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Enzimas de restricción Introducción El descubrimiento, la caracterización y el aislamiento de los diferentes tipos de enzimas ha facilitado en la investigación las tareas del estudio de los genomas así como su expresión, su regulación y su posterior correlación con el desarrollo de diversas enfermedades. Hoy por hoy es común la aplicación de técnicas de biología molecular en diversas áreas, y en particular en las ciencias de la salud, ya que han revolucio- nado los métodos analíticos generando gran impacto en la investigación básica y la clínica, especialmente en el diag- nóstico de enfermedades. Las enzimas de restricción son una herramienta primor- dial para la ejecución de diversos ensayos útiles en investiga- ción clínica, desde la determinación de polimorfi smos de longitud de fragmentos de restricción (restriction fragment length polymorphism, RFLP), así como en la construcción de vectores con ADN recombinante y clonación de secuencias de ADN provenientes de humano, virus, bacterias y demás microorganismos de interés para la generación de conoci- miento o para su aplicación en el área de la medicina. Entre las enzimas que modifi can los ácidos nucleicos se encuen- tran las nucleasas, es decir, aquellas capaces de cortar los enlaces fosfodiéster que unen los nucleótidos de una cadena de ácidos nucleicos. Las nucleasas se denominan endonu- cleasas si son capaces de cortar el enlace fosfodiéster en nucleótidos localizados dentro de la cadena del ácido nuclei- co, y reciben el nombre de exonucleasas si cortan los enlaces fosfodiéster de los nucleótidos en los extremos de las cade- nas. Así, existen 3’exonucleasas las que escinden enlaces en el extremo 3’ de la cadena, y 5’exonucleasas que rompen enlaces fosfodiéster en el extremo 5’ de la cadena. Las enzimas de restricción presentan actividad endonu- cleasa, son de origen bacteriano y cortan los enlaces fosfo- diéster del ADN en una secuencia específi ca denominada secuencia diana. El uso de estas enzimas como herramienta biotecnológica surgió de la necesidad de cortar las largas cadenas de ADN genómico para manipularse y analizarse en fragmentos más pequeños. El empleo de las enzimas de restricción y otras enzimas que modifi can ácidos nucleicos, como la ligasa, permitió desarrollar la metodología del ADN recombinante. En 1960, Stewart Linny y Werner Arber aislaron, en E. coli, enzimas que metilaban moléculas de ADN y que ade- mas cortaban un enlace fosfodiéster del ADN no metilado. Más tarde, en 1970, se caracterizó la primera nucleasa de restricción por Daniel Nathans Hamilton Smith, aislada de Haemophilus infl uenzae, denominada Hind I. En la actualidad, se sabe que todas las especies de bacterias sinte- tizan uno o más tipos de endonucleasas capaces de hacer cortes en secuencias específi cas de nucleótidos de una doble cadena de ADN exógeno; generalmente, este ADN “extraño” es el proveniente de los bacteriófagos, virus con capacidad de infectar a dichas bacterias. Estas endonucleasas se denominan enzimas de restric- ción debido a que restringen la permanencia de un ADN exógeno en la célula bacteriana que produce dicha enzima. Las enzimas de restricción empleadas con más frecuencia en la metodología del ADN recombinante suelen reconocer una secuencia única de 4 a 8 nucleótidos, donde realizan el corte. Origen de las enzimas de restricción Las endonucleasas de restricción forman parte de la maqui- naria con la que cuenta la bacteria para defenderse de infec- ciones virales. El ADN de la bacteria que produce la enzima de restricción no se ve afectado por su propia enzima, ya que las bacterias metilan determinadas secuencias a su pro- pio ADN para diferenciarlo del ADN viral por medio de CAPÍTULO 13 • Enzimas de restricción 121 una enzima metiltransferasa en bases específi cas, que gene- ralmente son las reconocidas por sus propias enzimas de restricción. Nomenclatura Por acuerdo internacional, la nomenclatura de las enzimas de restricción se asigna según su origen bacteriano y se defi ne basándose en las siguientes reglas: 1. Tres letras en cursiva que corresponden al nombre científi co de la bacteria de donde fue atraída (p. ej., Escherichia coli (Eco); Haemophilus infl uenzae (Hin), etc.). La primera letra, en mayúscula, corresponde al género; las otras dos, a la especie. 2. La cepa o estirpe, si la hubiese (p. ej., EcoR, aislada de la cepa “RY13” de E. coli). 3. En números romanos, un número para distinguir si hay más de una endonucleasa aislada de esa misma especie (p. ej., EcoRI, EcoRV). 4. Todas deberían indicar con una “R” por restricción o una “M” por metilasa, según la función de la enzima, pero generalmente se omite. Por ejemplo: Hind III: H = genero Haemophilus. in = especie infl uenzae. d = cepa DSM 11121. III = tercera endonucleasa aislada en este organismo. Eco RI: E = género Escherichia. co = especie coli. R = cepa RV 13. I = primera endonucleasa aislada de esta cepa. Clasifi cación de enzimas de restricción De acuerdo a su función las enzimas de restricción se han clasifi cado en tipo I, II, III. Tipo I Las enzimas que pertenecen a este grupo reconocen una secuencia específi ca de nucleótidos y hacen un corte aleato- rio en la doble cadena en cualquier secuencia del ADN y a una distancia aproximada de 1000 pb del sitio de corte; ade- más tienen la función de metilar su propio genoma. Estas enzimas necesitan adenosín trifosfato (ATP) para moverse a lo largo de la molécula de ADN desde el lugar de reconoci- miento hasta el sitio de corte. Tipo II Son enzimas que reconocen secuencias específi cas y hacen el corte de la doble cadena de ADN en el mismo sitio de reconocimiento. Estas enzimas sólo tienen actividad de res- tricción no de metilación y son las utilizadas en ingeniería genética, ya que cortan el ADN en secuencias específi cas reconocidas. Requieren Mg2+ como cofactor y no requieren de ADN. Las secuencias de reconocimiento de estas enzi- mas son palindrómicas, es decir, son secuencias que se leen igual en las dos cadenas de ADN. Por ejemplo: Por ejemplo: 5’ GGATCC 3’GATCC 3’ 3’ CCTAGG 5’CCTAGG 5’ Tipo III Estas enzimas reconocen una secuencia específi ca y cortan el ADN de doble cadena fuera de la secuencia diana (aproxima- damente de 25 a 27 pares de bases corriente abajo del sitio de reconocimiento). Tienen, al igual de las de tipo I, actividad de metilasa y requieren de ATP para desplazarse a lo largo de la molécula de ADN. Las características de los diferentes tipos de enzimas, de restriccioón se resumen en el cuadro 13-1. Aplicaciones de las enzimas de restricción Las enzimas de restricción son una herramienta básica en clonación e ingeniería genética; se utilizan, entre otros fi nes, para hacer mapas de restricción de plásmidos o geno- mas. Un mapa de restricción se defi ne como la serie de frag- mentos que se generan por el corte con determinada(s) enzima(s), específi cos en tamaño (y secuencia) y que per- miten emplearlos para la caracterización de dicho ADN. Esta herramienta es sumamente importante para la clona- ción con vectores. También, en estudios de determinación de polimorfi smos, como la técnica de RFLP , según se pre- sente o no el sitio de corte de una enzima de restricción, se puede establecer la variante alélica, ya que el peso molecu- lar del fragmento o fragmentos de ADN generado(s) permi- tirá la caracterización de la secuencia. Asimismo, la cons- trucción de moléculas de ADN recombinante implica el obvio empleo de las enzimas de restricción para defi nir y delimitar las secuencias que se insertarán en el constructo recombinante. De la misma manera, el corte de ADN genó- Cuadro 13-1. Características de las enzimas de restricción tipo III. Tipo de enzima Gasto energético Sitio de corte en el ADN Actividad de metilasa I ATP Aleatorio, fuera de la secuencia diana. Sí II Específi co, en la secuencia diana. No III ATP Aleatorio, 25 a 27 pares de bases corriente abajo de la secuenciadiana. Sí 122 PARTE II • Metodología del ADN recombinante mico que suele ser, según el organismo, del orden de millo- nes de pb, es más manipulable cuando es digerido por estas enzimas en fragmentos más pequeños. Esto permite un manejo adecuados sin el riesgo de degradacióny manipula- ción lación para la construcción de bibliotecas genómicas, que se discuten en el capítulo de vectores de clonación. Tipos de cortes producidos por las enzimas de restricción Los cortes que realizan las enzimas de restricción sobre la cadena de ADN pueden generar dos estructuras o formas: cohesivas o romas. L os cortes cohesivos, también llamados pegajosos, se generan porque la enzima corta en cada cade- na de ADN entre nucleótidos localizados en posiciones dife- rentes respecto al eje de simetría de la secuencia de diana. Estos cortes generan extremos monocatenarios en un seg- mento de 3 a 5 bases de longitud, por lo que en esta fracción la falta de cadena complementaria facilita su interacción con otro fragmento en monocadena con secuencia complemen- taria, como se muestra en el cuadro 13-2. Los extremos así generados propician la unión específi ca entre segmentos diferentes de ADN, pero cortados por la misma enzima, lo que origina condiciones idóneas de unión específi ca para la producción de ADN recombinante. Los extremos romos se generan porque la enzima corta en ambas cadenas de ADN sobre un mismo eje, por lo que dichos extremos son de doble cadena, y la unión entre fragmentos de ADN con extremos romos es más inespecífi ca, ya que no depende de la complementariedad de regiones monocadena. En la fi gu- ra 13-1 se muestran las enzimas que generan extremos cohesivos o pegajosos (EcoRI, BamHI, HindIII), y en la fi gura 13-2 las enzimas que generan extremos romos (SspI, SmaI). Cuadro 13-2. Cortes cohesivos. Enzima Bacteria origen Secuencia de reconocimiento Productos del corte EcoRI Escherichia coli 5’GAATTC 3’CTTAAG 5’---G AATTC---3’ 3’---CTTAA G---5’ BamHI Bacillus amyloliquefaciens 5’GGATCC 3’CCTAGG 5’---G GATCC---3’ 3’---CCTAG G---5’ HindIII Haemophilus infl uenzae 5’AAGCTT 3’TTCGAA 5’---A AGCTT---3’ 3’---TTCGA A---5’ TaqI Thermus aquaticus 5’TCGA 3’AGCT 5’---T CGA---3’ 3’---AGC T---5’ NotI Nocardia otitidis 5’GCGGCCGC 3’CGCCGGCG 5’---GC GGCCGC---3’ 3’---CGCCGG CG---5’ HinfI Haemophilus infl uenzae 5’GANTC 3’CTNAG 5’---G ANTC---3’ 3’---CTNA G---5’ Sau3A Staphylococcus aureus 5’GATC 3’CTAG 5’--- GATC---3’ 3’---CTAG ---5’ PovII Proteus vulgaris 5’CAGCTG 3’GTCGAC 5’---CAG CTG---3’ 3’---GTC GAC---5 SmaI Serratia marcescens 5’CCCGGG 3’GGGCCC 5’---CCC GGG---3’ 3’---GGG CCC---5’ HaeIII Haemophilus egytius 5’GGCC 3’CCGG 5’---GG CC---3’ 3’---CC GG---5’ AluI Arthrobacter luteus 5’AGCT 3’TCGA 5’---AG CT---3’ 3’---TC GA---5’ EcoRV Escherichia coli 5’GATATC 3’CTATAG 5’---GAT ATC---3’ 3’---CTA TAG---5’ KpnI Klebsiella pneumonia 5’GGTACC 3’CCATGG 5’---GGTAC C---3’ 3’---C CATGG---5’ PstI Providencia stuartii 5’CTGCAG 3’GACGTC 5’---CTGCA G---3’ 3’---G ACGTC---5 SacI Streptomyces achromogenes 5’GAGCTC 3’CTCGAG 5’---GAGCT C---3’ 3’---C TCGAG---5’ SalI Streptomyces albue 5’GTCGAC 3’CAGCTG 5’---G TCGAC---3’ 3’---CAGCT G---5’ SphI Streptomyces phaeochromogenes 5’GCATGC 3’CGTACG 5’---G CATGC---3’ 3’---CGTAC G---5’ XbaI Xanthomonas badrii 5’TCTAGA 3’AGATCT 5’---T CTAGA---3’ 3’---AGATC T---5’ CAPÍTULO 13 • Enzimas de restricción 123 Isoesquizómeros Se denomina isoesquizómeros a las enzimas de restricción obtenidas de diferente especie bacteriana pero que recono- cen la misma secuencia diana de ADN y cortan entre dife- rentes nucleótidos de dicha secuencia (por ejemplo, Asp718 y KpnI). Ambas reconocen la secuencia 5´GGTAC3´ pero ASp718 corta el enlace entre GG mientras KpnI corta entre los nucleótidos AC, como se describe en la fi gura 13-3. Familias de enzimas de restricción Una familia de enzimas de restricción está formada por aquellas que no necesariamente reconocen la misma secuen- cia diana, pero producen extremos cohesivos similares. Un ejemplo de familia es: BamHI y BclII, que reconocen las secuencias diana 5’GGATCC3’ y 5’AGATCT3’, respectiva- mente, pero que generan extremos cohesivos idénticos: 5’GATC3’. BamH I: 5’---G GATCC---3’ 3’---CCTAG G---5’ Bgl II: 5’---A GATCT---3’ 3’---TCTAG C---5’ Esta característica favorece que dos fragmentos corta- dos con estas enzimas puedan recombinarse de manera específi ca gracias a la complementariedad de sus bases en los extremos cohesivos generados, como se muestra en la fi gura 13-4. Figura 13-1. Cortes cohesivos o pegajosos. Figura 13-2. Cortes romos. Figura 13-3. Isoesquizomeros. Figura 13-4. Familias de enzimas. GA A A A CG C T T A AC T T T T G G AG G C C AT G GC C AT C CT AG G C CT A A CG T T G Cortes “cohesivos o pegajosos” EcoRI BamHI G G G A A C C C G G G C C C A AT A ATAT T AT T A TT A A T TA T T G G G C C C G G G C C C SspI Smal G A A CG G C C T T G A A CG G C C T T Asp718 Isoesquizomeros Kpnl G G GA A AA A A C G GG C C C C CT A CG T T T GAC T T T T Bgl II Bam HI 124 PARTE II • Metodología del ADN recombinante Factores que afectan la actividad de las enzimas de restricción Entre los factores que más afectan la actividad de las enzi- mas de restricción se encuentran: • La pureza biológica del ADN. Contaminación de la muestra con otros ADN impide el buen funcionamiento de las enzimas. • Los contaminantes como detergentes y estabilizadores (docedil sulfato de sodio –SDS–, ácido etilendiaminote- traacético –EDTA–), ya que concentraciones elevadas de sales y detergentes inhiben la actividad enzimática. • Modifi caciones en el pH y temperatura de incubación. Variaciones leves en estos parámetros inhiben enorme- mente la actividad de las enzimas. • El grado de metilación del ADN, ya que algunas enzi- mas son inhibidas por metilación en ciertas secuencias. Condiciones de almacenamiento y conservación de las enzimas de restricción Las enzimas de restricción, al igual que muchas otras pro- teínas, pueden disminuir su vida media y en consecuencia su actividad, al ser conservadas y manejadas de forma inadecuada fuera de su rango ideal de temperatura; deben conservarse a -20ºC, así que para evitar su congelamiento y su consecuente pérdida de actividad son diluidas en un volumen determinado de glicerol. Para usarlas se requiere un contenedor que asegure la menor variación de tempera- tura posible. Selección de la enzima de restricción adecuada Todos los organismos cuentan con un mapa de restricción que indica la posición donde se encuentran los sitios de corte para muchas de las enzimas conocidas. Cuando se pretende realizar el corte en un plásmido conocido o comercial, por ejemplo, se revisa el mapa de restricción, el cual ofrece un listado en orden alfabético de las enzimas que son capaces de cortar dicho ADN, el sitio de corte, el tipo de corte, así como el número y tamaño de cada frag- mento generado. En el caso del ADN genómico es necesa- rio conocer la secuencia completa con la que se va a trabajar para conocer los sitios de corte y predecir el número y tamaño de los fragmentos. Se realiza ingresando dicha secuencia a una base de datos especializada para estudios de restricción y, de esta manera, se obtiene un listado de las posibles enzimas que reconocen la secuencia diana. Se elige la enzima tomando en cuenta las características experi- mentales ajustándose al objetivo perseguido. Efi ciencia en el uso de las enzimas de restricción Las hojas de instrucciones o insertos que facilita el provee- dor incluyen las características y descripción de las condi- ciones óptimas de actividad de las enzimas de restricción disponibles comercialmente. Dichas condiciones están ajustadas para el volumen de reacción requerido, de acuer- do a la tecnología que se requiere aplicar. Se debe tener en cuenta la temperatura óptima de acción, presentación comercial de la enzima (unidades de enzimapor microli- tro), tiempo de incubación, así como los posibles requeri- mientos de aditivos, como albúmina, ATP, etcétera. Cantidad de enzima adecuada para un ensayo La cantidad de enzima utilizada en una reacción dependerá de la concentración de ADN en la muestra a digerir. La con- centración de la enzima está descrita en la hoja de instruc- ciones del proveedor, como unidades por microlitro (u/μl). Una unidad de enzima se defi ne como la cantidad de enzi- ma requerida para producir la digestión completa de un microgramo de ADN sustrato en 60 minutos a la tempera- tura óptima de acción de la enzima. El tiempo de incuba- ción de la reacción puede ser incrementado si la enzima utilizada está cerca de su fecha de caducidad y su actividad está mermando. Sin embargo, el tiempo no debe incremen- tarse demasiado, pues aunque el ADN es una molécula resistente, se corre el riesgo de su degradación. 1. ¿Cuáles son las condiciones de almacén y conservación de las enzimas de restricción? 2. ¿Cómo se determina la enzima de restricción ideal para realizar un corte en una secuencia específi ca de ADN? 3. ¿Cómo se logra la mayor efi ciencia en la actividad de las enzimas de restricción? 4. ¿Cómo se determina la cantidad de enzima de restricción para un ensayo? 5. ¿Aumenta la efi ciencia de la actividad de restricción si se rebasa el tiempo recomendado de incubación? Preguntas de repaso CAPÍTULO 13 • Enzimas de restricción 125 Instrucciones: A continuación se presenta la secuencia de ADN de un plásmido que consta de 4650 pares de bases. 1. Identifi que los sitios de restricción en la cadena en base a la secuencia de nucleótidos de las siguientes enzimas de restricción. AatII: 5’ G A C G T--C 3’ BspHI: 5’ T--C A T G A 3’ 1 CCTGCAGGCA GCTGCGCGCT CGCTCGCTCA CTGAGGCCGC CCGGGCAAAG 51 CCCGGGCGTC GGGCGACCTT TGGTCGCCCG GCCTCAGTGA GCGAGCGAGC 101 GCGCAGAGAG GGAGTGGCCA ACTCCATCAC TAGGGGTTCC TGCGGCCGCA 151 CGCGTGGAGC TAGTTATTAA TAGTAATCAA TTACGGGGTC ATTAGTTCAT 201 AGCCCATATA TGGAGTTCCG CGTTACATAA CTTACGGTAA ATGGCCCGCC 251 TGGCTGACCG CCCAACGACC CCCGCCCATT GACGTCAATA ATGACGTATG 301 TTCCCATAGT AACGTCAATA GGGACTTTCC ATTGACGTCA ATGGGTGGAG 351 TATTTACGGT AAACTGCCCA CTTGGCAGTA CATCAAGTGT ATCATATGCC 401 AAGTACGCCC CCTATTGACG TCAATGACGG TAAATGGCCC GCCTGGCATT 451 ATGCCCAGTA CATGACCTTA TGGGACTTTC CTACTTGGCA GTACATCTAC 501 GTATTAGTCA TCGCTATTAC CATGGTGATG CGGTTTTGGC AGTACATCAA 551 TGGGCGTGGA TAGCGGTTTG ACTCACGGGG ATTTCCAAGT CTCCACCCCA 601 TTGACGTCAA TGGGAGTTTG TTTTGCACCA AAATCAACGG GACTTTCCAA 651 AATGTCGTAA CAACTCCGCC CCATTGACGC AAATGGGCGG TAGGCGTGTA 701 CGGTGGGAGG TCTATATAAG CAGAGCTCGT TTAGTGAACC GTCAGATCGC 751 CTGGAGACGC CATCCACGCT GTTTTGACCT CCATAGAAGA CACCGGGACC 801 GATCCAGCCT CCGCGGATTC GAATCCCGGC CGGGAACGGT GCATTGGAAC 851 GCGGATTCCC CGTGCCAAGA GTGACGTAAG TACCGCCTAT AGAGTCTATA 901 GGCCCACAAA AAATGCTTTC TTCTTTTAAT ATACTTTTTT GTTTATCTTA 951 TTTCTAATAC TTTCCCTAAT CTCTTTCTTT CAGGGCAATA ATGATACAAT 1001 GTATCATGCC TCTTTGCACC ATTCTAAAGA ATAACAGTGA TAATTTCTGG 1051 GTTAAGGCAA TAGCAATATT TCTGCATATA AATATTTCTG CATATAAATT 1101 GTAACTGATG TAAGAGGTTT CATATTGCTA ATAGCAGCTA CAATCCAGCT 1151 ACCATTCTGC TTTTATTTTA TGGTTGGGAT AAGGCTGGAT TATTCTGAGT 1201 CCAAGCTAGG CCCTTTTGCT AATCATGTTC ATACCTCTTA TCTTCCTCCC 1251 ACAGCTCCTG GGCAACGTGC TGGTCTGTGT GCTGGCCCAT CACTTTGGCA 1301 AAGAATTGGG ATTCGAACAT CGATTGAATT CCCCGGGGAT CCTCTAGAGT 1351 CGACCTGCAG AAGCTTGCCT CGAGCAGCGC TGCTCGAGAG ATCTACGGGT 1401 GGCATCCCTG TGACCCCTCC CCAGTGCCTC TCCTGGCCCT GGAAGTTGCC 1451 ACTCCAGTGC CCACCAGCCT TGTCCTAATA AAATTAAGTT GCATCATTTT 1501 GTCTGACTAG GTGTCCTTCT ATAATATTAT GGGGTGGAGG GGGGTGGTAT 1551 GGAGCAAGGG GCAAGTTGGG AAGACAACCT GTAGGGCCTG CGGGGTCTAT 1601 TGGGAACCAA GCTGGAGTGC AGTGGCACAA TCTTGGCTCA CTGCAATCTC 1651 CGCCTCCTGG GTTCAAGCGA TTCTCCTGCC TCAGCCTCCC GAGTTGTTGG 1701 GATTCCAGGC ATGCATGACC AGGCTCAGCT AATTTTTGTT TTTTTGGTAG 1751 AGACGGGGTT TCACCATATT GGCCAGGCTG GTCTCCAACT CCTAATCTCA 1801 GGTGATCTAC CCACCTTGGC CTCCCAAATT GCTGGGATTA CAGGCGTGAA 1851 CCACTGCTCC CTTCCCTGTC CTTCTGATTT TGTAGGTAAC CACGTGCGGA 1901 CCGAGCGGCC GCAGGAACCC CTAGTGATGG AGTTGGCCAC TCCCTCTCTG 1951 CGCGCTCGCT CGCTCACTGA GGCCGGGCGA CCAAAGGTCG CCCGACGCCC 2001 GGGCTTTGCC CGGGCGGCCT CAGTGAGCGA GCGAGCGCGC AGCTGCCTGC 2051 AGGGGCGCCT GATGCGGTAT TTTCTCCTTA CGCATCTGTG CGGTATTTCA 2101 CACCGCATAC GTCAAAGCAA CCATAGTACG CGCCCTGTAG CGGCGCATTA Ejercicios de integración 2151 AGCGCGGCGG GTGTGGTGGT TACGCGCAGC GTGACCGCTA CACTTGCCAG 2201 CGCCCTAGCG CCCGCTCCTT TCGCTTTCTT CCCTTCCTTT CTCGCCACGT 2251 TCGCCGGCTT TCCCCGTCAA GCTCTAAATC GGGGGCTCCC TTTAGGGTTC 2301 CGATTTAGTG CTTTACGGCA CCTCGACCCC AAAAAACTTG ATTTGGGTGA 2351 TGGTTCACGT AGTGGGCCAT CGCCCTGATA GACGGTTTTT CGCCCTTTGA 2401 CGTTGGAGTC CACGTTCTTT AATAGTGGAC TCTTGTTCCA AACTGGAACA 2451 ACACTCAACC CTATCTCGGG CTATTCTTTT GATTTATAAG GGATTTTGCC 2501 GATTTCGGCC TATTGGTTAA AAAATGAGCT GATTTAACAA AAATTTAACG 2551 CGAATTTTAA CAAAATATTA ACGTTTACAA TTTTATGGTG CACTCTCAGT 2601 ACAATCTGCT CTGATGCCGC ATAGTTAAGC CAGCCCCGAC ACCCGCCAAC 2651 ACCCGCTGAC GCGCCCTGAC GGGCTTGTCT GCTCCCGGCA TCCGCTTACA 2701 GACAAGCTGT GACCGTCTCC GGGAGCTGCA TGTGTCAGAG GTTTTCACCG 2751 TCATCACCGA AACGCGCGAG ACGAAAGGGC CTCGTGATAC GCCTATTTTT 2801 ATAGGTTAAT GTCATGATAA TAATGGTTTC TTAGACGTCA GGTGGCACTT 2851 TTCGGGGAAA TGTGCGCGGA ACCCCTATTT GTTTATTTTT CTAAATACAT 2901 TCAAATATGT ATCCGCTCAT GAGACAATAA CCCTGATAAA TGCTTCAATA 2951 ATATTGAAAA AGGAAGAGTA TGAGTATTCA ACATTTCCGT GTCGCCCTTA 3001 TTCCCTTTTT TGCGGCATTT TGCCTTCCTG TTTTTGCTCA CCCAGAAACG 3051 CTGGTGAAAG TAAAAGATGC TGAAGATCAG TTGGGTGCAC GAGTGGGTTA 3101 CATCGAACTG GATCTCAACA GCGGTAAGAT CCTTGAGAGT TTTCGCCCCG 3151 AAGAACGTTT TCCAATGATG AGCACTTTTA AAGTTCTGCT ATGTGGCGCG 3201 GTATTATCCC GTATTGACGC CGGGCAAGAG CAACTCGGTC GCCGCATACA 3251 CTATTCTCAG AATGACTTGG TTGAGTACTC ACCAGTCACA GAAAAGCATC 3301 TTACGGATGG CATGACAGTA AGAGAATTAT GCAGTGCTGC CATAACCATG 3351 AGTGATAACA CTGCGGCCAA CTTACTTCTG ACAACGATCG GAGGACCGAA 3401 GGAGCTAACC GCTTTTTTGC ACAACATGGG GGATCATGTA ACTCGCCTTG 3451 ATCGTTGGGA ACCGGAGCTG AATGAAGCCA TACCAAACGA CGAGCGTGAC 3501 ACCACGATGC CTGTAGCAAT GGCAACAACG TTGCGCAAAC TATTAACTGG 3551 CGAACTACTT ACTCTAGCTT CCCGGCAACA ATTAATAGAC TGGATGGAGG 3601 CGGATAAAGT TGCAGGACCA CTTCTGCGCT CGGCCCTTCC GGCTGGCTGG 3651 TTTATTGCTG ATAAATCTGG AGCCGGTGAG CGTGGGTCTC GCGGTATCAT 3701 TGCAGCACTG GGGCCAGATG GTAAGCCCTC CCGTATCGTA GTTATCTACA 3751 CGACGGGGAG TCAGGCAACT ATGGATGAAC GAAATAGACA GATCGCTGAG 3801 ATAGGTGCCT CACTGATTAA GCATTGGTAA CTGTCAGACC AAGTTTACTC 3851 ATATATACTT TAGATTGATT TAAAACTTCA TTTTTAATTT AAAAGGATCT 3901 AGGTGAAGAT CCTTTTTGAT AATCTCATGA CCAAAATCCC TTAACGTGAG 3951 TTTTCGTTCC ACTGAGCGTC AGACCCCGTA GAAAAGATCA AAGGATCTTC 4001 TTGAGATCCT TTTTTTCTGC GCGTAATCTG CTGCTTGCAA ACAAAAAAAC 4051 CACCGCTACC AGCGGTGGTT TGTTTGCCGG ATCAAGAGCT ACCAACTCTT 4101 TTTCCGAAGG TAACTGGCTT CAGCAGAGCG CAGATACCAA ATACTGTCCT 4151 TCTAGTGTAG CCGTAGTTAG GCCACCACTT CAAGAACTCT GTAGCACCGC 4201 CTACATACCT CGCTCTGCTA ATCCTGTTAC CAGTGGCTGC TGCCAGTGGC 4251 GATAAGTCGT GTCTTACCGG GTTGGACTCA AGACGATAGT TACCGGATAA 4301 GGCGCAGCGG TCGGGCTGAA CGGGGGGTTC GTGCACACAG CCCAGCTTGG 4351 AGCGAACGAC CTACACCGAA CTGAGATACC TACAGCGTGA GCTATGAGAA 4401 AGCGCCACGC TTCCCGAAGG GAGAAAGGCG GACAGGTATC CGGTAAGCGG 4451 CAGGGTCGGA ACAGGAGAGC GCACGAGGGA GCTTCCAGGG GGAAACGCCT 4501 GGTATCTTTA TAGTCCTGTC GGGTTTCGCC ACCTCTGACT TGAGCGTCGA 4551 TTTTTGTGAT GCTCGTCAGG GGGGCGGAGC CTATGGAAAA ACGCCAGCAA 4601 CGCGGCCTTT TTACGGTTCC TGGCCTTTTG CTGGCCTTTT GCTCACATGT 126 PARTE II • Metodología del ADN recombinante 2. En el siguiente esquema, determine los pares de bases de los fragmentos resultantes después del corte y complete el mapa de restricción del plásmido. 3. El corte con las siguientes enzimas de restricción genera fragmentos de ADN los cuales serán analizados mediante electro- foresis en gel. Indique de manera aproximada de acuerdo a su peso molecular las bandas que estos segmentos de ADN generarían.Glick B.R., Pasternak J.J. Molecular biotechnology, principles and applications of recombinant ADN, 2ª ed. Washington: ASM Press, 1998. Lewin B. Genes VIII, 8ª ed. Upper Saddle River, Nueva Jersey: Pear- son/Prentice-Hall, 2004. Nelson D., Cox M. Lehninger Principles of Biochemistry, 4ª ed. Nueva York: Freeman, 2005. Smith C.A., Wood E.J. Biología molecular y biotecnología. México, DF: Addison Wesley Longman, 1998. Bibliografía 4650 bp a d c e b 4000 p.b. 3000 p.b. 1000 p.b. 500 p.b. 250 p.b. 100 p.b. 2000 p.b. AatIIMarcador AatII + BsphIBsphI
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