Descarga la aplicación para disfrutar aún más
Vista previa del material en texto
CAPÍTULO 6: CITOESQUELETO 287 de la dirección del batido depende del potencial de mem- brana: la despolarización de la membrana invierte la di- rección, mientras que la hiperpolarización refuerza el im- pulso. Parece ser que ni la coordinación ni la inversión dependen de los sistemas fibrilares de las raíces de los cilios. Es posible que la rica inervación de los epitelios ci- liados de los metazoos desempeñe algún papel. La comprensión del mecanismo del movimiento ciliar se facilitó por el hecho de que el microtúbulo B es más corto que el A. Cuando se observa un cilio erguido, si el corte es transversal y en la punta, no se aprecian dobletes sino sólo nueve microtúbulos A. Si el corte es un poco por debajo de la punta, ya aparecen los dobletes. Cuando se realiza un corte transversal efectuado un poco por de- bajo de la punta de un cilio flexionado tras el golpe de ba- rrido, se aprecian dobletes sólo en los pares 3-4-5-6, mientras que en lo que debían ser los pares 7-8-9-1 y 2 sólo aparece el microtúbulo A (Fig. 6.44). Esto implica que hay un deslizamiento de unos dobletes respecto a otros. El plano en el que se flexiona el cilio es perpendicular a aquel en el que se encuentran los microtúbulos centrales. El doblete 4 (o quizá el 5) es el que posiblemente ini- cia la flexión y el que quedaría más próximo a la super- ficie sobre la que se realiza el movimiento. Sobre este doblete se irían deslizando los adyacentes (el 3 sobre el 4 y el 6 sobre el 5), y sobre éstos los que siguen a continuación, hasta llegar al doblete 9, que sería el que mayor deslizamiento ha sufrido. No hay deslizamiento de un microtúbulo respecto al otro de su mismo par, si- no de cada doblete sobre el adyacente. Si se siguieran efectuando cortes del cilio cercanos a la punta durante el movimiento de recuperación, se ob- servaría que los dobletes «desaparecidos» reaparecen progresivamente. El orden de aparición no se conoce bien, pero no es el mismo que el de desaparición en la flexión del cilio debido a que el movimiento de recupe- ración sigue una trayectoria diferente. El deslizamiento de los dobletes en la flexión y en la recuperación del cilio se produce gracias a los brazos de dineína, que se disponen periódicamente (cada 24 nm) a lo largo del microtúbulo A de cada doblete. El desliza- miento se produciría por sucesivas conexiones y desco- nexiones de los brazos del microtúbulo A de un doblete Secciones transversales a un micrómetro de la punta del cilio en las tres posiciones Golpe de recuperación Golpe eficaz de barrido Cilio erguido 1 2 3 4 56 7 9 8 18 9 2 3 45 6 7 1 2 3 4567 9 8 3 1 2 4 5 7 8 9 6 1 2 3 4 56 7 9 8 1 2 3 4 56 7 9 8 Figura 6.44. Movimiento ciliar. Debido a la menor longi- tud de los microtúbulos B de cada doblete, se demuestra que hay un deslizamiento de unos dobletes sobre otros en el movimiento ciliar. En el golpe eficaz de barrido, sólo en los dobletes 3-4-5-6 quedan ambos microtúbulos por enci- ma del plano de corte efectuado a 1 mm de la punta. En el golpe de recuperación los dobletes que muestran ambos microtúbulos son los numerados 9-1-2-3. Microtúbulo A CILIO ERGUIDO CILIO INCLINADO Brazos de dineína Microtúbulo B Figura 6.45. El deslizamiento de un doblete sobre el ad- yacente se realiza mediante los brazos de dineína del mi- crotúbulo A de un doblete, que trepan sobre el microtúbulo B del doblete adyacente. 06 PANIAGUA BIOLOGIA 3 06 29/11/06 13:37 Página 287
Compartir