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Seleccionar y definir resultador Cap9

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9 Seleccionar y definir los resultados deseados 
Durante unos minutos t6mese una pausa para responder a las siguientes pre-
guntas: 
I. i, Que aspecto de si mismo Ie gustaria cambiar? 
2. Suponga que consigue este cambio. i,De que modo cambiarian las cos as para usted? 
3. i,Este resultado implica un cambio en ustcd mismo 0 para alguna otra persona? 
4. i,Es factible este cambio? 
5. i,Que riesgos implica este cambio, para usted 0 para los otros? 
6. i,Que ventajas obtendria como consecuencia de este cambio? 
7. i,Que haria, pensaria 0 sentiria a consecuencia de este cambio que Ie gustaria hacer? 
8. i,En que situacion desea ser capaz de hacer esto? 
9. i,Cuantas veces 0 con que frecuencia Ie gustaria ser capaz de hacer esto? 
10. i,Hay pasos intermedios desde el punto en el que se halla ahora hasta donde Ie gustaria 
lIegar? Ordenelos en una lista desde el mas facil de lograr hasta el mas complejo de lIevar 
a cabo. 
11. Identifique cualquicr obstaculo (personas, sentimientos, ideas, situaciones) que pueden 
interferir en la consecucion de su deseo. 
12. Identifique cualquier recurso (destrezas, habilidades, personas, conocimiento) que nece-
sitar:! cmplear 0 adquirir para conseguir esa meta. 
13. i,C6mo podria observar y revisar los progresos que hace en esa direcci6n? 
Estos pasos reflejan el proceso de selecci6n y definici6n de las metas terapeu-
ticas. Las metas representan los resultados u objetivos deseados y funcionan como 
etapas Ifmites del progreso del cliente. En este capitulo describimos e ilustramos 
algunos consejos concretos que usted puede emplear para ayudar a los cIientes a 
seleccionar y definir los objetivos terapeuticos que esperan. 
OBJETIVOS 
I. Identificar una situacion propia que usted dcsearia modificar. Seleccionar y definir un re-
sultado deseado para este aspecto utilizando para ello la Hoja para el Establecimiento de 
Metas que se adjunta en la postevaluacion. 
282 SELECCIONAR Y DEFINIR LOS RESULTADOS DESEADOS 
2. Dada una lista de los diez resultados hipoteticos de un cliente, discriminar de esas mani-
festaciones de cambio que pertenecen al cliente, aquellas que se basan en ideas realistas y 
estan definidas en terminos operativos de las que no 10 estan, con una proporcion del 80% 
de exactitud . 
3. Dada la descripcion escrita del caso de un cliente, describa los pasos que usted emplearia 
con el cliente para examinar, seleccionar y definir las metas deseadas por este, con un 
minimo de I I de las 15 categorias de seleccion y definicion de met as que estan representadas 
en su descripcion . 
PROPOSITOS DE LAS METAS 
Las metas cumplen seis propositos en la terapia. En primer lugar, proporcionan 
cierta direccion a esta. Las metas definidas con claridad reflejan las areas de interes 
para el cliente que requieren mayor atencion inmediata (Hill , 1975). Establecer las 
metas puede clarificar tambien las expectativas iniciales que tiene el cliente sobre 
la terapia (Smith, 1976). Las metas sirven al terapeuta y al cliente para anticipar 
con mayor precision 10 que puede y no puede lograrse a traves de la terapia 
(Krumboltz, 1966). 
Aunque cada orientacion teorica tiene su propia direccion terapeutica (Fey & 
Raming, 1979), especificar individualmente las metas de cada cliente garantiza 
que la terapia se estructura con el unico propos ito de cubrir las necesidades de ese 
cliente. 
Los clientes tienden a dedi carse y esforzarse mucho mas cuando ellos han 
seleccionado los cambios que cuando estos han sido impuestos. Sin metas, la terapia 
puede carecer de direccion 0 puede basarse mas en los sesgos 0 preferencias 
personales del terapeuta (Bandura, 1969, p. 70). Algunos clientes pueden asistir 
a las terapias sin percatarse de que las sesiones estan des pro vistas de direccion 0 
son mas consistentes con las preferencias del terapeuta que con las necesidades y 
propositos del cliente. En otros aspectos de nuestras vidas la mayoria de nosotros 
serfamos conscientes de nuestros propositos y necesidades. Si embarcamos en un 
avion con un destino que nosotros escogemos y el avion empieza a girar en cfrculos 
o los pilotos anuncian un cambio de destino sin nuestro consentimiento, proba-
blemente nos enojariamos bastante. 
En segundo lugar, las metas permiten a los terapeutas determinar si disponen 
de las destrezas, competencias e interes suficientes para trabajar con un cliente 
particular y obtener un resultado determinado 0 si carecen de el. Dependiendo de 
las metas que escoja el cliente y de los val ores y grado de experiencia del terapeuta, 
este decide trabajar con el cliente 0 derivarlo a otro terapeuta que pueda encontrarse 
en una posicion mejor para ofrecer estos servicios. 
Otro de los propositos de las metas, a menudo pasado por alto, es su rol en la 
cognicion humana y en la resolucion de problemas. Taussing (1987) encontro que 
los chicanos y los anglo-americanos responden de forma similar y positiva a la 
definicion de metas incluso cuando deben discutirse los problemas y la definicion 
de las metas se debe realizar al principio del proceso terapeutico. Las metas facilitan 
la ejecucion y la resolucion satisfactoria de los problemas porque estas ensayanel 
ESTRATEGIAS DE ENTREVISTAS PAR A TERAPEUTAS 283 
trabajo en nuestra mente y porque dirigen nuestra atencion hacia los recursos y 
componentes de nuestro entomo que mas facilitan la solucion de un problema 
(Dixon & Glover, 1984, pp . 128-129). Este proposito de las metas es evidente en 
la ejecucion de los atletas quienes se marcan unas metas para ellos mismos y las 
utilizan para motivarse y tambien como estandar para comparar su ejecucion una 
y otra vez, muchas veces con el pensamiento y la imaginacion. 
Un cuarto proposito que cumplen las metas es homogeneizar las bases al se-
leccionar Y aplicar ciertas estrategias 0 intervenciones terapeuticas. Los cambios 
que de sea el cliente determinanin , en cierto grado, los tipos de planes de accion 
y estrategias de tratamiento que pueden introducirse con bastante probabilidad de 
exito. Sin una identificacion explicita de 10 que el c1iente desea conseguir en la 
terapia , es casi imposible explicar y defender por que se ha escogido una direccion 
o una estrategia. Sin metas, el terapeuta puede emplear un enfoque particular sin 
ninguna «base racional» (Bandura, 1969, p. 70) . Y si este enfoque sera 0 no util, 
es algo que determinara el azar. . 
EI quinto propos ito de las metas, y el mas importante , es el rol que desempenan 
en la evaluacion de los resultados terapeuticos. Las metas pueden indicar la di-
ferencia entre que y cuanto desea el c1iente en este momento y que y cuanto desea 
en el futuro. Teniendo en mente la meta definida, el terapeuta y el c1iente pueden 
observar el progreso que se produce en direccion a la meta y comparar el progreso 
antes y despues de una intervencion terapeutica. Estos datos proporcionan un 
feedback continuo para el terapeuta y para el c1iente (Smith, 1976). EI feedback 
puede usarse para evaluar la posibilidad de lograr una meta y la efectividad de una 
intervencion . Bandura (1969, p. 74) ha sintetizado adecuadamente el rol de los 
resultados bien definidos en la evaluacion de la terapia: 
Cuando los resultados deseados se definen en terminos observables y operativos, inmediatamente 
se observa si los metodos han tenido exito, si no sc han logrado 0 si se requiere un desarrollo 
posterior para au men tar su potencia. El rasgo de autocorreccion es una medida de seguridad 
contra la perpetuidad de los enfoques inefectivos que suelen ser diffciles de eliminar si los 
cambios csperados permanecen ambiguos. 
Por ultimo, los sistemas de programacion de metas son utiles porque al igual 
que los procedimientos de evaluacion son reactivos, es decir, los clientes progresan 
en los cambios como resultado del mismo progreso de programacion . Lloyd (1983 , 
p. 60) explica como parece influir la reactividad derivada de la definicion de metas: 
Es probable que los terapeutas que ayudan a sus clienlesa establecer los objetivos pueden hallar 
un centro de interes mas claro para la planificacion y tratamiento del caso y aquellos terapeutas 
conscientes de sus porcentajes de metas conseguidas pueden encontrarse mas motivados para 
impulsar a sus clientes a obtener exitos . Tambien es posible que los clientes que son conscientes 
de sus objetivos especfficos pueden mejorar mas en la terapia que aquellos que no 10 son . 
Mientras mas implicados se encuentren el terapeuta y el cliente en los detalles procedimentales 
de consecucion de metas, es mas probable que el sistema sea reactivo. 
SELECCION Y DEFINICION DE MET AS 
En la Figura 9.1. se muestra la secuencia del proceso de seleccion y definicion 
de metas que comprende las siguientes fases: 
284 SELECCIONAR Y DEFINIR LOS RESULTADOS DESEADOS 
Selecci6n de Metas 
I. Explicar el proposilO de las metas. 
2. Pedir al c1iente que especifique los cambios posilivos deseados por efecto de la terapia. 
3. Determinar si la meta seleccionada implica cam bios en el ciienle . 
4 . Examinar si las metas spn realislas . 
5. Identificar las posibles vell/ajas derivadas de la consecuci6n de la meta. 
6. Identificar las posibles desventajas derivadas de la consecuci6n de la meta. 
7. Adoptar una decision. Con la informaci6n obtenida sobre las metas deseadas por el c1iente, 
seleccionar una de las siguientes altemativas: adoptar estas metas como la direcci6n que va 
ha seguir la terapia , reconsiderar las metas del c1iente 0 buscar algo intermedio. 
EI proceso de seleccion de metas puede implicar tambien la clarificacion de 
los valores entre el terapeuta y el cliente. 
Definicion de Metas 
Como se ilustra en la Figura 9. 1, la definicion de las metas se realiza despues 
de haber seleccionado estas y asf haberlo acordado el terapeuta y el cliente. Definir 
las metas conlleva ocho fases: 
I. Definir las condllctas manijieslas y encubiertas asociadas con la meta. 
2. Determinar las circunstancias 0 condiciones del cambio. 
3. Establecer el nivel de la conducta meta 0 la proporci6n en que debe aparecer. 
4. Secuenciar las fases temporalmente y segun el grado de dificultad. 
5. Identificar los obsl6.clllos que dificultan la consecuci6n de las metas. 
6. Identificar los recllrsos nccesarios . 
7. Revisar el progreso . 
El terapeuta puede facilitar la elaboracion de las metas terapeuticas empleando 
divers as guias en la entrevista que van dirigidas a la seleccion y definicion de las 
metas. En este capitulo incluimos algunos ejemplos de estas guias para seleccionar 
y definir las metas y en el Cuestionario de Entrevista que se adjunta al final del 
capitulo puede hallar mas. Estas propuestas son solo ejemplos, usted puede aiiadir 
ejemplos igualmente validos 0 mejores para cada categoria. 
Las areas que se muestran en la Figura 9.1 reflejan el proceso de selecci6n y 
definicion de metas en la terapia. En uno de los primeros articulos sobre la des-
cripcion de las metas terapeuticas Krumboltz (1966) sugerfa dos Ifneas basicas para 
el proceso de establecimiento de metas. En primer lugar, la meta deberia ser 
expresada por cada cliente individualmente. En segundo lugar, la meta debe ex-
presarse en terminos de resultados operativos. Estas dos Ifneas garantizan que el 
proceso de elaboracion de objetivos sea individualizado y que las metas sean 
observables. 
Seleccionar y definir las metas es un proceso que implica mucha interacci6n 
entre el terapeuta y el cliente. EI cliente normal mente determina las metas tera-
peuticas, sin embargo la participacion del terapeuta es imprescindible para que el 
ESTRATEGLAS DE ENTREVISTAS PARA TERAPEUTAS 285 
cliente identifique los resultados terapeuticos que desea en forma de resultados 
observables claramente especificados. En el pr6ximo apartado se describen las 
guias de entrevista que ayudan a los clientes a identificar y seleccionar los resultados 
terapeuticos esperados. 
GUlAS DE ENTREVISTA PARA LA SELECCION DE METAS 
Propos ito de las Metas 
El primer paso al seleccionar las metas consiste en proporcionar al cliente una 
explicaci6n sobre la funci6n de estas. Se deberian describir las metas, la importancia 
de su definici6n y de la participaci6n del cliente en el proceso de elaboraci6n de 
las mismas. Un ejemplo de 10 que el terapeuta podria decir sobre la funci6n de las 
metas es: «Hemos hablado sobre estas dos areas que te preocupan. Puede ser litil 
tratar en este momenta de que modo te gustaria que cambiaran las cosas. Podemos 
elaborar algunas met as que trataremos de conseguir a 10 largo de las sesiones. Estas 
metas nos dinin que es 10 que de seas conseguir como resultado de la terapia. Por 
10 tanto, hablemos de algunas cosas sobre las que te gustaria trabajar» . 
El terapeuta tambien podria subrayar la funci6n que desempeiian las metas en 
la resoluci6n de problemas en relaci6n a la atenci6n y al ensayo. 
S 
E 
L 
E 
C 
C 
I 
o 
N 
A 
R 
Explicar el prop6sito 
t 
Identificar las met as del cliente en terrrtinos positivos 
Deterrninar si las metas implican cambios en el c1iente 
Examinar si las metas son realistas 
Describir las ventajas que conllevan las metas para el c1iente 
Describir las desventajas que conllevan las metas para el c1iente 
t 
Reconsiderar el D' -- R " I I' 
cambio del c1iente ~ eCISlOn ~ emltlr e C lentea otro terapeuta 
t 
Adoptar las metas como la direcci6n de la terapia 
------!------
Definir la conducta 
Deterrninar la condici6n 0 circunstancia de cambio 
D Establecer la proporci6n 0 el nivel 
E ! 
F Para favorecer 
I el logro de la ~ Submctas: identificar y secuenciar 
N meta final 
I ! 
R Identificar obstaculos que pueden impedir la consecuci6n de la meta 
Identificar los recursos que se necesitan para lograr la meta 
Evaluar el progreso 
FIGURA 9.1. Selecci6n y definicion de metas. 
286 SELECCIONAR Y DEFINIR LOS RESULTADOS DESEADOS 
A veces puede ser util para los clientes disponer de ejemplos sobre el uso que 
hacen otras personas, los atletas 0 los bailarines, de las metas con el propos ito de 
favorecer su ejecucion. 
Tras esta explicacion, el terapeuta tratara de obtener alguna respuesta del cliente 
que indique si 10 ha comprendido 0 no. Si el cliente parece confundido, el terapeuta 
necesitara una segunda explicacion de los propositos de las metas y su valor para 
el cliente 0 para clarificar y examinar la confusion del cliente. 
Identificar las Metas del Cliente 
;.Que representa una meta final? En el nivel mas simple, una meta final 
implica 10 que el cliente desea que suceda como resultado del proceso terapeutico. 
Dicho de otro modo, las met as finales son la profundizacion de los problemas que 
experimenta el cliente. Las metas finales implican dos clasificaciones fundamen-
tales de los problemas: elecci6n y cambia (Dixon & Glover, 1984) . 
En los problemas de eleccion el cliente dispone de las destrezas y recursos reque-
ridos para la resolucion del problema pero se halla atrapado entre dos 0 mas 
posibilidades, a menudo conflictivas. En estas circunstancias, la meta final repre-
senta una eleccion 0 decision que debe adoptar el cliente tal como «decidir entre 
el Colegio A 0 Colegio B» 0 «escoger entre dejar el trabajo y tener mucho tiempo 
libre 0 continuar en el trabajo teniendo mas dinero y estabilidad» . 
En los aspectos de cambio, la meta final consiste en un cambio que el cliente 
desea realizar. En tales circunstancias el cliente no dispone de las destrezas 0 
recursos necesarios para resolver el problema. Ademas los clientes que se enfrentan 
con aspectos de cambio se introducen en la terapia con 10 que Gottman y Leiblum 
(1974) denominan como «discrepancia ejecutiva»; de algun modo 0 en algunas 
circunstancias, el comportamiento (ejecucion) del cliente debe modificarse. La 
discrepancia ejecutiva se representa por la diferencia entre la percepcion que tiene 
el cliente del funcionamiento usual y las expectativas del cliente de las formas 
altemativas de funcionamiento (p. 25). Los cambios deseados pueden referirse a 
las conductas0 situaciones abiertas, a conductas encubiertas 0 a combinaciones 
de ambas. Estas metas finales pueden dirigirse a eliminar algo, aumentar algo, 
desarrollar algo 0 reestructurar algo pero en todos los casos se espera que el cambio 
produzca una mejoria sobre 10 que existe (Srebalus, 1975, p. 415). Las metas del 
cliente que se basan en la discrepancia ejecutiva reflejan la definicion de cambio 
tfpicamente denominadas por Srebalus como el movimiento de un estado a otro 
(p. 416). Este concepto de cambio indica una discrepancia entre 10 que hace el 
cliente y 10 que este quiere conseguir. Estos cam bios pueden producirse mediante 
modificaciones evolutivas, intervenciones terapeuticas 0 ambas. 
En algunas ocasiones, adem as de las metas de eleccion y de cambio, los clientes 
desean mantener ciertos aspectos de su vida 0 ciertas conductas en el mismo grado 
o del mismo modo. Por ejemplo, un cliente puede des ear seguir manteniendo la 
relacion sexual con su esposa (mantener una conducta) como hasta el momenta 
aunque desee modificar otros aspectos de la relacion. 
ESTRATEGIAS DE ENTREVISTAS PARA TERAPEUTAS 287 
Guias de entre vista para identiflcar las metas del c1iente. A continuaci6n 
se incluyen algunos ejemplos de gufas de entrevista que puede emplear el terapeuta 
para obtener las metas del cIiente: 
«Suponga que despues de la terapia se encuentra con un pariente lejano a quien no ha visto 
desde hace mucho tiempo. i,Que diferencia puede existir entre este momento y ese hipotetico 
momenta futuro?». 
«Suponiendo que tenemos exito, i, Que harfas 0 como cambiarian estas situaciones?». 
«i,Que esperas conseguir como resultado de la terapia? i,Esta es una eleccion 0 un cambio?». 
«i,Para que te gustarfa que te sirviera la terapia?». 
«i,Que quieres hacer, pensar 0 sentir?». 
EI prop6sito del terapeuta al utilizar este tipo de gufas es ayudar al cliente a 
identificar los resultados terapeuticos que desea. EI terapeuta busca alguna indi-
caci6n verbal de los resultados que el cIiente espera. Si el cliente desconoce los 
cambios que desea 0 no puede especificar su intenci6n al acudir ala terapia, deberfa 
dedicarse algo de tiempo a examinar este area antes de avanzar a otra. EI terapeuta 
puede asistir al cliente en la selecci6n de metas de muchos modos: asigmindole 
tarea para casa (<<Haz una lista de 10 que puedes hacer ahora y de 10 que te gustarfa 
ser capaz de hacer dentro de un ano»), empleando la capacidad imaginativa «<ima-
gfnate que eres alguien que tu admiras mucho. i,Quien serfas?, i,Que harfas? i,En 
que cambiarfas?»), mediante preguntas adicionales (<<Si tuvieras una vara magica 
que concede tres deseos i,que Ie pedirfas?») 0 mediante inventarios 0 cuestionarios 
de auto in forme como el Cuestionario de Autovaloraci6n Condilctual elaborado por 
Cautela y Upper (1975). En este cuestionario se pregunta al cliente cual de las 73 
conductas manifiestas y encubiertas de sea el aprender para mejorar su funciona-
miento (Cautela & Upper, 1976, p. 91). 
;,A Quien Corresponde la Meta? Como se coment6 en el Capitulo 8, con 
frecuencia los clientes describen problemas de tal modo que minimizan su propia 
implicaci6n. Consecuentemente, el cliente proyecta la culpa 0 responsabilidad de 
su problema en alguna otra persona - por ejemplo, «Yo no 10 hice», «La culpa 
es de ella», «Si no fuera por ellos . .. ». Del mismo modo, al expresar metas, algunos 
clientes muestran la misma tendencia y en principio desean seleccionar metas que 
implican cambios en otras personas y no en ellos mismos- un adolescente que 
dice «Quiero que mi madre deje de reganarme», 0 un marido que dice «Quiero 
que mi mujer deje de salir como 10 hace». La tendencia a proyectar el cambio 
deseado sobre otra persona es muy evidente en los problemas de cambio vinculados 
con las relaciones de dos 0 mas personas. 
Sin eliminar los sentimientos del cliente, el terapeuta debe ayudarle a girar esta 
tendencia. El cliente es la persona identificada que solicita ayuda y servicios y es 
la unica persona que puede cambiar. Cuando dos 0 mas clientes estan implicados 
simultaneamente en la terapia, como el caso de una pareja 0 una familia, todos 
los cIientes identificados deben contribuir en la elecci6n 0 cambio deseados, no 
solamente una de las partes 0 uno de los «pacientes identificados». Mas concre-
tamente, cualquier persona directamente afectada por la elecci6n 0 cambio requiere 
288 SELECCIONAR Y DEFINIR LOS RESULTADOS DESEADOS 
alguna implicacion en la seleccion y aplicacion de los resultados deseados (Gam-
brill, 1977). El terapeuta puede tener una responsabilidad para proteger los derechos 
del cliente que se halla en «inferioridad de condiciones», como el caso de los ninos 
y los ancianos, para asegurar que esto se produce porque sus derechos sUelen 
pasarse por alto muy a menudo (Gambrill, 1977). 
La persona a quien corresponde el cambio normal mente esta directamente 
relacionada con el grado de control 0 responsabilidad que tiene el cliente en la 
situacion y con la eleccion 0 el cambio. Por ejemplo, imaglnese que atiende el 
caso de una nina de 8 anos cuyos padres van a divorciarse. La nina Ie pide que Ie 
ayude a persuadir a sus padres para que permanezcan unidos. Esta meta sera dificil 
de lograr para la nina porque ella no tiene ninguna responsabilidad sobre la relacion 
de sus padres. 
El terapeuta necesitara emplear divers as gUlas para ayudar a los clientes a 
determinar a quien corresponde el cambio y si alguna otra persona necesita in-
volucrarse en el proceso de seleccion de metas. Si el cliente se dirige hacia una 
meta que requiere un cambio ajeno, el terapeuta deb era mostrarle esto y ayudarle 
a identificar su rol en el proceso de cambio. 
Guias de entrevista para determinar a quien cor responde el cambio. Para 
ayudar al cliente a determinar a quien corresponde e\ cambio, e\ terapeuta puede 
emplear guias similares a las siguientes: 
«LDe cuanto control dispones para obtener este cambio?». 
«LQUC! cambios te ex ige esta meta?". 
«LQUC! cambios en otras personas exige esta meta?». 
«LPuedes conseguir est a meta sin la ayuda de nadie?». 
«LPara quien es mas importante este cambio?». 
«LQuien es realmente la persona responsable de que se produzca este cambio?». 
La intencion de est as gUlas es que el cliente identifique una meta que representa 
una eleccion 0 cambio del cliente y no de otros salvo que estos se hallen directamente 
afectados. Si el cliente continua seleccionando una meta que representa un cambio 
en otras personas mas que en Sl mismo, el terapeuta y el cliente deberan decidir 
si estan interesados en mantener esa meta, negociar la meta 0 derivar al cliente a 
otro terapeuta, como se comentara en breve. 
;,Es Realista la Meta? 
Las metas realistas son las factibles, las que pertenecen al ambito de control y 
capacidad del cliente. Las metas realistas implican resultados basados mas en 
expectativas realistas que en ideas modelos 0 autodemandas irreales, irracionales 
o perfeccionistas. 
Cuando los clientes seleccionan las metas, el terapeuta debe cuidar que estas 
metas no sean irreales bien porque son excesivamente elevadas para poder alcan-
ESTRATEGIAS DE ENTREVISTAS PARA TERAPEUTAS 289 
zarlas 0 bien porque son demasiado bajas 0 su logro no es consistente con el curso 
natural de los acontecimientos. Los clientes que establecen metas excesivamente 
elevadas funcionan normal mente en base a modelos perfeccionistas y autodeman-
das. Dixon y Glover (1984) senalan que con frecuencia estos clientes tambien 
temen al fracaso y la elecci6n de metas excesivamente elevadas elimina la posi-
bilidad de fracaso a sus ojos porque no sienten que nadie les puede responsabilizar 
de no haber logrado un objetivo tan exigente . Por ejemplo , un cl iente que afirma 
«Quiero conseguir sobresaliente en todas mis notas durante mis cuatro cursos del 
colegio» sabe que nadie Ie va a recriminar si no 10 consigue porque esta es ex-
cesivamente «ideal» y diffcil de lograr. Establecer metas tanelevadas es tambien 
una forma de evitar riesgos y de no intentar, eliminando asf la posibilidad de 
fracasar ante el primer riesgo 0 intento. 
Los clientes que se imponen metas poco consecuentes 0 excesivamente bajas 
normal mente tambien temen al fracaso y seleccionan estas metas porque saben que 
estas sf pueden conseguirse. Desafortunadamente, los resultados son tan inconsis-
tentes como la misma meta y a menudo su obtenci6n no conduce a ninguna 
gratificaci6n (Dixon & Glover, 1984, p. 133). Un cliente que manifiesta: «S610 
quiero conseguir un suficiente en el colegio» es probable que 10 logre pero puede 
sentir escaso 0 ningun orgullo cuando la meta ha sido aIcanzada 0 incluso sobre-
pasada. Probablemente las metas retadoras son las que conducen a un nivel de 
ejecuci6n mas elevado que las metas «faciles» (Locke, Shaw, Saari & Lathan, 
1981). 
EI terapeuta puede ayudar a los clientes a examinar el grado de realismo de 
las metas identificadas, si estan basadas en modelos de cambio posibles y racionales 
y si en la elecci6n de metas irreales se refleja ansiedad del cliente. Los terapeutas 
tambien pueden ayudar a los clientes a examinar cualquier noci6n 0 atribuci6n 
inapropiada sobre la responsabilidad del exito 0 fracaso para conseguir las metas. 
Las atribuciones inadecuadas son aquellas en las que el cliente atribuye el exito 0 
fracaso a factores que se hall an fuera del control del cIiente (Dixon & Glover, 
1984). Al seleccionar las metas realistas, el terapeuta y el cliente deberfan tener 
la precauci6n suficiente para no sobreestimar 0 subestimar las posibilidades del 
cIiente. 
Guias de entre vista que evaluan la factibilidad. Para ayudar al cliente a 
determinar el realismo de una meta seleccionada, el terapeuta puede emplear di-
versas gufas como: 
«i,En que medida es factible para ti hacer ?». 
«i,Es razonable esperar un cambio de ?». 
«i,Como crees que vas a sentirte despues de conseguir esta meta?». 
«i,En que medida tratas de alcanzar este objetivo sabiendo que es algo que puedes lograr con 
poco/ mucho esfuerzo y 0 poco/ mucho riesgo?». 
«i,En que medida quieres conseguir esta meta?». 
«i,Hasta que punto se basa esta meta en expectativas realistas?». 
«Cuando alcances esta meta, i,como vas a explicar tu exito? [0 si no la consigues, i,como vas 
a explicar tu fracaso?]». 
290 SELECCIONAR Y DEFlNlR LOS RESULTADOS DESEADOS 
La intenci6n de estas gufas es hacer que e\ cliente evalUe de forma realista el 
grado de posibilidad de alcanzar una meta en un espacio de tiempo razanable. EI 
terapeuta busca una respuesta que indique que el cliente dispone de algunas pruebas 
sobre el realismo de la meta y que esta puede lograrse de forma razanable en un 
perfodo de tiempo 16gico. Si el cliente selecciona una meta y considera que es 
factible pero el terapeuta no esta de acuerdo existe la posibilidad de negociar 0 de 
remitir al cliente a otro terapeuta. 
Ventajas y Desventajas de las Metas 
Es importante examinar el efecto del beneficio/coste de todas las metas iden-
tificadas, es decir, 10 que se da (coste) frente a 10 que se obtiene (beneficio) al 
aIcanzar una meta (Dixon & Glover, 1984). Pens amos en este paso como en el 
examen de ventajas 0 efectos positivos y desventajas 0 efectos negativos de la 
consecuci6n de metas. Es probable que los clientes no se comprometan 0 dejen de 
trabajar por una meta cuando las exigencias son excesivas y las recompensas 
demasiado bajas. La evaluaci6n de las ventajas y desventajas permite al cliente 
anticipar el precio de una meta y despues decidir si el cambio merece el coste que 
implica para sf mismo 0 para las personas significativas. Muchos clientes tienden 
a iniciar un cambio sin considerar que el logro de una meta deseada puede implicar 
tambien un coste. Los costes son normal mente menos obvios que los beneficios 
del cambio. Si el terapeuta y el cliente no evaluan los posibles costes, el cliente 
puede aIcanzar la meta y resolver el problema original pero crear nuevos problemas 
durante el proceso (Dixon & Glover, 1984). Algunas veceseliminar 0 modificar 
un sfntoma genera efectos adversos 0 nuevos problemas que el cliente no esperaba 
y que el terapeuta no habfa anticipado . Por ejemplo, un cliente puede decidir dejar 
su trabajo para disponer de mas tiempo libre y despues de hacerlo se deprime por 
la falta de dinero y seguridad y la perdida de una red social importante y del 
sentimiento de «comunidad». Las ventajas y desventajas de cualquier meta parti-
cular deben ser emocionales , cognitivas y conductuales (Gambrill, 1977): la con-
secuci6n de una meta puede producir sentimientos y estados de animo deseables 
e indeseables; pensamientos, imagenes y dialogo intemo de autorrefuerzo 0 au-
todesprecio y reacciones 0 respuestas motoras apropiadas 0 inapropiadas. 
Generalmente, las metas seleccionadas por los clientes deberfan conducir a 
beneficios en vez de a perdidas. Gambrill (1977, p. 169) sefiala que al hacer esta 
selecci6n «se requiere mucha precauci6n para identificar las situaciones en las que 
se desplegaran tales conductas y la anticipaci6n de las posibles consecuencias que 
se pueden derivar». 
Las ventajas y las desventajas pueden ser a largo 0 a corto plaza. EI terapeuta 
asiste al cliente para que este identifique los diversos tipos de ventajas y desventajas 
a corto y largo plaza asociadas con la consecuci6n de una meta y ofrece otras 
opciones para aumentar la muestra de posibilidades del cliente (Gambrill, 1977). 
Algunas veces puede ser uti I escribir estas en un cuestionario que puede ser ampliado 
ESTRATEGIAS DE ENTREYISTAS PARA TERAPEUTAS 291 
o modificado en cualquier momenta como el que puede hallar en la Figura 9.2 
(ver tambien Goldfried & Golfried, 1980). 
Guias de entrevista para las ventajas. La mayoria de los clientes pueden 
identificar inmediatamente algunas consecuencias positivas asociadas a los cambios 
que desean. Sin embargo, sigue siendo una buena idea examinar con todos los 
clientes las consecuencias positivas del cambio por cuatro razones como minimo: 
determinar si las ventajas que percibe el cliente son indicativas de beneficios reales; 
subrayar otras posibles ventajas para el cliente 0 para otros que se hayan pasado 
por alto; para fortalecer el deseo de cambio del cliente y para determinar el grado 
de relevancia de la meta identificada, dado el grado de funcionamiento general del 
cliente. A continuaci6n se incluyen algunos ejemplos de gufas para examinar las 
ventajas del cambio del cliente: 
Meta 
"i,Por que merece la pena conseguir esta meta?» . . 
"i,Que beneficios yes como producto de este cambio?». 
"i, Quien y c6mo se beneficiaria de este cambio?». 
"i,Que consecuencias positiYas se pueden derivar de este cambio?». 
"i,EI logro de este objetivo implica la resoluci6n del problema?» . 
Ventajas 
Inmediatas 
Ventajas a 
largo plaza 
Desyentajas 
Inmediatas 
Meta # I 
Meta # 2 
Meta # 3 
Desyentajas a 
largo plazo 
FIGURA 9.2. Lista de registro de ventajas y desventajas asociadas a las metas iden-
tificadas. 
Al utilizar estas gufas, eI terapeuta tratara de obtener alguna serial de que el 
cliente selecciona una meta en base a las consecuencias positivas que esa meta 
puede producir. Si el cliente olvida algunas de las ventajas, eI terapeuta puede 
recordarselas para ariadir incentivos al cambio del cliente. 
Si el cliente no es capaz de identificar por sf mismo ningun beneficia del 
cambio, esto puede observarse como una serial de precauci6n. El fracaso en la 
identificaci6n de ventajas del cambio puede indicar que el cliente trata de cambiar 
porque alguien se 10 ha pedido 0 que la meta identificada no es muy relevante, 
teniendo en cuenta la «imagen total». Por ejemplo, si un cliente quiere encontrar 
un trabajo nuevo mientras se halla luchando contra una enfermedad mortal, el 
cambio de empleo en este momenta probablemente no se corresponde con su 
interes principal que consiste en recuperar la salud. Un examen mas profundo 
puede indicar que otra personaes el cliente mas adecuado 0 que deberian selec-
cionarse otras metas. 
292 SELECCIONAR Y DEFINIR LOS RESULTADOS DESEADOS 
Guias de entre vista para las desventajas. EI terapeuta puede tam bien emplear 
guias para hacer pensar al c1iente sobre los riesgos 0 efectos secundarios derivados 
del cambio deseado. Algunos ejemplos de estas guias son: 
«LCOnseguir esta meta puede afectarte de alguna fonna negativa?». 
«i,Que riesgos pueden derivarse de conseguir este cambio?» . 
«L Como cambiaria tu vida si esto sucede ?" . 
«LQue posibles desventajas se pueden derivar si seguimos en esta direccion? LHasta que punto 
estas dispuesto a pagar este precio ?". 
«LQue posibles consecuencias negativas puede producir eSle cambio para Ii y para los otros?". 
El terapeuta buscani alguna indicaci6n de que el c1iente esta considerando todos 
los posibles costes asociados a la meta. Si el c1iente no identifica ningun riesgo, 
el terapeuta puede utilizar la confrontaci6n para senalar algunas desventajas. Sin 
embargo , el terapeuta deberia tener cuidado para no persuadir 0 coercitar al c1iente 
a adoptar otra alternativa s610 porque el crea que es mejor. Como senalan Eisenberg 
y Delaney (1977) , «Una cosa es ayudar a la persona a considerar las consecuencias 
de una elecci6n que ha hecho y otra muy diferente es persuadir al c1iente para que 
prefiera otra alternativa» (p. 202). 
Momento de la Decision 
EI proceso de elaboraci6n de metas hasta este punto ha implicado al cliente 
como principal agente para escoger las metas. El rol del terapeuta ha sido secun-
dario, limitado fundamentalmente a ayudar al cliente a examinar la factibilidad , 
los riesgos y las desventajas delcambio. En este punto del proceso, la funci6n del 
terapeuta es decidir si puede 0 no puede ayudar al cliente a conseguir las metas 
que ha seleccionado. La mayorfa de las personas coinciden en que esta es una de 
las principales cuestiones eticas y en cierta medida legales, que debe encarar el 
terapeuta durante el proceso terapeutico (Bandura, 1969; Gottman & Leiblum, 
1974; Krumboltz, 1966; Morganstern, 1986). 
Segun Gambrill (1977 , p. 1035): 
«Hay obligaci6n de ayudar al cliente para que consiga las metas deseadas, dentro de los !imites 
del sistema personal de valores y orientacion te6rica del terapeuta y de los posibles efectos a 
corto y largo plaza sobre el cliente y la sociedad. Sin embargo, el sistema personal de valores 
y la orientaci6n tearica del terapeuta pueden producir restricciones no elicas en la ayuda que 
este proporciona al cliente . En estas circunstancias, el terapeuta tiene la obligacian etica de 
derivar al cliente a otro terapeuta que puede analizar con mayor objetividad los resultados 
deseados por el cliente». 
El terapeuta y el c1iente deberan decidir si continuan con la terapia y tratan de 
conseguir las metas, si continuan con la terapia pero vuelven a evaluar las metas 
iniciales del cliente 0 solicitan los servicios de otro terapeuta. Esta decisi6n se 
adopta siempre de fonna individual y esta basada en dos factores: deseo y com-
pete/lCia para ayudar al cliente a conseguir las metas seleccionadas (Brown & 
ESTRATEGIAS DE ENTREVISTAS PARA TERAPEUTAS 293 
Brown, 1977). EI deseo implica su interes por trabajar con el cliente en los aspectos 
y metas que este ha identificado, sus valores y que usted acepte el valor y la 
importancia de las metas, dado el nivel de funcionamiento global del cliente. La 
competencia implica sus destrezas y el «saber-como» y si usted tiene experiencia 
con estrategias altemativas y forrnas multiples de intervencion para trabajar con 
problemas especfficos. 
Es necesario cuestionarse algunos aspectos. En primer lugar, el ser tan res-
ponsivo como sea posible a las peticiones de cambio del cliente (Gottman & 
Leiblum, 1974, p. 64) incluso cuando estas metas no reflejen sus sesgos teoricos 
o preferencias personales. Este tipo de responsividad ha sido descrita por Gottman 
y Leiblum (1974, p. 64): «Si [el clientel quiere ayuda para aceptar su homose-
xualidad, no procede establecer un programa para ayudarle a encontrar satisfaccion 
en las relaciones heterosexuales. El respeto por el cliente implica el respeto por el 
diagnostico de sus necesidades y deseos». 
Con mucha frecuencia, voluntaria e involuntariamente, los terapeutas pueden 
guiar al cliente hacia una meta en la que ellos se sienten comodos 0 mas competentes 
para tratarla . Como seiiala Gambrill, «Los valores personales y los conceptos 
teoricos sin base empfrica han ocasionado mucha angustia entre los clientes a 10 
largo de los aiios» (1977, p. 1035). 
En segundo lugar, si usted tiene algun impedimento especial para trabajar en 
favor de las metas seleccionadas, puede ser conveniente que el cliente sea derivado 
a otro terapeuta (Gottman & Leiblum, p. 43) . 
Principales impedimentos de un terapeuta. Un terapeuta puede encontrarse 
con muchas reservas 0 limitaciones que pueden afectar sobre la decision que adopta. 
Una posible reserva puede derivarse de las dificultades habidas al trabajar con 
clientes similares. Sus propios conflictos no resueltos en el area que el cliente trata 
de conseguir pueden bloquear la terapia. Otras reservas pueden derivarse de la 
incompatibilidad entre sus propios valores y los que se reflejan en la seleccion de 
metas que ha reaJizado el cliente. Cuando una meta produce daiio al cliente 0 a 
otra persona usted puede decidir que es eticamente irresponsable ayudar al cliente 
a conseguirla. Algunos clientes pueden seleccionar metas autodestructivas . Estas 
metas pueden limitar la libertad de accion, pueden ser poco practicas a la hora de 
conseguirse y pueden haber sido seleccionadas por presiones politicas 0 exigencias 
de otras personas (Gambrill, 1977). Brown y Brown (1977, p. 100) sefialan que 
«cuando se san cion an tales metas se refuerza que el cliente evite el problema 0 
que seleccione medios inadecuados para manejar la situacion problematica». Usted 
tambien puede tener ciertas reservas si el cliente insiste en que usted aplique una 
tecnica cuya inefectividad 0 peligro para el cliente ha sido mostrada por diversas 
investigaciones 0 si el cliente insiste en un enfoque terapeutico que se hall a mas 
alia de su nivel de capacidad 0 de su campo terapeutico. Por ultimo, usted puede 
sentir que la terapia no va a ser util cuando las condiciones que contribuyen en el 
problema se escapan del control del cliente 0 cuando el cliente no desea cambiar 
estos factores. 
294 SELECClONAR Y DEFINIR LOS RESULTADOS DESEADOS 
Adoptar la decision. Si el cliente ha seleccionado las metas y ni usted ni el 
muestran ninguna reserva, decidini seguir con la terapia y asistir al cliente en la 
consecuci6n de esta meta. Puede resumir esto para el cJiente del siguiente modo: 
«Has manifestado que quieres hacer como resultado de la terapia. Parece 
que quieres y eres capaz de cambiar los factores que toman parte en este problema. 
Los beneficios parecen superar a los costes del cambio». Despues de este punto, 
suponiendo que el cJiente 10 confirme, el terapeuta y el cliente pasaran a definir 
la meta. 
En otros casos , usted puede decidir continuar con el cJiente en base a renegociar 
las metas seleccionadas por el cliente. Morganstern (1986) sefiala que muchas veces 
cuando puede ser diffcil aceptar las metas del cJiente sin ofertar una «reeducaci6n». 
Por ejemplo, si la cliente desea tener un hijo y no logra identificar las desventajas 
o riegos derivados de esta elecci6n, el terapeuta puede sefialar algunos , 0 si un 
cJiente escoge como meta «Quiero ser exactamente igual que mi mejor amigo», el 
terapeuta puede indicar la dificultad de alcanzar esta meta. Al reconsiderar la meta 
del cliente, el terapeuta puede decir algo como «No puede ayudarte a ser igual que 
tu amigo porque cada persona es siempre un poco diferente del resto. Nuestras 
diferencias son las que nos hacen unicos. Si hay algo de tl mismo sobre 10 que te 
gustarfa trabajar, puedo ayudarte con esto» 
La reevaluaci6nde la meta del cliente es un aspecto bastante complejo. Bandura 
(1969) sefiala que una redefinici6n de la meta del cliente, especialmente la «re-
definici6n unilateral», es un «aspecto etico muy ignorado» pero prevalente (p. 103). 
Bandura recomienda que, al iniciar una reevaluaci6n 0 redefinici6n de las metas 
del cliente, el terapeuta deberfa acJarar est a vfa al cliente. Ademas, el terapeuta 
deberfa informarle que tales comentarios se basan en la informaci6n y en el sistema 
de pensamiento propio del terapeuta (p. 103). La reevaluaci6n de las metas del 
cJiente deberfa hacerse s610 «con el conocimiento y consentimiento de este», quien 
es <<libre para negarse a cumplir las sugerencias del terapeuta» (Gottman & Leiblum, 
1974, p. 68). La influencia del terapeuta al reconsiderar las metas deberfa ser 
expifcita, no impifcita , abierta mas que disimulada. 
La derivaci6n puede ser apropiada en los siguientes casos: si el cJiente desea 
lograr una meta que es incompatible con su sistema de valores; si usted no es capaz 
de ser objetivo con respecto al problema del cliente; si usted carece de experiencia 
o desconoce el tratamiento solicitado por el cliente; si usted sobrepasa su nivel de 
competencia al trabajar con el cliente 0 si esta implicada mas de una persona y 
debido a sus emociones 0 sesgos, usted se posicionarfa en favor de una de elias . 
La derivaci6n puede ser una elecci6n mejor que continuar con el trabajo de un 
cliente en presencia de limitaciones 0 reservas importantes. La derivaci6n es una 
forma de proporcionar una experiencia terapeutica alternativa y, esperamos, que 
proporcionara al cliente una impresi6n positiva de la terapia. 
Al decidir la derivaci6n de un cliente, el terapeuta tiene ciertas responsabili-
dades. Desde los primeros contactos, el terapeuta y el cJiente han iniciado al menos 
un contrato no escrito. Cuando el terapeuta decide practicar la terapia con el cliente, 
«asume un grado de lealtad y responsabilidad por los resultados de la terapia» (Van 
ESTRATEGlAS DE ENTREVISTAS PARA TERAPEUTAS 295 
Hoose & Kottler, 1977, p . 82). Cuando decide finalizar este «contrato» y derivar 
al cliente, el terapeuta remitente es considerado legalmente responsable si la de-
rivacion no se ha ejecutado con el cuidado suficiente (Dawidoff, 1973). EI cuidado 
suficiente implica que: 
«cuando se decide derivar a un cliente, el terapeuta remitente tiene la responsabilidad de asegurar 
la idoneidad de la derivacion, incluida la capacidad del terapeuta receptor. Ademas, deberfa 
proporcionar suficiente informacion al terapeuta receptor para capacitarle en la ayuda del cliente . 
Tambien es importante que el terapeuta intente hacer un seguimiento del bienestar de su cliente». 
[Van Hoose & Kottler, p. 83] 
Los terapeutas tambien son responsables de proporcionar a los clientes diferentes 
posibilidades de terapeutas a los que puede ser derivado y que son competentes y 
cuya fama no es mala ni hace referencia a experiencias poco eticas (M. Boston , 
comunicacionpersonal, Diciembre 1980). 
GUlAS DE ENTREVIST A PARA DEFINIR MET AS 
La mayoria de los clientes seleccionanin probablemente mas de una meta. Al 
final, puede ser mas realista que el cliente trabaje para «lograr una variedad de 
objetivos especfficos en vez de un unico resultado» (Bandura, 1969, p. 104). Por 
ejemplo, en el caso de loan, la cliente selecciona tres resultados finales: adquirir 
y demostrar como minima cuatro destrezas de inicio, aumentar el autodiscurso 
positivo sobre su capacidad para funcionar adecuadamente en situaciones com-
petitivas y adquirir y emplear cinco destrezas de toma de decision (ver esquema 
de metas de loan mas adelante en el capitulo). Estos tres resultados reflejan los 
tres problemas nucleares identificados en la entrevista de evaluacion. La seleccion 
de una meta tambien puede implicar la existencia de otras . Por ejemplo, si una 
cliente manifiesta «Quiero mantener una relacion emocional y sexualmente satis-
factoria con un hombre», la cliente tendra que trabajar para conocer a hombres , 
para desarrollar conductas de acercamiento y destrezas comunicativas adecuadas 
para lograr intimidad y aprender el tipo de respuestas que Ie resultan sexualmente 
satisfactorias. 
Al principio, puede ser util que el cliente especifique una 0 mas metas que 
desea por cada problema separado. Sin embargo, adoptar multitud de metas a la 
vez puede ser poco realista. EI terapeuta deberfa pedir al cliente que escoja una 
de las metas para empezar. Tras seleccionar una meta inicial con la que se va a 
trabajar, el terapeuta y el cliente pueden definir los tres apartados de la meta e 
identificar las submetas. En la proxima seccion de este capItulo se incluyen algunas 
guias que puede emplear el terapeuta para ayudar al cliente a definir las metas 
terapeuticas y a ofrecer alguna respuesta que indica la responsividad a estas guias. 
Definicion de Conductas Relacionadas con las Metas 
Carkhuff y Anthony (1979, pp. 136-137) aseguran que «para lograr cualquier 
meta, el terapeuta debe actuar . Y para asegurar que la meta por la que se trabaja 
es funcional y real, el terapeuta debe iniciar su secuencia de actividad definiendo 
296 SELECCIONAR Y DEFINIR LOS RESU LTADOS DESEADOS 
la meta .... Este es un paso que general mente la mayoria de las personas olvidan 
por completo» . Definir metas implica especificar en terminos operativos y con-
ductuales 10 que va ha hacer el c1iente (individuo, grupo u organizacion) como 
resultado de la terapia. Esta parte de la meta define las conductas espedficas que 
debe ejecutar el c1iente y responde a la pregunta: «~Que hara, pensara 0 sentini el 
cliente de forma diferente?». Ejemplos de metas conductuales son hacer de porte 
con mas frecuencia, pedir ayuda al profesor, comunicar verbal mente sentimientos 
positivos sobre uno mismo 0 pensar de forma positiva sobre un mismo. Como 
puede ver, las conductas manifiestas y las encubiertas , los pensamientos y los 
sentimientos, pueden inc1uirse en esta parte de la meta siempre que se defina la 
conducta por el significado que implique para cada c1iente. Definir conductualmente 
las metas especifica el proceso de establecimiento de metas y las metas espedfi-
camente definidas tienden a crear mas incentivos y guias de ejecucion que las 
intenciones vagamente formuladas (Bandura & Simon, 1977, p. 178). Cuando las 
metas se definen operativa y conductualmente, es mas facil evaluar los efectos de 
la terapia (ver tambien el Capitulo 10). Ademas, «las metas c1aramente definidas 
favorecen que los problemas sean valorados como mas manejables y las soluciones 
mas probables» (Dixon & Glover, 1984, p. 133). 
Guias de entrevista para deflnir las conductas meta. A continuacion se 
presentan algunas guias que puede emplear un terapeuta para identificar la parte· 
conductual de la meta: 
«Cuando dices que quieres . i,Que te ves haciendo?". 
«i,Que podrfa ver yo, que haces, piensas 0 sientes como resultado de este cambio?". 
«Dices que quisieras ser mas segura de tf mismo. i,Que cosas harfas 0 pensarfas si fueras una 
persona segura de sf misma?". 
«Describe un buen (mal) ejemplo de esta meta". 
Es importante que el terapeuta siga empleando estas guias hasta que el cliente 
haya definido las conductas manifiestas y encubiertas asociadas con la meta. Esta 
no es tarea facil porque la mayorfa de los c1ientes hablan de los cam bios en terminos 
abstractos y vagos. Si el c1iente muestra dificultades para especificar las conductas, 
el terapeuta puede ayudarle con mas instrucciones, informacion 0 ejemplo de alguna 
meta propia. 
EI terapeuta tambien puede facilitar la tarea de definir las metas aconsejando 
al c1iente que utilice verbos de accion para describir que sucedera cuando consiga 
la meta (Dixon & Glover, 1984). Como se ha comentado anteriormente, es im-
portante que los c1ientes especifiquen 10 que quierell hacer en vez de 10 que no 
quieren 0 quieren dejar de hacer. Una meta esta suficientemente definida cuando 
el terapeutapuede repetir y parafrasear la definicion del c1iente. 
Otra forma de obtener descripciones conductuales de las metas es la que sugiere 
Hill (1975) y consiste en aplicar el lnventario de Resultados Terapeuticos. En este 
inventario se pide al c1iente que describa caracterlsticas, cualidades 0 singularidades 
que para el c1iente son importantes de adquirir 0 mostrar. Despues, el c1iente debe 
ESTRATEGlAS DE ENTREV[STAS PARA TERAPEUTAS 297 
relacionar conductas con cada una de estas descripciones. Por ejemplo, una des-
cripci6n ambigua como «seguridad en sf mismo» puede traducirse en terminos 
conductuales como «hacer menos autoafirmaciones negativas»; la cualidad «ser 
mas atractivo», puede convertirse en terminos operativos en «perder cinco kilos» 
y «sonrefr con mayor frecuencia». EI inventario facilita la expresi6n de las metas 
en terminos observables y ayuda tambien a elaborar metas que se expresan sig-
nificativamente para los distintos clientes. 
Definir las Condiciones de una Meta 
EI segundo apartado de una meta especifica las condiciones, es decir, el colltexto 
o circunstancias en las que se producini dicha conducta. Este es un elemento 
importante para el cliente y para el terapeuta. Las condiciones sugieren la persona 
en particular con quien el cliente va a ejecutar las conductas deseadas 0 un entorno 
especifico donde se van a poner en practica y responde a la pregunta «(,D6nde, 
cuando y con quien se va a presentar la conducta7». Al especificar las condiciones 
de una conducta se establecen los Hmites y las ayudas para asegurar que la conducta 
surgira s610 en los entomos deseados 0 con las personas deseadas y que no se 
generalizara a todos los ambientes si no es este el prop6sito. Por ejemplo, una 
mujer puede desear incrementar el numero de respuestas verbales y no verbales 
que dirige a su marido. En este caso, el tiempo que pas a con su marido configura 
la condici6n 0 circunstancias en las que acontece la conducta. Sin embargo, si esta 
conducta se generaliza e incluye a todos los hombres, se pueden generar efectos 
negativos sobre la misma relaci6n que trata de mejorar. 
Guias de entrevista para determinar las condiciones de una meta. A con-
tinuacion se incluyen algunas guias que usted puede emplear para determinar las 
condiciones de una meta: 
«i,D6nde Ie gustarfa hacer esto?». 
«i,En que situaciones quieres ser capaz de comportarte asf?». 
«i,Cuando quieres mostrar est a conducta?». 
«i,Con quien quieres estar al comportarte asf?». 
El terapeuta buscara una respuesta que indique d6nde 0 con quien ejecutara el 
cliente la conduct a deseada. Si el cliente no responde 0 las respuestas no deterrninan 
las condiciones, el terapeuta puede sugerirle auto-obsevarse durante un tiempo 
hasta lograr esta informacion 0 tambien puede proporcionarle ejemplos propios 
para mostrar que una conducta deseada puede no ser adecuada en todas las situa-
ciones 0 con todas las personas. 
Definir un Nivel de Cambio 
EI tercer elemento de una meta especifica el nivel 0 la calltidad de cambio 
conductual que se precisa. En otras palabras, esta parte responde a «(,Cuanto debe 
hacer 0 completar el cliente para alcanzar el objetivo marcado?». EI nivel de una 
298 SELECCIONAR Y DEFINIR LOS RESULTADOS DESEADOS 
meta sirve como medida para determinar la cantidad de veces que el cliente debe 
mostrar la conducta deseada. Por ejemplo, un hombre puede decir que desea reducir 
su consumo de cigarrillos. La proxima semana puede decir que ha mejorado porque 
ha fumado menos, tanto el terapeuta como el cliente tendran dificultad para de-
terminar cuanto ha conseguido acercarse a la meta que se ha propuesto. En este 
caso, el nivel de ejecucion del cliente es ambiguo. Por el contrario, si manifiesta 
que ha reducido el consumo de dos cigarrillos diarios durante una semana, su nivel 
dd~jecucion puede determinarse fiicilmente. Si su meta fue reducir ocho cigarrillos 
diarios, esta informacion puede ayudarnos a evaluar el progreso hacia la meta. 
Del mismo modo que los apartados referentes a las conductas y las condiciones 
de la meta, el nivel de cambio deberia establecerse siempre de forma individual 
para cada cliente. La cantidad de satisfaccion derivada del logro de una meta 
depende frecuentemente del nivel de ejecucion establecido (Bandura & Simon, 
1977, p. 178). Un nivel conveniente de cambio dependera de factores como el 
nivel actual de la conducta problematica, el nivel actual de la conducta deseada, 
los posibles recursos de cambio, la disposicion del cliente a cambiar y el grado en 
que otras condiciones 0 personas mantienen el nivel actual de la conducta proble-
matica. Hosford y de Viser (1974) seiialan que a menudo dichos factores determinan 
que el apart ado correspondiente al nivel de cambio sea el mas diffcil de determinar. 
Por ejemplo, supongamos que un cliente desea aumentar el numero de opiniones 
asertivas que expresa oralmente cuando se encuentra con su marido. Si ahora no 
manifiesta ninguna de sus opiniones, su nivel de cambio puede encontrarse en un 
nivel mas bajo que el definido para otro cliente que ya expresa algunas opiniones . 
Y si el marido de la cliente esta acostumbrado a sancionarle cada opinion, esto 
puede afectar el grado en que cambia, por 10 menos inicialmente . La labor fu n-
damental del cliente y el terapeuta es establecer un nivel que sea manejable, que 
el cliente puede lograr con cierto exito. Algunas veces el terapeuta puede encon-
trarse con un cliente que siempre quiere cambiar mas de 10 que puede ser reco-
mendable 0 incluso posible. Como advierten Krumboltz y Thoresen (1976), al-
canzar progresivamente niveJes de cambio tiene un Ifmite (p. 105). Estos autores 
sugieren que, en tales casos, el terapeuta debe tratar de evitar el refuerzo de las 
intenciones perfeccionistas del cliente (p. 104). Ademas, si el nivel que se establece 
es demasiado alto, la conducta deseada puede no presentarse, eliminando asf las 
posibilidades de exito y los consiguientes avances y refuerzos. Brown y Brown 
(1977) recomiendan que, por regia general, es mejor equivocarse por proceder con 
excesiva cautela y establecer niveles demasiado bajos que por establecer niveles 
demasiado altos . 
Una forma de evitar el establecimiento de niveles de logro demasiado altos 0 
demasiado restrictivos consiste en emplear una escala que identifica una serie de 
resultados progresivamente deseados para cada area problematica. Este concepto , 
introducido por Kiresuk y Sherman (1968), se denomina «escala de logro de metas» 
y se ha empleado con mucha frecuencia en las agencias que deben mostrar ciertos 
niveles de logro de los clientes para seguir recibiendo subvenciones. AI establecer 
una escala de logro de metas, el cliente y el terapeuta describen cinco resul tados 
ESTRATEGlAS DE ENTREVISTAS PARA TERAPEUTAS 299 
para un problema dado y los ordenan segun el nivel 0 cantidad de cambio en una 
escala en el siguiente orden (se asigna un valor numerico a cada resultado): el 
resultado menos favorable (- 2), resultado inferior a 10 esperado (-1), resultado 
esperado 0 mas probable (0), resultado mayor de 10 esperado (+ I), resultado mas 
favorable (+ 2). La Tabla 9.1 muestra un ejemplo del uso de esta escala con un 
cliente que sufre colitis uJcerosa. 
Lloyd (1983) presenta una revision de este modelo y presenta tambien otros 
cuatro modelos similares. 
TABL A 9.1. Escala de Logro de Metas para un cIiente con colitis uIcerosa. 
Fecha: 
10/24/73 
Resultado probablemente 
mas desfavorable 
Frecuencia 
de ataques 
de colitis 
Un ataque al dfa 
Menor exito del esperado Uno cada dos dfas 
con la terapia 
Nivel de exito esperado en Uno por semana 
el tratamiento 
M.is exito del esperado con Uno cada dos semanas 
el tratamiento 
Maximo exito esperado con Ninguno al mes 
el tratamiento 
Pruebas de 
hipotesis 
cognitivas 
Toda situaci6n estresante 
de la semana considerada 
como un ataque en sf 
misma 
Una de cada cuatro veces 
par semana se considera 
que la situaci6nestresante 
puede no ser un ataque en 
sf misma. 
Completa las Fases 4 y 5 
del Tratamiento desplII?s de 
cada situaci6n estresante 
Completa a veces las Fases 
4 y 5 del Tratamiento 
durallle las situaciones 
estresantes. 
Completa siempre las Fases 
4 y 5 del tratamiento 
durante las situaciones 
estresantes 
Adaptado de «Behavioral Treatment of mucous colitis» de K.J . Youell & J.P. McCullough. Journal 
of Consulting and Clinical Psychology, 43 , 740-745. Reproducido con permiso. 
Guias para identiflcar el nivel de cambio. Aquf se presentan algunas guias 
que puede emplear para identificar el nivel 0 cantidad de cambio que desea el 
cliente: 
«i,Comparando con el numero de veces que 10 haces ahora, cuantas veces te gustaria hacer 
esto?» . 
«i, Con que frecuencia te gustarfa comportarte asi?» . 
«i,Cuantas veces puedes aumentar esta conducta sin cansarte?» . 
«Dices que quieres perder 20 kilos. Hablemos de la cantidad de tiempo que te parece razonable 
para conseguirlo y para empezar la cantidad que puedes perder facilmente en las proximas 
tres semanas». 
«i, Teniendo en cuenta donde te encuentras ahora, que cantidad de cambio te parece realista?» . 
300 SELECCIONAR Y DEFINIR LOS RESULTADOS DESEADOS 
El terapeuta espera alguna indicacion de los niveles presentes 0 futuros de la 
conducta deseada. Este nivel puede expresarse mediante el numero de veces 0 la 
can tid ad que el cJiente quiere ser capaz de hacer alguna cosa. En algunos casos el 
nivel adecuado puede ser solo uno, como el caso de un cJiente que quiere tomar 
la decision de cambiar de trabajo . EI terapeuta puede ayudar al cliente a establecer 
el nivel adecuado de cambio haciendo referencia a la informacion recogida mediante 
la auto-observacion durante la evaluacion del problema. Si hasta el momenta el 
cJiente no se habia auto-observadoe, en este instante puede ser necesario que observe 
y registre las cantidades presentes de la conducta problema y de la meta deseada. 
Esta informacion proporcionara algunas ideas del nivel actual de la conduct a a las 
que puede referirse como «puntuacion base» 0 «lfnea base». Esta informacion es 
importante porque al establecer el nivel deseado, deberfa contrastarse con el nivel 
presente de conducta(s) manifiesta(s) y encubierta(s). Como puede recordar del 
Capitulo 8, la informacion que obtiene el cJiente es muy valiosa para definir los 
problemas y las metas y para analizar el progreso 0 la mejoria que se realiza en 
direccion a las metas. 
Nivel como indicador del tipo de problema y de meta. EI nivel reflejado en 
la meta deseada refleja tanto el tipo de problema como el tipo de meta. Recuerde 
que anteriormente hemos mencionado que los problemas pueden cJasificarse como 
de eleccion 0 de cambio. En un problema de eleccion, el nivel de la meta refleja 
un conflicto que debe ser resuelto 0 una eleccion 0 decision que debe adoptarse, 
por ejemplo, el cJiente necesita decidir una de tres opciones 0 una de las dos 
direcciones. En un problema de cambio, el nivel reflejado en la meta especifica 
la direccion y el tipo de cambio deseado. En el ejemplo del cJiente que desea ser 
mas asertivo, si el nivel actual de la respuesta especffica de asertividad es de cero, 
entonces la meta sera adquirir alguna destreza asertiva. Cuando la puntuacion de 
base de una conducta es cero, 0 cuando el cJiente parece no disponer de ciertas 
habilidades en su repertorio, la meta se expresa en terminos de adquirir una con-
ducta. Por el contrario, si el cJiente desea incrementar 0 mejorar algo que ya puede 
hacer (pero en niveles bajos), la meta se expresara en terminos de aumento de una 
conducta. Incrementar 0 ~dquirir conductas manifiestas y/o encubiertas en una meta 
que se emplea cuando el problema del cJiente es un deficit de respuestas, 10 que 
significa que la respuesta que nos concieme aparece con una intensidad 0 frecuencia 
insuficientes 0 de forma inadecuada (Gambrill, 1977). Algunas veces un cJiente 
dispone en su repertorio de ciertas conductas manifiestas pero estas se hallan 
enmascaradas 0 inhibidas por ciertos sentimientos, en tales casos la meta ira dirigida 
a los sentimientos mas que la conducta manifiesta. En este instante, el problema 
consiste en una inhibicion de respuestas y consecuentemente la meta ira dirigida 
a desinhibir la respuesta, normalmente trabajando con las reacciones emocionales 
que se interponen en el camino. 
Por el contrario, si el cliente muestra alguna conducta en exceso y desea reducir 
el nivel presente, la meta se expresara en terminos de reduccion de una conducta 
ESTRATEGIAS DE ENTREVISTAS PARA TERAPEUTAS 301 
y posiblemente, mas tarde, de eliminaci6n del repertorio del cliente. Disminuir 0 
eliminar conductas manifiestas y/o encubiertas es una meta cuando el problema 
del cliente es un exceso de respuestas, esto implica que una respuesta aparece con 
demasiada frecuencia, durante excesivo tiempo, con demasiada intensidad 0 en 
contextos social mente inapropiados y que provoca el males tar 0 disgusto del cliente 
o de los otros (Gambrill, 1977). Con los problemas de exceso de respuestas, 
normal mente la problematic a esta originada por la frecuencia 0 can tid ad de la 
respuesta mas que por su forma. Casi siempre es mas facil desarrollar 0 aumentar 
una conducta (adquisici6n 0 incremento de la conducta) que eliminarla 0 disminuirla 
(disminuci6n 0 supresi6n de respuestas). Esta es otra raz6n por la que conviene 
animar a los clientes a que expresen sus metas en terminos positivos . 
Algunas veces, cuando el cJiente desea eliminar algo , quiere sustituir 10 que 
se elimina con otra conducta que considera mas apropiada. Por ejemplo, un cliente 
que desea perder peso trata de sustituir los alimentos de fabricaci6n normal en 
serie por aquellos bajos en calorfas. La meta del cJiente se expresa en terminos de 
«reestructurar» algo en su entomo, en este caso, el tipo de alimentos . Aunque este 
sea un tipo de reestructuraci6n de una conducta manifiesta , tambien puede hacerse 
con cogniciones. Por ejemplo, un cliente quiere eliminar los pensamientos auto-
punitivos , negativos respecto a presentarse a pruebas 0 examenes y los sustituye 
con pensamientos positivos de autorrefuerzo sobre su capacidad de ejecutar ade-
cuadamente estas pruebas. La reestructuraci6n tambien tiene lugar muchas veces 
en las terapias familiares donde se plantean los Ifmites y las alianzas entre los 
diferentes miembros familiares, de tal forma que, por ejemplo, un miembro de la 
periferia se incluye en la familia 0 se rompen los triangulos 0 las alianzas exce-
sivamente fuertes entre dos miembros familiares se reordenan. Reestructurar con-
ductas manifiestas y encubiertas es una meta cuando el problema se debe a la 
ineficacia de las respuestas 0 el control de estfmulos es defectuoso, 10 que significa 
que no existen las condiciones ambientales favorecedoras 0 estas se hallan dis-
puestas de tal forma que imposibilitan 0 dificultan la aparici6n de la conducta 
deseada. 
En algunos momentos, el nivel de una meta refJeja el mantenimiento de una 
respuesta especffica observable 0 encubierta con un nivel de frecuencia medio 0 
bajo las condiciones existentes. Como puede recordar, no todas las metas refJejan 
una discrepancia entre la conduct a presente y la futura. Algunas metas pueden ir 
dirigidas a mantener una situaci6n 0 respuesta satisfactoria. Tales metas pueden 
expresarse como «mantener mi cantidad actual de estudio (tres horas diarias»>, 
«mantener el equilibrio actual entre el trabajo semanal y el ocio durante el fin de 
semana», «mantener el nivel de comunicaci6n positiva que tengo con mi pareja 
en nuestras conversaciones diarias» 0 «mantener el numero de sesiones diarias de 
relajaci6n (dos al dfa)>>. Una meta de mantenimiento sugiere que el nivel de conducta 
presente del cliente es satisfactorio y suficiente, por 10 menos en este momento. 
Una meta de mantenimiento refleja las areas de la vida del cJiente que funcionan 
bien y son necesarias cuando se ha conseguidouna meta de cambio. Por ejemplo, 
si un cJiente quiere perder peso y 10 logra, entonces se debe establecer una meta 
302 SELECCIONAR Y DEFINIR LOS RESULTADOS DESEADOS 
para mantener el peso perdido . A menu do las metas y los program as de mante-
nimiento son mas diffciles de conseguir y requieren mas esfuerzo y planificaci6n 
que los intentos iniciales de cambio . 
En resumen , el nivel de resultado esperado reflejara normal mente una de las 
categorias de problemas y metas que se sintetizan en la Tabla 9.2 . Como la mayoria 
de los clientes adoptan mas que una meta, el objetivo de un cliente puede reflejar 
mas que una de estas direcciones de cambio. Conocer la direcci6n y el nivel de 
cambio definido en las metas del cliente es necesario para seleccionar las estrategias 
terapeuticas. Por ejemplo, la auto-observacion (ver Capitulo 19) se usa de distinta 
forma segun se de see aumentar 0 disminuir una respuesta . Una estrategia terapeutica 
puede emplearse adecuadamente para que el cliente adquiera respuestas y otra 
estrategia puede ser necesaria cuando el proposito es reestructurar las respuestas. 
Es importante que el terapeuta y el cliente dediquen suficiente tiempo para espe-
cificar el nivel deseable de la meta, incluso cuando este proceso parezca diffcil 0 
costoso. 
TABLA 9.2. Categorias de tipos de problemas y metas correspondientes. 
Tipo de problema 
I. Eleccion 
2. Cambio 
A. Deficit de respuestas 
B. Inhibicion de respuestas 
C. Exceso de respuestas 
D. Control inadecuado de estfmulos 
3. Mantenimiento 
Tipo de meta 
Decision entre dos 0 mas alternativas. 
Resolucion de dos 0 mas aspectos 
conflictivos. 
Incremento de respuestas. 
Adquisicion de respuestas. 
Deshinibici6n de respuestas. 
Trabajar las reacciones emocionales. 
Disminucion de respuestas. 
Eliminaci6n de respuestas. 
Reestructuracion de respuestas . 
Mantenimiento de las respuestas con la 
frecuencia y cantidad normales 0 en el 
contexto corriente. 
Identificar y Secuenciar las Submetas y las Fases 
Todos podemos recordar algun momenta de nuestra vida en el que se suponia 
que debiamos aprender algo a tal velocidad que la experiencia de aprendizaje fue 
aplastante y nos produjo sensaciones de frustraci6n, irritaci6n y desanimo. EI 
cambio que implican las metas terapeuticas puede lograrse mejor si el proceso es 
gradual. Cualquier program a de cambio deberia organizarse a modo de «secuencia 
ESTRATEGIAS DE ENTREVlSTAS PARA TERAPEUTAS 303 
ordenada de aprendizaje» que gufe al c1iente a traves de pequenos pasos hasta 
conductas fi nales deseadas (Bandura, 1969, p. 74). Al defi nir las metas, esta 
secuencia de aprendizaje gradual se logra fragmentando la meta final en una serie 
de metas mas reducidas denominadas submetas 0 fases de accion. Las submetas 
ayudan al c1iente a dirigirse hacia la soluci6n del problema de un «modo planifi-
cado» (Dixon & Glover, 1984, p. 136). Las submetas se ordenan normalmente de 
forma jerarquica. Aunque una meta global proporciona una «direcci6n general» 
del cambio , las submetas especfficas pueden determinar las actividades inmediatas 
y el grado de esfuerzo necesario que realiza cada persona (Bandura & Simon , 1977, 
p. 178). Como advierten estos autores, «al centrarse en un futuro distante, es mas 
facil postergar los esfuerzos inmediatos . . . Controlar las conductas manifiestas pre-
sentes aumenta la probabilidad de que se lleven a cabo las intenciones futuras» 
(p. 170). En un estudio de Seidner y Kirschenbaum (1980), se comprob6 que la 
obligacion de identificar las metas se lograba mejor cuando los individuos coincidian 
en participar ellos aspectos c1aves de un programa de cambio que cuando coincidfan 
en las metas distantes 0 a largo plazo. 
Bandura (1969) sugiere que al fragmentar las metas en submetas es mas probable 
producir los resultados deseados por dos razones. En primer lugar, el logro de las 
submetas puede reducir al minimo el numero de experiencias de fracaso. Completar 
con exito las submetas ani mara al c1iente y Ie permitira mantener la motivaci6n 
por el cambio (p . 75). Jeffery (1977) encontro que al aumentar progresivamente 
las submetas se mantiene un nivel alto de motivacion inc1uso cuando los resultados 
finales son diffciles de alcanzar. En segundo lugar, al repartir la meta final en 
submetas, se comprueba que las submetas diarias 0 inmediatas son mas potentes 
que las semanales 0 distantes. 
Las submetas identificadas inc1uyen las conductas manifiestas y las encubiertas 
porque un programa comprensivo implica cambios en los pensamientos, senti-
mientos , conductas manifiestas y situaciones ambientales que vive el c1iente. Las 
submetas se extraen de los enfoques terapeuticos , los procedimientos formales para 
resolver un problema especffico 0 del sentido comun u otros procedimientos in-
formales si no se dispone de estos. En cualquier caso, siempre existen actividades 
que dirigen al c1iente hacia la meta final (Carkhuff & Anthony, 1979) . 
Cuando se han identificado y seleccionado las submetas, estas se orden an 
jerarquicamente, en series de actividades de acuerdo con la complejidad y grado 
de dificultad y la inmediatez de las mismas. Como muchos c1ientes se desmotivan 
con el termino jerarqufa, corrientemente en su lugar solemos emplear el termino 
«pirtimide de metas» y se presenta al cliente una piramide semejante a la inc1uida 
en la Figura 9.3. Una serie de actividades pueden estar constituidas por exigencias 
gradual mente mayores de la misma conducta (abierta 0 encubierta) 0 por muestras 
de diferentes conductas ordenadas desde las respuestas mas simples y faciles hasta 
las mas complejas y diffciles (Gambrill, 1977). El segundo criterio para la orde-
nacion es la inmediatez. Segun este criterio, las submetas se c1asifican en base a 
los requisitos de cada tarea, es decir, que tareas se deben ejecutar en primer lugar 
para posibilitar la ejecucion posterior de otras. 
304 SELECCIONAR Y DEANIR LOS RESULTADOS DESEADOS 
La secuenciacion de las submetas en orden de complejidad se basa en los 
principios del aprendizaje denominados mode/ado y aproximaciones sucesivas. 
Fases en la identilicacion y secuenciacion de submetas. En el proceso de 
identificacion y secuenciacion de submetas podemos encontrar las siguientes fases: 
En primer lugar el cliente identifica la primera fase que debe completar, es 
decir, las primeras tareas que debe ejecutar para dirigirse hacia la meta final. La 
primera fase sera alguna actividad comoda y relativamente facil de conseguir 
(Gambrill, 1977). Como sefialan Carkhuff y Anthony (1979) «La gran mayoria de 
las personas que abandonan los programas de modificacion de conducta 10 hacen 
porque se sienten incapaces de completar la primera fase con exito ... Por el con-
trario, completar con exito la primera fase refuerza invariablemente la determi-
nacion del cliente para continuar con el programa favoreciendo su autoconfianza» 
(pp. 185-186). Si el cliente identifica una accion como la fase inicial pero no puede 
responder afirmativamente las dos siguientes preguntas sugeridas por Carkhuff y 
Anthony, entonces no es una buena idea seleccionar dicha fase como la primera 
y la eleccion requiere un mayor examen y consideracion. Las dos cuestiones son 
«i,Sera capaz tel cliente] de superar con exito la primera fase?» y «i,Conduce este 
primer paso directamente hacia la meta final?» (Carkhuff & Anthony, 1979, 
p. 185). 
En segundo lugar, si el cliente progresa adecuadamente en la primera fase, se 
identifican y clasifican las fases intermedias que hacen de nexo entre la primera y 
la meta terminal. (Si el cliente no consigue la primera fase sera necesario tratar 
este aspecto y considerar la revision de la fase inicial). Las fases intermedias 
efectivas son aquellas que se establecen sobre los recursos y medios que ya dispone 
el cliente, no entran en conflicto con su sistema de valores, se deciden y pertenecen 
al cliente y representan acciones inmediatas, diarias 0 a corto plazo preferentemente(ver tambien Bandura & Simon, 1977; Carkhuff & Anthony, 1979; Gambrill, 
1977). 
No existe ninguna regia infalible respecto al numero de fases intermedias iden-
tificadas, siempre que se asegure que el intervalo entre las fases adyacentes no sea 
demasiado pronunciado. Cada fase sucesiva empieza gradual mente don de finalizo 
la ultima. Los clientes pueden considerar las siguientes dos preguntas para clasificar 
las fases sucesivas intermedias: «i,Donde estare cuando finalice esta fase?» y «i,Cwil 
deberfa ser mi siguiente fase fundamental?» (Carkhuff & Anthony, 1979, p. 184). 
El terapeuta tambien deberia asegurarse de que cada fase intermedia esta constituida 
por una unica accion 0 actividad basica para el cliente; si se implican dos 0 mas 
actividades, normal mente es mejor convertirlas en dos fases separadas (Carkl:iuff & 
Anthony, 1979). 
Como hemos mencionado anteriormente, las fases intermedias se ordenan en 
base a dos aspectos: 
ESTRATEGIAS DE ENTREVISTAS PARA TERAPEUTAS 305 
I. Grado de difieultad y eomplejidad: «i,Cual es mas faeil; emil es mas diffeil?». Las tareas 
menos eomplejas y exigentes se coloean en los primeros lugares. 
2. Inmediatez: «i,Que debo hacer antes de empezar esto?». Los prerrequisitos se colocan antes 
que el resto de las tareas. 
Una vez ordenadas las fases se incIuyen en la pinimide de metas, normalmente 
se escribe con lapicero porque en el proceso de ascenso jerarquico puede ser 
necesario modificar 0 reordenar las submetas. Como seiialan Dixon y Glover, «las 
submetas implican una representacion inicial del problema y el cIiente y/o el 
terapeuta pueden revisarlas segun se van probando las estrategias» (1984, p. 136). 
En tercer lugar, despues de identificar y secuenciar todas las fases, el cIiente 
empieza a poner en pnictica las actividades representadas por cada submeta em-
pezando por la primera y avanzando progresivamente. Normalmente, es conve-
niente no probar una submeta diferente hasta que el cIiente haya completado con 
exito la actividad previa en la pinimide. Los avances realizados en las fases iniciales 
y tambien en los siguientes sue len proporcionar informacion util sobre los intervalos 
entre las fases y sobre la secuenciacion de las mismos. Segun se van logrando las 
metas, estas pasan a formar parte del repertorio del cIiente y pueden ser usadas 
para esfuerzos adicionales de cambio dirigidos hacia la meta final (Schwartz & 
Goldiamond, 1975, p. 117). 
IncIuimos un ejemplo para aclarar el proceso de identificacion y secuenciacion 
de las submetas . Suponga que un cliente desea perder 20 kilos de peso. Perder 20 
kilos no es una meta que se pueda lograr de un dfa para otro 0 sin algunos otros 
pequeiios cambios durante el proceso. En primer lugar, la persona necesitara de-
terminar un nivel de perdida semanal razonable, algo como 1I2 0 1 kilo. A con-
tinuacion usted y el cliente deberan determinar las tareas que necesita completar 
el cliente para perder peso. Estas tareas pueden expresarse a modo de submetas 
que el cIiente puede realizar diariamente , empezando con la submeta inicial, aquella 
que parece ser mas facil y comoda de alcanzarse y segun se vayan completando 
con exito los diferentes pasos y estos se mantienen en el repertorio del cIiente se 
va ascendiendo en la piramide. 
Aunque la perdida de peso puede incIuir otras fases de accion como la modi-
ficacion de los habitos de comida, aumentar la actividad ffsica, reestructurar los 
sistemas de pensamientos y valores, las tareas que escoge un cliente pueden ser 
muy diferentes de las de otro con la misma meta . EI terapeuta deberia prestar 
atencion a tales diferencias y no imponer al cIiente su propio metodo para resolver 
del problema. Del mismo modo, cada cIiente dispondra de una idea diferente de 
como secuenciar mejor sus submetas. En la Figura 9.3 se muestra el ejemplo de 
un cliente particular. EI cIiente opinaba que si aumentaba primero el ejercicio y 
la relajacion, Ie resultarfa mas facil cambiar sus habitos de comida. Para ella 
reestructuracion de los pensamientos sobre sf mismo y su imagen corporal y de-
sarrollar las habilidades sociales para iniciar nuevas relaciones era una submeta 
mas diffcil de conseguir y consecuentemente menos inmediata. Esta ultima meta 
306 SELECCIONAR Y DEFINIR LOS RESULTADOS DESEADOS 
Aumentar 
la cantidad 
(Ie ejercicio diario 
andando como un 
kilometro por dia a 
marcha nip ida. 
I\umentar .las sensaciones ff-
sicas de relajacion en casa y en 
el trabajo con un periodo diario 
de 20 minutos de relajacion. 
Aumentar el tiempo destinado a come 
en 10 minutos masticando lentamente la 
comida, dejando el tenedor entre dos boca-
dos y conversando. 
isminuir los segundos platos de las cenas, recha 
zandolos y levantandose de la mesa cuando se haya 
acabado el primero. 
Incrementar los pensamientos positivos sobre si mismo 
como persona delgada (pensar como 10 haria una persona 
delgada), con tres visualizaciones positivas cada dia. 
Adquirir habilidades de conversacion verbales y no verbales y 
mplearJas para ponerse en contacto con dos personas como minimo 
cada semana. 
Mantener las submetas anteriores durante un periodo de doce meses. 
Meta final: Pensar, sentir y tener el aspecto de una persona delgada perdiendo 20 kilos en 
un perfodo de 12 meses. 
Meta semanal: Pensar, sentir y tener el aspecto de una persona del gada perdiendo 112 kilo 
cada semana. 
FIGURA 9.3. Piramide de submetas para un cliente. 
se consideraba como la mas diffcil porque su peso Ie servia en parte para protegerle 
de las situaciones de angustia social. Una vez que se alcanzan las seis submetas, 
la ultima consiste simplemente en mantener estas acciones durante un periodo de 
12 meses. En la base de la piramide, serfa conveniente discutir con eJ el modo de 
mantener estas submetas durante mas tiempo . Advierta tambien que la meta se 
expresa en terminos positivos: «Quiero sentir, pensar y tener el aspecto de una 
persona del gada» en vez de «No quiero ser gordo». Las submetas implican acciones 
que debe ejecutar para alcanzar el resultado deseado. Advierta que las submetas 
al igual que la meta final se han definido con la conducta que debe modificar, el 
nivel de cambio y las condiciones 0 circunstancias del cambio para que el cliente 
sepa que hacer, d6nde, cuando con quien y cuantas veces 0 con que frecuencia. 
ESTRATEGIAS DE ENTREVISTAS PARA TERAPEUTAS 307 
Guias de entrevista para identiflcar las submetas. Al identificar las submetas 
el terapeuta puede emplear guias similares a las siguientes: 
«i,Exactamente que necesitas hacer para que esta suceda?» . 
«Pensemos en aigunas acciones que puedes ejecutar para que funcione la meta que te has 
marcado». 
«Pertsemos en las fases que necesitas para avanzar desde donde te encuentras en este momenta 
hasta el punta en el que te gustarfa estar». 
EI terapeuta trata de animar al cJiente para que participe y se responsabilice 
del establecimiento de las metas, recordando que los cJientes respetan mas los 
cambios que enos mismos han propuesto. Algunas veces , sin embargo, despues 
de emplear guias como las anteriores el cJiente no es capaz de especificar ninguna 
fase de acci6n 0 submeta necesaria 0 recomendable. En esa situacion el terapeuta 
puede sugerirle que piense en 10 que hacen otras personas con problemas similares 
y que identifique sus estrategias de accion 0 puede proporcionarJe el ejemplo de 
una submeta (Dixon & Glover, 1984). Los terapeutas no proporcionan respuestas 
sino «muestran que siempre existen altemativas» (Dixon & Glover, p. 79). 
Guias de entrevista para secuenciar las metas. Guias generales que se pueden 
emplear para secuenciar y ordenar las submetas son: 
«i, Cual es la primera fase que vas a dar?». 
«i,Que serfas capaz de hacer mas faciimente?». 
«i,Cual serfa la mas diffcil?». 
«i,Que es 10 mas importante para tf?». 
«i,C6mo padrfamas ardenar estas fases para maximizar tu exito y alcanzar la meta?». 
«i,Puedes pensar en algunas casas que debes hacer

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