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8 Orientación MIR Tema de Urgencias por excelencia en el que se incluye el soporte vital, lo que implica que es un gran modo de repasar la parada cardiorrespiratoria y conocer aquellos aspectos más importantes de la misma en el Servicio de Urgencias. Tiene una importancia intermedia por su gran relación con aspectos preguntados de cardiología. 3.1. Soporte vital La parada cardiorrespiratoria es la interrupción brusca, inesperada y poten- cialmente reversible de la circulación y la respiración espontánea. La causa más frecuente de PCR es el origen cardiaco en adultos y la obstrucción aguda de la vía aérea en niños. La cadena de supervivencia es el conjunto de eslabones que condicionan la supervivencia y las secuelas derivadas de una situación de parada car- diorrespiratoria (PCR): Reconocimiento precoz y pedir ayuda (112) → Reanimación cardiopulmo- nar (RCP) → precoz (compresiones torácicas y ventilación) → Desfibrilación precoz (si es necesaria) → Cuidados post-reanimación (Figura 3.1): Recuerda ➔ No olvides la cadena de supervivencia y los pasos a realizar en la misma. Soporte vital básico El soporte vital básico son el conjunto de medidas que engloban desde el reconocimiento precoz de la PCR hasta el inicio de las maniobras de reani- mación a la espera de la llegada de recursos tanto humanos como materia- les para poder iniciar el soporte vital avanzado (Figura 3.2): Inconsciente con respiración ausente o anormal Llame al Servicio de Emergencias Haga 30 compresiones torácicas Haga 2 ventilaciones de rescate Continúe RCP 30:2 En cuanto llegue el DEA, enciéndalo y siga sus instrucciones Figura 3.2. Soporte vital básico en adultos. Adaptado de las Guías European Reanimation Council 2021 Situaciones emergentes en Urgencias Prevenir o reconocer el paro cardiaco Reconocimiento temprano y solicitud de ayuda RCP por testigos Ganar tiempo Recuperar latido cardiaco Des�brilación temprana SVA y cuidados post-resucitación Recobrar calidad de vida Figura 3.1. Cadena de Supervivencia. Adaptado de las Guías European Reanimation Council 2021 03 9 03. Situaciones emergentes en Urgencias. UG No responde y no respira o no respira con normalidad Tras RCE: - Utilice el abordaje ABCDE - Busque una SpO2 de 94-98% y una PCO2 normal - ECG de 12 derivaciones - Identifique y trate las causas - Control específico de la temperatura Considerar: - Angiografía coronaria percutánea e ICP - Compresiones torácicas mecánicas para facilitar la transferencia/tratamiento - RCP extracorpórea Identifique y trate las causas reversibles: - Hipoxia - Hipovolemia - Hipo/hiperpotasemia/metabólicas - Hipo/hipertermia - Trombosis (coronaria o pulmonar) - Neumotórax a tensión - Taponamiento cardiaco - Tóxicos Considere el uso de ecografía para identificar las causas reversibles Realice compresiones de alta calidad y: - Administre oxígeno - Utilice capnografía con forma de onda - Compresiones continuadas si aérea asegurada - Minimice las interrupciones de las compresiones - Acceso intravenoso o intraóseo - Administre adrenalina cada 3-5 minutos - Administre amiodarona tras 3 descargas - Identifique y trate las causas reversibles Reinicie inmediatamente RCP durante 2 minutos Reinicie inmediatamente RCP durante 2 minutos Administre 1 descarga Desfibrilable (FV/TV SIN pulso) Retorno a la circulación espontánea (RCE) No desfibrilable (AESP/asistolia) Avise al Servicio de Emergencias o equipo de reanimación Evalúe el ritmo RCP 30:2 Conecte el monitor/desfibrilador Figura 3.3. Soporte vital avanzado en adultos. Adaptado de las Guías European Reanimation Council 2021 Si no se tiene experiencia o existe reticencia del reanimador, se aconseja aplicar SOLO compresiones torácicas. Es fundamental que dichas compre- siones sean de calidad, pues esto incide directamente en el pronóstico neu- rológico. Los requisitos para que puedan denominarse calidad son: • Frecuencia 100-120 lpm. • Compresiones centrotorácicas. • Profundidad de 5-6 cm. • Permitir la reexpansión tras cada compresión. Recuerda ➔ La aplicación de la desfibrilación precoz junto con las compresiones de calidad son las dos medidas principales que mejoran la superviven- cia en estos pacientes. Si el paciente despierta, colocarle en posición lateral de seguridad con revaluaciones periódicas hasta la llegada un recurso más avanzado. Soporte Vital Avanzado (SVA) Se define SVA como el soporte vital realizado con ayuda instrumental espe- cífica, por personal entrenado con el objetivo de recuperar la circulación espontánea y revertir la causa. Se debe iniciar siempre excepto si hay signos de muerte biológica, enfer- medad terminal, más de 10 minutos en PCR sin iniciar SVB (salvo en las situaciones con menor riesgo de daño cerebral ante la hipoxia prolongada, como son en la intoxicación por barbitúricos, el ahogamiento o la hipoter- mia), si el intervalo entre la RCP básica y avanzada es mayor de 30 minutos o si la RCP supone un riesgo vital para el reanimador. Se debe detener cuando se recupere la circulación espontánea, si presenta asistolia refractaria mayor de 20 minutos o si solo existe un reanimador y el mismo queda exhausto. En las guías se recogen unos supuestos en los cuales se aceptan tiempos más largos de reanimación, entre ellos la pre- sencia de hipotermia, tromboembolismo pulmonar (que precisa fibrinólisis), fibrilación ventricular refractaria, etc. El SVA consiste en un conjunto de acciones, entre las que se encuentran (Figura 3.3): • Monitorización e identificación de ritmo de parada (divididos en desfi- brilable o no desfibrilable). • Tratamiento eléctrico si precisa (360 J en monofásicos y 150-200 J en bifásicos). • Asegurar ventilación. Colocar capnógrafo. • Canalización de accesos venosos centrales. • Búsqueda de causas reversibles. 10 Manual CTO de Medicina y Cirugía, 12.ª edición Recuerda ➔ 4H: hipoxia (suplementar oxígeno), hipovolemia (descartar sangra- do, administrar fluidos intravenosos), hipo/hiperpotasemia (cloruro cál- cico, insulina, bicarbonato) e hipotermia (calentar hasta > 32 ºC). ➔ 4T: neumotórax a tensión (drenaje torácico urgente), taponamiento cardiaco (pericardiocentesis), tóxicos y sobredosis de fármacos (antí- doto específico si se dispone) y tromboembolismo pulmonar (fibrinó- lisis urgente). Cuidados post-resucitación Tratamiento inmediato de la vía aérea y respiración, la circulación y la tem- peratura; tratamiento de las crisis comiciales y mioclonías; mantener glu- cemias ≤ 180 mg/dl (evitando la hipoglucemia); estudio etiológico (valorar TC craneal y/o angioTC pulmonar y angiografía coronaria o intervención coronaria en caso de SCACEST). Soporte vital básico pediátrico En caso de la población pediátrica, las principales diferencias son el ini- cio de la reanimación cardiopulmonar con 5 ventilaciones seguidas de una relación compresión torácica/ventilación 15:2. Si hay un único reanimador se avisará al equipo de emergencias tras las insuflaciones iniciales. Si hay dos reanimadores se avisará al equipo de emergencias una vez se detecte la PCR (Figura 3.4). 3.2. Atención inicial al paciente politraumatizado (Figura 3.5) El paciente politraumatizado es aquel paciente que presenta lesiones que afectan a más de un órgano o sistema como consecuencia de un trauma- tismo y que puede conllevar un riesgo vital o una pérdida funcional grave. Es la primera causa de mortalidad y de discapacidad en menores de 45 años. La mortalidad en el paciente politraumatizado se produce en tres picos: 1. Primer pico: ocurre en escasos segundos o minutos como con- secuencia de lesiones letales (lesiones graves encefálicas, rotura cardiaca, etc.). Únicamente la prevención puede reducir significativa- mente este pico de mortalidad. 2. Segundo pico: ocurre desde los primeros minutos hasta varias horas después como consecuencia de lesiones, que si no se tratan correcta- mente, son letales (hematomasepidurales, hemoneumotórax, rotura esplénica, etc.). A este pico se le conoce como periodo dorado. En este fase, si se actúa de forma precoz, identificando y tratando las lesiones potencialmente letales, se puede aumentar la supervivencia de los pacientes. 3. Tercer pico: ocurre varios días o sema- nas después del traumatismo como consecuencia se sepsis o disfunción orgánica múltiple. El pronóstico depende de la gravedad del trauma, la energía transferida, la reserva fisiológica y la calidad y precocidad de los cuidados administrados. La atención inicial incluye una revisión primaria y una revisión secundaria del paciente. La revisión primera la realiza- remos con la sistemática ABCDE e iremos tratando de forma inmediata las lesiones potencialmente mortales que nos vayamos encontrando. La revisión primaria debe realizarse de forma rápida y sistemati- zada. En la revisión secundaria, realizare- mos una historia clínica y una exploración física detallada. La situación clínica de un paciente politraumatizado es dinámica, por lo que la revisión primaria y secunda- ria deben ser repetidas frecuentemente para identificar cambios en el estado del paciente que indiquen la necesidad de una intervención adicional. ¿Inconsciente? Abrir vía aérea Ausencia o respiración anormal (ineficaz) 5 ventilaciones de rescate 15 compresiones torácicas 2 ventilaciones; posteriormente alternar compresión/ventilación 15:2 En ausencia de signos evidentes de vida ¿Seguridad? Pedir ayuda Si hay dos reanimadores: - Llamar a emergencias/equipo de SVA (usar altavoz) - Encontrar y traer un DEA (si está disponible) - Si está capacitado: ventilar con bolsa- mascarilla (2 reanimadores), con oxígeno - Si es incapaz de ventilar: realizar compresiones torácicas de manera continua; añadir ventilaciones de rescate tan pronto como sea posible Si hay 1 solo reanimador: - Llamar a emergencias/equipo de SVA (usar altavoz) - Tomar y aplicar DEA en caso de colapso súbito presenciado (si accesible) Figura 3.4. Soporte vital básico pediátrico. Adaptado de las Guías European Reanimation Council 2021 11 03. Situaciones emergentes en Urgencias. UG Revisión primaria • A (Airway): vía aérea con restricción del movimiento de la columna cervical. Hay que evaluar si existe permeabilidad de la vía aérea. Debemos retirar cuerpos extraños, aspirar secreciones, realizar tracción mandibular o elevación mentoniana. Si, pese a esas manio- bras, persiste obstrucción de la vía, se suele requerir aislamiento de la vía aérea (por ejemplo, intubación orotraqueal). Los pacientes con ≤ 8 puntos en la Escala de Coma de Glasgow precisan aislamiento defini- tivo de vía aérea. Estas maniobras hay que realizarlas con restricción del movimiento cervical. • B (Breathing): respiración y ventilación. Para evaluar la respiración y ventilación tendremos que exponer el cuello y evaluarlo. Hay que examinar la posición de la tráquea; la presencia de distensión yugu- lar; visualizar, palpar, auscultar y percutir la pared torácica; explorar la simetría torácica. No debemos pasar por alto lesiones como un neumotórax a tensión, hemotórax masivo o enfisema subcutáneo extenso. • C (Circulation): circulación con control de la hemorragia. La hemo- rragia es la causa más frecuente de mortalidad evitable en el paciente politraumatizado por lo que hay que tratarla e identificarla de forma precoz. Para evaluar la situación hemodinámica nos tenemos que fijar en el nivel de conciencia, la perfusión de la piel y el pulso. Si la hemorragia es externa, debemos realizar compresión directa apli- cando la suficiente presión para cortar la hemorragia. Si la lesión es en una extremidad y no se controla con compresión, se puede colocar un torniquete (existe riesgo de isquemia y de pérdida de extremidad). Si la hemorra- gia es interna, debemos buscarla en tórax, abdomen, retroperitoneo, pelvis y huesos largos; puede requerir tratamiento quirúr- gico. Ante la sospecha de fractura de pelvis como causa de la inestabilidad, hay que colocar un estabilizador pélvico y, en caso de fractura de huesos largos, hay que inmo- vilizar la extremidad. El control de la hemo- rragia es esencial, acompañado de una adecuada resucitación (cristaloides y, si no responde, transfusión de hemoderivados 1:1:1 o 2:1:1). La gasometría tiene un papel importante en la evaluación del shock. Se debe prestar especial atención al lactato y al exceso de bases, teniendo en cuenta que un valor de hematocrito normal inicial no descarta un sangrado significativo. En pacientes con trauma exanguinante está indicada la administración de 1 g de ácido tranexámico en bolo (en las tres primeras horas) seguido de una perfusión de 1 g de ácido tranexámico en las siguientes ocho horas. Ante un shock hemorrágico debe- mos recordar el concepto de hipotensión permisiva. • D (Disability): déficit neurológico. Nos fijaremos en el nivel de conciencia evaluado mediante la Escala de Coma de Glasgow y en las pupilas (su forma, simetría y reactividad). • E (Exposure): exposición y control del entorno. Tenemos que des- nudar al paciente cortando la ropa para explorarle completamente y, una vez finalizada la evaluación, cubrir con mantas para evitar la hipotermia (triada letal: hipotermia, coagulopatía y acidosis). Revisión secundaria La revisión secundaria no empieza hasta que haya finalizado la revisión primaria, los esfuerzos de reanimación estén en marcha y se haya demos- trado estabilidad/mejoría de la situación clínica. Incluye: • Historia clínica: reacciones alérgicas conocidas, antecedentes persona- les, tratamiento habitual, eventos relacionados con el trauma y ayunas. • Exploración física (“de la cabeza a los pies”): cabeza, cuello, tórax, abdomen, pelvis, periné, espalda y extremidades. Durante la evaluación primaria debemos empezar a monitorizar al paciente y asegurar dos vías venosas periféricas de adecuado calibre. Extraeremos análisis completo (hemograma, coagulación, bioquímica, gasometría y test de embarazo si procede) y solicitaremos pruebas cruzadas. Si nos encontramos en una situación de inestabilidad, las pruebas com- plementarias indicadas para evaluar la causa son la radiografía portátil de tórax, la radiografía portátil de pelvis y E-FAST. Si el paciente está esta- ble y ha presentado un trauma mayor, está indicada la realización de TC o Body-TC ya que puede identificar un número significativo de lesiones potencialmente ocultas. TET: tubo endotorácico | IOT: intubación orotraqueal |Qx: intervención quirúrgica Trauma mayor UCI Urgencias Revisión primaria: (X) A B C D E + monitorizar Radiografía portátil tórax y pelvis Paciente inestable SÍ SÍ SÍ NO NO NO Paciente estable Paciente estable Evaluación secundaria ¿Paciente estable? ¿Trauma mayor? Individualizar pruebas de imagen Body-TC ± otras pruebas de imagen - Radiografía portátil de tórax: TET, IOT, Qx, etc. - Radiografía portátil de pelvis: cinturón pélvico, Qx, etc. - E-FAST: Qx, TET, pericardiocentesis, etc. Figura 3.5. Atención inicial al paciente politraumatizado 12 Manual CTO de Medicina y Cirugía, 12.ª edición ➔ Reconoce las principales recomendaciones de del European Resus- citation Council, tanto a nivel de resucitación básica como en avanzada. ➔ Repasa el ABCDE del manejo en el paciente politraumatizado. Conceptos Clave Preguntas MIR ➔ No hay preguntas MIR representativas.
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