Descarga la aplicación para disfrutar aún más
Vista previa del material en texto
BIOLOGÍA CELULAR128 síntesis proteica difieren a lo largo del desarrollo y, por tanto, también son diferentes los genes que deben trans- cribir. El estudio de estas variaciones permite conocer la expresión de los distintos genes a lo largo del cromoso- ma. En algunos cromosomas politénicos, como los de Chironomus, se observan hinchazones de un tamaño ex- traordinario, que son los denominados anillos de Balbia- ni. Son puffs gigantes en número escaso. Se supone que cada banda es un dominio de DNA (lo que hemos denominado microcónvula en el cromo- soma y bucle en la interfase), cuya longitud varía entre 3000 y 300 000 pares de bases por cromátida, con una media de 20 000 pares de bases. En los puff, toda la banda (dominio) se ha soltado para transcribir total- mente o en parte. El número de bandas en los cromo- somas politénicos de Drosophila coincide con el de ge- nes (unos 5000), por lo que se pensó que cada gen formaría una banda. Estudios posteriores demostraron que una banda puede transcribir varios genes y que puede haber también transcripción en algunas inter- bandas, por lo que esta asociación gen-banda es du- dosa. Las bandas e interbandas intercalares de los cromo- somas normales observadas con las técnicas de bandeo no se corresponden con las bandas e interbandas de los cromosomas politénicos. El equivalente a una banda in- tercalar de un cromosoma normal origina varias bandas e interbandas en el politénico. Este hecho permite con- cluir que las bandas intercalares de los cromosomas nor- males no son heterocromatina constitutiva, puesto que transcriben en los cromosomas politénicos. El objetivo principal de la organización del DNA de los cromosomas politénicos en bandas e interbandas es man- En Drosophila, cada núcleo con cromosomas polité- nicos tiene unos 75 µm de diámetro, lo que supone un volumen unas 1000 veces mayor que el de las células normales. La longitud del conjunto de cromosomas po- liténicos es de unos 2000 µm, mientras que en las otras células el conjunto cromosómico mide unos 7.5 µm. Ca- da cromosoma gigante equivale a uno normal. La dife- rencia estriba en que los politénicos son mucho más anchos y más largos que los normales. En Drosophila melanogaster hay cinco brazos largos y uno corto, que se unen en una región central heterocromática denomi- nada cromómero o cromocentro. Los cinco brazos lar- gos corresponden al cromosoma X y a ambos brazos de los cromosomas metacéntricos II y III. El brazo corto corresponde al cromosoma IV. El cromocentro com- prende la región heterocromática de los autosomas, del cromosoma X y, en los machos, todo el cromosoma Y, que aparece completamente heterocromático. El cro- mocentro de Drosophila se considera cromatina consti- tutiva y contiene, además, un organizador nucleolar del cromosoma X y otro del Y (Fig. 3.53). Cada par de cro- mosomas homólogos representa un número muy ele- vado de cromátidas (1024 cromátidas contando ambos homólogos) estrechamente asociadas. Esto obedece a que cada cromosoma normal ha sufrido 10 endorredu- plicaciones, sin que se hayan separado las cromátidas, lo que explica su considerable grosor. Su enorme longi- tud se debe a que la cromatina está mucho menos con- densada que en los cromosomas normales. Al dispo- nerse 1000 cromátidas asociadas se comprende que éstas no puedan permanecer condensadas si se tienen que mantener adosadas entre sí. Cada cromosoma politénico presenta bandas Feul- gen-positivas de diferente grosor, separadas por inter- bandas, que son Feulgen-negativas. En Drosophila hay unas 5000 bandas en el conjunto de sus cuatro cromo- somas. Estas bandas son constantes en cada cromoso- ma, pues se aprecian las mismas bandas en los diferen- tes tipos celulares de la misma especie que tienen cromosomas politénicos. Esta constancia fue utilizada para el trazado de los mapas genéticos (localización de los genes en cromosomas), ya que son cromosomas tan normales como los del resto del organismo, pero muy aumentados. Las bandas corresponden a zonas del DNA donde se da una cierta espiralización, la sufi- ciente para que sean Feulgen-positivas, y en ellas se lo- caliza el 85% del DNA. Las interbandas tienen una cro- matina tan laxa que no fija el Feulgen en la suficiente cantidad como para que se visualice. En algunas bandas se observan unas hinchazones de- nominadas puffs. Cada puff contiene DNA y RNA, como se ha podido demostrar con tratamientos con DNAasa y RNAasa, tinción con verde metilo-pironina o incorpora- ción de uridina tritiada. Los puffs corresponden a bandas que se desespiralizan para empezar a transcribir, de mo- do parecido a como lo hacen los cromosomas plumosos (Fig. 3.54). Estos puffs son constantes para cada cromo- soma en todas las células de un tejido y en un determina- do momento de su desarrollo. Sin embargo, si se obser- van en otro tejido, o en el mismo pero en otro momento del desarrollo, se puede apreciar que han cambiado de localización. Esto se explica porque las necesidades de III IV III II II X Cromocentro Banda Interbanda Figura 3.53. Conjunto completo de cromosomas polité- nicos de Drosophila melanogaster. 03 PANIAGUA BIOLOGIA 3 03 29/11/06 12:54 Página 128
Compartir