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A su vez estas dos porciones se vuelven a unir para originar un nuevo orden de fibras que se distribuyen esquemáticamente como sigue: a) un plexo que sigue al territorio de la coronaria derecha; b) un plexo que sigue al territorio de la coronaria izquierda; c) un plexo que se continúa en la cara posterior entre los pedículos venosos de las cavas y pulmonares. Estos filetes, que contienen fibras simpáticas y parasimpáticas, penetran en las paredes musculares por medio de ramas que quedan en el epicardio, ramas que avanzan hasta el miocardio y ramas que llegan al endocardio. Si bien la distribución nerviosa en el corazón es compleja y es casi imposible (además de innecesario) sistematizarla en detalle, pueden dividirse territorios nerviosos, principal-mente por los ramos de los neumogástricos y los de los ganglios estrellados. Las fibras del lado derecho inervan principalmente al nódulo sinusal y las fibras del lado izquierdo lo hacen con el nódulo AV. Con relación a la predominancia de los sistemas en la distribución nerviosa, las aurículas y la unión AV poseen mayor número de fibras parasimpáticas, mientras que en los ventrículos predominan las fibras simpáticas. Fibras eferentes cardíacas: El doble sentido de la inervación es una de las características de este sistema. Los nervios que llegan al corazón no sólo ejercen su función sobre él (ver Hanatomía funcionalH) sino que llevan al tronco del encéfalo datos precisos acerca del estado de estiramiento del músculo (información propiocetiva). Esta información sale del corazón a través de unas fibras conocidas como fibras C, que son amielínicas y que llegan al ganglio estrellado sin hacer sinapsis en él; por el rami comunicante blanco van a la médula y de allí al centro bulbar. Estas eferencias también tienen implicancia en la percepción del dolor cardiogénico. Si bien el músculo cardíaco no posee inervación sensitiva, como si la posee el pericardio, algunas circunstancias tales como los dolores causados por ataques coronarios, pueden ser transmitidos por estas fibras y hacerse conscientes. Además juegan un importante papel en el mantenimiento de la tensión arterial. 87
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