Anatomía humana (740)

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RO M BEN CEFA LO 257
lamo óptico y de la región subtalám iea. P a rte de las fib ras eferentes de la oliva descienden 
por el cordón lateral de la m édula, donde form an el fascículo olivoespinal, que va a te r­
minar al cuerno an te rio r de la misma.
Las paraolivas o núcleos accesorios de la o liva son dos, una externa en form a de lá ­
mina, situada en tre la oliva y el núcleo ambiguo, y o tra in te rn a form ada por dos lám i­
nas en escuadra, colocadas entre la oliva y la pirám ide an terio r; ambas lám inas, más 
anchas abajo y separadas en tre sí, se unen por su extrem os superiores.
La oliva externa recibe fib ras del globo pálido y del núcleo ro jo a través del haz 
pálido rubroo livar y a su vez em ite fibras que la conectan eon el cerebelo. Si se tienen 
en cuenta las conexiones de la corteza cerebral con el globo pálido y el núcleo rojo, es 
fácil com prender que a través de la oliva externa se establece la relación en tre la cor­
teza cerebral y el cerebelo y que por tan to ese núcleo in terviene de m anera im portante 
en la regulación del tono m uscular du ran te los movimientos.
Además de las formaciones grises propias del bulbo, se encuentran fibras constitu­
tivas de la substancia blanca de este órgano que nacen y term inan en él. Son éstas las 
fibras arciform es, p arte de las cuales, las in te rn a s o p ro fu n d a s , em anan de las astas an te­
riores y posteriores y se cruzan en la línea m edia con las del lado opuesto p a ra llegar a los 
cuerpos olivares y yuxtaolivares; las otras, llam adas fib ra s a rc ifo rm es ex tern a s o su ­
perficiales, se dividen en posterio res y an terio res. Las prim eras abordan la superficie pos­
terior del bulbo contorneando el cordón posterior, pen etran al piso del cuarto ventrículo 
hasta el cálamo y se p ierden en los núcleos de Goll y de B urdach. Las segundas nacen 
en el cuerpo restiform e que está situado en la p arte posteroexterna de la m itad superior 
del bulbo, por detrás de la raíz descendente del trigém ino, y se halla cubierto por las es­
trías acústicas; corren por dentro de las fib ras radiculares del glosofaríngeo, del neumo­
gástrico y del espinal y rodean el cordón la tera l y la pirám ide an te rio r por debajo de la 
oliva; llegan finalm ente al surco medio an te rio r y, al p en e tra r en él, se entrecruzan con 
las del lado opuesto p a ra fo rm ar el rafe medio. T erm ina en los músculos de Goll y de 
Burdach.
V ASOS D E L BULBO
Arterías. De la irrigación del bulbo se encargan ram as de las a rte rias vertebrales 
y del tronco basilar. E stas ram as se dividen en param edias, circunferenciales cortas y c ir­
cunferenciales largas. Las param edias alcanzan al encéfalo po r fuera de la línea media 
y forman las m edianas. Las circunferenciales cortas nacen lateralm ente del tronco basilar 
o de las vertebrales. Las circunferenciales largas son ram as de las cerebelosas inferiores, 
medias y superiores. (F ig . 189.)
Las arterias param edias form an dos grupos, uno superior y o+ro in ferio r. E l grupo 
superior está constituido por tres o m ás ram as nacidas del tronco basilar o de la parte 
terminal de las vertebrales; penetran en el bulbo llegando hasta el suelo del cuarto ven 
trículo.
E l grupo an terio r está form ado por ram as que vienen de las espinales anteriores y se 
distribuyen por la p a rte in ferio r del bulbo.
Las arterias circunferenciales largas corren en la superficie del bulbo de abajo a r r i ­
ba y de adelante a trás, antes de p en e tra r en la substancia nerviosa.
Venas. L as venas form an una red que rodea a l bulbo y se continúa con las venas de 
la médula por abajo, y por a rrib a con las cerebelosas. E stas venas son el origen p rin c i­
palmente de las m edianas anteriores y posteriores, así como de las radiculares.
E l bulbo raquídeo, como el eje cerebrospinal, carece de linfáticos, pero la función de 
éstos la realiza el líquido cefalorraquídeo, que conserva siem pre una presión y cantidad 
iguales m ediante los plexos coroideos, que son cordones celulovasculares, dependientes 
de la piam adre, y donde se form a este líquido cefalorraquídeo.
A natom ía H u m an a , I I 1 1 .