Reporte de lectura Mexico en las exposiciones universales

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Universidad del Claustro de Sor Juana
Estudios e Historia del Arte
Taller de Curaduría I
Por: Rodrigo Orozco Zarzosa
Quinto reporte de lectura:
· De hecho, la participación de México en las ferias mundiales correspondía al proceso de consolidación política y económica de la élite porfiriana. (Tenorio. 66).
· […]consideraban que participar en las exposiciones mundiales era una de las mejores maneras de cambiar la difundida impresión de México. (Tenorio. 66).
· […]Exposición de Nueva Orleans era un escaparate para las aspiraciones imperialistas de los Estados Unidos, y México, por supuesto, estaba incluido en esas ambiciones. (Tenorio. 69).
· La participación de México en las exposiciones europeas empezó en los años cincuenta del siglo XIX, pero su presencia cobró importancia sólo a partir de las Exposición de París de 1889. (Tenorio. 72).
· Creían que una exposición universal ayudaría a cambiar los hábitos de consumo en el país. (Tenorio. 75).
· Durante los primeros años del porfiriato, las exposiciones universales solían demostrar la estabilidad y progreso de las naciones, cualidades indispensables para obtener el reconocimiento internacional. (Tenorio. 76).
· Es posible que el grupo quisiera usar la exposición como una oportunidad para urbanizar rápidamente el área de Anzures de la ciudad de México para obtener un beneficio con la venta de bienes raíces. (Tenorio. 77).
· Este proceso diplomático puede ser considerado una expresión de la voluntad de ambas partes de poner fin a los largos años de tensión que habían caracterizado a las relaciones franco-mexicanas tras la Intervención francesa. (Tenorio. 78).
· La labor de los magos del progreso consistía […] promover la participación privada en los lugares más remotos de México, levantar datos estadísticos y reunir imágenes de gente y lugares para la construcción gráfica de un pasado nacional aceptable. (Tenorio. 80).
· En México se organizó una intrincada red de localización y recolección de productos e información y se pidió a todos los estados y distritos que estimularan la participación local. Hubo exposiciones locales en los estados de Jalisco, Morelos y Nuevo León, para seleccionar con anticipación los productos que se enviarían a París. (Tenorio. 85).
· La orientación y tono de la exposición mexicana, sin embargo, tenía ser proporcionada necesariamente por las diferentes agencias del gobierno mexicano. Por ello, traslapando y saliéndose de las clasificaciones definidas por los franceses, y rebasando los fines prácticos de las muestras privadas de compañías de ferrocarriles, empresarios agrícolas, compañías tabacaleras e industria textil, el gobierno mexicano se concentraba en los aspectos de la nación que debían ser destacados. (Tenorio. 87).
· Los magos del prograsom, aunque formaban un equipo bien articulado y organizado, estaban divididos por conflictos internos. La mayor parte de los miembros tenían directamente razones personales para mantener su participación en la exposición universal. (Tenorio. 98).
· Hacia 1889, el equipo mexicano de exposiciones estaba más o menos consolidado. Los magos del progreso constituñian un grupo que con el tiempo llegó a reunir buena parte de la élite. (Tenorio. 102).
Bibliografía:
Mauricio Tenorio Trillo, Artilugio de la nación moderna. México en las exposiciones universales, 1880-1930, Fondo de Cultura Económica, México, pp. 66-102.