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PROBLEMÀTICAS DE LA IDENTIDAD→ Arfuch ▪ En la última década, la problemática de la identidad se tornó recurrente. Esto se debe a cambios ocurridos en el mapa mundial tales como la disolución de bloques antagónicos este/oeste, intensificación de tránsitos migratorios, debilitamiento de las ideas de nación y ciudadanía, florecimiento de las minorias, etc.; y a la crisis de ciertas concepciones universalistas. ▪ En consecuencia, hubo una confluencia de aportes disciplinarios q amplió el campo de la identidad ▪ Hall→ dsd su perspectiva reconstructiva, proponía poner bajo borradura el carácter positivo del concepto; es decir, planteaba la utilización del concepto de forma tal q acentúe su contratara, la diferencia. Esto permitiría la relectura desde otro paradigma. La identidad seria entonces no un conj de cualidades predeterminadas (raza, color, sexo) sino una construcción nunca acabada, abierta a la temporalidad. La identificación es un proceso de articulación pero nunca una adecuación perfecta, una totalidad. Esta imposbilidad de adecuación permite desplegar una concepción no esencialista de la identidad, q enfatiza la incompletud, inacabamiento y por lo tanto, es mas apta para dar cuenta de la creciente fragmentación contemporánea. Es así q toma importancia el lenguaje, la historia, la cultura en el proceso de cómo nos representamos. No hay identidad por fuera de la representación, es decir, de la narrativizacion. En esta dimensión narrativa es donde se construye el discurso. A través del discurso, de la narratividad yo me represento, construyo mi identidad. ▪ Por eso, Arfuch habla de giro epistémico→revaporización de peq relatos y dnd aparece la narratividad como un espacio importante. ▪ Barthes→ relato como configurativo de la experiencia humana y de la temporalidad. Por lo tanto, si la temporalidad solo puede configurarse en el relato así como la propia experiencia, la importancia de la narrativa aparece con toda claridad: ella puede dar cuenta de la constitución de identidades individuales y colectivas. La narrativa que surge, como dice Barthes, entre nuestra experiencia del mundo y nuestros esfuerzos por describir lingüísticamente esa experiencia. ▪ Batjin→dialogismo: el lenguaje es esencialmente ajeno, su densidad significante está hecha de siglos de historia y tradición, de otras voces que casi han dicho todo antes que tenga lugar la “propia” enunciación. No habrá entonces un enunciado sino más bien una pluralidad de voces ajenas –polifonía- que habitan la propia voz. El dialogismo es la presencia protagónica del otro en mi enunciado antes de q este sea formulado. Se trata de un vaivén dialógico. Bajtín propone percibir las cosas desde un yo que se abre al otro en un diálogo incesante. Como consecuencia de esta postura, dejamos de ser todos iguales para aceptarnos diferentes. Si bien Bajtin no se ocupo de la identidad, se la puede pensar desde el dialogismo ya q toda identidad en tanto relacional, supone otro q no es lo mismo y a partir del cual puede afirmar su diferencia. ▪ Entonces, la redefinición de identidad en términos no esencialistas lleva a considerarla no como suma de atributos diferenciales y permanentes, sino como una confluencia de discursos dnd se actualizan diversas posiciones de sujeto no susceptibles de ser fijadas mas q temporariamente. ▪ Laclau sostiene q pensar las identidades en su diferencia trae como contrafigura el concepto de igualdad. La ampliación del campo de la diferencia es una precondición de la expansión del campo de la igualdad. Ej: el reconocimiento de los DDHH de todas las minorías es un modo de afirmación de una igualdad entre ellas. Hay redefinir el concepto de universalismo, no verlo como algo irrefutable sino como algo q en un momento dado se da una articulación de las diferencias en torno a algo idéntico.
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