo el incremento de la fracción de extracción de O2 resultará insuficiente para preservar el valor de V · O2. Dicho fenómeno corres- ponde a la zona donde existe una relación lineal entre V · O2 y Q · O2. La línea punteada representa el hipotético incre- mento de fracción de extracción de O2 necesario para que el VO2 no sea dependiente del flujo sistémico de O2. Las diversas técnicas de estudio disponibles en estos momentos para investigar la microcirculación sólo han permitido analizar las heterogeneidades de la perfusión desde una perspectiva anatómica, es decir, los desequili- brios de los cocientes Q · O2/masa de tejido. Desigualdades en dichos cocientes se describen tanto en sujetos sanos como en situaciones patológicas. Sin embargo, hasta el momento presente no existe método alguno que permita la medición de las alteraciones funcionales derivadas de las 640 F I S I O L O G Í A D E L S I S T E M A R E S P I R AT O R I O
Compartir