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496 Endocrinología de la reproducción, esterilidad y menopausia SECCIÓ N 2 en forma típica, tampoco tienen la porción superior de la vagina. Sin embargo, el útero muestra desarrollo normal (fi g. 18-15C). Además de la agenesia, Rock (2010) ha descrito varias formas de disgenesia cervical. Las mujeres con agenesia cervical tienen como cuadro inicial, a semejanza de otras con anomalías obstructivas del aparato repro- ductor, amenorrea primaria y dolor abdominal o pélvico cíclico. Si se detecta endometrio funcional la mujer puede mostrar distensión del útero y es posible que haya surgido ya endometriosis como consecuencia del fl ujo menstrual retrógrado. La norma es detectar un solo fondo uterino en la línea media aunque se han descrito hemiúteros bilaterales (Dillon, 1979). Los estudios radiográfi cos como la ecografía y la MR son úti- les para valorar la anatomía. Si por estudios imagenológicos se demuestra la obstrucción del útero, algunos autores han recomen- dado la histerectomía (Rock, 1984). A diferencia de ello, Niver et al. (1980) señalan haber creado un conducto endocervical epitelia- lizado y vagina. A pesar de ello, se han señalado con el estableci- miento de la conexión vaginouterina, complicaciones importantes que incluyen infección, obstrucción repetitiva que obliga a his- terectomía y muerte por septicemia (Casey, 1997; Rock, 2010). Como otra posibilidad, cabe recurrir a medidas conservadoras a base de antagonistas o agonistas de GnRH o anticonceptivos ora- les combinados, para así suprimir la menstruación retrógrada y la posible endometriosis hasta que la mujer esté apta para opciones reproductivas (Doyle, 2009). Por todo lo comentado, se puede retener al útero, ante la posibilidad de cumplir con la función reproductiva. Th ijssen et al. (1990) señalaron haber logrado emba- razos a término por medio de la transferencia del cigoto al interior de la trompa de Falopio en una mujer con agenesia cervical. El empleo de “madres de alquiler” para recoger el cigoto y el emba- razo es otra opción viable en estas mujeres. Agenesia de los conductos de Müller La ausencia congénita del útero y la vagina recibe los nombres de aplasia o agenesia de los conductos de Müller o síndrome de Mayer- Rokitansky-Kuster-Hauser (American College of Obstetricians and Gynecologists, 2006). En la agenesia clásica de este tipo las muje- res tienen una bolsa vaginal superfi cial que mide sólo 2.5 a 5 cm de profundidad. Además, no existen útero, cuello uterino y tercio superior de la vagina. De modo típico, se detecta un segmento de las trompas de Falopio en su porción distal. También se espera que existan ovarios normales porque tienen orígenes embrionarios separados. Muchas de las mujeres con agenesia de los conductos de Müller tienen sólo bulbos pequeños rudimentarios de tales estructuras, sin actividad endometrial. Sin embargo, en 2 a 7% de aquellos con dicho problema se desarrolla el endometrio activo y el cuadro inicial típico es de dolor abdominal cíclico (American College of Obstetricians and Gynecologists, 2002). Se necesita la extirpación quirúrgica de los bulbos rudimentarios sintomáticos. En el caso de la agenesia de los conductos de Müller es imposible la concepción tradicional, pero se puede lograr el embarazo por una combinación de recuperación de ovocitos, fecundación in vitro y empleo de “madres de alquiler” que se embaracen. Es esencial la valoración en búsqueda de otras anomalías del esqueleto o renales congénitas en mujeres con hipoplasia o agenesia de los conductos de Müller. En promedio, 15 a 36% de mujeres con agenesia uterina también tienen defectos del aparato urinario y 12%, escoliosis. En fecha reciente se describió un síndrome cono- cido como MURCS (aplasia de los conductos de Müller, aplasia 1999). Como consecuencia, en sustitución del segmento inferior de la vagina (que por lo común abarca una quinta parte o una tercera parte de la longitud total) se detectan 2 a 3 cm de tejido fi broso. Sin embargo, en algunas mujeres la atresia vaginal puede extenderse y llegar cerca del cuello uterino. Muchas de las mujeres afectadas tienen genitales externos nor- males y también lo son los órganos de las vías superiores de la reproducción, razón por la cual la atresia vaginal se detecta sólo después de la menarquia. En las adolescentes por lo común el cuadro inicial surge poco después de la menarquia fi siológica, con dolor pélvico cíclico, por el hematocolpos o el hematómetra. En la exploración física son normales las mamas, la distribución del vello púbico, el perineo y el anillo himenal, pero más allá de este último se detecta solamente una depresión o una pequeña bolsa vaginal. La exploración rectoabdominal confi rma la presencia de órganos en la línea media. Como aspecto adicional, en la ecografía o la MR se advierte que existen órganos del aparato reproductor en su zona superior; de ellos, la MR es el método diagnóstico más preciso, porque con este estudio se identifi ca la longitud de la atresia, la magnitud de la dilatación vaginal en su zona superior y la presencia o ausencia de cuello uterino. Identifi car el cuello uterino en tales casos permite diferenciar entre la atresia vaginal y la agenesia de los conductos de Müller. Sin embargo, suele ser necesaria la lapa- roscopia cuando es imposible valorar del todo la anatomía, por el empleo de estudios radiográfi cos. El tratamiento es similar al que se hace en la agenesia de los conductos de Müller. Agenesia cervical Dado que el útero y la vagina provienen de los conductos de Müller, las mujeres con ausencia congénita del cuello uterino, CUADRO 18-3. Clasificación de anomalías de los conductos de Müller I. Hipoplasia o agenesia segmentaria de los conductos de Müller a. Vaginal b. Cervical c. Uterina d. Tubaria e. Combinada II. Útero unicorne a. Cuerno rudimentario con cavidad que comunica al útero unicorne b. Cuerno rudimentario con cavidad que no comunica con el útero unicorne c. Cuerno rudimentario sin cavidad d. Útero unicorne sin cuerno rudimentario III. Útero didelfo IV. Útero bicorne a. Bifurcación completa (bicollis) b. Bifurcación parcial (unicollis) V. Útero tabicado a. Tabicación completa b. Tabicación parcial VI. Útero arqueado VII. Anomalías por administración de dietilestilbestrol (madre) Con autorización de la American Fertility Society, 1988. 18_Chapter_18_Hoffman_4R.indd 49618_Chapter_18_Hoffman_4R.indd 496 06/09/13 21:1406/09/13 21:14
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