Asignación X Foucault Armando Ordosgoite

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IUSPO Los Teques, 21 de junio de 2023
Educación Mención Filosofía
Filosofía Contemporánea II
PÉREZ Germán ORDOSGOITE Armando
Michel Foucault (1926-1984)
Vigilar y Castigar es la obra escrita por el pensador francés Michel Foucault, publicada
en 1975.
Esta obra, a través de un estudio del derecho penal, y concretamente del régimen
penitenciario del siglo XVIII hasta el siglo XIX, estudia la presencia de las relaciones de
poder y formas de control en nuestra sociedad. Esta obra esta dividad en cuatro partes:
Suplicio, Castigo, Disciplina y Prisión.
Lo que a continuación se expone, corresponde a la primera parte de la obra (Suplicio),
discutida durante la anterior sesión de clase.
Según Foucault, desde la Edad Media el suplicio era un riguroso modelo de
demostración penal, cuyo objetivo era el de manifestar la verdad que se había obtenido
gracias al resto del proceso penal y que hacía del culpable el pregonero de su propia condena
al llevar el castigo físicamente sobre su propio cuerpo.
Además, el suplicio, según Foucault, también consistía en un ritual político, ya que en
el derecho de la Edad Antigua el crimen suponía, sobre todo, un ataque al soberano, que era
aquel del que emanaba la ley.
Por tanto, la pena no solo debía reparar el daño que se había cometido, sino que suponía
también una venganza a la ofensa que se había hecho al Rey.
De lo antes expuesto, es ejemplo la condena de Damiens el 2 de marzo de 1757, de la
cual el Foucault hace un escalofriante descripción.
Sin embargo, entre los siglos XVII y XIX comienzan a desaparecer los suplicios, debido
básicamente a dos procesos.
Pues, la desaparición del espectáculo punitivo, pues, los días de ejecución y de suplicio
eran momentos propicios para que se cometieran desórdenes entre el público.
Además, con frecuencia el condenado llegaba a convertirse en objeto de admiración.
A partir del siglo XIX, el castigo pasa a ser la parte más oculta del proceso penal.
https://es.wikipedia.org/wiki/Michel_Foucault
https://es.wikipedia.org/wiki/Michel_Foucault
https://es.wikipedia.org/wiki/Edad_Media
https://es.wikipedia.org/wiki/Tormento_(tortura)
https://es.wikipedia.org/wiki/Proceso_penal
https://es.wikipedia.org/wiki/Culpabilidad
https://es.wikipedia.org/wiki/Ritual
https://es.wikipedia.org/wiki/Derecho
https://es.wikipedia.org/wiki/Ley
https://es.wikipedia.org/wiki/Pena
https://es.wikipedia.org/wiki/Da%C3%B1o_(Derecho)
https://es.wikipedia.org/wiki/Monarca
https://es.wikipedia.org/wiki/Siglo_XVII
https://es.wikipedia.org/wiki/Siglo_XIX
https://es.wikipedia.org/wiki/Tormento_(tortura)
https://es.wikipedia.org/wiki/Proceso_penal
El relajamiento de la acción sobre el cuerpo del delincuente, aunque las nuevas penas
(trabajos forzados, prisión, etc.,) también son físicas, el cuerpo se toma en ellas como un
medio para privar al delincuente de la libertad.
El objeto de la operación punitiva deja de ser fundamentalmente el cuerpo y pasa a ser el
alma.
Entonces, deja de juzgarse simplemente un hecho delictivo para pasar a juzgarse toda
una serie de pasiones, instintos, anomalías, inadaptaciones, etc., con las que se califica a los
individuos o delincuentes.
Estas críticas, según mi parecer, se basan sobre todo en el concepto de humanidad como
algo que se debe respetar incluso en el peor de los asesinos; estas críticas esconden algo más
profundo, la búsqueda de una nueva economía del castigo.
Foucault, cita el reglamento para la Casa de jóvenes delincuentes de París redactada por
Léon Faucher. Esto, según mi parecer, pone de manifiesto lo antes expuesto.
El castigo ya no puede concebirse como una venganza, sino que se justifica a partir de la
defensa de la sociedad y de su utilidad para el cuerpo social.
Siguiendo el contexto histórico en el que se haya inserto Foucault, a partir del
siglo XVIII hay un descubrimiento de técnicas que permiten un control minucioso del cuerpo
y le imponen docilidad y que se recogen en reglamentos militares, escolares y hospitalarios.
Foucault, en su obra, denomina a estas técnicas como disciplinas.
Las disciplinas basan su éxito en la utilización de instrumentos simples; por ejemplo, “a
las siete y media en verano, y a las ocho y media en invierno, los presos deben hallarse en
sus celdas, después de lavarse las manos y de haber pasado la inspección de las ropas hecha
en los patios. Al primer redoble de tambor, desnudarse, y al segundo, acostarse. Se cierran
las puertas de las celdas y los vigilantes hacen la ronda por los corredores, para cerciorarse
del orden y del silencio” (Foucault, s.f, p. 9). Esto es lo que según mi parecer, se puede
denominar como vigilancia jerárquica.
Otros intrumentos que Foucault pone de manifiesto en su obra es el trabajo y la escuela,
toda esta disciplina está sometida bajo la observancia de un reglamento.
Con todo lo antes expuesto, y, a manera de conclusión, es posible responder las
siguientes cuestiones:
https://es.wikipedia.org/wiki/Trabajos_forzados_(pena)
https://es.wikipedia.org/wiki/Prisi%C3%B3n
https://es.wikipedia.org/wiki/Delito
https://es.wikipedia.org/wiki/Castigo
https://es.wikipedia.org/wiki/Disciplina
https://es.wikipedia.org/wiki/Disciplina
¿A quién favorece el trabajo de los presos?
El trabajo, en la obra de Foucault, puede ser considerado como método de rehabilitación
social y de desarrollo productivo para la nación.
Además, como un modo en el que el sujeto se reivindica con la sociedad por las faltas
que este ha cometido y con las que ha perjudicado al colectivo social.
Según mi parecer, existe un doble beneficio: el primero es para la sociedad y el segundo
es para el sujeto privado de libertad. Pues, tal beneficio radica en que el sujeto se corrige
asimismo mediante el agotamiento de sus fuerzas por causas de sus faltas y delitos. Esto no
es más que una modificación de la propia conducta coaccionada por el estado.
¿Para que reciben los presos educación?
En el contexto en el que me he referido anteriormente, la educación es la herramienta
más adecuada para lograr un proceso formativo susceptible de producir cambios en las
actitudes. La educación contribuye al proceso de integración social.
¿Por qué se inspecciona la ropa de los presos?
La respuesta a ello está en la prevención. Según mi parecer, es una forma de controlar a
los presos y evitar que se comuniquen entre ellos o que ocultan objetos que puedan ser
utilizados para escapar o para cometer actos delictivos. Esto se refuerza con la vigilancia
jerárquica de la que me he referido anteriormente.
¿Por qué los vigilantes deben cerciorarse del orden y el silencio?
Podría decirse que es una forma de control y coacción.
En definitiva, Foucault, en la primera parte de su obra que se refiere al Suplicio, señala el
paso de una forma de pena medieval a otra moderna.
Pues, como hemos visto, la primera, se encuentra caracterizada por ser aplicada en forma
de suplicio, sobre el cuerpo y de manera pública.
Por el contrario, la segunda, reviste la característica de ser implementada como castigo
reformador, en la conducta del detenido y de manera privada, es decir, en prisiones alejadas
de la vista del público.
Referencias
Foucault, M. (s.f). Vigilar y castigar, el nacimiento de la prisión. Buenos Aires, Argentina:
Siglo veintiuno editores.