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Grupo de trastornos metabólicos frecuentes que comparten el fenotipo de la hiperglucemia. Dependiendo de la causa de la DM, los factores que contribuyen a la hiperglucemia pueden ser: • deficiencia de la secreción de insulina, • decremento del consumo de glucosa o • aumento de la producción de ésta La DM es la primera causa de: 1. nefropatía en etapa terminal (ESRD) 2. amputaciones no traumáticas de extremidades inferiores 3. ceguera en adultos También predispone a enfermedades cardiovasculares. Clasificación Se clasifica con base en el proceso patógeno que culmina en hiperglucemia, en contraste con criterios previos como edad de inicio o tipo de tratamiento. Las dos categorías amplias de la DM se designan tipo 1 y tipo 2. La diabetes tipo 1 es resultado de la deficiencia completa o casi total de insulina. Se desarrolla con más frecuencia antes de los 30 años. La diabetes tipo 2 es un grupo heterogéneo de trastornos que se caracterizan por grados variables de resistencia a la insulina, menor secreción de dicha hormona y una mayor producción de glucosa. La DM de tipo 2 es precedida por un periodo de homeostasia anormal de la glucosa clasificado como: → trastorno de la glucosa en ayunas (IFG) o → trastorno de la tolerancia a la glucosa (IGT). De modo similar, aunque es más típico el desarrollo de DM de tipo 2 con el paso de los años, también se da en niños, en especial en adolescentes obesos. Otros tipos de DM Otras causas de DM son: ➢ defectos genéticos específicos de la secreción o acción de la insulina, ➢ alteraciones metabólicas que trastornan la secreción de insulina, ➢ trastornos mitocondriales y un sinnúmero de situaciones que alteran la tolerancia a la glucosa La diabetes del joven de inicio en la madurez (MODY) es un subtipo de DM que se caracteriza por ser transmitido por herencia autosómica dominante, comienzo precoz de la hiperglucemia (por lo común antes de los 25 años de edad) y trastorno de la secreción de insulina. Descargado por Full ciencia (75366072@cayetanoherediachiclayo.edu.pe) Encuentra más documentos en www.udocz.com La DM puede ser el resultado de enfermedad del páncreas exocrino cuando se destruye gran parte de los islotes pancreáticos. Las hormonas que antagonizan la acción de la insulina pueden producir DM. Por este motivo, la DM es a menudo una manifestación de ciertas endocrinopatías, como acromegalia y síndrome de Cushing. Diabetes gravídica Durante el embarazo se puede desarrollar y descubrir por primera vez intolerancia a la glucosa. La resistencia a la insulina relacionada con las alteraciones metabólicas del final del embarazo aumenta las necesidades de insulina y puede provocar hiperglucemia o intolerancia a la glucosa. La mayoría de las mujeres recuperan una tolerancia a la glucosa normal después del parto, pero tienen un riesgo sustancial (30 a 60%) de padecer diabetes en etapas ulteriores de la vida. Epidemiologia la prevalencia del tipo 2 lo hace con rapidez mucho mayor, por el incremento en la frecuencia de obesidad y la disminución de los niveles de actividad física. La frecuencia de diabetes aumenta con el envejecimiento. La prevalencia es semejante en varones y mujeres prácticamente en todos los límites de edad (10.5 y 8.8% en personas mayores de 20 años), pero es levemente mayor en varones con más de 60 años. Diagnóstico Criterios diagnósticos para la DM basados en las siguientes premisas: A. el espectro de la glucosa plasmática en ayunas (FPG) y la reacción a una carga oral de glucosa (prueba de tolerancia de glucosa ingerida [OGTT]) varían entre los individuos normales, y B. la DM se define como nivel de glucemia al que ocurren las complicaciones específicas de la diabetes más que como desviaciones a partir de una media basada en la población. La tolerancia a la glucosa se clasifica en tres categorías, con base en la cifra de glucosa plasmática en el ayuno (FPG): 1. FPG <5.6 mmol/L (100 mg/100 mi) es la cifra normal; 2. FPG = 5.6 a 6.9 mmol/L (100 a 125 mg/100 mi) se define como prediabetes, es decir, alteración de la glucemia en el ayuno, y 3. FPG >7.0 mmol/L (126 mg/100 mi) justifica el diagnóstico de diabetes mellitus. En base a los datos de la OGTT, se define: • IGT como los niveles de glucemia entre 7.8 y 11.1 mmol/L (140 y 199 mg/100 mi) y • La diabetes como la cifra de glucosa mayor de 11.1 mmol/L (200 mg/100 mi) 2 h después de la ingestión de 75 g de glucosa, como estímulo o carga. Los individuos con IFG, IGT, o ambas, cuadro llamado recientemente prediabetes por la American Diabetes Association (ADA), están expuestos a un riesgo sustancial de mostrar DM de tipo 2 y también un mayor peligro de mostrar enfermedad cardiovascular. Descargado por Full ciencia(75366072@cayetanoherediachiclayo.edu.pe) Encuentra más documentos en www.udocz.com Los criterios actuales de diagnóstico de la DM resaltan que la FPG es el método más fiable y cómodo de diagnóstico de DM en sujetos asintomáticos. Una concentración de glucosa plasmática >11.1 mmol/L (200 mg/100 mi) tomada al azar y acompañada de los síntomas clásicos de DM (poliuria, polidipsia y pérdida de peso) basta para el diagnóstico de DM. La prueba de sobrecarga oral de glucosa, aunque sigue siendo un método válido de diagnóstico de DM, no se recomienda como parte de la atención sistemática. Detección Se recomienda el empleo generalizado de la FPG como prueba de detección de DM de tipo 2 porque: 1) gran número de los individuos que satisfacen los criterios actuales de DM son asintomáticos y no se percatan de que la padecen, 2) los estudios epidemiológicos sugieren que puede existir DM de tipo 2 hasta durante un decenio antes de establecerse el diagnóstico, 3) hasta 50% de los individuos con DM de tipo 2 tienen una o más complicaciones específicas de a diabetes en el momento de su diagnóstico y 4) el tratamiento de la DM de tipo 2 puede alterar favorablemente la evolución natural de la enfermedad. A diferencia de lo que sucede en la DM de tipo 2, es raro que un individuo con diabetes de tipo 1 tenga un periodo prolongado de hiperglucemia antes del diagnóstico. Biosíntesis, secreción y acción de la insulina Biosíntesis La insulina es producida por las células beta de los islotes pancreáticos. Inicialmente se sintetiza como un polipéptido precursor con una única cadena de 86 aminoácidos, la preproinsulina. El procesamiento proteolítico posterior elimina el péptido señalizador aminoterminal, generando la proinsulina, la cual está emparentada de modo estructural con los factores de crecimiento afines a la insulina I y II, que se unen débilmente al receptor de insulina. La escisión de un fragmento interno de la proinsulina de 31 residuos genera el péptido C y las cadenas A (de 21 aminoácidos) y B (30 aminoácidos). La molécula de insulina madura y el péptido C se almacenan juntos y se segregan simultáneamente desde los granulos secretores de las células beta. Como el péptido C es menos sensible a la degradación hepática que la insulina, constituye un marcador útil de la secreción de insulina y permite diferenciar la insulina de origen endógeno y exógeno en el estudio de la hipoglucemia. Secreción La glucosa es el regulador esencial de la secreción de insulina por la célula beta pancreática, aunque también ejercen su influencia aminoácidos, cetonas, diversos nutrimentos, péptidos gastrointestinales y neurotransmisores. Las concentraciones de glucosa que pasan de 3.9 mmol/L (70 mg/100 mi) comienza a estimular la secreción de insulina cuando aquélla es introducida en la célula beta por el transportador de glucosa GLUT2. La fosforilación de la glucosa por glucocinasa es el paso limitante de la velocidad que controla la Descargado por Full ciencia (75366072@cayetanoherediachiclayo.edu.pe) Encuentra más documentos en www.udocz.com secreción de insulina regulada por glucosa. El metabolismo ulteriorde la glucosa-6-fosfato por la vía de la glucólisis genera trifosfato de adenosina (ATP), que inhibe la actividad de un canal de K+ sensible a ATP. La inhibición de este canal del K+ induce la despolarización de la membrana de la célula beta, lo que abre canales del calcio dependientes de voltaje (con entrada consecuente de calcio en la célula) y estimula la secreción de insulina. Las células neuroendocrinas de las vías gastrointestinales después de la ingestión de alimentos liberan incretinas, y amplifican la secreción de insulina estimulada por glucosa y suprimen la de glucagon. El péptido glucagonoide 1 (GLP-1), que es la incretina más potente, es liberado de las células L en el intestino delgado y estimula la secreción de insulina solamente cuando la glucemia rebasa el nivel del ayuno. Acción Una vez que se secreta la insulina hacia la sangre venosa portal, casi 50% de ella se degrada en el hígado. La insulina que no extrae el hígado llega a la circulación general, donde se fija en receptores de sus sitios diana. La insulina que se fija a su receptor estimula la actividad intrínseca de tirosincinasa, lo que da por resultado autofosforilación del receptor y reclutamiento de moléculas de señalización intracelulares, como los sustratos del receptor de insulina (IRS). Estas proteínas adaptadoras y otras inician una cascada compleja de reacciones de fosforilación y desfosforilación, que en último término provocan los amplios efectos metabólicos y mitógenos de la insulina. La homeostasia de la glucosa refleja un equilibrio preciso entre la producción hepática de glucosa y la captación y utilización periféricas de este sustrato. La insulina es el regulador más importante de este equilibrio metabólico, pero los efectos de otras vías, como aferencias nerviosas, señales metabólicas y hormonas (p. ej., el glucagon) generan un control integrado del aporte y la utilización de glucosa. En el ayuno, los niveles bajos de insulina intensifican la producción de glucosa al estimular la gluconeogénesis y la glucogenólisis en el hígado y disminuir la captación de glucosa por parte de tejidos insulinosensibles con lo cual se estimula la movilización de precursores almacenados, como aminoácidos y ácidos grasos libres (lipólisis). El glucagón, secretado por las células alfa del páncreas cuando disminuyen los niveles de glucosa o insulina en sangre, estimula la glucogenólisis y la gluconeogénesis en el hígado y la médula del riñón. En la fase posprandial, la carga de glucosa hace que aumente el nivel de insulina y disminuya el de glucagón, con lo cual se invierten dichos procesos. La mayor parte de la glucosa posprandial es utilizada por el músculo esquelético, efecto que se debe a la captación de glucosa estimulada por insulina. Otros tejidos, principalmente el cerebral, utilizan la glucosa de una manera independiente de la insulina. Descargado por Full ciencia (75366072@cayetanoherediachiclayo.edu.pe) Encuentra más documentos en www.udocz.com Patogenia Diabetes mellitus de tipo 1 Es consecuencia de interacciones de factores genéticos, ambientales e inmunológicos, que culminan en la destrucción de las células beta del páncreas y la deficiencia de insulina. Dicho tipo de la enfermedad es consecuencia de destrucción autoinmunitaria de las células mencionadas. Algunos sujetos que presentan el fenotipo clínico de DM de tipo 1 no tienen marcadores inmunológicos que denoten la presencia de un fenómeno autoinmunitario que afecte a las células beta. Según expertos, dichas personas terminan por mostrar deficiencia de insulina por mecanismos no inmunitarios desconocidos y fácilmente presentan cetosis. Después empieza a declinar la masa de las células beta y se trastorna progresivamente la secreción de insulina, a pesar de mantenerse una tolerancia normal a la glucosa. La velocidad de declive de la masa de células beta es muy variable de un individuo a otro, y algunos pacientes avanzan rápidamente al cuadro clínico de diabetes, mientras en otros la evolución es más lenta. Las características de la diabetes no se hacen evidentes sino hasta que se ha destruido la mayor parte de las células beta. Los sucesos que desencadenan la transición entre la intolerancia a la glucosa y la diabetes franca se asocian a menudo a un aumento de las necesidades de insulina, como puede ocurrir durante las infecciones o la pubertad. Después de la presentación inicial de una DM de tipo 1, puede haber una fase de "luna de miel" durante la cual es posible controlar la glucemia con dosis bajas de insulina o incluso, en raras ocasiones, prescindiendo de ésta. Sin embargo, esta fase fugaz de producción de insulina endógena por las células beta residuales desaparece cuando el proceso autoinmunitario termina por destruir las pocas que quedan, y el sujeto sufre un déficit completo de insulina. Consideraciones genéticas En la susceptibilidad a la DM de tipo 1 intervienen múltiples genes. El principal gen de predisposición a la DM de tipo 1 se localiza en la región HLA del cromosoma 6. También existen genes que brindan protección contra la aparición y evolución de la enfermedad. El haplotipo DQAT0102, DQB1*0602 es muy raro en personas con diabetes de tipo 1 (menos de 1%) y al parecer protege contra tal forma de la enfermedad. Factores fisiopatológicos Inmunomarcadores. La determinación de los autoanticuerpos contra las células de los islotes (ICA) puede ser útil para clasificar el tipo de diabetes como 1 y para identificar individuos no diabéticos con riesgo de padecerla. Los ICA están presentes en: • (>75%) de los individuos con diagnóstico reciente de DM de tipo 1, • en una minoría significativa de diabéticos de tipo 2 recién diagnosticados (5 a 10%) y • en embarazadas con diabetes gravídica (<5%) Descargado por Full ciencia (75366072@cayetanoherediachiclayo.edu.pe) Encuentra más documentos en www.udocz.com Factores ambientales. Ha resultado difícil identificar un desencadenante ambiental porque el suceso puede preceder en varios años al desarrollo de la diabetes. Entre los desencadenantes ambientales hipotéticos se cuentan → virus (en especial coxsackie y de la rubéola), → exposición precoz a proteínas de la leche de vaca y → nitrosoureas Diabetes Mellitus tipo 2 La resistencia a la insulina y la secreción anormal de ésta son aspectos centrales del desarrollo de DM de tipo 2. La resistencia a la insulina precede a los defectos de su secreción, y que la diabetes se desarrolla sólo si la secreción de insulina se torna inadecuada. Consideraciones genéticas La DM de tipo 2 posee un fuerte componente genético. La enfermedad es poligénica y multifactorial, porque además de la susceptibilidad genética, factores ambientales (como obesidad, nutrición y actividad física) modulan el fenotipo. Fisiopatología La diabetes mellitus de tipo 2 se caracteriza por: → menor secreción de insulina, → resistencia a dicha hormona, → producción excesiva de glucosa por el hígado y → metabolismo anormal de grasa. La obesidad, en particular la visceral o central (como se manifiesta en la razón de la circunferencia a nivel de la cadera/abdominal) es muy frecuente en la diabetes de tipo 2. En las etapas iniciales del problema, la tolerancia a la glucosa sigue siendo casi normal, a pesar de la resistencia a la insulina, porque las células beta del páncreas logran la compensación al incrementar la producción de la hormona. Al evolucionar la resistencia a la insulina y surgir hiperinsulinemia compensatoria, los islotes pancreáticos en algunas personas no pueden ya conservar el estado hiperinsulinémico y en ese momento surge IGT, que se caracteriza por: incrementos en el nivel de glucemia posprandial. La disminución ulterior en la secreción de insulina y el incremento de la producción de glucosa por el hígado culminan en la diabetes franca con hiperglucemia en el ayuno.Por último surge insuficiencia de las células beta. Anormalidades metabólicas Metabolismo anormal del musculo y grasa. Un signo notable de la DM de tipo 2 es la resistencia a la insulina, que es la menor capacidad de la hormona para actuar eficazmente en los tejidos destinatarios (en particular músculo, hígado y grasa) y es consecuencia de una combinación de susceptibilidad genética y obesidad. La resistencia a la acción de la insulina altera la utilización de glucosa por los tejidos sensibles a insulina y aumenta la producción hepática de glucosa; ambos efectos contribuyen a la hiperglucemia de la diabetes. El aumento de la producción hepática de glucosa es causa predominantemente de los elevados Descargado por Full ciencia (75366072@cayetanoherediachiclayo.edu.pe) Encuentra más documentos en www.udocz.com niveles de FPG, mientras que el decremento de la utilización periférica de glucosa produce hiperglucemia posprandial. La utilización de la glucosa por los tejidos independientes de la insulina no está alterada en la DM de tipo 2. Todavía no se ha desentrañado el mecanismo molecular preciso de la resistencia a la insulina en la diabetes de tipo 2. Se cree que en la resistencia a la insulina el factor predominante lo constituyen los defectos posteriores al receptor. La obesidad que acompaña a la DM de tipo 2, particularmente la obesidad central o visceral, según se piensa, es una parte del proceso patógeno. La mayor masa de adipocitos hace que aumenten los niveles de ácidos grasos libres circulantes, y de otros productos de los adipocitos (ácidos grasos libres no esterificados, proteína 4 que se liga a retinol; leptina, TNF-cx, resistina, y adiponectina). Las adipocinas, además de regular el peso corporal, el apetito, y el gasto de energía, también modulan la sensibilidad a la insulina. La mayor producción de ácidos grasos libres y de algunas adipocinas puede causar resistencia a la insulina en músculos de fibra estriada y en el hígado. En la obesidad disminuye la producción de adiponectina por parte de los adipocitos, que es un péptido insulinosensibilizante, y ello podría contribuir a la resistencia a la insulina, por parte del hígado. Los productos de los adipocitos y las adipocinas también generan un estado inflamatorio y ello podría explicar por qué aumentan los niveles de marcadores de inflamación como IL-6 y la proteína C reactiva en la DM de tipo 2. Trastorno de la secreción de insulina. En la DM de tipo 2, la secreción de insulina aumenta inicialmente en respuesta a la insulinorresistencia, con el fin de mantener una tolerancia normal a la glucosa. Al principio el defecto de la secreción de insulina es leve y afecta de manera selectiva la secreción de insulina estimulada por glucosa. Finalmente, el defecto de la secreción de insulina avanza a un estado de secreción de insulina visiblemente inadecuado. Aumento de la producción hepática de glucosa. El aumento de la producción hepática de glucosa ocurre en una fase temprana de la evolución de la diabetes, aunque probablemente es posterior al inicio de las alteraciones de la secreción insulínica y a la resistencia a la insulina en el músculo esquelético. Prevención La DM de tipo 2 le precede un periodo de IGT y diversas modificaciones del modo de vida, así como varios agentes farmacológicos impiden o retrasan su inicio. Formas monogénicas genéticamente definidas de diabetes mellitus Se han identificado algunas formas monogénicas de diabetes mellitus. Seis variantes de MODY, causadas por mutaciones en los genes que codifican los factores de transcripción insulares enriquecidos o la glucocinasa. Las MODY 1, MODY 3 y MODY 5 son causadas por mutaciones en el factor de transcripción nuclear del hepatocito (HNF) 4a, HNF- la y HNF-1 p\ respectivamente. Descargado por Full ciencia (75366072@cayetanoherediachiclayo.edu.pe) Encuentra más documentos en www.udocz.com Los factores de transcripción mencionados son expresados en el hígado, pero también en otros tejidos como los islotes pancreáticos y el riñón. Muy probablemente los factores afectan el desarrollo insular o la expresión de genes importantes en la secreción de insulina estimulada por glucosa. Las personas con MODY 2, resultado de mutaciones en el gen de glucocinasa, tienen hiperglucemia leve a moderada aunque estable, que no mejora con los hipoglucemiantes orales. Como consecuencia de mutaciones de la glucocinasa, se necesitan niveles mayores de glucosa para desencadenar respuestas secretoras de insulina, y de este modo, se altera el punto prefijado para la secreción de la hormona. La MODY 4 es una rara variante causada por mutaciones en el factor promotor de insulina (IPF) 1, que es un factor de transcripción que regula el desarrollo pancreático y la transcripción del gen de insulina. Las mutaciones homocigotas inactivantes causan agenesia pancreática, en tanto que las heterocigotas originan DM. La diabetes transitoria o permanente del neonato (que comienza antes de los seis meses de vida) puede ser causada por mutaciones genéticas y necesita la administración de insulina. Las causas principales de la diabetes neonatal permanente son las mutaciones en las subunidades del canal del potasio sensible a ATP (Kir6.2 y ABCC8). Complicaciones agudas de la DM La cetoacidosis diabética (DKA) y el estado hiperosmolar hiperglucémico (HHS) Se desarrollaron en otros documentos. Complicaciones crónicas de la DM Son causa de gran parte de la morbilidad y mortalidad que acompañan a este trastorno. Las complicaciones crónicas pueden dividirse en vasculares y no vasculares. A su vez, las complicaciones vasculares se subdividen en: → microangiopatía • retinopatía, • neuropatía y • nefropatía → macroangiopatía • coronariopatía CAD, • enfermedad vascular periférica PADy • enfermedad vascular cerebral. Las complicaciones no vasculares comprenden problemas como: → gastroparesia, → infecciones y → afecciones de la piel. La diabetes de larga duración puede acompañarse de hipoacusia. No se sabe si la DM de tipo 2 en ancianos se acompaña de perturbaciones en la función psíquica. Descargado por Full ciencia (75366072@cayetanoherediachiclayo.edu.pe) Encuentra más documentos en www.udocz.com El riesgo de complicaciones crónicas aumenta con la duración de la hiperglucemia; suelen hacerse evidentes en el transcurso del segundo decenio de la hiperglucemia. Como la DM de tipo 2 puede tener un periodo prolongado de hiperglucemia asintomática, muchos individuos con DM de tipo 2 presentan complicaciones en el momento del diagnóstico. Complicaciones oculares de la DM La DM es la primera causa de ceguera entre los 20 y 74 años. La ceguera es en esencia el resultado de la retinopatía diabética progresiva y del edema macular de importancia clínica. La retinopatía se clasifica en dos fases: → La retinopatía diabética no proliferativa suele ocurrir hacia el final del primer decenio de enfermedad o al principio del segundo y se caracteriza por • microaneurismas vasculares retinianos, • manchas hemorrágicas y • exudados algodonosos. → La retinopatía no proliferativa ligera avanza a una enfermedad más amplia, que incluye: • alteraciones del calibre de las venas, • alteraciones microvasculares intrarretinianas, y • microaneurismas y • hemorragias más numerosos. Los mecanismos fisiopatológicos que se invocan en la retinopatía no proliferatíva comprenden: ✓ pérdida de pericitos retinianos ✓ aumento de la permeabilidad vascular retiniana y ✓ alteraciones del flujo sanguíneo retiniano Todos los cuales pueden provocar isquemia de la retina. La neovascularización en respuesta a la hipoxia retiniana constituye el sello de la retinopatía proliferatíva diabética. Estos vasos neoformados pueden aparecer en el nervio óptico, la mácula, o ambos, y se rompen con facilidad, provocando hemorragia vitrea, fibrosis y, en últimotérmino, desprendimiento de retina. Los mejores factores de predicción del desarrollo de retinopatía son la duración de la DM y el control de la glucemia; también la hipertensión es un factor de riesgo. Tratamiento El tratamiento más eficaz de la retinopatía diabética es la prevención. El control glucémico intensivo retrasará en gran medida o frenará el avance de la retinopatía tanto en sujetos con DM de tipo 1 como de tipo 2. Los individuos con retinopatía conocida deben ser considerados para fotocoagulación profiláctica cuando inician el tratamiento intensivo. La fotocoagulación con láser tiene mucho éxito en preservar la visión. La retinopatía proliferativa suele tratarse mediante fotocoagulación panretíniana con láser, mientras que el edema macular se trata con Descargado por Full ciencia (75366072@cayetanoherediachiclayo.edu.pe) Encuentra más documentos en www.udocz.com fotocoagulación focal con láser. Complicaciones renales de la DM La nefropatía diabética es la primera causa de nefropatía en etapa terminal (ESRD) y una de las primeras causas de morbimortalidad relacionada con la DM. Los individuos con nefropatía diabética casi siempre tienen retinopatía. Al igual que otras complicaciones microangiopáticas, la patogenia de la nefropatía diabética está relacionada con la hiperglucemia crónica. Aunque no se conocen por completo los mecanismos a través de los cuales la hiperglucemia crónica conduce a la ESRD, comprenden los siguientes: 1. interacción de factores solubles (factores de crecimiento, angiotensina II, endotelina, AGE), 2. alteraciones hemodinámicas en la microcirculación renal (hiperfiltración glomerular, aumento de la presión capilar glomerular) y 3. alteraciones estructurales en el glomérulo (aumento de la matriz extracelular, engrosamiento de la membrana basal, expansión mesangial, fibrosis). Fumar acelera el declive de la función renal. Un factor conocido de riesgo es el antecedente familiar de nefropatía diabética. La evolución natural de la nefropatía diabética se caracteriza por una sucesión bastante predecible de acontecimientos que se definió inicialmente en los individuos con DM de tipo 1, pero que parece semejante en los que tienen el tipo 2. Ocurren hipoperfusión glomerular e hipertrofia renal durante los primeros años que siguen al inicio de la DM, e incrementan la tasa de filtración glomerular (GFR). Durante los primeros cinco años de DM ocurren engrosamiento de la membrana basal glomerular, hipertrofia glomerular y ampliación del volumen mesangial conforme la GFR retorna a los valores normales. Después de cinco a 10 años de DM de tipo 1, cerca de 40% de los individuos empiezan a excretar pequeñas cantidades de albúmina en la orina. Microalbuminuria: eliminación de 30 a 300 mg/día de albúmina en la orina colectada durante 24 h, o la concentración de creatinina de 30 a 300 pg/mg en una muestra de orina obtenida al azar (método preferido). La aparición de la microalbuminuria en DM de tipo 1 es un factor importante de riesgo de que evolucione a proteinuria franca (>300 mg/día), En algunas personas con diabetes de tipo 1 y microalbuminuria breve, esta última muestra regresión. Una vez que surge la macroalbuminuria se advierte un deterioro constante en la filtración glomerular, y la mitad de las personas, en promedio, llegan a ESRD en cuestión de siete a 10 años. Una vez que aparece la macroalbuminuria la presión arterial aumenta un poco y los cambios patológicos prácticamente son irreversibles. Algunos sujetos con uno u otros tipos de diabetes muestran un deterioro en la filtración glomerular incluso si no muestran microalbuminuria o macroalbuminuria, y ello es la base para evaluar la filtración glomerular cada año, por medio de la medición de creatinina sérica. La nefropatía que se desarrolla en la DM de tipo 2 difiere de la de tipo 1 en los siguientes aspectos: Descargado por Full ciencia (75366072@cayetanoherediachiclayo.edu.pe) Encuentra más documentos en www.udocz.com 1) puede haber oligoalbuminuria o nefropatía manifiesta en el momento en que se diagnostica la DM de tipo 2, lo que refleja su largo periodo asintomático; 2) es más frecuente que la microalbuminuria o la nefropatía manifiesta vaya acompañada de hipertensión en la DM de tipo 2, y 3) la microalbuminuria predice menos la progresión a nefropatía manifiesta en la DM de tipo 2. Ocurre también acidosis tubular renal de tipo IV (hipoaldosteronismo hiporreninémico) en la DM de tipo 1 o de tipo 2. Estas personas desarrollan tendencia a la hiperpotasemia, que puede ser exacerbada por ciertos fármacos [en particular inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina (ACE) y bloqueadores del receptor de angiotensina. Están predispuestos a la nefrotoxicidad inducida por material de contraste radiográfico los pacientes con DM que se van a someter a procedimientos radiográficos con medio de contraste por eso deben encontrarse bien hidratados antes y después de su exposición a dicho material, y se vigilará su concentración sérica de creatinina durante 24 h después del procedimiento diagnóstico. Tratamiento ✓ control de la glucemia. ✓ medición anual de la creatinina sérica para estimar la filtración glomerular Entre las intervenciones que son eficaces para lentificar la evolución de microalbuminuria a macroalbuminuria están: 1. normalización de la glucemia; 2. control estricto de la presión arterial, y 3. administración de inhibidores de ACE, o de ARB. Es importante tratar también la dislipidemia. Durante la fase de declive de la función renal pueden disminuir las necesidades de insulina, porque esta sustancia se degrada en el riñón. los antidiabéticos (sulfonilureas y metformina) pueden acumular, contraindicados en la insuficiencia renal. ✓ En diabéticos sin proteinuria se debe mantener la presión arterial por debajo de 130/80 mmHg. ✓ Es necesario usar los inhibidores de ACE o los ARB para disminuir la evolución de microalbuminuria a macroalbuminuria y el deterioro coexistente en la filtración glomerular que acompaña a la macroalbuminuria ✓ La ADA sugiere una disminución pequeña de la ingesta de proteínas en los diabéticos con microalbuminuria (0.8 g/kg de peso al día) o con macroalbuminuria (<0.8 g/kg de peso al día. El trasplante unirrenal de un donante vivo emparentado es el tratamiento preferido pero obliga a la inmunosupresión por largo tiempo. La combinación de trasplante de páncreas y riñones es una técnica promisoria porque alcanza la normoglucemia y el sujeto no necesita diálisis. para detectar microalbuminuria Descargado por Full ciencia (75366072@cayetanoherediachiclayo.edu.pe) Encuentra más documentos en www.udocz.com Neuropatía y diabetes mellitus Se puede manifestar en la forma de polineuropatía y como mononeuropatía, neuropatía autonómica o ambas. Al igual que ocurre con otras complicaciones de la diabetes, la aparición de la neuropatía guarda relación con la duración de la enfermedad y el control de la glucemia. Factores adicionales de riesgo son: → el índice de masa corporal (cuanto mayor es el índice, más grande es el peligro de neuropatía) y → el tabaquismo. → la presencia de enfermedad cardiovascular, → incremento de triglicéridos e → hipertensión también se vinculan con la neuropatía periférica de origen diabético. Se pierden las fibras nerviosas mielínicas y amielínicas. Los signos clínicos de la neuropatía de origen diabético son similares a los de otras neuropatías y por ello el diagnóstico de tal complicación diabética se hará solamente después de descartar otras causas posibles. En consecuencia, habrá que practicar estudios cada año en los diabéticos en busca de ambas formas de neuropatía. ➢ Polineuropatia-mononeuropatia. La forma más frecuente de neuropatía de origen diabético es la polineuropatía simétrica distal. Suele aparecer con pérdida sensitiva distal, peroincluso en 50% de los pacientes surgen signos de la neuropatía. También ocurren hiperestesias, parestesias y disestesias. Los síntomas consisten en: • sensación de adormecimiento, • hormigueo, • pinchazos o • ardor quemante que se inicia en los pies y se extiende en sentido proximal. • En algunos de estos individuos sobreviene dolor neuropático precedido, ocasionalmente, por mejoría de su control de la glucemia. El dolor afecta de manera característica las extremidades inferiores, suele percibirse en reposo y empeora durante la noche. Conforme avanza este trastorno neurológico, el dolor va cediendo y acaba por desaparecer, pero persiste un déficit de la sensibilidad en las extremidades inferiores. La exploración física descubre: • pérdida de la sensibilidad, • pérdida del reflejo del tobillo y • sentido de la proporción anormal. La polirradiculopatía diabética es un síndrome caracterizado por dolor incapacitante situado en el territorio de distribución de una o más raíces nerviosas. Puede ir acompañado de debilidad motora. Descargado por Full ciencia (75366072@cayetanoherediachiclayo.edu.pe) Encuentra más documentos en www.udocz.com → La radiculopatía intercostal o de tronco provoca dolor en el tórax o abdomen. La afección del plexo lumbar o el nervio femoral puede causar dolor en el muslo o la cadera y acompañarse de debilidad motora en los flexores o extensores de la cadera (amiotrofia diabética). Las polirradiculopatías diabéticas suelen resolverse espontáneamente en seis a 12 meses. ➢ La mononeuropatía (disfunción de nervios craneales o periféricos aislados) es menos frecuente que la polineuropatía en la DM y se presenta en forma de dolor o debilidad motora en el territorio de un solo nervio. Lo más frecuente es la afección del tercer par craneal, y la diplopía anuncia su presencia. La exploración física revela: • ptosis y • oftalmoplejía, • miosis normal a la luz. A veces se afectan los pares craneales IV, VI o VII (parálisis de Bell). También puede haber mononeuropatías periféricas o afección simultánea de más de un nervio (mononeuropatía múltiple). ➢ Neuropatía vegetativa (autónoma). Los pacientes con DM de tipo l o 2 de larga evolución pueden presentar signos de disfunción vegetativa que afectan los sistemas colinérgicos, noradrenérgico y peptidérgico (péptidos como polipéptido pancreático, sustancia P, etc.). Es posible que la neuropatía vegetativa relacionada con la DM afecte numerosos aparatos y sistemas, como el cardiovascular, el digestivo, el genitourinario, el seudomotor y el metabólico. Las neuropatías vegetativas que afectan al aparato cardiovascular tienen el potencial de provocar: • taquicardia de reposo e • hipotensión ortostática. Es probable que la gastroparesia y las dificultades de vaciamiento de la vejiga estén relacionadas con la neuropatía vegetativa de la DM. La disfunción del sistema nervioso simpático puede producir: • hiperhidrosis de las extremidades superiores y • anhidrosis de las inferiores. En este último caso es posible que ocurran sequedad de piel y grietas, de modo que aumenta el riesgo de úlceras en los pies. Tratamiento ✓ Mejor control de la glucemia, que mejorará la velocidad de conducción nerviosa, pero no necesariamente los síntomas de neuropatía diabética. ✓ Combatir los factores de riesgo de que surja neuropatía, como hipertensión e hipertrigliceridemia. ✓ La clave del tratamiento es evitar las neurotoxinas (alcohol) y tabaco. ✓ Administrar suplementos vitamínicos contra posibles deficiencias ( B 12, folato), y dar apoyo sintomático. Descargado por Full ciencia(75366072@cayetanoherediachiclayo.edu.pe) Encuentra más documentos en www.udocz.com ✓ Prevenir la pérdida de sensibilidad en el pie. Es importante que todo individuo con signos o síntomas de neuropatía se revisen todos los días los pies y tomen precauciones (calzado) para evitar callosidades o úlceras. En caso de haber deformidades de los pies habrá que consultar con un podólogo. La neuropatía crónica y dolorosa de origen diabético es difícil de combatir, pero puede mejorar con: → antidepresivos • tricíclicos o amitriptilina, o desipramina, o nortriptilina, o Imipramina • inhibidores de la recaptación selectiva de noradrenalina y serotonina o duloxetina → anticonvulsivos • gabapentina • pregabalina • carbamazepina • lamotrigina Las maniobras no farmacológicas (ingerir cantidades adecuadas de sal, evitar la deshidratación y los diuréticos, usar medias de compresión) pueden proporcionar algún beneficio. Complicaciones de las extremidades inferiores La diabetes es la primera causa de amputación no traumática de las extremidades inferiores. Las úlceras e infecciones del pie son también una importante causa de morbilidad en los diabéticos. Suponen la interacción de varios factores patogénicos: → neuropatía, → biomecánica anormal del pie, → enfermedad vascular periférica y → cicatrización deficiente de las heridas. La neuropatía sensitiva periférica interfiere en los mecanismos normales de protección y permite que el paciente sufra traumatismos importantes o leves repetidos, que a menudo pasan inadvertidos. Los trastornos de la sensibilidad propioceptiva causan un soporte anormal del peso durante la marcha, con la consiguiente formación de callosidades o úlceras. La neuropatía motora y sensitiva conduce a una mecánica anormal de los músculos del pie y a alteraciones estructurales del pie (dedo en martillo, deformidad del pie en garra, prominencia de las cabezas de los metatarsianos, articulación de Charcot). La neuropatía vegetativa provoca anhidrosis y altera el flujo sanguíneo superficial del pie, lo que promueve la desecación de la piel y la formación de fisuras. La enfermedad vascular periférica y la cicatrización deficiente impiden la resolución de pequeñas heridas de la piel, permitiendo que aumenten de tamaño y se infecten. Descargado por Full ciencia (75366072@cayetanoherediachiclayo.edu.pe) Encuentra más documentos en www.udocz.com Los factores de riesgo de úlceras en el pie o de amputación comprenden: • sexo masculino, • diabetes de más de 10 años de duración, • neuropatía periférica, • estructura anormal del pie (alteraciones óseas, callo, engrosamiento de las uñas), • enfermedad vascular periférica, • tabaquismo, • antecedentes de úlcera o • amputación y control de la glucemia deficiente. Las grandes callosidades suelen preceder a las úlceras o superponerse a ellas. Tratamiento Tratamiento óptimo: ✓ prevenir a través de la detección de pacientes de alto riesgo, ✓ educar al paciente e ✓ instaurar medidas para prevenir la ulceración La educación del paciente debe hacer hincapié en lo siguiente: 1. selección cuidadosa del calzado, 2. inspección diaria de los pies para detectar los signos incipientes de ajuste deficiente del calzado o traumatismos menores; 3. higiene diaria de los pies para mantener la piel limpia e hidratada; 4. evitar el autotratamiento de las alteraciones de los pies y las conductas de alto riesgo (p. ej., caminar descalzo), y 5. consulta rápida con un profesional de la salud en caso de cualquier anomalía. Entre las intervenciones dirigidas a modificar los factores de riesgo se encuentran • calzado ortopédico y • ortesis, • tratamiento de los callos, • cuidado de las uñas, y • medidas profilácticas para disminuir la presión sobre la piel debida a una arquitectura ósea anormal. También es importante atender a otros factores de riesgo de enfermedad vascular (tabaquismo, dislipidemia, hipertensión) y mejorar el control glucémico. La superficie plantar del pie es el lugar más frecuente de ulceración. Las úlceras pueden ser primordialmente neuropáticas (no acompañandas de infección) o tener celulitis u osteomielitis circundantes. También es común la celulitis sin ulceración y debe tratarse con antibióticosde amplio espectro, incluida la cobertura contra anaerobios. Descargado por Full ciencia (75366072@cayetanoherediachiclayo.edu.pe) Encuentra más documentos en www.udocz.com La infección que rodea una úlcera del pie a menudo se debe a muchos microorganismos (cocos grampositivos y gramnegativos y anaerobios), y puede desarrollarse gangrena gaseosa en ausencia de infección por clostridios. Se debe determinar la profundidad de la herida por inspección y sondeando con un instrumento estéril de punta roma. Se toman radiografías simples del pie para evaluar la posibilidad de osteomielitis en úlceras crónicas que no han respondido al tratamiento. Las gammagrafías óseas pueden ser útiles, pero a menudo resulta difícil diferenciar una osteomielitis de una infección subcutánea situada por encima. Los estudios con leucocitos marcados con indio son más útiles para determinar si la infección afecta estructuras óseas o sólo partes blandas, pero son demandantes desde el punto de vista técnico. La modalidad más específica suele ser la resonancia magnética (MRI) del pie, pero es difícil diferenciar la destrucción ósea debida a osteomielitis de la provocada por una artropatía de Charcot. Si es necesario el desbridamiento quirúrgico, la biopsia y el cultivo del hueso suelen proporcionar la respuesta. La mejor forma de tratar la osteomielitis es combinando: → tratamiento antibiótico prolongado (primero intravenoso y luego oral) → desbridamiento del hueso infectado. Un documento de consenso de la ADA identificó seis intervenciones de eficacia demostrada en las heridas del pie diabético: 1. descarga, 2. desbridamiento, 3. apositos de heridas, 4. empleo adecuado de antibióticos, 5. revascularización y 6. amputación limitada. Lo más adecuado es evitar por completo el peso sobre la úlcera, con lo que se elimina el traumatismo mecánico que retrasa la cicatrización de la herida. El reposo en cama y diversas ortesis limitan la carga sobre las heridas o puntos de presión. El desbridamiento quirúrgico de las heridas neuropáticas es importante y eficaz, pero no existe una demostración clara de la eficacia de otras medidas de limpieza de heridas (enzimas, remojo, hidromasaje). Los apositos promueven la curación de las heridas hidratándolas y protegiéndolas. Se deben evitar los antisépticos. Los antibióticos tópicos son de utilidad limitada. Una vez controlada la infección pueden ser útiles la fisioterapia, la evaluación de las ortesis y la rehabilitación. Descargado por Full ciencia (75366072@cayetanoherediachiclayo.edu.pe) Encuentra más documentos en www.udocz.com Las infecciones leves o que no amenazan la extremidad se pueden tratar con: • antibióticos por vía oral (cefalosporinas, clindamicina, amoxicilina/ácido clavulánico y fluoroquinolonas), • desbridamiento quirúrgico del tejido necrótico, • cuidados locales de la herida (evitación del peso sobre la úlcera) y • vigilancia estrecha del avance de la infección. Las úlceras más graves pueden requerir: • tratamiento antibiótico por vía intravenosa • reposo en cama y • cuidados locales de la herida. Tal vez sea necesario el desbridamiento quirúrgico urgente de la herida. Los regímenes antimicrobianos iniciales incluirán: → ertapenem, piperacilina/tazobactam, cefotetán, ampicilina/sulbactam, linezolid, → una combinación de clindamicina y una fluoroquinolone. Las infecciones graves, o aquellas que no mejoran después de 48 h de tratamiento antibiótico, requieren: → ampliar el espectro antimicrobiano para cubrir S. aureus resistente a meticilina (p. ej., vancomicina) y Pseudomonas aeruginosa. Si la infección que rodea la úlcera no mejora con los antibióticos intravenosos se debe reevaluar la cobertura antibiótica y reconsiderar si está indicado un desbridamiento quirúrgico o la revascularización. Manifestaciones dermatológicas Las manifestaciones cutáneas más frecuentes de la DM son: → cicatrización lenta de las heridas y → úlceras cutáneas. Las dermopatías diabéticas, a veces denominadas pápulas pretibiales pigmentadas o "manchas cutáneas diabéticas", empiezan en una zona eritematosa y evolucionan a un área de hiperpigmentación circular. Estudio del paciente ANAMNESIS. Historia médica completa con especial hincapié en: • peso, • antecedentes familiares de diabetes y sus complicaciones, • factores de riesgo cardiovascular, • antecedentes médicos, • ejercicio, • tabaquismo y Descargado por Full ciencia(75366072@cayetanoherediachiclayo.edu.pe) Encuentra más documentos en www.udocz.com • consumo de alcohol. Los síntomas de hiperglucemia comprenden: poliuria, polidipsia, pérdida de peso, cansancio, debilidad, visión borrosa, infecciones superficiales frecuentes (vaginitis, micosis cutáneas) y cicatrización lenta de las lesiones cutáneas tras pequeños traumatismos. Las alteraciones metabólicas están relacionadas fundamentalmente con la hiperglucemia (diuresis osmótica, disminución de la entrada de glucosa en el músculo) y con el estado catabólico del paciente (pérdida de glucosa y de calorías por la orina, destrucción muscular por la degradación de proteínas y disminución de la síntesis proteínica). Las complicaciones crónicas pueden afectar varios aparatos y sistemas, y un paciente puede presentar todos, algunos o ningún síntoma relacionados con las complicaciones de la DM EXPLORACIÓN FÍSICA. Efectuar una exploración física completa, se debe prestar especial atención a los aspectos de importancia en la diabetes como peso corporal o índice de masa corporal, exploración de la retina, presión arterial ortostática, exploración del pie, pulsos periféricos y lugares de inyección de insulina. La exploración cuidadosa de las extremidades inferiores debe buscar indicios de: • neuropatía periférica, • callos, • micosis superficiales, • afección ungueal y • deformidades del pie, como dedos en martillo o en garra y pie de Charcot Con el fin de identificar los lugares de posible ulceración. CLASIFICACIÓN DE LA DM EN UN PACIENTE CONCRETO. Los pacientes con DM de tipo 1 tienden a presentar las siguientes características: 1. comienzo de la enfermedad antes de los 30 años de edad; 2. hábito corporal delgado; 3. necesidad de insulina como tratamiento inicial; 4. propensión al desarrollo de cetoacidosis, y 5. aumento del riesgo de otros trastornos autoinmunitarios como enfermedad tiroidea autoinmunitaria, insuficiencia suprarrenal, anemia perniciosa y vitíligo. Las personas con DM de tipo 2 a menudo presentan los siguientes rasgos: 1. desarrollo de la diabetes después de los 30 años de edad; 2. habitualmente son obesas (80% son obesas, pero los ancianos pueden ser delgados); Descargado por Full ciencia (75366072@cayetanoherediachiclayo.edu.pe) Encuentra más documentos en www.udocz.com De la DM 3. tal vez no precisen de insulina al comienzo, y 4. pueden tener trastornos asociados como resistencia a la insulina, hipertensión, enfermedad cardiovascular, dislipidemia o síndrome del ovario poliquístico. En la DM de tipo 2, la resistencia a la insulina a menudo se asocia a obesidad abdominal (en contraposición con la obesidad de caderas y de muslos) e hipertrigliceridemia. Aunque la mayoría de los individuos con DM de tipo 2 diagnosticada son ancianos, la edad de diagnóstico parece estar disminuyendo en algunos grupos étnicos. VALORACIÓN DE LABORATORIO. El estudio de laboratorio debe evaluar en primer lugar si el paciente cumple los criterios diagnósticos de DM después el grado de control glucémico Además de la valoración de laboratorio (analítica) habitual se deben hacer pruebas de detección sistemática de procesos asociados a la DM (p. ej., microalbuminuria, dislipidemia, disfunción tiroidea). En los sujetos con alto riesgo de enfermedad cardiovascular se deben hacer pruebas de detección sistemáticade cardiopatía isquémica asintomática con las pruebas de esfuerzo (ergometrías) cardiacas apropiadas, si están indicadas. La determinación de anticuerpos contra las células de los islotes en el momento del comienzo de la diabetes puede ser útil si el tipo no está claro con base en las características antes descritas. Tratamiento a largo plazo Los objetivos del tratamiento de la DM de tipo 1 o 2 son : 1. eliminar los síntomas relacionados con la hiperglucemia, 2. reducir o eliminar las complicaciones de microangiopatía o macroangiopatía a largo plazo y 3. permitir al paciente un modo de vida tan normal como sea posible El paciente con DM de tipo 1 o 2 debe recibir educación sobre nutrición, ejercicio, atención a la diabetes durante otras enfermedades y medicamentos que disminuyen la glucosa plasmática. Diabetes mellitus tipo 1 Tratamiento intensivo. tiene como finalidad lograr la euglucemia o una glucemia casi normal. Los regímenes de insulina suelen consistir en muchos componentes, múltiples inyecciones al día (MDI) o dispositivos de administración intravenosa de esta hormona exógena. Además, el tratamiento intensivo de la diabetes se aconseja encarecidamente en los pacientes con DM de tipo 1 recién diagnosticada porque puede prolongar el periodo de producción de péptido C, lo que suele redundar en un mejor control glucémico y en un riesgo reducido de hipoglucemia grave. Las insulinas se clasifican en hormonas de acción breve o de acción larga. Descargado por Full ciencia (75366072@cayetanoherediachiclayo.edu.pe) Encuentra más documentos en www.udocz.com Regímenes de insulina. En todos los regímenes, las insulinas de acción prolongada (NPH, glargina o detemir) ofrecen las concentraciones básales necesarias, en tanto que los tipos regular, aspart, glulisina y lispro proporcionan la insulina prandial. Los análogos de insulina de acción breve deben inyectarse poco antes (antes de 20 min) de una comida, o exactamente después de ella; la insulina simple se aplica 30 a 45 min antes de la comida. Un inconveniente de los regímenes actuales de insulina es que ésta penetra inmediatamente en la circulación general, mientras que la insulina endógena se segrega en el sistema venoso porta. Por tanto, la insulina exógena expone al hígado a dosis mlrafisiológicas de insulina. En todos los tipos de regímenes insulínicos es en absoluto esencial practicar frecuentemente SMBG (más de tres veces al día). Diabetes mellitus tipo 2 Consideraciones generales. Para tratar DM de tipo 2 están agentes hipoglucemiantes orales, insulina y otros fármacos que mejoren el control de la glucemia; muchos médicos y enfermos prefieren agentes hipoglucemiantes orales como fármacos de primera línea. Descargado por Full ciencia (75366072@cayetanoherediachiclayo.edu.pe) Encuentra más documentos en www.udocz.com Agentes hipoglucemiantes. se subdividen en los que incrementan la secreción de insulina, los que disminuyen la producción de glucosa, los que mejoran la sensibilidad a la insulina y los que intensifican la acción de 6LP-1. Descargado por Full ciencia (75366072@cayetanoherediachiclayo.edu.pe) Encuentra más documentos en www.udocz.com
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