La paz de Cristo pone fin a las enemistades

Vista previa del material en texto

2/11/23, 23:15 La paz de Cristo pone f in a las enemistades
https://w w w.churchof jesuschrist.org/study/general-conference/2021/10/43renlund?lang=spa 1/6
La paz de Cristo pone �n a las enemistades
Por el élder Dale G. Renlund
Del Cuórum de los Doce Apóstoles
Cuando el amor de Cristo envuelve nuestra vida, tratamos los desacuerdos con mansedumbre,
paciencia y bondad.
Mis queridos hermanos y hermanas, durante una prueba de esfuerzo, el trabajo del corazón
aumenta. Los corazones que pueden resistir caminar tal vez tengan di�cultades para soportar las
exigencias de correr cuesta arriba. De esa manera, la prueba de esfuerzo puede revelar una
enfermedad preexistente que de otra manera no se detecta. Entonces, cualquier problema que se
localice se puede tratar antes de que cause problemas graves en la vida diaria.
La pandemia del COVID-19 ¡ciertamente ha sido una prueba de esfuerzo mundial! La prueba ha
revelado resultados mixtos; se han desarrollado vacunas seguras y e�caces1. Profesionales médicos,
maestros, cuidadores y demás personas se han sacri�cado heroicamente y continúan haciéndolo.
Muchas personas han demostrado generosidad y bondad, y continúan haciéndolo. Sin embargo, se
han manifestado desventajas subyacentes. Las personas vulnerables han sufrido y continúan
sufriendo. Se debe alentar y agradecer a quienes trabajan para tratar esas desigualdades básicas.
La pandemia es también una prueba de esfuerzo espiritual para la Iglesia del Salvador y sus
miembros. Los resultados también son mixtos. Nuestras vidas han sido bendecidas al ministrar de
una “manera más elevada y más santa”2 , por el plan de estudios Ven, sígueme y por el aprendizaje
del Evangelio centrado en el hogar y apoyado por la Iglesia. Muchos han brindado ayuda y
consuelo compasivos durante estos tiempos difíciles y continúan haciéndolo3.
Sin embargo, en algunos casos, la prueba de esfuerzo espiritual ha mostrado tendencias hacia la
contención y la división. Eso indica que tenemos trabajo que hacer para cambiar nuestro corazón y
unirnos como verdaderos discípulos del Salvador. Este no es un desafío nuevo, pero es de suma
importancia4.
Cuando el Salvador visitó a los ne�tas, enseñó: “… no habrá disputas entre vosotros […]. [A]quel
que tiene el espíritu de contención no es mío, sino es del diablo, que es el padre de la contención, y
él irrita los corazones de los hombres, para que contiendan con ira unos con otros”5. Cuando
contendemos unos con otros con ira, Satanás se ríe y el Dios del cielo llora6.
Satanás se ríe y Dios llora por al menos dos razones. Primero, la contención debilita nuestro
testimonio colectivo al mundo sobre Jesucristo y la redención que se recibe por medio de Sus
“méritos […], misericordia, y gracia”7. El Salvador dijo: “Un mandamiento nuevo os doy: Que os
améis unos a otros […]. En esto conocerán todos que sois mis discípulos, si tenéis amor los unos
por los otros”8. Lo contrario también es cierto: todo el mundo sabe que no somos discípulos de Él
cuando no demostramos amor unos por los otros. Su obra de los últimos días se ve comprometida
https://twitter.com/intent/tweet?text=La%20paz%20de%20Cristo%20pone%20fin%20a%20las%20enemistades&url=https%3A%2F%2Fwww.churchofjesuschrist.org%2Fstudy%2Fgeneral-conference%2F2021%2F10%2F43renlund%3Flang%3Dspa
https://www.facebook.com/sharer/sharer.php?u=https%3A%2F%2Fwww.churchofjesuschrist.org%2Fstudy%2Fgeneral-conference%2F2021%2F10%2F43renlund%3Flang%3Dspa
https://wa.me/?text=La%20paz%20de%20Cristo%20pone%20fin%20a%20las%20enemistades%20-%20https%3A%2F%2Fwww.churchofjesuschrist.org%2Fstudy%2Fgeneral-conference%2F2021%2F10%2F43renlund%3Flang%3Dspa
mailto:?body=https%3A%2F%2Fwww.churchofjesuschrist.org%2Fstudy%2Fgeneral-conference%2F2021%2F10%2F43renlund%3Flang%3Dspa&subject=La%20paz%20de%20Cristo%20pone%20fin%20a%20las%20enemistades
2/11/23, 23:15 La paz de Cristo pone f in a las enemistades
https://w w w.churchof jesuschrist.org/study/general-conference/2021/10/43renlund?lang=spa 2/6
cuando existe contención o enemistad9 entre Sus discípulos10. En segundo lugar, la contención es
espiritualmente malsana para nosotros como personas. Se nos priva de la paz, del gozo y del
descanso, y nuestra capacidad de sentir el Espíritu se pone en riesgo.
Jesucristo explicó que Su doctrina no era “agitar con ira el corazón de los hombres, el uno contra
el otro; antes bien [Su] doctrina es […] que se acaben tales cosas”11. Si soy rápido para ofenderme
o responder a las diferencias de opinión enojándome o juzgando, “fallo” la prueba de esfuerzo
espiritual. Esta prueba fallida no signi�ca que yo no tenga remedio; más bien, señala que necesito
cambiar, y es bueno saberlo.
Después de la visita del Salvador a las Américas, la gente se uni�có; “no había contención en toda
la tierra”12 . ¿Creen que la gente estaba unida porque todos eran iguales o porque no tenían
diferencias de opinión? Lo dudo. En cambio, la contención y la enemistad desaparecieron porque
colocaron su discipulado del Salvador por encima de todo. Sus diferencias no se comparaban al
amor que compartían por el Salvador y estaban unidos como “herederos del reino de Dios”13. El
resultado fue que “no podía haber un pueblo más dichoso […] cread[o] por la mano de Dios”14.
La unidad requiere esfuerzo15 y se desarrolla cuando cultivamos el amor de Dios en nuestros
corazones16 y nos centramos en nuestro destino eterno17. Estamos unidos por nuestra identidad
primaria común como hijos de Dios18 y nuestro compromiso con las verdades del Evangelio
restaurado. A su vez, nuestro amor por Dios y nuestro discipulado de Jesucristo generan una
preocupación genuina por los demás; valoramos el caleidoscopio de las características, perspectivas
y talentos de los demás19. Si no podemos colocar nuestro discipulado de Jesucristo por encima de
los intereses y puntos de vista personales, debemos volver a examinar nuestras prioridades y
cambiar.
Podríamos sentirnos inclinados a decir: “¡Por supuesto que podemos tener unidad, si tan solo
estuvieras de acuerdo conmigo!”. Un mejor método es preguntar: “¿Qué puedo hacer para fomentar
la unidad? ¿Cómo puedo responder para ayudar a esta persona a acercarse a Cristo? ¿Qué puedo
hacer para disminuir la contención y edi�car una comunidad de la Iglesia que sea compasiva y
solidaria?”.
Cuando el amor de Cristo envuelve nuestra vida2 0, tratamos los desacuerdos con mansedumbre,
paciencia y bondad2 1. Nos preocupamos menos por nuestra propia susceptibilidad y más por la de
nuestro prójimo. Nosotros “trata[mos] de moderar y uni�car”2 2 . No nos inmiscuimos en
“cont[iendas] sobre opiniones”, no juzgamos a aquellos con quienes no estamos de acuerdo ni
tratamos de hacerles tropezar2 3. En cambio, suponemos que aquellos con quienes estamos en
desacuerdo están haciendo lo mejor que pueden con sus experiencias de vida.
Mi esposa ejerció la abogacía durante más de veinte años. Como abogada, a menudo trabajaba
con otras personas que defendían categóricamente puntos de vista opuestos. No obstante, aprendió
a estar en desacuerdo sin ser maleducada o enojarse. Podría decirle al abogado de la contraparte:
“Está claro que en este tema no vamos a ponernos de acuerdo. Usted me agrada; respeto su opinión
y espero que usted pueda ofrecerme esa misma cortesía”. A menudo, eso daba lugar al respeto
mutuo e incluso a la amistad a pesar de las diferencias.
Incluso los que una vez fueron enemigos pueden unirse en su discipulado del Salvador2 4. En 2006
asistí a la dedicación del Templo de Helsinki, Finlandia, para honrar a mi padre y a mis abuelos,
quienes habían sido de los primeros conversos de la Iglesia en Finlandia. Los �nlandeses, incluido
2/11/23, 23:15 La paz de Cristo pone f in a las enemistades
https://w w w.churchof jesuschrist.org/study/general-conference/2021/10/43renlund?lang=spa 3/6
mi padre, habían soñado con un templo en Finlandia durante décadas. En ese momento, el Distrito
del Templo abarcaba Finlandia, Estonia, Letonia, Lituania, Bielorrusiay Rusia.
En la dedicación me enteré de algo sorprendente. El primer día de su funcionamiento general se
había reservado para que los miembros rusos realizaran las ordenanzas del templo. Es difícil
explicar cuán asombroso fue esto. Rusia y Finlandia habían librado muchas guerras a lo largo de
los siglos. Mi padre descon�aba y detestaba no solo a Rusia sino a todos los rusos. Había
expresado esos sentimientos con gran pasión y sus sentimientos eran típicos de la enemistad
�nlandesa hacia Rusia. Había memorizado poemas épicos que narraban la guerra del siglo XIX
entre �nlandeses y rusos. Sus experiencias durante la Segunda Guerra Mundial, cuando Finlandia y
Rusia volvieron a ser adversarios, no hicieron nada para cambiar las opiniones que él tenía.
Un año antes de la dedicación del Templo de Helsinki, Finlandia, el comité del templo, compuesto
exclusivamente por miembros �nlandeses, se reunió para hablar sobre los planes para la dedicación.
Durante la reunión, alguien comentó que los santos rusos viajarían varios días para asistir a la
dedicación y quizás esperarían recibir las bendiciones del templo antes de regresar a casa. El
presidente del comité, el hermano Sven Eklund, sugirió que los �nlandeses podrían esperar un poco
más, que los rusos podrían ser los primeros miembros en realizar las ordenanzas en el templo.
Todos los miembros del comité estuvieron de acuerdo. Los �eles Santos de los Últimos Días
�nlandeses retrasaron sus bendiciones del templo para dar cabida a los santos rusos.
El presidente de Área que estuvo presente en la reunión del comité del templo, el élder Dennis B.
Neuenschwander, escribió más tarde: “Nunca me he sentido tan orgulloso de los �nlandeses como
en ese momento. La difícil historia de Finlandia con su vecino del este […] y su entusiasmo por
�nalmente tener [un templo] construido en su propia tierra se dejaron de lado. Permitir que los
rusos entraran primero al templo [fue] una declaración de amor y sacri�cio”2 5.
Cuando le informé de ese gesto de bondad a mi padre, el corazón se le ablandó y lloró, algo muy
raro para ese estoico �nlandés. Desde ese momento hasta su muerte tres años después, nunca
expresó otro sentimiento negativo sobre Rusia. Inspirado por el ejemplo de sus compañeros
�nlandeses, mi padre eligió anteponer su discipulado de Jesucristo a todas las demás
consideraciones. Los �nlandeses no fueron menos �nlandeses; los rusos no fueron menos rusos;
ningún grupo abandonó su cultura, historia ni experiencias para desterrar la enemistad. No
tuvieron que hacerlo. En cambio, optaron por hacer de su discipulado de Jesucristo su principal
consideración2 6.
Si ellos pueden hacerlo, nosotros también. Podemos traer nuestra herencia, cultura y experiencias a
la Iglesia de Jesucristo. Samuel no rehuyó de su patrimonio como lamanita2 7, ni Mormón rehuyó
del suyo como ne�ta2 8; pero cada uno puso en primer lugar su discipulado del Salvador.
Si no somos uno, no somos de Él2 9. Mi invitación es que seamos valientes al poner nuestro amor
por Dios y el discipulado del Salvador por encima de todas las demás consideraciones30.
Sostengamos el convenio inherente a nuestro discipulado: el convenio de ser uno.
Sigamos el ejemplo de los santos de todo el mundo que con éxito se están convirtiendo en
discípulos de Cristo. Podemos con�ar en Jesucristo, quien “es nuestra paz, que […] derrib[ó] la
pared intermedia de separación, aboliendo en su [sacri�cio expiatorio] las enemistades”31. Nuestro
testimonio de Jesucristo al mundo será fortalecido y nos mantendremos espiritualmente sanos32 .
2/11/23, 23:15 La paz de Cristo pone f in a las enemistades
https://w w w.churchof jesuschrist.org/study/general-conference/2021/10/43renlund?lang=spa 4/6
Testi�co que al “evitar la contención” y al volvernos “[como] el Señor en amor y [u]n[idos] a Él
con fe”, Su paz será nuestra33. En el nombre de Jesucristo. Amén.
Notas
1. Véase “La Primera Presidencia insta a los Santos de los Últimos Días a usar mascarillas
cuando sea necesario y vacunarse contra el COVID-19”, Sala de Prensa, 12 de agosto
de 2021, https://noticias.laiglesiadejesucristo.org/articulo/la-primera-presidencia-insta-
a-los-santos-de-los-ultimos-dias-a-usar-mascaras-faciales-cuando-sea-necesario-y-
vacunarse-contra-el-covid-19; “Las vacunas explicadas”, Organización Mundial de la
Salud, https://www.who.int/es/emergencies/diseases/novel-coronavirus-2019/covid-19-
vaccines/explainers; “Safety of COVID-19 Vaccines”, Centers for Disease Control and
Prevention, 27 de septiembre de 2021, cdc.gov/coronavirus/2019-
ncov/vaccines/safety/safety-of-vaccines.html; “COVID-19 Vaccine E�ectiveness and
Safety”, Morbidity and Mortality Weekly Report, Centers for Disease Control and
Prevention, cdc.gov/mmwr/covid19_vaccine_safety.html.
2. Russell M. Nelson, “La participación de las hermanas en el recogimiento de Israel”,
Liahona, noviembre de 2018, pág. 69.
3. Véase Doctrina y Convenios 81:5.
4. Muchos apóstoles y profetas han tratado el tema de la unidad y la contención a lo largo
de los años. Véanse, por ejemplo: Marvin J. Ashton, “No tenemos tiempo para la
contención”, Liahona, agosto de 1978, págs. 8–12; Marion G. Romney, “La unidad”,
Liahona, julio de 1983, págs. 22–24; Russell M. Nelson, “El poder destructivo de la
contención”, Liahona, julio de 1989, págs. 81–84; Russell M. Nelson, “Los hijos del
convenio”, Liahona, julio de 1995, págs. 36–40; Henry B. Eyring, “Para que seamos
uno”, Liahona, julio de 1998, págs. 72–74; D. Todd Christo�erson, “A Sion venid”,
Liahona, noviembre de 2008, págs. 37–40; Je�rey R. Holland, “El ministerio de la
reconciliación”, Liahona, noviembre de 2018, págs. 77–79; Quentin L. Cook,
“Corazones entrelazados con rectitud y unidad”, Liahona, noviembre de 2020, págs.
18–22; Gary E. Stevenson, “Corazones entrelazados”, Liahona, mayo de 2021, págs.
5. 3 Ne� 11:28–29.
6. Véase Moisés 7:26, 28, 33. Esto no sugiere que el sacri�cio expiatorio del Salvador es
continuo o que Él continúa sufriendo; Jesucristo ha completado la Expiación. Sin
embargo, Su empatía y compasión in�nitas y perfectas que Él declaró como resultado
de completar Su sacri�cio expiatorio le permite a Él sentir desilusión y tristeza.
7. 2 Ne� 2:8.
8. Juan 13:34, 35.
9. La enemistad es el estado o sentimiento de oponerse activamente a alguien o algo;
connota hostilidad, antagonismo, animosidad, rencor y aversión o mala voluntad
profundamente arraigadas. La palabra griega traducida como “enemistad” también se
traduce como “odio”. Es lo contrario de ágape, que se traduce como “amor”. Véase
James Strong, �e New Strong’s Expanded Exhaustive Concordance of the Bible, 2010, sección
del diccionario griego, número 2189.
https://newsroom.churchofjesuschrist.org/article/first-presidency-message-covid-19-august-2021
https://newsroom.churchofjesuschrist.org/article/first-presidency-message-covid-19-august-2021
https://www.churchofjesuschrist.org/study/general-conference/2018/10/sisters-participation-in-the-gathering-of-israel?lang=spa
https://www.churchofjesuschrist.org/study/scriptures/dc-testament/dc/81.5?lang=spa#p5
https://www.churchofjesuschrist.org/study/general-conference/1995/04/children-of-the-covenant?lang=spa
https://www.churchofjesuschrist.org/study/general-conference/1995/04/children-of-the-covenant?lang=spa
https://www.churchofjesuschrist.org/study/general-conference/1998/04/that-we-may-be-one?lang=spa
https://www.churchofjesuschrist.org/study/general-conference/1998/04/that-we-may-be-one?lang=spa
https://www.churchofjesuschrist.org/study/general-conference/2008/10/come-to-zion?lang=spa
https://www.churchofjesuschrist.org/study/general-conference/2018/10/the-ministry-of-reconciliation?lang=spa
https://www.churchofjesuschrist.org/study/general-conference/2018/10/the-ministry-of-reconciliation?lang=spa
https://www.churchofjesuschrist.org/study/general-conference/2020/10/15cook?lang=spa&para=1#p1
https://www.churchofjesuschrist.org/study/general-conference/2021/04/15stevenson?lang=spahttps://www.churchofjesuschrist.org/study/scriptures/bofm/3-ne/11.28-29?lang=spa#p28
https://www.churchofjesuschrist.org/study/scriptures/pgp/moses/7.26,28,33?lang=spa#p26
https://www.churchofjesuschrist.org/study/scriptures/bofm/2-ne/2.8?lang=spa#p8
https://www.churchofjesuschrist.org/study/scriptures/nt/john/13.34,35?lang=spa#p34
2/11/23, 23:15 La paz de Cristo pone f in a las enemistades
https://w w w.churchof jesuschrist.org/study/general-conference/2021/10/43renlund?lang=spa 5/6
10. Véase Juan 17:21, 23.
11. 3 Ne� 11:30.
12. 4 Ne� 1:18.
13. 4 Ne� 1:17.
14. 4 Ne� 1:16.
15. El presidente Russell M. Nelson ha dicho: “El Señor ama el esfuerzo” (en Joy D. Jones,
“Un llamamiento especialmente noble”, Liahona, mayo de 2020, pág. 16).
16. Véase 4 Ne� 1:15. Hay quienes han alcanzado esta clase de unidad. En los días de Enoc,
“el Señor llamó Sion a su pueblo, porque eran uno en corazón y voluntad, y vivían en
rectitud; y no había pobres entre ellos” (Moisés 7:18).
17. Véase Mosíah 18:21.
18. Véanse Hechos 17:29; Salmo 82:6.
19. Véase 1 Corintios 12:12–27.
20. Véase Moroni 7:47–48.
21. Véase Doctrina y Convenios 107:30–31.
22. Dallin H. Oaks, “En defensa de nuestra divinamente inspirada constitución”, Liahona,
mayo de 2021.
23. Véase Romanos 14:1–3, 13, 21.
24. El Salvador censuró “[e]n la antigüedad [a Sus] discípulos [quienes] buscaron motivo el
uno contra el otro, y no se perdonaron unos a otros en su corazón; y por esta maldad
fueron a�igidos y disciplinados con severidad. Por tanto”, amonestó Jesús a Sus
discípulos de los últimos días, “os digo que debéis perdonaros los unos a los otros”
(Doctrina y Convenios 64:8–9).
25. Élder Dennis B. Neuenschwander, comunicación personal.
26. A la manera típica �nlandesa, cuando el hermano Eklund habló sobre esa decisión, dijo
que era simplemente lógica. En vez de elogiar la magnanimidad de los �nlandeses,
expresó su aprecio por los rusos. Los �nlandeses estaban agradecidos por la importante
contribución que los rusos hacían a la obra que se estaba realizando en el Templo de
Helsinki, Finlandia. Sven Eklund, comunicación personal.
27. Véase Helamán 13:2, 5.
28. Véase 3 Ne� 5:13, 20.
29. Véase Doctrina y Convenios 38:27.
30. Véase Lucas 14:25–33.
31. Efesios 2:14–15.
https://www.churchofjesuschrist.org/study/scriptures/nt/john/17.21,23?lang=spa#p21
https://www.churchofjesuschrist.org/study/scriptures/bofm/3-ne/11.30?lang=spa#p30
https://www.churchofjesuschrist.org/study/scriptures/bofm/4-ne/1.18?lang=spa#p18
https://www.churchofjesuschrist.org/study/scriptures/bofm/4-ne/1.17?lang=spa#p17
https://www.churchofjesuschrist.org/study/scriptures/bofm/4-ne/1.16?lang=spa#p16
https://www.churchofjesuschrist.org/study/general-conference/2020/04/14jones?lang=spa
https://www.churchofjesuschrist.org/study/scriptures/bofm/4-ne/1.15?lang=spa#p15
https://www.churchofjesuschrist.org/study/scriptures/pgp/moses/7.18?lang=spa#p18
https://www.churchofjesuschrist.org/study/scriptures/bofm/mosiah/18.21?lang=spa#p21
https://www.churchofjesuschrist.org/study/scriptures/nt/acts/17.29?lang=spa#p29
https://www.churchofjesuschrist.org/study/scriptures/ot/ps/82.6?lang=spa#p6
https://www.churchofjesuschrist.org/study/scriptures/nt/1-cor/12.12-27?lang=spa#p12
https://www.churchofjesuschrist.org/study/scriptures/bofm/moro/7.47-48?lang=spa#p47
https://www.churchofjesuschrist.org/study/scriptures/dc-testament/dc/107.30-31?lang=spa#p30
https://www.churchofjesuschrist.org/study/general-conference/2021/04/51oaks?lang=spa
https://www.churchofjesuschrist.org/study/scriptures/nt/rom/14.1-3,13,21?lang=spa#p1
https://www.churchofjesuschrist.org/study/scriptures/dc-testament/dc/64.8-9?lang=spa#p8
https://www.churchofjesuschrist.org/study/scriptures/bofm/hel/13.2,5?lang=spa#p2
https://www.churchofjesuschrist.org/study/scriptures/bofm/3-ne/5.13,20?lang=spa#p13
https://www.churchofjesuschrist.org/study/scriptures/dc-testament/dc/38.27?lang=spa#p27
https://www.churchofjesuschrist.org/study/scriptures/nt/luke/14.25-33?lang=spa#p25
https://www.churchofjesuschrist.org/study/scriptures/nt/eph/2.14-15?lang=spa#p14
2/11/23, 23:15 La paz de Cristo pone f in a las enemistades
https://w w w.churchof jesuschrist.org/study/general-conference/2021/10/43renlund?lang=spa 6/6
32. Véase Efesios 2:19.
33. Véase Russell M. Nelson, “El poder destructivo de la contención”, Liahona, julio de
1989, pág. 82.
https://www.churchofjesuschrist.org/study/scriptures/nt/eph/2.19?lang=spa#p19