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918 L A S E N F E R M E D A D E S I N F E C C I O S A S Y S U T R A N S M I S I Ó N Carbunco Bacillus anthracis, una bacteria del suelo saprof ítica y ubicua, es un agente de bioterrorismo y guerra biológica de Categoría A. Sus propiedades únicas lo hacen particularmente útil como arma biológica. Crece como un bacilo aerobio grampositivo y que tiene el producir y propagar muchos de los microorganis- mos útiles para la guerra biológica. Prácticamente todas las bacterias o virus patógenos son potencialmente útiles para la guerra biológica y varios de los organismos candidatos más probables son relativamente fáci- les de cultivar y diseminar. Los patógenos peligrosos que tienen un potencial significativo para ser utilizados como armas bio- lógicas se presentan en la Tabla 28.8. Los candidatos menciona- dos con más frecuencia para su uso como armas biológicas son el virus de la viruela y Bacillus anthracis, la causa del carbunco. Los centros para el control y la prevención de enfermedades cla- sifican los patógenos peligrosos en tres categorías por su potencial como arma biológica. El nivel de amenaza más elevado corres- ponde a los agentes de la Categoría A. Estos pueden ser disemi- nados fácilmente, por ejemplo mediante aerosoles, o fácilmente transmisibles de persona a persona. Típicamente, estos agen- tes causan una elevada mortalidad y, en consecuencia, provocan un gran impacto en la salud pública. Los preparativos para hacer frente a ataques por este tipo de agentes requieren un plan espe- cífico para cada uno de ellos. Loa agentes de la Categoría B son moderadamente fáciles de propagar, lo que provoca una morbili- dad moderada y una baja mortalidad, y requieren mecanismos de vigilancia y de diagnóstico especializados. Los agentes de la Cate- goría C son patógenos emergentes para los cuales no se puede anticipar ningún plan específico de contención ni de control. Viruela El virus de la viruela tiene un potencial intimidatorio como arma biológica de Categoría A porque se puede propagar con facilidad por contacto o mediante aerosoles, y tiene una tasa de mortalidad del 30 % o más. Sin embargo, su potencial para ser utilizado como arma biológica militar se considera bajo porque las únicas reservas conocidas del virus de la viruela se encuen- tran en repositorios vigilados en los Estados Unidos y Rusia, y el personal militar, por norma, está vacunado. Sin embargo, sigue existiendo la posibilidad de que grupos terroristas o fuer- zas militares tengan acceso al virus de la viruela y lo dispersen entre la población general. Por eso, el gobierno de los Estados Unidos ha tomado medidas para inmunizar contra la viruela al personal sanitario y de seguridad pública de primera línea. A pesar de que existe una vacuna muy eficaz contra la viruela, que utiliza como inmunógeno el vaccinia virus, estrechamente emparentado, esta vacuna no se ha estado usando de forma general durante casi 40 años porque la variedad salvaje de la viruela se erradicó del planeta hace más de 35 años. La inmu- nización con vaccinia es muy eficaz, pero conlleva ciertos ries- gos; entre una y dos personas, por cada millón de personas vacunadas, probablemente morirán por una complicación con el vaccinia virus. Por consiguiente, ya no se recomienda esta vacuna y más del 90 % de la población mundial está inadecua- damente inmunizada y es vulnerable a la enfermedad. Los pre- parativos frente a un posible ataque con la viruela en los Estados Unidos han incluido recomendaciones para la inmunización de determinados individuos: personas que estén en estrecho con- tacto con pacientes con la viruela; profesionales que evalúan, cuidan o transportan enfermos de viruela; personal de labora- torio que maneja muestras clínicas de enfermos de viruela; y otro personal, como el de mantenimiento, que podría entrar en contacto con materiales infecciosos de los enfermos de viruela. Tabla 28.8 Agentes patógenos y enfermedades según la categoría de amenaza como armas biológicasa Categoría A Agentes de la más alta prioridad que suponen un riesgo para la seguridad nacional. Se propagan o transmiten con facilidad y dan lugar a una tasa de mortalidad alta. Requieren una acción especial de alerta de salud pública. Enfermedad/patógeno Carbunco (Bacillus anthracis) Botulismo (toxina de Clostridium botulinum) Peste (Yersinia pestis) Viruela (Variola major) Tularemia (Francisella tularensis) Fiebres hemorrágicas víricas (filovirus [p. ej., Ébola, Marburg] y arenavirus [p. ej., Lassa, Machupo]) Categoría B Agentes de segunda prioridad más alta. Estos agentes son moderadamente fáciles de diseminar, dan lugar a una morbilidad moderada y a una mortalidad baja, y requieren mejoras específicas de la capacidad diagnóstica de la salud pública y de la vigilancia de enfermedades. Enfermedad/patógeno Brucelosis (especies de Brucella) Toxina épsilon de Clostridium perfringens Amenazas de seguridad alimentaria (p. ej., Salmonella spp., Escherichia coli O157:H7, Shigella) Muermo (Burkholderia mallei) Melioidosis (Burkholderia pseudomallei) Psitacosis (Chlamydophila psittaci) Fiebre Q (Coxiella burnetii) Toxina de ricino de Ricinus communis (semillas de ricino) Enterotoxina B estafilocócica (Staphylococcus aureus) Fiebre tifoidea (Rickettsia prowazekii) Encefalitis vírica (alfavirus como los de la encefalitis equina de Venezuela, la encefalitis equina oriental, la encefalitis equina occidental) Amenazas de seguridad del agua (Vibrio cholerae, Cryptosporidium parvum y otros) Categoría C Los agentes de tercera prioridad más alta son patógenos emergentes que están disponibles, se producen y se diseminan con facilidad, y tienen una gran capacidad de provocar morbilidad y mortalidad altas. Patógenos Enfermedades infecciosas emergentes, como el hantavirus aFuente: Centros para el Control y la Prevención de las Enfermedades, Atlanta (Georgia, Estados Unidos). https://booksmedicos.org booksmedicos.org Botón1:
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