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1 INTRODUCCIÓN Descripción La persistencia en la brecha salarial de género en los países desarrollados reta las explicaciones clásicas basadas en las diferencias en capital humano, preferencias o discriminación estadística. Las diferencias de género en las negociaciones son presentadas como una alternativa para explicar la brecha. Negociaciones con ofertas alternativas en un programa de TV ofrece la oportunidad única de observar los resultados y comportamientos de dichas negociaciones en una situación de la vida real con apuestas grandes. Usando la técnica de probability score matching, encontraron que los resultados no son impulsados por problemas de selección. Sin embargo, no pueden descartar problemas de selección basados en características que son inobservables como creencias. Ventajas: · Su marco ofrece múltiples ventajas por sobre experimentos de laboratorio · Excepto por la limitación de tres minutos, la negociación no es estructurada, por lo que las negociaciones observadas en el show están más cerca de los tipos de negociaciones que ocurren en la vida real que aquellas en los laboratorios. · Ventajas por sobre datos de campo estándar dado que las negociaciones son grabadas. · Hay variación de género tanto en los roles de propositores como de respondedores, por lo que es posible estudiar no solo las diferencias en género, pero más importante, también los efectos de la interacción de géneros en diferentes matchings. Limitaciones (afectan la validez externa): · La medida en que los individuos estudiados sean representativos, ya que deben estar dispuestos a participar en un programa de televisión. · El efecto de la audiencia debe ser tomado en cuenta ya que el comportamiento puede estar influenciado. · Las interacciones que observamos son únicas, mientras que, en el mercado laboral, la reputación se construye con interacciones repetidas. Conclusión En general, los resultados son consistentes con la literatura que encuentra que la mujer demanda menos y se les ofrece menos. Tres contribuciones importantes: 1. Confirma que las interacciones de género son cruciales para comprender las diferencias de género. 2. El artículo ofrece evidencia basada en negociaciones desestructuradas observada en un campo con pérdidas considerables, suplementando al comportamiento de las negociaciones observadas en el laboratorio. 3. Encontraron que, en su marco, el comportamiento determinante que resulta en el efecto de la interacción de género no recae en la propuesta inicial de proponente sino en las demandas del respondedor. (Es el respondedor femenino que demanda menos del proponente masculino, tanto en las demandas iniciales como en las subsecuentes) THE DATA Alberti, María Belén/Faynbloch, Victoria/Momesso, Tomás/Vilas, Marcos 2 2.1 The Setting: Alternating-offer Bargaining in a TV Show Obtienen los datos de un programa de la televisión española llamado Negocia como puedas. Es un show que tuvo lugar en las calles de las principales ciudades de España en el verano del 2013. En un episodio típico los presentadores eligen un transeúnte y le dan 100 euros. Luego, le hacen una pregunta que no puede contestar él mismo, sino que tiene tres minutos para encontrar una persona en la calle que la responda por ellos y negociar el reparto del premio. Puede negociar con cuantas personas quiera dentro del límite de tres minutos. Si encuentra una respuesta que considera satisfactoria comienza la negociación. Una vez alcanzado un acuerdo, y si la respuesta es correcta, se reparten los 100 euros como acordado. Si el participante no llega a un acuerdo dentro del tiempo permitido termina el juego y pierde los 100 euros. La negociación puede terminar sin acuerdo por dos motivos: límite temporal (4% de los casos) o el participante decide buscar otra persona para negociar (96% de los casos). El juego se repite hasta cuatro veces con diferentes parejas de negociación siempre y cuando las respuestas sean correctas. Las preguntas son más bien fáciles y triviales. Los concursantes llegan a la respuesta correcta en el 87% de los casos. Nos referiremos a los cuatro posibles juegos como “etapas”. En la segunda etapa el concursante recibe 200 euros extra, por lo que el tamaño máximo del premio aumenta a 300 euros. En la tercera etapa recibe otros 300 euros. La cuarta, y última etapa, es opcional. Si decide continuar recibe 1000 euros más. El premio potencial es de 1600 euros, premio que solo el concursante conoce con exactitud. Notemos que los premios son reales y considerables. Nos referiremos al participante como “proponente” y a la persona en la calle como “respondedor”. Denominamos a cada etapa de la negociación como una “ronda” (oferta proponente, respuesta respondedor, oferta respondedor, respuesta proponente). No es necesario completar una ronda para llegar a un acuerdo. No hay límite a la cantidad de rondas que puede tener una negociación siempre y cuando respeten el límite temporal del juego. Dado el marco del juego argumentamos que el proponente tiene una posición fuerte, mientras que el respondedor tiene una posición débil. Los proponentes conocen el tamaño del premio. Por otro lado, el proponente puede terminar la negociación cuando desee y buscar un nuevo respondedor. Estas características convierten la posición del proponente en fuerte. 2.2 The Database Crearon datos de panel con las negociaciones del programa de televisión. Para el análisis utilizamos 428 negociaciones entre 134 proponentes y 428 respondedores diferentes. Hay 73 proponentes femeninos (54%) y 61 masculinos (46%), 157 respondedores femeninos (375) y 271 masculinos (63%). La muestra de proponentes está balanceada en términos de género, mientras que la muestra de respondedores contiene muchos más hombres que mujeres. Los proponentes se introducen brevemente (nombre, edad, ocupación). En términos de ocupación identificamos aquellos que son estudiantes, retirados y desempleados. Clasificamos a los proponentes como empleados de alto y bajo nivel según la clasificación del Instituto Español de Estadísticas. Los respondedores solo dan su nombre por lo que no tenemos ningún otro dato. Sin embargo, podemos estimar datos subjetivamente utilizando los videos del programa: edad con una escala del 1 (menos de 30 años) al 6 (más de 70 años), estatus socioeconómico (0 para mediano-bajo y 1 para mediano-alto) y apariencia (0 poco atractivo y 8 muy atractivo). Los autores muestran fotos de todos los participantes, tanto proponentes como respondedores, a diez raters y hacen un promedio de sus respuestas. También documentamos el premio a compartir, Pie, la etapa del juego, Stage, y la desviación de la media del premio para cada etapa, (Pie-Mean) by stage. Bargaining Time se refiere al tiempo en segundos restantes para negociar. Finalmente, clasifican cada pareja de negociación dependiendo de la percepción de la pregunta: pregunta masculina, neutral o femenina (Male Question, Neutral Question, Female Question). La elección de pareja de negociación, y en particular el género, es influenciado por el tipo de pregunta. Las preguntas fueron analizadas tanto por hombres como mujeres por separado y las clasificaron dependiendo qué tan probable sea que hombres y mujeres den una respuesta correcta. Alberti, María Belén/Faynbloch, Victoria/Momesso, Tomás/Vilas, Marcos 3 Los autores controlan por todas las características cuando analizan el comportamiento de los proponentes. Para los respondedores, la única diferencia significativa es que las mujeres son más atractivas que los hombres. No encuentran evidencia de diferencias importantes salvo: las mujeres proponentes que son estudiantes se inclinan más por hombres respondedores y los hombres respondedores que son elegidos por hombres proponentes son más atractivos que los elegidos por mujeres. 2.3 Research Questions and IdentificationStrategy La base de datos permite analizar dos cuestiones interesantes. Primero, testean si existe diferencia alguna entre la elección de género de hombres y mujeres proponentes. Segundo, testean si existen diferencias de género y efectos de interacción por género en la negociación. No solo muestran el efecto del género del proponente y el respondedor, sino que también las cuatro posibles combinaciones (H-M, H-H, M-H, M-M). Distinguen entre resultado de la negociación (exitoso o no, duración) y comportamiento de negociación (ofertas, demandas, probabilidad de aceptar). En particular quieren ver si el comportamiento es igual entre proponentes masculinos y femeninos. RESULTADOS: 3.1 Elección del compañero de negociación: Los que proponen la oferta son los que eligen con quién van a regatear la oferta, los eligen de las gente que está caminando en la calle y tienen tan solo 3 minutos para encontrar una persona que responda la pregunta y pacten cuánto se queda cada uno del premio. Por consiguiente, la elección del que responde termina siendo más intuitiva que pensada. Con respecto a los que proponen, la cantidad de mujeres y hombres está balanceada; sin embargo, en los que responden hay más presencia masculina que femenina. Entonces, esto sugiere que hay una preferencia por los hombres a la hora de negociar; lo cual es consistente con que las mujeres tienden a rechazar la participación en el TV show. Vamos a estudiar si los que proponen siendo mujeres u hombres tienen distintas preferencias a la hora de elegir la persona que va a resolver la pregunta. La primer columna muestra los resultados sin controles y en la segunda se agregaron los controles. Vemos que cuando se agregan los controles, los participantes de género masculino prefieren negociar con hombres; esto puede ser explicado a causa de discriminación de género por gustos, o también desde un punto de vista más racional, porque el hombre puede pensar que la mujer tiene menos probabilidad de saber la respuesta correcta. Sin embargo, no se encuentra evidencia de que esto sea cierto. Por otro lado, los hombres piensan Alberti, María Belén/Faynbloch, Victoria/Momesso, Tomás/Vilas, Marcos 4 que las hombres son menos agresivos en el momento de negociar la oferta; no obstante, en los resultados matcheados de las negociaciones se muestra lo contrario. Por último, hombres y mujeres poseen creencias distintas acerca de la probabilidad de participar en el TV show de los dos géneros. Otra razón por la cual el oponente puede ser hombre o mujer, depende de si la respuesta es femenina o masculina. Si es masculina, el que propone elige un hombre como persona que va a responder; y si es femenina de modo contrario. A su vez, las personas atractivas (los que plantean la consigna) tienen la predisposición de elegir a hombres para replicar. Esto se ve reflejado en la data también para mujeres. Los participantes que son elegidos para responder no son balanceados entre hombres con respeto a mujeres. Para solucionarlo primero se corre una regresión con las probabilidades que corrigen a la muestra desbalanceada; segundo, se corren regresiones en una muestra matcheada usando el probability score matching para resolver el problema de selección; tercero, se rechaza la hipótesis de que los hombres y mujeres escogidos para responder difieren en sus características. Los resultados son robustos. 3.2 Variables de resultados: Probabilidad de no acuerdo, resultado del que propone y número de rondas. El resultado de la negociación puede ser explicado por tres variables: 1. Probabilidad de no agreement (probabilidad de no acuerdo): 2. Proposer´s outcome (resultado del que propone): la cantidad de dinero acordada para el que sugiere la pregunta, es decir, el resultado de la negociación para el que hace la oferta. 3. No of rounds (el número de rondas): la duración del proceso de negociación. La tabla tres sintetiza los resultados de la regresión para estas variables. Las primeras tres columnas se observa el efecto del género del que entrevista y del que es encuestado, mientras en las últimas tres columnas se incluye la interacción entre los géneros de ambas partes de la negociación. En la columna 5 vemos que hay una gran diferencia en términos de ganancias; se observó que cuando el hombre es el que realiza la pregunta y la mujer es la que responde, el hombre gana 11 euros más. Por consiguiente, cuando la negociación es entre el hombre y la mujer, siendo el hombre el que elige la persona que responda la pregunta, termina siendo beneficioso para el género masculino. Cuantitativamente, el proponente masculino gana 3% más negociando con una mujer que con un hombre; en cambio, las mujeres que contestan ganan 22% menos cuando negocian con hombres que con mujeres. Como conclusión, la interacción entre ambos géneros es crucial, ya que, las diferencias dependen del género de la persona con la que pactas la oferta. Alberti, María Belén/Faynbloch, Victoria/Momesso, Tomás/Vilas, Marcos 5 Por otro lado, los controles son significativos para explicar los resultados de la negociación. La primer oferta realizada por el participante es importante para los resultados de la negociación(la cantidad de dinero ofrecido en la primera ronda); cuando más alta sea la primer oferta, más probable es que se alcance un acuerdo exitoso. Por otro lado, cuanto más larga sea la negociación, menor va a ser la probabilidad de no acuerdo (fracaso). Las personas que son más grandes, que ocupan roles de bajo nivel y los estudiantes tienen menos probabilidad de romper la negociación. Además, cuanto más grande sea la torta a repartir, más grande es el resultado para el que propone debido a que los que responden desconocen el tamaño de la torta (asimetría informativa); y cuantas más rondas haya, menor va a ser el resultado para el que posee la ventaja informativa. Al observar el número de rondas, se concluye que cuando hay más rondas de negociación y cuando el premio es más grande, la negociación se prolonga. Sin embargo, si el que está a cargo de la oferta está desempleado o tiene una ocupación de bajo nivel, el proceso se acorta. También hay otras variables de control que son de gran interés, una es Proposer Starts, la cual describe cómo empieza la negociación y toma el valor uno cuando es el que propone el que la inicia; y la otra variable es Proposer Accepts que describe cómo termina la negociación y toma el valor cero si es el que responde el que acepta la oferta, y uno si es el que propone el que acepta la oferta de la demanda del que responde. Según los coeficientes estimados, se confirma que el que comienza la negociación se ve beneficiado. Separaron los casos en donde los que proponen terminan aceptando la oferta de la contraparte(202 casos de 377) , y aquellos que acaban aceptando la demanda del que responde(175 casos de 377); lo cual, mostró que el resultado de la negociación ,cuando el hombre es el que realiza la oferta y la mujer es la que da la respuesta, termina siendo más beneficioso para el que introduce la oferta debido a que las mujeres demandan menos a los hombres que a las mujeres. En el análisis, se replicaron las regresiones del resultado para los que proponen sacando el 5% de los ingresos más altos y más bajos para estos mismos; además se consideraron más controles como si la pregunta era femenina o masculina ,en donde, podría afectar el poder de negociación entre los participantes pero encontramos que no son significativos. 3.3 Bargaining Behaviour: Offers, Demands and Probabilities of Accepting Las ofertas y la probabilidad de aceptarlas, se analizaron en dos casos separados. Se corrió una regresión para la primer ronda ( oferta inicial y si fue rechaza o no), y luego una segunda regresión para las subsecuentes rondas. Esto se debe a que la oferta inicial es exógena y no está influenciada por la interacción del respondedor. Además la ofertainicial está comprobada de ser un determinante importante para el comportamiento subsecuente de los participantes y los resultados provistos. Se testeó a su vez si el comportamiento en la primer ronda difiere del comportamiento en las rondas siguientes. Viendo la tabla 4, podemos notar que las ofertas iniciales no muestran ningún tipo de efecto significativo relacionado al género, en contraste con estudios hechos por otros autores como Dittrich (2014) el cual reporta que las ofertas iniciales hechas por los hombres a las mujeres son de menor magnitud. También se Alberti, María Belén/Faynbloch, Victoria/Momesso, Tomás/Vilas, Marcos 6 muestra que las mujeres tienen más probabilidad de aceptar la oferta inicial si esta está dada por un hombre ( aunque la diferencia no es estadísticamente significativa). Podemos notar que no hay evidencia de efectos importantes de diferencia de género o interacción de género cuando se analizan las ofertas y la probabilidad de aceptarlas. Aunque se pueden mencionar dos pequeñas diferencias. Primero, los hombres tienden a ofertar a las mujeres 5 euros menos en contraste con la situación de cuando la mujer es la oferente, aunque este resultado es significativo al 10%. Segundo, las ofertas hechas por hombres tienen menos probabilidad de ser aceptadas si las respondedoras son mujeres. Con respecto a las contraofertas y la probabilidad de aceptarlas, se encontró un efecto de interacción de género importante. Las contraofertas de las mujeres difieren dependiendo de si están interactuando con un oferente mujer o varón. Cuando una mujer le presenta una contraoferta a un hombre, las mujeres tienden a demandar 63 Euros menos. Además no se encontró un diferencial en la probabilidad de aceptar las contraofertas. Los controles a su vez resultaron como se esperaban. Primero, las negociaciones donde hay más tiempo libre tienen ofertas menores y menos probabilidad de ser aceptadas inicialmente. Segundo, las negociaciones que duran más tienen ofertas menores y contraofertas mayores pero mientras más avanzada es la negociación, las ofertas son mayores. Tercero, mientras más altas sean las ofertas, mayor es la probabilidad de que sean aceptadas por el respondedor. Se puede apreciar como la oferta inicial es un determinante importante para las subsecuentes ofertas y las ofertas previas afectan positivamente a las contraofertas subsecuentes. Cuarto, las contraofertas pasadas también son importantes para explicar las ofertas por venir. Además, el tamaño del pozo a ser dividido (medido por el nivel del juego en el que se está participando), está relacionado positivamente con el nivel ofertas y contraofertas. Finalmente, el estado socio-demográfico percibido de los respondedores parece estar relacionado positivamente con las contraofertas. Con estos resultados, hay 4 puntos importantes para hacer. ● El principal efecto es observado cuando los hombres participan como oferentes (el rol fuerte) y las mujeres como respondedoras(rol débil). ● El efecto es medible. La demanda/contraoferta media entre mujeres es de 113 Euros mientras que la mujeres demandan un 55% menos cuando hay un hombre de oferente. ● El diferencial en el comportamiento dependiente del género no es iniciado por la oferta inicial si no por la respuesta del respondedor. Así, podemos relacionar directamente este resultado con el diferencial encontrado en las ganancias obtenidas. Siendo la negociación entre oferente hombre y respondedora mujer la más beneficiosa para los hombres, explicado por la mujer demandando menos a los hombres que a las mujeres. ● Se encontró que cuando hay una contraoferta previa, el efecto débil encontrado en la columna 2 (tabla 4) se vuelve un poco más fuerte mientras que si no hay una contraoferta previa (esto es, se dio una oferta, fue rechazada pero el respondedor se quedó callado y no dio una contraoferta/demanda) no se encontro ningun tipo de diferencia de género, lo cual afirma aún más que la diferencia en los resultados está dado principalmente por la diferencia en las demandas. Alberti, María Belén/Faynbloch, Victoria/Momesso, Tomás/Vilas, Marcos 7 4 Robustness Tests: Unbalancedness and Selection Al no ser un experimento preparado, las muestras de las parejas en el programa no están matcheadas aleatoriamente y hay sesgo de selección ya que los oferentes eligen a su pareja. Aunque los hombres y las mujeres tienden a elegir a hombres como pareja, los hombres tienen una preferencia aun mas fuerte por una pareja hombre lo cual lleva a un problema de selección y una muestra no balanceada. Para corregir este problema se corrieron 3 test de Robustez enfocándose en las variables de resultado más importantes ( Probabilidad de No acuerdo, Resultado del Oferente, Número de Rondas). Primero, notemos que hay mayor número de parejas hombre-hombre y mujer-hombre que de hombre-mujer y mujer-mujer, osea hay una muestra no balanceada. Para corregir esto se corrió una regresión que pondera cada observación dentro de cada combinación de género por la inversa de la probabilidad en la muestra. Segundo, se corrió una regresión utilizando un probability score matching para corregir el problema de selección. Se definió a la variable tratamiento como tener a una respondedora mujer y se estimó el probability score. Se usó el método de nearest neighbor matching para matchear las muestras de las respondedoras mujeres con la de los respondedores hombres de tal manera que tuviesen mismo propensity score. Después se corrió la regresión sobre las muestras matcheadas solamente. Es importante remarcar que los resultados se mantuvieron cualitativa y cuantitativamente iguales a los adquiridos previamente. En particular, el efecto sobre el Resultado del Oferente, se mantuvo positivo, significativo y muy similar en tamaño. Tercero, se chequeo si había alguna diferencia cualitativa entre los hombres que elegían parejas mujeres de los hombres que elegían parejas hombre y a su vez se chequeo si había diferencias entre las mujeres que eran elegidas por hombres que aquellas que eran elegidas por mujeres. No se encontró evidencia para argumentar que hay algun tipo de diferencia cualitativa entre los hombres que elegían mujeres de aquellos que elegían hombres así como tampoco se encontró evidencia de una diferencia significativa de las mujeres electas por mujeres de aquellas electas por los hombres. CONCLUSIÓN: Se utilizó el comportamiento de una negociación, que se dio un show de la tele, para estudiar la causa de la elección de un género en particular para negociar; y también para ver la interacción entre ambos géneros. Hay evidencia de que los hombres muestran una mayor preferencia por los socios de negociación masculinos lo cual podría ser explicado por la discriminación basada en el gusto, diferencias de género en las creencias (los hombres pueden poner más peso en la probabilidad de que los hombres sepan la respuesta correcta o piensan que obtendrán mejores acuerdos cuando negocien con hombres) o suponen que las mujeres serán más reacias a participar en un programa de televisión. Con respecto a los efectos de la interacción de género, tanto en el comportamiento de negociación como en los resultados de la negociación, cuando el matching es hombre-mujer es diferente de todos los demás: son las mujeres las que exigen menos cuando el que propone es de género masculino. Esta conclusión no puede ser explicada por selección, ya que, no hay diferencias entre los que proponen de género masculino que eligen mujeres para responder o que eligen hombres; sin embargo, hay diferencia entre las mujeres que responden que son elegidas por los hombres y las mujeres que responden pero son elegidas por mujeres . En resumen, los efectos de la interacción de género han demostrado ser cruciales para comprender las diferencias de género. Las mujeres exigen menos de los hombres, siendo las negociaciones más favorables para loshombres y menos para las mujeres (cuando los hombres negocian con las mujeres). Por otro lado, no se encuentra un comportamiento diferencial en las ofertas de apertura. Por último, los resultados diferenciales de género más relevantes se encuentran en el comportamiento del que responde debido a que se encuentra en una posición débil., Cuando los hombres asumen el rol de jugador fuerte (el que hace la oferta) y las mujeres el rol del jugador débil (el que responde) se encuentran fuertes diferencias de género. SUGERENCIAS: Alberti, María Belén/Faynbloch, Victoria/Momesso, Tomás/Vilas, Marcos 8 En un futuro trabajo, se podría demostrar empíricamente las causas que generan que el hombre tenga preferencia por el género masculino a la hora de elegir un participante para que responda la pregunta. A su vez, se podría analizar en profundidad los motivos que llevan a la mujer a pedir menos a los hombres, que a las mujeres en una negociación de una oferta. Por último, evaluaría cómo cambia el análisis si la contraparte inicialmente sabe el monto del premio, y su comportamiento como consecuencia de no estar en desventaja por falta de información.
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