Descarga la aplicación para disfrutar aún más
Vista previa del material en texto
Web Action WA 04/04 ; AI Index ASA 20/102/2004 For publication 29/11/04 Bhopal: Dow Chemical debe asumir la responsabilidad de la limpieza "Hace dos años y medio se me retiró por completo la menstruación." Shehesta Kureishi, de 35 años, se trasladó a la zona hace 12 años. También sufre dolores en la parte inferior de la espalda que le llegan hasta la ingle. Su hijo Ateeb de siete años se queja de dolores en las articulaciones. Ambos han bebido agua contaminada. Han transcurrido 20 años y la fábrica de Bhopal sigue destruyendo la vida de las comunidades que viven en los alrededores. Los efectos del escape y el medio ambiente contaminado tienen todavía graves consecuencias que afectan a los derechos humanos fundamentales. UCC –y Dow, que absorbió a la anterior en 2001– no han limpiado aún la planta ni han puesto freno a la acción contaminante que se inició cuando la planta comenzó su actividad en la década de los setenta, lo que significa que los habitantes de la zona siguen enfermando por beber agua contaminada. Los habitantes de Bhopal necesitan tu apoyo. Actúa ya y exige a Dow que limpie el lugar donde se levanta la fábrica de Bhopal. Escribe a Andrew Liveris, presidente de Dow Chemical. Puedes utilizar como modelo la carta que figura a continuación. Señor Liveris: Siento una enorme preocupación por las consecuencias devastadoras que para la salud de las comunidades de Bhopal, India, tiene la fábrica de pesticidas abandonada de Union Carbide. La planta de Bhopal lleva más de 30 años produciendo contaminación ambiental. Tras el desastre de 1984, en el que murieron miles de personas, Union Carbide abandonó la fábrica sin descontaminar su emplazamiento, dejando tras de sí grandes cantidades de residuos tóxicos. Los contaminantes almacenados siguen filtrándose en el agua y el suelo de los que dependen comunidades por entero, lo que afecta a la salud de las personas que viven en la zona. Numerosos informes indican que se han encontrado sustancias contaminantes en las verduras que se cultivan cerca de la planta, así como en muestras de leche materna de mujeres de Bhopal. Se ha comprobado que el agua no es apta para el consumo, pero, a falta de otro recurso hídrico, la mayor parte de la población local sigue bebiéndola. La empresa nunca ha hecho nada significativo para limpiar el emplazamiento de la fábrica, por lo que le insto a: - garantizar que se descontamina eficazmente y sin demora el lugar donde se encontraba la fábrica de Bhopal y sus alrededores, que se limpia el agua subterránea y se retiran las sustancias tóxicas y peligrosas abandonadas por la empresa cuando se marchó del lugar; 2 - presta su entera colaboración a los que están evaluando la índole y el alcance de los daños a la salud producidos por el tratamiento inadecuado de los residuos y por los contaminantes procedentes de la planta abandonada; - garantizar que Dow Chemicals ofrece sin demora completa reparación, restitución, compensación y rehabilitación por los daños continuados a la salud y al medio ambiente causados por la contaminación constante del lugar donde se ubicaba la fábrica. Atentamente, Presidente y director general de Dow Andrew N. Liveris President and Chief Executive Officer Dow Chemical Company 2030 Dow Center Midland, MI 48674 Estados Unidos Fax: (+1) 989 6389468 Correo-E: anliveris@dow.com Joven manifestante pide que se limpie la planta de Union Carbide en Bhopal. Mumbai, India, diciembre de 2002. © Maude Dorr Manifestantes frente a la sede de Dow en Mumbai exigen la limpieza de Bhopal durante una acción de protesta en diciembre de 2002 para recordar el aniversario del desastre. © Maude Dorr mailto:anliveris@dow.com 3 Nubes de injusticia: el desastre de Bhopal 20 años después "Había miles de cuerpos. Todo estaba lleno de cadáveres. Y gente muriéndose por todas partes." Mohammad Owais, voluntario del hospital de Hamidia en Bhopal, India "Tenemos que recorrer al menos dos kilómetros […] para conseguir agua limpia. Mi mala salud me impide traer el agua de allí." Hasina Bi, de Atal Ayub Nagar, un barrio de Bhopal próximo a la fábrica, lleva 18 años bebiendo agua de la bomba manual que hay cerca de su casa. Más de 7.000 personas murieron en cuestión de días al producirse un escape de gas en una planta química de Bhopal, India, la noche del 2 al 3 de diciembre de 1984. A lo largo de los últimos 20 años, la exposición a los compuestos químicos tóxicos ha provocado la muerte a otras 15.000 personas y miles más sufren enfermedades crónicas debilitantes para las cuales no se ha encontrado un tratamiento eficaz. El desastre conmocionó al mundo y planteó cuestiones fundamentales respecto a la responsabilidad de las empresas y los gobiernos en los accidentes industriales que aniquilan la vida humana y devastan el medio ambiente. Sin embargo, 20 años después los supervivientes siguen esperando una reparación justa, asistencia médica y tratamiento adecuados y una total rehabilitación social y económica. El lugar donde se encontraba la planta aún no ha sido limpiado, con lo que los residuos tóxicos siguen contaminando el medio ambiente y el agua del que dependen las poblaciones de los alrededores. Pese a la determinación con que los supervivientes luchan para obtener justicia, se les ha negado una indemnización adecuada y una asistencia médica y rehabilitación apropiadas y oportunas. Union Carbide Corporation (UCC), propietaria en aquel entonces de la fábrica de pesticidas en Bhopal, y Dow Chemicals, que absorbió a la anterior en 2001, han declarado públicamente que no son responsables de la fuga y sus efectos dañinos. Por sorprendente que parezca, nadie ha rendido cuentas de ello. El caso de Bhopal es un ejemplo de cómo las empresas eluden sus responsabilidades en materia de derechos humanos y subraya la necesidad de establecer un marco universal de derechos humanos que pueda aplicarse directamente a las empresas. Los gobiernos tienen la responsabilidad fundamental de proteger los derechos humanos de las comunidades que se encuentren amenazadas por las actividades de las empresas, como por ejemplo las que utilizan tecnología peligrosa. Sin embargo, conforme la influencia y el poder de las empresas han ido creciendo, también se ha ido generalizando el consenso respecto a que es preciso insertarlas en el marco de las normas internacionales de derechos humanos. En su informe Nubes de injusticia: el desastre de Bhopal 20 años después Amnistía Internacional: Insta a la opinión pública mundial a que presione a Dow y al gobierno indio para que limpien el lugar donde se ubicaba la fábrica e indemnicen a las comunidades afectadas. Pide al gobierno indio que evalúe sin demora los daños a la salud y al medio ambiente causados por el escape y la contaminación. Recomienda la puesta en práctica de un marco global de derechos humanos para las empresas, utilizando como base las Normas de la ONU 4 para Empresas (Normas sobre las responsabilidades de las empresas transnacionales y otras empresas comerciales en la esfera de los derechos humanos). La aplicación de tales normas y el establecimiento de mecanismos para garantizar su cumplimiento son esenciales para conseguir que las empresas rindan cuentas y garantizar que las víctimas reciben reparación. Información adicional En el informe Nubes de injusticia: el desastre de Bhopal 20 años después (ASA 20/015/2004). En el vídeo Twenty Years without Justice: The Bhopal Chemical Disaster, de Sanford Lewis (sólo en inglés). Este vídeo se realizó para la Campaña Internacional por la Justicia en Bhopal y no refleja necesariamente los puntos de vista y opiniones de Amnistía Internacional. Sitios web: Amnistía Internacional no ejerce ningún control sobre la información que aparece en los sitios web que se citan a continuación y en ningún casose entenderá que por el hecho de incluir los enlaces correspondientes Amnistía Internacional apoya a las entidades o los puntos de vista enunciados. Sitio web de la BBC sobre Bhopal (sólo en inglés) Campaña Internacional por la Justicia en Bhopal (sólo en inglés)
Compartir