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• SISTEMA DIGESTIVO Y METABOLISMO x 200 a 0:35 con 1:40. Los entrenadores, según el obje- tivo perseguido (cualidad física que se desea desarrollar, período de la temporada, nivel del atleta, etc.), «juegan>> con cada una de las características del denominado entre- namiento interválico, y las posibilidades de combinación son muy considerables. Combustibles empleados y reposición de los sustratos metabólicos Naturalmente, el combustible empleado depende de las características del esfuerzo intermitente. En el ejemplo cita- do antes (200 m) , el combustible empleado será el corres- pondiente a un esfuerzo de intensidad supramáxima y de duración breve. Ahora bien, este mismo esfuerzo intermi- tente puede cambiar de forma absoluta si se acorta el tiempo de descanso, lo que indefectiblemente tiene que ir ligado a una menor intensidad. La restitución de los depósitos de fosfágeno se relaciona con el tiempo de descanso. Aproxima- damente a los 30 segundos se restituye el 70% del fosfágeno; a los 2 minutos, el 84%, y a los 5-8 minutos de recupera- ción, prácticamente la totalidad. El análisis de la figura 15-7 indica que, para estar segu- ros de la completa regeneración del fosfágeno, se necesita- rán por lo menos 8 minutos. Si éste es el objetivo, los des- cansos tendrán más o menos esta duración. No obstante, al mismo tiempo, los valores no deben tomarse de forma rígida. Aun fijando el mismo intervalo de descanso, por ejemplo, 30 segundos, cuando el esfuerzo se repite varias veces, la reposición del fosfágeno nunca puede ser la mis- ma. Supóngase que el atleta repite 200 m 6 veces cada 2 minutos, como en el ejemplo citado antes. En el primer descanso, en efecto, puede recuperar el 84%, pero en los sucesivos descansos, obviamente partiendo de un valor más bajo de fosfocreatina, no recuperará el mismo porcentaje. Así pues, cuando un entrenador pretenda agotar las reser- vas de fosfágeno, lo que tendrá que hacer es impedir que se recupere el fosfágeno. Para ello, y según el objetivo perse- Figura 15! 7. Concentración de fosfágeno en músculo tras un ejercido hasta el agotamiento y durante la recuperación. guido, los entrenadores manejan la relación entre el tr"Mi• y el descanso (113, 1/2, etc.). ¿Qué procesos intervienen en la recuperación del fágeno? Se ha demostrado la necesidad de la vía oxJ.da:~ va para la recuperación. Dado que el oxígeno en utilizado durante la recuperación sigue dos fases -•du , ..... y lenta-, se ha empleado este parámetro para estimar restitución de los depósitos de fosfágeno; aunque la ción entre el V02 durante la recuperación y el.v'""i"-'-'-- resintetizado no se conoce, algunos autores han ~e~l.duluc"W do la hipótesis de que es lineal: a mayor V02, mayor la resíntesis. Otro aspecto fundamental de los esfuerzos ·ntF•rrr.- tentes de breve duración es la restitución del depósito mioglobina. La mioglobina es una proteína esencial, al el nexo de unión que permite la utilización de la vía bia aun en las peores condiciones anaerobias. Se -.vu~ ....... ..,. que, en esfuerzos de 15 segundos con intervalos de canso de la misma duración y realizados durante 1 hora, contribución de la mioglobina puede alcanzar la cifra 20%. Dadas las características de la curva de d~''"'"'-'">.0• disociación de la mioglobina, durante el descanso se duce un incremento de la Pp02, debido a la ci,~..u""~-""'"W aumentada. A medida que aumenta la distancia, mayor es la cipación de la glucogenólisis y, por consiguiente, más vada será la concentración de ácido láctico en sangre. ruralmente, mayor será el descenso de la concentración glucógeno. La restituciÓn de este depósito depende de características de los esfuerzos y de la dieta. Como es comprender, la restitución del glucógeno, a diferencia de del fosfágeno, no se puede realizar de forma inmediata; requiere por lo menos 1 hora (Fig. 15-8) . El descenso de concentración de glucógeno se puede conseguir ""-u"ULU• las dos características que definen el esfuerzo intermitente: intensidad y el descanso. La única forma de recuperar el cógeno gastado es la dieta. Ahora bien, ¿la recuperación qué glucógeno: hepático o muscular? Lógicamente, la · repondrá los depósitos hepáticos o musculares en función la naturaleza de los esfuerzos y su duración; si han ae!><:eillil Figura 15-8. Relación entr~ la concentración de ácido láctico en músculo y en sangre durante la recuperación. Puede llevar mucho tiempo restablecer la cóncentración de este metabolito hasta alcanzar los valores de reposo.
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